Camiño de navegación

h1810-9

Hace 200 años. Diario de las Cortes de Cádiz

30 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones

La sesión del domingo día 30 es secreta y da comienzo a las diez de la mañana.

En primer lugar se informa sobre el complot contra las Cortes. Al parecer, los comisionados para estudiar este asunto, Andrés Morales de los Ríos, Valcárcel y Benito Ramón Hermida no ofrecen ninguna información e incluso quieren abandonar tal encargo. Las Cortes nombran una nueva comisión para que averigüe con el mayor sigilo. Los nuevos comisionados son Antonio Oliveros, Ramón Power y Pedro María Ric.

A las doce de la mañana llega el duque de Orleans a caballo y con uniforme de capitán general. Se presenta a la entrada del Salón de Cortes. Los diputados discuten en el interior de las Cortes la oportunidad de que un príncipe extranjero sea recibido por ellas. Tras una hora de espera, sale al pórtico del teatro una delegación de diputados formada por Francisco de Borja Álvarez de Toledo y Osorio, marqués de Villafranca; Evaristo Pérez de Castro y Manuel Mateo Luján a informar al duque de que no se le permite el acceso, ya que las Cortes habían acordado anteriormente su salida de España.

El duque de Orleans había llegado a Cádiz en una fragata el 20 de junio de 1810, llamado por el Consejo de Regencia, pero al parecer no se ganó su confianza para dirigir ningún mando del ejército. A los pocos días parte para Sicilia, donde vivían sus parientes y residía la corte del Rey de Nápoles.

El 30 de septiembre de 1810, aun siendo domingo, las Cortes se reunieron en sesión secreta.

Durante toda esta primera legislatura las sesiones fueron diarias. Los diputados estaban desplazados de sus lugares de origen y muchos se quejaban de falta de comodidades. Algunos acudieron solos, otros con familia, otros con sirvientes.

Andrés Morales de los Ríos pidió ser exonerado de dicha comisión (complot contra las Cortes) alegando, aunque sin mencionar ningún nombre, que era amigo de la persona a quien se le atribuía el principio del complot.

Para contribuir  a la ceremonia de la confusión, un diputado denunció que durante la noche desde algunas casas de la Isla de León se hacían señas a las líneas enemigas francesas.

Arriba

29 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones

Fachada del teatro de San Fernando (Cádiz) donde se celebraron las primeras sesiones de las Cortes en 1810.

Fachada del teatro de San Fernando (Cádiz)
donde se celebraron las primeras sesiones
de las Cortes en 1810.

Abierta la sesión del sábado día 29, se presentan a prestar juramento ante las Cortes los cuatro jefes militares de Palacio: el capitán de guardias de Corps, el capitán de Alabarderos, el coronel de Reales Guardias Españolas y el teniente coronel de Reales Guardias Walonas. Tras un breve discurso, el presidente de las Cortes les contesta de la forma habitual.

El diputado Antonio Capmany presenta una proposición sobre las incompatibilidades de los diputados, que en términos de la época se conocían como el testimonio de desinterés que debían profesar los diputados.

Entre la propuesta que se lee y consta en diario de Cortes y la publicada en El Conciso existen muchas diferencias. No se sabe si las alteraciones fueron de Capmany o de los diputados que arreglaron los extractos de las sesiones.

Interviene  Gutiérrez de la Huerta, diputado por Burgos, y da origen a un debate prolijo. Se vota nominalmente diciendo cada diputado si o no en voz alta, y escribiendo su nombre los señores secretarios. Verificada la votación, 51 a favor y 41 en contra, se resuelve que la incompatibilidad se extienda a un año después de la diputación.                    

El texto de la resolución es el siguiente: Ningún diputado en Cortes, así de los que al presente componen este Cuerpo como de los que en adelante hayan de completar su número, pueda, durante el tiempo de su ejercicio, solicitar ni admitir para sí, ni solicitar para otra persona alguna, empleo, pensión, gracia, merced ni condecoración de la Potestad ejecutiva…

Al final se discute si se debe penalizar a los transgresores, pero esta disposición no se aprueba.

El presidente levanta la sesión a las tres de la tarde y convoca a los diputados a una sesión secreta el día siguiente.
 

Los jefes de la Guardia Real que prestaron juramento ante las Cortes fueron: Pedro Alcántara y Álvarez de Toledo, XIII Duque del Infantado, coronel de Reales Guardias Españolas; Francisco Fernández de Córdoba, conde de Castelflorido, capitán de Guardias de Corps de cuartel; Ramón Rufino Patiño Osorio, marqués de Castelar, capitán del Real Cuerpo de Alabarderos; y Manuel Crevenkel, teniente coronel de las Reales Guardias Walonas. El duque del Infantado leyó el discurso de felicitación a las Cortes. Luego juraron de dos en dos arrodillados sobre un almohadón.

Al parecer la sesión fue tensa en cuanto a la proposición sobre testimonio de desinterés y El Conciso recoge el ánimo airado de Hermida: …que todo aquello era nulo, que era un atropellamiento y un proceder tumultuario. Al oír unas palabras tan intempestivas…todos los circunstantes se miraron unos a otros…

Arriba

28 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones
Diario de Sesiones Sesión Secreta

San Fernando. Salón de Cortes habilitado en el Teatro Cómico. Museo Lázaro Galdiano, Madrid. Autor: Juan Gálvez

San Fernando. Salón de Cortes habilitado en el Teatro Cómico.
Museo Lázaro Galdiano, Madrid. Autor: Juan Gálvez.

Las Cortes se reúnen en sesión pública y en sesión secreta. Como era habitual, en primer lugar se da noticia de la llegada de un nuevo diputado Mariano Blas Garoz y Peñalver por La Mancha.

A continuación, se lee la memoria presentada por el teniente coronel de artillería Joaquín de Osma sobre la forma de proporcionar más medios al ejército. Se decide nombrar una comisión para estudiar estos asuntos.

El diputado Juan María Herrera solicita sesión secreta por el tema delicado que trae entre manos. Se levanta la sesión pública y comienza la sesión secreta. Presenta una proposición para que se cambien los miembros de la Regencia, pues los actuales Regentes no habían correspondido a la expectación nacional: ¿Ha lugar por ahora mudar las personas que componen la Regencia, o no? Sometida a votación: Se votó que no ha lugar.

En la misma sesión, el diputado Antonio Capmany muestra su preocupación por la presencia del duque de Orleans en Cádiz. Se aprueba el correspondiente oficio al ministerio de Estado para que la Regencia le haga salir de los dominios de España.

Por último, llegan noticias de una conspiración contra las Cortes. El presidente nombra una comisión de tres diputados para examinar el caso con reserva: Hermida, Morales de los Ríos y Valcárcel.

Se levanta la sesión a las seis de la tarde.

Según El Conciso del 2 de octubre, en relación con la proposición sobre mejoras para el ejército decía  …que clamaba por pronto remedio los males de nuestros ejércitos y el hambre y desnudez de nuestros soldados…

Se discute sobre qué sesiones deben ser públicas o secretas y en qué orden han de celebrarse. El diputado Quintano propone comenzar por las secretas y abrir luego las puertas para el acceso del público.
 
La noche del 5 de octubre se comunica a la Cortes que se ha hecho a la vela, rumbo a Sicilia, la fragata Esmeralda con el duque de Orleans a bordo.

Arriba

27 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones

Muñoz Torrero

Muñoz Torrero

La sesión del día 27 fue una sesión corta, ya que los diputados habían estado reunidos el día anterior hasta altas horas de la madrugada. Empieza a las cuatro de la tarde y finaliza a las ocho y media.

El secretario informa sobre la ilegitimidad de ciertos poderes sobre los que se acuerda que se remitan a la comisión correspondiente. Se decide también que los secretarios como norma general no contesten por escrito a los oficios de los particulares.

Los jefes militares de Palacio manifiestan su deseo de venir a las Cortes para presentar sus homenajes y juramento de fidelidad. A propuesta del diputado y marino Ramón Power, se acuerda los jefes de la Marina vengan también a cumplimentar a las Cortes.

Una diputación del Ayuntamiento de Cádiz se presentó ante la barandilla del salón de Cortes para felicitar a las mismas; el Presidente Ramón Lázaro de Dou contestó a su saludo.

El diputado Pedro Antonio Aguirre, que lo era por Cádiz, informa sobre el cierre del puerto para evitar que se envíen a América noticias particulares sobre la instalación de las Cortes antes de que partiesen las de oficio.

El diputado por Palencia Juan Quintano propone que todos los cuerpos no privilegiados del ejército hagan una sola vez la guardia a las Cortes, propuesta rechazada ya que está establecido que la guardia la realicen las tropas de la Guardia Real.

El asunto mas relevante de esta sesión lo protagoniza el diputado americano Jose María Mejía Lequerica al mostrar su preocupación por el que sería uno de los decretos mas importantes de estas primeras Cortes, el de la libertad de imprenta. Tan solo tres días habían pasado de la instalación de las Cortes cuando se plantea este asunto.

En primer lugar interviene Mejía Lequerica para manifestar que las Cortes debían admitir todos los escritos recibidos mientras no se estableciese el decreto. A continuación interviene Agustín Argüelles para poner de relieve la libertad y los limites que deberían fijarse. Intervienen además los diputados Pérez de Castro, Zorraquín y Muñoz Torrero. Finalmente, se decide el nombramiento de una comisión para el estudio de la libertad política de la imprenta.

El presidente Luis del Monte firma, el 10 de noviembre de 1810, el decreto de libertad política de la imprenta, todavía en la Real Isla de León.

En la Gazeta de la Regencia de España e Indias del jueves 27 de septiembre de 1810, número 74, se publica el Acta de constitución de las Cortes por orden de Nicolás María de Sierra, Secretario de Estado y del despacho universal de Gracia y Justicia, interino de Hacienda y Marina y notario mayor de los reynos.

El artículo 1 del proyecto de decreto de libertad de imprenta se aprueba el 19 de octubre de 1810.

Los debates no fueron recogidos por taquígrafos. La información detallada era publicada en los distintos periódicos que reflejaban las dos tendencias dominantes de la época: liberales y serviles.

El Conciso recoge la intervención completa de Diego Muñoz Torrero sobre la defensa de la libertad de imprenta, que no se reproduce en el Diario de Cortes.

En esta sesión se fija el ceremonial para el recibimiento de comisiones en las Cortes como consecuencia de la visita de la delegación del Ayuntamiento de Cádiz.

La comisión de estudio de proyecto de decreto de libertad de imprenta estaba compuesta por los diputados Hermida, Oliveros, Muñoz Torrero, Argüelles, Pérez de Castro, Vega, Capmany, Couto, Gallego, Montes y Palacios.

Arriba

26 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones
Diario de Sesiones Sesión Secreta

Imagen San Fernando. Salón de Cortes habilitado en el Teatro Cómico.

Imagen San Fernando. Salón de Cortes habilitado en el Teatro Cómico.

La sesión del miércoles 26 de septiembre se inicia con el juramento de dos nuevos diputados, José Aznares, suplente por el Reino de Aragón, y Manuel Antonio García Herreros, suplente por Soria.

A continuación se procede a dar lectura a una Memoria enviada por el Consejo de Regencia sobre las facultades del Poder ejecutivo. Se designa a los diputados Muñoz Torrero, Hermida y García de la Huerta para que preparen una respuesta a la misma.

A las nueve de la noche de este mismo día se presentan las propuestas de estos diputados y se produce una acalorada discusión que se prolonga hasta las cuatro y media de la madrugada del día 27. Se aprueba la del diputado extremeño Muñoz Torrero. Según la expresión del Diario de Cortes …rodó sobre ella la discusión, que fue muy extensa.  El presidente Ramón Lázaro de Dou firma el 27 de septiembre de 1810 este decreto sobre los límites a las facultades de la Regencia.

 

En la sesión secreta del propio día 26 se sigue discutiendo la renuncia del Obispo de Orense. Se produce un largo debate entre Oliveros y Argüelles. Al final se accede a la misma en estos términos: ¿Se admite la renuncia que hace el sr. Obispo de Orense de la dignidad de miembro de la Regencia, en atención a su avanzada edad y achaques que alega? Se votó que se aprobaba esta cláusula…

En esta sesión se acuerdan las siguientes normas provisionales hasta que sea aprobado el Reglamento:
Que se niegue la entrada a las mujeres.
Que no se admita el público sino en las galerías.
Que en las galerías se admitan los hombres sin distinción alguna.
Que el uso de la primera división de la galería baja, a la derecha del dosel, quede a la disposición del Cuerpo diplomático extranjero con las personas de distinción que él traiga.

El Conciso del día 29 publicó detalles de esta sesión que no se recogen en el Diario de Cortes en relación con la consulta de la Regencia sobre las facultades del Poder ejecutivo. Narra cada una de las intervenciones de Gutiérrez de la Huerta, Hermida y Muñoz Torrero. Huerta insistía en la urgente necesidad de poner estas limitaciones, que agradarían al pueblo tras años de despotismo e injusticia. Zorraquín apoyaba el proyecto de Huerta con energía, pero sin acaloramiento.

Arriba

25 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones

Diario de Sesiones. Sesión secreta

En la Gazeta de la Regencia de España e Indias del martes 25 de septiembre de 1810, se da noticia de lo acontecido en Cádiz el 24 de septiembre. Hoy por la mañana en la Real Isla de León se ha dado principio a la celebración de las cortes extraordinarias de todos los reynos y dominios de España. La salva general de los buques de guerra de la bahia y de los baluartes de la plaza ha solemnizado este plausible acontecimiento, que promete las mas felices consecuencias para la victoria de la causa de la nacion y sólido establecimiento de su independencia y prosperidad.

Abierta la sesión del día 25, a las 10 horas de la mañana, se procedió a la elección de un vicepresidente y de un secretario. Ramón Power Giralt, de la Capitanía General de Puerto Rico, fue elegido como vicepresidente por una mayoría absoluta de 63 votos y Manuel Luján Ruiz, diputado por Extremadura, como secretario, también por mayoría absoluta de 68 votos.


Retrato de Ramón Lázaro de Dou y Bassols. Galería de retratos de Presidentes; 2ª planta de Palacio. ORONOZRetrato de Ramón Lázaro de Dou y Bassols.
Galería de retratos de Presidentes; 2ª planta de Palacio.
ORONOZ

A continuación se discutió sobre el tratamiento que debían recibir las Cortes, el Poder ejecutivo y los Tribunales Supremos. Magestad y Alteza fueron los dos términos aprobados, el primero para las Cortes y el segundo para el resto.

También se debatió la formula de publicación de los decretos de Cortes y, como estaba pendiente la publicación del decreto de instalación de las Cortes, se procedió a nombrar una comisión para su estudio, ya que los diputados de América reflejaron su preocupación porque estas noticias llegasen oportunamente a sus lugares de procedencia.

Asimismo se nombró una comisión para examinar la legitimidad de los diputados que fueran llegando a las Cortes.

Se anunció la visita de una delegación de la Junta superior de Cádiz para cumplimentar a las Cortes. Tomas Istúriz fue el encargado de pronunciar unas breves palabras.

Pronto las Cortes vieron la necesidad de formar un reglamento de policía y gobierno interior de las mismas. Para ello se eligió a cinco diputados entre los que figuraba Agustín Argüelles.

Esta sesión se levanta y se convoca de nuevo para el mismo día a las 19 horas.

Se vuelve a insistir en que se pongan todos los medios para que los diputados que faltan puedan acudir a la Isla. En el Archivo del Congreso se conservan distintas peticiones, entre ellas, la de los diputados residentes en Cartagena que solicitan buques de transporte para poder acudir por mar a la bahía de Cádiz.

Los diputados americanos muestran la necesidad, justicia y conveniencia de acompañar el decreto de instalación con declaraciones sobre su igualdad de derechos con los españoles europeos.

Este día, el presidente Ramón Lázaro de Dou firma el decreto para que se cante en todos los dominios de S.M. un solemne Te Deum en acción de gracias.

El propio día 25 al recibirse un pliego de la Regencia, los diputados se vieron en la necesidad de reunirse en sesión secreta, dada la naturaleza del documento. El asunto trataba sobre la solicitud de renuncia a su cargo del Presidente del Consejo de Regencia, Pedro de Quevedo y Quintano, Obispo de Orense, que como se recordará no había asistido el día anterior al juramento ante las Cortes, argumentando motivos de salud y su avanzada edad.

De nuevo Argüelles indica que esta ausencia se tradujo luego en decidida negativa a efectuar ese juramento. Esto provocó que se formara una causa cuyo expediente se conserva en el Archivo de la Cámara y en el Archivo Histórico Nacional.

Al final de la sesión se aprobó que los diputados habían de jurar guardar secreto cuando así lo indicasen las Cortes.

Finaliza esta sesión con una declaración del Obispo de Orense que refleja las tensiones de la época entre Cortes y Regencia.

Si se pretendiera que la Soberanía está absolutamente en la Nacion: que ella es Soberana de su mismo Soberano: o que el estado y sucesión de la Monarquía depende de la voluntad general de la Nación, a quien todo debe ceder: esto ni lo reconoce ni lo reconocerá jamás el obispo de Orense.

El 25 de septiembre de 1810 se reúnen por primera vez las Cortes en sesión secreta para tratar sobre la renuncia del Obispo de Orense.

De todos los diputados que se van incorporando a las Cortes de Cádiz se conserva en el Archivo del Congreso la documentación electoral correspondiente.

Ramón Power Giralt fue el único diputado de Ultramar que asistió como propietario desde la primera sesión.

Arriba

24 de septiembre de 1810

Diario de Sesiones

Amaneció por fin el 24 de septiembre tan deseado de los buenos, que veían enlazada por decirlo así, la época del día con la era feliz en que la nación acostumbraba a reunirse para deliberar sobre sus grandes intereses...

Así recordaba años más tarde desde su exilio en Londres el político asturiano Agustín Argüelles esta primera sesión.

A las 9 de la mañana se reúnen en la Real Isla de León los 102 diputados que habían podido llegar pese a las dificultadas de la guerra y de los viajes. Algunos lo hacían como propietarios de las provincias libres del enemigo y otros como suplentes. En primer lugar se nombra una comisión de cinco diputados para examinar los poderes del resto de ellos, a continuación se dirigen a la Iglesia parroquial de San Pedro para asistir a una misa del Espíritu Santo, celebrada por don Luis María de Borbón y Vallábriga, arzobispo de Toledo y cardenal de Santa María Della Scala, seguida del himno de Veni Sancti Spiritus y de un Te Deum.

Impresiona el acto de juramento que tiene lugar después del evangelio. Tras unas palabras del Presidente de la Regencia, Pedro Quevedo, Obispo de Orense, el secretario de Estado y del despacho de Gracia y Justicia formula las cuatro preguntas del juramento:

     - ¿Juráis la santa religión católica, apostólica, romana sin admitir otra alguna en estos Reinos?
     - ¿Juráis conservar en su integridad la Nación española, y no omitir medio alguno para libertarla de sus injustos opresores?
     - ¿Juráis conservar a nuestro amado Soberano el sr. D. Fernando VII todos sus dominios, y en su defecto a sus legítimos sucesores, y hacer cuantos esfuerzos sean posibles para sacarlo del cautiverio y colocarlo en el Trono?
     - ¿Juráis desempeñar fiel y legalmente el encargo que la Nación ha puesto a vuestro cuidado, guardando las leyes de España, sin perjuicio de alterar, moderar y variar aquellas que exigiese el bien de la Nación?

Los diputados avanzan de dos en dos y colocan su mano derecha sobre los Evangelios, respondiendo “Sí juramos”. En estas cuatro preguntas están sobreentendidas las claves de los orígenes de nuestro constitucionalismo.

Finalizados los actos religiosos se dirigen a la sala de las Cortes. De esta primera sede del Teatro Cómico de la Isla de León (Cádiz), luego llamado de San Fernando, tenemos abundante información sobre su disposición y arreglos, así como de la colocación de los asistentes, ya que fue una sesión pública y los periódicos de la época y posteriormente muchos escritores reflejaron el ambiente de júbilo que se respiraba aquel día.

El Juramento de los primeros diputados a Cortes en 1810 en la Iglesia de San Pedro y San Pablo en San Fernando, Cádiz.  Casado del Alisal. José María. Archivo del Congreso de los Diputados.

El Juramento de los primeros diputados a Cortes
en 1810 en la Iglesia de San Pedro y San Pablo en San Fernando, Cádiz. 
Casado del Alisal. José María. Archivo del Congreso de los Diputados.

Primero interviene con un breve discurso el presidente del Consejo de Regencia. A continuación quedan solas las Cortes: De este modo quedaron estas solas, abandonadas a sí mismas, sin dirección, reglamento ni guía alguna...Un simple recado de escribir con pocos cuadernillos de papel sobre una mesa..., escribe Argüelles.

Se procede a elegir al presidente y al secretario. Ramón Lázaro de Dou y de Bassols, diputado por el Principado de Cataluña, es elegido como presidente, en segunda votación, por 50 votos frente a Benito Hermida Maldonado, diputado por el reino de Galicia que obtuvo 45. Como secretario fue elegido Evaristo Pérez de Castro y Brito, diputado por Valladolid. El secretario procede a la lectura de la memoria que han dejado los Regentes antes de abandonar el salón de Cortes, dándose estas por enteradas.

El diputado extremeño Diego Muñoz Torrero es el primer interviniente de estas Cortes generales y extraordinarias: ...Señores oyentes, o lectores estas orejas mías oyeron el primer discurso que se pronunció en asambleas españolas en el siglo XIX... las palabras se destacaban sobre un silencio riguroso... la atención era profunda y jamás voz alguna fue oída con mas respeto…, así rememora Pérez Galdós en sus Episodios Nacionales la sesión.

El secretario lee la minuta del primer decreto de estas Cortes, once artículos que fijan las normas para suinstalación. Avanzada la tarde se decide que acuda la Regencia a prestar juramento a las Cortes; pasada la medianoche llegan cuatro miembros de la misma, pero su presidente, el obispo de Orense, se excusa por lo avanzado de la hora y por problemas de salud. Se establece el ceremonial para el juramento. El presidente Dou convoca la próxima sesión para las diez de la mañana del mismo día 25.

A la primera sesión asisten 102 diputados, de algunos lugares como el Reino de Valencia ninguno. Se insiste en que se facilite el viaje de los que faltan proporcionando barcos si fuera necesario.

El juramento de los diputados se producía hincando las rodillas ante los Evangelios. De este acto se conserva en el salón de sesiones del Congreso de los Diputados un cuadro pintado por José Casado del Alisal en 1863.

El lugar de la Real Isla de León y el acondicionamiento del teatro para salón de cortes es materia para el estudio de las diferentes sedes parlamentarias hasta su instalación definitiva: Teatro Cómico de la Real Isla de León, Oratorio de San Felipe Neri en Cádiz, Convento de Carmelitas descalzos en la Real Isla de León, Teatro de los Caños del Peral en Madrid, Convento de Agustinos calzados de Doña María de Aragón en Madrid, Iglesia de San Hermenegildo en Sevilla, Iglesia de San Felipe Neri en Cádiz, Convento del Espíritu Santo en Madrid, Teatro de los Caños del Peral o Teatro de Oriente en Madrid, Congreso de los Diputados en Madrid, sede actual.

Algunos datos del Salón de Cortes de la Real Isla de León: forma elíptica longitudinal truncada; Antonio Prat, ingeniero de marina, fue el encargado de acondicionar el Teatro; 20.000 reales se gastan en el acondicionamiento; medidas del salón: 26 por 14 varas. (22 por 12 m).

En el escenario se colocó un retrato del rey y una medalla alegórica de 4 varas de diámetro con símbolos de España en bajorrelieve. En el patio de butacas había 2 tribunas de arengas, 2 hileras de asientos para los diputados y una barandilla corrida, “barra” que separaba esta zona de la reservada al público. En los palcos se acomodó a las autoridades y al público.

Arriba

ARCHIVO

1811
1810
Constitución de 1812. Cronología y documentos