CORTES GENERALES
DIARIO DE SESIONES DEL
CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
COMISIONES
Año 1994 V Legislatura Núm. 152
INDUSTRIA, ENERGIA Y TURISMO
PRESIDENTE: DON JOAQUIM MOLINS I AMAT
Sesión núm. 14
celebrada el miércoles, 23 de marzo de 1994



ORDEN DEL DIA:
Comparecencia del señor Ministro de Comercio y Turismo (Gómez-Navarro
Navarrete), para informar:
--Sobre la evolución del sector turístico durante el año 1993. A
solicitud del Grupo Parlamentario Popular. (Número de expediente
213/000165) (Página 4858)
--Sobre los datos referentes al año turístico de 1993 y sobre las
previsiones del Gobierno para el presente ejercicio de 1994. A solicitud
del Grupo Parlamentario Catalán, Convergència y Unió. (Número de
expediente 213/000209) (Página 4858)

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Se abre la sesión a las nueve y treinta y cinco minutos de la mañana.




COMPARECENCIA DEL SEÑOR MINISTRO DE COMERCIO Y TURISMO (GOMEZ-NAVARRO
NAVARRETE) PARA INFORMAR:



--SOBRE LA EVOLUCION DEL SECTOR TURISTICO DURANTE EL AÑO 1993. A
SOLICITUD DEL GRUPO PARLAMENTARIO POPULAR EN EL CONGRESO. (Número de
expediente 213/000165.)



--SOBRE LOS DATOS REFERENTES AL AÑO TURISTICO DE 1993 Y SOBRE LAS
PREVISIONES DEL GRUPO PARLAMENTARIO CATALAN (CONVERGENCIA I UNIO).

(Número de expediente 213/000209.)



El señor PRESIDENTE: Vamos a iniciar los trabajos de esta Comisión de
Industria, Energía y Turismo convocada para celebrar la comparecencia del
señor Ministro de Comercio y Turismo, don Javier Gómez-Navarro Navarrete,
a solicitud del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, para informar
sobre la evolución del sector turístico durante el año 1993, así como del
Grupo Parlamentario Catalán (Convergència i Unió), para informar sobre
los datos referentes al año turístico de 1993 y sobre las previsiones del
Gobierno para el presente ejercicio de 1994.

En nombre de la Comisión, doy la bienvenida al señor Ministro,
agradeciéndole su presencia en la misma, y paso a darle la palabra.




El señor MINISTRO DE COMERCIO Y TURISMO (Gómez-Navarro Navarrete): Muchas
gracias.

El año 1993 ha sido un buen año turístico. Hemos recibido 57,3 millones
de visitantes, con un crecimiento del 3,5 por ciento sobre el año
anterior. Según las encuestas, el 71 por ciento de esos visitantes son
turistas (se considera turista a aquel que ha dormido por lo menos una
noche en España) y el resto son visitantes transfronterizos,
fundamentalmente personas que cruzan el país, siendo la mayor parte de
los no turistas franceses, portugueses y marroquíes. Hemos recibido, por
tanto, 40,6 millones de turistas, cuya distribución porcentual por países
es la siguiente: el 19 por ciento alemanes, el 18,7 por ciento
británicos, el 16 por ciento franceses, el 8,4 por ciento italianos, el
5,6 por ciento portugueses, el 5,2 por ciento holandeses, el 4,5 por
ciento belgas, y ya los demás en mucha menor medida, el 1,8 por ciento
norteamericanos y el 0,2 por ciento japoneses; del resto del mundo el
20,6 por ciento. Esto quiere decir que hemos recibido un 80 por ciento de
turistas provenientes de la Comunidad Europea, siendo nuestros tres
grandes mercados Alemania, Reino Unido y Francia.

Los mercados alemán y británico han sido muy buenos durante el año 1993,
con crecimientos del 12 por ciento con respecto a Alemania y del 15 por
ciento respecto del Reino Unido. Hemos tenido mercados crecientes en toda
Europa, excepto en Holanda, ha habido también un crecimiento importante
del mercado japonés, con un incremento del orden del ocho por ciento y
durante algunos meses punta, como el mes de julio, de un 24 por ciento,
habiendo resultado mal el mercado americano en su conjunto. El mercado de
América en conjunto ha bajado un 6,1 por ciento, siendo Canadá el país
que más ha bajado, con un 10 por ciento, mientras que Estados Unidos lo
ha hecho en un 5,1 por ciento.

La estancia de los turistas en España se sitúa entre los ocho y 14 días,
siendo la estancia media de 12,7 días, con una variación muy importante
según los países de procedencia. La estancia media más larga,
evidentemente, es la de los japoneses, que pasan 28,4 días en España,
seguido de los alemanes que pasan 15,4 días, y en cuanto al resto de
países que he citado, que son aquellos que merecen una cierta
consideración individual, la más corta es la de los portugueses, que
pasan 4,8 días.

El 50 por ciento entran por carretera y el 45 por ciento por avión.

Evidentemente, casi todos los británicos entran por avión, así como una
parte muy importante de alemanes, en tanto que los franceses y
portugueses, en su gran mayoría, entran por carretera.

Los lugares más visitados son las costas, el 71 por ciento de los
turistas viajan por vacaciones a las costas. Por lo tanto, se concentran
en un porcentaje muy alto en las cinco comunidades fundamentalmente
costeras, las cuatro mediterráneas y Canarias (es decir, en Cataluña, el
País Valenciano, Andalucía, Baleares y Canarias) con una diferencia muy
grande. Los franceses vienen fundamentalmente a la Península, mientras
que alemanes e ingleses van fundamentalmente a las islas.

En una distribución porcentual, que no suma cien, insisto, porque hay
personas que están en dos comunidades y por lo tanto la suma no es cien,
el 25,4 por ciento pasa por Cataluña o por lo menos está unos días allí;
el 17 por ciento en Baleares, el 14,3 en Andalucía, el 15,6 en la
Comunidad valenciana; el 13,6 en Canarias, que sí está exclusivamente en
Canarias, y de las comunidades no costeras, evidentemente la más
importante es Madrid con el 7,1 por ciento de los turistas.

Los alojamientos que se escogen, el 46 por ciento son hoteles y el 19 por
ciento apartamentos. Luego hay casas de familiares, que significan el
12,6 por ciento, y campings el 11.

El gasto medio por turista en su viaje por España, lo que gastan aquí con
independencia de lo que hayan pagado fuera, es de 68.000 pesetas y la
partida más importante es comida y bebida, a la cual se dedica más de un
40 por ciento del gasto.

Todos estos datos fundamentalmente proceden de las encuestas que realiza
la Secretaría General de Turismo a la salida de los turistas, para lo
cual se hacen más de cien mil encuestas al año. El grado de satisfacción
de los turistas extranjeros, entre satisfechos y muy satisfechos está el
97,6 por ciento de los turistas, lo cual es un índice espectacularmente
bueno y muy positivo para nuestro futuro y para nuestras perspectivas.

Los aspectos mejor valorados



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son el alojamiento y el trato y los peor valorados los problemas
medioambientales y la masificación.

Voy a referirme también al turismo realizado por los españoles, que creo
que es un elemento muy importante y sobre el cual también hemos hecho
unas encuestas de los viajes turísticos de los españoles. Los españoles
han hecho, a lo largo del año 1993, 91,8 millones de viajes, de los
cuales el 41,3 por ciento, por lo tanto aproximadamente 38 millones de
viajes, han sido de cuatro o más noches fuera de casa. El 55 por ciento
de la población española mayor de 16 años ha realizado al menos un viaje
de ocio al año. Se realizan en su gran mayoría en temporada de primavera
y verano. Las motivaciones son visitar a familiares el 34 por ciento;
ocio el 51 por ciento, trabajo el 9 por ciento, actividades deportivas el
2 por ciento, tratamientos de salud el 2 por ciento, motivos religiosos
el 2 por ciento. El medio de transporte más utilizado, el 67 por ciento
es el coche propio, seguido del autocar el 16 por ciento, y del avión el
7 por ciento.

Los lugares más visitados por españoles son, el 35 por ciento lugares de
playa y el 14 por ciento lugares de montaña.

De todas maneras, si a ustedes les interesa, el informe que tengo se lo
puedo enviar a la persona que desee. No es nada confidencial y estoy
encantado de enviárselo. Es fruto de un trabajo de investigación bastante
serio por parte de la Secretaría General y consideramos enormemente
positivo que todo el mundo conozca la distribución de nuestro turismo. Lo
digo porque no hace falta que tomen notas, porque yo se lo envío con
muchísimo gusto.

Los alojamientos utilizados, son el 44,1 por ciento casas familiares,
hoteles el 21,5 por ciento, pensiones el 4,2 por ciento, camping el 9 por
ciento, casa propia el 10,8 por ciento, casa alquilada el 6,3 por ciento.

Las comunidades de destino cambian radicalmente, porque la mayor parte de
los españoles no salen de la Península y, por lo tanto, caen en picado,
con respecto a los extranjeros, las estancias en Baleares y en Canarias.

Andalucía es el 17,7 por ciento, Cataluña el 13,2 por ciento, la
Comunidad valenciana el 11,1 por ciento, Madrid el 7,3 por ciento. Las
zonas de origen de los viajeros son Madrid el 24,8 por ciento, Cataluña
el 18,6 por ciento, Andalucía el 11,4 por ciento y la Comunidad
valenciana el 8,9.

El grado de satisfacción de los turistas españoles es del 95,7 por
ciento, es decir, algo más bajo que el de los extranjeros. También hay
una diferencia muy grande en los elementos de valoración. Con el
alojamiento está satisfecho el 93,6 por ciento, con la atención recibida
el 87,2 y el tema que menos valoran los españoles son los precios, que
sólo está satisfecho el 63 por ciento --en cualquier caso muy por encima
de la media--, y los españoles demostramos que tenemos bastante menos
sensibilidad medioambiental que los europeos, porque el 86 por ciento
está satisfecho con el medio ambiente y el 78,2 con la afluencia de la
gente, con la masificación.

En cuanto a la oferta turística del año 1993, en establecimientos
hoteleros, hoteles y hostales, hay 9.745 establecimientos hoteleros, con
536.000 habitaciones y con 1.012.000 plazas hoteleras. Por lo tanto, en
grandes cifras, tenemos un millón de plazas hoteleras.

Ha habido un deslizamiento hacia la desaparición de hoteles de gama baja,
es decir, la línea de los hostales, con poco número de habitaciones, y
los nuevos hoteles corresponden a hoteles de gama media-alta, de 3/4
estrellas, con un número de habitaciones muchísimo mayor. Hay 1.037
establecimientos de camping, con una capacidad de 600.000 plazas.

Los ingresos por turismo han sido en el año 1993, según el Banco de
España, dos billones 540.000 millones de pesetas y las salidas han sido
571.000 millones de pesetas. Por lo tanto, la balanza neta turística es
de un billón 968.000 millones de pesetas. Nosotros estimamos que estas
cifras están infravaloradas porque el sistema de cómputo del Banco de
España contabiliza los cambios que se han producido en España y las
transferencias interempresariales producidas por pagos entre empresas
extranjeras y españolas. No se contabiliza, por tanto, porque no hay
sistema de contabilización, el dinero que traen en pesetas los
extranjeros, es decir, el cambio que han efectuado en su país y estamos
seguros de que hay un porcentaje significativo del cobro de las empresas
que no se realiza en territorio español. Evidentemente, eso no es posible
demostrarlo ni saber cuál es la empresa que lo hace o no, pero sí sabemos
por los propios operadores extranjeros que se hacen pagos fuera. Por lo
tanto, los ingresos estimamos que serán, como mínimo, entre un 10 y un 20
por ciento más alto de lo que contabiliza el Banco de España. Eso
significa que los ingresos por turismo han crecido en el año 1993 un 12,1
por ciento, los pagos han crecido sólo un 1 por ciento y, por lo tanto,
la balanza neta ha crecido un 15,8 por ciento. Quiere decir que los
ingresos por turismo significan el 25,8 por ciento de las importaciones
españolas, el 37,9 por ciento de las exportaciones, que los ingresos por
turismo financian el 1,27 por ciento del déficit comercial, es decir, que
son superiores al déficit comercial, y que el saldo neto turístico
financia el 99,14 por ciento del déficit comercial. Por lo tanto, el
salto neto de la balanza turística es más o menos equivalente al déficit
comercial.

La balanza por cuenta corriente es deficitaria en cualquier caso porque
la balanza de servicios es fuertemente deficitaria, sobre todo por la
renta de las inversiones, extranjeras en España. Dentro de la balanza de
servicios, los ingresos por turismo significan el 66,2 por ciento y los
pagos por turismo significan sólo el 25 por ciento de los pagos por
servicios realizados.

¿Por qué creemos que ha sido un buen año turístico? Yo creo que hay tres
elementos fundamentales, y los voy a decir en el orden de prioridad en el
que creo que son: en primer lugar, la devaluación de la peseta. Creo que
la devaluación nos ha hecho más competitivos sobre todo en aquellos
mercados de países que no han devaluado, por tanto, en todo el área del
marco, Alemania, Bélgica, Holanda, Francia, es decir, el área no afectada
por la devaluación. Nos ha hecho más competitivos la devaluación de la
peseta, que fue un 23,2 por ciento, en consecuencia, hemos ganado un 23,2
por ciento de competitividad. En el área de la libra esterlina la
devaluación española sólo significó el



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13 por ciento, es un mercado muy sensible al precio y, por tanto, ha sido
un elemento muy importante.

El segundo elemento para haber sido un buen año ha sido que se ha
empezado a recoger ya en los años 1991 y 1992 la opinión de los turistas
de que ha existido una mejora significativa de los servicios. En esos
años ha habido una confluencia de la puesta en marcha e inauguración de
un conjunto de servicios públicos importantes, es decir, mejoras de
costas (en concreto, playas), carreteras, mejoras de aeropuertos y la
crisis de los años 89-90, que han sido los dos años que en esta década
bajó el número de visitantes a España, es decir, los años considerados
como críticos en el sector turístico. Sí quiero decir, para hablar de la
estabilidad del sector turístico, que en los años 1989, 1990, que fueron
años considerados muy malos, malísimos en el sector turístico, la baja de
turistas sólo fue del 4 por ciento entre los dos años. Por tanto, es un
descenso porcentualmente pequeñísimo. Lo que sí sucedió es que, al mismo
tiempo que bajaron los visitantes, al haber una mayor oferta que demanda
bajaron los precios y, por tanto, los problemas fueron más por las
condiciones en que se contrató y por los precios que por el número de
turistas que recibimos y, en consecuencia, eso indica que uno de los
problemas básicos, probablemente el mayor, que tenemos en nuestro país
son los sistemas de contratación y los sistemas de comercialización de
nuestro turismo. Por tanto, es donde tendríamos que hacer, conjuntamente
con los empresarios, que son los protagonistas del sector, un esfuerzo
mayor para intentar ir cambiando los sistemas de comercialización.

Como decía, el segundo elemento fue una mejora significativa en la
valoración de los turistas. Hay que tener en cuenta que la mejor
promoción, sin comparación, es el boca a boca. Es decir, ya te puedes
gastar los millones de dólares que quieras en campañas de publicidad que
es mucho más eficiente y mucho más eficaz que el cliente se vaya
satisfecho y hable bien del destino donde ha estado, vuelva contento y se
lo transmita a sus amigos y a sus conocidos. Eso es infinitamente más
importante que cualquier campaña. Por eso hay que valorar especialmente
el dato del 97,5 por ciento de satisfacción en nuestros visitantes,
porque es un elemento enormemente positivo para el futuro. Este fue el
segundo elemento.

El tercero fueron las situaciones de algunos países competidores. En
contra de lo que se dice, los países que nos afectan positivamente no son
ni Yugoslavia ni Egipto, porque Yugoslavia es un país muy bonito y tiene
una costa preciosa, la costa del norte, pero tiene muy pocas camas, tiene
muy poco equipamiento hotelero, porque tiene muy pocas playas al ser muy
rocoso y, por tanto, no incide de manera muy importante en el mercado.

Egipto tiene dos tipos de turismo: uno cultural, el señor que va a ver
las pirámides del Valle del Nilo va específicamente a eso, no es un
turista que, por substitución, vaya a las playas españolas, y a la zona
de playas de Egipto van fundamentalmente sauditas e iraníes, no son
playas destinadas al mercado europeo que es nuestro cliente fundamental.

Por tanto, el mercado egipcio no incide de forma significativa sobre el
nuestro. Los mercados que han incidido beneficiosamente para nosotros ha
sido el mercado turco, que es nuestro país competidor con mayor
potencial. Turquía tiene miles de kilómetros de playa, una playa muy
extensa y grandes atractivos culturales, todo el helenismo está en
Turquía prácticamente, tiene camas y es muy importante en el mercado
alemán. En consecuencia, en Turquía sí han tenido un efecto muy
importante los secuestros de los kurdos sobre turistas alemanes, han
tenido una caída del mercado de casi el 50 por ciento. Los asesinatos de
turistas en el Estado de La Florida, tanto sobre el mercado británico
como sobre el mercado alemán, también han tenido un efecto muy
importante, del cual se ha beneficiado fundamentalmente Canarias, que es
la principal oferta de turismo invernal española, porque los otros
mercados mediterráneos se han visto bastante poco afectados por la
imagen. Argelia no tiene turismo y Marruecos tiene pocas camas, pero ha
tenido muy buena ocupación, y Túnez ha tenido también una buena ocupación
y, por tanto, no se han visto afectados por la mala imagen de Argelia o
de Egipto. Por tanto, esa caída de los mercados, sobre todo del turco y
del Estado de La Florida han sido el tercer empujón que hemos recibido
para considerar éste como un buen año.

También hemos tenido un acontecimiento que hay que valorar positivamente
que es el Camino de Santiago, el Xacobeo, que ha generado un flujo
específico y especialmente en el Camino y que ha traído un número de
turistas bastante importante, difícil de valorar, pero bastante
considerable y que, por tanto, ha sido un efecto positivo.

Desde el punto de vista de la oferta hay que reflejar que en el año 1993
ha habido una reducción de categoría de los hoteles; veintidós hoteles
han pasado de cinco a cuatro estrellas por varios motivos: el primero,
evidentemente --lo digo en primer lugar porque creo que es el más
importante, pero no mucho más importante que los demás--, ha sido el IVA
diferenciado de los hoteles de cinco estrellas. Como ustedes saben muy
bien, los hoteles de cinco estrellas tienen un 15 por ciento de IVA
mientras que los de cuatro y demás tienen el 6 por ciento; en segundo
lugar, la política de restricción del gasto de las empresas, el cliente
de cinco estrellas en mayor medida es viajero de negocios y ha habido
muchísimas empresas que han dado instrucciones a sus ejecutivos que en
vez de viajar a un hotel de cinco estrellas, vayan a un hotel de cuatro
estrellas. A mí me han dicho hoteleros que su problema no era el IVA sino
que era fundamentalmente que las normas de las empresas al obligarles a
ir a un hotel de cuatro estrellas, con independencia del precio que ellos
ofreciesen en convenios con empresas, les daba lo mismo y, por tanto,
tenían que adaptarse a la nueva realidad.

Hay un tercer elemento importante: en los hoteles de costa es muy difícil
mantener un hotel de estas características de cinco estrellas, porque los
servicios son muy caros y los precios que se pueden cobrar en hoteles
vacacionales de costa es muy difícil que compensen con el coste de los
servicios. De hecho, los cuatro o cinco hoteles mejores de cinco
estrellas de España en costa, que prácticamente son de Marbella casi
todos, todos desde siempre están perdiendo dinero; «Puente Romano», «Los
Monteros», «Don Carlos», todos los grandes hoteles de Marbella de cinco



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estrellas pierden dinero; es decir, hay un precio de venta en el mercado
por encima del cual no pueden vender y con ese precio de venta, con los
niveles de estacionalidad de la ocupación que tienen, les resulta muy
difícil sacar rentabilidad a la calidad de servicio que tienen que dar en
un hotel de cinco estrellas. Por tanto, los hoteles de cinco estrellas
han tenido un problema específico.

No quiero dejar de decir que, evidentemente, todo esto se refiere
fundamentalmente al turismo de sol y playa, porque significa el 71 por
ciento de nuestro turismo y, por tanto, aunque los datos son globales,
son fundamentalmente aplicables al turismo de sol y playa, por lo tanto,
el turismo de sol y playa ha tenido un buen año. El turismo de ciudad ha
tenido un año muy difícil, porque el elemento fundamental del turismo de
ciudad es el viaje de negocios y, evidentemente, la caída de la actividad
económica se ha reflejado de forma muy directa en la ocupación de los
hoteles. Además, porque ha habido sobre todo cuatro ciudades donde en los
últimos años se hizo un esfuerzo importante en el crecimiento de la
oferta, y se ha producido un desequilibrio enorme entre la oferta y la
demanda. Las cuatro ciudades son: Barcelona y Sevilla, por los
acontecimientos del 92; Madrid, donde ha habido un crecimiento importante
de plazas hoteleras, y Granada, que era una ciudad histórica con un
déficit importante en plazas hoteleras y que ha tenido un crecimiento
enorme de la oferta que no se ha correspondido con la demanda. Esas
cuatro ciudades han vivido problemas especiales de ocupación al mismo
tiempo que una competencia brutal y una caída de precios muy importante
en sus alojamientos. Es verdad que los precios de partida eran
enloquecidos; es decir, de ninguna manera se podía pensar que se podían
mantener los precios que en el año 1992 había en Sevilla y en Barcelona,
del orden de los 600 dólares la habitación en un hotel de cinco
estrellas. Eso era una locura de tal calibre, que no se podía mantener.

Las habitaciones que valían 60.000 pesetas en el año 1992, han caído a
10.000 en el año 1993. Es una caída por debajo del 20 por ciento de su
precio. Los hoteleros tienen claro que tienen que recuperar precios, pero
que nunca llegarán ni a la mitad de lo que cobraban en el año 1992. La
rentabilidad del negocio está planteada en función de cómo hicieron los
cálculos de la inversión. Si hicieron los cálculos de la inversión con
tarifas del año 1992, probablemente no sean rentables nunca; si los han
hecho con unas tarifas razonables, lo que realmente el mercado permite,
será bastante más posible.

El otro sector turístico del que nunca se habla, que es el del turismo
emisor, del que se ocupan las agencias de viajes y las agencias
transportistas, que se considera casi que es un mal, porque saca dinero
fuera en vez de ingresarlo, ha tenido un mal año en 1993 y va a seguir
teniendo un mal año en 1994, porque, evidentemente, la devaluación lo
perjudica, es decir, han subido los precios, la crisis económica española
lo perjudica, y este año 1994 además le va a perjudicar el nivel de
ocupación de los destinos españoles. El español es el último que
contrata, el que contrata más tarde, y se va a encontrar con que en los
destinos como Baleares y Canarias no hay plazas y, por tanto, eso puede
significar una caída del turismo organizado para los españoles, del
turismo emisor. Por tanto, es un sector que está sufriendo una crisis
importante, que se refleja en los cambios del sector agencias de viaje y
en los problemas que están pasando ese tipo de empresas.

Un elemento importante a resaltar también, son todos los datos referentes
a la creciente internacionalización de las cadenas hoteleras españolas;
es decir, cada vez están más presentes en el mundo. Yo creo que los
hoteles españoles controlan ya del orden del 50 por ciento, por ejemplo,
de la hostelería en la República Dominicana. Están creciendo mucho en
Cuba, están haciendo inversiones en muchos países. La cadena Sol-Meliá
está ya implantada en más de 20 países. Tenemos, por tanto, ya pequeñas
--pequeñas es un decir-- multinacionales en el sector hotelero, que están
demostrando que las empresas españolas tienen una tecnología, sobre todo
en hoteles vacacionales, de primer nivel en el mundo. La cadena Barceló,
aparte de tener una importantísima presencia en la República Dominicana,
el último año ha abierto en Washington, en Nicaragua, en Costa Rica,
tanto en San José como en Playa Tambor; es decir, tiene una expansión
importantísima por todo el mundo. La cadena Sol-Meliá está orientándose,
aparte de al Caribe, al sureste asiático, es decir, está invirtiendo
mucho en Indonesia, en Malasia y, como elemento exótico, tiene previsto
abrir entre este año y el que viene un hotel en Vietnam de alto
«standing», lo cual demuestra el interés que Vietnam empieza a ofrecer
para los inversores y para el mundo de los negocios. Vietnam se ha
convertido en el segundo país del mundo exportador de textiles. El sector
textil se deslocaliza a tal velocidad en función del coste de la mano de
obra que en este momento el gran productor textil ya no es Corea, ni
Singapur, porque es muy caro, es China y Vietnam.

En cuanto a las perspectivas para el año 1994, yo creo que son muy
buenas, pero vuelvo a separar también esos tres sectores. Muy buenas en
sol y playa; es decir, el mercado británico va a seguir creciendo del
orden del 15 por ciento. Inglaterra, en primer lugar, ha salido de la
crisis, está creciendo ya, es el primer país europeo que ha empezado a
crecer, también fue el primero que entró en la crisis con mucha
diferencia y que ha pasado una crisis más larga, pero ha empezado a
crecer. En segundo lugar, la rebaja de los tipos de interés en Inglaterra
incrementa de forma notable la renta disponible por los ciudadanos,
porque la mayor parte de los ciudadanos tienen hipotecas y, por tanto,
los tipos de interés altos les resta su renta disponible. Y, en tercer
lugar, la salida de la crisis no es un problema sólo real, es más
psicológico. La psicología de la salida de la crisis hace que la gente
gaste el dinero con mayor alegría y en el mercado británico está
creciendo de forma importantísima.

El mercado alemán está creciendo y lo va a hacer durante este año de
forma muy importante también, y ahí la observación es en sentido
contrario. En un país como Alemania, que está en crisis profunda, que no
cree o por lo menos no está seguro de que vaya a salir de la crisis en el
año 1994, se ha demostrado que el hábito de viajar, de pasar sus
vacaciones en la playa, está considerado casi como una primera necesidad.

Es decir, que la gente



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renuncia a cambiar de coche o a otra serie de cosas mucho antes que dejar
de viajar. Además, se está incorporando a viajar toda la Alemania del
Este, que tenía muy poca experiencia viajera, y la que tenía era,
evidentemente, a países del Este, era fundamentalmente al Mar Negro, es
decir, a las costas rumanas y búlgaras del Mar Negro, y está cambiando al
Mediterráneo. Por tanto, nuestra cuota de mercado en Alemania está
creciendo por la incorporación de los turistas de la Alemania del Este.

Como elemento exótico también, y reflejo de la situación de un país como
es Rusia, les puedo decir que está empezando a entrar turismo ruso en
España en cantidades ya significativas, y que los paquetes que más se
venden en Rusia son los más caros. Es decir, el que más turistas está
trayendo, que es Ultramar-Express, el paquete que mejor vende es uno que
cuesta más de 5.000 dólares, que es a Canarias, y me decían los hoteleros
canarios que el turista ruso en este momento es el más valorado porque es
el que más gasta en bebida, en comida, en todo, y esto es reflejo del
problema dramático que se está produciendo del enriquecimiento brutal de
una minoría y el empobrecimiento de la mayor parte de la sociedad. Pero
la minoría que se ha hecho rica son nuevos ricos ostentosos y,
evidentemente, con una gran capacidad de gasto. Por tanto, el mercado de
Rusia empieza a ser un mercado significativo.

El mercado francés está fuerte también. Esperamos un crecimiento de
visitantes del orden del 4, 5 por ciento, que nos pondría por primera vez
por encima de los 60 millones de visitantes, y un crecimiento en
ingresos, siendo prudentes, del 12,13 por ciento. Es decir, que nos
pondría, por tanto, en un número de visitantes del orden de 60 millones,
y en unos ingresos superiores a los 2 billones 800.000 millones de
pesetas de ingresos en el sector.

Vamos a seguir con problemas en el sector de ciudad. Es decir, creemos
que puede mejorar un poquito con respecto a 1993, pero no de forma
significativa y por tanto los hoteleros de ciudad van a seguir teniendo
un año duro en este sentido, pero mejorando, y el turismo emisor va a ser
duro y empeorando o, por lo menos, desde luego, no mejorando porque le
afecta la última devaluación que se hizo a mediados del año y este año
está afectado totalmente por la devaluación y, en segundo lugar, por los
problemas que les indicaba de que va a haber inclusive dificultades para
encontrar plazas de contratación en las propias costas españolas. Lo que
pasa es que dentro de esta perspectiva de los tres sectores, como el de
las playas significa el setenta y tantos por ciento, evidentemente es con
mucha diferencia el más importante y su peso es grande. Las regiones más
beneficiadas van a ser las de costas; en primer lugar, Canarias; en
segundo lugar, Baleares; en tercer lugar, el destino que está
sobrecontratado es Benidorm, que tiene una enorme demanda en un cierto
sector turístico y, luego, en menor medida, se van a ver beneficiadas
todo el resto de las costas, la costa del Sol, Costa Brava, toda la costa
de Tarragona, toda la Costa Blanca de la Comunidad valenciana y Almería,
todas se van a ver beneficiadas porque, por ejemplo, se está
incrementando enormemente la operación sobre aeropuertos que han estado
casi inactivos como son el de Reus y Gerona, que van a tener un grado de
actividad mucho mayor que el que han tenido en años pasados porque va a
haber una mayor afluencia de turistas hacia todas las costas. Las
estrellas son Canarias, Baleares y Benidorm, pero en todas las demás se
va a ver incrementada de forma notable la asistencia.

Los datos de enero, que son los que tenemos ya, nos indican que hemos
crecido en número de visitantes en el 6,3 por ciento, que es una cifra
muy importante; es decir, esperamos crecer a lo largo del año no muy por
encima del 4 por ciento en número de visitantes y en cambio en este mes
hemos tenido un 6,3, hemos recibido más de tres millones de visitantes en
enero, que es una cifra récord también y, por tanto, esperamos que el
año, si no ocurre ningún acontecimiento extraordinario, y toco madera, va
a ser muy bueno.

Nos preocupa una cosa y es que el proceso de profundización de la
reestructuración del sector en el que hay que continuar se frene e,
inclusive, se cambie de signo por un año de bonanza. Es decir, nos da
miedo que los empresarios se olviden de los años difíciles y del camino
de mejora obsesiva de la calidad por el que había que ir, por ejemplo, de
contención de la inflación, puesto que la competitividad que hemos ganado
con la devaluación la podemos perder y continuar con unos niveles de
inflación altos, es necesario y, por tanto, que seamos capaces de
negociar los convenios razonadamente, entre otros elementos.

Nos preocupa también que temas muy importantes que estaban enfocados para
la mejora de la productividad, como es, por ejemplo, el cómputo anual de
la jornada laboral, que en un sector absolutamente estacional como es el
turismo de sol y playa es un elemento básico para la mejora de la
productividad, en un año que va a ser de gran bonanza resulte
dificilísimo de llevar a cabo. Por tanto --y lo digo con la contradicción
que implica y dándole el valor que tiene-- aunque estoy encantado de que
vayan a tener un buen año, en cierta medida, para la reestructuración en
profundidad del sector, casi hubiese sido mejor que hubiésemos tenido un
año menos bueno, que hubiese permitido realmente cerrar la mayor parte de
la oferta obsoleta y marginal que tiene que desaparecer y haber hecho los
cambios que el sector necesita para crearse un buen futuro y trabajar de
cara al futuro.




El señor PRESIDENTE: Vamos a iniciar los turnos de intervención de los
distintos grupos, comenzando por los dos grupos que han solicitado la
comparecencia del señor Ministro.

Por parte del Grupo Parlamentario Popular, el señor Aguirre tiene la
palabra.




El señor AGUIRRE RODRIGUEZ:En primer lugar, este diputado quiere
agradecer a la Presidencia los minutos de cortesía que le han permitido
incorporarse con tiempo y, en segundo lugar, quiere agradecer al señor
Ministro su presencia en esta comparecencia y los datos que nos ha
facilitado.

En este punto, con una sonrisa en los labios, tengo que decirle que nos
los había podido facilitar con anterioridad, como lo venimos solicitando
en anteriores



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comparecencias, y de esta manera habríamos tenido más elementos de juicio
para poder hacer nuestra intervención; en cualquier caso, confiamos en
que esta tercera vez que lo solicitamos sea la definitiva y, a partir de
ahora, podamos empezar a recibir con carácter mensual los datos que la
Secretaría General elabora en materia de movimiento turístico. Como verá
lo digo sin ninguna acritud, simplemente constato la realidad de que su
compromiso de enviarnos esta documentación es del día 27 de octubre y
hasta la fecha, que yo sepa, no lo hemos recibido.

En cualquier caso, la primera consideración que mi Grupo tiene que hacer
respecto a las cifras que nos ha facilitado es recordar dos frases que el
señor Ministro ha pronunciado en esta Cámara. La primera de ella fue algo
así como «no pongo la mano en el fuego por las estadísticas que en este
momento se están elaborando» y la segunda fue: «Los datos que recojamos
en el año 1993 no serán homologables, habida cuenta de que en el año 1993
este Ministerio va a cambiar el sistema de medición del movimiento
turístico.»
A eso hay que añadir señor Ministro, una información que veo que su
Ministerio no ha negado, que aparece en un diario económico, de fecha 7
de enero de 1994, en la que el titular reza de la siguiente manera: «La
OMT (Organización Mundial de Turismo) cifra en el 9 por ciento la caída
de visitantes a España en 1993.» Esta es una publicación que usted habrá
leído también. No quiero con esto poner en duda las cifras que nos ha
facilitado porque nos consta que para el turismo de sol y de playa ha
sido un año moderadamente satisfactorio y que para el turismo de ciudad
ha sido un año con una crisis significativa. Bien es cierto que el
turismo de sol y playa en España representa, como usted muy bien nos ha
anticipado,el 70 por ciento y el de ciudad sólo el 30 por ciento. Pero,
en cualquier caso, las cifras las dejamos en la reserva en la que
conviene dejarlas hasta que nos despejen de qué manera afecta a esta
falta de homologación que nos ha anunciado. ¿Ha dejado de poner usted ya
la mano en el fuego, o va a ponerla definitivamente por los datos que nos
ha facilitado? Le pregunto qué tiene que opinar respecto a que la
Organización Mundial de Turismo facilite estos datos al diario económico
al que me estoy refiriendo.

Desde luego, no nos ha mencionado a qué ritmo está creciendo el turismo
en Europa y en la esfera mundial. Supongo que no lo ha mencionado porque
es usted conocedor, señor Ministro, de que España está teniendo
crecimientos medios en el ejercicio de 1993 inferiores a las medias de
crecimiento de la actividad turística en Europa y en la esfera mundial.

Nos gustaría también conocer cómo ha evolucionado, aunque de alguna
manera nos lo ha dicho, respecto a nuestros mercados (que el principal de
ellos es la Comunidad Europea), Estados Unidos y Japón. Nos ha dicho que
Estados Unidos ha tenido un movimiento turístico decreciente, ¿qué
relación guardan, señor Ministro, las campañas de promoción que
realizamos en estos países emisores con el resultado que nos ha venido
usted a confirmar?
Curiosamente hemos visto que en su intervención no nos ha hecho ninguna
referencia a un departamento que le compete, de las pocas y escasas
competencias que tiene la Administración central en materia turística,
que es la de Paradores Nacionales. ¿Cómo ha sido el ejercicio de
Paradores Nacionales? Supongo yo, si la información que he obtenido no es
mala, que todavía el ejercicio del año 1993 no está cerrado. Si no
recuerdo mal, en una interpelación que le formulé hace escasas semanas,
así me lo dijo usted: que todavía no estaba cerrado este ejercicio y que
el beneficio iba a ser muy pequeño en consonancia con la crisis
significativa por la que estaba pasando el turismo de interior. En este
sentido, señor Ministro, me gustaría saber si en los últimos ejercicios
la red de Paradores ha trasladado sus cuentas al Tribunal de Cuentas. y,
si no lo ha hecho, cuál es el motivo por el que no ha presentado estos
datos.

He mencionado anteriormente que uno de los motivos por el que se está
rebajando las estrellas de los hoteles de máxima calidad era
fundamentalmente la dificultad de mantener un hotel de 5 estrellas en la
costa. Es una razón que sólo afecta a 5 hoteles, según los datos que
obran en mi poder, de la veintena de hoteles en los que se ha producido
la caída de esta estrella. Yo creo que la caída de esta estrella está
justificada bastante más en las dos razones anteriores que usted ha dado:
en la del IVA y en la de que se han cambiado los hábitos de los
visitantes de este tipo de hotel. Pero, como digo, el que sean los
hoteles de la costa los que resisten con más dificultad el tener 5
estrellas parece que sólo afecta a 5 hoteles de la veintena total en que
se ha producido.

En su exposición no se ha relatado nada respecto a cómo ha evolucionado
la creación de empleo en el sector turístico en 1993. Según los datos que
obran en mi poder, la creación de empleo durante 1993 ha sido más baja de
la que viene siendo habitual en el sector turístico y nos gustaría
conocer si nos puede facilitar una información, correspondiente
exclusivamente a estos años de la década de los 90, de cómo está
evolucionando la creación de empleo en los diferentes ejercicios en el
sector turístico. Tenemos la impresión de que la capacidad de crear
empleo en el sector turístico está disminuyendo sensiblemente, si
nuestros datos no nos engañan.

Y, por último, dando por buenos los pronósticos que realiza respecto al
año venidero, nos gustaría conocer si la famosa Comisión interministerial
que se puso en marcha a primeros de este año y que, de acuerdo con la
contestación que su Ministerio me ha facilitado, tendría que haberse
reunido antes del 14 de marzo del presente año, se ha reunido ya o hemos
incumplido también este plazo, Y, si se va a reunir, ¿qué agenda tiene
previsto, en principio, llevar a cabo esta Comisión interministerial.

Por el momento, señor Presidente, agradezco el tiempo que me ha
concedido.




El señor PRESIDENTE: Para proceder en nombre del Grupo Parlamentario
Catalán (Convergència i Unió), tiene la palabra el señor Sánchez i
Llibre.




El señor SANCHEZ I LLIBRE: Señor Presidente, quiero agradecer, en primer
lugar, la comparecencia del señor Ministro hoy en la Comisión de
Industria, Energía y



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Turismo para explicarnos los resultados turísticos del año 1993 y las
previsiones para el año 1994.

Nuestro Grupo coincide básicamente en el análisis que ha realizado el
señor Ministro referente a los resultados del año 1993 en cuanto a los
puntos fuertes y a los puntos débiles que han afectado a la situación del
sector turístico y que ha permitido unos datos realmente importantes y
unos beneficios importantes también en cuanto a la balanza de pagos, así
como a la entrada de divisas que ha permitido financiar una parte
importante del déficit comercial español.

También queremos plantear aquí la falta de coincidencia entre los datos
de la Secretaría General de Turismo y los que facilitan las encuestas de
la Organización Mundial de Turismo, puesto que hay un déficit
considerable, unas diferencias considerables entre los resultados de los
dos organismos. En este sentido, la primera pregunta sería sobre si, como
consecuencia de los datos que nos ha proporcionado el señor Ministro
respecto a la valoración económica del sector turístico para el año 1994,
su Ministerio piensa introducir las medidas correctoras necesarias y
suficientes para que, quizás, al final, las estadísticas de los dos
organismos puedan coincidir, ya que según las informaciones facilitadas a
un medio de comunicación, como ha dicho también el anterior portavoz que
ha desarrollado su intervención, se observa que son diferencias
considerables.

Además, echo a faltar en su intervención, por los datos que nos ha dado
el señor Ministro respecto a las previsiones de 1994 y a las ya
realizadas de 1993, una alusión a que el desarrollo de dicho sector ha
sido debido en gran parte al esfuerzo que han desarrollado los municipios
turísticos, las comunidades autónomas con competencias exclusivas en
dichas materias y, por descontado, también por el Estado, en la parte
importante de competencias que también le corresponden. Pero yo pienso
que una parte importante de estos resultados se han conseguido por las
comunidades autónomas valenciana, andaluza, balear, canaria, de Cataluña
y las otras, lógicamente, que con su desarrollo de trabajo turístico han
impulsado y han potenciado el logro de dichas cifras. Tampoco quisiera
olvidar en mi intervención la importante tarea de los empresarios del
sector turístico, que con su esfuerzo han permitido, han posibilitado y
han conseguido estos buenos resultados.

También estoy de acuerdo con el señor Ministro en que dentro de las
previsiones del año 1994 el sector empresarial turístico no ha de
descuidar su reestructuración y no ha de perder de vista la
competitividad, pues quizás un año de bonanza como se prevé para el año
1994 no les permita reconvertirse en unos sectores determinados, y esto
quizás les haga perder competitividad.

En cuanto a la exposición global, tengo cuatro puntos fundamentales sobre
los que me gustaría incidir para saber qué es lo que piensa su Ministerio
respecto a los mismos. Usted se ha referido, en el marco laboral, a que,
tal vez, el marcado carácter de bonanza podría no permitir al sector
turístico desarrollar el cómputo laboral de horas durante todo el año
1994. Nosotros pensamos que sería interesante saber si su Ministerio ha
previsto estudiar la flexibilización del mercado laboral turístico en
coordinación con el Ministerio correspondiente para permitir más
flexibilidad en este sector, dada su excepcionalidad en la situación
turística.

Dentro del marco fiscal, teníamos dos preguntas para formularle. Una era
respecto a la rebaja impositiva del IVA en los hoteles de 5 estrellas.

Esta pregunta se la formulamos en la anterior comparecencia. Usted, de
entrada, dijo que esto no correspondía básicamente a su Ministerio, sino
que era otro ministerio quien, quizá, tendría que incidir en la solución
del mismo. Pero nosotros pensamos que, quizás, para ser competitivos y
para dar también una calidad similar a la que dan los demás países de la
Comunidad (lo que tampoco creemos que afectaría, ni muchísimo menos, al
déficit público) sería interesante poder armonizar el tipo impositivo de
los hoteles de 5 estrellas con la formulación fiscal que tienen los demás
países de la Comunidad.

También quedó en el tintero en la pasada intervención del señor Ministro
una respuesta a la pregunta que le formulamos nosotros y que creo que
afecta a todas las comunidades autónomas del territorio español, que es
la falta de coincidencia entre la figura turística de las diferentes
comunidades autónomas y las normativas fiscales. Esta falta de
coincidencia provoca que muchas figuras turísticas establecidas por las
comunidades autónomas no coincidan con los epígrafes fiscales de las
delegaciones de Hacienda correspondientes y muchos establecimientos
turísticos pueden ser gravados con unos tipos impositivos mucho más
elevados por esta falta de coincidencia. No sé si su Ministerio está
estudiando la solución al respecto.

Dentro del marco de las comunidades autónomas, nosotros también tenemos
unas preguntas para formularle; se las hicimos también en la pasada
comparecencia. Una de ellas, la primera, se refería a si su Departamento
está estudiando y ya ha llegado a unos resultados para proponernos
respecto a la posibilidad de cambiar los estatutos del organismo de
Tourespaña, para que las comunidades autónomas, otros organismos y otros
agentes sociales y económicos puedan participar en el diseño de la
promoción turística de nuestro país. Entendemos que éste sería un
objetivo importante a conseguir y si consiguiéramos que todas las
comunidades autónomas, conjuntamente con la Secretaría de Estado de
Turismo, pudieran planificar globalmente los objetivos turísticos de este
país, quizás podríamos conseguir resultados más interesantes de los que
ya están previstos. Y aquí, quizás, aprovecharía para saber cuáles son
los planes para el año 1994 y qué tipos de productos y mercados piensa
programar o están programados dentro de Tour-España.

Hay otro asunto, que reivindiqué en la pasada comparecencia del señor
Ministro, que era si se ha pensado cambiar de criterio en cuanto al Plan
de Ciclotes. Usted sabe que nosotros tenemos puesto un recurso de
inconstitucionalidad respecto a la territorialización de los fondos
presupuestarios y estimamos que ésta es una reivindicación que se la
volvemos a hacer en esta comparecencia.

Asimismo, nosotros, en la anterior comparecencia, le planteamos la
posibilidad de traspasar los paradores nacionales a las comunidades
autónomas. Usted me dijo: No necesita la morcilla. Ya tengo el plan
estratégico del



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Ministerio de Comercio y Turismo. Yo no es que le quiera meter la
morcilla, ni muchísimo menos, en su comparecencia. Es verdad --y esto
usted también lo comentó en su comparecencia-- que los paradores
nacionales de turismo son sociedades anónimas. Nosotros lo que pedimos es
--y quizás sería interesante plantear-- poder traspasar acciones a las
comunidades autónomas o que estén representadas las comunidades autónomas
en los consejos de administración de las sociedades de los paradores
nacionales. También es verdad que hay algunos paradores nacionales que
hoy están actuando en competencia con otros organismos y otras empresas
turísticas, y quizás aquí también se habría de plantear su Departamento
la posibilidad de privatizar algunos paradores nacionales rentables, para
que no hagan competencia desleal a otras empresas en determinadas zonas y
sectores turísticos importantes.

En la anterior comparecencia también le planteé la posibilidad de que los
fondos del Inserso del turismo social pudieran ser gestionados por las
comunidades autónomas. Usted me dijo que ésta no era una cuestión de su
Ministerio, sino que pertenecía a otro Ministerio. La pregunta que le
hago en estos momentos es si en esta Comisión interministerial se ha
planteado la posibilidad de que el turismo social hecho por otro
Departamento, por otro Ministerio, puediera ser conducido a través de las
comunidades autónomas.

Dentro del carácter general de su intervención, usted nos ha dicho que
hay un cliente potencial muy importante, los turistas rusos, una minoría
de los cuales tienen una gran capacidad de compra. Ustedes, desde su
Ministerio, ya han solventado las trabas burocráticas que tenían los
turistas polacos para entrar en nuestro país, pero creo que todavía
existen grandes problemas burocráticos en los visados como para que
puedan entrar los turistas rusos en nuestro país. Sería interesante saber
si tienen pensado resolver lo mismo que se hizo en su momento determinado
para los turistas polacos.

Querría saber también si su Ministerio está estudiando o ya tiene
soluciones definitivas para el «time sharing». En su anterior
comparecencia, a iniciativa nuestra y de otros Grupos parlamentarios,
usted dijo lo estaba estudiando y que, en breve, lo plantearían, de
acuerdo con la legislación que existe en los diferentes países de la
Unión Europea; ésta era una cuestión importante que pienso que pueda
posibilitar que nuestra oferta turística dentro de Europa y dentro del
mundo pueda ser más atractiva.

También querría saber si su Departamento se ha planteado, en relación con
otros Departamentos ministeriales, la posibilidad de dar más financiación
a los municipios turísticos. Ya le dije también en mi intervención pasada
que hay municipios que durante las temporadas altas de turismo
multiplican por cinco o por seis el número de sus habitantes. Estos
servicios, realmente, no se pueden financiar a través de los municipios,
por lo que se tendría que estudiar, a pesar de que éste es un problema de
difícil solución, la financiación de los municipios. Creemos que dentro
de los municipios turísticos se tendría que buscar una fórmula importante
para poderles compensar este exceso de oferta y que en momentos
determinados no se llenen, para poderlos financiar en infraestructuras y
otros servicios.

Desde un punto de vista de formación, también pienso que hay una cuestión
que se está estudiando, como es la creación del registro de los títulos
de técnicos y actividades turísticas. Esta es una reivindicación que
desde diferentes comunidades autónomas y desde todo el Estado español se
viene haciendo, por lo que entendemos que su Ministerio habría de dar una
respuesta rápida a la misma.

Asimismo, desde el punto de vista de formación, creo que existe la
posibilidad, o está en estudio, de poder trasladar la homologación de
todos los diferentes títulos turísticos que dependen del Ministerio de
Comercio y Turismo e incorporarlos al Ministerio de Educación y Ciencia.

La pregunta sería si su Ministerio está estudiando la posibilidad de
poder incorporarlos al Ministerio de Educación y Ciencia.

Básicamente, mi última pregunta, quizás mucho más local, sería la
referente a la posibilidad o al tipo de trato que ustedes van a iniciar
con el Consorcio de Promoción Turística de Barcelona, sociedad compuesta
por el Ayuntamiento y las Cámaras de Comercio, y si en este tipo de
colaboraciones y contactos que ustedes, desde su Ministerio, van a tener
con dicho organismo tendrán en cuenta la Comunidad Autónoma --en este
caso, la Generalitat-- para poder coordinar entre todos los departamentos
el máximo de esfuerzo para obtener la máxima rentabilidad.




El señor PRESIDENTE: ¿Grupos que deseen intervenir?
Por el Grupo parlamentario de Coalición Canaria, tiene la palabra el
señor Martín Menis.




El señor MARTIN MENIS: Señor Presidente, quiero agradecer al Ministro su
presencia en esta sala.

Intentanto no alargarme, voy a tratar de relacionar esta intervención con
la realizada no hace mucho tiempo en esta propia sala.

Creo que, tal como ha dicho el Ministro, hoy se deduce el mérito y me
parece básico contemplar los méritos del éxito turístico, aun cuando
hayamos mejorado por parte de todos los componentes del negocio turístico
y por todos los entes, tanto ayuntamientos como comunidades autónomas y
Gobierno central, que tienen que ver con el turismo; el éxito del turismo
no es nuestro, no es nuestro el mérito. Circunstancias internacionales
nos han colocado en una situación indudablemente excelente para obtener
unos buenos resultados. La situación de estabilidad política nos favorece
de forma importante. Sí parece que siendo el 80 por ciento el turismo que
recibimos un turismo europeo, la valoración tenderá, poco a poco, a
perder sus efectos, porque nuestra inflación es mayor que la de los
países europeos, sobre todo Gran Bretaña y Alemania. Por tanto, iremos
perdiendo poco a poco esa ventaja competitiva. La situación política,
gracias a Dios, las circunstancias internacionales, también parece que
hacen que mejore y mejore nuestro entorno competitivo. Por tanto, también
a medio y largo plazo, y no desde luego para el año que viene y



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posiblemente tampoco para el otro, tenderá a mejorar y, por tanto, se
volverán a abrir esos mercados.

Nuestros problemas son dos problemas básicos y que citaba el propio
Ministro: medioambientales y de masificación, y los seguimos teniendo
encima. El de la masificación, difícil de resolver en una estructura
hecha a lo largo de muchísimas décadas, donde es muy difícil bajar
densidades y reconvertir. Es fácil decir que todos queremos y deseamos
que baje la densidad media, pero la realidad es que es difícil. Todos
sabemos que los problemas medioambientales se resuelven trabajando
muchísimos años y con una línea muy clara.

Dentro de estos dos problemas hay un tercer problema que no sale
normalmente en las encuestas, pero que crea mala imagen, que es la
seguridad. Indudablemente, somos la zona de más seguridad de nuestro
entorno competitivo, y por eso estamos en buenas condiciones, pero,
indudablemente, le afectan los pequeños fenómenos de robos, de tirones o
los fenómenos de seguridad entendida en un término mucho más amplio:
seguridad ante los accidentes, seguridad en la carretera, seguridad
sanitaria... Estos fenómenos son los que, indudablemente, marcados en
algunos de los visitantes aquellos que necesitan sus servicios y no los
encuentran en perfectas condiciones, dan una mala imagen en ese boca a
boca que es nuestro mejor marketing, tal como decía el Ministro.

Creo que momentos como éstos son momentos de bonanza económica donde hay
que dedicar algunos de los recursos que va a producir el turismo a
mejorar esas condiciones por parte de todos.

Me gustaría concretar sobre la necesidad de coordinar las políticas de
los ministerios y las políticas del Ministerio de Comercio y Turismo con
las comunidades autónomas y ayuntamientos; la necesidad de que funcione
esa comisión interministerial es clara, pues hay políticas, como puede
ser la política aeroportuaria, la política que lleva costas o la política
de telecomunicaciones, de la cual depende de una forma muy importante el
sector turístico. Si estamos considerando que en el sector turístico el
sector del mercado que más tira es el de sol y playa y consideramos que
las inversiones son realizadas prácticamente en su totalidad por costas,
porque pensar en realizar inversiones incluso por las comunidades
autónomas y por otras administraciones tiene un proceso tan complicado y
tan largo de tramitación entre costas que lo hace prácticamente
imposible, y la política de costas no responde a la política turística,
resulta que gran parte de nuestro turismo es sol y playa, está actuando
el principal actor, que es el Ministerio de Obras Públicas, por un lado,
totalmente diferente del Ministerio de Comercio y Turismo. Tengo ejemplos
de ello en las costas canarias, y Canarias es un destino turístico
importante, donde incluso, y no lo quiero decir, en absoluto, intentando
agriar, pero donde incluso el color político de los ayuntamientos es el
que está fijando dónde se invierte y no se invierte y no dónde hay
necesidad. Prueba de ello es el dato --pedido por mí personalmente al
Ministerio-- de que el 91 por ciento de las inversiones de costas en los
últimos diez años no ha respondido a una política clara de necesidades de
cara al turismo, sino a una política diferente, entre las cuales ésta
puede ser una de las circunstancias.

En política aeroportuaria, si tenemos en cuenta que en zonas como
Canarias prácticamente el 100 por cien entra por los aeropuertos, la
política aeroportuaria es un elemento fundamental para la política
turística. Y ahí tampoco se ha hecho el esfuerzo necesario; las cosas han
cambiado y han mejorado, hay que reconocerlo. Hay islas que han logrado
mejorar de forma importante y hay otras que van muy por detrás. Y ahí hay
que tener en cuenta que la bonanza que tenemos delante hace que el
mercado aumente los precios de forma importante. Al aumentar los precios,
se pierden los grupos más baratos, que son, normalmente, por ejemplo, en
un caso como Canarias, los de más larga estancia y, por tanto, se
sustituye con la misma cama por un turismo de más corta estancia, de
mejor dotación y que dejan valor añadido más importante. Eso al final
hace que el número de turistas baje. Pensemos que en los últimos cuatro
años se ha bajado un punto la estancia media, casi un día y eso,
multiplicado por el número de turistas, hace muchas estancias.

Hay una tendencia que también hay que señalar, y es la mejora, la
liberalización del transporte dentro de España, sobre todo el
Canarias-Península, como supongo que el Canarias-Baleares, ha hecho que
el número de turistas españoles de corta estancia aumente. Eso, que es
beneficioso, sin embargo lleva una masificación de los aeropuertos; hay
algunos aeropuertos que entran, en los días que llega el turismo, en un
auténtico colapso.

En lo que se refiere a inversiones, cuando se termina una inversión
estamos por detrás de las necesidades. Y es difícil, pero hay que empezar
a planificar a largo plazo y tomar decisiones a largo plazo para que
algún día logremos resolver este problema.

Hay otra competencia del Estado que es básica para el mundo turístico, y
son las telecomunicaciones. Indudablemente, también se ha hecho un
esfuerzo, pero todavía se está por debajo incluso de la media nacional en
algunos campos de los servicios digitales integrados. Para un sector como
el turístico, las comunicaciones son un elemento fundamental. Hay un
cambio tecnológico importante que parece que nos da la oportunidad de,
por lo menos, flexibilizar la intermediación; pequeños operadores que
surgen, reservas de forma directa, sistemas de transportes más flexibles,
que permiten que, de cara al futuro, pensemos que cada vez más, poco a
poco y despacio, muchos turistas llegarán a nuestro país con reservas
directas, pero para eso es necesario mejorar de forma muy importante y
permitir abaratar el costo al máximo de todos los servicios de
telecomunicaciones. Eso es lo que nos permitirá estabilizar el turismo y
tener la ventaja de poder controlar por lo menos alguna parte de ese
enorme sector que depende en su mayoría de los grandes tour-operadores.

Por eso nos parece que esa comisión interministerial para dedicar sus
esfuerzos a la mejora de las telecomunicaciones, pero ligadas con una
política turística a la política de costas o a la política aeroportuaria,
son acciones totalmente necesarias, como puede ser toda la política de
depuración de aguas, donde en este momento, teniendo en cuenta que los



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problemas medioambientales son los que preocupan al turismo, se vuelve
prioritario tener una calidad de aguas excelente, tanto en aguas potables
como en aguas marinas.

Solamente me gustaría añadir que hay otros problemas, que dependen no
sólo del Gobierno central, sino de la política general de todas las
administraciones, en los que se tendría que hacer un esfuerzo por parte
del Ministerio para elaborar determinadas directrices, así como para
aprobar otras en común.

Las épocas de bonanzas volverán a traer, probablemente, un incremento de
la construcción, que todos estamos de acuerdo que hay que intentar
controlar, porque todos sabemos lo difícil que es cuando las competencias
vienen garantizadas por la Constitución a los municipios. A los
municipios con grandes problemas, muchos con necesidades de crecimiento,
con problemas de paro importante en sus municipios, se les ofrece la
oportunidad de crecer con una visión quizás localista, pero con un marco
competencial importante y con mucho suelo calificado e incluso dotado de
infraestructuras para convertirlo en urbano y que de hecho en suelo
urbano es muy difícil controlar ese crecimiento. Por eso habría que hacer
un esfuerzo, y es posible que desde esta Cámara se pueda producir, para
intentar elaborar una política común, un esfuerzo común de todos en ese
control. Piénsese que Canarias en este momento, indudablemente con un
sector turístico en bonanza, ha crecido el último año el 2,13 por ciento
del PIB y parece que con ello debíamos tener resueltos todos nuestros
problemas y nos encontramos con que el crecimiento de la población
activa, muy superior a la media nacional, nos hace que con crecimiento de
ese tipo siga incrementándose el paro de forma alarmante, pues estamos
por encima del 24 por ciento. Junto con Andalucía y Extremadura somos la
autonomía con más paro de toda España.

El único sector que es capaz de crecer es el turístico. Nos encontramos
en esa difícil situación entre equilibrio y control de la construcción,
para que incluso nuestro incremento de oferta vaya no sólo a Canarias,
sino al resto del Estado. No en las épocas invernales, pero en verano es
cuando se mueve todo de forma conjunta. El sector turístico es un vaso
comunicante de las diferentes autonomías y el incremento de ofertas no
nos viene bien a ninguna de las zonas receptoras. Sin embargo, nos
encontramos ante problemas de algunas zonas que necesitan seguir
creciendo porque no tienen otro camino para resolver problemas gravísimos
como el del paro.

Por eso creemos que es necesario establecer políticas conjuntas que nos
permitan ese control, crecer en mercados muy especiales que no dañen al
mercado total y aprovechar estos momentos en que habrá excedentes
empresariales para que los mismos se coloquen en los lugares adecuados,
intentando estudiar y fomentar aquellas áreas que no causen daño a la
totalidad del fenómeno turístico.

Por eso --y ya termino-- nos parece muy importante que desde su
Ministerio se establezcan políticas. No es un Ministerio inversor, pero
puede ser un Ministerio motivador de que las políticas que se establezcan
desde otros ministerios e incluso desde otras administraciones sean
adecuadas para que el resultado conjunto del turismo en toda España sea
el mejor. Por ese fenómeno que decía de que estamos totalmente
convencidos de que un desarrollo excesivo en cualquier parte de España,
siendo España uno de los principales motores y uno de los principales
receptores turísticos europeos nos atañe de forma global toda la
política.




El señor PRESIDENTE: Por el Grupo de Izquierda Unida-Iniciativa per
Catalunya, el señor Vázquez tiene la palabra.




El señor VAZQUEZ ROMERO: Voy a empezar por saludar la presencia del señor
Gómez-Navarro y agradecer los datos que nos ha proporcionado, aceptando
el ofrecimiento que nos ha hecho de remitirnos los documentos a los que
él ha hecho referencia en esta comparecencia, pero solicitando que la
misma debería realizarse con antelación suficiente para que pudiéramos no
sólo oír los datos, sino reflexionar sobre los mismos. Los datos
difícilmente se pueden contestar, se aceptan o no; lo que se discuten son
las ideas que hay detrás de los datos. Y hablando de la aceptación de los
mismos, única y exclusivamente a título de aclaración, porque todos hemos
conocido esas noticias a las que se ha hecho referencia antes, aparecidas
en alguna prensa económica, que discrepan de los que usted nos ha dado,
quisiéramos alguna mención a esa controversia respecto a la disminución
aparente --repito en prensa económica-- de ingresos de turistas en
nuestro país en el año 1993, sobre todo teniendo en cuenta que, como
usted dijo en su anterior comparecencia, se estaba en vías de modificar
la forma de recogida de datos y de realizar la valoración de los
distintos aspectos del turismo español. (El señor Vicepresidente, Dávila
Sánchez, ocupa la Presidencia.)
Dicho esto, comparto estrictamente lo que ha señalado como preocupación
respecto a que el año de bonanza que hemos tenido en 1993 y que
previsiblemente tendremos en 1994 en este sector pueda hacer que los
empresarios olviden la necesaria profundización de la reforma estructural
del sector. Sabiendo que es un sector en el que la hegemonía es
prácticamente absoluta del sector privado, debería de inducir a acciones,
por parte de su Ministerio, para que esa preocupación fuera también
ocupación, en el sentido de que fuera aprovechada la bonanza del año 1993
y fundamentalmente la próxima de 1994, para que, con los excedentes que
se produzcan en el sector, parte de los mismos se reinviertan, por parte
de la empresa privada, en esa necesaria reestructuración. Todo lo
contrario; estamos asistiendo a unas noticias de puesta en funcionamiento
de estructuras ya obsoletas, de locales cerrados, que ante la previsible
avalancha de turistas este año, se vuelvan a poner en funcionamiento con
retoques de fachadas, sin estar en condiciones adecuadas y que pueden
generar que esa buena percepción del turista al salir de nuestro país,
después de haber efectuado sus vacaciones, de las instalaciones,
etcétera, pueda, en tiempos posteriores, modificarse y actuar globalmente
en nuestra contra. Me gustaría saber qué acciones se pueden hacer o
tienen pensado hacer



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desde su Ministerio para instar a que los empresarios no se olviden de
esa reforma estructural. Al mismo tiempo, nos gustaría saber si tiene
alguna noticia de negociaciones con los sindicatos para llegar a alguna
de las posibles soluciones de conflictos antiguos, como esa del cómputo
anual de jornada laboral, si se ha avanzado algo en ese terreno, porque
nos parece que podría ser una buena vía de solución de los problemas.

Nos gustaría también que nos hiciera una valoración actualizada del plan
Futures, en relación con las diferentes comunidades autónomas, aunque
quizás los datos económicos de inversiones o de transferencias económicas
desde la Administración central a las autonómicas, en cumplimiento de ese
plan, pudiera ser una información que nos diera por escrito, para evitar
alargar excesivamente esta sesión.

No ha hecho mención al turismo social conectado con el turismo de
interior, que usted lo ha fijado prácticamente en turismo de ciudad,
cuando hay una parte importante de ese turismo interior, que puede ser el
turismo de alrededor o de la red de balnearios, que no solamente
proporciona a personas de rentas bajas la posibilidad de disfrutar de
vacaciones, sino que además puede generar esos llamados empleos de
cercanía, como se menciona en el Libro Blanco de Delors.

Nos parece que de las tres razones que usted ha dado para que 1993-94
fuera un buen año, la devaluación de la peseta es evidente y la situación
de los países competidores, es decir, la primera y la tercera razón son
obvias, pero la segunda, la recogida de la opinión de los turistas de la
mejora en los servicios estará objetivada en los datos que ustedes hayan
recibido, pero nos parece que la mejora de estos servicios en lo que
significa o lo que es o ha sido inversión pública en costas, en playas,
en aeropuertos, en algunos casos es evidente que esas infraestructuras se
han mejorado, en otros la mejora es o puede ser muy coyuntural, en
función de no estar diseñada con una perspectiva a medio y largo plazo.

Sabe usted bien que no pocas de las regeneraciones de playas de los
últimos tiempos quedan muy aparentes el primer año en que esa
regeneración se produce, puede que también el segundo, pero,
previsiblemente, en función de los métodos utilizados para las mismas,
dejen de ser tan aparentes cuando se produzca una situación climática
adversa. Cualquier pequeño temporal puede hacer regresar no pocas de
estas regeneraciones de playas, que son bien valoradas por los turistas,
en función de que los métodos que se han utilizado para las mismas no han
tenido en cuenta algo que valoran más negativamente los turistas, que es
fundamentalmente el entorno medioambiental. Curiosa y desgraciadamente,
es ante lo que menos sensibilidad plantean los turistas españoles, que
son los menos sensibles en sus viajes en el interior ante esas
alteraciones o problemas medioambientales.

En ese segundo punto, digamos más estructural, de por qué es un buen año,
al principio me refería, coincidiendo con usted, al miedo a que la
bonanza del tiempo no lleve a que se produzcan en profundidad las
reformas que necesita el sector, que tiene en no pocos casos
instalaciones obsoletas, que se siguen manteniendo en función de unos
bajísimos precios, a su vez, con mecanismo de retroalimentación
condicionados por tour-operadores que aprietan hasta el final,
consiguiendo paquetes de vacaciones por precios difíciles de entender. O
se rompe ese circuito por algún sitio o probablemente, en un futuro no
muy lejano, podremos mantener los graves problemas estructurales en el
sector.

Acabo, señor Presidente, solicitando respuesta, en lo posible, al señor
Ministro, a estas consideraciones, fundamentalmente en lo referido a
turismo social, turismo de balnearios y acciones que pueda emprender la
Administración para favorecer la reforma estructural en tiempo de
bonanza.




El señor VICEPRESIDENTE (Dávila Sánchez): Por el Grupo Socialista, tiene
la palabra el señor Artiles.




El señor ARTILES BOLAÑOS: Señor Presidente, como el resto de los Grupos,
quiero agradecer la extensa información del señor Ministro en un momento
adecuado para hacer una valoración de 1993 y lanzar, creo que muy
conservadoramente, muchos de los aspectos de perspectiva turística a
tenor de la situación del mercado en Europa y en el mundo.

Creo que el fenómeno turístico que ha iniciado, espero, la primavera
económica del resto de otros sectores que, como se ha dicho por algunos,
pueden ser inducidos a un crecimiento que todos deseamos, debe
enmarcarse, por otro lado, en una política que, como expuso en la primera
comparecencia en esta misma Comisión el señor Ministro, demuestra que
desde su Ministerio se mantiene una política turística colaboradora con
todo el sector.

Se ha reiterado también el papel importantísimo del sector privado y creo
que esa política de cooperación obliga, en primer lugar, a algo que se ha
manifestado y que el Grupo Socialista cree importantísimo, que estando en
este inicio de súper «boom» turístico, es muy importante aprender las
lecciones que llevaron a cabo la redacción del Plan Futures. Es otro
punto fundamental que los elementos estructurales que han incidido en la
crisis turística del pasado deban ser continuados, acometidos y mejorados
para que estos años de bonanza que se prevén sirvan también para
resolver, no solamente la coyuntura, sino para incidir de forma
trascendental en la continuidad de una política turística que, como muy
bien ha expresado el señor Ministro, tanto en la anterior como en esta
comparecencia, es una política turística autónoma por cuanto desde el
Ministerio recaba la trascendencia de la política turística en la
política económica, social y de infraestructuras de España. Creo que esa
política autónoma es un buen camino para la interlocución con todo el
sector, tanto el empresarial como el de representantes de los
trabajadores, a la hora de dinamizar la creación de empleo. Es también
muy importante por cuanto ayuda a que haya aspectos, desde la necesidad
de una política turística de España y en España que, sin perjuicio de las
políticas de competencias de las comunidades autónomas o de las
corporaciones locales debe tener su propio reflejo en algunos de los
objetivos que se han enumerado en el Plan Futures, que creemos muy



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importante, tanto en la política de modernización como en la de turismo
social y de turismo de excelencia turística; política autónoma que obliga
también a una política coordinada, tanto como establece el Plan Futures
como coordinada con el resto.

Por ello nos congratula la puesta en marcha de la Comisión
interministerial. Querríamos que nos explicase aquellos aspectos del plan
de trabajo, de actuaciones, que va a llevar, que sería muy bien visto por
esta Comisión. Política turística coordinada también, sobre todo a la
hora de sumar, en políticas de promoción, aquellos recursos que quizá
dispersos no producen la rentabilidad que pudiera llevarse a cabo en una
política coordinada desde el punto de vista de promoción.

Otro aspecto importante también de esta política turística autónoma y
coordinada es la coordinación llevada a la política de formación
turística, tanto entre los diversos ministerios como con las distintas
comunidades autónomas. Le puedo expresar que alguna comunidad autónoma,
concretamente de la que provengo, ha tenido que recurrir a la
homologación con otro Estado de la Comunidad Europea para dar validez a
algunos títulos turísticos. Pienso que esto obliga a una política de
coordinación en la formación.

Por otro lado, también me alegra comprobar la voluntad de contribuir
desde el Ministerio a una política turística que ayude a un
enriquecimiento de España, un enriquecimiento de España, en primer lugar,
en empleo. (El señor Presidente ocupa la Presidencia.) Por ello me
gustaría que nos explicara las perspectivas de creación de empleo, de
incidencia en el mercado laboral que esta bonanza pueda tener, si hay
algún tipo de datos; también, a la hora de hacer un seguimiento de
aquellos elementos de futuro que crean la confianza necesaria; como usted
bien ha dicho, el elemento del boca a boca es trascendental para la
mejora y para la opinión turística. Concretamente, en el tema de las
políticas de telecomunicaciones, como bien se ha dicho, sería importante
la extensión a todo el territorio de elementos que ayuden a la estancia
grata, corroborando así ese 97 por ciento del alojamiento y el trato como
elementos claves para el éxito turístico.

En la política de seguridad, he de manifestar que ha habido un salto
importantísimo en los últimos años. Obviamente, nunca podemos estar
plenamente y hay que continuar, pero se ha dado un salto espectacular y
es necesario continuarlo en una cooperación con todas las
administraciones a la hora de llevarlo a cabo.

También hay algo importante para esa política enriquecedora del ámbito
turístico de España, además de las infraestructuras y de las
telecomunicaciones; hay algunas medidas de política económica que son
trascedentales. La devaluación se ha manifestado por usted como un efecto
importante, pero hay otro efecto que debe ser tenido en cuenta: la
contención de la inflación. Creo que, en esa línea, los elementos deben
hacer que la situación actual no olvide las perspectivas de una política
turística continuada que mejore.

En esa línea me gustaría saber si el Ministerio o la Comision
interministerial tendría datos o expectativas de lo que una medida
adoptada en esta legislatura por el Parlamento, concretamente la
renovación de créditos hipotecarios, puede tener de incidencia en el
sector turístico como una contribución más para crear ese marco de
confianza adecuado para que el turismo reúna las condiciones que los
demandantes de este servicio piden.

Por otro lado, creo que la política turística coordinada, autónoma y
enriquecedora es de tanta trascendencia que es necesario recabar también
la participación de las corporaciones locales, incrementando su
protagonismo a la hora de mejorar la imagen que tienen de España, de los
distintos sectores turísticos, los turistas, valga la redundancia, que
nos visitan.

Por ello quiero agradecer desde el Grupo Socialista su comparecencia y
esperar aclaraciones a alguno de los elementos que hemos manifestado.




El señor PRESIDENTE: Para un segundo turno, tiene la palabra el señor
Ministro de Comercio y Turismo, don Javier Gómez-Navarro.




El señor MINISTRO DE COMERCIO Y TURISMO (Gómez-Navarro Navarrete): Me
preocupa que me transmita el señor Aguirre que sigue sin recibir los
datos del movimiento turístico, porque cuando yo les dije la vez pasada
que los recibiría es que ésa era mi intención. Por tanto, he dado las
instrucciones para que los reciba mensualmente. Lamento muchísimo el
asunto; me hago responsable del tema, y quiero decir...




El señor PRESIDENTE: Perdón, señor Ministro. Quizá para ayudar en esta
discusión, yo creo que no los recibe ningún miembro de la Comisión. Por
tanto, debe de haber dejado de funcionar el mecanismo. Sería muy bueno
para todos disponer de esa documentación.




El señor MINISTRO DE COMERCIO Y TURISMO (Gómez-Navarro Navarrete): Me
vuelvo a hacer responsable del asunto y espero que esta vez seamos
capaces de resolverlo, porque son datos públicos que se distribuyen y que
no tenemos ningún recelo ni problema en darlos. Debe haber un problema
burocrático que no resolvemos de forma correcta y, en consecuencia, asumo
la responsabilidad.

Me recuerda unas frases que yo dije de que no ponía la mano en el fuego
por la estadística turística. Es verdad, lo que pasa es que, primero, de
la estadística turística hay dos diferentes. La del Banco de España sigue
siendo un procedimiento similar al anterior y es homologable con la
anterior y la evolución; los datos de ingresos son homologables a los
anteriores y son no cuestionables, o cuestionables en la medida en que yo
mismo los he cuestionado y que me parece que están infravalorados, porque
no cuantifican la totalidad del gasto que se produce, pero son
homologables a los anteriores y no hay modificación y, por tanto, no hay
problemas.

Evidentemente, el de la frontera y el número de visitantes es un dato que
ya ha cambiado el sistema. En este momento se están haciendo estimaciones
por dos vías: una



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que sigue haciendo la policía, que toma muestras periódicamente y, con su
experiencia de haber hecho los datos de entrada durante toda la vida, da
una cifra; y otra la de las encuestas que realiza la Secretaría General
de Turismo. Evidentemente, son sistemas diferentes de los anteriores, que
eran un auténtico registro.

En cualquier caso, sí le quiero decir que hay una parte importante, que
son todos los que llegan por avión, que están registrados al 100 por
ciento; es decir que son las listas de embarque y es un sistema
controlable y controlado. Las posibles discrepancias se producen en los
que entran con coche, en las fronteras, con automóvil.

Sí le quiero decir que entre los datos que da la policía y los que
reflejan las estadísticas de la Secretaría General de Turismo hay una
discrepancia que no llega ni al 5 por ciento. Parece ser que el sistema
está funcionando, porque las dos vías no discrepan significativamente.

El problema de la OMT es absolutamente falso. Yo cuando leí la noticia me
quedé enormemente sorprendido, porque no hace estadísticas. La OMT se
limita a publicar las estadísticas de cada país. Entonces dije: ¿Cómo
puede ser que la OMT dé unos datos discrepantes de las estadísticas
españolas. Llamamos a la OMT y nos dijeron que ellos no habían dicho eso
jamás, que ellos le habían dado a un representante de la Agencia EFE un
dato de las entradas --no recuerdo en este momento--, me parece que era
hasta el mes de octubre, y entonces la Agencia EFE había comparado los
datos de octubre de 1993 con la totalidad de 1992, y lo había puesto en
boca de la OMT. Nosotros nos dirigimos a la Agencia EFE pidiendo su
rectificación, y, como pasa en muchas de estas cosas, la rectificación se
produce dos días más tarde, nadie la publica, o se publica en la octava
página en un recuadrito y, evidentemente, ha quedado una especie de
constancia de que hay una discrepancia, que no hay, porque la OMT no hace
estadísticas, simplemente acepta las de los países y las distribuye, con
lo que difícilmente podía haber una discrepancia estadísticamente porque
no las hace. Ese fue el mecanismo que produjo esa contradicción,
mecanismo del que la OMT no se hacía responsable, ya que en su papel
constaban los datos hasta octubre y la Agencia de prensa comparó los
datos hasta octubre con los de todo el año 1992. Esa es la discrepancia.

Aparte de que las estadísticas sean válidas o no y, por tanto, las dudas
que podamos tener sobre ellas, hay un elemento absolutamente nítido, que
es la satisfacción de los empresarios. Basta reunirse con los empresarios
del sector turístico en el segundo semestre del año pasado o en este año
para saber su nivel de euforia y su nivel de satisfacción. No es sólo ir
a la estadística, que siempre podremos tener dificultades técnicas, sino
la realidad del empresario.

Yo he tenido reuniones con todos los principales tour-operadores,
fundamentalmente ingleses y alemanes, ya que su mercado viene a través de
tour-operadores, y he tenido una reunión en Londres y me decían los
tour-operadores ingleses: usted ha llegado al sitio oportuno y en el
momento oportuno, porque ha tenido usted la suerte de llegar en un buen
momento --me decía un tour-operador, uno de los más importantes--, porque
normalmente en un país democrático no se es Ministro más allá de tres
años, y le aseguro que los tres años que va a ser Ministro de Turismo va
a ir muy bien. Yo le dije: Muchas gracias.

En la Feria de Berlín nos reunimos con todos los tour-operadores alemanes
que están absolutamente angustiados, porque en el caso de los
tour-operadores se ha producido una doble sobrecontratación. Es decir,
los hoteleros han sobrecontratado a los tour-operadores y éstos han
vendido más de lo que han contratado, con lo que hay una
sobrecontratación acumulada; entonces tienen un problema angustioso de
cuál iba a ser la situación de sus clientes. Nos llegaron a plantear
cosas como abrir los hoteles cerrados; les dijimos radicalmente que no,
que ésa era una posición no aceptable, que no podías jugarte el futuro al
beneficio de un año. Las autoridades de Baleares, por ejemplo, que
estaban masivamente en Berlín y a las cuales también les plantearon el
asunto, reaccionaron con la misma contundencia. Y las asociaciones
empresariales, todas las que había en la Feria de Berlín, reaccionaron
con la misma contundencia. Es decir, no podemos jugarnos algo que nos ha
costado un esfuerzo hacer en función de un año de bonanza.

Yo soy optimista en ese aspecto de que por lo menos en un año, a lo mejor
varios años de bonanza minan la conciencia empresarial y se olvidan del
pasado, pero en un año yo espero que no y que seamos capaces de mantener
coordinadamente las comunidades autónomas y el Gobierno central una
política de insistencia en el proceso necesario y obsesivo del
mantenimiento de la calidad como objetivo primario.

Yo les decía en mi anterior comparecencia que ni turística ni
comercialmente nosotros como país desarrollado y con salarios altos vamos
a poder competir exclusivamente en precios. Nosotros vamos a tener que
competir en el segmento medio-alto de la demanda y, por tanto, lo vamos a
tener que hacer en calidad. Nuestra obsesión debe ser la calidad, porque
conforme se vayan amortizando las instalaciones turísticas que se han
abierto en el tercer mundo, van a ser capaces de ofrecer precios que
compensen la diferencia del coste del transporte más lejano. Por tanto,
tenemos que tener la obsesión en la calidad y que ése es un elemento
fundamental en toda nuestra política.

No le puedo dar el crecimiento en Europa y en el mundo porque no lo he
traído. Sí le puedo decir que en Europa --y se lo digo de memoria, no
tengo los datos aquí; si los quiere se los enviaré-- no es más alto que
en España, el mundial sí, porque es muy diferente crecer en un país que
tenía un hotel y que haya otro, que crece un 100 por ciento, que en un
país que parte de un millón de plazas hoteleras, donde el crecimiento es
porcentualmente muchísimo menor, aunque sea en cantidad absoluta mayor.

Por tanto, a nivel mundial, sí. Las corrientes turísticas tienden a que
Europa en el nivel mundial va a perder cuota de mercado; va a ganar,
fundamentalmente, Asia. Las previsiones de la OMT son que el turismo en
Europa va a seguir creciendo, pero en menor medida que el turismo hacia
Asia, lo cual va a generar que la cuota del mercado europea, que en este
momento es altísima, disminuya y que crezca la



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cuota de mercado asiática, no de forma sustancial, pero sí en algunos
puntos.

Campañas de promoción y relación con el mercado americano. La caída del
mercado americano es reflejo de la imagen de país carísimo que dimos en
1992. La imagen que dio España en 1992 mundialmente, sobre todo a través
de los Juegos Olímpicos y de la Expo, es que éramos un país
disparatadamente caro. Eso tarda un tiempo en cambiarse. Aunque los
precios de 1993 fuesen más baratos, la imagen queda un tiempo fijada en
el recuerdo, en la retina. Es un elemento importante en el que hay que
incidir, sobre todo en mercados como el americano, primero, en que el
tipo de cambio ha variado radicalmente, que no está en 90-100 pesetas el
dólar, sino a 140, y, segundo, que los precios de los hoteles han caído
también, con lo cual hay una acumulación de dos caídas muy importantes.

El ejercicio de los paradores está cerrado. Lo que dije la vez anterior
es que no estaba terminada la auditoría y que, por tanto, hasta que no
estuviesen auditadas las cuentas yo no podía dar resultados definitivos.

¿Qué beneficio va a haber? Ustedes saben suficientemente que el beneficio
de las empresas tiene un margen amplísimo, el que se quiera declarar.

Depende de las provisiones que se quieran hacer. Queremos que la empresa
esté lo más saneada posible y, por tanto, vamos a dar un beneficio que
creemos que va a seguir existiendo, haciendo las máximas previsiones y
dotándola de los mejores recursos.

Mi idea sobre los paradores ya se la he expuesto otras veces. Yo creo que
tienen un amplísimo campo de mejora en la gestión. La Red de Paradores es
una sociedad anónima que tiene que ganar mucho más dinero que el que
gana.

No le puedo decir si ha enviado el balance al Tribunal de Cuentas. No lo
sé. Lo voy a verificar, pero no le puedo contestar a esa pregunta.

Evolución en 1993. No tengo datos, pero, evidentemente, el sector turismo
sol y playa es extraordinariamente ajustado en personal. Sólo se puede
vender a los precios de nuestro turismo porque ha llegado a un nivel casi
tecnológico, en el sentido puro de la palabra, entre los servicios que
prestan y el coste. Las cadenas hoteleras españolas tienen una tecnología
de costes absolutamente ajustada, el personal se ajusta al máximo. Por
tanto, cualquier crecimiento en la demanda genera crecimiento en el
empleo. ¿En qué medida? No se lo puedo decir, pero quizá pronto podamos
dar datos más precisos al respecto.

Se publicó la creación de la Comisión Interministerial en el Boletín del
8 de febrero de 1994. El Decreto dice que tiene dos meses para la reunión
de su primera convocatoria, por lo que teníamos hasta el día 8 de abril.

Le puedo decir que la reunión se celebró ayer. Aunque el Presidente de la
Comisión soy yo, ayer la presidió el Vicepresidente del Gobierno para
señalar la importancia que para el Gobierno tiene la creación de la
Comisión y el respaldo al sector turístico que eso significó. Luego le
diré, si le interesa, lo que ayer se aprobó y los temas que se abordaron
en la Comisión.

Señor Sánchez i Llibre, me ha planteado todos los problemas históricos
del sector turístico. No ha hecho una evaluación de los años 1993 y 1994.

Ha hablado de la financiación de los municipios, etcétera. Cuando yo tuve
los primeros contactos con el sector turístico en el año 1970 ya era un
problema del sector la financiación de los municipios turísticos. Por
tanto, le voy a contestar algunas cosas y respecto a otras le voy a decir
que son problemas que tienen tal complejidad que no sé si algún día se
resolverán. En cualquier caso, no están en el planteamiento de la
comparecencia de hoy.

Ya he contestado en lo relativo a la Secretaría General de Turismo a
todos los que han planteado cuestiones en esa línea.

Es verdad que no he citado a las comunidades autónomas en ese segundo
aspecto de mejora de los servicios. He citado a los empresarios privados
y el papel de la Administración central. Las comunidades autónomas,
efectivamente, han tenido un papel importante, pero como yo no soy
consejero de las comunidades autónomas no he hecho esa consideración.

Tiene usted toda la razón: las comunidades han tenido un papel
importante.

Hay un grado importantísimo de acuerdo en las políticas entre todas las
instituciones. Otra cosa son las peleas competenciales, pero sobre la
definición de las políticas hemos llegado a un grado de acuerdo
importantísimo.

El problema fundamental en el marco laboral es que hay que implementar la
reforma laboral en el sector turístico, porque es uno de los sectores
donde clarísimamente la mejora de la productividad es importantísima y
donde, además, la implementación de la jornada en cómputo anual permite
que se pasen contratos eventuales a contratos fijos y que, por tanto,
pueda mejorar la formación y las empresas puedan invertir en formación,
lo que repercutirá en una mejora del servicio.

En un sector que trabaja siete o siete meses y medio al año, si no se
contrata en cómputo anual, se van a hacer siempre contratos temporales.

Se trabaja entre seis meses y siete meses y medio en toda la costa, con
algunas excepciones: o contratas en cómputo anual fijo, con lo cual, al
ser la persona fija, puedes darle formación y luego tiene cinco meses de
vacaciones. Se trata de hacer el cómputo anual concentrado en siete meses
y medio y cuatro meses y medio de vacaciones. Ello permite darle
formación y, por tanto, mejorar el servicio o, si no, la contratación
será temporal, porque nadie contrata a un señor fijo sin cómputo anual y
lo va a tener cuatro meses y medio sin trabajar.

El contrato temporal significa que nadie se gasta el dinero en formación
y, por tanto, el personal tiene un nivel de formación muy bajo. Es un
tema clave no sólo para este sector, porque hay otros muchos
estacionales: el del turrón, el del calzado, la moda, el de los juguetes,
etcétera. Hay muchos sectores estacionales donde el cómputo anual es
imprescindible, sobre todo porque la negociación sindical del pasado está
muy viciada por cosas incomprensibles desde el punto de vista de la
productividad. Que haya cadenas hoteleras de playa --yo conozco algunas--
en cuyo convenio se dice que tendrán 15 días de vacaciones en agosto,
significa que dan vacaciones a los empleados



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cuando tienen que trabajar. Son contradicciones vitales con cualquier
concepto de productividad.

Evidentemente, en este sector, como en otros muchos, la política de
defender el salario tiene que ser con mejoras de productividad. Debemos
ser capaces de defender el salario real de los trabajadores, pero,
evidentemente, con mejoras de productividad, que en muchos casos depende
de la organización del trabajo y de la organización de la jornada
laboral, sobre todo en este sector, donde es tan claro y tan evidente.

Por tanto, vamos a trabajar en esa línea. Hemos hablado con los
empresarios, hemos hablado con algunos representantes de los sindicatos y
creemos que es bueno, no sólo para los empresarios, sino para los propios
trabajadores. Si el trabajador valora como prioritario la estabilidad en
el empleo, no va a haber estabilidad en el sector turístico de sol y
playa sin cómputo anual de jornada. Es incompatible.

Ya he dicho que soy partidario de la bajada del IVA para los hoteles de
cinco estrellas. No es competencia de mi Ministerio, pero soy
absolutamente favorable y yo creo que este año será posible conseguirlo.

Para contestar a muchas de las cosas que me han planteado quizá será
mejor que yo les hiciese un recuento de lo que ayer se aprobó en la
Comisión interministerial, porque muchas de ellas se van a abordar en
ella.

Ayer la Comisión interministerial, aparte de reflexionar sobre la
situación del sector, sobre su pasado, su presente y su futuro, sobre sus
puntos fuertes y débiles, que ya conocen ustedes, se planteó el objetivo
de crear un conjunto de comisiones interministeriales que afronten y
planteen soluciones en plazo relativamente breve a algunos de los
problemas planteados. La próxima reunión de la Comisión interministerial
se celebrará en el mes de julio y la siguiente en el mes de octubre. Se
configurará un conjunto de comisiones de trabajo, de las cuales unas
tienen que presentar sus resultados en julio y otras en octubre. Las de
julio son: una primera Comisión con el Ministerio de Obras Públicas que
estudie la situación y prioridades en zonas turísticas relacionadas con
el agua, tanto abastecimiento como depuración; costas; urbanismo y
aeropuertos. Una segunda, de análisis de las enseñanzas turísticas y, por
tanto, con un planteamiento en profundidad de las enseñanzas turísticas
desde el nivel de formación profesional más básico --formación
ocupacional-- hasta la posible formación universitaria en la que en
cualquier caso siempre está integrado el turismo. Estarían integrados
Educación y Trabajo. Y otra tercera de relaciones laborales en el sector
turístico que estudie cuál es el camino de mejora en el campo de las
relaciones laborales.

Se me ha olvidado decirles que a la reunión fue invitado y asistió el
Presidente de la Comisión de Turismo de la CEOE. La voluntad del Gobierno
es que la Comisión sea al mismo tiempo un instrumento de comunicación con
el sector privado y, por lo tanto va a ser invitado de forma continuada
el representante del sector turístico, porque en la Comisión están
integradas todas las asociaciones del sector: los hoteles de ciudad, a
través de la asociación de hoteles; los hoteles de playa, a través de
Zontur; las agencias de viaje minoristas; las mayoristas; los alquileres
de coches; los transportistas de carretera; las empresas de avión
charter; la restauración; los balnearios; las boites y elementos de
diversión nocturna; es decir, todas las asociaciones que forman parte del
sector turístico.

Los grupos que se constituyeron ya ayer pero cuyo informe será para el
mes de octubre, son: el turismo social, todo el programa de turismo
social; el turismo cultural, todo el desarrollo del turismo cultural; el
turismo rural, en el que participa el Ministerio de Agricultura que tiene
fondos comunitarios, sobre todo, a través del programa Leader; una
comisión con el Ministerio de Hacienda de fiscalidad turística y otra
para intentar elaborar, con el Ministerio de Hacienda también, el
presupuesto global turístico de la Administración central. Al turismo van
destinados muchísimos recursos que son infinitamente mayores de los que
tiene la Secretaría General de Turismo porque, evidentemente, el
Ministerio de Obras Públicas dedica a finalidades turísticas, a lo mejor,
diez veces el presupuesto que tiene la Secretaría General. Lo que
queremos es que exista conciencia social del conjunto de recursos que la
Administración central del Estado dedica al sector turístico.

En esa comisión de fiscalidad sería bueno que analizásemos los
planteamientos que ha expresado el señor Sánchez i Llibre sobre la falta
de coincidencia entre figuras turísticas y tipificación fiscal. Nos
gustaría que el señor Sánchez i Llibre nos facilitase algún documento
sobre aspectos técnicos como son los fiscales, porque conviene siempre
más trabajar con un papel que de oídas porque entonces no se localizan ni
identifican los problemas.

Estatuto de Turespaña. Eso requiere mucho tiempo. Yo mantengo la voluntad
de que mi objetivo es conseguir que Turespaña sea una especie de Maison
de France donde participen las comunidades autónomas, el Gobierno central
y los empresarios privados turísticos. Ese es el objetivo, pero eso
requiere un plazo de análisis, de estudio, de qué vía, de qué forma, cómo
se puede cambiar, qué pasos hay que dar, que es amplio y estamos en ello.

Plan Futures. El Secretario General de Turismo tuvo una reunión para
negociar el Plan Futures con el Conseiller Alegre y yo celebré una
primera reunión con el portavoz de su Grupo, señor Roca. Creo que estamos
bien encaminados, pero el asunto no está cerrado. En este momento tenemos
en nuestras manos el tema porque debemos enviar una propuesta concreta,
que haremos en los próximos días.

No tenemos voluntad de traspasar los paradores nacionales. Ya se lo dije
la otra vez y como me insiste en ese asunto, se lo vuelvo a repetir. Es
una sociedad anónima. Creemos que tiene sentido como red, que hay temas
que no tienen sentido si se desmenuzan, que es lo mismo que le voy a
decir sobre el Inserso. Yo no soy el responsable pero sí le voy a
manifestar mi criterio sobre la territorialización del Inserso. Un
programa de tercera edad, si se fracciona por comunidades autónomas, nos
conduce al absurdo. Voy a citar alguna región, no porque me caida bien o
mal, sino porque es pequeña. Es obligar a los pensionistas y a la tercera
edad de La Rioja o de Navarra a que se queden allí porque, si no, a dónde
van y cómo van, cuando lo que quiere la gente precisamente es ir a otras
regiones de España. La mayor parte de la gente quiere ir a otro sitio.

Los



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beneficiados son todas las zonas de costa, porque donde va la gente de
Castilla y León es a la playa. Evidentemente, es un programa cuya
configuración es nacional o no vale como programa. Al margen de temas
competenciales, la propia definición del programa exige un planteamiento
nacional.

Hay paradores en los que aparte de la mejora de gestión que vamos a
llevar a cabo, estamos haciendo un plan estratégico --lo está haciendo
Arthur Andersen-- donde están analizándose todos los datos comparativos
entre paradores y la hostelería española, viendo las correcciones y
medidas de gestión que se tienen que hacer.

También hay un planteamiento estratégico que ya expuse en otra ocasión,
de que hay que diferenciar unos paradores de otros y plantearse en qué
paradores tiene sentido la presencia del Estado y en cuáles no. Ya saben,
«a priori», mi opinión de que no tiene sentido que una empresa pública
esté en paradores de edificios modernos y en playa compitiendo con el
sector privado donde no juega ningún papel. Habría que privatizar los
paradores modernos de playa y que fueran gestionados por el sector
privado en condiciones de competencia con los demás.

Sobre las trabas burocráticas de los rusos, no le puedo contestar con
absoluta precisión pero supongo que se ha resuelto porque como cuando no
está resuelto te llaman todos los días y me han dejado de llamar desde
hace un mes y pico, doy por supuesto que se han resuelto. Tenemos una
presión continua de la empresa que más trabaja en el mercado ruso, que es
Ultramar Express, como le decía antes, con la cual tenemos relaciones
importantes porque es filial del mayor tour-operador mundial, y como me
han dejado de llamar, doy por supuesto que se habrá resuelto.

Ley sobre el time-sharing. El borrador que hizo la Secretaría General de
Turismo se envió a los Ministerios que tienen que ser coproponentes, que
son los de Justicia, por todo lo que implica de contratos y aspectos de
codificación que requiere, y de Sanidad, desde el punto de vista de
defensa del consumidor y del consumo. Yo creo que en este año se podrá
hacer esa ley. Es una ley compleja en cualquier caso, muy importante para
Canarias que es donde tiene un mayor desarrollo el time-sharing, pero
menos importante para el resto de España. El time-sharing está muy
concentrado en España en Canarias y la venta se produce en el mercado
inglés. Los compradores son fundamentalmente ingleses y las zonas donde
se ha promocionado más el time-sharing en España es en Canarias.

Sobre los municipios turísticos, qué le voy a decir. Lo que plantea el
Ministerio de Hacienda es que la Federación Española de Municipios y
Provincias es la que hay, y cuando los municipios turísticos dentro de la
Federación Española de Municipios intentan tener mayor cuota, los que no
son turísticos, no se dejan. Es el planteamiento de siempre. Si tienen
que pagar los propios turistas los costes de los servicios y, por lo
tanto, los municipios tendrían que establecer un impuesto sobre la cama,
sobre el precio del servicio que se cobra o sobre las empresas del sector
turístico de la zona, que no son sólo los hoteles, sino las tiendas y
todo aquel que se beneficia del flujo turístico, o si tienen que pagarlos
todos los españoles aunque su municipio no sea turístico, es un tema que
no se ha resuelto en España razonablemente, cuyo debate sigue abierto y
según quien lo suscita se escuchan planteamientos diferentes.

En cuanto a formación, aparte de que hayamos creado la comisión, porque
requiere un planteamiento interministerial, voy a centrar el problema
sobre todo en el título de técnicos de actividades turísticas. El turismo
es un sector económico, con subsectores que no tienen nada que ver unos
con otros y que, por tanto, requieren formaciones radicalmente
diferentes. La formación que requiere un gestor hotelero no tiene
absolutamente nada que ver con la que requiere un agente de viajes de
turismo emisor. Englobar a todo aquel que tenga que ver con el turismo en
una misma titulación es una cosa bastante absurda. Lo que hoy se plantea
es si tiene sentido la creación de títulos turísticos a nivel de
universidad, o que la gente sea diplomada en Económicas y tenga una
especialización en cuarto y quinto ya en sectores específicos del
turismo: gestión hotelera, gestión de agencia de viajes, gestión del
transporte o en aspectos relacionados con el turismo. Lo que necesita es
un elemento fundamental de formación básica.

El sector turístico español --y lo voy a decir con un término bastante
ilustrativo-- es de primera generación en todos los sentidos. En primer
lugar, tenemos el modelo turístico de lo que fueron los primeros
desarrollos turísticos, gran densidad, con edificios altos en las playas,
que es el modelo de Waikiki y Honolulu en Hawai, Copacabana, Acapulco o
Benidorm --es el modelo más típico en España--, cuando lo que se está
desarrollando hoy es un turismo de segunda generación, que son los
edificios ligados a la naturaleza, no más allá de dos o tres plantas. Hay
incluso países donde está legislado que ningún edificio puede ser más
alto que los árboles que hay alrededor y, por tanto, el límite de la
altura de los edificios es la altura de las palmeras de alrededor, con un
índice de edificabilidad que se mueve entre 1/6 y 1/10, es decir, entre
el 10 y el 15 por ciento del espacio; donde el lujo que se ofrece es el
lujo del espacio libre, de la naturaleza. Nosotros no vamos a poder tener
un turismo de segunda generación, pero tenemos que ir acomodando y
esponjando la oferta, como ya les dije la otra vez --yo creo que en eso
estamos progresando en los posibles programas a realizar, dentro de la
complejidad que requiere cooperación interministerial, sobre todo con el
Ministerio de Obras Públicas--, para ir a caballo y estar a medias entre
un turismo de primera generación y de segunda en ese campo.

Pero, desde el punto de vista de formación, estamos en lo mismo, seguimos
en un turismo de primera generación, de gente que se incorporó al turismo
sin ninguna formación básica y que lo que sabe es lo que ha aprendido con
la práctica, que tiene un nivel de desarrollo que se queda de repente
estancado porque, a partir de un cierto nivel, se necesita una formación
básica que no tiene. Tenemos que ir incorporando gente de la segunda
generación, y lo digo tanto a nivel de empresarios como a nivel de
trabajadores. Tenemos unos empresarios que no eran empresarios turísticos
inicialmente y que han entrado en el turismo como un elemento añadido de
empresarios de construcción, inmobiliarios o de otra serie de cosas. Eso
va a cambiar conforme



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se vayan incorporando los hijos a la gestión, que ya empiezan a tener
formación en el sector turístico. Por tanto, es esperable una mejora
significativa de la gestión en ese segundo nivel, pero también de la
formación de los empleados. Hay un enorme debate sobre cuáles deben ser
los contenidos de la formación para el sector, ya que, insisto, no tiene
nada que ver la gestión de un hotel con un agente de turismo emisor o con
otros muchos.

¿Cuál va a ser nuestra colaboración con el consorcio de promoción
turística de Barcelona? Colaborar y apoyar un consorcio que se ha
formado, que nos parece que incorpora un elemento enormemente positivo, y
es la presencia del sector privado a través de la Cámara de Comercio. La
iniciativa privada en España no tiene hábitos ni ha aportado recursos
para la promoción. Que las cámaras --aunque tengan financiación
parafiscal, la financiación es de los empresarios-- se preocupen por
primera vez de apoyar el desarrollo turístico es muy importante. En el
plan cameral que el Ministro de Comercio tiene que aprobar y que yo firmé
y aprobé el lunes de esta semana, anteayer, uno de los elementos que
hacemos constar en la aprobación de cara al año que viene era la
necesidad de que un porcentaje se dedicase al turismo y que, sobre todo
en las regiones claramente turísticas, las cámaras de comercio
cofinanciasen la promoción turística y se preocupasen del turismo. Me
parecía que era especialmente importante que la Cámara de Barcelona
hubiese sido la primera en dar los primeros pasos en este aspecto.

Al señor Martín quiero decirle que en el sector turístico es evidente que
los protagonistas son los empresarios, pero no es verdad que no haya
ningún protagonismo y, sobre todo, ningún elemento importante por parte
de la Administración pública, que es la que hace todas las inversiones en
infraestructura y la promoción, que tampoco hacen los empresarios
privados. El éxito del sector turístico es un éxito compartido entre el
papel que cumple la iniciativa privada y el que cumplen las
administraciones públicas en el sector. Debemos felicitarnos todos, los
empresarios privados que evidentemente tienen la rentabilidad, y las
administraciones públicas, porque los recursos que hemos empleado tienen
la finalidad social y el reconocimiento para los cuales se han empleado.

Los problemas medioambientales y de masificación son problemas muy
serios, pero ahí usted sabe que no va a contar con nuestra máxima
colaboración, pues las competencias de la Administración central son casi
nulas. Tienen competencia los municipios y las comunidades autónomas, en
tanto en cuanto tienen que aprobar, en la mayor parte de ellas, los
planes de urbanismo de los municipios. Lo que no tiene sentido hoy --y
usted sabe que donde más preocupa es en Canarias, porque es donde hay más
riesgo de que se produzca-- es que, cuando estamos hablando de que hay
que pasar --el pasado, pasado es y ya está hecho, y habrá que ver cómo lo
mejoramos-- a este turismo de segunda generación, que es con el que se
está trabajando en todo el mundo, sigamos masificando y construyendo
nuevas instalaciones que masifican. A mí no me preocupa el pasado, que es
pasado y lo tenemos que asumir como es, pero vamos a ver cómo actuamos
para mejorar. Lo que es alarmante es que los ayuntamientos sigan dando
licencias para contribuir a una mayor masificación. Ese es un problema
alarmante en todos los sentidos porque deteriora el medio ambiente y, por
tanto, perjudica a su propia afluencia turística; incrementa la oferta,
con lo cual desequilibra la oferta y la demanda y los precios se vienen
abajo, y corremos el riesgo de que se vuelva a producir una caída de los
precios por el incremento de la oferta. Por otro lado, hay pueblos que
siguen construyendo sin los servicios necesarios, con lo cual luego las
comunidades autónomas o la Administración central, supletoriamente,
tienen que acudir a resolver los problemas que han generado los
municipios. Es decir, siguen dando licencias sin tener garantizado el
abastecimiento de agua, la depuración de las aguas, ni ninguno de los
servicios básicos, con lo cual luego esos temas, que son competencia de
las comunidades autónomas, o los resuelve la comunidad autónoma o, en
caso de urgente necesidad, como está pasando en gran parte del territorio
español, tiene que ir el Ministerio de Obras Públicas a resolverlo,
aunque no es competencia de la Administración central, porque es el único
que tiene, probablemente, los recursos necesarios para hacerlo.

Quiero decir que es un problema donde la institución que toma la decisión
lo hace irresponsablemente, por decirlo de alguna manera, porque carga
luego los efectos sobre las demás administraciones. En ese sentido, en
todo lo que podamos colaborar las comunidades autónomas y el Gobierno
central a crear una conciencia (la Administración central poco puede
hacer más allá de una presión de creación de conciencia y de militancia
en contra de desmanes de ese estilo y las comunidades autónomas pueden
actuar en la medida en que tienen que aprobar los planes urbanísticos) va
a contar con todo nuestro respaldo para intentar que la nueva oferta que
vayamos construyendo vaya en una línea diferente al pasado.

La seguridad ha mejorado sustancialmente. En la mitad de la década de los
80 era un tema alarmante porque teníamos un índice de reclamaciones de
clientes de tour-operadores muy importante, pero creo que en los últimos
años eso ha caído en picado, hasta el punto de que está comprobado que un
porcentaje de las denuncias que se hacen son para cobrar el seguro que no
corresponden a la realidad. Es gente que denuncia porque tienen seguro y
quieren cobrarlo.

Es verdad que no somos el país más seguro del mundo. En parte, los países
no democráticos en alguna medida son más seguros; Marruecos es más seguro
que nosotros, pero, en cambio, somos mucho más seguros que otros países
democráticos. Por tanto, en competitividad estamos en un buen lugar en
los índices de seguridad, y hay que mantener la vigilancia para que no
caigan esos niveles de seguridad.

Sobre política de costas, ya he hablado que está dentro de la Comisión
que está trabajando. Estamos seguros de que vamos a tener una estrecha
colaboración con el Ministerio de Obras Públicas en la definición de
prioridades en costas, lo mismo que en la política aeroportuaria. Es
verdad que los aeropuertos de Canarias se han quedado pequeños, pero
también sabe S. S. que están en marcha los



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programas de ampliación y desarrollo en los aeropuertos de Canarias,
donde se va a invertir mucho dinero.

En cuanto a telecomunicaciones, es verdad que estamos asistiendo a un
cambio tecnológico importantísimo, lo cual requiere una capacidad
inversora enorme. A corto plazo, vamos a asistir en el sector de
telecomunicaciones, por un lado, a una mayor capacidad inversora por
parte de Telefónica y, por otro lado, a la liberalización que va a
producir el que pueda invertir cualquiera y pueda desarrollar otros
servicios.

Pero seamos conscientes de que la liberalización produce que se invierta
en los canales, en las autopistas, como se las llama ahora, de
telecomunicaciones más rentables. Todo el mundo invertirá en Madrid y
Barcelona, nadie invertirá en la telefonía de los pueblos rurales. La
telefonía rural, si no la cubre Telefónica, no la va a cubrir nadie, y,
en cambio, en Madrid y Barcelona habrá todas las inversiones que se
quiera porque es un segmento rentable, con un grado de utilización muy
grande. Ese es el riesgo que se corre siempre con liberalizaciones no
planificadas o con el fundamentalismo liberal que conduce a que se
mejoran los servicios en unas áreas determinadas pero se abandona en
otras.

La política de transportes, que va a ser una política de mayor
liberalización también, corre el mismo riesgo. En cualquier caso, está
puesta en marcha ya y ya se están estableciendo líneas regulares, no sólo
charters, con los puntos en los que hay más tráfico, como Canarias. Ya
han empezado a operar como línea regular Air Europa y Spanair. Entre
Baleares, Canarias y Barcelona, ligado a Madrid y Barcelona, entre esas
cuatro Comunidades, va a haber un tráfico y una competencia en precios,
ya no sólo en vuelo charter, sino en vuelo regular.

El tema del agua es gravísimo, que se agrava por el crecimiento de una
oferta. Esta es la prioridad número uno que nosotros le hemos planteado
al Ministerio de Obras Públicas: todo el ciclo completo del agua, tanto
el abastecimiento como la depuración. Creemos que hay que hacer un enorme
esfuerzo. El Ministerio de Obras Públicas es consciente de ello. Y afecta
a todas las zonas turísticas: a Mallorca y a Baleares, sobre todo a
Mallorca; a la Costa del Sol, de una manera muy seria; a Benidorm y a
algunas de las Islas Canarias. Por lo tanto, es un problema enorme que
requiere unas grandes inversiones, agravadas además por la sequía en
algunas zonas. Hay zonas, como la Bahía de Cádiz, donde ha habido una
sequía brutal en los últimos años, donde el problema está especialmente
agravado.

En cuanto al incremento de la construcción, ya hemos hablado. Ya saben
que ahí debemos ser capaces de colaborar, con la limitación de las
competencias que tenemos, para forzar a que no se sigan cometiendo
locuras urbanísticas y que seamos capaces entre todos de controlar la
especulación. El problema está en que siempre los ayuntamientos son un
punto débil, sobre el cual es más fácil presionar. Son débiles, en primer
lugar, porque, como tienen siempre unos problemas de financiación porque
dan más servicios de los que son capaces de pagar, si alguien les da el
dinero para pagar la nómina de fin de mes, ésa es la prioridad número
uno. Este es un problema de pan para hoy y hambre para mañana, es una
imposibilidad de planificación a medio plazo. Se toman medidas hoy que
perjudican mañana para poder salir de un agujero o de un problema en el
que se está metido. En segundo lugar, con la calificación del suelo se
produce una plusvalía más notable ya que un terreno pasa de valer diez a
mil, con lo cual sucede como con la droga: que el margen es tan grande
entre lo que cuesta la droga desde que se produce hasta que se vende, que
da dinero para todo el mundo, por lo que es más fácil lógicamente la
corrupción, porque hay más margen y más recursos para ello. Se producen
esos dos efectos, los dos especialmente dañinos y perjudiciales.

Vamos a definir las grandes líneas --en poco tiempo, las concretaremos
muchísimo más-- de políticas muy claras. Para definirlas en cuatro
palabras --no le voy a dedicar más de tres minutos al asunto--, van a ser
políticas de producto y de comercialización, que voy a resumir muy
simplificadamente. Las políticas de producto son obsesión de la calidad
en el producto sol y playa, donde tenemos cuotas de mercado
importantísimas, por encima del 35 por ciento en mercados como el alemán
y el británico; mejora de calidad en el sector de sol y playa, e impulso
al crecimiento en los otros dos mercados emergentes, que son el turismo
de naturaleza y el turismo cultural. Ahí estamos en cuotas muy por debajo
de lo que podemos estar. Tenemos, por lo tanto, que elaborar un producto
«ad hoc», tanto en naturaleza, lo cual significa formación de empresas de
servicios y de personas en ese segmento del turismo de natureleza y del
turismo cultural. Estamos trabajando con el Ministerio de Cultura y con
el Ministerio de Agricultura en esos aspectos, como gestor de Icona que
es en todo el tema de naturaleza, como responsable de las políticas en
casas de labranzas, y con el Ministerio de Cultura en la creación de
producto cultural.

Por otro lado, está la mejora en los sistemas de comercialización. El
hotelero español tiene que tener la información necesaria para negociar,
se la tenemos que proporcionar nosotros porque el coste de la información
es caro. En segundo lugar tiene que perder el miedo, si el precio que le
ofrece el tour-operador no deja margen, ser capaz de comercializar
directamente sin el tour-operador. El porcentaje de gente que viaja por
su cuenta va creciendo frente al que viaja en paquete organizado. Por lo
tanto, hay que decir que hay un margen de gente que viaja por su cuenta.

Desde el seat only en los vuelos charter, a vuelos regulares, o a otros
sistemas de transportes. En las islas todavía el peso del tour-operador
es infinitamente mayor que en la Península, donde el porcentaje que se
comercializa por tour-operador es relativamente pequeño, frente al de las
islas donde es absolutamente mayoritario. Pero también en las islas,
sobre todo en el seat only, cada vez hay más gente que viene por su
cuenta, aprovechándose de las tarifas de los vuelos charter.

Contesto al señor Vázquez, de Izquierda Unida. Ya he hablado de los
documentos, de las discrepancias sobre la EMT y la Secretaría General de
Turismo y de la preocupación de los empresarios por la reestructuración.

El objetivo de nuestro Ministerio es un objetivo muy abierto a los
sectores sociales, tanto a empresarios como a trabajadores.




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Nuestro mensaje obsesivo es el problema de la calidad y la
reestructuración de la oferta necesaria para mantener esa calidad. Sobre
todo, que la rentabilidad y los beneficios de estos años de bonanza sean
reinvertidos en mejora de las instalaciones, con lo cual podamos tener
una oferta competitiva a medio plazo.

Sobre la reapertura de instalaciones obsoletas, ya he hablado también.

¿Cómo van las negociaciones con los sindicatos? No han empezado. Ha
habido unos primeros contactos, pero depende de las regiones. La posición
de los sindicatos de partida es dura, porque es buen año. Si este año
hubiese una crisis tremebunda, probablemente estarían en posiciones más
flexibles. Lo que quiero decir es que los sindicatos, no sólo los
empresarios, deben ser conscientes de que el año bueno no significa que
no haya que reestructurar el mercado laboral y que no haya que ir a lo
que hoy es imprescindible en la fijación salarial: en primer lugar, el
cómputo anual, que es el tema más serio del sector turístico, a cambio
pueden conseguir una mayor estabilidad en el empleo. En segundo lugar,
hay un tema que es imprescindible en la industria, en la empresa y en
todo. Se trata de que proporcionalmente, sin que eso signifique una
desfiguración absoluta, tienen que empezar a crecer y a representar un
mayor porcentaje en el salario los elementos variables sobre los fijos,
es decir, que en un buen año ganan mucho más dinero, pero que sepan que
si el año siguiente es malísimo, habrá una parte del salario que sea
variable, en función del buen año, y que no sea todo salario fijo, que
crea unas rigideces en el sistema que luego hacen imposible que el mal
año sea asumible. Creo que ése es un tema de enorme calado, que no se va
a asumir en un año ni en dos, pero también creo que, inevitablemente, la
competitividad nos llevará a ir en algún porcentaje y en alguna medida
por ese camino. Evidentemente esto no quiere decir --ni lo estoy
planteando-- que el salario variable sea el 50 por ciento y el otro 50
por ciento el salario fijo. Lo que estoy diciendo es que, en alguna
medida, hay que empezar a abordar esos conceptos en porcentajes
razonables.

En el documento que yo traía están todos los datos del Plan Futures, que
se lo vamos a enviar hoy mismo, por lo que van a disponer de dichos
datos.

En turismo social aunque los datos no son, evidentemente, competencia de
mi Ministerio, y la ex Ministra de Asuntos Sociales lo conoce mejor que
yo, en el programa del Inserso de turismo social en este año (no se
pueden dar los datos exactos pero sí más o menos) ha habido unas 320.000
personas que han viajado en el programa general y unas cincuenta y tantas
mil que han ido al programa de balnearios. Los balnearios siguen
existiendo por este programa; de otro modo hubiesen desaparecido en su
mayor parte. Por tanto, el mantenimiento de los balnearios es posible
gracias a este programa, de igual modo que la apertura de los hoteles en
invierno es posible gracias a este programa.

Las asociaciones patronales implicadas en este programa, que son Zontur,
la de agencias de viaje y la de vuelos charter han hecho un estudio en el
cual, ya con unos años de realización del programa, certifican lo que
desde el primer momento era el objetivo del programa: que ahorraba dinero
al Estado, es decir, que el dinero que se dedica a subvención luego se
recauda o se deja de gastar. Es decir, la recaudación que significan el
IVA, el IRPF y los impuestos, por un lado, y lo que se deja de pagar por
seguro de paro, por otro, suponen más dinero que la subvención que se da
a los programas. Por cada peseta que se subvenciona desde el Ministerio
de Asuntos Sociales el Estado o se lo ahorra o recauda un 1,09 pesetas.

Por tanto, lo que era el concepto desde el primer día del programa, que
era un programa que no costaba dinero, se está cumpliendo, lo cual
dificulta todavía más la transferencia a las comunidades, porque las
comunidades gastarían, pero, como no son las que recaudan, no
recaudarían. Por tanto, esto genera un problema todavía mayor en ese
sentido.

Se ha realizado un estudio bastante bien hecho --me parece que ha sido
Price Waterhouse, no estoy seguro-- que si ustedes lo quieren les es
absolutamente accesible y no plantea ningún problema remitírselo.

Respecto al aspecto tecnológico del sistema de regeneración de playas
lamento no poder opinar, porque soy ingeniero industrial no de caminos, y
por tanto de puertos y de esas cosas sé poco (a pesar de ser descendiente
de ingenieros de caminos, ya que mi padre, mi abuelo y mis tíos, todos,
eran ingenieros de caminos y algunos notables porque fueron catedráticos
de la Escuela durante muchos años) y no entiendo de playas. Lo que sí sé
es que el mar es impredecible. Sí he tenido, en mi época de Secretario de
Estado de Deportes, la experiencia de puertos deportivos que se han
construido y que no valen para nada, porque dado el comportamiento del
mar cuando le pones un obstáculo --y estaban hechos por técnicos muy
competentes-- supongo que en algún caso puede haber ocurrido que se haya
llevado la playa. Me consta que en la mayor parte de los casos no ha sido
así, pero bien puede ser que haya habido algún caso, a eso no le puedo
contestar, aparte de no ser tema competencial de mi Ministerio.

En cuanto al señor Artiles, quiero señalarle que queremos hacer una
política extraordinariamente ligada al sector privado. Creo que la
política del Gobierno, cuyo elemento básico y cuyo objetivo número uno es
la creación de empleo, tiene que ser la creación de un marco favorable al
funcionamiento empresarial, que es el que genera el empleo. La
Administración pública tiene un margen de creación de empleo muy escaso
y, por tanto, tiene que ser la empresa privada la que genere el empleo,
en un modelo económico como en el que estamos. Si no, iríamos a un modelo
de país del Este, donde el Estado lo es todo, es el que genera el empleo
y el que lo garantiza. Por tanto, en nuestro sector, específicamente,
estamos en una interrelación muy activa con los empresarios, para ver
cuáles son los problemas que se plantean en el campo del funcionamiento
de la empresa, que permitan mejorar e incrementar el empleo y hacer
posible ese objetivo de que no haya gente en paro o haya la mínima. Este
es un sector especialmente creador de empleo, ya que es intensivo en mano
de obra, por lo que es un sector donde el empleo es muy importante. No
tengo los datos de la evolución del año 1992 y por eso no se los he dado
antes. Sin embargo, los datos de 1993 indican que el sector directa o
indirectamente



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generaba 1.400.000 empleos. Lo que sí sé, a través de informaciones del
Ministerio de Trabajo, es que el sector turístico ha sido el que más ha
puesto en marcha ya, de forma activa, las nuevas formas de contratación y
que, por tanto, es el sector que lidera la generación de nuevos empleos,
utilizando las nuevas formas de contratación.

En cuanto al tema de la coordinación, evidentemente, es básico. Las
competencias del Estado central son escasas y, por tanto, deben generar
una política de sentido común que le dé el liderazgo. Es decir, la
política ha de ser una política no contestable o que sea sólo contestable
desde los intereses particulares de un sector pero no como planteamiento
general. En segundo lugar, ha de estar coordinada con el resto de las
administraciones, sobre todo con unas administraciones en las cuales hay
que intentar un grado de coordinación importante --aunque es muy difícil
conseguirlo-- con los ayuntamientos, que están muy poco profesionalizados
en este sector, excepto algunos municipios especialmente capacitados por
su dimensión en el turismo. Realmente, se lleva uno sorpresas cuando se
va a las ferias turísticas y se ve en algunos de los asistentes,
representantes municipales, la falta de profesionalidad y de
planteamiento serio para ir a una feria. Por lo menos debemos ser capaces
de formarnos, y no sólo eso, sino, inclusive, a las autoridades
municipales o a las personas en los municipios que llevan estos temas,
para una mejor utilización de los recursos públicos que se emplean en el
sector.

La incidencia del mercado laboral en la balanza turística la vamos a
intentar medir a través de esta comisión que se integra en una comisión
interministerial.

El planteamiento que usted hace de la inflación, ya lo he apuntado yo, es
básico. Es decir, España es un país que tiene una extraordinaria
dificultad para contener la inflación. El año pasado, a pesar de ser un
año de crisis y de caída de la demanda interna, ha resultado muy difícil
el control de la inflación, por lo cual, evidentemente, tenemos miedo de
que en un año de repunte como puede ser el año 1994 --como estamos
seguros que va a ser-- haya riesgos de que se dispare la inflación. Por
tanto, es un tema especialmente preocupante. Creo que es uno de los temas
de política económica más preocupantes en este momento, y creo que todos
somos conscientes del efecto pernicioso de la inflación, en todos los
aspectos: desde que devalúa las rentas de las personas más desfavorecidas
a que nos elimina competitividad frente a países terceros. Es decir, en
el marco de la Unión Europea y la OCDE nosotros no podemos hacer
políticas de devaluación competitiva, donde cada día se devalúe 15
céntimos, como hacen Méjico o Venezuela. Son políticas absolutamente
prohibidas y que no podemos hacer. Por tanto, quiere decir que hay que
mantener una competitividad con una estabilidad en la inflación y siendo
capaz de ajustar la inflación a la de los países competidores.

El tema de los créditos hipotecarios es un tema muy demandado por el
sector. Yo no sé evaluar en estos momentos los resultados, pero supongo
que son muy positivos. En las reuniones que he tenido con empresarios,
sobre todo con los empresarios inversores, no los que son simplemente
gestores de los hoteles, he podido ver que es un tema importantísimo para
ellos. Tenían hipotecas del 15 al 16 por ciento, y las hipotecas hoy
están al 9 y pico o incluso por debajo. Por tanto, la caída de cinco
puntos en un crédito hipotecario es un elemento básico en la rentabilidad
de la inversión y seguro que va a tener un efecto muy positivo.

Nada más y muchas gracias a todos. Estoy a su disposición.




El señor PRESIDENTE: ¿Los grupos desean hacer un segundo turno de
intervención? (Pausa.) En representación del Grupo Parlamentario Popular,
tiene la palabra el señor Aguirre.




El señor AGUIRRE RODRIGUEZ: Lo que era una comparecencia para valorar el
ejercicio de 1993 al final ha derivado en una comparecencia casi sobre el
carácter estructural del turismo, y hemos podido escuchar que se liga el
año de bonanza del turismo a lo que alguien viene a llamar año de repunte
o de primavera económica. Yo realmente no comparto esas afirmaciones de
año de repunte ni de primavera económica si tenemos presente el nivel de
deuda que tiene España, que es insostenible, si tenemos presente la tasa
de paro lacerante, que dobla la media europea, y si tenemos presente la
dimensión de nuestro déficit público absolutamente fuera de control. Ya
sabemos que el debate está entre los que creen que éste es un año de
recuperación y los que creemos, por desgracia basándonos en los datos que
acaba de anunciar, que no es un año de recuperación y que exclusivamente
será el sector del turismo el que tenga indicadores favorables, pero
indicadores favorables, señor Ministro, que no hay que ocultar que se
deben a tres razones de carácter externo: por un lado, la recuperación
económica de los países emisores; por otro lado, lo que usted ha venido a
definir muy bien, como que España se ha convertido en un destino refugio,
habida cuenta de las situaciones bélicas o de conflictividad social que
tienen nuestros competidores en la cuenca del Mediterráneo
fundamentalmente; y el tercer origen de este período de bonanza son las
devaluaciones que nos hemos visto obligados a hacer después de los
períodos de tormentas monetarias.

Me resulta preocupante, no grave (aunque el término de grave es un
término que no me gusta utilizar) que el señor Ministro no sepa si la red
de paradores ha enviado o no al Tribunal de Cuentas sus balances. Me
satisface que vayamos a recibir por fin los números relativos al Plan
Futures, sobre todo de los ejercicios 1992-93, reiterados por este
portavoz en su anterior comparecencia del 27 de octubre, que no ha tenido
ningún éxito y que confío que lo tenga en esta ocasión.

Anoto también con satisfacción que diga usted, señor Ministro, que en
este año van a corregir el tipo impositivo de los hoteles de cinco
estrellas. Me gustaría escuchar lo mismo, si va a correr la misma suerte
el tipo impositivo del transporte aéreo a las Islas Baleares, que, como
sabe usted, es un tema que afecta de manera importante a este destino
turístico, líder entre los destinos turísticos españoles.




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Me resulta también preocupante que estemos todavía redactando un plan
estratégico en el campo de la red de paradores, sobre todo cuando anoto
que la dimensión del departamento central de paradores en el año 1982
tenía exclusivamente 80 empleados --si mis datos son correctos-- y en
este año 1994 ha pasado aproximadamente a 300 empleados; concretamente,
no entiendo a qué se dedican ni cómo se ha producido esta inflación de
empleados, habida cuenta de que fundamentalmente esta central tiene
misiones de comercialización y que es la informática y las nuevas
tecnologías las que soportan, con acierto o desacierto, estos mecanismos.

En cualquier caso, nos gustaría conocer con exactitud el contenido y los
acuerdos de la primera reunión de la Comisión interministerial y que nos
mantenga informados de una manera puntual. No vamos a entrar ahora en
hacer un debate estructural, porque no nos parece que es el punto del
orden del día para el que se nos había convocado, y, por tanto, dejaremos
para otros trámites parlamentarios un debate más amplio al que hemos
asistido.




El señor PRESIDENTE: Por el Grupo Parlamentario Catalán (Convergència i
Unió) tiene la palabra el señor Sánchez i Llibre.




El señor SANCHEZ I LLIBRE: Quiero expresar mi satisfacción porque el
señor Ministro nos ha desvelado una serie de dudas en sus respuestas a
las intervenciones de los diferentes portavoces. En primer lugar, es
importante que no existan estadísticas por parte de la Organización
Mundial de Turismo y que haya sido un error por una serie de
informaciones que se dieron entre dicha Organización y algunos
periodistas de diferentes medios de comunicación, que la información que
apareció en algún medio de comunicación no responda a la realidad y que
los datos que en su momento ha ido dando la Secretaría General de Turismo
sean los datos reales y eficaces y que nos dan la valoración importante
del turismo en el año 1993 y las previsiones del año 1994.

También quiero mostrar mi satisfacción por el reconocimiento que ha hecho
el señor Ministro del papel que han jugado las comunidades autónomas en
el desarrollo turístico en todo el territorio español. Pienso que es muy
importante que por parte de su Ministerio y de la Comisión
interministerial que se ha creado en los diferentes departamentos del
Gobierno exista la firme voluntad de establecer o poner en marcha la
reforma laboral en el sector turístico. Entendemos que esto va a ser
importante y que lo van a agradecer todos los sectores.

Por otro lado, también quiero expresar mi satisfacción por las
informaciones que el señor Ministro nos ha dado desde el punto de vista
fiscal. Será importante que exista esta rebaja en los hoteles de cinco
estrellas en cuanto al tipo impositivo. Entendemos que esto va a
beneficiar la competitividad y la calidad de los servicios que prestan
estos hoteles, que creemos que es muy importante. Y, por descontado,
quiero agradecer al señor Ministro la posibilidad de que le podamos
mandar un escrito explicando las diferencias que pudieran existir entre
las denominaciones de las comunidades autónomas en cuanto a figuras
turísticas y los epígrafes fiscales de las mismas figuras impositivas.

Rápidamente tomamos nota de lo que el señor Ministro ha pedido y se lo
vamos a enviar con la mayor brevedad posible.

Quiero felicitar a su Ministerio también por la puesta en marcha de la
Comisión interministerial, con la que, según nos ha explicado, entendemos
que se podrán resolver muchos temas que tenía planteados su Ministerio
relacionados con otros departamentos. Respecto a la posibilidad de que
Turespaña pueda transformarse en lo que hoy es La Maison de France, en la
que están representados todos los agentes sociales y todas las diferentes
administraciones, entendemos que si este proyecto se pusiera en marcha en
nuestro país, realmente beneficiaría la promoción turística de España en
el exterior, pues la coordinación en la participación de las comunidades
autónomas, que son las que realmente tienen el turismo más a mano, podría
beneficiar a la hora de escoger los mercados y el tipo de productos
turísticos que se han de promocionar en el exterior.

En cuanto a su contestación sobre los paradores nacionales, también
quiero expresar mi satisfacción en el sentido de que cabe la posibilidad
de que en un futuro próximo, a la vista de los resultados que están en
estos momentos complementando una auditoría importante, exista la
posibilidad de privatizar algunos paradores nacionales. Quiero plantearle
--quizá yo no me he expresado bien en mi intervención-- que yo ya he
reivindicado el traspaso de los paradores nacionales, pero también he
incorporado alguna cuestión novedosa respecto a mi intervención anterior,
que era la posibilidad de que las comunidades autónomas pudieran
participar en los consejos de administración de estas sociedades anónimas
de paradores nacionales. Entendemos que esto también iría en beneficio de
una mayor competitividad y una mayor calidad y servicio dentro del tejido
turístico del Estado español. En cuanto a la formación --he tomado nota
de las posibilidades y de los estudios que está haciendo su
departamento-- quisiera saber si será realidad en breve el registro de
títulos de actividades económicas y turísticas, cuya puesta en marcha ya
dijo en su anterior intervención que su departamento la estaba ultimando.




El señor PRESIDENTE: Por el Grupo Parlamentario de Coalición Canaria,
tiene la palabra el señor Martín Menis.




El señor MARTIN MENIS: Quisiera aclarar dos cuestiones. Cuando decía que
la bonanza no era un éxito nuestro no me refería a que no fuera un éxito
de las administraciones. Yo creo que no es un éxito ni de las
administraciones ni de los empresarios. ¿Por qué digo esto? Porque hay
cierta tendencia a decir que el éxito es consecuencia de nuestro
esfuerzo, pero todos sabemos lo que nos han favorecido las circunstancias
internacionales, y sobre todo los ayuntamientos tienen tendencia, en
época de bonanza y con una ocupación total, a decir que lo han hecho muy
bien, y no se sigue haciendo el esfuerzo en servicios que son
auténticamente necesarios. Debemos llevar a la



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conciencia de todo el mundo que hay que hacer un gran esfuerzo, sobre
todo en este momento de bonanza económica. De ahí la tendencia entre las
administraciones, pero sobre todo la que está más cerca, la que vive el
problema, cuando le contaban todos los días qué hotel no se ocupaba. En
este momento se encuentran con los hoteles al cien por cien, con unos
hoteleros, como decía antes el Ministro, que están pletóricos de moral, y
luego no se hace un esfuerzo por mejorar los servicios, en cosas tan
sencillas como aumentar una tasa de basura y mejorar el grado de
limpieza. En épocas difíciles era más complicado elevar la tasa. En este
momento el mercado lo permite y tendríamos que mejorarlo. Hay municipios
turísticos donde no se recoge el domingo, cuando se sabe que se produce
basura todos los días de la semana. Como expresión general debemos
adjudicar el éxito más al exterior que a nuestro pueblo para seguir
haciendo el esfuerzo.

Me alegro mucho oír que se han abierto comisiones en ese órgano
interministerial. Me parece que son correctas. Espero que podamos ver los
resultados. Pediría al Ministro, si hay oportunidad, que se puedan dar
los resultados en esta Comisión. Quizás en algunos casos se puedan añadir
algún tipo de objetivos o la fijación de calendarios, porque hay cosas
importantes donde se están haciendo esfuerzos, como por ejemplo en
aeropuertos. Pero lo que me preocupa es el calendario, porque éste suele
estar muy por detrás de los acontecimientos. Se pueden llevar a cabo
acciones especiales, como hemos demostrado en nuestro país que hemos sido
capaces de hacerlo para resolver infraestructuras importantes en la Expo
o en las Olimpiadas. Hay que hacer esfuerzos de ese tipo, concentrando
gestión puntual en un momento determinado, porque quizá lo que se
necesita resolver no sea el problema financiero sino el de gestión para
que podamos ponernos por delante de los acontecimientos.

Hay dos cuestiones muy difíciles que quedan sin resolver y que están muy
ligadas a los municipios: la masificación y el control del suelo urbano,
es decir el control de la construcción y el esponjamiento en aquellas
zonas de primera generación excesivamente masificadas. Si lo basamos todo
en la esperanza de que los ayuntamientos lo controlen o que ese
esponjamiento sea un fenómeno natural, creo que es francamente difícil.

Cuando estamos tratando de calificar nuevos suelos se producen ese tipo
de presiones especulativas, pero hay un mecanismo y es que la comunidad
autónoma, al final, es la que aprueba el planteamiento y ahí hay
posibilidades de detener ese fenómeno. En nuestro país hay miles de camas
o de terrenos calificados con la urbanización realizada, con aceras, con
asfalto, con las condiciones que establece la Ley del Suelo para que sea
una parcela urbana. El acto de dar una licencia no es un acto potestativo
del ayuntamiento, es un acto reglado, porque estamos en un Estado de
Derecho. La única forma de descalificar es indemnizar, y los
ayuntamientos no tienen capacidad de indemnizar para rebajar esa
calificación. Tendrían que pensar en algunas medidas entre todas las
administraciones, algunas legislativas, otras económicas.

En el caso de la masificación, pasa lo mismo. Para poder esponjar habrá
que buscar medidas fiscales para ayudar a aquellos empresarios que sean
capaces de comprar un hotel antiguo y viejo, derribarlo y convertirlo en
una parcela o construirlo entre la administración y los empresarios.

Habrá que buscar medidas laborales porque hay hoteles de ese tipo que
tienen plantillas muy antiguas con grandes problemas, y uno de ellos es
buscar una fórmula para resolver el problema de esas personas. Hay
problemas puramente urbanísticos que los tiene que resolver el
ayuntamiento. En el proceso de esponjamiento lo que se ha intentado hacer
simplemente calificando o descalificando, por ejemplo, alturas por medio
de un plan general, al final ocurre que ni se tiran. Con ese proceso
sencillo de decir: le quitamos dos plantas a toda la edificación, luego
sucede que no renueva la planta porque el edificio que le sustituye va a
tener menos edificación que el actual. El resultado es que después de
varios años los edificios están en la misma situación y en algunos casos
en una auténtica ruina en esas zonas antiguas de primera generación.

En los casos del suelo urbano, es fácil que en Canarias se tengan en este
momento terrenos calificados con todas las condiciones para empezar a
construir por encima de las 200.000 camas. Es un problema que está
planteado y que los ayuntamientos no van a resolver por sí solos. Es
indudable que después de las penurias que se pasaron con la crisis, el
sector empresarial está remiso, pero también es verdad, como decía el
Ministro, que varios años de bonanza económica puede que hagan que se
pierda ese grado de tranquilidad y de cierta mesura. Habría que
profundizar en fórmulas para ello, aun cuando queda claro que la
responsabilidad es municipal, porque además se la da directamente la
Constitución, pero habrá que arbitrar sistemas y ayudas si queremos
resolverlo en el futuro.




El señor PRESIDENTE: Por el Grupo Parlamentario de Izquierda
Unida-Iniciativa per Catalunya, tiene la palabra el señor Vázquez.




El señor VAZQUEZ ROMERO: De forma breve quisiera hacer algún comentario a
las explicaciones del señor Ministro.

Acepto la explicación que ha dado respecto a la contradicción de datos
entre la OMT y el Ministerio.

Respecto al problema de la relación empresarios-sindicatos y al cómputo
anual de jornada, sería deseable que no estuviera ligado obligatoriamente
o en el mismo saco --aunque sea apartarnos del objeto de la
comparecencia-- que las cuotas de parte variable del salario y de parte
fija, sobre todo porque seguro que usted conoce bien y la experiencia
demuestra que cuando las cosas van bien la parte variable del salario
tampoco tiene que ser muy alta para que el empresario siga ganando dinero
y sea un buen año para él y, sin embargo, cuando el año venga malo
volverá a ser la parte variable la que seguirá siendo baja. No es por esa
vía por la que se pueden resolver los problemas laborales del sector.

Por otra parte, aceptando ese cómputo anual de jornada, la reforma
laboral ya en vigor en nuestro país va a generar



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no pocas situaciones, no sé si pintorescas, pero en cualquier caso
dramáticas para muchas personas que van a ver cómo acaba su contrato
laboral y son recontratadas con contratos de aprendizajes para hacer
prácticamente el mismo trabajo que estaban haciendo y van a estar hasta
los 28 años siendo aprendiz de camarero, cuando a lo mejor estaban
haciendo ese trabajo desde hace bastante tiempo. Se trata de que en esa
dirección de liberalizar el sector transportes, el sector comunicaciones,
prácticamente todo, también el mercado laboral, exista una coherencia en
una línea, lo cual no quiere decir que sea compatible en ningún caso,
desde mi punto de vista. Que conste que frente a ese modelo ultraliberal
que usted propone en su exposición --si no ultra, quite lo de ultra, sólo
liberal, y no hago de eso ningún juicio de valor, simplemente lo
describo-- no oponemos un modelo estatalista que controle todo, pero
entre ese blanco y el otro negro, hay una banda de grises en la que están
mejor defendidos los intereses de la mayoría de los ciudadanos. Pero ése
es tema de otro debate.

Dice usted que no sabe nada de playas, que es usted Ingeniero Industrial
y no de Caminos. Yo tampoco soy Ingeniero de Caminos ni ha habido en mi
familia ningún Ingeniero de Caminos, pero a poco que uno quiera saber
algo de playas hay documentos a los que se tiene acceso, que circulan
libremente, elaborados por prestigiosas organizaciones ecologistas que
hablan, por ejemplo --y es un tema que tampoco tiene que ver
estrictamente con la comparecencia--, de la deforestación de los bosques
de posición oceánica, de donde se extrae arena, que lo que hace es no
mantener la arena del fondo marina y cuando viene un temporal esa arena
se va y no puede volver a ser utilizada, etcétera. Eso no es competencia
de su Ministerio, como usted bien dice, y no tiene por qué saberlo. Y
efectivamente el mar es impredecible pero hasta un punto, como las
conductas humanas y los designios del Señor, que serán inescrutables,
pero en alguna parte escrutables sí pueden ser.

El esponjamiento de la oferta como desiderátum está muy bien, pero en
muchos municipios turísticos, que usted conoce tan bien como yo, de su
zona de origen y mi zona de procedencia también, no solamente no se está
esponjando la oferta, sino que se siguen construyendo edificios por
encima de los 30 pisos. En Benidorm, por ejemplo, varios actualmente
están en construcción por encima de los 35 pisos. Curiosa forma de
esponjar la oferta. No sé si en Baleares --usted en la otra comparecencia
habló del plan de esponjamiento de instalaciones obsoletas-- se lleva más
adelantado. Sinceramente no lo conozco. Desde luego, en la zona que mejor
conozco ese esponjamiento no se está produciendo, sino más bien lo
contrario, se sigue comprimiendo la oferta. No tengo mucha confianza en
que dejado a la libre iniciativa empresarial --sinceramente no la
tengo--, se puedan aprovechar estos años de bonanzas para reestructurar
la oferta para que a medio plazo no se nos vuelvan cañas las lanzas o al
revés, porque no forma parte de nuestro acuerdo cultural para nada, ni
tampoco se genera demasiado desde su Gobierno, el tener una mínima
capacidad de planificación de las cosas a unos cuantos años vista.

Estamos muy habituados en nuestro país, en nuestra cultura, a pensar de
hoy para mañana y cuando hoy la cosa va bien, el carro suena, adelante
con él. Pero no tenemos habitualmente mucha capacidad para planificar lo
que pasará dentro de 10 ó 15 años.

Confía usted en que la gestión del sector hotelero turístico mejore con
la llegada de los hijos, que saben más de economía y de gestión de
empresa que los padres, que venían de otros sectores y a veces muy
alejados del turismo. Puede que también confíe en que los hijos, con una
mejor preparación cualitativa, mejoren la gestión, pero me parece que
serían necesarias, en esa banda de grises a la que me refería antes,
acciones desde la Administración para hacer posible todo eso, no dejarlo
exclusivamente al libre laissez faire, laissez passer. En cualquier caso,
espero que se nos envíe esa auditoría de Price Waterhouse sobre el
turismo social, el turismo del Inserso, que por otra parte demuestra, si
son correctos los datos que usted ha dado, cómo una buena gestión desde
la Administración pública puede favorecer, promoviendo actividades de
ocio, a gente de bajo poder adquisitivo y, al mismo tiempo, no ser un
coste excesivo para el Estado, sino al contrario, el Estado salir
beneficiado en esa doble dirección, lo que estaría un poco en
contradicción con tanto liberalismo absoluto.




El señor PRESIDENTE: En nombre del Grupo Parlamentario Socialista tiene
la palabra el señor Artiles.




El señor ARTILES BOLAÑOS: Tal como manifesté antes, quiero agradecer la
información que se ha dado en la réplica, sobre todo de algo que creo que
es un hito importante en la política turística integral y autónoma de la
que hablaba antes, la puesta en marcha y el peso político y económico de
trascendencia que se ha dado a la constitución ayer de la Comisión
interministerial, de la que esperamos resultados beneficiosos para el
sector turístico, de ahí que me sume a la voluntad de cooperación y mutua
información de sus trabajos.

Respecto a la información --que se ha comentado aquí-- yo he de
manifestar --y creo que el resto también-- que cuando la he necesitado
nunca se me ha negado, sobre todo publicaciones, etcétera. Yo creo que
más que por la información en sí, el tema viene por la periodicidad y los
sistemas de inmediatez en la llegada. Todo lo que vaya en esa línea es
bueno y, sobre todo, ayuda al intercambio de información. Por otro lado,
hoy mismo han quedado fuera una serie de aspectos y compromisos como la
auditoría en el sector de paradores y el plan de viabilidad, que sería
interesante conocer, e igualmente la realizada sobre el turismo social.

Creo que es confirmadora de la importancia de una política como la
seguida en turismo social y la relevancia de lo que venimos diciendo a la
hora de mantener una política integral de turismo que, obviamente, cada
una de las comunidades autónomas, las corporaciones locales y el sector
empresarial tienen perfecta autonomía para realizarla, pero es necesario
también que se reconozca la necesidad de una política integral desde el
Gobierno de España en sectores estratégicos fundamentales, que inciden
tanto en una política social como fundamentalmente en una política
económica, que es lo que



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deseamos, creando empleo y rehabilitando sectores, como se ha
manifestado, como el del termalismo, que si no hubiese sido por la
apuesta imaginativa del turismo social no hubiera tenido éxito.

Por otro lado, me agrada sobremanera coincidir con el señor Ministro --y
le apoyo en su obsesión por la calidad del producto turístico-- en
ámbitos como las comunidades autónomas, las corporaciones locales (la
apuesta en Canarias por los planes insulares de ordenación urbanística y
del territorio) que hayan apostado por la calidad turística como un
elemento fundamental para entrar de lleno y recuperar eso que usted ha
manifestado de la segunda generación; segunda generación que no es sólo
un modelo tecnológico más adaptado a los tiempos de gestión y de mejora
urbanística, sino que es también una apuesta de por dónde va a ir el
futuro del turismo. El futuro turístico camina hacia senderos más verdes,
urbanísticamente más integrados y de más calidad. Por ello creo que en
esa línea es trascendental e importante el hecho de que esa obsesión por
la calidad sea compartida y, obviamente, sea comunicada al resto de los
sectores.

Es importante también, sobre todo en estos momentos de liberalización del
transporte, de las comunicaciones, que la apuesta por la comercialización
sea algo que lleve de lleno a coordinar y a marcar hitos considerables en
la política que va a llevar su Ministerio.

Nos alegra igualmente conocer la voluntad de incidir en el sector del
time sharing. Creo que es importante una cierta regulación en el mercado
de lo recomendado ya por el Parlamento Europeo, adaptado a nuestras
particulares circunstancias, y que ha de ser tenido en cuenta.

Por último, quiero reiterar mi agradecimiento por mantener una voluntad
turística integral coordinada y que beneficie el restablecimiento de la
economía. Cuando hablaba de primavera económica en el sector turístico me
remitía simplemente a hechos históricos como el incremento del año 1993
--que es un dato constatado y constatable ya, obviamente está ahí-- y a
unas previsiones sobre el crecimiento, que yo estimo conservador, en el
sentido de que es un cuatro por ciento. Sesenta millones de turistas para
el año 1994 es un dato que me ayuda a reconocer que en este sector hay
movimiento, afortunadamente.

El señor Ministro ha revelado como datos turísticos (son datos que quizá
todos tengamos) el de las llamadas por teléfono y el de las quejas
recibidas. La euforia manifestada, como ha dicho el señor Ministro, tanto
por los empresarios como por los sectores de los grandes tour-operadores,
es prueba evidente de que no debemos dormirnos en los laureles en esta
etapa que se inicia de bonanza económica. Por ello apostamos por la
continuidad del plan Futures y de los aspectos estructurales que inciden
en una política turística autónoma y de desarrollo sostenible y
continuado, pero es bueno reconocer la evidencia de que turísticamente
estamos ante un año importante y muy bueno, como ha manifestado el señor
Ministro, de lo que me alegro no sólo como socialista sino como español y
como europeo.




El señor PRESIDENTE: Para una última intervención, tiene la palabra don
Javier Gómez-Navarro, Ministro de Comercio y Turismo.




El señor MINISTRO DE COMERCIO Y TURISMO (Gómez-Navarro Navarrete): Señor
Aguirre, alégrese usted de lo bueno. Es evidente que nuestro país no está
en una fase de esplendor económico; es evidente y nadie lo niega. Es
evidente que nuestro país tiene problemas; como es bien sabido, el más
grave el paro, el más grave, porque el paro genera crecimiento del
déficit. El derecho subjetivo de cobrar el desempleo genera un gasto que
no controla el Gobierno, ni lo puede controlar, en tanto que todo aquel
que está en paro tiene derecho a cobrar el desempleo y eso incrementa la
deuda. Por tanto, los tres aspectos están muy ligados. El déficit hay que
financiarlo con deuda y por ello nuestro problema es el paro. Es decir,
si tuviésemos mucha más gente empleada el déficit sería muchísimo menor y
no se incrementaría la deuda. Por eso las políticas tienen que ir
encaminadas a luchar precisamente contra el paro y a buscar el entorno
favorable del funcionamiento de la empresa que cree empleo y que genere
actividad económica.

Pero no todos los datos son malos, señor Aguirre; los datos turísticos
son buenos, y no por tratarse de mi Ministerio voy a decir que todos los
datos del comercio exterior son buenos. No sólo han sido buenos los datos
del año 1993, en que las exportaciones han crecido un 20 por ciento y
hemos reducido el déficit en un 35 por ciento, sino que los datos de
enero de 1994 son espectacularmente buenos. Las exportaciones han crecido
por encima del 50 por ciento. Hemos tenido, por primera vez desde que
entramos en la Comunidad, superávit comercial con la Comunidad Europea. Y
es previsible --todavía no conocemos la balanza de servicios-- que
tengamos, por primera vez en un mes de invierno, equilibrada la balanza
por cuenta corriente. En verano siempre hay meses buenos porque la
afluencia turística de verano compensa la balanza, pero en un mes de
invierno como es el mes de enero vamos a tener unos buenos datos
comerciales. Las importaciones han crecido un 24 por ciento, lo cual
--todavía no tenemos el desglose de las importaciones--, si fuesen bienes
de equipo o productos intermedios, quiere decir que se está recuperando
la actividad económica; si no fuesen básicamente bienes de consumo, sería
un indicador de que ya hay elementos para pensar que estamos en el camino
de la recuperación. No hay que lanzar las campanas al vuelo, pero son
unos buenos datos que hay que reconocer; es decir, que éstos son buenos
datos frente a otros que evidentemente son negativos.

Ha dicho usted que todo se debe a la bonanza de los países emisores. No
estoy de acuerdo. Es verdad en el caso inglés, pero no es verdad en el
caso alemán ni en el francés; por tanto, eso hay que matizarlo mucho.

Me dice el Secretario General, en una nota, que se ha enviado al Tribunal
de Cuentas todo lo que ha solicitado. Permítame que le diga que no le
preocupe el que yo no esté enterado de si una empresa, que ni siquiera es
propiedad de mi Ministerio, porque nosotros somos Ministerio de tutela
--es propiedad de la Dirección General del Patrimonio y,



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por tanto, del Ministerio de Hacienda--, ha enviado o no los balances al
Tribunal de Cuentas. Yo supongo que los gestores, que están para eso,
cumplen con su obligación y envían los papeles que tienen que enviar.

Pero si usted me pregunta si lo sé, no se lo puedo asegurar, porque no lo
sé; puedo preguntarlo y contestarle mañana, pero hoy no lo sé.

Respecto al tipo impositivo de cinco estrellas, yo no he adquirido ningún
compromiso, no soy quién para adquirirlo, es un tema responsabilidad del
Ministerio de Hacienda. Sí le puedo decir, en primer lugar, que soy
partidario de la rebaja y que voy a luchar por ella y, en segundo lugar,
que creo que este año es posible que se consiga. El año pasado, el
Ministerio de Hacienda no se oponía a esta rebaja más que por motivos
estético-políticos, no por motivos de fondo. El Ministerio de Hacienda
consideraba que había una contradicción demasiado fuerte entre hacer
pagar impuestos sobre el seguro de desempleo y rebajar los impuestos a
hoteles de lujo, que era un elemento difícilmente compatible en unos
mismos Presupuestos Generales del Estado. Como este año no se plantea ese
asunto, le puedo decir que espero que consigamos ese objetivo, que yo
creo que es bueno para este país. No lo hago en defensa de los que ocupan
las habitaciones de los hoteles de lujo. Creo que a lo que está
conduciendo, efectivamente --no es el único motivo, pero es uno de
ellos--, es a impulsar la rebaja de la categoría de los hoteles o de
instituciones de prestigio, que tiene un efecto de exhibición sobre el
sector turístico.

No me parece nada preocupante que estemos elaborando un plan estratégico.

Todas las empresas lo elaboran y se actualiza periódicamente. El revisar
cómo está funcionando una empresa periódicamente y medir su
competitividad en todos los aspectos me parece que es un elemento
extraordinariamente positivo. Yo creo que, al revés, no se deberían negar
a que lo estemos haciendo. A lo mejor podría decir que es un poco tarde y
que lo podríamos haber hecho antes, pero yo lo estoy haciendo cuando me
he hecho cargo de este Ministerio. Creo que va a ser un informe
enormemente positivo para mejorar la gestión de los paradores. Una de
nuestras preocupaciones, de acuerdo con los datos que ya tenemos del
informe de plan estratégico, es el crecimiento del personal en las
oficinas centrales, pero sí le tengo que decir que tampoco es el que
usted dice. Ha pasado de 80 a 165 personas, no a 300; es la mitad, lo
cual no quiere decir que no sea preocupante. Comparto la preocupación con
usted, pero en los términos reales.

Les vamos a mantener informados del funcionamiento de la Comisión
interministerial, evidentemente; no se preocupen por eso. Me dice también
el Secretario General de Turismo que los envíos se han hecho, por error,
a los portavoces de los grupos parlamentarios, no a los de esta Comisión,
y que se corregirá el error. Es probable que sus portavoces
parlamentarios no les hayan transmitido la información. A los portavoces
de los grupos parlamentarios se les ha enviado información sobre
diciembre de 1993 y del año 93 completo, y el viernes pasado se han
enviado ejemplares a todos los miembros de las Comisiones de Comercio y
Turismo, del Congreso y del Senado, con los datos de enero de 1994. En
cualquier caso, ya les he dicho que me hago responsable personal de que
les llegue esta documentación a todos ustedes. Si quisiéramos ocultar
información, podrían pensar que existían trampas en este sentido. Pero
como no la queremos ocultar, es pública y aparece en los periódicos, no
tiene ningún sentido que, por problemas de malentendidos o burocráticos,
no estemos informándoles.

Al señor Sánchez i Llibre le tengo que decir lo mismo sobre el tema de
las cinco estrellas. Yo no puedo adquirir un compromiso porque no soy
quién para adquirirlo, pero sí transmitiré mi voluntad de que ese tema se
resuelva.

Agradezco muchísimo el matiz y el cambio de posición que puede implicar,
sobre paradores, el aceptar que no es sólo la reclamación del traspaso
sino la posibilidad de participar en el consejo de administración, que es
un campo en el que podemos trabajar y que ofrece más posibilidades que el
otro, aunque ya le aseguro que no vamos a tener acuerdo. Tampoco me
comprometo a nada, pero sí a que estudiemos esa posibilidad con el
Ministerio de Hacienda, que es el responsable porque es el propietario.

Nosotros somos el Ministerio de tutela, no el propietario.

Sobre el registro de títulos hay ya una propuesta concreta de la
Secretaría General de Turismo que está estudiando la Abogacía del Estado.

Por tanto, esperamos que en corto plazo se pueda llevar a cabo.

Al señor Martín debo decirle que la reflexión de fondo es que nos queda
muchísimo por hacer, muchísimo. Por tanto, hay que continuar con un gran
esfuerzo. Y nos queda muchísimo a todos, a las administraciones y a los
empresarios, lo cual no quiere decir que algo no se haya hecho. En cuanto
a por qué el año 1993 había sido bueno y por qué el año 1994 iba a ser
bueno, yo he planteado tres elementos: la devaluación, el mercado
exterior y el reconocimiento, por parte de los visitantes, de un mayor
grado de satisfacción por las mejoras que se están haciendo; lo que no
quiere decir que no quede un amplio camino por recorrer. Nos queda un
campo amplísimo por recorrer, a los empresarios y a las administraciones.

A las administraciones para gestionar más eficientemente los recursos que
tenemos en el turismo, para coordinarnos mejor, para ser capaces de
compartir políticas turísticas que al final pueden tener resultados
eficaces; y a los empresarios para mejorar los servicios, las
instalaciones, los equipamientos y todo lo que es su responsabilidad. En
la medida en que la bonanza va a generar beneficios, les va a permitir
tener recursos para hacerlo. Hasta ahora podían estar justificados en
estos años malos en que no tenían dinero para hacerlo, ahora van a tener
mucha menos justificación para no hacerlo porque van a poder.

Los municipios son tema clave en el asunto. Usted tiene razón en lo que
dice, pero, al mismo tiempo, aunque el plan urbanístico esté hecho, hay
más posibilidades de actuar ahí que donde ya está construido, y tendremos
que ver cómo somos capaces de trabajar juntos en ese aspecto, que es
especialmente alarmante en Canarias. No es que no ocurra en otras
regiones, pero es especialmente alarmante en Canarias porque hay un
elemento fundamental, que Canarias es probablemente el primer paraíso
mundial del



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turismo por su clima, su naturaleza y el sitio donde está. A lo mejor hay
sitios igual de bonitos que Canarias y con el mismo clima, pero mucho más
lejos, por lo que el elemento diferencial de la distancia lo convierte en
un sitio único. Es una región que no es estacional en turismo, cosa que
pasa a todas las regiones, incluso en el Caribe, donde en verano hace tal
calor que no se puede aguantar; allí la estación mala es el invierno,
pero el verano es muy duro. En Canarias, el índice de ocupación en
hostelería, frente a una media en el año 1993 de la hostelería española
del orden del 50 por ciento de ocupación, está por encima del 70 por
ciento, porque, como digo, no hay estacionalidad, lo que permite unos
grados de ocupación mucho más altos a lo largo del año y, por tanto,
favorece más la inversión porque es más rentable. Ese es un elemento en
el cual tenemos que seguir trabajando. Realmente tenemos que seguir
trabajando en todos los aspectos: masificación, esponjamiento, en todo
esto que es lo más preocupante de Canarias, porque el equipamiento de
servicios se tardará en hacer tres meses más o menos, la obra irá más
deprisa o más despacio, pero cuando hay una firme voluntad de las
administraciones en abordar el asunto y está planteado ya, se termina
haciendo un poquito antes o un poquito después. El problema surge cuando
los instrumentos de gestión están tan diluidos que al final nadie asume
del todo la responsabilidad. Hay que enfocar el asunto tomando todas las
medidas posibles, no sólo con la dedicación de recursos de la
Administración central para esponjar, o de la Administración autonómica,
de los municipios o, en su caso, de los cabildos, sino también en
colaboración con la iniciativa privada, que se ve beneficiada porque se
restringen las plazas y va a mejorarse su oferta. A lo mejor hay que
estudiar desgravaciones fiscales o medidas laborales, hay que abordarlas
porque es el tema clave del futuro; el tema clave del futuro es la
planificación de la oferta. En eso comparto con usted su preocupación.

Al señor Vázquez le diré que ya me gustaría a mí que el Banco de España y
el Tribunal de Defensa de la Competencia me considerasen ultraliberal; no
me consideran precisamente ultraliberal, ni siquiera liberal, sino más
bien de los grises. Si usted lee la prensa económica y ve las cosas que
dice de mí el señor Fernández Ordóñez se dará cuenta de que no son
precisamente que yo sea liberal o ultraliberal. Dígaselo usted al Banco
de España y a lo mejor me consideran mejor.

El tema laboral es muy complejo. Yo, como digo lo que pienso, a lo mejor
he dado más pasos de lo que era prudente en relación con el salario
variable y el salario fijo. En cualquier caso, en lo que sí hay que
incidir a cortísimo plazo es en el cómputo anual, cosa que compartimos.

Por tanto, eso es lo que hay que conseguir lo más pronto posible, porque
significa una mejora básica de la producti-vidad.

El tema de Benidorm es un caso muy especial, que me preocupa mucho menos
que el de Canarias. ¿Por qué? Porque al señor que va a Benidorm no le
gusta precisamente la ecología. Benidorm ha adquirido tal nivel que
ocurre al revés; hay mucha gente a la que le gusta porque le gusta la
masificación. Ese es el encanto de Benidorm. Cada producto tiene una
identidad y lo mismo que en otros sitios es preocupante la masificación,
al señor que le gusta Benidorm le gusta porque en un espacio muy pequeño
tiene de todo. El señor al que le gusta la naturaleza no va a Benidorm.

Por tanto, la masificación en Benidorm me preocupa menos que en Playa
América o en otros sitios de Canarias. No es que me guste que se
construyan edificios grandes, pero tampoco me preocupa mucho. La realidad
es que son configuraciones de ofertas en la medida en que tienen una
clientela. Evidentemente, el Benidorm de ahora no tiene nada que ver con
el Benidorm que yo conocía cuando era niño. A lo mejor yo añoro la mejor
playa del Mediterráneo, que probablemente sea la de Benidorm, cuando no
había nadie más que pescadores, pero eso forma parte de nuestros
recuerdos infantiles y no de la realidad de hoy, que es que ya está
masificado y al que le gusta le gusta por su masificación y, por tanto,
repito, me preocupa menos.

Al señor Artiles quiero decirle que comparto las cosas que ha dicho, y a
todos los portavoces y a todos los miembros de la Comisión les reitero mi
disposición a venir no sólo por obligación; estoy dispuesto a venir
cuantas veces haga falta a compartir estas reflexiones que siempre son
útiles porque se aportan ideas nuevas que permiten mejorar la gestión. En
consecuencia, les agradezco sus ideas y su colaboración. Muchas gracias.




El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Ministro.

En nombre de la Comisión me pongo a disposición de los servicios del
Ministerio para recoger la información, bien directamente, bien si es
enviada a la Mesa de la Comisión. La haremos llegar a los miembros de la
misma, puesto que --estoy de acuerdo con los señores Diputados-- es muy
beneficiosa para el trabajo de la Comisión.

Agradezco sus intervenciones a todos los grupos parlamentarios, así como
su estricto cumplimiento de los tiempos en el debate; aunque sea una
excepción lo ocurrido en el día de hoy, vale la pena mencionarlo. Doy
también las gracias al señor Ministro y a sus colaboradores por su
presencia y les recuerdo que en cinco minutos está convocada reunión de
Mesa y Portavoces.

Muchas gracias, señoras y señores Diputados, muchas gracias, señor
Ministro.

Se levanta la sesión.




Era la una de la tarde.