Doctorado en Derecho por la Universidad Central; aunque llegó a ejercer la abogacía, su vida está consagrada a la política.

A la edad de 24 años es elegido, por primera vez, diputado, aunque no tiene la edad legal requerida lo que dio lugar a una larga discusión en el Congreso. Se convierte, así, en uno de los diputados de más larga duración, desde su primera elección en 1858 hasta 1905, casi siempre en representación de Málaga aunque se presentó también por Córdoba, Madrid y Cuba.

Presidirá la Cámara en dos ocasiones; la primera, en la legislatura de 1903-1904 entre el 22 de octubre de 1903 y el 14 de julio de 1904: "...Desde esos escaños, durante largos períodos de oposición, que constituyen casi lo mejor de mi vida, usé, y en sentir de algunos, seguramente, extremé mi intervención en los debates. Ejercitaba entonces, por mi cuenta, bajo mi responsabilidad, llegando hasta sus límites, y quizá rebasándolos, un derecho individual, personal, personalísimo, el que todos tenéis, el que á todos nos da el Reglamento, es decir, la ley, para sustentar nuestros compromisos y defender nuestras ideas... El cambio de posición engendra diversidad de deberes, y no es posible la contradicción donde falta la analogía de los términos, y los actos del Diputado no pueden servir para marcar norma de conducta al Presidente. Los que ayer eran mis derechos, son hoy aquí mis deberes, traducidos en facultades, en el Reglamento, para dirigir las discusiones y procurar conciliar el derecho de todos con el derecho de cada uno de los Sres. Diputados" (Sesión de 22 de octubre de 1903).

La segunda Presidencia de la Cámara tuvo lugar en la legislatura de 1904-1905 entre el 3 de octubre de 1904 y el 21 de junio de 1905: "...Yo tengo la seguridad de que han de prevalecer los principios de la sociedad en que vivimos. Me acojo y vivo en la casa solariega del partido liberal español, en aquella que construyeron nuestros antepasados desde los honrados é inmortales legisladores de Cádiz, y creo que el derecho no tiene otra forma ni más adecuada expresión..." (Sesión de 3 de octubre de 1904).

Tuvo también responsabilidades de Gobierno; así, en 1868 forma parte de la Junta Revolucionaria Interina; en 1872, Sagasta lo nombra ministro de Fomento; en 1874 está al frente del Ministerio de Gobernación, lo que también ocurrirá en 1875, 1879 y 1884; en 1874, 1875 y 1891 ocupa el Ministerio de Ultramar y en 1895 el Ministerio de Gracia y Justicia.

Al principio tuvo ideas revolucionarias, pero su posicionamiento político fue evolucionando a un liberalismo conservador. Fue diputado por la Unión Liberal desde la cual participa en el destronamiento de Isabel II y en la Revolución de 1868; buen amigo de Sagasta ingresará en el partido constitucional. Durante la I República defenderá, junto a Cánovas, el proyecto restaurador monárquico y pasará a la historia por sus modos caciquiles a la hora de organizar las elecciones del partido conservador.

Como parlamentario fue conocido por sus habilidades para encontrar el punto débil de sus contrarios y por sus partidarios, bautizados como "los húsares de Antequera".

Romero Robledo falleció en Madrid el 3 de marzo de 1906.

La biografía procede de la publicación "Los presidentes del Congreso de los Diputados, 1810-2010" (2010), coordinada por Sofía Gandarias Alonso de Celis y Mateo Maciá Gómez, y editada por el Departamento de Publicaciones del Congreso de los Diputados. Los textos fueron realizados por ambos coordinadores, con la colaboración de Esperanza Prieto Hernández.