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DS. Congreso de los Diputados, Comisiones, núm. 376, de 02/12/1994
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CORTES GENERALES
DIARIO DE SESIONES DEL
CONGRESO DE LOS DIPUTADOS
COMISIONES
Año 1994 V Legislatura Núm. 376
CONTROL PARLAMENTARIO RTVE
PRESIDENTE: DON JUAN CARLOS GUERRA ZUNZUNEGUI
Sesión núm. 19
celebrada el viernes, 2 de diciembre de 1994



ORDEN DEL DIA:
Comparecencia del señor Director General del Ente Público RTVE (García
Candau), para la contestación de las preguntas formuladas con arreglo a
la Resolución de la Presidencia de 14 de diciembre de 1983. (Número de
expediente 42/000021)



Se abre la sesión a las diez y treinta y cinco minutos de la mañana.




--DEL DIPUTADO DON FELIPE ALCARAZ MASATS (GIU-IC) QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: TENIENDO EN CUENTA LA PREVISIBLE PROPUESTA
DE RENOVACION DEL CARGO DE DIRECTOR GENERAL, ¿DE QUE FORMA Y CON QUE
CONTENIDOS VA A PLANTEAR EL ACTUAL DIRECTOR GENERAL LA NUEVA ETAPA QUE
COMIENZA PARA RTVE? (Número de expediente 182/000301.)



El señor PRESIDENTE: Buenos días, señorías.

Como algunas de SS. SS. nos han indicado que se tienen que marchar
después de formular preguntas, etcétera,



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les voy a indicar que la próxima sesión ordinaria --ésta correspondía al
mes de noviembre-- será el día 21, miércoles, a las nueve y media de la
mañana, y, posteriormente, iremos a Televisión Española. Ya saben ustedes
que el Director General hizo una invitación a esta Comisión para visitar
TVE. Entonces, tendremos a las nueve y media la Comisión ordinaria y,
posteriormente, iremos a Televisión Española. Lo que sí convendría es que
se nos dijera, para conocerlo aproximadamente, es qué miembros de la
Comisión irán a la visita a Radiotelevisión Española.

Iniciamos la sesión de hoy, en la cual, después de la pregunta número 2,
pasaremos a la número 15, de don José Manuel Peñalosa, y después de la
número 4, pasaremos a la número 21, que la efectuará don Luis de Grandes.

Empezamos con la pregunta número 1, del Diputado don Felipe Alcaraz. Para
formular la pregunta, en su nombre tiene la palabra el señor López
Garrido.




El señor LOPEZ GARRIDO: En sustitución del señor Alcaraz voy a formular
la pregunta.

Teniendo en cuenta la previsible propuesta de renovación del cargo de
Director General, señor García Candau, ¿de qué forma y con qué contenidos
va a plantear el actual Director General la nueva etapa que comienza para
Radiotelevisión Española?



El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): No
entiendo el antecedente de la pregunta, porque renovado estoy desde el
año 1993. En todo caso, sí hay una nueva etapa, eso es cierto, en la
medida en que se han producido acontecimientos recientes que así lo
indican, en primer lugar, el hecho de la renovación del Consejo de
Administración, y también la aprobación de un anteproyecto de
presupuesto, hoy ya proyecto de presupuesto, en el Congreso de los
Diputados, mediante el cual se contempla ya la financiación de la
Radiotelevisión pública, un servicio público asumiendo el Estado ya una
corresponsabilidad en cuanto a su financiación, cumpliendo estrictamente
lo que marca el Estatuto de la Radiotelevisión, cuando dice que la
Radiotelevisión pública debe ser financiada por los Presupuestos
Generales del Estado y parcialmente por su capacidad publicitaria, de tal
manera que ante ese horizonte hay un compromiso ante esta Cámara de
presentar en su momento al Consejo de Administración el plan estratégico
que permitirá afrontar, con posterioridad a 1995, en un cuatrienio, las
soluciones finales de un modelo de Radiotelevisión pública que permitirá
despejar sobre todo los problemas de endeudamiento y de futura
financiación.

Lógicamente esto supone un esfuerzo añadido al que se viene desarrollando
en los últimos tiempos en Radiotelevisión Española en cuanto a la
acomodación a un sistema múltiple de ofertas de televisión, después de la
ruptura del monopolio, y para ello tenemos que decidir grandes cosas,
entiendo yo, para que el futuro de la Radiotelevisión pública esté
asegurado desde la perspectiva que antes citaba, es decir, lo que es la
adaptación al nuevo modelo de coparticipación en el mercado, la
singularidad de esa oferta y, lógicamente, lo que debe ser el perfilar
aún más los contenidos de esa televisión, que debe buscar, por encima de
todo, la calidad.

En esa acción estamos. Ya he presentado al Consejo de Administración las
líneas generales de programación para el año 1995, donde hay compromisos
muy claros en relación a lo que acabo de manifestar.




El señor PRESIDENTE: El señor López Garrido tiene la palabra para la
réplica.




El señor LOPEZ GARRIDO: El preámbulo al que usted se ha referido sobre la
previsible propuesta de renovación tiene justificación, ya que se ha
producido una renovación en el Consejo de Administración y podría
pensarse que podía haber una renovación también en el cargo del Director
General. Por su respuesta parece ser que está claro, como decía aquel
programa de televisión, el «Yo sigo», y, por tanto, entendemos que está
usted capacitado para poder en este momento profundizar un poco más,
concretar un poco más la pregunta que yo le hacía en cuanto a la nueva
etapa que comienza para Televisión Española, ya que su respuesta ha sido
muy genérica. Yo quisiera ayudarle un poco más a esa concreción que le
pido destacando cuatro aspectos que me parecen básicos de cara a la nueva
etapa que comienza para Radiotelevisión Española, después de esta
accidentada renovación del Consejo de Radiotelevisión y que justificaría
que se hablase de nueva etapa.

En primer lugar, el propio Consejo de Administración de Radiotelevisión.

Nos gustaría saber de qué medios va a disponer este Consejo de
Administración; cuál va a ser la forma de funcionamiento del mismo, si va
a haber diferencia con el anterior (me imagino que tendría que haberlas y
muy importantes); si va a tener un nuevo estilo ese Consejo de
Administración; si se va a ocupar más de los temas de la dirección más
cotidiana del ente. Me gustaría que profundizase sobre la idea que usted
tiene en cuenta al funcionamiento más eficaz del Consejo de
Administración.

En segundo lugar, en cuanto a una cuestión que va a presidir la nueva
etapa, que es la económica. Ha hablado usted de que el presupuesto para
1995 ya prevé una financiación por parte del Estado, pero nos gustaría
saber cuáles son sus previsiones sobre la deuda pendiente de Televisión
Española y cuáles son las negociaciones que se están llevando con la
Hacienda pública respecto de la deuda del año 1995 y respecto de la
situación de la deuda para 1996, donde claramente habrá ya unas
transferencias de parte del Estado mucho más consolidadas.

En tercer lugar, también quería que profundizase algo sobre el tema de la
calidad del servicio público de Radiotelevisión, qué va a haber de nuevo,
o cuáles son sus propósitos en cuanto a la mejora de la calidad de los
programas de televisión, para hacer de ella un auténtico servicio
público. En concreto me gustaría que nos hablase sobre el problema, que
aquí se ha suscitado ya reiteradamente, de la violencia en programas
destinados a la infancia y de la



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violencia en general en Televisión, que es uno de los aspectos que más
influyen, y en estos momentos están incluyendo claramente, sobre la
conducta ciudadana, e incluso en el nivel de delincuencia que existe en
nuestro país y en otros países de nuestro entorno.

En relación con esa calidad quisiera también que...




El señor PRESIDENTE: Señor López Garrido, quizá la formulación de algunas
de las preguntas que hace S. S. es más amplia que la estricta pregunta
que figura en el orden del día. No se lo hago notar en cuanto al tiempo,
en el que somos generosos.




El señor LOPEZ GARRIDO: Nosotros entendemos que ésos son los aspectos
básicos sobre los que hay que responder en cuanto a la nueva etapa de
Televisión. Por eso es por lo que lo estoy señalando, pero termino ya,
señor Presidente.

Usted ha mencionado también en su respuesta inicial las líneas básicas de
la programación. En cuanto a prioridades o a calidad de programas, nos
gustaría que nos explicase algo más sobre cuáles son esas líneas que ha
presentado al Consejo de Administración.

Por último, también quisiéramos conocer cuál es su posición respecto de
la reforma del Estatuto de Radiotelevisión, que es un elemento básico
para la configuración de un nuevo modelo --usted también en su respuesta
se ha referido a ello-- de televisión o del servicio público de
Radiotelevisión en la nueva etapa.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General ya sabe perfectamente que
su obligación es contestar exclusivamente a la pregunta formulada aquí;
respecto al Estatuto, etcétera, esta Presidencia admite totalmente las
propuestas que ha hecho el señor López Garrido, pero le recuerda al
Director General, que ya lo sabe, que su obligación es la estricta
contestación a la pregunta.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Yo creo
haber respondido en mi primera intervención al señor López Garrido de
manera genérica a lo que desde mi punto de vista era una pregunta
genérica.

Para contestar las preguntas que hace de nuevo no le oculto, señor
Presidente, que necesito al menos media hora. Explicar con un mínimo de
coherencia las líneas generales de programación u otros aspectos que ha
planteado S. S. requiere mucho tiempo y realmente no es fácil dar los
titulares, aunque los puedo dar. Sucintamente le diré lo siguiente.

Usted es un gran jurista, como es obvio, como catedrático de Derecho
Constitucional y Letrado de estas Cortes, y sabe que hay una ley, que es
el Estatuto de Radiotelevisión, y yo soy, por vocación personal, muy
respetuoso con los textos legales, y, por tanto, el Consejo tiene unas
competencias y el Director General otras, algunas compartidas, y desde
esa perspectiva, lógicamente, voy a trabajar con la máxima lealtad. Bien
es cierto lo que hasta ahora se ha dicho, medios van a tener todos. En
cualquier caso, el Consejo es soberano para tomar las decisiones que
correspondan en esa materia, pero debo decirle que, según tengo
entendido, y así se ha explicado desde un punto de vista político, lo que
ha cambiado es la dedicación, antes había una dedicación exclusiva de los
consejeros y hoy son más que compatibles, creo que desde una
compatibilidad muy ampliada. En cualquier caso, lo que se decida es
cuestión del Consejo, que ya lleva dos sesiones en las que está tomando
hasta ahora decisiones precisamente en referencia a esta materia.

En cuanto a la deuda, sobre la que pregunta S. S., el año que viene habrá
la misma que hay en 1994, y a partir de 1996, año al que se refería, debo
decirle que va a estar en funcionamiento el plan estratégico, espero, con
lo cual el Estado alcanzaría un compromiso, por así decir, con el Ente
Público para que la financiación de 1996 a 1999 tuviera dos partes
fundamentales: una la publicidad y otra la financiación pública.

En cuanto a la violencia en programas destinados a la infancia y a la
violencia en general, a la que se refería, debo decirle que nosotros
tenemos una actitud bastante positiva en estos aspectos, una gran
preocupación. Fuimos los primeros en firmar el acuerdo deontológico con
el Ministerio de Educación y Ciencia, y en las reuniones técnicas que hay
del grupo que hace el seguimiento de este acuerdo, siempre se toma en
consideración el buen hacer de Televisión Española y siempre se refleja
que Televisión Española viene cumpliendo de una manera expresa ese
acuerdo que en su día firmó.

Por lo que se refiere a la reforma del Estatuto, tengo entendido que el
Gobierno anunció la presentación de un estatuto y ustedes son los
responsables de llevar a cabo los cambios que se produzcan dentro de lo
que sería o pueda ser el nuevo marco jurídico de la Radiotelevisión
pública. Creo que ese es un trabajo que les corresponde a ustedes y si
algún día se requiere, desde un punto de vista técnico, mi presencia,
como ya ocurriera en su tiempo, con mucho gusto estaría dispuesto a
participar.




--DEL DIPUTADO DON FELIPE ALCARAZ MASATS (GIU-IC), QUE PREGUNTA AL
DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿CUANDO SE VA A DISCUTIR EL PLAN
DE FUTURO DE RTVE? (Número de expediente 182/000302.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 2 del Diputado señor
Alcaraz, que también la va a efectuar el Diputado señor López Garrido, de
su mismo Grupo, que tiene la palabra.




El señor LOPEZ GARRIDO: La pregunta es cuándo se va a discutir el plan de
futuro de Radiotelevisión Española.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




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El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Cuándo
se va a discutir no lo sé. Lo que sí puedo decirle es cuándo lo he
presentado. Ayer presenté una parte de ese plan, pero no pudimos entrar
en debate. Espero presentar la otra parte del plan en la próxima sesión
del Consejo, así me he comprometido con el mismo, pero la discusión no sé
cuándo se producirá, porque esto ya depende del órgano soberano, que es
el Consejo de Administración. Mi interés es que sea cuanto antes, pero en
el anterior Consejo presenté las líneas generales de programación y ayer
estuvimos con temas de infraestructura toda la sesión, con lo cual no
entramos en la discusión de lo que para mí era la pieza fundamental. He
explicado al Consejo que hay dos cuestiones fundamentales, las líneas
generales de programación y el plan estratégico, pero me temo que hasta
que no resolvamos temas previos no entraremos en la discusión.

Por tanto, cuándo se va a discutir no lo sé. Le puedo asegurar que ayer
he presentado una parte y que el próximo Consejo entrego el resto del
plan estratégico. A partir de ese momento, cuando el Consejo crea
conveniente, empezaremos la discusión y el debate sobre el plan
estratégico de Radiotelevisión Española.




El señor PRESIDENTE: El señor López Garrido tiene la palabra.




El señor LOPEZ GARRIDO: La verdad es que esperaba una concreción mayor,
porque esta cuestión, que se suscita sistemáticamente en todas o en casi
todas las reuniones de esta Comisión, ha pasado por una especie de
Guadiana donde se ha ido diluyendo el momento de la discusión de este
plan estratégico o de futuro, del que siempre se dice que depende
efectivamente el futuro del servicio público de Radiotelevisión, y por
tanto, al no existir, toda la acción a este respecto está presidida por
la provisionalidad o por un cierto parcheo, y por eso estamos todos
siempre pendientes de cuándo va a venir este plan de futuro, este plan
estratégico. Ya sabe usted que hay una proposición no de ley de nuestro
Grupo que es longeva, tiene ya un año, aprobada en esta Comisión para que
viniese inmediatamente ese plan de futuro, y nunca vino, y ahora con el
nuevo Consejo de Administración es como si empezase otra vez la historia.

Ahora ya ni siquiera hay una concreción en cuanto a la fecha.

Creo que no es de recibo, sinceramente, que no haya la más mínima
concreción en cuanto a la fecha, ni una previsión mínima sobre este plan
de futuro o que no hubiera alguna mínima explicación sobre algunos
aspectos básicos de su contenido, y yo, aunque se saliese de la pregunta,
le agradecería también que pudiese hablar de algunos de sus contenidos,
como, por ejemplo, el asunto de las plantillas, sobre el que se dice que
hay una reestructuración, es algo que está otra vez funcionando como una
especie de rumor, o qué va a pasar con la publicidad o con los centros
territoriales de Televisión Española o con el organigrama o con los
futuros contratos-programas. Todo esto también forma parte del inédito
impulso democrático y sería muy importante que tuviésemos en esta
Comisión, aunque solamente fuese para poder realizar una adecuada función
de control, que es para lo que está pensada, una mínima previsión de
calendario en cuanto a este plan de futuro, que se viene anunciando desde
hace mucho tiempo y que desde luego sí que es fiel a su nombre, porque se
va a convertir en un eterno plan de futuro, pero nunca de presente.

Así que yo le rogaría al señor Director General que concretase algo más
en cuanto al calendario de ese plan de futuro para adelantarnos un poco
de ilusión a los miembros de esta Comisión de que vamos a verlo alguna
vez, y si pudiese también adelantarnos, ya que lo ha presentado al
Consejo de Administración, aunque sea parcialmente, algo de su contenido,
de sus líneas básicas.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Lamento
que el señor López Garrido no me entienda, porque creo que he sido
expreso y absolutamente claro. Usted me ha preguntado cuándo se va a
discutir, y yo le contesto que cuando el Consejo de Administración
quiera, porque usted me puede preguntar: ¿cuándo va usted a presentarlo?
Y ya he dicho que ayer he presentado una parte y que en el próximo
Consejo presento el resto. Cuándo se discutirá ya depende del orden del
día que el Consejo de Administración fije, el interés que tenga en que
haya relación con otros temas o no. Por tanto, no soy el responsable del
momento del debate y de la discusión sobre el contenido del plan
estratégico.

Como le he dicho, hace veinte días presenté unas líneas generales de
programación y ayer estaba en el orden del día y no se discutieron las
líneas generales de programación y han quedado para un próximo Consejo.

He presentado y ayer informé de en qué consistía, el plan estratégico de
Radio Nacional y explicaré el resto el próximo día y presentaré toda la
documentación, como así vengo haciendo; ahora, cuándo se va a discutir,
como usted comprenderá, no se lo puedo concretar porque no está en mi
mano. He solicitado que se haga cuanto antes, pero corresponde al Consejo
de Administración soberanamente el inicio de la discusión o del debate
sobre aquella materia que yo pueda presentar al Consejo de
Administración. Por tanto, no me achaque usted a mí el problema de que no
se empiece la discusión y que no le dé una fecha, porque no soy yo quien
puede darle la fecha; será el Consejo de Administración quien
soberanamente elija el momento y la oportunidad de iniciar ese debate.

En cualquier caso, aunque usted ha formulado otras preguntas, voy a
intentar, aunque sea brevemente, responderle sobre reestructuración,
centros territoriales y publicidad, según he entendido. Sobre la
publicidad la idea que se plasmó en el anteproyecto de presupuesto era la
de limitar en el mercado publicitario la cuota de participación de
Televisión Española siguiendo las líneas del Estatuto de Radiotelevisión
en el que se fija claramente que Televisión Española se financiará por
los Presupuestos Generales del Estado y también por la publicidad. Hemos
buscado un techo sobre la captación publicitaria y ese es el compromiso,



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no sólo para 1995 sino para los próximos años en el plan estratégico, y
también tendrá fijada una cuota de mercado publicitario.

Por lo que se refiere a los centros territoriales, puedo asegurarle que
mi interés y mi intención es mantenerlos, si bien es cierto que tiene un
coste muy elevado y, por tanto, es una decisión política. El
sostenimiento de los centros territoriales, tanto de Televisión como de
Radio Nacional, es un coste fijo que hay en Televisión Española. Por
tanto, en su momento, desde mi punto de vista, se deben mantener; otra
cosa es que se decida lo contrario, pero mi propuesta, si a mí alguien me
pregunta, es que defiendo la existencia de los centros territoriales.

En cuanto a la reestructuración lo que S. S. debe saber es que en octubre
de 1993 el Consejo de Administración aprobó unas plantillas, fue la
primera vez en su historia que se fijaban las plantillas del Ente Público
y de sus sociedades, y ha habido determinadas acciones, como ha sido la
culminación del plan de regulación de empleo que se había aprobado con
los sindicatos en diciembre de 1991, que se ha culminado este año en
julio, pero sigue habiendo excedentes por encima de la plantilla óptima
aprobada por el Consejo de Administración. Nuestro interés es que esos
excedentes, mediante pacto, se puedan ir amortizando en el tiempo, no de
una manera traumática y, a ser posible, como se ha venido haciendo hasta
ahora en Televisión Española, cosa que creo que es muy edificante,
mediante el acuerdo con los sindicatos.




--DEL DIPUTADO DON JOSE MANUEL PEÑALOSA RUIZ (GP) QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿CUALES SON LAS DIFERENCIAS FUNDAMENTALES
ENTRE EL PLAN ESTRATEGICO QUE TENDRIA QUE HABERSE PRESENTADO HACE MAS DE
UN AÑO Y EL QUE HA ANUNCIADO QUE SE PRESENTARA EL 21 DE DICIEMBRE?
(Número de expediente 182/000315.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a a pregunta número 15 del Diputado señor
Peñalosa, que tiene la palabra.




El señor PEÑALOSA RUIZ: ¿Cuáles son las diferencias fundamentales entre
el plan estratégico que tendría que haberse presentado hace más de un año
y el que ha anunciado que se presentará el 21 de diciembre?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): La
verdad es que las diferencias se basan fundamentalmente en dos
cuestiones. Yo ya he dicho aquí en alguna ocasión y al anterior Consejo
de Administración, quizá en una de las últimas sesiones, que el plan
estratégico no se presentaba por creer que debía ser el nuevo Consejo el
que entendiera sobre ese plan estratégico. La verdad es que hemos perdido
un tiempo precioso pensando que la renovación se iba a hacer. Lo que sí
es cierto es que en su contenido se han producido algunos cambios.

¿Cuáles? Fundamentalmente que en este plan estratégico en estos momentos
hay un referente muy claro, que es la limitación publicitaria. En el
anterior plan estratégico no existía limitación publicitaria. En el plan
estratégico anterior había, digamos, decisiones de orden empresarial
distintas a las que ahora se presentan, y, sobre todo, también hay un
factor muy importante, y es que el entorno actual nos da una experiencia,
desde la consolidación de lo que es y puede ser el Ente Público en el
futuro, que ha permitido variar algunos de los conceptos presupuestarios
que estaban previstos en el anterior plan estratégico y que, sin duda,
sufren unas modificaciones importantes.

En cualquier caso, como dije ayer al Consejo de Administración, el plan
estratégico está abierto. ¿Qué quiere decir eso? Que la dirección hace
una propuesta y después del debate, discusión y análisis de las grandes
cifras y grandes contenidos de tipo intelectual que hay también en ese
plan estratégico es cuando tenemos que tomar las decisiones. Quiere eso
decir que la propuesta es un proyecto que se debe culminar con las
aportaciones, pero de todos los miembros del Consejo de Administración,
y, a ser posible, para mí supondría una gran satisfacción, que ese plan
estratégico fuera aprobado por la unanimidad de los miembros del Consejo
de Administración.

En esa fase estamos. Como digo, ya se inició ayer y espero que dentro de
este mes, y en el mes de enero específicamente, se debate, estudie y, a
ser posible, se apruebe ese plan estratégico. Ya dependerá un poco del
ritmo, del análisis, del debate y de la discusión entre los señores
miembros del Consejo de Administración y la Dirección General.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Peñalosa para réplica.




El señor PEÑALOSA RUIZ: Señor Director General, sé que no le sorprende,
en absoluto, que el Grupo Popular le pregunte en esta Comisión de Control
cuándo se va a presentar el plan estratégico de Radiotelevisión Española.

Lo recordaba antes el señor López Garrido también, lo hemos hecho en
reiteradas ocasiones cumpliendo con nuestra obligación y, en todo caso,
con nuestro derecho parlamentario. Lo hemos hecho desde que se produjo
también el primero de los reiterados incumplimientos de presentarlo por
parte del Director General, que ha acreditado, permítame que se lo diga,
en este aspecto una especial y preocupante falta de celo, no sé si
profesional o político, pero en cualquier caso una especial y preocupante
falta de celo.

En esta ocasión no queríamos insistir en la fecha puesto que teníamos,
por su propia boca, comprometida la última, que estaba situada en el 21
de diciembre, que aunque era cercana, todavía no había llegado. Por otro
lado en este aspecto de las fechas también habíamos acrecentado nuestra
confianza, puesto que se había cumplido el último de los requisitos que
el Director General había puesto y que había condicionado a la
presentación del plan, y éste no era otro



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que el de la ansiada renovación del Consejo de Administración de
Radiotelevisión Española que ya se ha producido como todas SS. SS. saben
y conoce también la opinión pública. Digo que sabe también la opinión
pública como consecuencia de la desgraciada y lamentable, incluso
irresponsable, sustitución de algunos de los nombres acordados, por otros
personajes del toreo y de la farándula en la votación celebrada en el
Pleno de la Cámara bien recientemente, que pone de relieve,
lamentablemente, digo, el concepto que para algunos Diputados se tiene de
Radiotelevisión Española, seguramente para aquellos Diputados que son los
más beneficiados por la actual situación de Radiotelevisión Española.

Señor Director General, nuestra curiosidad hoy se encaminaba más a
conocer cuáles eran realmente las diferencias sustanciales entre aquel
plan estratégico que se tenía que haber presentado hace un año, en
cumplimiento de las cláusulas del contrato-programa firmado por
Radiotelevisión Española y el Estado, y el plan estratégico que de
acuerdo con su último compromiso, insisto, se debería conocer, todavía no
sabemos tampoco hoy si en el Consejo o en la Cámara el próximo día 21 de
diciembre. Hemos sabido que una de esas diferencias parece que puede
hacer referencia a la limitación publicitaria, pero no hemos sabido más.

Créame que hoy no teníamos ningún interés en hablar de las excusas que de
todo signo y condición ha puesto S. S. para no presentar este plan. Hoy
incluso nos ha llegado a decir que ni siquiera es suya la responsabilidad
de fijar una fecha para que esta Cámara conozca el plan o para que se
debata en el Consejo de Administración. Nos ha dicho incluso que el
Consejo puede estar ocupado en otras tareas, seguramente más de índole
doméstica, que las de afrontar bajo su impulso el debate y aprobación de
ese importante plan. Lo que queríamos hoy era hablar de la importancia
del plan, que es una de las cosas en las que yo creo que todos podríamos
coincidir, ese plan de viabilidad, ese plan de futuro, ese plan
estratégico, denominémoslo como queramos porque en cualesquiera de esas
acepciones precisamente se remarca su trascendencia, y hubiéramos querido
conocer con más detalle, habida cuenta de esa importancia, cuál había
podido ser la evolución en el tiempo de ese plan, en el año transcurrido
desde la obligación de su presentación. Yo creo que además esa
importancia se ha plasmado en multitud de ocasiones en respuestas
parlamentarias de la propia Dirección General de Radiotelevisión Española
cuando, por ejemplo, se aplazaba el conocimiento sobre la previsión de
puestos de trabajo a reducir en el Ente Público y sus sociedades al
conocimiento y aprobación del plan, o se aplazaba también la decisión
sobre la creación o no de la sociedad de comercialización así como la
decisión de que la orquesta y coros, o el instituto de Radiotelevisión
Española, pudieran depender presupuestariamente de otro organismo ajeno
al Ente Público; incluso se ha diferido al conocimiento y aprobación del
plan estratégico el establecimiento, nada más y nada menos, que de un
nuevo marco de financiación del grupo Radiotelevisión Española.

Por lo tanto, no hay duda para nosotros de la importancia de este plan,
de la urgente necesidad de que el Ente Público Radiotelevisión Española
impulse y siga las actuaciones que en el mismo se decidan, como así se
desprende del compromiso adquirido en el contrato-programa y que el señor
Director General en su nombre no ha cumplido hasta este momento.

Además si la situación aconsejaba un plan estratégico, un plan de futuro
y un plan de viabilidad hace más de un año, la no puesta en marcha del
mismo no ha mejorado sino, por el contrario, empeorado la situación del
propio Ente, como así hemos tenido oportunidad también recientemente de
denunciar con motivo del debate de los Presupuestos Generales del Estado.

Las pérdidas previstas para 1995 se sitúan en 91.000 millones, frente a
los 79.000 del año anterior. La asunción de deuda pasa de 31.000 a 90.000
millones, y la necesidad de financiar el gasto con el aval del Estado
supera también los 90.000 millones frente a los 80.000 del año anterior.

Son todos ellos datos del presupuesto para 1995.

Por todo ello, señorías, y termino señor Presidente, al Grupo
Parlamentario Popular le parece que hay razones sobradas para preguntar
por el plan, para conocer las diferencias que su retraso va a comportar y
para reclamar, de una vez por todas, su presentación en la Cámara.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): De su
réplica, poco tengo que decir; simplemente, reafirmarme en alguna de las
cuestiones que he planteado ya o que he contestado al señor López Garrido
y a S. S. misma.

El plan estratégico parcialmente ya está en el Consejo de Administración
y espero y deseo que éste sea un asunto que se discuta, se debata y se
apruebe por parte del mismo, al que presento ese plan estratégico. Por
tanto, le reitero que yo no soy dueño del tempo del Consejo de
Administración. Es decir, puedo proponer, en fecha, lo que era un
compromiso propio. A partir de ese momento, si tenemos necesidad de
debatir el plan estratégico durante uno, dos o tres meses, ya no es
responsabilidad mía. Eso dependerá de la marcha de los trabajos y del
análisis en profundidad que se formule en relación al plan estratégico.

Por tanto, creo que razonablemente esto se resolverá en un tiempo breve,
una vez se resuelvan algunas cuestiones y una vez --digamos-- el Consejo
pueda entrar a discutir. En parte dependerá de cuál sea el nivel de
exigencia o de tiempo necesario en la discusión del debate. Por tanto,
estoy en condiciones de decirle que a mí no me gustaría que pasáramos del
mes de febrero, pero ya le digo que no corresponde al Director General
sino a éste y al Consejo de Administración. En cuanto al tempo
corresponde específicamente al Consejo de Administración.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ADELA PLA PASTOR (GS), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿TIENE



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TELEVISION ESPAÑOLA LA INTENCION DE REALIZAR UNA SERIE SOBRE LOS BORGIA?
(Número de expediente 182/000303.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 3, de la Diputada doña
Adela Pla.

La señora Pla tiene la palabra.




La señora PLA PASTOR: Señor Director General, en Valencia, en el
transcurso de una cena literaria con motivo de los Premios de Octubre,
usted anunció el proyecto de producir una ambiciosa serie sobre los
Borgia, proyecto al que se sumaron el señor Fabregá, por Radiotelevisión
valenciana, y el señor Granados, por la Corporación catalana de
Radiotelevisión. Incluso la Ministra de Cultura, presente en el acto,
también se interesó por el proyecto y prometió su colaboración. Teniendo
en cuenta el esfuerzo económico que supone una serie de estas
características, nos parece muy interesante la colaboración de todos
estos organismos y televisiones.

Por otra parte, la familia de los Duques de Gandía, sobre la que no me
voy a extender porque son de todos conocidos sus avatares, su influencia
en la Historia, su papel preeminente en el Renacimiento, nos parece un
tema de gran interés, no sólo para los valencianos, ya que, aunque fueron
valencianos, pensamos que fueron más universales que valencianos, que
fueron más europeos que españoles. Pensamos que puede ser interesante,
como lo demuestra el hecho de que en todo momento haya habido
intelectuales que estén escribiendo sobre ellos. Interesante es su
historia e interés que no decae. Manuel Vicent, Miquel Batllori han
escrito libros sobre esta familia. No quiero extenderme, pero sí decir
que en Valencia se vería con mucha ilusión y agrado esta serie, que, por
otra parte, incrementaría la producción propia de Televisión Española y
haría conocedores a los españoles y al resto de mercados a los que
Televisión Española tiene acceso de una familia que jugó un importante
papel, pero que, sobre todo, ayudó con su mecenazgo a ese movimiento
cultural tan importante como fue el Renacimiento.

Por todo ello, señor Director General, nos gustaría saber en qué grado de
ejecución se encuentra el proyecto, si realmente van a colaborar las
demás cadenas que aquella noche --noche de euforia, noche de premios-- se
ofrecieron a hacerlo, en fin, todo lo que nos pueda anticipar sobre el
proyecto. Si va a ser una realidad muy pronto y cuándo y cómo podremos ya
empezar a disfrutar de una serie que pensamos que no va a desmerecer
sobre las demás series basadas en obras literarias que Televisión
Española ha producido.




El señor PRESIDENTE: Señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): El
proyecto está en fase de discusión, específicamente en cuanto al reparto
de las cotas de participación de las tres televisiones. Esta es una serie
que a mí, personalmente, me parece apasionante. Yo creo que tiene un gran
interés por muchas de las cosas que S. S. ha explicado y que sin duda
tendría también un buen mercado europeo, dado que la familia Borgia tiene
una gran presencia en el mundo cultural, incluso en el conocimiento
popular, de muchos de los países europeos. Ahora bien, es una serie muy
cara y desde el primer momento se ha intentado contar con la
participación de la Generalitat valenciana, de la Generalitat catalana,
del Ministerio de Cultura y de las televisiones públicas de Valencia,
Cataluña, y la televisión del Estado, Televisión Española.

Ha habido varios proyectos. Al final, de ellos, más o menos, se ha
quedado en uno muy concreto. En estos momentos la discusión está
prácticamente en los porcentajes de distribución entre las televisiones.

Espero que esto lo podamos resolver en un plazo breve de tiempo y que
tengamos la puesta en marcha de esta gran serie, que puede ser una gran
aportación cultural por parte de Televisión Española y del resto de las
televisiones e instituciones públicas. A mí me gustaría que fuera una de
las grandes series que se pudiera producir y contemplar probablemente en
el año 1996, porque, aunque empezara en 1995, difícilmente finalizaría la
producción antes del propio año 1996, de tal manera que, en ese aspecto,
estamos en esa fase de discusión y espero que el acuerdo haga posible
esta gran serie.




El señor PRESIDENTE: Señora Pla.




La señora PLA PASTOR: Muchas gracias, señor Director General.

Por mi parte, de vez en cuando, insistiré sobre la serie, no sólo en
trámite parlamentario, sino cuando le vea por los pasillos o en cualquier
encuentro que tenga con usted. Además, me comprometo también, a otros
niveles, a que mis compañeros de Partido, Diputados en otras instancias,
tanto en la catalana, como en la valenciana, vayan insistiendo ante los
directores generales correspondientes, cuando comparezcan, para que se
pongan ustedes de acuerdo y que esta serie de grandísimo interés --creo
yo-- sea pronto una realidad.




El señor PRESIDENTE: ¿El señor Director General desea intervenir?
(Denegaciones.)



--DEL DIPUTADO D. JOSE MARIA MARTINEZ LASECA (GS), QUE FORMULA AL
DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿EN QUE MEDIDA HA PREVISTO RTVE
INCREMENTAR SU PRODUCCION PROPIA EN 1995? (Número de expediente
182/000304.)



El señor PRESIDENTE: Pregunta número 4, del señor Martínez Laseca, que
tiene la palabra.




El señor MARTINEZ LASECA: Señor Director General, ya el pasado año por
idénticas fechas le planteábamos una pregunta en términos similares a la
que vamos a formularle en el día de hoy. Decíamos entonces, y creemos que
este aspecto sigue manteniendo plena vigencia en la



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actualidad, que dentro de la amplia y diversa programación de las
diferentes cadenas de televisión, las denominadas comedias de situación,
de producción propia, venían teniendo bastante éxito, como lo avalaba el
claro seguimiento que obtenían por parte de la audiencia.

Desde aquella fecha hasta ahora hemos tenido conocimiento de esta
Comisión del grado de desarrollo de los distintos proyectos que aquí se
nos han comentado, como el de La Regenta, Aquí hay negocio, Villa Rosaura
o la ahora mencionada serie de los Borgia, por citar algunos de ellos, y
que eran proyectos que se estaban acometiendo por parte de
Radiotelevisión Española, manteniendo su ya conocida trayectoria en pro
de la producción de series de ficción, incluyendo lógicamente las
comedias.

Ello hace sin duda que nuestra televisión pública siga teniendo la
consideración de primera productora de nuestro país. En consonancia con
todo ello, paso a formularle la siguiente pregunta: ¿En qué medida ha
previsto Radiotelevisión Española aumentar su producción propia en 1995?



El señor PRESIDENTE: Señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señoría,
nuestro interés es incrementar la producción propia en el año 1995 y
siguientes en relación a lo que ya ha sido un esfuerzo en el pasado
ejercicio 1993 y actual 1994, con tres objetivos fundamentales:
fortalecer la industria nacional, fortalecer la lengua y la cultura
españolas y también fortalecer las señas de identidad de la propia
Televisión Española, de tal manera que durante el año 1995 queremos
producir series que puedan tratar de mostrar, además, la propia realidad
de nuestro país, sus costumbres, su cultura, de una manera mucho más
amable, como puede ser también desde un punto de vista social, por las
relaciones de pareja, familiares, profesionales, etcétera.

En cualquier caso, al igual que ahora estamos hablando de la serie de los
Borgia, el próximo año tendremos ya la emisión, y espero que en breve
plazo, de La Regenta. Va a ser una gran obra, que espero que se va a
emitir a principios de año, una obra que sin duda va a tener una gran
repercusión. Yo he visto el montaje de esta serie, que tiene casi cinco
horas de duración y la verdad es que creo que va a ser un acontecimiento
de primer orden.

Ese es nuestro interés, que cada año haya una o dos obras de este tipo
que nos permitan hacer una contribución cultural más allá de lo que es el
entretenimiento o lo que es la propia producción, de tal manera que ése
es uno de los aspectos fundamentales en el cambio de actitud a la hora de
afrontar los nuevos retos de la televisión pública en nuestro país.




--DEL DIPUTADO DON JUAN CARLOS VERA PRO (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿CUALES SON LAS RAZONES POR LAS QUE, DE
UNA FORMA TAN CLARA, PREVALECE LA PRODUCCION AJENA SOBRE LA PRODUCCION
PROPIA ENTRE LAS PENDIENTES DE EMITIR POR TELEVISION ESPAÑOLA? (Número de
expediente 182/000321.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 21, que va a formular
don Luis de Grandes.




El señor DE GRANDES PASCUAL: Voy a formular esta pregunta en sustitución
de mi compañero don Juan Carlos Vera Pro.

Señor Director General, ¿cuáles son las razones por las que, de una forma
tan clara, prevalece la producción ajena sobre la producción propia entre
las pendientes de emitir por Televisión Española?
Como es obvio, esta pregunta es oportuno que se efectúe a continuación de
la que acaba de contestar puesto que creo que es complementaria de
aquélla.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Ello
obedece a distintas razones, pero la fundamental es la siguiente. El
mercado audiovisual, que tiene una o dos citas principales al año,
permite un reparto, entre las diferentes televisiones, de aquellos
productos novedosos o de librería con que cuentan las distintas
distribuidoras. Todas las televisiones del mundo, absolutamente todas,
tienen el mayor porcentaje de stock en producción ajena, mucho más que en
producción propia, a la hora de emitir. ¿Por qué? Porque cuando uno
adquiere una determinada producción, como pueden ser ciclos
cinematográficos, éstos no sólo tienen un pase sino varios, lo cual
quiere decir que se van almacenando en el tiempo y va permitiendo que se
pueda emitir. Ocurre también que cuando uno compra --por ejemplo, ahora
está próximo a celebrarse el NAPE, que este año es en el mes de enero en
Las Vegas-- un determinado producto y a lo mejor no lo recibe hasta dos,
tres o cuatro años después, por tanto, uno tiene en el stock los
derechos, aunque materialmente no lo puede emitir. Una vez que pasan los
ciclos del vídeo doméstico, de la comercialización en las televisiones de
pago, etcétera, es cuando ya se puede emitir en abierto, en aquellos
casos que son novedades, en las que son de librería no es tanto el
problema. Cuando uno recibe ese material tiene que hacer el doblaje,
etcétera, de tal manera que, normalmente, para amortizar una inversión,
fundamentalmente se requiere la múltiple emisión de ese producto, lo cual
provoca que, en ocasiones, se tengan unos productos en almacén a lo largo
de varios años, lo cual no quiere decir que vaya en detrimento de los
esfuerzos que hay que hacer en el campo de la producción propia. Son dos
temas en los que se actúa en paralelo. Además, en la producción ajena hay
que comprar grandes paquetes, porque no es fácil comprar películas
determinadas, sino que cuando alguien quiere conseguir una serie de
películas tiene que adquirir otras de menor interés; generalmente, en un
paquete que pueda uno comprar a Universal, Columbia,



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Fox, Warner, Disney, etcétera, uno recibe productos que llamamos A, B, C,
etcétera, lo cual conlleva que haya siempre un buen stock.

En todas las cadenas del mundo, el porcentaje de producción propia que se
emite es escaso; sin embargo, puedo asegurarle que en Televisión
Española, en estos momentos, estamos en una emisión de producción propia
que supera más del 60 por ciento en las dos cadenas. No obstante, para
emitir las suficientes horas de producción ajena se requiere siempre
contar con un stock suficiente como previsión de futuro. Normalmente,
todas las televisiones contamos con acuerdos marco con diferentes
distribuidoras, y eso es lo que permite y lo que provoca contar con un
stock importante en los propios activos del ente público en cuanto a los
derechos adquiridos. A partir de ese momento se van consumiendo y se van
incorporando otros productos, pero, normalmente, todas las televisiones
siempre tenemos pendiente de emitir, por muchas circunstancias, muchos
productos de producción ajena. Esta es una regla absolutamente normal en
todas las televisiones del mundo, aunque quizás en nuestro país, y en
Televisión Española en concreto, la producción propia está muy por encima
aún de la producción ajena.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor De Grandes.




El señor DE GRANDES PASCUAL: Señor Director General, gracias por su
respuesta, que no viene a satisfacer por completo nuestras inquietudes.

Su señoría viene a decir que el mercado manda, lo que, en cierta forma,
es verdad. Es verdad que no sólo la televisión pública sino también las
televisiones privadas tienen que actuar en un mercado en el que, si
quieren comprar un producto bueno, les colocan otros productos que S. S.

ha calificado como B; ésa es la regla.

Ahora bien, nosotros queremos insistir en que una cosa es que tenga que
actuar la televisión pública en el mercado --no vamos a negar esa
evidencia-- y otra cosa es que la diferencia cualitativa de la televisión
pública haga que deba actuar en el mercado de forma distinta, que, a
veces --como ya hemos dicho en algunas ocasiones--, es la única
justificación que nosotros podemos ver en su carácter de
complementariedad, es decir, que, con fondos públicos, se pueda realmente
justificar esa teoría suya que yo, de alguna forma, puedo admitir de los
costes y no los gastos.

Ha dado una respuesta muy positiva al señor Martínez Laseca en el sentido
de que las previsiones para el año 1995 son las de incrementar la
producción propia, y ha planteado tres objetivos o tres razones que ya le
adelanto que nos parecen respetabilísimos y que asumimos, pero tendrá que
reconocer conmigo que ésa es una manifestación de buenos deseos que no se
compadece con la realidad constatable de los números que hace un momento,
dando respuesta a mi pregunta, viene en cierta forma a insinuar, y que yo
quiero recordar. Quiero recordar que la partida de gastos de producción
viene teniendo, en los presupuestos del ente público, un volumen
importante que no siempre es in crescendo, puesto que en 1993 era de
63.140 millones, en 1994 era de 51.576 millones, subiendo a 52.807
millones de pesetas las previsiones para el año 1995.

Nuestro Grupo, a través de diferentes Diputados, nos hemos interesado
sobre aspectos concretos de la producción propia y ajena. Como sabe muy
bien S. S., la señora Mato, don Juan Carlos Vera y yo mismo, le hemos
formulado múltiples preguntas que, por cierto, están esperando respuesta
desde el mes de julio; preguntas que, en absoluto, reflejan un afán
inquisitorial sino nuestra obligación inexcusable de controlar y tener
conocimiento de causa para luego presentarle aquí modelos alternativos,
para que esto no sea sin más un toma y daca sino que podamos exponer
nuestra opinión.

Su señoría, con ocasión de la comparecencia en relación con los
presupuestos de 1995, confirmó, si mis datos no son inexactos, la
existencia de 56.000 millones de pesetas en producción por emitir, con un
desglose que, más o menos, es el siguiente: producción ajena, 10.016
horas; producción propia, 1.892 horas, y producción externa, 9.262 horas.

Es evidente que la desproporción es contundente. No se trata de que
exista un problema de stock por el mercado, es que es una desproporción
enorme; desproporción que entendemos que es inadecuada para la tarea que
tiene que desempeñar una televisión de carácter público. Porque, además,
entrecruzados con esos objetivos que nosotros asumimos que debe cumplir,
de incremento de producción propia, no es menos cierto que, desde nuestra
óptica, que considera que una televisión pública debe ser, en cierta
forma, complementaria de las televisiones privadas y que no debe estar en
la pura competencia con las privadas, porque, como algunas veces le hemos
dicho paladinamente, ello podría significar la competencia desleal, la
televisión pública puede y debe actuar como apoyo efectivo a la industria
cultural española. Aquí hemos hablado de ello en algunas ocasiones. Sin
duda, proyectos como La Regenta, estos proyectos grandiosos, no sólo no
nos producen erisipela, sino que nos producen satisfacción, porque ésa
sería naturalmente la línea que debiera seguir la televisión pública.

Además, entendemos que, desde el reconocimiento que ha efectuado S. S. ya
en varias ocasiones de que tiene un exceso de plantilla, lo que produce
unos determinados desajustes, este exceso de plantilla puede equilibrarse
con el incremento de la producción propia. Algunas veces le hemos acusado
--por decirlo de alguna forma, no se lo tome como acoso-- de la falta de
empleo de los riquísimos recursos humanos que hay en Televisión, la vieja
teoría de los que hacen pasillos y de los que no los hacen. Pero, sin
duda, hay un hecho constatable: Televisión tiene mucha y muy buena gente
y no existe proporcionalidad con el rendimiento que se está sacando de
esos profesionales; esos profesionales sobre los que algunas veces,
cuando hacemos alguna crítica, se ampara en eso de: «No nos los toquen.»
Nosotros queremos apoyar a los profesionales y por eso le pedimos que
equilibre la producción propia con la ajena, porque puede ser el camino
para que no sobre



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gente, sino que a esa gente se la pueda utilizar de una forma idónea.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Quiero
agradecer al Diputado don Luis de Grandes el tono y el contenido de su
intervención que yo en parte comparto. Lo que pasa es que seguramente no
nos acabamos de entender.

Le voy a explicar una cosa tan sencilla como la siguiente. Si nosotros
equilibráramos, según su petición, los esfuerzos en producción propia en
relación a los de producción ajena, tendríamos que dejar de emitir muchas
horas al día. Me voy a explicar. Cuando estamos hablando de La Regenta,
le diré que ha costado más de 500 millones de pesetas; si yo quiero
productos alternativos a La Regenta, que son de producción externa,
tienen un coste aproximadamente del 10 por ciento. ¿Qué quiere decir eso?
Que la producción propia tiene un costo muy elevado, que uno hace una
inversión para amortizar en el tiempo, que para conseguir financiarla en
parte o alcanzar ingresos por vía de comercialización tiene que esperar
unos años en los mercados internacionales o en los nacionales, en los que
emite Televisión Española, etcétera. Esto se refiere a la emisión de una
televisión pública, y vamos a dejarnos de nuestro país; es decir, si uno
ve el modelo de la televisión francesa o la británica o la italiana o la
alemana, uno contempla cómo el porcentaje de producción, tanto en ajena
como en propia, tiene unas partidas muy diferentes, porque hay múltiples
horas de emisión a lo largo del año que impiden que esas producciones
propias sean las que estén permanentemente en la pantalla. Por tanto, uno
tiene que ir a productos mucho más variados, con unos costes menores, en
la medida en que uno compra una película que le puede costar un millón de
pesetas, un millón o seis, depende de los productos, de horarios, sobre
todo, si es en blanco y negro, en color, si una película es antigua o
moderna, etcétera, hay diferentes costes; pero lo que es evidente es que
nosotros necesitamos, para una emisión de 18 horas, como aproximadamente
hacemos en estos momentos, tener una producción ajena como el resto de
las televisiones del mundo, de las públicas, porque ni siquiera voy a
hablar de las televisiones privadas.

Pero la pregunta que formulaba su señoría era la siguiente. ¿Por qué hay
más producción ajena en almacén que producción propia? Entre otras cosas
porque la producción propia sale siempre en pantalla en muy poco tiempo.

Cuando producimos una obra como La Regenta ya le anuncio que va a estar a
primeros de año. Si ésa fuera una serie ajena, a lo mejor no la podríamos
emitir hasta dentro de tres años. Evidentemente, la producción propia no
se suele tener en stock, solamente algunos productos, como documentales u
otro tipo de programas que se van poniendo en antena. La gran producción
propia está todos los días en la pantalla.

Le voy a decir una cosa, para no hacerlo muy largo. Cuando hablamos de la
optimización de personal le puedo informar de que en estos momentos
tenemos absolutamente todos los platós en funcionamiento. De las cabinas
de edición ya sale humo. Se trabaja en horarios de madrugada en lo que es
la posproducción de muchos programas; en fines de semana incluso se
trabaja de madrugada. Es decir, tenemos en estos momentos el almacén a
tope, la fábrica a tope en estos momentos, lo cual quiere decir que el
personal está optimizado. No hay grandes recursos ociosos, todo lo
contrario, en los últimos tiempos se ha ido, digamos, dando trabajo a
todo el mundo, intentando que todo el mundo colabore en la producción de
la casa y, en líneas generales, es así.

Ahora bien, en cuanto a esa gran producción que tenemos en estos
momentos, cuando se aplique a rajatabla la Directiva europea en materia
de participación del sector privado en la producción de las televisiones,
es decir, que las televisiones tengamos que cumplir el compromiso,
realmente tendremos un problema añadido, y es que no podremos producir
tanto en la casa porque tendremos que desviar partidas importantes y
significativas de nuestros presupuestos a la iniciativa privada, como así
figura en el actual texto de la Directiva europea de la televisión sin
fronteras.

Quiero que su señoría esté seguro de que estamos en un modelo normal,
absolutamente europeo, en el que la producción propia tiene una inversión
determinada y la producción ajena es la que figura en todas las otras
televisiones; que el almacén --como en las demás televisiones-- está
lleno de producción ajena, porque con la producción propia lo que uno
quiere, inmediatamente después de hacer la inversión, es rentabilizarla.

Cuando uno hace un esfuerzo, por ejemplo, en los últimos tiempos, con una
serie como Villarriba y Villabajo, evidentemente, en cuanto está el
primer capítulo y hay cinco o seis ya elaborados, se pone en antena. ¿Por
qué? Porque ese dinero, esa inversión queremos rentabilizarlos. La
producción propia tiene un coste muy elevado que necesita un ciclo
temporal para intentar su optimización o su rentabilidad en sucesivas
emisiones o en su propia comercialización.

Son dos conceptos distintos, y puedo asegurarle que el personal está
bastante optimizado y que nuestro interés en el próximo ejercicio es,
precisamente, seguir en esa misma línea de actuación.




--DEL DIPUTADO DON JUAN RAMON LAGUNILLA ALONSO (GRUPO SOCIALISTA), QUE
FORMULA AL DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿TIENE PREVISTO EL
DIRECTOR GENERAL INCREMENTAR LA VIGILANCIA PARA EVITAR LA POSIBLE
EXTRALIMITACION DE TVE EN LOS TIEMPOS DE EMISION DE PUBLICIDAD, TEMA QUE
RECIENTEMENTE LA UNION DE CONSUMIDORES Y USUARIOS HA MANIFESTADO QUE
TODAS LAS CADENAS DE TELEVISION INCUMPLEN? (Número de expediente
182/000305.)



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El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 5, del Diputado don
Juan Ramón Lagunilla.

Tiene la palabra.




El señor LAGUNILLA ALONSO: Señor Director General, a nadie que siga
habitualmente, o no tan habitualmente, las sesiones de esta Comisión o
las noticias de televisión y los comentarios que sobre Televisión
Española, y sobre todo el mundo de la televisión, publican los periódicos
se le puede ocultar la importancia que en este mundo de las televisiones
tiene el tema de la publicidad. La importancia de los temas publicitarios
hoy se ha puesto otra vez de manifiesto en esta propia Comisión, cuando
el señor Director General ha tenido que responder de forma colateral,
porque no era el contenido principal de algunas de las preguntas, pero sí
que ha surgido al hilo de esas intervenciones, a varias preguntas
relacionadas con la importancia de los temas publicitarios en el mundo de
la televisión. Esta importancia del mundo de la publicidad va en varias
direcciones. Por un lado, en cuanto a la cantidad de la publicidad
emitida, en cuanto a la calidad de esa publicidad, los contenidos de la
misma y, por último, también en muchos de los casos, en relación a una
polémica, que el señor Director General conoce perfectamente y que todos
seguimos con interés, que se refiere al tema de la interrupción de
determinados programas televisivos con cortes publicitarios.

Todo este complejo mundo de la publicidad es mucho más importante
también, o adquiere una dimensión distinta, no digo que sea importante,
cuando estos temas se refieren a una televisión pública. No cabe duda de
que el tratamiento es distinto en las televisiones privadas que en las
públicas. En este sentido, últimamente la Unión de Consumidores incluso
ha llegado a denunciar la abusiva publicidad en la televisión pública, y
aunque ya hoy el Director General ha manifestado que se va a ejercer un
control sobre estos temas con un acuerdo, incluso, de reducción de este
contenido publicitario, de la cuota de participación de publicidad de
Televisión Española, nuestro Grupo estaría interesado en que el Señor
Director General contestara a la pregunta en los términos en que está
contenida en el orden del día, que es si tiene previsto la Dirección
General incrementar esa vigilancia para impedir la posible
extralimitación de Televisión Española en los temas de contenidos
publicitarios.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señoría,
en Televisión Española la saturación publicitaria está muy distante del
resto de las televisiones. ¿Por qué hay menos saturación publicitaria?
Por una razón obvia, porque nuestros descuentos son menores y, por tanto,
tenemos menor necesidad de las compensaciones o de las inserciones que
conlleva cualquier acuerdo comercial, de tal manera que nosotros estamos
en el cumplimiento de la Directiva europea. He dado órdenes precisas para
que no incumplamos en ningún momento dicha Directiva y creo que
razonablemente así se ha hecho. De todas maneras, habrá una comisión
interna precisamente para vigilar el cumplimiento estricto de este
mandato legislativo que va a provocar lógicamente que Televisión Española
cada vez tenga menor saturación publicitaria, una vez, espero yo, que el
año próximo haya un cambio cualitativo en el sector publicitario español.

Ese es nuestro objetivo. Nos gustaría especialmente, incluso, ir más allá
de lo que la propia Directiva europea nos obliga, pero es algo que
tenemos que contemplar con una cierta tranquilidad, aunque estamos
estudiando ya precisamente en algunas materias ser mucho más exigentes
que la propia ley.




--DEL DIPUTADO DON ENRIQUE MARTINEZ MARTINEZ (GS), QUE FORMULA AL
DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿PODRIA INDICARNOS EL DIRECTOR
GENERAL SI RADIO NACIONAL DE ESPAÑA (RNE) HA INCORPORADO YA LA TECNOLOGIA
DIGITAL A ALGUNA DE SUS CADENAS O LA PIENSA INCORPORAR EN UN FUTURO
INMEDIATO? (Número de expediente 182/000306.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 6, del señor Martínez
Martínez, que tiene la palabra.




El señor MARTINEZ MARTINEZ (don Enrique): Señor Director General, la
historia de la radio en cuanto medio de telecomunicación capaz de hacer
que alguien emita señales eléctricas y que otras personas situadas a una
gran distancia de ese centro emisor sean capaces de recibirlas, es una
historia asombrosa, por lo menos lo resulta así para quienes procedemos
de medios profesionales absolutamente ajenos a ese mundo. Es, si no la
historia interminable, la historia portentosa que ha ido avanzando desde
la válvula de vacío hasta el microprocesador, la que va igualmente desde
la electrónica analógica a la digital, con todas las ventajas que
comporta esta última, en cuanto a eliminación de distorsiones e
interferencias o el que una estación pueda emitir con una sola frecuencia
para un espacio geográfico prácticamente ilimitado o la que supone la
posibilidad de utilizar el canal digital para transmitir no sólo sonido,
sino también datos del tipo teletexto, etcétera. Es seguro que en esta
aventura apasionante no están solamente en juego los retos que tienen que
ver con la capacidad de invención humana, sino también los lógicos
intereses de distinta naturaleza, entre los que podemos incluir los
económicos, los políticos e incluso los de orden estrictamente cultural.

Señor Director General, como me gustaría saber en qué medida ha sido la
radio pública capaz de incorporar a su estructura, a su esquema de
funcionamiento, a su esquema organizativo este complejo proceso
tecnológico, es por lo que, repito, con la necesaria cautela del profano,
le pregunto si Radio Nacional de España ha incorporado ya la tecnología
digital a alguna de sus cadenas o la piensa incorporar en un futuro
inmediato.




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El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): La
distribución de todos los programas de Radio Nacional de España se
efectúa por satélite con codificación digital desde el año 1990 entre el
centro de producción de Prado del Rey y todos los centros de producción
territoriales, tanto de comunidades autónomas, emisoras provinciales o
locales.

Desde 1993 Radio Nacional también está inmersa en un proceso de
innovación que incluye también la codificación digital de los programas
territoriales, provinciales y locales entre los enlaces de conexión de
estos centros de producción con los transmisores de la propia radio.

Existen ya planes muy avanzados mediante los cuales habrá una innovación
tecnológica importante en cuanto a la difusión directa de los programas
de Radio Nacional a la hora de poder captar esos programas, de tal manera
que, así como ahora es la distribución, después, cuando se avance esto
--y estamos en el umbral--, podremos recibir, captar las señales por
sistema digital directamente a través del satélite.

También, en cuanto a la producción de programas o de música, existe ya
desde hace tiempo el sistema digital en Prado del Rey, de tal manera que
no nos hemos quedado atrás y es compromiso firme ir renovando
tecnológicamente la radio pública en todos aquellos avances que se
produzcan.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ISABEL RODRIGUEZ CALVO (GS), QUE FORMULA AL
DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿QUE PROGRAMAS TIENE TVE
PREVISTOS ENTRE SUS PROYECTOS PARA EL 95 DENTRO DE LOS DEL AREA DE
PROGRAMAS INFANTILES? (Número de expediente 182/000307.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 7, de la Diputada
señora Rodríguez Calvo. En su nombre la efectuará el señor Aguiriano, del
mismo Grupo, que tiene la palabra.




El señor AGUIRIANO FORNIES: Dada la ausencia de la Diputada, voy a hacer
la pregunta exclusivamente en los términos que aparece en el orden del
día: ¿Qué programas tiene Televisión Española previstos entre sus
proyectos para el 95, dentro de los del área de programas infantiles?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): En 1995,
entre otros, está «Club Disney»; hay un contenedor infantil en TVE 1 que
se llama «Ring ring»; hay otro contenedor de dibujos animados que se
llama «Pinnic», la serie «Carmen San Diego», «Lingo», «Cifras y letras»,
«Juguemos al Trivial», «El gran circo de Televisión Española», «La
aventura del saber», «ThatÕs English», «Barrio Sésamo», «Chapulín
colorado», «Qué seré de mayor» (éste en el circuito catalán), «Sábado
fiesta», «Cartelera de cine», «Cartelera de televisión», «El Superagente
86»; teleseries como «Historias de Clarisa», «Blossom», «Los dinosaurios»
y luego hay concursos juveniles, películas y también música juvenil que
se emitirá con carácter infantil y juvenil en el año 1995.




--DEL DIPUTADO DON SALVADOR CLOTAS I CIERCO (GS), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿COMO PROYECTO TVE CUMPLIR SU COMPROMISO
DE INCREMENTAR LA CALIDAD DE LA PROGRAMACION TRAS LA APROBACION DE SU
FINANCIACION CON CARGO AL ERARIO PUBLICO EN LOS PRESUPUESTOS GENERALES
DEL ESTADO? (Número de expediente 182/000308.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 8, del diputado don
Salvador Clotas, que tiene la palabra.




El señor CLOTAS I CIERCO: Señor Director General, para el ejercicio
próximo se ha producido un cambio que nosotros hemos calificado de muy
positivo en la financiación de Televisión Española por las aportaciones
del Estado en los presupuestos generales. Sabemos perfectamente que esa
aportación es modesta comparada con la de otras televisiones públicas
europeas y que se justificaría por los servicios que está rindiendo el
grupo en temas que no son estrictamente los de la Televisión Española;
sin embargo, hay un claro compromiso que este diputado que habla reiteró
también durante ese debate por parte de Televisión Española de que eso
debe redundar en la calidad. Una de las obligaciones de la televisión
pública es mantener un nivel de calidad que muchas veces no mantienen,
desgraciadamente, las televisiones privadas.

¿Cómo piensa el Director General mantener ese compromiso de calidad
adquirido a partir de esta nueva forma de financiación mixta, si se
quiere, de Radiotelevisión Española?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau):
Nosotros, ya desde hace aproximadamente un año y específicamente desde la
programación del mes de abril, del segundo trimestre, entendimos que
teníamos que ir cambiando los contenidos y alejando algunos productos
que, si no estaban más allá de la frontera, se acercaban a ella en cuanto
a la permisividad o no de que fueran productos asumibles por la sociedad
española desde un servicio público, de tal manera que ya fuimos



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alejándonos de esa situación y ya en este otoño se ha dado una prueba más
evidente de que ése es nuestro compromiso y nuestra actitud.

El próximo año, las líneas generales de programación contemplan la
búsqueda de programas que tengan como denominador común la calidad en sus
diferentes aspectos, tanto en lo que pueden ser los informativos como los
programas de entretenimiento o productos (como hoy también en algúnas
intervenciones he podido informar) que van a formar parte de nuestro
compromiso en 1995: por ejemplo, la puesta en marcha y producción de
grandes obras de la literatura española, como hemos hecho recientemente;
el acuerdo con el sector de la producción del cine español, que prevé un
acuerdo global durante una serie de años que permitirá que el cine
español tenga un aliado, como siempre fue Televisión Española, y aunque
ahora lo hacemos sin que haya un marco de referencia o un acuerdo global,
como va a ser sin duda el resultado del convenio que ayer se firmó entre
el Ministerio de Cultura y Radiotelevisión Española, que contempla la
posibilidad de que, al igual que Radio nacional de España, a través de
Radio 2, es la gran sala de conciertos de nuestro país, también a través
de la primera cadena y de la segunda los ciudadanos españoles puedan ver
o escuchar grandes eventos que son promovidos y financiados por el
Ministerio de Cultura. Eso conlleva unos gastos importantes, pero, si hay
esa unidad de acción entre el Ministerio de Cultura y nosotros, podemos
conseguir que ciudadanos alejados del centro de España puedan contemplar
aquellas grandes zarzuelas que se proyectan en nuestro país, que se
presentan en Madrid concretamente, grandes ciclos de danza, grandes obras
de teatro en grandes teatros públicos o incluso aquellas obras que,
financiadas por el Ministerio de Cultura, puedan ser también acordadas en
sus cláusulas, que Televisión Española pueda emitir con posterioridad,
una vez producido este evento, para el resto del país; el que los
conciertos de la Orquesta Nacional o la Orquesta Joven de España, en este
caso, puedan estar presentes también en la programación de Televisión
Española. Quiere eso decir que hay un esfuerzo determinado y claro en
relación a lo que va a ser el intento de promover lo cultural aún más en
Televisión Española.

Ese es el compromiso, a sabiendas de que muchos de estos programas --como
puede ser, como digo, la danza, la ópera, los conciertos de música
clásica, obras de teatro que a veces no son muy comerciales-- van a tener
poca audiencia y que los gastos de producción son elevados, pero, aun
así, nosotros entendemos que debemos plantear unas líneas generales de
programación para el año que viene, que contemplen precisamente esa
dedicación o ese refuerzo a lo que hasta ahora había sido un compromiso
firme por parte de la televisión pública, pero que, a partir de ahora, se
refuerza, como digo, con ese compromiso alcanzado ayer con el Ministerio
de Cultura, de tal manera que ésa va a ser un poco la actitud firme por
parte de la Dirección General en cuanto a los cambios cualitativos que se
van a producir en la programación del año 1995 y siguientes.




El señor PRESIDENTE: Señor Clotas.




El señor CLOTAS I CIERCO: Intervengo para agradecerle al Director General
la respuesta. Creo que es satisfactoria. Efectivamente, la televisión
pública tiene que resolver un problema muy difícil: por una parte, no
puede dejar de atender a aspectos culturales que son minoritarios y, por
tanto, no tienen la audiencia quizá que se desearía --eso no puede ser la
regla general--, y hay que atender también a otro tipo de programas, como
bien ha dicho, que, por no ser más mayoritarios y de más distracción, no
pueden dejar de tener su calidad debida.

Lo que sí quiero es celebrar de una manera muy especial lo que ha dicho
respecto a la cinematografía, porque él sabe que este Diputado que les
habla se ha preocupado en reiteradas ocasiones de esa relación
cinematografía-Televisión Española, que es vital para el cine español,
como lo es para todas las cinematografías europeas.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ANNA BALLETBO I PUIG, DEL GRUPO SOCIALISTA, QUE
FORMULA AL DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿PIENSA TVE CONTINUAR
SU COLABORACION EN BENEFICIO DEL CINE ESPAÑOL A LO LARGO DE 1995? (Número
de expediente 182/000309.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 9, de la señora
Balletbò.

Señora Balletbò, tiene la palabra.




La señora BALLETBO I PUIG: Esta pregunta entroncaba también directamente
con algunas de las respuestas que ha expresado el Director General en
relación a la pregunta del señor Clotas.

Dada la relación evidente que ya se ha destacado entre la producción
cinematográfica y la producción televisiva y ante la necesidad de
competir conjuntamente frente a la competencia de otros países europeos y
también de las producciones norteamericanas, yo quería que el Director
General nos valorase esa colaboración que se ha realizado con el cine
durante el año 1994 y nos dijera cuáles son sus proyectos en relación a
la continuación de esta colaboración para 1995.




El señor PRESIDENTE: Señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señora
Balletbò, nosotros, en este ejercicio y en el pasado, reiniciamos ya de
manera firme la colaboración con el cine español, y la mayor parte de las
grandes películas que se están proyectando o estrenando en estos momentos
en las pantallas cuentan con el apoyo de Televisión Española en cuanto a
la adquisición de derechos de antena.

Para nosotros hay ahora mismo un referente importante, que es lo que
hacen algunas televisiones públicas europeas, que es coproducir el cine
que se hace en sus respectivos países. En cualquier caso, vamos a
alcanzar --lo estamos negociando y ultimando-- un acuerdo con los



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productores del cine español, que contempla un ciclo de cinco años, con
un compromiso mínimo por parte de Televisión Española en cuanto a
adquisición de derechos de antena o de coproducción en algunas de esas
películas que otros productores presenten a Televisión Española.

Yo no sé cómo va a quedar finalmente el plan estratégico, pero sí estimo
que una de las posibilidades creo inteligentes que podríamos adoptar es
la creación de una sociedad de derechos --una pequeña sociedad, con muy
poco personal-- que se ocupara precisamente de la financiación o tuviera
la capacidad de alcanzar acuerdos importantes en el sector
cinematográfico español, bien por derechos de antena o bien por entrar en
coproducción.

¿Qué ocurre en estos momentos? Sigue habiendo una dificultad --y el señor
Clotas se refería antes a ella en su petición relativa a que el cine
español y Televisión Española volvieran a ser un maridaje perfecto-- en
cuanto a nuestro papel de coproductores. Yo debo reconocer mi fracaso
reiterado con sucesivos ministros de Cultura en relación a lo que yo
entendía que se debía suprimir en el decreto que contempla las
subvenciones del cine español, que impide a las empresas públicas
participar de ese tipo de subvenciones, lo cual nos pone con una mano en
la espalda a la hora de ser coproductores con otros, porque si nuestra
presencia impide el que otros puedan recibir subvenciones del Estado, en
este caso no nos facilita nuestro papel de productor. Nosotros no
queremos producir cine exclusivamente con nuestro esfuerzo. Nuestro deseo
es coproducir, participar en unos casos en un porcentaje mayor o menor,
pero tener también una corresponsabilidad a la hora de la producción del
cine, no simplemente nuestro papel de «partenaire» en cuanto a la
adquisición de derechos.

Por tanto, como digo, nuestro compromiso es firme. Se alcanzará un
acuerdo que se está ultimando ya --un compromiso para cinco años--, lo
cual permite que el cine español tenga la seguridad de que hay una
colaboración --porque no hay que contemplarlo como una ayuda--
importante, de la que se benefician tanto los productores como la propia
Televisión Española.




El señor PRESIDENTE: Señora Balletbò.




La señora BALLETBO I PUIG: Si entiendo, pues, lo que el Director General
nos acaba de exponer, realmente se está realizando un nuevo proyecto en
base a esa nueva sociedad que se piensa crear para poder gestionar de una
forma más dinámica esta colaboración.

En ese sentido, yo quiero decirle que tengan en cuenta --si yo he
entendido bien-- que, en principio, Televisión Española estaría para
quien le tuviera que dar los derechos de antena y los derechos de
coproducción, pero que tenga bien pensado la venta de derechos en caso de
exportación, porque, entre otras cosas, yo creo que esos productos tienen
una magnífica oferta, sobre todo en el mercado latinoamericano, que, en
principio, siempre son un poco difíciles de cobrar, pero que poco a poco,
parece que va regularizándose y, por tanto, podría ser también, a medio
plazo, una fuente de ingresos para recuperar una parte de estos gastos.




El señor PRESIDENTE: Señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Estoy de
acuerdo en esta solución, tengamos sociedad o no tengamos sociedad. El
compromiso es firme. De hecho, Televisión Española o el Ente Público será
quien suscriba el acuerdo.

Yo creo que es importante que en España haya una producción
cinematográfica suficiente. Bien es cierto que esto va a resolver muy
poco, señora Balletbò, lo que decía usted de la presencia del cine
norteamericano en España, en Europa. Toda esta actitud del GATT,
etcétera, excepción cultural, no sirve de nada si no existe una
producción seria, rigurosa, con inversiones importantes, alejadas de los
temas domésticos, buscando temas mucho más universales. Es evidente que
por más esfuerzos, por más discurso... yo ya lo he dicho reiteradamente
en algunas reuniones internacionales. Recuerdo el año pasado, en
noviembre, en la convención de las empresas públicas en Bruselas, y debo
decir que mi tesis fue precisamente: Dejémonos de hablar de la excepción
cultural y lo que tenemos que hacer es una industria audiovisual europea,
en la que las televisiones públicas participemos con el sector privado y
realmente pongamos esfuerzos económicos suficientes, recursos económicos
suficientes para poder convertirnos en una productora alternativa a las
norteamericanas. A uno le aplauden mucho, pero, a continuación, no
alcanzamos ningún acuerdo. Hay algunos pequeños acuerdos entre
televisiones públicas europeas. Generalmente suelen ser RAI, Attendé o
France en estos momentos y nosotros y excepcionalmente, a veces, la
televisión alemana. Pero si no hay una industria audiovisual europea,
seguiremos teniendo una industria pequeña --en nuestro país es muy
pequeña--, pero si tiene alguna virtualidad y algún futuro es
precisamente con la colaboración de Televisión Española y del resto de
las televisiones, tanto autonómicas como privadas.

Creo que ese esfuerzo es necesario. Creo que nuestro país tiene creativos
suficientes, y lo que hay que hacer es arriesgar, invertir, y en ese
proceso, las televisiones, públicas y privadas, deben tener un compromiso
firme de apoyo o de ayuda --en definitiva, es ayudarse las propias
televisiones también-- por tener productos que en los últimos tiempos se
ha demostrado que tienen una gran calidad.




--DEL DIPUTADO DON JOSE ANTONIO ALONSO CONESA, DEL GRUPO SOCIALISTA, QUE
FORMULA AL DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿SE HA LLEGADO A ALGUN
ACUERDO CON LAS CADENAS PRIVADAS Y AUTONOMICAS O SE ESTAN REALIZANDO, AL
MENOS, GESTIONES CON TODAS ELLAS PARA EVITAR LA CONTRAPROGRAMACION?
(Número de expediente: 182/000310.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 10, del Diputado señor
Alonso Conesa.

Señor Alonso Conesa, tiene la palabra.




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El señor ALONSO CONESA: Señor Director General, mi pregunta trata sobre
el asunto de la contraprogramación, esa estrategia por la que las
televisiones emiten programas a una misma hora y dirigidos a un mismo
público. Sistema que se empezó a implantar en las televisiones americanas
y que parece ser ha llegado a España; incluso ha sido motivo de debate en
las II Jornadas, celebradas recientemente en la Universidad Complutense,
sobre contraprogramación y publicidad. Esta situación ha provocado un
debate y unas críticas en el mundo social, derivadas de esta estrategia
que, como digo, ha provocado que distintos escritores, incluso
representantes de la televisión, locutores y periodistas, han generado
sus críticas a este sistema. Recientemente, el Partido Popular ha acusado
a Televisión Española de contraprogramar a Aznar en Antena 3 con un
partido del Deportivo de La Coruña-Borusia.

Por todo ello, señor Director General, este Diputado quiere conocer si
hay ya algún tipo de acuerdo con las cadenas privadas y autonómicas
respecto a esta estrategia de la contraprogramación. Nos gustaría también
que manifestara su opinión ante la Comisión sobre esta acusación que el
Partido Popular ha hecho a Televisión Española.




El señor PRESIDENTE: Recuerdo al señor Alonso Conesa que la pregunta que
figura en el orden del día no hace referencia alguna a temas del Partido
Popular.

Señor Director General, tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): La
posibilidad de hacer un acuerdo no es fácil. Yo, reiteradamente, he
planteado a las diferentes televisiones, públicas y privadas, el acuerdo
de que un día concreto de la semana, del mes o del trimestres, nosotros
anunciemos la programación. Ya sé que un trimestre o un mes es excesivo,
pero yo entiendo que semanal o quincenalmente todas las televisiones
podrían mostrar la posibilidad de dar, a la misma hora, en el mismo
momento y ante el mismo recipiendario de esas programaciones, nuestras
pretensiones de emisión. Eso evitaría, sin duda --así se hace en algunos
otros países--, el que todo el mundo esté pendiente de que Televisión
Española anuncie su programación para hacer la contraprogramación.

Es verdad --y yo lo he reconocido en esta Comisión-- que alguna vez
Televisión Española ha hecho contraprogramación, entre otras cosas para
demostrar que también sabemos y que podemos conseguir los mismos
resultados. En cualquier caso, a mí no me gusta esta práctica y ojalá
pudiéramos desterrarla, pero para ello no es posible que sea Televisión
Española la que tenga que poner una mejilla, la otra mejilla y el resto
del cuerpo, sino que es necesario que todos estemos de acuerdo en que la
contraprogramación se acabe. Incluso debo decirle --y lo lamento
profundamente-- que algunas publicaciones se ven perjudicadas
notablemente por esta práctica en la que todos, unos más y otros menos,
incurrimos. De tal manera que creo que es algo que hay que evitar.

En cuanto a lo que se ha manifestado de que Televisión Española ha
contraprogramado, debo decirle que no es cierto, esto no ha sido así. Es
más, incluso la propia televisión que inició este programa de debate
anticipó su horario, que normalmente va a la medianoche y ese día fue con
anterioridad, y puedo asegurarle que nosotros no hicimos ninguna oferta
para comprar ese partido, en ningún momento. Es más: se nos preguntaba:
¿por qué no nos ofrecen la posibilidad de comprarlo? Y contestábamos: Es
que no nos interesa y, además, no tenemos presupuesto. Pues bien, el día
antes de la emisión de ese partido de fútbol, a última hora de la noche,
el presidente del Club Deportivo de La Coruña habló con don Ramón Colom.

Yo estaba en el extranjero, me estuvieron llamando y debo decirle --sin
tomar en consideración la palabra-- que estuvieron insistiendo, por no
decir presionando, para que nos quedáramos con ese partido de fútbol. A
nadie se le oculta que el presidente del Deportivo de La Coruña es un
determinado Diputado de esta Cámara, y puedo asegurarle que la
insistencia de este Diputado tenía el fin de que se pudiera ver el
partido de fútbol en el resto de España. Seguramente él desconocía que su
presidente fuera a participar en otra televisión, pero puedo asegurarle
que no teníamos presupuesto para comprar ese partido, no nos interesaba y
además lo hemos dado gratis. Se ha dicho que hemos pagado una millonada
para contraprogramar al señor Aznar. Puedo asegurarles que no es una
práctica de Televisión Española y que no hemos pagado un duro. A esos que
dicen que hemos pagado una millonada para dar el partido, les aseguro que
no hemos pagado ni una peseta. Ha sido el interés del Deportivo --cosa
que creo legítima-- el que se viera en todo el país porque era un gran
evento deportivo y, además, porque ya había conseguido sus recursos
importantes al venderlo a Alemania, que lo vendió por una cifra
astronómica. Allí sí lo vendió por una cifra astronómica. Nosotros
simplemente fuimos soporte en el resto del país, exceptuando en este caso
Galicia, y por voluntad del presidente del Deportivo de La Coruña. El día
antes, a las 10,30 de la noche del lunes, fue cuando se alcanzó el
acuerdo entre don Ramón Colom y el señor Lendoiro, y al día siguiente no
sabían ni siquiera el horario del programa del señor Aznar, que se
anticipó, porque normalmente va a la medianoche.




--DEL DIPUTADO DON FRANCISCO JAVIER MARTIN DEL BURGO SIMARRO, DEL GRUPO
PARLAMENTARIO SOCIALISTA, QUE FORMULA AL DIRECTOR GENERAL DEL ENTE
PUBLICO RTVE: ¿ESPERA LLEGAR EL DIRECTOR GENERAL DE RTVE A ALGUN ACUERDO
CON LA FORTA Y LAS CADENAS PRIVADAS PARA CAMBIAR EL HORARIO DE EMISION DE
PARTIDOS DE FUTBOL? (Número de expediente 182/000311.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 11, del Diputado Martín
del Burgo.

Señor Martín del Burgo, tiene la palabra.




El señor MARTIN DEL BURGO SIMARRO: Señor García Candau, en España el
fútbol es considerado como



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el deporte rey en función de los seguidores que asisten a los estadios y
en función del seguimiento que los aficionados hacen de las
retransmisiones de los partidos. El partido televisado de los sábados y
su hora de programación, últimamente las nueve de la noche, es centro de
polémica entablada entre la Federación de restaurantes, cafeterías y
bares, así como la de empresarios de cine y de teatro, por un lado, y la
FORTA, organismo que agrupa a las televisiones autonómicas, por otro. Se
iniciaron conversaciones, hace unas fechas, sin resultado positivo al día
de hoy y sin resultado válido, por tanto, para las partes. Se anuncian
--hemos conocido-- movilizaciones en el sector empresarial de hostelería,
de ocio y de espectáculos. Están en juego, a mi juicio, los intereses
legítimos de los televidentes que, en número significativo y creciente,
siguen la retransmisión de los encuentros; están en juego también los
intereses de las cadenas de televisión respectivas y los de sus
anunciantes publicitarios; están en juego los intereses de los clubes y
los de un sector castigado en los últimos meses como consecuencia de la
ya superada, afortunadamente, recesión económica. Me estoy refiriendo al
sector de hostelería y de espectáculos.

En este sentido, señor García Candau, y en la búsqueda del conveniente
acuerdo y del sincretismo, que no es tarea baladí en el tema que estamos
tratando, le formulo la pregunta en el sentido de si el Director General
del Ente espera llegar a algún tipo de acuerdo con la FORTA y las cadenas
privadas para cambiar el horario de emisión de los de fútbol.




El señor PRESIDENTE: Señor Director General, tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Yo
entiendo su preocupación y soy consciente de que hay una cierta tensión
entre el sector de la hostelería y la emisión de los partidos de fútbol
los sábados. No sé si hoy o ayer, leía que una de las propuestas del
sector era que se pasara el partido a los domingos, que es uno de los
días que cierra un gran sector de la hostelería. Mi opinión en este caso
es muy personal, es decir, nosotros, como Televisión Española, somos
meros subsidiarios en la España no fortificada, nosotros, simplemente, lo
que hacemos es ser un soporte en el resto del país en el que no hay
televisiones autonómicas, para que puedan contemplar los partidos de
fútbol los sábados, pero no tenemos ninguna posibilidad de modificar o
enmendar el horario. El horario lo marca la FORTA, las televisiones
autonómicas, y nosotros ponemos el soporte para que en aquellas
comunidades donde no existe la televisión autonómica se contemple, lo
cual genera un gasto importante para nosotros y un nulo ingreso. Esta es
una realidad.

Yo tengo la impresión, porque con algún director general de las
televisiones autonómicas he hablado, de que se tendrán que replantear el
horario, porque esa protesta va creciendo y seguramente va a ser difícil
mantener el horario actual. En cualquier caso, por nuestra parte, ellos
son soberanos y nosotros seguiremos emitiendo subsidiariamente, como
digo, en la España donde no hay televisiones autonómicas en el horario
que ellos marquen.




El señor PRESIDENTE: Señor Martín del Burgo, tiene la palabra.




El señor MARTIN DEL BURGO SIMARRO: Entendiendo su limitación
competencial, en cualquier caso, me gustaría utilizar este trámite para,
a los efectos que corresponda y con la difusión que también corresponda,
hacer un llamamiento para que se llegue a un acuerdo entre las
televisiones autonómicas, las cadenas privadas, la Federación Española de
Fútbol y la Liga de fútbol profesional, porque están en juego intereses
legítimos de muchas partes.




--DEL DIPUTADO DON JORGE NOVELLA SUAREZ (GS), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿TIENE EL DIRECTOR GENERAL EL PROYECTO DE
SOLICITAR QUE EL NUEVO CONSEJO DE ADMINISTRACION DE RTVE ESTUDIE Y REVISE
EN SU CASO LOS PRINCIPIOS GENERALES DE PROGRAMACION QUE TIENEN YA MAS DE
UNA DECADA DE VIGENCIA? (Número de expediente 182/000312.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 12, de don Jorge
Novella, que la va a formular el señor Aguiriano.




El señor AGUIRIANO FORNES: El señor Novella está enfermo esta semana, no
ha podido venir a las reuniones del Pleno; por tanto, voy a hacer la
pregunta, igual que antes, en el único sentido que aparece en el orden
del día: ¿Tiene el Director General el proyecto de solicitar que el nuevo
Consejo de Administración de Radiotelevisión Española estudie y revise,
en su caso, los principios generales de programación que tienen ya más de
una década de vigencia?



El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Si uno
estudia con un cierto detenimiento los principios básicos de programación
que en su día aprobó el primer Consejo de Administración, he de decirle
que están plenamente vigentes. Quizá haya algunos matices o algunas
afirmaciones que hoy ya tienen poco sentido, en la medida en que la
democracia está consolidada, en que la España autonómica es una realidad,
etcétera, o simplemente definiciones que hay en relación a la antigua
Radiocadena Española, que ahora ya no existe, que está fusionada y que
incluso el carácter local de aquellas emisoras hoy es muy pequeño. De tal
manera que, salvo algunos matices que se podrían pulir, los principios
están plenamente vigentes y creo que, más allá de lo que fuera
matizarlos, no me parece necesario. Otra



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cosa es que el Consejo de Administración entienda que deba hacerlo, en
cuyo caso, con mucho gusto, yo participaré en ese debate, pero me da la
impresión de que cada vez que se ha intentado renovarlos la verdad es que
el contenido debo reconocer que se hizo un gran esfuerzo por aquellos
consejeros y tuvieron una enorme inteligencia cuando elaboraron esos
principios básicos de programación.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ANA MATO ADROVER (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿QUE MEDIDAS DE CONTROL VA A ADOPTAR EL
DIRECTOR GENERAL PARA QUE SE CUMPLAN LOS PRESUPUESTOS QUE APRUEBEN LAS
CORTES GENERALES PARA EL ENTE PUBLICO RTVE EN 1995? (Número de expediente
182/000313.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 13, de la Diputada
señora Mato.

La señora Mato tiene la palabra.




La señora MATO ADROVER: Señor Director General, ¿nos podría informar qué
medidas de control va a adoptar para que se cumplan los presupuestos que
aprueben las Cortes Generales para el Ente Público RTVE para 1995?



El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau):
Internamente, en Radiotelevisión Española hay una unidad de control de
gestión que permite el correcto seguimiento de la ejecución
presupuestaria.

El próximo año es un ejercicio que entiendo yo con grandes dificultades,
porque en los últimos años hemos actuado reduciendo el presupuesto en
pesetas constantes. Tenemos un escenario y un mercado cada vez más caro,
aunque se empiezan a ver actitudes mucho más razonables, pero,
evidentemente, es un presupuesto que con cierto rigor se va a ejecutar y
creo que no va a tener ninguna dificultad, porque los gastos siempre se
suelen controlar, mientras que en los últimos años ha habido, por la
desagregación de las audiencias, problemas en los ingresos.

En cualquier caso, creo que el presupuesto de la delimitación
prespuestaria de la capacidad de captación publicitaria es más que
razonable; son cifras incluso que están por debajo de las actuales,
cuando el mercado está creciendo y cuando, sin duda, los ingresos serán
distintos.

Por tanto, estoy convencido de que la ejecución de ese presupuesto va a
ser absolutamente fácil, aun con la dificultad del mercado.




El señor PRESIDENTE: La señora Mato, para réplica, tiene la palabra.




La señora MATO ADROVER: Señor Director General, como usted sabe, ha sido
argumento permanente de nuestro Grupo la preocupación, y a la vez la
esperanza, de que algún año los presupuestos que aprueba el Parlamento se
cumplan y coincidan en algo con los presupuestos que ejecuta
Radiotelevisión Española, al igual que también somos partidarios de que
las programaciones de Radiotelevisión Española no se modifiquen por
ningún motivo político.

Estamos hablando, señor Director General, en primer lugar, de un problema
político, que le resumo brevemente. El Gobierno, a través de usted, nunca
respeta las decisiones de esta Cámara. En segundo lugar, estamos hablando
de un problema económico. Es un dislate en cualquier compañía que se
gaste más de lo que se prevé y que año tras año también se ingrese menos
de lo que se presupuesta. Y, en tercer lugar, es un problema de control
de gasto público, y ahí iba exactamente mi pregunta.

Según dice el Ministro Solbes, el gran problema económico de España es el
control del gasto público, y además el señor Solbes ha manifestado
--aunque del dicho al hecho va un gran trecho-- que va a controlar
mensualmente la ejecución de los presupuestos. Por este motivo, y siendo
usted el responsable de la peor evolución de una empresa pública en
España en los últimos años, aunque también podía decir, sin ofender y con
perdón, que Radiotelevisión Española e Iberia pueden ser las dos empresas
que han tenido esa evolución, nos imaginábamos que usted iba a establecer
controles especiales y que no iba a seguir con los mismos controles
existentes hasta estos momentos, para que se cumplieran los presupuestos
para este año, sobre todo cuando estamos hablando de unos presupuestos
que suponen unas pérdidas multimillonarias para el bolsillo de los
españoles.

Además, señorías, no hablo por hablar, y me van a a permitir que les dé
los siguientes datos: previsión de ingresos año 1992, 123.000 millones de
pesetas; ingresado, 92.000 millones. Previsión de ingresos año 1993,
125.000 millones de pesetas; ingresados, 72.000 millones. Previsión de
ingresos año 1994, 91.000 millones; en el mes de septiembre los datos que
nos facilitan de ejecutado son 38.000 millones de pesetas. Previsión de
gastos, año 1992, 172.000 millones; gastado, 183.000 millones. Año 1993:
gastos previstos, 176.000 millones; gastos ejecutados, 215.000 millones
de pesetas. Año 1994: todavía no sabemos el resultado del gasto.

Previsión de pérdidas. Año 1992: 41.000 millones; pérdidas reales, 76.000
millones. Año 1993: previsión de pérdidas, 50.000 millones; pérdidas
reales, 127.000 millones. Año 1994: previsión de pérdidas, 105.000
millones; pérdidas reales, todavía no sabemos la previsión; esperamos que
nos la confirme el director General en la próxima pregunta. En principio,
parece ser que no bajarán de los 127.000 millones.

Con estos datos supongo que SS. SS. estarán asombrados, pero las cifras
son las cifras, no son opinables y, además, son tozudas.

Señor Director General, podemos pensar que si en estos años se han
multiplicado las pérdidas reales y las desviaciones --comparo con el año
1993, que es el último año



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del que tenemos datos reales cerrados-- han sido de un 254 por ciento con
respecto a las pérdidas presupuestadas, esto supone que el presupuesto de
1995, si aplicamos esa misma desviación, se situaría, en lugar de 117.000
millones, en unas pérdidas de 297.000 millones de pesetas, casi 300.000
millones de pesetas. Que conste que no me estoy refiriendo nada más que a
pérdidas de explotación y a subvención a la explotación, y en ningún
momento estoy introduciendo ningún dato referido a aportaciones de
capital que también realiza el Estado a Radiotelevisión Española. Por
este motivo, señor Director General, nos gustaría saber qué van a hacer
ustedes para que se cumplan estos presupuestos, qué van a hacer para
controlar las pérdidas previstas y qué van a hacer para que nunca más se
nos vuelva a decir alegremente que el presupuesto se ha tenido que
incrementar al ser el año electoral y por eso tenemos que pagar miles y
miles de millones de pérdidas por exceso de gasto. Por una vez, creemos
que deben ser ustedes respetuosos con el Parlamento, con el bolsillo de
los españoles, y les anticipo que si usted sigue en la actitud que nos ha
demostrado en estos momentos de pasividad, el panorama de Radiotelevisión
Española va a ser cada vez más oscuro, y lo que dijo aquel Ministro, que
usted recordará, de que Radiotelevisión Española era media RENFE, tendrá
que ampliarse a que Radiotelevisión Española será RENFE completa.

Solicito de su conciencia democrática que cualquier modificación en el
capítulo de gastos que se efectúe en los presupuestos para 1995 se
comunique de oficio a esta Comisión de Control por usted mismo.

Igualmente le anticipo que nuestro Grupo va a pedir tres veces al año su
comparecencia ante esta Comisión para que nos informe de la ejecución de
los presupuestos para 1995.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Muchas
gracias, señora Mato. Aunque mantiene usted su dureza y su actitud
beligerante, incluso hoy he notado --quizá porque se van acercando ya las
fechas navideñas-- una actitud más amable. (Risas.)
En cualquier caso, debo decirle, señora Mato, que yo entiendo algunas de
sus preocupaciones, pero que nosotros hemos hecho un esfuerzo importante
en la medida en que hoy Radiotelevisión Española sigue teniendo la
necesidad, como cualquier televisión pública europea, de contar con una
financiación de la que se ha estado alejada. El año próximo, y lo he
dicho, es el umbral de una puesta en práctica de un plan estratégico que,
sin duda, va a permitir ya aliviar los costes de financiación de la
radiotelevisión pública, que hasta ahora venían, o bien de la publicidad,
o bien del endeudamiento. Esa es una realidad que va a cambiar y que,
como decía anteriormente, el ejercicio de 1995 es un ejercicio en el que
las cuentas de Radiotelevisión se van a poder cumplir, entre otras cosas
porque, por más perturbación que pueda haber en el sector publicitario,
sin duda alguna las cuotas que ya se ha reservado Televisión Española son
absolutamente realizables, porque es una televisión de calidad, de
audiencia, de prestigio y, por tanto, los anunciantes van a seguir
queriendo tener su presencia.

En consecuencia, desde esa perspectiva puedo asegurarle que la ejecución
del presupuesto de 1995, aún con sus dificultades, va a ser exacta,
porque es un ejercicio, aunque difícil, ejecutable.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ANA MATO ADROVER (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE:¿CUAL ES LA PREVISION DEL RESULTADO
ECONOMICO DEL ENTE PUBLICO RTVE Y SUS SOCIEDADES A 31 DE DICIEMBRE 1994,
ANTES DE SUBVENCIONES E IMPUESTOS? (Número de Expediente 182/000314.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 14, de la Diputada
señora Mato, que tiene la palabra.




La señora MATO ADROVER: Señor Director General, ¿cuál es la previsión de
resultado económico para el ejercicio de 1994?



El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Mire,
señora Mato, usted conoce perfectamente que en la Comisión de
presupuestos se informó de una previsión que puede verse modificada
claramente porque precisamente en los últimos meses en la previsión de
ingresos por publicidad --me refiero a los meses de octubre y noviembre--
estamos superando los ingresos previstos, cosa que no había ocurrido en
el tiempo anterior. El mes de diciembre la previsión es también del mismo
tenor e incluso en el primer trimestre hay reservas de inversión
publicitaria que prevén unos cambios cualitativos.

También le tengo que decir que es difícil dar algún cambio y, además, ya
sabemos cómo es cambiar de una cifra a otra. El año pasado nos
encontramos con esa dificultad. También hoy mismo, por ejemplo, hay
negociaciones para venta de activos ociosos y de esas negociaciones
dependen los resultados totales. Con estas previsiones, es difícil que
antes de un cierre contable podamos anunciar lo que va a ocurrir, porque
hay variables que en estos momentos no están resueltas.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra la señora Mato.




La señora MATO ADROVER: En primer lugar, señor Director General, con toda
la educación y cortesía que usted me merece y con todo el rigor y el tono
que merece también la grave situación por la que atraviesa
Radiotelevisión Española --que creo que no es para que nos lo tomemos



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con mucha amabilidad, sino con medidas concretas para solucionarla, tanto
de medidas presupuestarias de control, que ya veo que no se va a hacer
ninguna, como de medidas para la finalización del año--, le vuelvo a
solicitar que me diga usted la cifra de resultado económico para 1994 que
tienen ustedes prevista, puesto que parece ser que ha variado un poco de
los 127.000 millones que nos facilitaban en el mes de septiembre como
previsión de resultado.

En cualquier caso, simplemente comentar --ya que los controles parece que
brillan por su ausencia-- dos datos. En las mismas contestaciones
presupuestarias de septiembre de 1994 nos facilitaban que los gastos en
aprovisionamiento iban a incrementarse en Televisión Española el año 1994
y que por eso, probablemente, habría desviaciones en la cuenta de
resultados. También nos comunicaban que los ingresos iban a bajar. Parece
ser que ahora van a bajar menos de lo que ustedes preveían. Nos gustaría
saber cuánto va a suponer ese menor incremento. También sabemos que las
indemnizaciones de expedientes de regulación de empleo han subido y han
incrementado la partida de gastos
Todo esto viene a cuento de que usted es el mismo gestor, aunque, después
de escucharle durante toda la mañana de hoy, nadie diría que usted es el
mismo que lleva gestionando la televisión durante cuatro años y la misma
Dirección General que ha planteado la necesidad de un plan estratégico
desde hace dos años, y dos años llevamos esperándolo; la misma Dirección
General que ha presentado dos presupuestos consecutivos sin rumbo, sin
plan de futuro; esa misma Dirección General que parece que hoy es nueva y
que es a partir de estos presupuestos cuando los van a empezar a cumplir;
la que ha ejecutado tres presupuestos incumpliendo gravemente las cifras
aprobadas por este Parlamento.

Por este motivo me gustaría que de verdad usted nos confirmara hoy cuál
es la previsión real que tienen, ya que parece que estamos en otro
camino, para finalizar este presupuesto. Espero que nos dé esta cifra.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Le
agradezco mucho a la señora Mato que incluso me haya dado argumentos para
explicar por qué hay una desviación en este ejercicio. Este ejercicio
tiene dos motivos fundamentales para contemplar la desviación. Primero,
lo que he explicado reiteradamente ante esta Cámara y ante el Consejo de
Administración, que es la marcha del sector publicitario durante los tres
primeros trimestres. Los tres primeros trimestres, señora Mato --y lo he
explicado aquí e incluso el Consejo de Administración así lo entendió--,
el sector publicitario tuvo ese comportamiento porque yo entendía que
nosotros no debíamos entrar en la perturbación del mercado en una bajada
de las tarifas. Bajar esas tarifas significaba perturbar el mercado y
dejarlo, además, herido de muerte durante mucho tiempo. Asimismo,
conllevaba un daño objetivo para el sector editorial de periódicos y
revistas y de la propia radio, que están también muy preocupados y que
precisamente nosotros hemos hecho un ejercicio responsable a la hora de
no alterar precisamente esa ley del mercado que, desde mi punto de vista,
era sagrada, que era precisamente no entrar e irrumpir como un caballo en
una cacharrería y ponernos al mismo nivel de descuentos de las otras
ofertas de televisión. Esa ha sido una razón fundamental para que una
parte del presupuesto de ingresos no se pudiera alcanzar. Pero de eso no
empezamos a hablar ahora. Recordará el Diputado señor De Grandes que ya
antes de la primavera hubo una discusión, expliqué esto y cómo yo me
había negado a bajar las tarifas precisamente para evitar eso y todo el
mundo entendía que era irresponsable el que esto no se hiciera. Además,
S. S. sabe --es verdad que llevo algunos años-- que me encontré con una
situación estructural bastante complicada y en la que nosotros hemos ido
de manera pactada resolviendo problemas que teníamos de manera objetiva,
como es precisamente todo el problema estructural. Este año lo que hemos
hecho es un esfuerzo muy importante, muy costoso, de miles de millones
precisamente para culminar el plan de regulación de empleo. Es decir, es
verdad que si hubiéramos querido buscar el cumplimiento del presupuesto
hubiéramos podido dilatar ese problema para más adelante. Lo hemos
anticipado. Hemos anticipado eso que ha venido a costar alrededor de
7.000 millones de pesetas --y podíamos habernos aliviado y haberlos
dejado para ejercicios posteriores-- porque entendíamos que había que ir
resolviendo los problemas en estos momentos. Eso, si duda, permite que
los costes de personal del año próximo estén aliviados. Hemos bajado los
recursos humanos de octubre de 1993 a octubre de 1994 en mil empleos.

Esos son los problemas estructurales que tenemos y que tenemos que seguir
resolviendo y ésa es la razón fundamental por la que este año, desde el
punto de vista publicitario y desde la solución definitiva de lo que era
el plan de regulación de empleo, tenemos un mayor coste.

Mire usted, el que hayamos culminado ese plan de regulación de empleo
supone en los dos próximos ejercicios un ahorro de alrededor de 6.000
millones de pesetas. Son acciones que a corto plazo tienen un elevado
coste, pero luego se alivian las cuentas generales del Ente Público con
este tipo de medidas.

Por tanto, ésas son las razones, y no otras, por las que el cumplimiento
presupuestario, como decía S. S., ha variado en cierta parte.

En cualquier caso, como digo, hoy se están barajando las posibilidades de
2 ó 3.000 millones de pesetas de ventas de activos ociosos que tenemos en
estos momentos. Anunciar una cifra, si se culminan, evidentemente varía
la cuenta de resultados; por tanto, aventurar una cifra exacta no me
parece lo más oportuno, y en su momento, como sabe S. S., las cuentas de
resultados son públicas, siempre las facilito a este Parlamento.




--DEL DIPUTADO DON LUIS DE GRANDES PASCUAL (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿MANTIENE EL DIRECTOR GENERAL SU NEGATIVA



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A INFORMAR SOBRE ASPECTOS CONCRETOS DE LA GESTION DEL ENTE PUBLICO RTVE Y
SUS SOCIEDADES, TANTO AL CONSEJO DE ADMINISTRACION COMO A LAS CORTES
GENERALES. (Número de expediente 182/000316.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 16, del Diputado señor
De Grandes, que tiene la palabra.




El señor DE GRANDES PASCUAL: Señor Director General, ¿mantiene el
Director General su negativa a informar sobre aspectos concretos de la
gestión del Ente Público Radiotelevisión Española y sus asociados tanto
al Consejo de Administración como a las Cortes Generales?



El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): En la
materia que sin duda es competente tanto el Parlamento como el Consejo de
Administración, siempre soy riguroso y exquisito en cuanto a facilitar la
información. Otra cosa distinta es, señor De Grandes, que de pronto se
formulen, como hizo el Partido Popular en los meses de julio y
septiembre, alrededor de quinientas preguntas, lo cual supone un esfuerzo
notable para contestar pregunta a pregunta porque eso requiere a veces la
elaboración de contestaciones adecuadas por mucho personal, que tiene
además su trabajo cotidiano y que, por tanto, no siempre es fácil
resolver esos datos.

Por tanto, no tenga usted ninguna duda de que en aquello que lógicamente
hay que informar, este Director General seguirá actuando conforme le
corresponde en derecho.




El señor PRESIDENTE: El señor De Grandes tiene la palabra.




El señor DE GRANDES PASCUAL: Señor Director General, no podemos compartir
en este caso esa autocalificación de su conducta de rigurosa y exquisita,
no digo yo que en otros aspectos lo pueda ser, pero, desde luego, en el
que nosotros inquirimos en la mañana de hoy no, sinceramente, no.

En diferentes ocasiones S. S. ha ocultado información, por decirlo de
forma menos dura, ya que invoca el amor fraterno de las Navidades
(Risas.), digamos, en una expresión menos dura, que se ha negado a
facilitar información referida al Ente Público Radiotelevisión Española y
sus sociedades. Requerimos que se pongan a trabajar. Antes he hecho
referencia a numerosas preguntas que quedan sin respuesta. Que la
respuesta a las 500 preguntas sea un trabajo ingente puede ser más así,
pero estamos esperando algo tan sencillo como es el informe de la
auditoría, cuya presentación aquí es inexcusable.

Hay una serie de cuestiones a las que no es que no haya dado respuesta o
que la esté preparando su equipo, sino que sus respuestas realmente no
nos pueden satisfacer de ninguna forma. Para no salirme del marco
temporal que tengo, a título de ejemplo le citaré las siguientes: su
respuesta negativa a facilitar el inventario de existencias. No es que no
responda, es que lo niega. Lo etéreo de los datos aportados a nuestra
petición de detalle pormenorizado del plan de inversiones para 1995. La
opacidad respecto a la creación de nuevas sociedades. El señor Director
General tampoco ha querido facilitar datos, ni precisos ni imprecisos,
sobre la futura dependencia presupuestaria de la orquesta y coros de
Radiotelevisión Española, remitiéndonos al famoso plan estratégico del
grupo, que en sí mismo constituye el permanente referente y que justifica
todo y que nunca viene y que es el deseado.

Señor Director General, su respuesta también ha sido negativa a nuestro
interés en conocer los metros cuadrados que ocupan los diferentes locales
utilizados por Televisión Española, pregunta que puede parecer extraña, y
si quiere luego le remito a la literalidad de esa respuesta.

En definitiva, por no abusar del tiempo, por qué, señor Director General,
esa falta de transparencia. A nuestro juicio, la opacidad de su gestión
no puede ampararse en un supuesto celo en no revelar datos que puedan
afectar y situar al Ente en inferioridad frente a los empresarios
competidores.

Ni el artículo 33 del Código de Comercio, que alguna vez han invocado, ni
el artículo 26 del Estatuto de Radiotelevisión Española pueden amparar su
silencio hasta el punto de condicionar el control parlamentario en los
términos a que lo lleva S. S. Alguna vez ya le he expresado que estamos
muy lejos de querer situar a Televisión Española en posición de
indefensión frente a la competencia, pero tendrá que aceptar conmigo que
las propias características de la televisión pública las somete a
controles y reglas más rigurosas que las demás con las que concurre en el
mercado. Es más, la propia existencia de esta Comisión de Control marca
la diferencia cualitativa y eludir el control con el silencio o convertir
esta Comisión en un frontón político es negar la transparencia con la que
hay que gestionar la televisión pública, que S. S. sabe, y ahora más que
nunca, que se financia con dinero de todos los españoles.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Contesto
al señor De Grandes con todo el respeto y afecto que sabe que le tengo.

Me ha planteado algunas cosas sobre las que le voy a contestar. Me pide
el detalle de inversiones de 1995. No tengo ningún inconveniente. Yo creo
que SS. SS. lo tienen en el presupuesto, pero si SS. SS. quieren yo me
comprometo a que hoy mismo el señor De Grandes tenga el detalle de las
inversiones del año 1995, ahora mismo.

Sobre lo de los metros cuadrados que ocupa Radiotelevisión Española, no
sé si a esa pregunta le habremos dado la respuesta adecuada o no, pero me
extraña mucho porque no creo que alguien quiera ocultar los metros
cuadrados. En cualquier caso, si a esa pregunta no se ha contestado o
usted no está satisfecho, con mucho gusto le aseguro, con



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el tiempo que requiere, porque a lo mejor tampoco se tenga con certeza
todo, que se la voy a facilitar.

Usted me plantea dos cuestiones, señor De Grandes. Dice: Es que usted es
opaco en relación a si se van a crear nuevas sociedades o no, y sobre
cuál va a ser el futuro de la orquesta y de los coros en el nuevo marco
de la Radiotelevisión, usted tampoco nos contesta, y dice: Usted todo lo
deja al plan estratégico. Es que no lo puedo dejar en otro lugar, señor
De Grandes. Yo no soy soberano en relación a lo que haya que hacer en
determinadas cuestiones. Por ejemplo, crear sociedades filiales, que es
una de las posibilidades --antes nos referíamos a la sociedad de derechos
y de producción cinematográfica-- es algo que tiene que aprobar el
Consejo de Administración y luego el Consejo de Ministros.

Yo puedo tener la pretensión o el deseo de que alguna sociedad filial se
pueda tener para hacer más operativa la actividad del Ente Público y de
sus sociedades, pero lo que yo no puedo decir es si voy a hacer una
sociedad anónima en relación a la orquesta y los coros, si van a estar en
el Ente Público, si creamos la sociedad dependiente únicamente de
Televisión o de Radio Nacional o hacemos la orquesta en Televisión y los
coros en Radio Nacional, etcétera. Son materias, señor De Grandes, que
normalmente, uno no puede anticipar. A uno le dicen: Hay rumores de que
esto pueda pasar a otra institución. Es verdad que se ha hablado en
muchas ocasiones de que hay posibles ocupaciones fundamentales para la
orquesta y coros que pueden ser en el Ente Público, puede ser en el
Ministerio de Cultura o puede ser en cualquier otro organismo público; es
decir, hoy la orquesta y los coros tienen una financiación pública
directa. Por tanto, la gestión de ese dinero público y de esa unidad, en
este caso la orquesta y coros, puede ser gestionada, en principio, por
Radiotelevisión Española o por cualquier otro organismo público o puede
darse una solución distinta a estar encuadrados en estos momentos en el
puro Ente Público y, a lo mejor, dejarlo en una dependencia en la
sociedad filial; por ejemplo, en Televisión Española. Eso no es ser
opaco. Yo puedo tener varias alternativas que puedo presentar al Consejo
de Administración, pero usted no me puede decir que yo busco la opacidad
por no responder a cuestiones que casi, con permiso de S. S., y lo va a
entender, son de materia casi ideológica empresarial; son acciones que
están en función de terceros que puedan acordar el criterio del Director
General. Sobre algunas cosas del plan estratégico, yo voy a formular
diferentes alternativas, entre otras cosas porque el criterio de los
consejeros puede ser muy útil a la hora de tomar decisiones. Puedo tener
la idea de una solución para las diferentes ofertas de radio, para los
diferentes canales de televisión y luego, en el debate, en el análisis,
incluso convencerme de criterios que yo ahora mismo no estoy en
disposición de defender.

Si usted me pide en este caso el detalle de las inversiones, yo se lo
facilito. Ahora bien, cuando de pronto se me pide, como en ocasiones --y
en eso le voy a decir que voy a ser opaco--, las películas que tengo en
«stock», qué películas son, qué finalización de su presencia en
Televisión Española, cuándo finaliza su presencia en Televisión,
etcétera, yo no sé cuál es el interés de conocer si una película, como
puede ser «Batman», se cancela su derecho de emisión por Televisión
Española dentro de seis meses o no. Si usted me pregunta si tengo la
película «Batman» yo se lo voy a decir. Ahora, si me pregunta cuándo voy
a dejar de tenerla, le tengo que decir que no, porque esa información no
parece que sea del interés de S. S., sino de terceros.




--DEL DIPUTADO DON FRANCISCO ANTONIO GONZALEZ PEREZ (GP) QUE FORMULA AL
DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿QUE CRITERIOS SE HAN SEGUIDO
PARA LA ELABORACION Y EMISION DEL PROGRAMA «CEUTA Y MELILLA, TIERRA
LIMITE»; INCLUIDO EN EL ESPACIO «TESTIGO DIRECTO», Y DIFUNDIDO EL DIA 15
DE NOVIEMBRE DE 1994 POR LA PRIMERA CADENA DE TELEVISION ESPAÑOLA?
(Número de expediente 182/000317.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 17, del diputado don
Francisco González Pérez, que tiene la palabra.




El señor GONZALEZ PEREZ: Señor Director General, el pasado día 15 de
noviembre se difundió por la primera cadena de Televisión Española,
dentro del programa «Testigo directo», un reportaje titulado «Ceuta y
Melilla, tierra límite», cuyo lamentable contenido provocó una lógica
indignación en ambas ciudades, que todavía no han llegado, ni he llegado
a entender los fines que se perseguían.

Señor Director General, ¿qué criterios se siguieron para la elaboración y
emisión de dicho reportaje?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Según me
informan, señor González Pérez, a quien le doy la bienvenida a esta
Comisión, porque es la primera vez que tengo el honor de dirigirme a S.

S., debo decirle lo siguiente: El formato del programa «Testigo directo»
está basado en historias que giran alrededor de un ámbito determinado. La
elección de las distintas personas debe hacerse sobre la base de la
realidad social que se busca reflejar. Es posible que las personas
elegidas no consigan retratar a gusto de todos el aspecto y la realidad
que representan o el núcleo social en el que se mueven.

Ambito del programa. En todo momento se consideró a Ceuta y Melilla como
dos ciudades englobadas dentro de una misma realidad. Se buscó una
representatitivdad social global a las dos ciudades.

Distribución de culturas. Se realizaron los siguientes reportajes
clasificados por grupos culturales: dos sobre musulmanes, tres sobre
cristianos, uno sobre hindús, dos historias mixtas cristiano-musulmana,
es decir, frontera, policía,



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etcétera, escuela, pescador, electrodomésticos, etcétera.

Esta distribución prima ligeramente a la comunidad musulmana. En Ceuta
son un 24 por ciento y en Melilla un 40 por ciento.

El programa sobre Ceuta y Melilla emitido el pasado 15 de noviembre
constaba de ocho historias distintas, que se emitieron en el siguiente
orden: primero, Frontera. A través del jefe de fronteras de la policía
española se habla de la frontera con Marruecos; segundo, Ida y vuelta.

Una mujer ceutí, de cultura cristiana, atraviesa el Estrecho 500 veces al
año llevando la mensajería de una empresa; tercero, Pescadero. Un
pescadero de Melilla, de cultura cristiana, habla de su negocio; cuarto,
Policía. La policía realiza una pequeña redada en Ceuta durante la que
detiene a un distribuidor de pastillas. Quinto, escuela. Una chica de
cultura cristiana, de 17 años, de Melilla, habla de la necesidad de ir a
la Península para realizar estudios universitarios. Sexto, musulmán. Uno
de los responsables de la comunidad musulmana de Ceuta habla de la
dificultad de enterrar a los muertos según la tradición del Islam a causa
de la falta de espacio. Séptimo, electrodomésticos. Un hombre de cultura
hindú habla de la pérdida de negocio con la Península y del crecimiento
del comercio al por mayor hacia Marruecos. Octavo. Un hombre de cultura
musulmana, de Melilla, presenta un programa de televisión, en la emisora
local y en lengua bereber. Noveno. No se pudo emitir la historia de una
persona de cultura cristiana, de clase acomodada.

Estas imágenes sin duda fueron bellas en «Testigo directo». No es un
programa tradicional de reportajes, sino que basa su estructura en el
testimonio directo de una serie de personas. No son objeto del programa
los monumentos o plazas públicas del lugar elegido, sino los lugares que
el protagonista frecuenta.

A la hora de enjuiciar cualquier programa de televisión, es conveniente
no fijarse sólo en las imágenes más espectaculares o en las declaraciones
más provocativas. En este caso tengo la sensación de que los que emiten
críticas eligen unos aspectos muy parciales del programa y no lo valoran
en toda su globalidad..




El señor PRESIDENTE: Señor González Pérez, tiene la palabra para la
contestación.




El señor GONZALEZ PEREZ: Señor Director General, el artículo 4.º,
apartado a), del Estatuto de Radio y Televisión manifiesta que los medios
de comunicación social del Estado se inspiran en principios de
objetividad, veracidad e imparcialidad de las informaciones.

Pues bien, señor Director General, en este programa en concreto se han
incumplido no uno ni dos, sino los tres principios que han de regir la
emisión de cualquier programa televisivo de esas características. Es
intolerable que haya informaciones sesgadas en lo político, y ejemplos no
faltan: unos salen perjudicados y otros salen beneficiados. Pero lo que
es absolutamente bochornoso, torticero y repugnante es que se trate de
denigrar a dos ciudades españolas.

No vamos a sorprendernos de este poco edificante ejercicio de acoso y
derribo de las dos ciudades, a lo que nos tiene acostumbrados Televisión
Española. ¿Por qué ese afán contumaz de ir a grabar y mostrárnoslas como
ciudades tercermundistas, sumergidas en raros y oscuros negocios? ¿Sabe
usted la idea que ha podido quedar en la mente de todas las personas que
hayan visto ese reportaje? La respuesta se la voy a dar yo. Es fácil y
usted la ha recordado aquí en cierta medida. No es otra que la de que en
Ceuta y Melilla sólo hay funcionarios y contrabandistas, frase que se
dijo en ese programa. Podría decirle más. Es posible que después de la
emisión del programa, la imagen que ustedes han procurado trasladar a la
opinión pública española sea la de dos ciudades sin futuro, que sólo
tienen como actividad el tráfico de drogas, el contrabando, y todo a
través de una frontera tercermundista.

Ceutíes y melillenses nos preguntamos si no se ha tratado de crear un
estado de opinión proclive a la iniciación de las negociaciones que el
Gobierno marroquí propuso dentro de la célula de reflexión sobre el
futuro de ambas ciudades, y que el Presidente del Gobierno, don Felipe
González, parece haber aceptado. ¿Por qué digo esto, señor Director
General? Porque lo más probable es que cualquier televidente que haya
visto el reportaje jamás movería un solo dedo en favor o para defender a
ambas ciudades. Piense usted en quién querría algo que se presenta como
un nido de males, sin mezcla de bien alguno. ¿Qué le parecería a usted,
señor Director General, suponiendo que viviese en un edificio que por sus
características arquitectónicas, históricas y de convivencia que el mismo
mereciera un reportaje de Televisión Española y que en su emisión sólo
salieran imágenes que reflejaran la podredumbre de un sórdido y oscuro
sótano con ratas?
Pues bien, ésa es la sensación que hemos sentido los ceutíes y los
melillenses. Pero, es más, no se han contentado ustedes con levantar
ampollas y herir la sensibilidad de las dos ciudades y de otros
españoles, sino que después de conocida la lógica reacción de rechazo en
Ceuta y en Melilla --y me consta que a usted le llegó por varias vías, y
una de ellas a través de la Delegada del Gobierno de la ciudad de Ceuta--
volvieron, con premeditación y alevosía, a emitir de nuevo el programa,
esta vez por el Canal Internacional. Es decir, no les bastó con arrastrar
la imagen de las dos ciudades ante los televidentes españoles, sino que
volvieron a hacerlo ante la opinión pública internacional, y parece ser
que se va a volver a repetir, porque, según el propio director de
«Testigo directo», don Javier Obach, parece ser que este programa se
reitera en Televisión Internacional en tres o cuatro ocasiones. Son
palabras suyas, no mías.

Señor Director General, llegado este momento, sólo me queda decirle que
ceutíes y melillenses estamos esperando que, como responsable de
Televisión Española, haga algo que sólo está en su mano, y es pedir
disculpas y rectificar, no sólo en esta Comisión, sino a través del Ente
Público que usted dirige. Señor García Candau, tenga usted la
sensibilidad y humildad suficientes como para dar este paso que esperan
130.000 ciudadanos de ambas ciudades y otros muchos más que, sin estar
allí, llevan a Ceuta y Melilla en su corazón.




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Por cierto, señor García Candau, los hebreos no salieron en ese
reportaje.




El señor PRESIDENTE: Señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Yo puedo
admitir que en ocasiones los profesionales se puedan equivocar, más allá
de que sea mi obligación defenderles, sobre todo cuando se intentan
mezclar conceptos que yo no puedo pasar por alto. Es decir, tengo que
negar rotundamente su afirmación o su insinuación de que los
profesionales que han elaborado ese programa hayan tenido un interés
perverso o incluso interés por crear un estado de opinión, como usted
cree, tenga que ver con la decisión política o acuerdos políticos de don
Felipe González. A mí eso me parece gravísimo. Yo estoy dispuesto a decir
que me digan: no nos ha gustado el programa, el programa ha sido malo, e
incluso que el programa ha podido herir la sensibilidad de los ciudadanos
porque no ha tenido el tratamiento oportuno. Eso lo puedo entender,
aunque problablemente entra más en el terreno de lo subjetivo que en el
de lo objetivo. En cualquier caso, le puedo asegurar que voy a ver ese
programa, que no he visto, para tener una información de primera mano,
que es lo que sin duda me permitirá entender sobre su contenido. Ahora,
puedo asegurar a S. S. que las afirmaciones son absolutamente injustas y
gratuitas. Nadie en Televisión Española está dispuesto a hacer de
mamporrero de ningún acuerdo internacional público o privado, ni del
Presidente del Gobierno ni del sursuncorda. Eso son afirmaciones muy
graves contra la honorabilidad de los profesionales de Televisión
Española, a los que usted puede acusar de haber hecho mal producto. De
ahí a convertirles simplemente en unos meros transmisores de actitudes
políticas de terceros me parece realmente lamentable. En todo caso, y
exceptuado este problema que entiendo que nada tiene que ver con lo que
estamos discutiendo, yo estoy dispuesto a ver ese programa y
evidentemente a actuar en consecuencia, si es que sus afirmaciones
estuvieran en relación y fueran ajustadas a lo que usted ha manifestado
en esta mañana.

En cualquier caso, tengo que respetar el trabajo profesional de mis
compañeros, y si realmente entendiera que se han equivocado, actuaríamos
en consecuencia, pero desde luego no con la pretensión, como siempre, de
entender que los profesionales son arcángeles en unas ocasiones y en
otras llevan el rabo del diablo.




--DEL DIPUTADO DON CESAR VILLALON RICO (GP) QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿QUE OPINION LE MERECE AL DIRECTOR GENERAL
DEL ENTE PUBLICO RADIOTELEVISION ESPAÑOLA EL CONTENIDO DEL PROGRAMA
INFORME SEMANAL, REFERIDO AL CASO PALOMINO, EMITIDO EL PASADO DIA 12 DE
NOVIEMBRE? (Número de expediente 182/000318.)



El señor PRESIDENTE: Pregunta número 18, del señor Villalón, que tiene la
palabra.




El señor VILLALON RICO: Señor Director General, la pregunta se refiere a
lo que se denomina caso Palomino y a la información que dio Televisión
Española en el programa Informe semanal, emitido el pasado sábado 12 de
noviembre.

Con el permiso del señor Presidente, voy a hacer una introducción a lo
que es el texto propio de la pregunta en sí y a transmitir al señor
Director General la casualidad de que el día 12 de noviembre, por motivos
que ahora no vienen al caso, vi ese programa de Informe semanal y el
apartado específico sobre el caso Palomino. Tengo que decirle que
habitualmente es un programa que no suelo ver por distintos motivos, pero
que entonces me senté delante de la televisión con expectativas de
conocer qué es lo que Televisión Española iba a informar a los ciudadanos
españoles sobre el caso Palomino.

Tengo que decir al señor Director General que yo fui de sorpresa en
sorpresa. En principio, si quiere que le sea sincero, tuve una sorpresa
agradable sobre el tratamiento que se daba al conflicto, que ese momento
estaba en plena efervescencia ante la opinión pública. Sin embargo,
progresivamente, esa sorpresa agradable se transformó en desilusión y, si
me apura usted, en desencanto. Desilusión y desencanto tanto por el fondo
del programa, es decir el contenido, las cosas que se decían, como por la
forma, por cómo se estaban diciendo. Se presentaban los diferentes
protagonistas de este caso: por un lado el Presidente del Gobierno en
concreto y, por otro lado, fundamentalmente, medios de prensa, pero muy
concretamente un periódico de tirada nacional, un periódico de Madrid.

Tengo que hacerle la aclaración al señor Director General de que el tema
de la pregunta no es el caso Palomino en sí, aunque sea el motivo de la
pregunta. No es este el momento de tratar el caso Palomino, que ha sido
tratado por otros diputados de nuestro Grupo, que ha presentado
diferentes iniciativas en otras instancias de esta Cámara. Lo que
nosotros queremos plantearle a usted es el tratamiento que hace
Televisión Española, desde el punto de vista informativo, de un caso de
interés nacional, como decía antes, y que, en ese momento tenía la
efervescencia de lo que es la trama de las posibles o presuntas
corrupciones o tráfico de influencia que estamos viviendo en los últimos
tiempos.

Si me permite el Director General, también quisiera hacerle un pequeño
recordatorio, que usted lógicamente lo tiene que saber mejor que yo, lo
que ha significado el programa Informe semanal desde que nació en
Televisión Española hasta nuestros días. Este es un programa que nació en
Televisión Española en la época de la dictadura y que seguramente tenía
unos fundamentos o unos fines de manipular el de enfoque de la opinión de
cara a los ciudadanos que entonces vivían en nuestro país, aquellos que
en su momento podían tener dudas sobre el sistema. Como los temas que se
trataban no eran de importancia y los ciudadanos en los años setenta
diríamos que habían rodado mucho ya, el programa en sí seguramente no
alcanzó los objetivos que se pretendía. Pero, por otra parte, sí que me
parece



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oportuno decir que era un buen programa técnicamente, y no porque lo diga
yo, que soy un desconocedor de la técnica de televisión, sino porque lo
han dicho otros muchos expertos en temas de televisión. Era un programa
que informaba y, juntamente con otro que nació en aquella época, que
usted recordará, que era el programa de La clave, empezaron a modelar a
los españoles en el espíritu democrático, en el espíritu de tolerancia
hacia nuestros conciudadanos.

Posteriormente, viene la transición política de nuestro país, gobierna en
nuestro país UCD y tanto el programa Informe semanal como La clave
alcanzan el cenit de prestigio por la información en sí misma y por lo
que origina la información y el debate, como fue en ese momento La clave.

Para desgracia de los ciudadanos españoles, para desgracia de lo que
nosotros consideramos, llevamos unos cuantos años --bastantes, por
cierto-- de Gobierno socialista, y, como usted también conoce, La clave
desaparece, previas censuras de distintos programas, y el programa
Informe semanal, sobre lo que se ve, desfallece en su contenido. No es
una opinión mía, porque, como le he dicho antes, habitualmente no veo
este programa, pero sí que leo los medios que se ocupan de Televisión y
dicen que el programa de Informe semanal pierde en prestigio a marchas
forzadas.

Señor Director General, señor García Candau, vamos a entrar ya en
concreto en este programa, vamos a entrar en lo que fue el programa en sí
del día 12 de noviembre.

Me he permitido hacer --usted hará su valoración, lógicamente-- un
reparto de las partes del programa. Se podría decir perfectamente que hay
tres partes diferentes de información o de mensajes que se transmiten a
la hora de hacer el programa en sí mismo. Hay una primera que, como le
decía anteriormente, a mí me parece que está bien. Vuelvo a decir que me
sorprende, porque realmente no lo esperaba. Si pusiéramos en los dos
platillos de la balanza las dos partes que entran en disquisición sobre
el famoso caso Palomino, por un lado el Gobierno y por otro los medios
denunciantes, creo que es equilibrada; es una primera parte que a mí me
parece aceptable y correcta, desde el punto de vista de la presentación.

Pero a partir de lo que podría ser la segunda parte del programa,
empiezan a cambiar los mensajes, se cargan las tintas de forma manifiesta
y se apoya de forma decidida la intervención del Gobierno,
fundamentalmente del Presidente del Gobierno, tanto en la cantidad de sus
intervenciones como en la calidad de lo que indica; ya no aparecen los
órganos denunciantes, es decir, el periódico El Mundo, y da la sensación
de que hay una diferencia de trato entre el Gobierno y otros partidos
políticos que pueden intervenir. Y la tercera parte del programa, que a
mí me parece la más desafortunada, es aquella en la que, a modo de
torrente, de catarata, aparece animadversión o desinformación sobre otros
partidos políticos, concretamente sobre el Partido Popular, y más
específicamente sobre el Presidente del Partido Popular, el señor Aznar.

A mí esto me dejó perplejo, creo que no es presentable y habría que decir
--es mi impresión personal, lógicamente-- que la estrategia al hacer el
programa es ir cambiando, paso a paso, desde lo que podríamos decir la
objetividad, a la subjetividad.

Voy a terminar, señor Presidente, remitiéndome al texto de la pregunta,
que es lo que deseo me conteste el señor Director General de
Radiotelevisión Española: ¿Qué opinión le merece al Director General el
contenido del programa Informe semanal, referido al caso Palomino? Pero
también quiero preguntarle, si me permite la Presidencia... (Rumores.)
--ya termino-- si este programa cree que ha sido objetivo e imparcial, si
considera que ha habido separación entre información y opinión, si se ha
respetado el pluralismo político y el pluralismo de opinión y si ha
habido respeto a los valores de igualdad, que realmente son los que deben
primar en un programa informativo de televisión.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Saludo
al señor Villalón, que creo que es la primera vez que interviene en esta
Comisión.

Menos mal que usted no es un experto, porque si llega a serlo... la
disección, la exégesis del programa y de los contenidos que ha hecho casi
ha estado más en lo académico que en lo político.

Hace muy mal de no ver Informe semanal (Risas.), porque parece que está
en contra de lo que hoy es una corriente muy común de los intelectuales
de nuestro país. No hace mucho, un periódico, concretamente El País,
preguntaba a diferentes ciudadanos de distintas áreas de la
intelectualidad o profesiones qué veían en televisión. Todos,
absolutamente todos, ven Informe semanal. Por tanto, hace mal en no estar
en ese amplio grupo, muy representativo, de la sociedad española. Lo ven
porque es un programa de una enorme calidad, esa es la verdad. Todo el
mundo reconocía: Yo veo La 2 y además veo Informe semanal y los
telediarios, que es lo que más me gusta, especialmente Informe semanal.

Por tanto, creo que se equivoca en esa actitud y le recetaría una dosis
de Informe semanal para el futuro.

En cualquier caso, y en relación con su pregunta, porque entrar en la
discusión de la casi, como decía antes, académica intervención de S. S.

me parece que nos llevaría muy lejos.

Lo que quiero decirle es lo siguiente. Incluso recogiendo sus mismas
palabras --yo vi ese programa, lo he tenido que ver porque ayer fue
objeto de debate en el Consejo de Administración, aunque el debate de
ayer era por otra historia, que no tenía nada que ver con este caso; su
prisma es bastante distinto al que ayer sostuvimos en el Consejo de
Administración--, allí se daba la presencia de don Felipe González, del
señor Pujol, del señor Aznar, del señor Anguita, de doña Rosa Aguilar,
del señor Anasagasti, etcétera. Allí cada uno decía lo que creía
conveniente. Por tanto, creo que hubo una presencia muy plural de las
fuerzas políticas, incluso en el caso de alguna con más de un
representante, y por tanto decir que no es un



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programa plural me parece que es absolutamente inadecuado. Creo que el
programa trata de recoger la actualidad política de un asunto político,
que se deriva después de la publicación por un periódico de un reportaje,
y a partir de que el diario El Mundo publica esa información, hay un
debate político. Yo creo que, razonablemente, eso es lo que representa en
la Cámara --y en este caso en el programa-- lo que ocurrió, que es la
recolección, por así decirlo, de las intervenciones que a lo largo de la
semana se produjeron en el ámbito político.

De todas maneras, debo decirle que me agrada que sostenga que, en la
primera parte, el pluralismo, la verdad y la objetividad eran
absolutamente ciertas, pues ayer tuve un debate donde la discusión se
cernía sobre esa primera parte, porque se entendía que en ella
precisamente se había violado la objetividad, y eran gentes muy cercanas
a S. S. O sea que, realmente, no sé a qué atenerme.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Villalón para replicar.




El señor VILLALON RICO: Yo no he dicho que no vea televisión, he dicho
que no vi ese programa. Tendré que dar explicaciones aquí de por qué no
vi ese programa. El fin de semana lo dedico a mi familia y comprenderá
que no siempre vamos a estar pendientes del programa Informe semanal,
como otras ilustres señorías que sí lo están.

Usted dice que ha habido grupos de intelectuales que hacen referencia
explícita a este programa y, sorprendentemente, dice que usted ha tenido
que ver este programa. Al decir que lo ha tenido que ver, se deduce que
habitualmente no lo ve, sino que lo ha visto debido a un debate dentro
del Consejo de Radiotelevisión Española y me imagino que para venir a
esta Comisión.

Señor García Candau, basándome en mis palabras anteriores, tengo que
leerle unas cuestiones que me parecen fundamentales para lo que debe ser
la objetividad y la imparcialidad en Televisión Española, concretamente
en los informativos. Me tengo que remitir al preámbulo del Estatuto de
Radiotelevisión Española al que anteriormente un compañero mío ya ha
tenido que referirse. Dice que la televisión, configurada como servicio
público cuya titularidad corresponde al Estado --es decir, no dependiente
del Gobierno--, se tiene que ver como un vehículo esencial de información
y participación política de los ciudadanos. El artículo 1.2 vuelve a
decir que la radiodifusión y televisión son servicios públicos cuya
titularidad corresponde al Estado; el artículo 4 hace referencia a las
últimas palabras de mi intervención cuando le hacía la pregunta. Hablaba
de objetividad, de veracidad, de imparcialidad, de separación entre
información y opiniones, respeto al pluralismo político y respeto a los
valores de igualdad recogidos en nuestra Constitución.

No se puede decir que se es imparcial o que ha habido pluralismo político
por el hecho de que hayan salido algunos portavoces de distintos partidos
políticos. En principio, es así de forma objetiva: si salen diferentes
representantes de partidos políticos, ha habido pluralismo. Sin embargo,
no es así si se entresacan algunas declaraciones, si realmente esas
declaraciones no van dirigidas al tema que se está tratando, como fue el
caso del otro día, sino que se trata de atacar a otros líderes políticos,
como ocurrió en la tercera parte, que fue, como decía yo, una catarata de
desinformación y de ataque, no sólo al Partido Popular sino a su
Presidente Aznar. Es el caso que se dio con algunas de las intervenciones
políticas.

Hay que decir que Televisión es un medio vivo, y en un programa de
información como Informe semanal, un programa grabado, que no tiene los
inconvenientes del directo, tiene muchas posibilidades de que intervengan
todos sobre el asunto que se está tratando, como intervinieron el
Presidente del Gobierno y el Ministro Borrell, pero no como intervinieron
otros, sino que, entresacando sus declaraciones, estaban atacando al
Presidente del Partido Popular, lo que sinceramente me pareció una
manipulación.

De la misma forma, me parece una manipulación que la voz de la periodista
que hizo el programa, lo que se denomina «voz en off», empezara a
manifestar posibles declaraciones del Presidente del Gobierno.

Lógicamente, aplaudo que el Presidente del Gobierno se defienda, pero no
en voz de la locutora, porque eso es mezclar información con opinión. La
locutora empezó a decir que el Presidente del Gobierno tenía que defender
su honestidad, que el Presidente del Gobierno tenía que defender la
gestión del Gobierno socialista. Esto me hubiera parecido bien si lo
hubiese dicho el Presidente del Gobierno, que seguramente lo habrá dicho,
pero en ese programa no lo decía, lo decía la locutora. Eso es mezclar
información con opinión, eso es encauzar a los ciudadanos hacia unas
posturas de animadversión hacia otros partidos, tal y como se hizo con el
tratamiento que se dio en ese programa, hacia el Partido Popular.

Para terminar, porque parece que algunas de SS. SS. se ponen nerviosas
con mi intervención (El señor Aguiriano Forniés: Viene aquí y nos cuenta
una historia entera.-- La señora Mato Adrover: Es un día al año.), quiero
decir que al final se mezcla información con opinión, se encauza a los
ciudadanos por un derrotero en contra de los partidos de la oposición, no
se informa desde un punto de vista realmente objetivo sino que se
manipula. Creo que ésa es la conclusión sobre aquel programa.

Ahora quiero hablar como político (El señor Aguiriano Forniés: ¿Ahora?
¡Ya vale!), aunque usted ha tachado mi intervención de técnica. Fue una
manipulación en las dos terceras partes del programa. Sinceramente, le
tengo que decir que a mí sí que me gustó la primera parte.




El señor PRESIDENTE: Señor Villalón, termine, por favor.




El señor VILLALON RICO: Ya termino, señor Presidente.

La primera parte me pareció aceptable, donde la posición de las
diferentes partes era equilibrada, pero el programa en su conjunto fue
una manipulación de un ente público --que, como decía antes, es del
Estado y no del Gobierno-- contra algunos partidos políticos, contra
algunos órganos de difusión, de prensa, como El Mundo, y contra



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algunos partidos políticos, en concreto el Partido Popular y el
Presidente Aznar.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Estas
cuestiones de opinión son evidentemente subjetivas. Usted tiene sus
convicciones en cuanto a lo que dice y yo tengo las mías.

Usted dice que yo no veo ese programa; estaba ausente del país y es
difícil que lo hubiera visto. Le diría que, igual que antiguamente la
familia se reunía para rezar el santo rosario, creo que éste es un
programa precisamente muy familiar (El señor Villalón Rico: Es un
programa en familia.), es un programa muy bueno y le recomiendo que pase
de una cosa a otra.

En cualquier caso, debo decirle lo siguiente. Dice usted que atacaron al
señor Aznar en el programa. El programa no ataca, serían los políticos
que allí concurrían, que tienen sus opiniones. No me va a decir usted que
lo que salía del señor Aznar en relación al Presidente del Gobierno eran
flores. Entre unos y otros se dedican sus afirmaciones y sus conceptos
dialécticos en la manera que tienen de interpretarlos, pero no parece que
por ese programa uno pueda llegar a la conclusión de que el Presidente
del Gobierno ataca al resto de la clase política y resulta que otros
salen con «flores a María». La realidad es la que es. El programa puede
gustar o no, pero entiendo que la presencia de diferentes fuerzas
políticas fue suficiente y, desde esa perspectiva, se cumplió a rajatabla
lo que S. S. denuncia que no se hizo.




--DEL DIPUTADO DON LUIS DE GRANDES PASCUAL (GP) QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿PUEDE GARANTIZAR EL DIRECTOR GENERAL EL
PLURALISMO EN LA PROGRAMACION Y EN LOS INFORMATIVOS DE TELEVISION
ESPAÑOLA? (Número de expediente 182/000319.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 19, del Diputado señor
De Grandes.Tiene la palabra.




El señor DE GRANDES PASCUAL: ¿Puede garantizar el Director General el
pluralismo en la programación y en los informativos de Televisión
Española?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): No sé si
es la segunda o la tercera vez que me lo pregunta. Además de dar por
reproducidas mis palabras, le debo decir que sí, que evidentemente
entiendo que se puede garantizar, porque es un ejercicio que cumplimos
cotidianamente.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor De Grandes.




El señor DE GRANDES PASCUAL: Señor Director General, efectivamente, puede
que su respuesta tan contundente sea tan repetida como la pregunta, pero
tristemente hay que formularla con frecuencia porque es una de las
situaciones clave del propio control de la Radiotelevisión pública y,
además, por el respeto y el seguimiento del cumplimiento del Estatuto de
Radiotelevisión Española.

Es más, el propio debate de las dos preguntas que acaba de tener lugar
manifiesta de forma evidente que esta pregunta no es ociosa, es decir
que, aunque repetida, sigue y seguirá estando viva en el tiempo si se
quiere controlar, con el rigor y con la obligación inexcusable que tiene
la oposición, a la radiotelevisión pública.

Señor Director General, es un hecho que el pluralismo o la información en
Televisión Española no está siempre garantizado, le guste o no. Por eso
le hemos formulado la pregunta en estos términos y por eso está también
formulada en términos genéricos, y es por lo que, dentro de la propia
pregunta, me voy a permitir hacer incursiones en temas que ya han sido
tratados.

A nuestro juicio, resulta igualmente incontestable que, por más que le
pese, la veracidad, la objetividad e imparcialidad de las informaciones
no siempre constituyen el referente que inspira el actuar de Televisión
Española.

Inevitablemente tengo que referirme al tema que ha trtado con tanta
contundencia, relativo a Ceuta y Melilla.

Yo le he visto muy serio y creía entender que tenía más sensibilidad por
respeto a lo que estaba escuchando. Es más, a veces le he escuchado con
agrado cómo ha defendido desde su responsabilidad al frente del Ente
posiciones de Estado, posiciones de la Corona, posiciones que están fuera
del debate, de la discusión de los partidos políticos y que son valores
constantes. Respecto a lo tercero, usted ha sido el primer garante de la
defensa de esos valores. Por tanto, no puedo entender cómo, ante la
sensibilidad de un Diputado de una querida ciudad española, como es
Ceuta, se le viene a manifestar su queja de algo que, sin duda, estaba
más que justificado.

Su señoría sabe que, al margen de negar calificativos que nunca le ha
formulado ese Diputado, señor González, respecto a los profesionales,
respecto a su manipulación, objetivamente en el mundo internacional y en
la dialéctica subliminal y sutil de cómo se interpreta la política de los
Estados, muchas veces los exegetas --por emplear el término utilizado por
su señoría-- sí miran también las entrañas de las aves de lo que pueden
ser fuentes de información, de por dónde va y qué opina ese Estado en
concreto. Me dolería mucho que en los mismos términos que aparecen en los
medios públicos y privados españoles, a veces interpretaciones del sentir
de otro país sobre cuál es el tipo de sensibilidades que tienen esos
medios públicos y privados con respecto a posiciones españolas en este
caso en otro país, con intereses en colisión con los españoles-- pudieran
hacerse interpretaciones sobre que ese programa pueda estar en sintonía
con el sentimiento del Estado español. Eso es algo que estoy seguro que
comparte su señoría



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conmigo. Por tanto, me parece que a este respecto, si no a lo mejor
porque estaba enfadado por una acusación que no se le ha formulado a los
profesionales, sino que ha sido una operación de control, usted ha sido
francamente injusto con el señor González porque me parece que su
pregunta estaba más que justificada y que, desde luego, sus agravios y su
enfado estaban más que justificados al planteárselo a usted.

Me referiré también al tema de Informe Semanal. Informe Semanal es un
programa prestigiosísimo, le guste a unos más y les guste a otros menos.

Por eso precisamente resulta más útil en los supuestos en los que
excepcionalmente resulta sectario, resulta mucho más útil y mucho más
grave el impacto que produce en la opinión pública.

Señor Director General, el Informe Semanal dedicado al caso Palomino
resultó, si no es verdad, con todas las apariencias un trabajo de
encargo, le guste o no le guste, y dígaselo a los profesionales que lo
han hecho. No acertaron, cuando menos, en la opinión que transmitían. En
este programa la información y la opinión se entrecruzaron con la
inexcusable separación que les obliga al Estatuto.

Señor Director General, en este caso de Ceuta, en este caso del informe
Palomino y en otros muchos --como aquí se ha dicho por los diputados que
me han precedido en el uso de la palabra--, el artículo 4 del Estatuto de
Radiotelevisión Española no se respetó y más pareció que fuera la
respuesta a las informaciones que han facilitado los medios de
comunicación que han merecido la descalificación del presidente del
Gobierno de sindicato del crimen. Permítame, dialécticamente se lo puedo
decir; digo que tiene la apariencia, y me lo puedo permitir en los mismos
términos que el Presidente del Gobierno se permite hacer esa
descalificación de la prensa libre. Y no digo que la televisión pública
no pueda ser y sea libre con frecuencia y casi como norma, pero también
tengo la obligación de decirle cuando la excepción constituye un claro
aldabonazo de alarma.

Ante este tipo de acontecimientos, Televisión Española, más que en
notario o testigo del acontecer se convierte en parte. Le hemos
preguntado al Director General que si puede garantizar el pluralismo en
la casa que dirige. Yo le ruego al señor Director General que no se
ampare ni siquiera en términos dialécticos en que no respetamos a los
profesionales, que no es verdad. El día que tengamos que decir algo a
algún profesional de Televisión Española se lo diremos con nombres y
apellidos, que nos parecerá lo justo, porque lo contrario es echar
naturalmente descalificaciones a otros que no las merecen o a lo mejor
usted mismo, que no tiene ni arte ni parte.

Nuestra misión en esta Comisión es controlarle a su señoría, a usted, y
es lo que hacemos. A los profesionales no queremos en absoluto rozarles,
y desde luego le aseguro y le prometo que cuando yo tenga algo concreto
que decir a un profesional lo voy a hacer. Pero lo que no puede usted es
ampararse, para evitar críticas que tiene que aceptar como responsable,
le guste o no le guste; podrá, naturalmente, rechazarlas, podrá estar de
acuerdo, naturalmente, ése es su derecho, pero no puede siempre ampararse
en que estamos dejando preteridos a los profesionales o insultándoles,
porque no es el caso, y yo no emplearé jamás ese término ni por
referencia a un profesional de llamarle mamporrero. Ya sé que usted no le
ha llamado, pero es que es la «excusatio non petita». Cuando no sea
insultado, no hay que decir que no se les ha dicho eso, porque no se les
ha dicho nada que afectara a su propia libertad de información.

Nada más, señoría.




El señor PRESIDENTE: El señor Director General tiene la palabra.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau) : Su
señoría acaba de hacer un ejercicio fantástico desde mi punto de vista
--como abogado ha hecho una defensa--, si bien no hemos hablado del
contenido concreto, sino de otras cuestiones.

Es verdad que es repetida alguna de las afirmaciones de sus señorías y,
por cierto, siempre por los mismos. El Parlamento es bastante plural y,
sin embargo, este tipo de actitudes en ocasiones, aunque haya cierta
reiteración, vienen siempre por los mismos intervinientes.

Su intervención, con todo respeto, me ha traído a la memoria aquellas
carreras ciclistas que acababan con lo que se llamaba el coche escoba.

Cuando alguien desfallecía o cuando alguien tenía algún problema, el
coche escoba le iba recogiendo para llegar a la meta.

Su señoría ha hecho un ejercicio fantástico. Aquí ha habido tres o cuatro
intervenciones sobre tres o cuatro temas que se han debatido y luego su
señoría los vuelve a recoger y los vuelve a plantear directamente, cosa a
la que yo estoy acostumbrado y no tengo inconveniente, y voy a
contestarle.

Mire usted, cuando yo he dicho que aquí se estaba acusando de mamporreros
era una cosa tan sencilla... Vamos a hacer un breve análisis. Aquí se ha
dicho que quizá lo que se trata de hacer con este programa es crear un
estado de opinión en favor de posibles acuerdos del Presidente del
Gobierno con autoridades marroquíes que, más o menos, están en estos
momentos en el ámbito de los rumores. Esto se ha dicho en esta Cámara y
ahí está el acta de la sesión. Eso se ha dicho aquí. Entonces, vamos a
ver: ¿alguien, algún responsable le ha ordenado a un profesional de la
casa que los contenidos de ese programa vayan por ese camino? Porque,
desde luego, o lo hacen por propia voluntad o bien por un mandato
imperativo de sus jefes. Yo puedo asegurarle que eso es absolutamente
incierto. Y eso se ha dicho aquí. Y he dicho: Y es posible que a lo mejor
se haya equivocado ese profesional al hacer ese programa. Y yo lo voy a
ver, y a lo mejor se ha equivocado, y actuaré en consecuencia. Por tanto,
que diga usted que yo no he querido responder por un tema que realmente
me preocupa, si se ha incurrido en lo que el Diputado aquí ha
manifestado. Ahora, cosa distinta es que ese profesional se haya
equivocado; si se ha equivocado, pues también tenemos la obligación de
enmendar y plantearlo seriamente. Cosa distinta es decir: Estados de
opinión, Presidente del Gobierno, acuerdos subterráneos con las
autoridades del país, etcétera,



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en la que, en definitiva, se está acusando claramente de una manipulación
al servicio de una idea política o de un acuerdo político. Porque, mire
usted, la ciencia ficción ya no existe en Radiotelevisión para ese tipo
de actitudes.

Yo lamento decirle --y reitero que voy a ver el programa y voy a pedir,
además, a otras personas que así lo hagan y, si es menester, se
modificará-- que, desde luego, no voy a admitir que aquí haya ningún
profesional haciendo cosas como aquí se han dicho porque no se ha
manifestado directamente que los profesionales han hecho esto, claro que
no. Ya sabemos aquí lo que es el Parlamento y sabemos lo que son los
discursos y hasta los juegos florales, lo sabemos perfectamente, pero lo
que queda claro es que este producto se hizo para eso, y yo puedo
asegurarle --y se lo digo absolutamente con total rotundidad-- que ningún
profesional, ningún directivo de la casa ha podido transmitir a un
profesional el que los contenidos vayan en una línea de actuación. Otra
cosa distinta es que se puedan equivocar. Y en ocasiones se equivocan. Y
yo le puedo decir, mire usted, que cuando estamos en el terreno
subjetivo, hay programas que no me gustan. Pues a mí tampoco, y yo soy un
profesional de los medios y hay días que a mí un programa me gusta más o
me gusta menos y no tiene nada que ver lo ideológico cuando uno puede
juzgar un programa determinado. Pero también tengo que decir que cuando
no me gustan es porque no me han satisfecho o simplemente porque entiendo
que se ha equivocado. Otra cosa distinta es que se pueda entender que
haya actitudes perversas en la actuación, por supuesto, de los directivos
y mucho menos de los profesionales, que --como digo-- pueden haberse
equivocado. Ahora, de ahí a plantear que ustedes tienen un gran respeto a
los profesionales, me parece muy bien; yo sí que se lo tengo y, por
supuesto, creo que es bueno que se lo tengamos. Y si todo el problema del
programa de Ceuta y Melilla es que la culpa la tiene el Director General
y se ha equivocado el profesional, yo lo asumo, porque ésa es mi
responsabilidad; ahora, otra cosa distinta es que yo no he hecho el
programa y no he ordenado cómo se debe hacer el programa; distinto es.

Ahora, si ha habido un error, lo asumo personalmente, pero no tengo
ninguna responsabilidad en los contenidos, que es del profesional que ha
hecho el programa y que, a lo mejor, lo ha hecho bien, mal o regular, y,
en su momento, así me manifestaré.

En cuanto a que esta Televisión se dedique a manipular, yo le voy a decir
una cosa. Siempre hay momentos espectaculares a lo largo del año en los
que se demuestra la actitud de una televisión y cuál es su comportamiento
y, sin duda alguna, uno es en el momento de las elecciones. he explicado
más de una vez que me dijo el señor Aguiriano un día: No le volverán a
felicitar. Tengo que decirle que no ha sido así, señor Aguiriano, porque
el Consejo de Administración, a propuesta de los miembros del Partido
Popular, dio una felicitación a los profesionales de Radiotelevisión
Española por la cobertura electoral de las pasadas elecciones en el País
Vasco. Por tanto, quiero decirle que se equivocó porque aún hay gente que
no está en el mandato imperativo.




--DE LA DIPUTADA DOÑA ANA MATOADROVER (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿ES PARTIDARIO DE QUE SE ESTABLEZCAN TOPES
LEGALES MAXIMOS PARA LA CONTRATACION DE LA PUBLICIDAD EN LAS RADIOS Y
TELEVISIONES DE TITULARIDAD PUBLICA? (Número de expediente 182/000320.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 20, de la señora Mato,
que tiene la palabra.




La señora MATO ADROVER: Señor Presidente, señor Director General, ¿es
partidario de que se establezcan topes legales máximos para la
contratación de la publicidad en las radios y televisiones de titularidad
pública?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señor
Presidente, yo voy a hablarle específicamente de Radiotelevisión
Española, y debo decirle que en Radio Nacional de España no hay
publicidad y, por tanto, fui partidario en su momento no de la
limitación, de la participación, sino de la eliminación de la presencia
de publicidad en Radio Nacional de España.

Por lo que se refiere a Televisión, soy partidario de cumplir el Estatuto
de Radiotelevisión, que, como he dicho hoy en más de una ocasión,
contempla que la financiación de la Radiotelevisión pública sea a través
de los Presupuestos Generales del Estado y, parcialmente, de la
publicidad. Por tanto, desde esa perspectiva y entendiendo que ése es un
buen referente, me parece oportuno que para resolver muchos de los
problemas que sin duda se van a resolver en un futuro inmediato en el
campo de la publicidad, la fijación de una cuota para Televisión Española
la creo oportuna. Además, debo decirle que ha sido interés personal de
este Director General, reiterado durante algún tiempo, hasta que así se
consideró.




El señor PRESIDENTE: La señora Mato tiene la palabra.




La señora MATO ADROVER: Señor Presidente, le trasladábamos esta cuestión
porque creemos que es muy importante conocer la opinión del responsable
de la empresa pública de comunicación que más publicidad en estos
momentos tiene, que más publicidad capta y también --aunque sólo por
ahora-- por ser el responsable de la empresa de comunicación pública más
importante de España.

El debate y la pregunta que le hacemos no son simplistas, porque en el
fondo estamos hablando de varios conceptos, en concreto de cinco
cuestiones: en primer lugar, de reglas de juego en el mercado; en segundo
lugar, de la posición de la Unión Europea sobre este asunto; en tercer
lugar, de la programación que tienen que ofrecer las televisiones
públicas; en cuarto lugar, de si queremos mantener



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el pluralismo televisivo en España, y, en quinto lugar, de la voracidad
publicitaria de los medios públicos. Estas cinco son, ni más ni menos,
las cuestiones que se plantean dentro de esta propia pregunta.

Ahora le voy a hacer una afirmación bastante grave. Si las televisiones
públicas siguen ofreciendo publicidad barata sin ningún pudor, porque
también están subvencionadas por el Estado, no sólo van a seguir yendo
mal en pérdidas, como hasta ahora, sino que, además, pueden situar en la
quiebra a todo el panorama audiovisual español. Es más, junto con esto
también le tengo que decir que las fuertes rebajas publicitarias que se
están haciendo en las televisiones públicas han supuesto un grave revés
económico para los medios escritos y radiofónicos en España. Queremos
saber si la partida que usted ha presupuestado en 1995 para publicidad lo
es por convicción o porque es incapaz de recaudar ingresos por publicidad
ante la bajada de audiencia de Radiotelevisión Española.

Otra afirmación que le quería hacer es la siguiente. Mientras el primer
objetivo de los medios públicos sea ser líderes en el mercado
publicitario, nunca habrá una programación de interés público porque
siempre primará el entretenimiento frente a la función educativa y
cultural que tiene que tener una televisión pública.

Aquí está la principal cuestión. Se nos ha dicho que Radiotelevisión
Española se autolimita en la publicidad; usted lo acaba de decir. No
sabemos si la han limitado los espectadores no viéndola, porque antes
tenía el liderazgo absoluto y ahora no lo tienen, pero, en cualquier
caso, aceptemos que ustedes se han autolimitado. ¿Vamos a tener también
que esperar a que el resto de las televisiones públicas se autolimiten?
¿Es normal y serio que quede al arbitrio de los distintos ejecutivos la
publicidad televisiva en España?
En consecuencia, y por todos estos motivos, nosotros vamos a proponer la
creación de una Ponencia que estudie este asunto en el Parlamento, en el
Congreso de los Diputados, con el máximo rigor y con tres objetivos
fundamentales: en primer lugar, tener programaciones de interés público
en las televisiones públicas; en segundo lugar, mantener el pluralismo
audiovisual, y, en tercer lugar, fijar las reglas de juego iguales para
competir en el mercado.

Había hecho esta pregunta, señor Director General, también provocada
porque usted de antemano ha hablado en varias ocasiones de autolimitación
de la publicidad. Usted es muy libre de opinar o de no opinar en este
momento sobre la limitación de publicidad a través de las Cortes
Generales en las televisiones públicas en general. En cualquier caso, si
se constituye la Ponencia que he anunciado, vamos a solicitar su
presencia para que nos dé su opinión y su impresión sobre la necesidad de
limitar la publicidad.

Hoy hemos perdido la oportunidad, si usted no nos la dice ahora, de
conocer cuál es su opinión y, en cualquier caso, nos gustaría conocerla
en este momento o --como ya he dicho-- a través de la Ponencia que vamos
a proponer crear.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señor
Presidente, la verdad es que usted me hizo una pregunta y yo le he
contestado claramente. Me ha pedido una opinión y yo le he contestado.

Otra cosa es que luego usted ha planteado mil cosas más que no sé si son
las más idóneas para que le conteste. En cualquier caso, algunas de sus
cuestiones he sido yo quien las ha promovido en esta Cámara y me parece
muy bien que las recoja. Incluso quien ha hablado aquí reiteradamente de
perjuicio a los medios escritos y a la radio he sido yo reiteradamente, y
ahí están las actas de las sesiones en las que se puede ver cómo me he
manifestado al respecto. Por tanto, no sólo soy dudoso en ello, sino que,
además, he sido beligerante en cuanto al comportamiento que debe tener el
sector de la televisión en el mercado publicitario. Por consiguiente, no
me acuse usted de eso, sino de todo lo contrario.

Usted habla de que nuestra actitud es perjudicial para los medios
privados por nuestra voracidad. Yo creo que nosotros, con la limitación
que hemos impuesto, no vamos a ser en ningún caso perturbadores; prueba
de ello es que a las televisiones privadas les parece muy bien y están de
acuerdo con nuestra actitud. Veo que ustedes van más allá de los
intereses de las propias televisiones.

En cuanto a que perjudiquemos, si hay algo que perjudique a las
televisiones privadas quizás sean ciertas actitudes, como cuando un
Diputado declara a un periódico: Yo soy partidario de que se privatice la
televisión pública, con lo cual, en un momento en que los accionistas de
algunas televisiones privadas están intentado resolver esos problemas,
eso sí que sería un perjuicio porque reventaría, sin duda alguna, las
posibilidades, bajando los precios de sus propias acciones. Con lo cual,
puestos a perjudicar, hay algunos que me llevan la delantera.




--DEL DIPUTADO DON SALVADOR SANZ PALACIO (GP), QUE FORMULA AL DIRECTOR
GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE: ¿CUAL ES EL COSTE DEL SERVICIO PUBLICO QUE
OFRECE EL ENTE PUBLICO RTVE Y SUS SOCIEDADES? (Número de expediente
182/000322.)



El señor PRESIDENTE: Pasamos a la pregunta número 22, del Diputado señor
Sanz Palacio, que tiene la palabra.




El señor SANZ PALACIO: Señor Presidente, señor Director General, ¿cuál es
el coste del servicio público que ofrece el Ente Público Radiotelevisión
Española y sus sociedades?



El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Señor
Presidente, según el artículo 1.2 de la Ley 4/1980, del Estatuto de la
Radiotelevisión, la radiodifusión y la televisión son servicios públicos



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esenciales cuya titularidad corresponde al Estado. Al amparo de esa Ley,
el Ente Público Radiotelevisión Española y sus sociedades gestionan
directamente, en el ámbito estatal, así como en sus emisiones al
exterior, los servicios públicos esenciales de radiodifusión sonora y
televisión. Por tanto, el coste de este servicio se correspondería con el
total de gastos del grupo Radiotelevisión Española. Si bien determinados
servicios prestados por Radiotelevisión Española y sus asociados podrían
ser considerados como de más marcado servicio público que otros, toda la
actividad del grupo está fuertemente impregnada de ese carácter.

Quisiera destacar en especial, por su relevancia como actividad de
servicio público, el coste de mantenimiento del Instituto Oficial de
Radiotelevisión, de la Orquesta y Coro de Radio Nacional de España y de
las distintas acciones de Televisión Española, como la cobertura de actos
institucionales y políticos tales como campañas electorales, que
conllevan espacios gratuitos de propaganda electoral, y otras diversas
actividades que por su función específica son de ineludible cobertura
para Televisión Española y que conllevarían en su conjunto un coste no
inferior a los 70.000 millones de pesetas.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Sanz Palacio.




El señor SANZ PALACIO: Señor García Candau, le agradezco su contestación
porque me da una idea del regalo que voy a pedir para Navidad, que va a
ser una bola mágica para que me diga qué cifras son, porque, en base a
las respuestas y a las informaciones que tenemos, lamentablemente no
acaban de coincidir.

La pregunta que le hacía era para conocer exactamente cuál es el coste
del servicio que ofrece el Ente Público Radiotelevisión Española, y usted
me lee el artículo correspondiente de la ley, pero las cifras son
variables. Con motivo de la tramitación de los Presupuestos Generales del
Estado de 1994, en respuesta a una pregunta formulada por nuestro grupo,
se habla de un coste de 30.545 millones de pesetas. En otra intervención,
el señor Fuentes, en los presupuestos de 1994 habla de 59.000 millones de
pesetas para pagar servicios públicos. Con motivo de la tramitación de
los Presupuestos Generales del Estado para 1995, y en respuesta a
preguntas de otros grupos parlamentarios, se habla de otra cifra, de
90.743 millones de pesetas, y, en su nombre, el Ente Público
Radiotelevisión española contestó textualmente que las pérdidas a las que
hace referencia suponen el coste de un servicio público prestado por el
Estado a la sociedad.

Es indudable que, ante este volumen de pérdidas, es necesario que usted
nos lo explique, ya que significa un incremento más que notable en el
coste de los llamados servicio públicos que presta el Ente Público
Radiotelevisión Española. Como usted sabe bien, señor García Candau, se
ha pasado de una aportación del Estado de 26.000 millones en tres años a
una aportación de 116.000 millones. ¿Qué parte corresponde a servicio
público? Según y como se entienda su respuesta, todo; pero según y como
parece ser que las cifras varían, unos 30.000 millones o 59.000. Le
agradecería que nos precisara la cifra y los conceptos que corresponden,
porque mucho me temo que haya una cierta opacidad y, en base a los
denominados servicios públicos, esto no sea más que una pantalla en la
cual se incluyan gastos ordinarios, etcétera. No nos gustaría que se
deteriorara mucho más la situación financiera de Radiotelevisión y que
lamentablemente estuviéramos dentro de poco ante una Iberia bis.




El señor PRESIDENTE: Tiene la palabra el señor Director General.




El señor DIRECTOR GENERAL DEL ENTE PUBLICO RTVE (García Candau): Para
responder al señor Sanz que pensé que, quizá, por mi acento y el suyo
sería más fácil que me entendiera.

Me dice que no he precisado cuáles son los conceptos por los que hay,
desde nuestro punto de vista, un gasto fijo, como es la Orquesta y Coros,
el Instituto Radio Nacional de España y determinados eventos habituales
en la televisión. He dado una cifra. Las cifras que usted me relata no
las conozco. Probablemente tengan algunos conceptos distintos, pero le
voy a decir lo siguiente.

Dice S. S. que el año próximo va a haber unos costes. Como este año. Esta
es una casa que tenía unos problemas importantes de estructura que se han
ido resolviendo paulatinamente. Pero, al no haber tenido la subvención
pública, si le pregunto si es partidario de que eliminemos el coste del
Centro de producción de programas de Cataluña, usted me diría que no.

Pues si debemos mantener ese centro, eso tiene un coste. Ese coste no
puede ser sufragado si no es a través de los Presupuestos Generales del
Estado. Esa es la realidad.

¿Qué ocurre? Que, además de que no se han sufragado esos costes, he
reiterado en esta Cámara que, si hubiéramos tenido la financiación que se
requería para mantener el servicio público, una vez se rompió el
monopolio, hoy no tendríamos deuda financiera. Si se nos hubiera dado lo
que han recibido las televisiones autonómicas en los últimos ejercicios,
hoy no tendríamos deuda financiera. Si hubiéramos tenido esa financiación
pública, la deuda financiera no sería la que es, porque, entre otras
cosas, no hubiéramos tenido gastos como este año que están en torno a los
25.000 millones de pesetas en la partida de gastos financieros. Si uno ve
el presupuesto y contempla los gastos financieros y el exceso de
estructura, al final sale una cantidad razonable por la cual
Radiotelevisión Española, siguiendo lo que manda su Estatuto, permite su
financiación, a sabiendas de que la televisión española necesita de
financiación pública, porque si no no puede existir en la actual
realidad.

Otra cosa distinta es que se dijera: Tiene que intentar autofinanciarse.

La manera de autofinanciarse la conozco perfectamente, pero no es dando,
por ejemplo, anteayer un gran acontecimiento social como ha sido el
funeral del Cardenal Tarancón. Eso sólo lo puede hacer una televisión
pública, pero eso tiene unos costes. Y como eso, tantas y tantas cosas
que hay a diario.




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Si no tuviéramos sobre nuestras espaldas el enorme coste financiero y una
estructura que sigue siendo excesiva en relación a las necesidades
operativas, si hubiéramos tenido una financiación razonable, no digo ya
la europea, sino simplemente la que han recibido las televisiones
autonómicas en los últimos ejercicios, no tendríamos deuda financiera.

Esa es la realidad. ¿Es que va a costar eso al año que viene? No puede
costar menos. Pero si descuenta una importante partida de costes
estructurales y la partida de costes financieros, la cifra que sale es la
que le acabo de dar a usted: 70.000 ó 75.000 millones. Esos serían los
costes con los que estaríamos a una distancia de uno a cuatro con
relación a cualquiera de las televisiones públicas europeas. El problema
está en si queremos tener una televisión pública. Estoy de acuerdo en que
hay que perfeccionarla, que hay que hacerla mejor, que hay que darle
mayor calidad, estamos de acuerdo con todo eso, pero lo que hay que
discutir es si queremos tener Radio Nacional de España sin publicidad,
porque ha llegado a costar treinta y tantos mil millones de pesetas. Este
año tiene un coste de 26.000. Vamos reduciendo paulatinamente los costes
de los servicios. En pesetas estamos por debajo del año 1990. Esa es una
realidad. Cosa distinta es que en estos momentos tenemos unos costes que
nos crean muchos problemas financieros.

La única solución es si se mantiene o no el servicio público. Si se
mantiene y queremos que haya una emisora de Radio Nacional de España en
Gerona, sabemos que tiene que costar equis pesetas, que hoy cuesta equis
y que nuestro interés es que cueste otra cantidad. Pero fuera de eso no
hay alternativa. Eso nos costará equis dinero, queramos o no, salvo que
se vaya a soluciones traumáticas y definitivas de cierres globales, con
lo cual tendría unos costes iniciales en esos momentos, y de futuro se
eliminaría. Pero la realidad es ésa y no otra, señor Sanz.




El señor PRESIDENTE: Muchas gracias, señor Director General.

Tras reiterarles que el día 21 es la próxima reunión, se levanta la
misma.




Eran la una y treinta minutos de la tarde.