Ruta de navegación

Publicaciones

DS. Senado, Pleno, núm. 34, de 14/12/2020
PDF






PLENO


PRESIDENCIA DE LA EXCMA. SRA. D.ª MARÍA PILAR LLOP CUENCA


Sesión núm. 22


celebrada el lunes, 14 de diciembre de 2020


ORDEN DEL DÍA






PROCLAMACIÓN DE RESULTADOS DE VOTACIONES




Proclamación de los resultados de las últimas
votaciones de la sesión anterior, celebrada los días 1 y 2 de diciembre
de 2020.







ACTAS




Lectura y aprobación, si procede, del Acta de la
sesión celebrada los días 1 y 2 de diciembre de 2020.







PROYECTOS Y PROPOSICIONES DE LEY




DEBATE DE TOTALIDAD




Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del
Estado para el año 2021. SE TRAMITA POR EL PROCEDIMIENTO DEL ARTÍCULO
148.1 DEL REGLAMENTO DEL SENADO.


621/000013
presupuesto del
Estado


Presupuestos





SUMARIO


Se abre la sesión a las doce horas.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LA ÚLTIMA VÍCTIMA DE
LA VIOLENCIA DE GÉNERO.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LA ÚLTIMA
VÍCTIMA DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO.


550/000060



La Cámara, puesta en pie, guarda un minuto de
silencio.









MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LAS VÍCTIMAS
CAUSADAS POR LA COVID-19.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LAS VÍCTIMAS
CAUSADAS POR LA COVID-19.


550/000061



La Cámara, puesta en pie, guarda un minuto de
silencio.









PROCLAMACIÓN DE RESULTADOS DE VOTACIONES





PROCLAMACIÓN DE LOS RESULTADOS DE LAS ÚLTIMAS
VOTACIONES DE LA SESIÓN ANTERIOR, CELEBRADA LOS DÍAS 1 Y 2 DE DICIEMBRE
DE 2020.



MOCIÓN POR LA QUE SE INSTA AL GOBIERNO A PONER EN
MARCHA DE MANERA INMEDIATA EL DESARROLLO NORMATIVO QUE REQUIEREN LAS
MEDIDAS INCORPORADAS EN EL INFORME DE LA SUBCOMISIÓN PARA LA ELABORACIÓN
DE UN ESTATUTO DEL ARTISTA, APROBADO POR EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS EN
EL AÑO 2018. (Votación).


(Núm. exp. 662/000044)


Autor: GPP


Se aprobó la moción con el siguiente resultado:
votos emitidos, 258; a favor, 144; en contra, 2; abstenciones, 112.


MOCIÓN POR LA QUE EL SENADO MANIFIESTA SU APOYO A
TODOS LOS QUE TRABAJAN CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA Y RATIFICA SU
COMPROMISO EN LA APLICACIÓN DE LAS MEDIDAS APROBADAS EN EL PACTO DE
ESTADO CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO. (Votación).


(Núm. exp. 662/000045)


Autor: GPP


Se aprobó la moción con el siguiente resultado:
votos emitidos, 258; a favor, 256; en contra, 2.









ACTAS





LECTURA Y APROBACIÓN, SI PROCEDE, DEL ACTA DE
LA SESIÓN CELEBRADA LOS DÍAS 1 Y 2 DE DICIEMBRE DE 2020.



Se aprueba el acta.









PROYECTOS Y PROPOSICIONES DE LEY




DEBATE DE TOTALIDAD





PROYECTO DE LEY DE PRESUPUESTOS GENERALES
DEL ESTADO PARA EL AÑO 2021. SE TRAMITA POR EL PROCEDIMIENTO DEL ARTÍCULO
148.1 DEL REGLAMENTO DEL SENADO.


621/000013

Presupuestos


En nombre del Gobierno, interviene la señora
ministra de Hacienda, Montero Cuadrado.


Comienza el debate de las propuestas de
veto.


El señor Maroto Aranzábal defiende la propuesta
de veta número 1, del Grupo Parlamentario Popular.


La señora Goñi Sarries defiende la propuesta de
veto número 172, del Grupo Parlamentario Ciudadanos.


El señor Cleries i Gonzàlez defiende la
propuesta de veto número 17, de dicho senador y del señor Matamala
Alsina, del Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario.


El señor Clavijo Batlle defiende la propuesta
de veto número 47, de dicho senador del Grupo Parlamentario Nacionalista
en el Senado Junts per Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista
Canario.


El señor González-Robatto Perote defiende la
propuesta de veto número 8, de dicho senador, del señor Marín Gascón y de
la señora Merelo Palomares, del Grupo Parlamentario Mixto.


En turno en contra intervienen la señora Vilà
Galán, del Grupo Parlamentario Izquierda Confederal (Adelante Andalucía,
Més per Mallorca, Más Madrid, Compromís, Geroa Bai y Catalunya en Comú
Podem), y el señor Palacín Guarné, del Grupo Parlamentario
Socialista.


En turno de portavoces intervienen los
siguientes senadores: el señor Sánchez-Garnica Gómez, el señor Catalán
Higueras y el señor González−Robatto Perote, por el Grupo
Parlamentario Mixto; el señor Matamala Alsina y el señor Clavijo Batlle,
por el Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario; el señor
Fernández Rubiño y el señor Vidal Matas, por el Grupo Parlamentario
Izquierda Confederal (Adelante Andalucía, Més per Mallorca, Más Madrid,
Compromís, Geroa Bai y Catalunya en Comú Podem); la señora Goñi Sarries,
por el Grupo Parlamentario Ciudadanos; la señora Etxano Varela por el
Grupo Parlamentario Vasco en el Senado (EAJ-PNV); el señor Picornell
Grenzner y la señora Bideguren Gabantxo, por el Grupo Parlamentario
Esquerra Republicana-Euskal Herria Bildu; el señor Marí Bosó, por el
Grupo Parlamentario Popular en el Senado; y el señor Gil García, por el
Grupo Parlamentario Socialista.


Interviene de nuevo la señor ministra de
Hacienda, Montero Cuadrado.


La señora presidenta abre a las dieciocho horas
y cuarenta y un minutos el plazo de dos horas para la votación telemática
de los vetos.


Comienza el debate de las impugnaciones de las
secciones, que se tramitan como propuestas de veto.


El señor Cervera Pinart defiende la impugnación
número 18, a la sección 01, Casa de S.M. el Rey, de los señores Cleries i
Gonzàlez y Matamala Alsina, del Grupo Parlamentario Nacionalista en el
Senado Junts per Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista
Canario.


En turno en contra interviene la señora De
Pablo Dávila, por el Grupo Parlamentario Socialista.


La señora Rojo Noguera defiende la impugnación
número 29, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a las sección
12, Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.


El señor Cleries i Gonzàlez defiende la
impugnación número 22, de dicho senador y del señor Matamala Alsina, del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario.


En turno en contra interviene el señor
Gutiérrez Limones, por el Grupo Parlamentario Nacionalista.


El señor De Rosa Torner defiende la impugnación
número 30, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la sección 13,
Ministerio de Justicia.


El señor Cervera Pinart defiende la impugnación
número 12, de dicho senador y del señor Cleries i Gonzàlez, del Grupo
Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per Catalunya-Coalición
Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección 13, Ministerio de
Justicia.


En turno en contra interviene el señor Oleaga
Zalvidea, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El señor Rodríguez Comendador Pérez defiende la
impugnación número 31, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la
sección 14, Ministerio de Defensa.


El señor Cervera Pinart defiende la impugnación
número 13, de dicho senador y del señor Cleries i Gonzàlez, del Grupo
Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per Catalunya-Coalición
Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección 14, Ministerio de
Defensa.


En turno en contra, interviene el señor Ruiz de
Diego, por el Grupo Parlamentario Socialista.


La señora Muñoz Fonteriz defiende la
impugnación número 7, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la
sección 15, Ministerio de Hacienda.


El señor Cleries i Gonzàlez defiende la
impugnación número 23, de dicho senador y del señor Matamala Alsina, del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
15, Ministerio de Hacienda.


En turno en contra, intervienen el señor
Heredia Díaz, por el Grupo Parlamentario Socialista, y el señor Vidal
Matas, por el Grupo Parlamentario Izquierda Confederal (Adelante
Andalucía, Més per Mallorca, Más Madrid, Compromís, Geroa Bai y Catalunya
en Comú Podem).


El señor Martínez-Maíllo Toribio defiende la
impugnación número 32, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la
sección 16, Ministerio del Interior.


El señor Cleries i Gonzàlez defiende la
impugnación número 24, de dicho senador y del señor Matamala Alsina, del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
16, Ministerio del Interior.


En turno en contra interviene la señora
Hernández Espinal, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El señor Rollán Ojeda defiende la impugnación
número 3, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la sección 17,
Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.


El señor Cleries i Gonzàlez defiende la
impugnación número 25, de dicho senador y del señor Matamala Alsina, del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
17, Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.


En el turno en contra interviene el señor
Aragón Ariza, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El senador Ruz Villanueva defiende la
impugnación número 33, del Grupo Popular en el Senado, a la sección 18,
Ministerio de Educación y Formación Profesional.


La señora Castellví Auví defiende la
impugnación número 26, de dicha senadora y del señor Cleries i Gonzàlez,
del Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
18, Ministerio de Educación y Formación Profesional..


En turno en contra interviene el señor De la
Vega Carrera, por el Grupo Parlamentario Socialista.


La señora Ruiz Sillero Bernal defiende la
impugnación número 34, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la
sección 19, Ministerio de Trabajo y Economía Social.


El señor Cervera Pinart defiende la impugnación
número 14 de dicho senador y del señor Cleries i Gonzàlez, del Grupo
Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per Catalunya-Coalición
Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección 19, Ministerio de
Trabajo y Economía Social.


En turno en contra, intervienen la senadora
Vilà Galán, por el Grupo Parlamentario Izquierda Confederal (Adelante
Andalucía, Més per Mallorca, Más Madrid, Compromís, Geroa Bai y Catalunya
en Comú Podem), y el señor Gilabert Sánchez, por el Grupo Parlamentario
Socialista.


La señora presidenta proclama el resultado de
las votaciones de las propuestas de veto.


103


El señor Lacalle Lacalle defiende la
impugnación número 35, del Grupo Popular en el Senado, a la sección 20,
Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.


El señor Matamala Alsina defiende la
impugnación número 19, del señor Cleries i Gonzàlez y suya, senadores del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
20, Ministerio de Industria, Comercio y Turismo.


En turno en contra interviene la señora
Hernández Cerezo, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El señor Martínez Antolín defiende la
impugnación número 36, del Grupo Popular en el Senado, a la sección 21,
Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.


La señora Rivero Segalàs defiende la
impugnación número 9, del señor Cleries i Gonzàlez y suya, senadores del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
21, Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.


En el turno en contra interviene el señor
Huelva Betanzos, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El señor Martín Martín defiende la impugnación
número 37, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la sección 22,
Ministerio de Política Territorial y Función Pública.


El senador Cervera Pinart defiende la
impugnación número 15, de dicho senador y del señor Cleries i Gonzàlez,
del Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la sección
22, Ministerio de Política Territorial y Función Pública.


En turno en contra, interviene el señor
Castellà Surribas, por el Grupo Parlamentario Socialista.


El señor Martínez Mus defiende la impugnación
número 4, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la Sección 23,
Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.


La señora Rivero Segalàs defiende la
impugnación número 10, del señor Cleries i González y suya, senadores del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la Sección
23, Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico.


En turno en contra interviene el señor Lastra
Valdés, por el Grupo Parlamentario Socialista.


La señora Cantalapiedra Álvarez defiende la
impugnación número 38, del Grupo Parlamentario Popular en el Senado, a la
sección 24, Ministerio de Cultura y Deporte.


La señora Castellví Auví defiende la
impugnación número 27, del señor Cleries i González y suya, senadores del
Grupo Parlamentario Nacionalista en el Senado Junts per
Catalunya-Coalición Canaria/Partido Nacionalista Canario, a la
sección 24, Ministerio de Cultura y Deporte.


En turno en contra interviene la señora Liberal
Liberal, por el Grupo Parlamentario Socialista.


Se suspende la sesión a las veintidós horas y
treinta minutos.








Se abre la sesión a las doce horas.


La señora PRESIDENTA: Señorías, se abre la sesión.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LA ÚLTIMA VÍCTIMA DE
LA VIOLENCIA DE GÉNERO.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LA ÚLTIMA
VÍCTIMA DE LA VIOLENCIA DE GÉNERO.


550/000060



La señora PRESIDENTA: Señorías, en lo que llevamos
de año, 42 mujeres han sido asesinadas por sus parejas o exparejas,
y 1075 desde que tenemos datos oficiales. El último crimen machista
ocurrió el pasado día 2 de diciembre en Pontevedra.


Desde el Senado de España queremos trasladar
nuestro más sentido pésame y nuestras condolencias a sus familiares y
reafirmar el compromiso de las instituciones para combatir esta
intolerable violación de los derechos humanos de las mujeres.


De conformidad con lo acordado en la Junta de
Portavoces el 28 de enero, ruego a sus señorías que se pongan en pie para
que guardemos un minuto de silencio en memoria de Soledad.


La Cámara, puesta en pie, guarda un minuto de
silencio.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.









MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LAS VÍCTIMAS
CAUSADAS POR LA COVID-19.






MINUTO DE SILENCIO EN RECUERDO DE LAS VÍCTIMAS
CAUSADAS POR LA COVID-19.


550/000061



La señora PRESIDENTA: Antes de continuar, y según
igualmente lo convenido por los grupos de la Cámara, expresamos nuestras
condolencias por los fallecimientos a causa de la pandemia de la COVID-19
y les deseamos una pronta recuperación a las personas que aún siguen
enfermas. También nos sumamos a los mensajes de prudencia y
responsabilidad obligada para contener y frenar los contagios para poder
protegernos y proteger también a quienes tenemos más cerca y para lograr
entre todos dejar atrás de manera definitiva esta grave crisis.


Nuevamente, pido a sus señorías que se pongan en
pie para que guardemos un minuto de silencio en señal de memoria y
respeto.


La Cámara, puesta en pie, guarda un minuto de
silencio.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.









PROCLAMACIÓN DE RESULTADOS DE VOTACIONES





PROCLAMACIÓN DE LOS RESULTADOS DE LAS ÚLTIMAS
VOTACIONES DE LA SESIÓN ANTERIOR, CELEBRADA LOS DÍAS 1 Y 2 DE DICIEMBRE
DE 2020.



La señora presidenta lee los puntos 1. y 1.1.


La señora PRESIDENTA: Señorías, corresponde
proclamar formalmente el resultado de las votaciones cuyo plazo para la
emisión del voto telemático concluyó con posterioridad a la finalización
de la pasada sesión plenaria y que fue comunicado a sus señorías y
publicado en la página web del Senado.


MOCIÓN POR LA QUE SE INSTA AL GOBIERNO A PONER EN
MARCHA DE MANERA INMEDIATA EL DESARROLLO NORMATIVO QUE REQUIEREN LAS
MEDIDAS INCORPORADAS EN EL INFORME DE LA SUBCOMISIÓN PARA LA ELABORACIÓN
DE UN ESTATUTO DEL ARTISTA, APROBADO POR EL CONGRESO DE LOS DIPUTADOS EN
EL AÑO 2018.


(Núm. exp. 662/000044) (Votación).


AUTOR: GPP


La señora PRESIDENTA: Moción por la que se insta al
Gobierno a poner en marcha de manera inmediata el desarrollo normativo
que requieren las medidas incorporadas en el informe de la subcomisión
para la elaboración de un estatuto del artista, aprobado por el Congreso
de los Diputados en el año 2018, del Grupo Parlamentario Popular


Efectuada la votación, dio el siguiente resultado:
votos emitidos, 258; a favor, 144; en contra, 2; abstenciones, 112.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, quedó
aprobada. (Aplausos).


MOCIÓN POR LA QUE EL SENADO MANIFIESTA SU APOYO A
TODOS LOS QUE TRABAJAN CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA Y RATIFICA SU
COMPROMISO EN LA APLICACIÓN DE LAS MEDIDAS APROBADAS EN EL PACTO DE
ESTADO CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO.


(Núm. exp. 662/000045)


AUTOR: GPP


La señora PRESIDENTA: Moción por la que el Senado
manifiesta su apoyo a todos los que trabajan contra la violencia machista
y ratifica su compromiso en la aplicación de las medidas aprobadas en el
Pacto de Estado contra la violencia de género, del Grupo Parlamentario
Popular.


Efectuada la votación, dio el siguiente resultado:
votos emitidos, 258; a favor, 256; en contra, 2.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, quedó
aprobada. (Aplausos).









ACTAS





LECTURA Y APROBACIÓN, SI PROCEDE, DEL ACTA DE
LA SESIÓN CELEBRADA LOS DÍAS 1 Y 2 DE DICIEMBRE DE 2020.



La señora presidenta lee los puntos 2. y 2.1.


La señora PRESIDENTA: ¿Hay alguna observación?
(Denegaciones). ¿Puede darse aprobada por asentimiento?
(Asentimiento).


En consecuencia, queda aprobada.









PROYECTOS Y PROPOSICIONES DE LEY




DEBATE DE TOTALIDAD





PROYECTO DE LEY DE PRESUPUESTOS GENERALES
DEL ESTADO PARA EL AÑO 2021. SE TRAMITA POR EL PROCEDIMIENTO DEL ARTÍCULO
148.1 DEL REGLAMENTO DEL SENADO.


621/000013

Presupuestos


La señora presidenta lee los puntos 3., 3.1.
y 3.1.1.


La señora PRESIDENTA: El desarrollo de las
votaciones de los asuntos del orden del día tendrá lugar conforme a la
comunicación que les fue remitida el jueves día 10 de diciembre.


En primer lugar, intervendrá el Gobierno, quien
tomará la palabra de conformidad con el artículo 84.4. del Reglamento del
Senado.


Para ello, y en nombre del Gobierno, tiene la
palabra la señora ministra de Hacienda. (Fuertes y prolongados aplausos
en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista).


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Gracias, presidenta. Buenos días, señorías.


Quisiera empezar esta intervención trasladando
el afecto y la solidaridad del Gobierno con todas las personas que han
perdido a un ser querido como consecuencia de la pandemia del
coronavirus. Este pesar hay que hacerlo extensivo al conjunto de la
sociedad española, porque todos, absolutamente todos, nos hemos visto
afectados de una forma o de otra por esta enfermedad. Lo hemos visto en
los empleos, en la educación, en la atención a nuestros mayores; en
definitiva, en nuestra vida y en nuestras expectativas. Por eso,
señorías, tenemos que concentrar ahí el interés. A estas personas nos
debemos, y cualquier otra pretensión siempre tiene que ceder ante el
interés general. Para eso y nada más que para eso estamos hoy aquí. Todos
podremos compartir que es un elemento que debería destacarse en los
debates y en la importancia del diálogo que en el día de hoy tendremos en
esta sesión.


Señorías, 2020 ha sido un año realmente
terrible, y estas próximas fiestas navideñas van a ser muy difíciles
todavía para muchas familias españolas, algunas por la ausencia de
quienes, desgraciadamente, ya no están con nosotros, porque tienen un
familiar hospitalizado, porque tienen dificultades para llegar a fin de
mes o la incertidumbre de lo que ocurrirá en los próximos meses. Por eso,
hoy tenemos motivos para encarar el año 2021 con esperanza; en primer
lugar, porque gracias a la ciencia y a la inminente llegada de la vacuna
empezamos, por fin, con toda la precaución, a ver el final del túnel de
esta crisis sanitaria. Pero es necesario, y creo que todos podemos
compartirlo, mantener la máxima prudencia en los próximos meses.


En segundo lugar, una buena noticia fue el
acuerdo logrado esta pasada semana en la Cumbre de Jefes de Estado y de
Gobierno de la Unión Europea, que ha dado luz verde al mecanismo de
recuperación económica y al presupuesto europeo. Se trata de un avance
extraordinario, que permitirá a nuestro país contar con 140 000 millones
de euros en estos próximos años, con el objetivo de reparar los daños
económicos y sociales causados por la pandemia, ayudando a que la
economía sea más moderna, más resiliente; en definitiva, a estar mejor
preparados para los retos actuales, pero, sobre todo, para los
futuros.


La principal preocupación de los españoles
—en cualquier sondeo de opinión lo pueden comprobar— es
cuándo y en qué condiciones saldremos de esta crisis. Quienes somos
representantes políticos, servidores públicos, deberíamos tener siempre
presente que nuestra primera obligación, la fundamental, es atender los
problemas de la sociedad que representamos, no crear nuevos conflictos o
cronificar los que ya existen sin darles respuesta. Me parece importante
señalarlo, porque en demasiadas ocasiones los debates políticos parecen
situarse al margen de las necesidades de los ciudadanos, de sus problemas
o de sus expectativas.


Por ello, señorías, me atrevo a solicitar que
el debate presupuestario que vamos a sustanciar hoy transcurra, en la
medida de nuestras posibilidades, dentro de unos cauces constructivos,
respetuosos y, sobre todo, veraces. Se puede discrepar y practicar una
política en las antípodas de las de este Gobierno. Eso es lógico, sano y
útil en democracia. La sociedad española yo diría que es una sociedad
madura, preparada, que merece que su clase política esté a la altura del
momento tan difícil, tan excepcional que nos ha tocado vivir.
Sinceramente, creo que podemos hacerlo. Podemos confrontar nuestras ideas
usando la palabra y el diálogo, evitando descalificativos gratuitos que
alteran o que crispan la convivencia.


Hecha esta pequeña introducción, el debate de
presupuestos es probablemente la norma donde se hace más visible en qué
consiste la política de un país, cuáles son las prioridades que se marca
un colectivo de personas. Nos permite traducir cifras, números, que
siempre son fríos, en mejoras concretas para la vida de los ciudadanos.
Los Presupuestos Generales del Estado, de hecho, definen cuáles son estas
políticas y prioridades para cada año. Pero ni 2020 ha sido un año normal
ni 2021 lo será. De hecho, nuestro país ha sufrido este año la peor
crisis sanitaria y económica desde la guerra. La pandemia, como nunca,
golpeó a un sistema sanitario que ha estado alerta y que ha dado una
lección de profesionalidad por el conjunto de las personas que trabajan
en su entorno. A su vez, esta situación sanitaria ha provocado un
desplome sin precedentes en la economía, al punto de que el PIB cerrará
con una caída de dos dígitos. Fundamentalmente, afectación en sectores
esenciales, con gran peso en nuestra economía, como son los del turismo,
el comercio o el transporte.


Señorías, los ERTE, el conjunto de medidas que
el Gobierno ha puesto en marcha para combatir la pandemia ascienden ya
a 216 000 millones de euros, una cantidad que se ha desplegado cercana
al 20 % de nuestro producto interior bruto; un amplísimo paquete de
actuaciones que no voy a detallar, porque creo que sus señorías las
conocen sobradamente, solo voy a destacar algunas que se han mostrado
especialmente importantes. Me refiero a los ERTE, a las prestaciones por
cese de actividad, las líneas ICO o el ingreso mínimo vital. (Aplausos en
los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Detrás de cada una de
ellas, señorías, hay un esfuerzo colosal del país, al que seguimos
sumando cada semana otras iniciativas —todavía quedan algunas de
aquí a final de año— para proteger al sistema productivo, para
intentar fortalecer nuestras pequeñas y medianas empresas, a los
autónomos; en definitiva, a los sectores más afectados por la restricción
de movilidad.


Por otro lado, señorías, saben que ha sido
desde el primer día empeño del Gobierno proteger las rentas de la familia
y de los trabajadores, especialmente de aquellos colectivos que tienen
especial necesidad por su vulnerabilidad. Ha sido y es una tarea
hercúlea, porque el Estado tiene que salir al rescate del país, de las
empresas y de las familias, demostrando con ello la importancia de contar
con un Estado del bienestar fuerte, pero también con administraciones
públicas solventes y capaces de adaptarse a un momento y a un entorno
realmente inédito. Aun así —todos lo sabemos bien—, el daño
está siendo grande. Pero también sabemos que el retroceso en el PIB
podría haber llegado al 25 %, con la pérdida de 3 millones de empleos, de
no ser por el ingente esfuerzo fiscal que hemos realizado como país
—insisto, como país—, al que le debemos, por tanto, su
reconocimiento.


Este año tan excepcional, hemos tenido que
transitar —lo saben— con unas cuentas públicas que no
acompañaban en absoluto. Eran unas cuentas prorrogadas desde el año 2018.
Pero, más allá de la opinión que cada uno podamos tener —ustedes
conocen la mía— respecto a esas cuentas, ¿acaso no es obvio y
evidente que nos encontramos en una situación radicalmente distinta a la
que teníamos en aquel periodo? Por cierto, unas cuentas que el Gobierno
del presidente Sánchez asumió tras la moción de censura, por
responsabilidad y compromiso con la estabilidad del país. En esta
ocasión, y después del periodo en el que se ha venido trabajando, dos
años y medio, por fin traemos a esta Cámara un nuevo proyecto de
presupuestos; un proyecto diseñado por el Gobierno de coalición que
ofrece, desde mi punto de vista, una potente respuesta económica, social,
fiscal y presupuestaria para superar esta crisis, resolver los problemas
del presente, del día a día del conjunto de los compatriotas, pero
también, y sobre todo, anticipar los numerosos retos que tenemos por
delante. Unas cuentas que pueden definirse de muchas maneras y que voy
solamente a avanzar a modo de pincelada.


Se trata de unas cuentas expansivas y
anticíclicas, como recomiendan todos los organismos nacionales e
internacionales, que piden dar una respuesta diametralmente opuesta a la
que se dio en el año 2008; políticas entonces austericidas, que se
demostraron como una receta fallida y que solo generaron más daño a la
economía y a la sociedad. Son estas cuentas unos presupuestos
eminentemente sociales, protegen y blindan los servicios públicos y la
igualdad de oportunidades. Señorías, el Estado del bienestar no es un
lujo que no nos podamos permitir, como defienden algunos, es
imprescindible reforzarlo, como se ha demostrado durante la reciente
pandemia.


Estas cuentas son una palanca para acelerar,
para poner en valor las transformaciones pendientes de nuestra economía,
para que sea robusta, innovadora y competitiva. Queremos competir con la
calidad de nuestros productos y de nuestros servicios. No queremos
hacerlo con la precariedad o con los sueldos bajos. Los presupuestos son
la oportunidad para incorporar desde hoy, desde ya, una parte de los
recursos europeos que ayuden a nuestro país a dar un salto cualitativo de
modernización. Son presupuestos que ponen los cimientos, en definitiva,
para un futuro mejor, recuperando la apuesta por la investigación, el
desarrollo, la innovación como motor de desarrollo y de progreso.
Representan estos presupuestos, y no es menor, las bases para forjar un
nuevo contrato social intergeneracional, de manera que este esfuerzo que
estamos realizando todos tiene que tener como colectivo prioritario a la
juventud, para que accedan a mejores oportunidades educativas,
formativas, de desarrollo vital o de empleo; también, señorías, que
puedan disfrutar de un país más sostenible en lo económico y en lo
medioambiental; unas cuentas que ofrecen certeza y confianza a todos los
actores internos y externos, en definitiva, estabilidad de país.
(Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista).


Señorías, justamente la estabilidad de país no
es una cuestión exclusiva del Gobierno o del Ejecutivo que está al frente
del Gobierno, es una responsabilidad que tiene que incumbir a todas las
formaciones políticas, a todos los poderes públicos, a las instituciones
y a la sociedad en su conjunto. La estabilidad política condiciona la
prosperidad de los países, afecta a la capacidad que tienen para atraer
inversiones, a la imagen externa que se tiene y a la propia concepción de
la democracia plena. Por ello, quiero agradecer a los once grupos su
generosidad, a todos aquellos que han apoyado estos Presupuestos
Generales del Estado, porque su voto va a hacer posible que comencemos un
año con un escenario más estable que, sin duda, va a dar respuesta al
conjunto de los ciudadanos. A los once grupos, muchas gracias.
(Aplausos).


Que los presupuestos hayan superado esta parte
tan importante de respaldo, con el mayor número de grupos del Congreso,
pone en valor también la salud democrática de nuestro país, la fortaleza
que tenemos como sociedad madura y como sociedad plural. Cuando iniciamos
esta legislatura lo hicimos con las Cortes más fragmentadas de nuestra
historia, fruto de la elección libre de los españoles, de las españolas,
tras haber encarado ni más ni menos que dos elecciones generales en un
solo año. Desde hace mucho, cada vez que se expresan en las urnas, los
ciudadanos prefieren una política diversa, una política más plural, como
precisamente es ejemplo esta Cámara. Con esta legislatura, por tanto,
nace este primer Gobierno de colación de la democracia reciente, un
Gobierno progresista, consciente de los escaños que sumamos entre Partido
Socialista y Unidas Podemos, y también del mapa político surgido tras las
elecciones. Por eso, desde el primer día el presidente Sánchez no dio
lugar a la duda, trasladó el diálogo como eje de la legislatura, diálogo
social, que tan buenos resultados está protagonizando de la mano de
sindicatos y empresarios —y aquí también nuestro reconocimiento a
ese trabajo que ha permitido minimizar el impacto de la crisis—;
diálogo territorial, para fortalecer la cohesión social de nuestro país y
avanzar en la solución de conflictos que se encontraban enquistados, y el
diálogo político, porque es evidente que para sacar adelante las
iniciativas legislativas —lo saben— tenemos que llegar a
acuerdos con otras fuerzas parlamentarias, tejiendo alianzas distintas
que aportan sensibilidad, puntos de vista diferentes, como nos mandataron
los españoles.


A diferencia de lo que ocurrió en otras
recesiones, los analistas coinciden en que los efectos de la crisis
provocada por la pandemia serán transitorios; por tanto, esperamos que la
recuperación sea también más rápida. Los buenos datos del tercer
trimestre son un indicador guía, un indicador claro en este sentido.
Cuando la pandemia está controlada, la economía remonta, y así lo hará
también el año que viene, cuando superemos esta segunda ola de la
pandemia, gracias también a las campañas de vacunación que pondremos en
marcha, cómo no, con la ayuda decisiva de unos presupuestos, de unas
cuentas públicas que intervengan en los sectores más afectados y también
en los colectivos más vulnerables. Por ello, señorías, quiero decirles
que las cuentas son el mejor ejemplo de que el multipartidismo, lejos de
restar, es capaz de aportar estabilidad a la gobernanza del país.


Junto a esta tramitación de los Presupuestos
Generales del Estado, una mayoría amplia de partidos hemos coincidido en
otras materias, hemos sido capaces de aprobar la prórroga de los estados
de alarma o de llegar a acuerdos tan importantes como el Pacto de Toledo.
También en nuestra negociación presupuestaria la intención ha sido, y es,
llegar a un acuerdo lo más transversal posible, porque entendíamos que la
situación del país así lo requería. De hecho, hemos solicitado, por
activa y por pasiva, que se abandonaran vetos cruzados, que se
focalizaran, en definitiva, los esfuerzos en aquello que nos une, no en
lo que nos separa. Durante el trámite del Congreso hemos aprobado 181
enmiendas de diferentes grupos, lo que supone que los presupuestos salen
fortalecidos y mejorados. Se trata de eso, en definitiva, en la
negociación presupuestaria, de sumar para que el resultado sea compartido
por la mayoría más amplia posible.


Finalmente, ha habido grupos —lo
saben— que se han decantado por no apoyar estas cuentas; otros
directamente ya tenían claro que jamás iban a permitir que este Gobierno
sacara adelante unos nuevos presupuestos. Señorías, allá cada cual con su
responsabilidad. De mí nunca van a oír aquello de: Que se caiga España,
que ya la levantaremos nosotros. De mí, no; del Gobierno, del que
orgullosamente formo parte, tampoco. Por eso, señorías, me veo en la
obligación de recordar que los partidos que apoyan estas cuentas
representan tan legítimamente a los ciudadanos españoles como los que
representan los grupos que han decidido votar que no. Porque, señorías,
flaco favor le hacemos a la democracia si desde la tribuna parlamentaria
nos dedicamos a otorgar carnés de primera o de segunda a los
representantes políticos en función de los propios intereses o de las
preferencias. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista). Por explicarlo con palabras sencillas, sería tanto como
amparar que la categoría del compromiso de los españoles depende de la
opción política que votan, no de sus ideas. Pensar diferente, créanme,
que no es delito; ser diferente no es delito; participar de la vida
política para intentar transformar la realidad no es delito; es
justamente la invitación que históricamente hemos hecho los demócratas
convencidos. La política tiene que ser el cauce de expresión de las
ideas. Porque no, señorías, a España no le sobra ningún español, ni uno
ni dos, ni mucho menos 26 millones de españoles. (Aplausos en los escaños
del Grupo Parlamentario Socialista). Por todos trabaja este Gobierno, con
aciertos y con errores, seguro, y todos deseamos que se vean reflejados
en estas cifras.


Hace cuarenta y dos años, señorías, decidimos
darnos la oportunidad de convivir juntos, de respetarnos, de crear un
futuro compartido, en el que cabemos todos y todas. Apostamos por un
modelo de país moderno, en el que se garantizan los derechos y
libertades, la separación de poderes y el Estado de derecho. También
apostamos por un país donde la riqueza se redistribuye y las
nacionalidades y regiones conviven con autonomía en un espacio
compartido. Esa es la grandeza de nuestro pacto constitucional, del que
acabamos de conmemorar la semana pasada su aniversario; un pacto que fue
inclusivo, generoso, que puso el foco en lo que nos une y no en aquello
que nos separaba, y que sigue estando plenamente vigente, mucho más de lo
que algunos expresan, a tenor de lo que escuchamos estos días.


Señorías, en estas últimas semanas hemos tenido
que escuchar muchos desvaríos respecto a supuestas traiciones o a votos
que rompen España, y yo diría que ya está bien. Nadie tiene derecho a
arrogarse la titularidad de ser mejores españoles que el resto. (Aplausos
en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Con semejante
desatino reabren heridas que deberíamos haber dejado atrás hace mucho
tiempo. Nadie es propietario ni de este país ni de los símbolos; no
tienen el monopolio ni del amor ni de la defensa de España. Justo al
contrario. A España, señorías, se la defiende cumpliendo la Constitución
en su integridad, no solo algunas de esas partes. (Aplausos en los
escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Se engrandece el país
respetando y entendiendo su modelo territorial, que es diverso, que es
plural, como lo es también la sociedad española. Se hace patria si se
trabaja por el bienestar colectivo, no para bloquear las instituciones de
las que nos hemos dotado. Se favorece la unidad si se deja de incentivar
una carrera fiscal a la baja, que sitúa en pie de desigualdad a los
territorios.


Señorías, la política tiene sentido si
contribuye a mejorar la vida de los ciudadanos y a legitimar las
instituciones que constituyen ese armazón de nuestra convivencia. Pierde
el interés la política si se enzarza en polémicas falsas o estériles, que
solo buscan el interés particular. Quizá sea esto último lo que pretenden
algunas formaciones políticas: desprestigiar la política como servicio
público, degradarla para dar paso a la antipolítica, que es —como
saben— la antesala del populismo. Por eso, señorías, quienes
creemos en la política como servicio público, en favor del interés
general, tenemos que conjurarnos en la defensa de su utilidad, con los
aciertos y con los errores, porque toda acción siempre es susceptible de
poder ser mejorada.


Señorías, en un momento tan crítico para
España, en medio de una pandemia que ha ocasionado la peor crisis
económica desde la guerra, la política tiene que actuar, tomar
decisiones, buscar soluciones a los problemas; no se puede convertir en
un conflicto ni en un problema más, tiene que sumar; por tanto, tiene que
ser capaz de buscar y de encontrar esos puntos de encuentro. En mi
opinión, hay algunos que practican esta política porque creen en ella y
hay algunos otros que la practican para desviar la atención de los medios
de comunicación, de la ciudadanía, sobre los números o sobre las
prioridades que se contienen en el propio proyecto de presupuestos. Yo
creo que es un elemento que hay que poner en marcha, hay que poner en
valor, porque no será posible ejecutar este proyecto de presupuestos
ambicioso para este país sin el concurso de todas las instituciones, de
todos los colectivos, de todas las empresas, en definitiva, sin el
concurso de todos los actores que hacemos realidad el día a día de
España.


Por eso, el primer avance, la primera parte de
las cuentas, el detalle en las cuentas pone en valor la modernización del
modelo productivo. Se trata, en este proyecto, de que las empresas ganen
competitividad, tamaño, que superen los graves desequilibrios que tienen
hoy en el modelo económico. Creo que hay consenso entre el conjunto de
analistas respecto a las debilidades que tiene y que arrastra el modelo
económico de nuestro país y que provocan que cuando tenemos una situación
de crisis haya una mayor incidencia, un mayor impacto, en nuestro país.
También hay un amplio acuerdo sobre cómo hay que reorientarlo, cómo hay
que aprovechar las oportunidades que brindan, tanto la digitalización
como la transición ecológica. De lo que se trata justo es de incorporar
estos vectores de transformación en todos los niveles, en todos los
sectores posibles, en las pequeñas y medianas empresas, en la formación
profesional, el transporte o el propio desempeño en las administraciones
públicas.


El segundo avance que propician estas cuentas
es el relacionado con el Estado del bienestar. Está fuera de toda duda
que la pandemia ha puesto de manifiesto la importancia de contar con unos
buenos servicios públicos, que cumplen con la doble función: de un lado,
tener acceso a las mismas oportunidades de desarrollo, tenga la persona
la renta que tenga o proceda de la familia que proceda; de otro, pero no
menos importante después de la experiencia, protegernos cuando vienen
circunstancias adversas. Creo que hoy todos los españoles y españolas
saben que tenemos que reforzar nuestro sistema sanitario, tanto en su
capacidad asistencial como en el ámbito de la salud pública. Contamos con
un magnífico sistema sanitario, con unos profesionales excepcionales,
pero con un sistema que tiene carencias, que tenemos que acometer entre
todos, porque —como bien conocen su señorías— se trata de
competencias que están descentralizadas en las comunidades
autónomas.


Lo mismo ocurre con la educación. Se ha tenido
que afrontar una situación extraordinaria, acelerando la incorporación de
la tecnología digital. Igual ocurre con los servicios sociales, con la
atención a las personas dependientes, con la población más vulnerable, a
la que tenemos que proteger con el refuerzo de los servicios. (Aplausos
en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Por eso, señorías,
podemos afirmar, sin duda, que el Estado del bienestar es nuestra mejor
conquista colectiva, la que hemos construido entre todos, con el esfuerzo
de todos y todas a lo largo de nuestra trayectoria democrática. Es
nuestro particular pacto intergeneracional, que permite redistribución de
riqueza y también cohesión social.


Ello entronca con la tercera de las mejoras que
estos presupuestos promueven: avanzar de forma significativa en la
justicia social, porque es sobradamente conocido que en nuestro país se
retrocedió en igualdad con motivo de la respuesta ofrecida a la anterior
crisis financiera por el Gobierno del Partido Popular. Se escogió un
camino que permitió devaluar las condiciones laborales, precarizar el
empleo y expulsar del mercado laboral a miles de personas (Rumores),
fundamentalmente mayores de 50 años, mujeres y jóvenes. (Aplausos en los
escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Como consecuencia, la clase
media española fue mermando, al tiempo que se agudizaba la desigualdad en
los colectivos más vulnerables. La crisis financiera se utilizó como
excusa para practicar recortes en las prestaciones sociales y también
para debilitar el Estado autonómico. (Rumores). Por eso, avanzar en
justicia social es avanzar y hablar de redistribución social de la
riqueza, de combatir la pobreza y de luchar contra la brecha de
desigualdad. En definitiva, se trata de garantizar equidad para que
aquellos que más necesitan tengan más oportunidades y aquellos que más
recursos tienen aporten más para el bien común. Saben que el Gobierno
tiene una hoja de ruta: la reforma del modelo tributario para recuperar
la progresividad perdida en los años previos, adaptar el sistema a las
nuevas realidades tributarias del mundo globalizado y acercarnos de forma
progresiva a la media europea.


Más adelante tendré oportunidad de abundar en
este punto. Pero antes, señorías, quería señalar el cuarto avance que
orientan los presupuestos: el referido al modelo territorial, que me
parece especialmente de interés en esta Cámara. Señorías, antes de la
pandemia teníamos un diagnóstico más o menos claro de los principales
problemas que afronta nuestro país en el ámbito territorial: falta de
actualización del sistema de financiación, tensión nacionalista, fenómeno
de la despoblación o cómo articular la coordinación entre
administraciones públicas en un Estado tan descentralizado como el
nuestro. De hecho, muchos de los debates en esta Cámara giran en torno a
estas cuestiones. Por cierto, permítanme un apunte, las formaciones
políticas nacionalistas o regionalistas encuentran parte de su origen en
la apreciación de que en estos debates suele prevalecer una mirada
centralista. Es como si la España periférica tuviera que buscar una
respuesta propia, porque la que se suele ofrecer mira demasiado al
ombligo, creyendo que es la única posible. Creo que a España le conviene
una mirada comprensiva a su pluralidad, a su realidad, en definitiva,
señorías.


Siendo conscientes de esta divergencia entre
esta España periférica y la centralista, hemos venido dando muestras en
el Gobierno de voluntad de practicar una política absolutamente a favor
de las entidades territoriales. Desde el inicio de la pandemia lo tuvimos
extraordinariamente claro. Estuvimos anticipando recursos para que se
pudieran seguir prestando los servicios públicos, que son los pilares del
Estado del bienestar. Pusimos en marcha medidas que no tienen precedente
en nuestra historia democrática: actualizamos las entregas a cuenta, como
si no hubiera habido crisis; procedimos a la suspensión de las reglas
fiscales para 2020 y 2021 y activamos también un fondo extraordinario e
incondicionado, dotado con 16 000 millones de euros; un fondo que ha
supuesto la mayor transferencia de recursos del Gobierno a las
comunidades autónomas al margen del sistema de financiación, y ha
significado también que la Administración General del Estado se haya
tenido que endeudar para evitar que las comunidades autónomas tuvieran
problemas de financiación.


Les recuerdo que el anterior Ejecutivo del
Partido Popular, en la anterior crisis, creó mecanismos de financiación,
es decir, préstamos que había que devolver con intereses, además de estar
condicionados a cuestiones que limitaban la autonomía financiera de las
comunidades. Comprueben, señorías, una vez más, cómo nos comportamos ante
la misma situación. En su conjunto, en 2020 las comunidades autónomas han
aumentado sus recursos en casi un 22 %. En un momento de caída del PIB
de 2 dígitos, las administraciones territoriales han aumentado su
financiación un 22 %. Todo ello, señorías, gracias a la medida que les
acabo de explicar.


Para 2021, ¿qué se contiene en las cuentas
públicas? Justamente que se pueda superar esta cifra récord, alcanzando
una financiación de 146 008 millones de euros. De una parte, de los
recursos del sistema de financiación, se consignan 113 729 millones, una
cifra prácticamente similar a la del año 2020 y, de otra, habilitamos una
transferencia de 13 486 millones, que están incluidos en este proyecto.
Por ello, la Administración General asume parte del déficit que les
hubiera correspondido a las comunidades autónomas.


Y, en tercer lugar, y muy importante, también
las comunidades tendrán acceso a 18 793 millones de fondos procedentes de
la Unión Europea, solo para el año 2021, en concreto, 10 700 del
mecanismo de recuperación y 8000 del Fondo React Unión Europea, que se
integran, directamente, en los presupuestos autonómicos. Una parte de
estos recursos ya se ha preasignado, de forma estimativa, en alguno de
los anexos que tienen en el proyecto. Hay 2873 millones para políticas
medioambientales o 1380 para políticas de vivienda, a expensas de que sea
discutido en las respectivas conferencias sectoriales. Respecto al React
Unión Europea, anticipamos la financiación, vía FLA, para que las
comunidades no tengan que tensionar tesorería o depender de la capacidad
de endeudamiento.


Igualmente, el Gobierno siempre va a poner en
valor el protagonismo de las entidades locales, por la cercanía y por el
reconocimiento a la realidad de sus municipios. Creemos, y lo venimos
manifestando, que las entidades locales están llamadas a tener un papel
protagonista en esta recuperación. El acceso a los remanentes, gracias a
la suspensión de las reglas fiscales, ha dado respuesta a una
reivindicación histórica del municipalismo. Pero también los presupuestos
aportan otras mejoras; se destina un 9,5 % más de recursos respecto al
presupuesto anterior. De hecho, la cuantía de la participación del Estado
en los tributos asciende a 19 931 millones, casi un 2 % más que en el
año 2020, e igualmente tendrán acceso a fondos europeos, por importe
de 1483 millones. De la misma manera, mantenemos los mecanismos de
financiación extraordinaria, a través del Fondo de Financiación de
Entidades Locales, dotándolo con 1000 millones, como en ejercicios
precedentes, y articulamos medidas de apoyo para las entidades que tienen
desequilibrio financiero.


De otro lado, me gustaría resaltar que el reto
demográfico se incorpora de forma transversal en los presupuestos, con la
movilización de hasta 2500 millones de euros del mecanismo de
recuperación, recursos que van a permitir reactivar la economía en las
áreas afectadas por la despoblación, la garantía de acceso a los
servicios en iguales condiciones que el resto del territorio, favorecer
la conectividad digital del medio rural o el impulso a la vivienda, entre
otras cuestiones.


Y creo que las cifras avalan que la mirada de
este Gobierno hacia el modelo territorial es muy distinta a la que
practicó el anterior Ejecutivo, como también lo es el hecho de que
hayamos avanzado, de forma muy destacada, en mecanismos de cogobernanza,
de responsabilidad compartida, para hacer frente a la pandemia con todos
los recursos posibles, y cada uno en su ámbito competencial. Seguimos
trabajando en esa cogobernanza, y creo que una de las pocas cosas
positivas que ha podido traer esta pandemia ha sido mejorar los
mecanismos de coordinación entre el Estado y comunidades autónomas para
que todos pudiéramos remar en la misma dirección.


Señorías, voy a hacer ahora un rápido repaso
por las principales cifras de los presupuestos, empezando por la
referencia obligada a la situación de la reglas fiscales. Como saben, una
vez que Europa activó la cláusula de salvaguarda del Pacto de
estabilidad, hemos acordado la suspensión de las reglas fiscales para el
año 2020, también para el año 2021. Pero, señorías, de ningún modo esa
suspensión de reglas implica suspensión de la responsabilidad fiscal de
las administraciones públicas, al punto de que, en 2021, reforzamos este
compromiso con la estabilidad, fijamos una reducción del déficit
al 7,7 %, y por tanto, una bajada de 3,6 puntos. Esto supone una de las
mayores bajadas de la serie histórica desde que se registra. Esta
consolidación, que se va a apoyar en el ciclo económico y en la mejora de
los ingresos, tendrá que tener continuación, una vez que hayamos superado
la pandemia, con una estrategia detallada y sostenida de reducción
paulatina de estos desequilibrios fiscales. El objetivo no es otro que
realizar una revisión integral del sistema impositivo y del conjunto de
partidas de gasto desde la óptica de la eficiencia, siguiendo y teniendo
el apoyo también de algunos organismos, como la Airef. En este punto, me
gustaría recordar que es opinión unánime de todos los organismos
internacionales la conveniencia de no retirar antes de tiempo ni los
estímulos fiscales ni tampoco las políticas de gasto. En definitiva, y
así lo aconsejan, insisto, autoridades internacionales, tenemos que
evitar repetir el error de la anterior crisis, que acentuó, con políticas
de austeridad, su gravedad.


Por ello, en el escenario macroeconómico que
acompaña el proyecto de presupuestos, se prevé, para el año 2020, una
caída del 11,2 % de nuestro producto interior bruto, mientras que
para 2021 se estima un crecimiento inercial del 7,2 %, en línea con los
principales organismos y analistas. Este crecimiento sube hasta el 9,8 %
por la incorporación del Plan de recuperación, unos 27 000 millones, de
un total de 140 000 de fondos europeos, que se incorporan ya en estos
presupuestos. El objetivo es anticipar —para ello se diseñan en
Europa— el impulso en la economía, en una tarea conjunta de todas
las administraciones y también de la iniciativa privada, trabajando de
forma coordinada y eficaz.


Son unas previsiones que contemplan tanto los
posibles riesgos a la baja, relacionados con la evolución de la pandemia,
como las dificultades de ejecutar los fondos europeos de manera ágil. Aun
así, quiero señalar que desde la publicación de nuestras primeras
previsiones, a principios de octubre, hemos ido conociendo nueva
información que reafirma esta posición. De un lado, todo lo que tiene que
ver con la —ojalá que sí— disponibilidad de la vacuna, por
otro, la rebaja de las tensiones geopolíticas y, especialmente, los datos
positivos relativos al tercer trimestre en relación con el PIB o a la
encuesta de población activa. De hecho, el mercado de trabajo incorporó a
más de 31 600 personas nuevas en el mes de noviembre, el mayor incremento
de afiliación a la Seguridad Social en este mes de noviembre desde el
año 2006, que permite, de esta manera, recuperar los 19 millones de
afiliados en el conjunto de España.


Señorías, del millón de empleos perdidos entre
los meses de marzo y abril, ya hemos recuperado, aproximadamente, dos
tercios, a lo que se suma la evolución en los expedientes de regulación
de empleo, donde quedan, aproximadamente, unos 750 000 trabajadores, una
cifra que se mantiene estable a pesar del flujo de entrada y de salida,
derivado de las respuestas que las distintas comunidades han ido dando
ante los rebrotes de la pandemia. Por tanto, aunque aún es pronto para
evaluar el impacto económico de esta segunda ola, sí podremos avanzar que
está muy por debajo de la primera, lo que avala nuestro escenario
central, con una recuperación intensa el año que viene, la famosa V
asimétrica que venimos definiendo desde el principio de la pandemia. Por
ello, el límite de gasto de los presupuestos se nutre a partir del techo
de gasto homogéneo, el comparable con el ejercicio actual, y asciende
a 136 017 millones, lo que implica un 6,6 % más. Si sumamos a este
crecimiento los fondos europeos y las transferencias extraordinarias para
comunidades autónomas y Seguridad Social, se amplía hasta los 194 456
millones de euros, un crecimiento de más del 50 % respecto al ejercicio
anterior.


Por eso, señorías, me voy a detener un poco en
este lado de los ingresos, porque quiero dejar claras algunas cuestiones.
La primera, que las previsiones realizadas son prudentes, son realistas,
aunque sujetas a la incertidumbre que vivimos todos de una crisis que no
es estática, una crisis que va cambiando en función de cómo se comporta
el nivel de contagio. Sin embargo, creo que el hecho de poder contar con
una vacuna refuerza nuestra previsión, que contempla una mejora de los
ingresos tributarios. En 2021, de hecho, las principales figuras
fiscales, IRPF, IVA o impuesto sobre sociedades, van a evolucionar de
forma positiva, tanto por la mejora de la economía como por los ajustes
que se incorporan en el propio presupuesto.


La segunda cuestión es que este país necesita
un debate serio y también en profundidad sobre nuestra fiscalidad, un
debate alejado de la demagogia y del cortoplacismo. Porque todos podremos
compartir —creo que sí— que los impuestos son imprescindibles
y necesarios para garantizar la calidad y la sostenibilidad del Estado
del bienestar. Por eso, no podemos consentir que se incentive una carrera
fiscal a la baja, que desfonde la financiación de los servicios públicos
esenciales, o que se utilicen los impuestos como arma arrojadiza entre
las formaciones políticas. Porque la Constitución española es muy clara,
señorías, consagra que todos los ciudadanos contribuyen al sostenimiento
de los gastos públicos de acuerdo con su capacidad económica, mediante un
sistema fiscal justo, inspirado en los principios de igualdad y
progresividad. A veces, quizá, los titulares mediáticos nos pueden
impedir conocer lo importante, y lo importante, señorías, es que no
contribuyen los territorios, lo hace la ciudadanía, que no entiende por
qué existen diferencias en los impuestos sustanciales, importantes, si la
situación de partida de cada uno de los contribuyente pudiera ser
similar.


Por eso, la autonomía fiscal es necesaria e
imprescindible; todas las entidades territoriales la tienen que tener;
pero no puede ser ilimitada, como algunos parecen creer. Claro que es
positivo que exista cierto margen entre territorios que permita esa
autonomía política, pero la autonomía fiscal no puede devenir en la
creación de agravios entre españoles ni tampoco, señorías, en la
competencia desleal entre los territorios. (Aplausos en los escaños del
Grupo Parlamentario Socialista). Igual que pedimos en Europa que esto no
ocurra, tenemos que hacerlo posible en el interior de España. No tiene
ningún sentido que estemos impulsando, no solamente este Ejecutivo,
también el Ejecutivo anterior, en el marco de la Unión Europea una
política fiscal homogénea, que impida que se provoquen situaciones de
desagravio entre los territorios o movilidad de las empresas por
cuestiones fiscales que no están justificadas y, sin embargo,
pretendamos, en el discurso nacional, apoyarnos sobre esa cuestión para
defender lo injustificable.


Decía que el Gobierno tiene en su hoja de ruta
esta reforma en profundidad en una triple dirección. Hay que recuperar la
progresividad que se ha perdido en el período anterior, tenemos que
reducir la brecha respecto a la media europea y tenemos que modernizar el
sistema tributario; son tres vectores que tienen que estar presentes en
esa reforma para ser conscientes de la nueva realidad que tenemos por
delante.


No obstante, señorías, justo en este momento de
pandemia, solo el proyecto de presupuestos conlleva algún ajuste fiscal,
y hemos preferido acompañar el momento económico para que la reforma que
podamos propiciar se haga en su profundidad. Y en este proyecto solo voy
a esbozar, de forma sintética, algunas de esas medidas que se contemplan.
En el ámbito del IRPF, se elevan 2 puntos los tipos aplicables a rentas
del trabajo superiores a 300 000 euros, una medida que afecta,
únicamente, al 0,07 % de los contribuyentes. En la parte de rentas del
capital, se establece una subida de 3 puntos a partir de los 200 000
euros, una recomendación de la OCDE, que solo afectará a unos 17 000
contribuyentes de un total de 21 millones. En planes de pensiones,
señorías, se reducen de 8000 a 2000 las aportaciones máximas a los planes
de pensiones individuales, siguiendo la recomendación de la Airef y de la
Comisión Europea, mientras que el límite conjunto de reducción, que
incluye aportación individual y empresarial, se amplía a 10 000 euros, en
línea también con lo que se aprobó en el Pacto de Toledo. Ambas medidas
persiguen reducir la regresividad de este incentivo fiscal y fomentar el
ahorro a largo plazo, en el marco de los convenios y de las relaciones
laborales.


Respecto a la prórroga de los módulos de
autónomos, quiero decirles que se hará para el año 2021 una prórroga de
esta situación en relación con los límites vigentes y, por tanto,
aportamos seguridad jurídica también a un colectivo realmente castigado
por esta crisis económica.


En el impuesto de sociedades, se limita al 95 %
la actual exención por plusvalía o por dividendos generados por las
filiales; se trata de una medida que, sobre todo, afecta a las grandes
empresas porque, de hecho, la implementación en las pequeñas y en las
medianas se va a acompasar en el tiempo con aquellas compañías con un
volumen de negocio inferior a 40 millones y, por tanto, todas ellas
podrán seguir aplicando esta exención del 100 % de dividendo durante los
tres años primeros desde la constitución de una filial, de manera que
aquellos que quieran crecer en esta dirección van a tener esta
salvaguarda.


Las pymes podrán impulsar la recuperación
económica y avanzar en la internacionalización; estamos hablando de una
modificación que afecta a 1739 sociedades de las más de 1,5 millones de
declarantes del impuesto de sociedades, es decir, una exención que solo
afecta al 0,12 % del total de nuestras empresas que declaran impuesto de
sociedades. Países como Francia, Italia o Alemania también lo aplican.
Por lo tanto, modernizamos el sistema fiscal y lo acercamos al consenso
europeo.


Respecto al impuesto sobre el patrimonio,
aportamos también seguridad jurídica, dándole carácter indefinido. Se
incrementa, además, un punto el gravamen del último tramo, que pasa
del 2,5 % al 3,5 % para patrimonios superiores a 10 millones de euros. En
la tributación del IVA, saben que el proyecto contemplaba la subida del
gravamen al 21 % en bebidas azucaradas y edulcoradas, aunque, en el
trámite de enmiendas del Congreso, se aprobó exceptuar las bebidas
lácteas, una medida sanitaria que persigue, fundamentalmente, combatir la
obesidad infantil, que es la causa predisponente más importante de
diabetes infantil entre nuestra población.


Algo similar ocurre con la modificación de
hidrocarburos. Saben que la modificación que traía el proyecto de
presupuestos original era acercar la tributación del diésel a la
gasolina, pero ha decaído durante la tramitación presupuestaria, a
propuesta de alguno de los grupos.


Por último, se actualiza el impuesto sobre
primas de seguro, que pasa del 6 % al 8 %, un impuesto, fíjense, que no
había variado el tipo impositivo desde el año 1998 y, aun con la
modificación, sigue teniendo un tipo muy inferior al que hay en Alemania,
en Reino Unido o en Italia. Hay, señorías, otras medidas con impacto en
los ingresos que no están incluidas en este proyecto, como, por ejemplo,
actuaciones contra el fraude fiscal, impuesto sobre transacciones
financieras o determinados servicios digitales; todos son proyectos de
ley que han conocido ustedes o conocerán a lo largo de las próximas
semanas en la tramitación y, por tanto, la capacidad de ingresos que
conllevan está incorporada en el proyecto de presupuestos, aunque la
normativa se ha tramitado de forma independiente.


Paso ahora, señorías, a detallar los elementos
más relevantes de la política de gasto, sin ser exhaustiva, porque
disponen de toda la información. El gasto social se eleva a 239 765
millones, que representa un 53,7 % del total. Puedo decirles que este
presupuesto contempla el mayor gasto social de toda nuestra historia.
(Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Incorpora
las mayores partidas que hemos tenido nunca, tanto en sanidad,
dependencia, becas o lucha contra la pobreza infantil. Sube un 10 % más,
incluyendo 8988 millones de los fondos europeos. Sin estos fondos,
también el gasto social habría crecido en torno al 6 %, porque el
mecanismo de recuperación tiene mayor impacto sobre la parte económica
del presupuesto que sobre la parte social y, por tanto, ha sido con el
dinero de la recaudación propia del país como se ha incrementado esa
apuesta por la política social.


Por su parte, las actuaciones de carácter
económico suben un 67 %, incorporan 17 210 millones de fondos europeos, y
la parte nacional, excluyendo fondos, crecería un 8,9 %, por lo que el
peso de las actuaciones económicas sobre el conjunto del presupuesto es
de un 12 %.


Una de las grandes prioridades de los
presupuestos, sin duda, como decía, es la política sanitaria, que va a
subir el año que viene un 75,3 %, contando con los fondos europeos. En
total, señorías, va a haber 7330 millones del Gobierno de España para
políticas sanitarias. Esto significa que el Ministerio de Sanidad
multiplica por 10 su presupuesto; significa que se fortalece la salud
pública. Hay 1000 millones para vacunas, hay 5 millones para el nuevo
organismo estatal de salud pública, que es un compromiso de este
Gobierno, y también conclusiones de las comisiones para la recuperación
que se conformaron en las Cortes Generales. También hay un refuerzo para
la atención primaria, con 1088 millones; activación de un plan de
renovación tecnológica para nuestros centros de salud y hospitales,
con 400 millones;






transformación digital del Sistema Nacional de Salud,
con casi 300 millones; ampliación del programa de salud bucodental o la
exención del copago farmacéutico, que va a beneficiar a 6 millones de
personas.


Por su parte, la política de servicios sociales
y promoción social se incrementa un 70 %, sube 2147 millones y llega a
los 5200 millones. En concreto, dependencia recibe la mayor financiación
de la historia, sube la partida un 34,4 %, unos 602 más para mejorar las
cuantías, tanto en el nivel mínimo como en el acordado, beneficiando a
más de un millón de personas. (Aplausos). Destinamos 3000 millones para
el ingreso mínimo vital y para la prevención de la pobreza infantil, que
aumenta un 59 %, para que 1 140 000 niños y niñas puedan crecer en
condiciones más justas. La lucha contra la lacra que representa la
violencia de género va a contar con 180 millones, cumpliendo el pacto de
Estado. Y un elemento destacado, señorías, que tiene que ver con la
conciliación: se dota con 200 millones el Plan corresponsable para
familias con menores de 14 años; mientras que otros 300 millones nos van
a permitir igualar los permisos de maternidad y paternidad, de manera
intransferible y remunerados al cien por cien. Este es el primer proyecto
de ley de presupuestos, señorías, que va a dar carta de naturaleza para
que en el año 2021, por primera vez en nuestra historia, hombres y
mujeres disfruten del mismo período de permiso de maternidad/paternidad
para que no haya discriminación de la mujer en su incorporación al ámbito
laboral. (Aplausos). Un logro, desde mi punto de vista, histórico.


La política educativa sube también un 70 %
—vean ustedes qué prioridad le concede el Ejecutivo— con una
dotación de 4893 millones, para que ningún estudiante se quede atrás,
porque la política de becas está dotada con 2 090 millones, lo que
garantiza su equidad. Se amplía la educación de 0 a 3 años, un elemento
clave para el desarrollo temprano y también para la conciliación familiar
y laboral, y para la creación de estas plazas destinamos 300 millones.
Tenemos un plan de choque para formación profesional, que contará con 370
millones; en la prevención del abandono escolar temprano sumamos 78
millones, y en digitalización contemplamos 996 millones para los centros
educativos, capacitación del profesorado y reducción de la brecha
digital. Como verán, señorías, estos presupuestos son el primer escalón
de la ley educativa que en las próximas semanas podrán ustedes discutir
en esta Cámara. El proyecto de presupuestos ya contempla los grandes
desafíos que pretende conquistar el proyecto de ley educativo.


En relación con las pensiones les puedo decir,
señorías, que subirán un 0,9 %, es decir, mantendrán el poder
adquisitivo, aunque las no contributivas lo harán el doble, un 1,8 %,
para ir de forma progresiva convergiendo en este tipo de pensiones. Hay
quien defiende, señorías, que los pensionistas no tendrían que contar con
esta actualización, al igual que hay quien no considera oportuna la
revalorización de los salarios de los empleados públicos, pero el
Gobierno cree que sí lo es y entiende que es importante que ambos
colectivos mantengan el poder adquisitivo, por justicia y también por el
efecto del consumo, que va a redundar sin duda en la recuperación.


Por otro lado, el IPREM, un indicador de
referencia para recibir ayudas, sube un 5 %. Es la mayor subida que ha
registrado el IPREM desde su creación. Por ello, les decía que ese
refuerzo del Estado del bienestar se ve reflejado en estos presupuestos
de forma sustantiva.


Las políticas de fomento del empleo suben
un 29,5 % y a ellas van destinados 7405 millones, lo que representa 1700
millones más. La mayor parte de los recursos se van a dedicar a
incentivos a la contratación de personas con dificultad en el acceso al
empleo, con aproximadamente 684 000 beneficiarios; se incorporan 9100
millones para oportunidades de empleo para personas con discapacidad, o
para los programas de fomento del empleo en Andalucía, en Extremadura y
en Canarias. Por cierto, señorías, algunas de ellas, como Andalucía, es
la primera vez que va a contar con un plan especial para el empleo.
(Aplausos). La formación profesional —en este caso para el
empleo— cuenta con 2771 millones, y quiero destacar el dirigido al
empleo joven, que va a estar dotado con 663 millones. Tenemos que reducir
la tasa de paro juvenil en los próximos tres años hasta alcanzar
el 23,5 %. Por tanto, el proyecto de presupuestos está sembrado de
iniciativas que permiten abundar en esta materia. Las políticas de
desempleo suben un 20 % y están dotadas con 25 000 millones para atender
a los nuevos beneficiarios, incluyendo los ERTE durante el año 2021 hasta
su finalización, así como la extensión del subsidio para mayores de 52
años.


En relación con vivienda y agenda urbana, cabe
decir que es la política que más sube en el conjunto del presupuesto y
que alcanza una subida del 378 %, porque recibe una importante cantidad
de fondos europeos. Como saben sus señorías, rehabilitación de vivienda o
mejora de la eficiencia energética son dos elementos prioritarios para
Europa. En concreto, vamos a destinar a vivienda y agenda urbana 2250
millones, el mayor presupuesto de la historia que hemos tenido en este
ámbito. Con ello tenemos que garantizar el acceso a la vivienda,
incrementando la oferta del alquiler social y asequible, ayudas al
alquiler y también inversión en rehabilitación como pieza fundamental en
la reactivación económica.


Respecto a la actuación en materia de
transporte, se va a contar con 1000 millones para impulsar la
digitalización y la sostenibilidad de toda la cadena logística, la
implantación de sistemas inteligentes, la digitalización de las empresas
en el transporte de mercancías, puntos de recarga de combustibles
alternativos o la renovación de la flota de aviones y de material
ferroviario. También para el diseño de zonas de baja emisión en entornos
urbanos y metropolitanos y para la transformación de la flota del
transporte público que se propulse con combustible alternativo, el
proyecto de presupuestos conlleva una financiación adicional. Junto a
ello, mantenemos instrumentos de obligaciones de servicio público,
ferroviaria, aérea o marítima, con un presupuesto de más de 1225
millones, algunas ellas muy importantes, para la conectividad de nuestras
islas. Igualmente, como decía, estas bonificaciones de billetes de
transporte aéreo o transporte marítimo de los residentes en territorios
no peninsulares tendrán un crédito de cerca de 800 millones, destinados a
financiar el 75 % del precio de los billetes de avión o de barco. De este
modo, se garantiza el derecho de los ciudadanos a disfrutar de esa
conectividad, pagando solo el 25 %, tanto en los viajes con la península
como entre las propias islas. A ello tenemos que sumar subvenciones al
transporte de mercancías en los territorios extrapeninsulares, dotadas
con más de 77 millones, y subvenciones al transporte terrestre del
Consorcio Regional de Transportes de Madrid, las autoridades de
transporte metropolitano de Barcelona y Valencia y en la Comunidad
Autónoma de Canarias, todas ellas dotadas con un total de 322 millones de
euros.


Las inversiones en ferrocarril crecen
un 36,4 %, para modernizar la red y reducir los tiempos de viaje. En este
ámbito solo quiero destacar una dotación de 1500 millones para Cercanías
o 4370 millones para las redes transeuropeas de transporte, entre ellas,
los corredores atlántico y mediterráneo, el corredor central, el conjunto
de la red TEN-T, imprescindibles para el sistema nacional de transporte y
operaciones logísticas. De hecho, señorías, uno de los propósitos de este
Gobierno respecto al plan de recuperación es que el país cuente con una
arquitectura ferroviaria, tras la ejecución de los tres corredores
proyectados —ya en construcción—, que permita una mayor
competitividad de nuestras empresas y la conexión con lugares tan
importantes como los puertos de nuestras costas y también el puerto de
Algeciras. (Aplausos). La red de carretera cuenta con una inversión para
conservación de 1240 millones; crece un 14,8 % y el objetivo es revertir
el déficit que hemos arrastrado en los últimos años.


Otro apartado especialmente importante son las
partidas que destinamos a innovación, en concreto estas partidas suben
un 80 %. Recuperamos algo imprescindible: la apuesta por un sector
estratégico que nos tiene que permitir recuperar terreno y colocar al
sistema español a la altura de los países de nuestro entorno en el medio
plazo, aumentando la inversión con la Unión Europea y, por tanto,
desarrollando una política fundamental. De hecho, se destinan 11 483
millones a estas políticas, permitiendo, como digo, incrementar los
recursos.


Voy terminando, señorías, con la Agenda
Digital, dotada con 1000 millones para competencias digitales; 331
millones para las pymes, al objeto de acelerar su transformación; 150
millones para recualificación profesional de personas en desempleo; 26
millones para adecuar la formación universitaria a estos nuevos
requerimientos. Vamos a impulsar proyectos tractores en sectores como el
agroalimentario, salud digital, turismo inteligente o comercio
electrónico dotándolos con 315 millones; y para la transformación de las
administraciones públicas, contamos con 370 millones. Igualmente,
señorías, para el 5G, una tecnología en la que queremos ser vanguardia en
nuestro país porque tenemos condiciones, disponemos de 300 millones, y en
estrategias de inteligencia artificial la dotación es de 300
millones.


He dejado para el final, señorías, las
políticas de industria y energía, que son claves para la transformación
del modelo productivo; de hecho, vamos a disponer de 11 166 millones, de
los cuales 660 se van a destinar al Programa de reconversión y
reindustrialización. Igualmente, vamos a apoyar la industria de la
automoción, en concreto los planes y los programas que se presentaron en
el plan de choque.


La política energética también contará con 6300
millones para profundizar en fuentes renovables. Se enmarca en este
apartado también una dotación de 100 millones del bono social térmico
para los hogares más vulnerables. Deteniéndome solo en este apartado,
quiero destacar que el presupuesto que se destina a industria y pymes
asciende a 2930 millones, lo que significa que en este presupuesto hemos
apostado por un 46,3 % de crecimiento de las pymes. Se trata, pues, de
impulsar el emprendimiento y también de ser capaces de desarrollar
sectores industriales primarios, actuaciones en transformación digital o
apoyo a los proyectos que residen en los parques tecnológicos. Hay que
incrementar, señorías, el peso de la industria en el conjunto de la
economía, pero también en el cambio climático en un entorno más
sostenible.


Comercio contará por su parte con 524 millones,
un 23 % más, lo que, sin duda, nos tiene que posibilitar diversificar,
exportar o atraer inversión extranjera; y para turismo, sector
estratégico y duramente castigado, los presupuestos destinan un 331 % más
de esfuerzo financiero: se dota con 1349 millones, de los que buena parte
son apoyo directo al sector y planes de sostenibilidad. Lo mismo ocurre
con el sector de los autónomos, un colectivo prioritario para el
Gobierno, al que se ha apoyado con la puesta en marcha de la prestación
por cese de actividad y seguirá siendo destinatario de buena parte de las
políticas que se contemplan en este proyecto. Todo ello, señorías, bajo
el paraguas de la transición ecológica y energética, en consonancia con
la agenda europea y, por tanto, con un incremento histórico para estas
dos partidas: un 132 % adicional a lo que ya había, con lo que sin duda
vamos a ser capaces de contribuir a un planeta más sostenible, a una
economía circular, a una movilidad también más eficiente y a la
protección de la biodiversidad.


En relación con otras actuaciones, permítanme
que solo haga un repaso breve. La partida de cultura, un sector muy
golpeado por la pandemia, va a subir más de un 25 %. Queremos una oferta
cultural de calidad, porque sin cultura no hay democracia y, por tanto,
es importante su impulso; memoria democrática sube un 83 %; agricultura,
pesca y alimentación, lo hace en un 10 % para impulsar la competitividad
en estos sectores; justicia se incrementa un 7,6 %; defensa, un 5 %;
seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias, un 3,5 %. Y algo muy
importante, señorías, y de lo que nunca nos podemos olvidar: el programa
de cooperación al desarrollo, la solidaridad internacional, sube un 20 %.
(Aplausos).


Finalizo ya, señorías. He intentado dar cuenta
de las claves más importantes que contienen estos presupuestos y,
también, de la extraordinaria importancia que supone su aprobación para
el presente, pero también para el futuro de nuestro país. Por eso,
solicito a las formaciones políticas de esta Cámara que apoyen este
presupuesto, por el bien de los ciudadanos y de las ciudadanas. Y tiendo,
señorías, la mano a quienes todavía han expresado su negativa. Señorías
del Partido Popular, de Vox y de Ciudadanos, tienen una oportunidad para
recapacitar y pensar si de verdad en estas cuentas encuentran algo que
justifique su rechazo. Obviamente, en una tramitación presupuestaria uno
no puede compartir el cien por cien de las partidas, pero la discrepancia
en una o en alguna parte no es un obstáculo para considerar el
presupuesto como un todo. Y sus señorías lo saben perfectamente: estos no
son —se ve en las cifras— unos presupuestos normales, ni por
el contexto ni por los objetivos, ni tampoco por los números que
auspician. Se cuenta con una inyección extraordinaria de 27 000 millones,
lo que supone un reto de enormes proporciones. Necesitamos que los
presupuestos acompañen, desde ese primer minuto, porque no podemos perder
una oportunidad única que brinda Europa a nuestro país; por tanto, hay
que hacerlo y tenemos que ser capaces, entre todos, de seguir
sumando.


Por eso, señorías, no rechacen la participación
en unas cuentas públicas que sin duda nos van a permitir avanzar. Porque
los presupuestos no son del Gobierno, estos presupuestos no son de los
grupos políticos que lo apoyan, son unos presupuestos de país, unos
presupuestos para el país, una senda de progreso para los ciudadanos.
(Aplausos). Son una hoja de ruta para que nuestras empresas tengan
referencias claras, para que los inversores extranjeros se fijen en
nuestro país, para que nadie se quede atrás por motivos de renta o por
motivos de vulnerabilidad. Creo que los ciudadanos no entenderían, de
ninguna forma, que con algo tan importante como lo que nos ha pasado, los
políticos no fuéramos capaces de ponernos de acuerdo. Por tanto, a
aquellos que así lo entienden les doy las gracias por su apoyo a estos
presupuestos —creo que los españoles se lo agradecerán—, y a
quienes no lo entienden así y siguen la tónica del no, con el único
objetivo de desgastar al Gobierno y, como siempre, de no reconocer su
legitimidad, les digo que quedarán ustedes retratados como los partidos
políticos que en el peor momento de la historia que le tocó vivir a
nuestro país no supieron, o no quisieron, anteponer el bienestar del país
al suyo propio. Reflexionen, señorías, porque, cuando ustedes se decidan,
encontrarán a este Gobierno con la mano tendida.


Muchas gracias. (Fuertes y prolongados aplausos
de los senadores del Grupo Parlamentario Socialista puestos en pie).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señora ministra
de Hacienda.


A continuación, tiene lugar el debate de las
propuestas de veto al Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del
Estado para el año 2021.


En primer lugar, debatimos la propuesta de veto
número 1. Por el Grupo Parlamentario Popular, tiene la palabra el senador
Maroto Aranzábal.


El señor MAROTO ARANZÁBAL: Muchas gracias,
presidenta.


Señorías, quiero empezar mi intervención con un
sentido reconocimiento a todos los españoles fallecidos durante esta
pandemia, pero a todos, señora ministra, no solo a una parte, como hacen
las cifras oficiales del Gobierno. (Aplausos). ¿No se dan cuenta de que
cada vez que guardamos un minuto de silencio en este hemiciclo al
comienzo de cada Pleno solo lo estamos guardando por algunas de esas
víctimas y no por todas? De verdad, señorías, piénselo a conciencia: de
todas las mentiras de su Gobierno en esta pandemia, esta es, sin duda, la
más dolorosa, la más indigna y la más inhumana. Manifiesto el máximo
reconocimiento de mi grupo a todas las víctimas del COVID sin excepción.
(Aplausos).


Antes de detenerme en las razones que nos
llevan a rechazar esta ley de presupuestos que el Gobierno nos propone en
esta tramitación a marchas forzadas, quiero agradecer de todo corazón el
esfuerzo que han hecho nuestra secretaria general, nuestro portavoz de la
comisión, nuestro presidente de la comisión y todos y cada uno de los
senadores y miembros del personal del Grupo Parlamentario Popular.
Muchísimas gracias por vuestro esfuerzo. Muchísimas gracias por vuestra
dedicación. Muchísimas gracias por hacerme sentir orgulloso de pertenecer
a este equipo. Muchísimas gracias. (Aplausos).


Señorías, lo que ha hecho el Gobierno con estos
presupuestos no se puede explicar sin interpretar primero la actual
coyuntura política o, lo que viene a ser lo mismo, sin interpretar
primero el comportamiento psicológico de quien los lidera, Pedro Sánchez.
Solo observando su obsesión enfermiza, primero, por llegar al poder al
precio que sea y, después, por permanecer en él al precio que sea, solo
así se puede explicar el cúmulo de mentiras, contradicciones y engaños
que Sánchez ha arrastrado hasta el día de hoy para aprobar estos
presupuestos. Es imposible enumerarlas todas en el día de hoy porque la
lista de mentiras es casi interminable, pero baste recordar cómo Sánchez
se curó repentinamente de su insomnio por tener a Iglesias en el Consejo
de Ministros o su profunda conversión hacia los independistas, pasando,
en tan solo unas horas, del nunca pactaré con ellos de la campaña al solo
pactaré con ellos, ya como presidente. (Aplausos). Un comportamiento
psicológico, señorías, que ha superado los hasta ahora conocidos límites
de la egolatría, del egoísmo y, si me lo permiten, de la soberbia: aquí
estoy yo, que me ha costado mucho llegar hasta aquí, y vamos a intentar
que de aquí no me mueva nadie. No hay que complicarse la vida con
alambicadas reflexiones de coyuntura política para entender a este
presidente o a estos presupuestos, porque no hay mucho más, señorías,
estamos ante el primero soy yo y luego, también yo. Y para que esto sea
así, se paga en todos y cada uno de los casos el precio que haya que
pagar. Fin del análisis de la coyuntura política. A Sánchez no le importa
España ni el futuro de los españoles, ni siquiera le importa el futuro
del Partido Socialista; a Sánchez solo le importa su propia imagen y su
propia persona, y el colchón en el que duerme, por supuesto, que esto es
lo único que se ha propuesto no cambiar. (Aplausos).


Dice usted, señora ministra, que estas cuentas
son el fin de la austeridad, pero realmente son el principio de la
austeridad. Son otra vez el principio de la austeridad porque están
haciendo lo mismo que hizo Zapatero hace diez años, los mismos errores,
que traen las mismas consecuencias. También negaban, hace diez años con
Zapatero, que los errores eran errores. Y luego, ¿qué pasó?, ¿qué
sucedió? Pues que tuvieron que pedir perdón, pero tarde y cuando ya
estaban fuera del Gobierno, como hizo Pedro Solbes en su libro y como
hizo su secretario de Estado Octavio Granados cuando al cabo de un tiempo
pronunció aquel qué mal lo hicimos. Siempre vemos los mismos errores
socialistas en la gestión económica; no aprenden ni en tres tardes ni en
tres meses ni en tres legislaturas, señorías. (Aplausos).


Su primera receta siempre es más deuda, que es
lo mismo que decir que paguen los que vienen detrás y que paguen las
siguientes generaciones. ¿Cómo era su frase célebre, señora ministra?
¿Cómo era eso? Eso se arregla, chiqui, eso se cuadra. ¿No era algo así?
Pues los españoles tenemos que saber que, con esas recetas socialistas
tan brillantes, chiqui, son ya más de 7000 euros los que debe cada
español desde que Sánchez es presidente. Ese es el futuro de deuda y
ruina que ustedes nos generan.


Su segunda receta económica, después de
aumentar la deuda, es proponer mucho gasto en un presupuesto que tiene
los ingresos inflados. O mienten cuando prometen cosas que saben que no
pueden cumplir, o mienten cuando prometen unos ingresos que nunca van a
obtener aunque nos frían a impuestos. Señora ministra, eso de los
ingresos falseados no lo digo yo ni el PP, que es malo malísimo, no; lo
dice cualquier organismo nacional e internacional que tenga solo un
poquito de independencia y no se deje manipular por su ministerio. Es
curioso lo optimistas que son ustedes con respecto a los datos de la
crisis económica de España y a las perspectivas de crecimiento. Su
planteamiento sobre los presupuestos, señora Montero, es tan angelical
que nos piden un acto de fe cuando hasta ahora no han hecho más que
darnos motivos para no creer en ellos.


Su tercera receta en estos presupuestos es una
receta inexcusable de cualquier Gobierno socialista que se precie, eso
nunca falta: el desempleo. Y estos presupuestos contribuyen a la
destrucción de empleo, y tampoco me lo invento yo, porque solo hay que
acudir a los datos oficiales. La realidad es que hay más de 700 000
personas que están en ERTE y pueden pasar a estar en ERE si seguimos así.
La realidad es que hay más de un 1 millón de autónomos que pueden perder
su empleo si no se toman las medidas oportunas, y sus presupuestos no las
toman. Y la realidad es que hay más de un 10 % de nuestras empresas en
serio riesgo de desaparición, como nos alerta ya el Banco de España. La
realidad es que tenemos un presidente que no quiere ver la realidad,
porque encerrado en la Moncloa no se escuchan los lamentos de los
hosteleros; porque desde el Falcon no se ven las colas del hambre, y
porque desde Doñana no se palpa la desesperación de miles de españoles
que tendrán que seguir adelante a pesar del Gobierno y no con la ayuda
del Gobierno. (Aplausos). La realidad es que ustedes quieren aprobar unos
presupuestos que ahondan la desigualdad de todos los españoles y también,
por tanto, la desigualdad económica y laboral. Y, si no, que se lo
pregunten a las mujeres de este país. Desde que Sánchez está en el
Gobierno hay 300 000 mujeres más en paro en España. (Rumores.—
Aplausos). Esa es la realidad, esa es la brecha de igualdad laboral de su
Gobierno, feminista con minúscula, señora Montero. Luego nos traen aquí a
la otra ministra Montero a decir ocurrencias sobre la igualdad, palabras
que se las lleva el viento, porque no hay mejor herramienta para la
efectiva igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, apréndaselo,
que el empleo, señora Montero. (Aplausos). Y no tengo mejores datos sobre
las oportunidades de las siguientes generaciones: hay más de 100 000
jóvenes en paro, muchos más que antes de llegar Sánchez al Gobierno. No
existen datos de crecimiento en el empleo con políticas socialistas, se
mire como se mire. Bueno, depende. Si se mira bien, siempre se puede ver
el crecimiento, hasta 700, en el número de asesores propagandísticos que
tienen en Moncloa —ahí si tienen un dato de crecimiento,
miren— y, en el número de enchufados amigos personales del
presidente, también tienen otro. En ambos datos no ha habido nunca un
crecimiento así. En eso hay que reconocer el trabajo de este Gobierno.
(Aplausos).


La cuarta receta es de nueva cuña, y no es
suya, Montero. La cuarta receta es una receta nueva que ya va cuajando en
las políticas socialistas. La receta es que el dinero público no es de
nadie. Es la receta y la contribución, la gran aportación a la doctrina
económica socialista de la vicepresidenta Calvo. Y, claro, como el dinero
público no es de nadie, pues se sube un 53 % el gasto mientras nos están
rescatando con el esfuerzo de Europa. Entiéndanlo bien de una vez:
crecimiento en el gasto social, sí, pero acompañado de crecimiento
económico, que es lo que ustedes no saben hacer. (Aplausos). ¿Se imaginan
ustedes un desempleado que utilizase la prestación que recibe del Estado
para pagar la primera letra de un deportivo de última generación? No,
¿verdad? Pues algo así de irracional e irresponsable es lo que hacen
ustedes con estos presupuestos y los fondos europeos, señora ministra.
Sí, irresponsabilidad, ese es el nombre que tiene cuadrar unos
presupuestos con los fondos europeos y seguir gastando como si nada, como
si fueran un premio de la lotería que nos da barra libre para gastar a
capricho. (Protestas.— Rumores). Cálmense, porque, por cierto,
resulta alarmante que desde el primer momento la actitud de este Gobierno
haya sido la de abalanzarse sobre esos fondos, como si fuera un botín
cuyo control se disputan con avidez ambas facciones del Gobierno desde el
minuto uno. Es alarmante y es grotesco.


Y llegamos a la quinta y última receta para
confeccionar unos presupuestos socialistas en España en toda regla, que
es la subida de impuestos. Por favor, no persistan en esa mentira que
nadie se ha tragado de que solo suben los impuestos a los muy ricos; no
persistan, por favor, porque el hachazo fiscal en estos presupuestos es
de 9000 millones de euros y no hay tantos ricos en España ni aunque los
busquen debajo de las piedras, es más, ni aunque los busquen a todos en
la Comunidad de Madrid, que ya sabemos el odio personal que tiene su
Gobierno a los madrileños, señora ministra. (Aplausos). Encuentren otra
mentira, otra cualquiera, alguna que pueda colar o búsquense una palabra
de esas, de las suyas, para cambiarle el nombre a las cosas y así no
llamar a las cosas por su nombre. Verán, voy a intentar ayudarles.
(Rumores). Déjenme intentar ayudarles; les voy a dar una pista por si
puede resultarles de ayuda: en vez de reconocer que les suben los
impuestos a la clase media y trabajadora, pueden decir que les armonizan
los impuestos a la clase media y trabajadora. Ven qué fácil; es realmente
fácil. (Aplausos). Lo que pasa es que se van a pasar de frenada
armonizando, señora Montero, por ejemplo, a los 18 millones de hogares
que pagan un seguro y que, con estos presupuestos, van a pagar más; o a
los 34 millones de personas que pagan un seguro de vehículos y ahora van
a pagar más; o todos los que beben un refresco; o los más de 7 millones
de españoles que hacen una aportación a un fondo de pensiones y el año
que viene, ganando lo mismo y aportando lo mismo, simplemente van a pagar
más IRPF. Señora ministra, ya le... (Rumores). ¿Se ha apagado el
micrófono?


La señora PRESIDENTA: Disculpe, señor Maroto...
Ahora.


El señor MAROTO ARANZÁBAL: Espero que hayan
pagado suficientes impuestos para la dotación eléctrica del sistema de
comunicación del Senado. Hasta ahí estoy seguro de que sí, esto no es
culpa suya; esto es un fallo humano como los que tengo yo. No hay ningún
problema. (Rumores).


La señora PRESIDENTA: Silencio, por favor.


El señor MAROTO ARANZÁBAL: Le adelantaba que,
con tanta subida de impuestos, señora ministra, a todos esos millones de
españoles les va a sentar mal tanta armonización de la suya y que ellos
van a llamar, a esto que hacen ustedes, por su nombre, y es subirles los
impuestos, porque se llama así. (Aplausos). Y mira que lo tienen fácil,
porque solo tienen que copiar. Todos los países importantes de Europa
están bajando los impuestos para ayudar a sus economías a paliar los
efectos negativos de la pandemia, todos los países importantes de Europa
menos uno: España. Y no es porque el nuestro no sea un país importante,
sino porque está gobernado por el dúo Sánchez-Iglesias, que ni en eso son
capaces de copiar a la izquierda en Europa, que también baja los
impuestos en la pandemia. Ni copiar saben hacerlo bien.


Pero todo esto que debatimos hoy es viejo, muy
viejo; son las viejas políticas socialistas de siempre. Lo nuevo, que lo
hay, lo que no se había producido nunca antes, que lo hay, y por lo que
calificamos de indigna la actitud de Sánchez es el precio político
inédito que han pagado para lograr los apoyos a estos presupuestos. Eso
sí que es nuevo, señorías socialistas. (Aplausos). El señor Sánchez es
muy libre de hundir la cotización de su palabra hasta el nivel de bono
basura, pero no lo es para pagar el inmenso precio político que van a
costar estos presupuestos a expensas de un patrimonio que no es suyo,
sino de todos los españoles, y que él está obligado a custodiar y no a
disponer de él en su personal provecho. Porque aquí hay cesiones y pagos
vergonzantes para todos, por supuesto, para sus socios comunistas de
Gobierno, a los que han concedido todo tipo de prebendas que en ningún
caso son razonables, ni siquiera bajo la óptica de las políticas
socialdemócratas de Europa. No hay más que ver al señor Ábalos haciendo
de tripas corazón para justificar la fijación de precios frente a la
propiedad privada de las viviendas y avalando la ocupación ilegal para
entenderlo, o a las feministas socialistas del Partido Socialista,
activistas feministas del PSOE, a las que tanto deben ustedes, que se
tiran de los pelos ante las leyes de igualdad que trata de imponer
Podemos y que ellas no comparten, en ningún caso, porque simplemente no
se pueden compartir si uno tiene dos dedos de frente. (Aplausos). Otra es
la cesión para expulsar el castellano definitivamente de las aulas en
Cataluña, un patrimonio de todos pisoteado por un puñado de votos para
este presupuesto y enfundado en esa ley Celaá, que hundirá para siempre
el nombre de esa ministra, y que les genera a ustedes tanta incomodidad
que han decidido forzar la máquina para meter su aprobación definitiva en
el mismo orden del día de la aprobación de los presupuestos en esta
Cámara. No me extraña que acudan a artimañas así para intentar pasar el
trago y aprobar ambas leyes juntas el mismo día, porque traer
empaquetadas ambas leyes juntas también tiene un nombre, y es el paquete
de la vergüenza. (Aplausos). Pero a los independentistas catalanes les
parecía poco precio; por eso, estamos a las puertas de ver cómo indultan
a los golpistas condenados por intentar acabar con la unidad territorial
de España, cuando siguen alardeando de volver a hacerlo en cuanto puedan.
Y, por si fuera poco, levantan el control financiero a la Generalitat
para que puedan despilfarrar el dinero de todos en su política
secesionista, sin control alguno. Pero mucho más humillante para la
democracia y para la dignidad y la memoria de las víctimas del terrorismo
de nuestro país es claudicar y pagar, como precio político para obtener
los votos de Bildu, nada menos que el acercamiento de presos etarras que
ni se arrepienten ni se lo plantean siquiera, o permitir que Otegui
alardee de que estos votos son un paso imprescindible hacia una república
vasco-navarra, un paso hacia una Euskal Herria libre de España. ¿Y
ustedes se apoyan en Otegui hoy, el mismo día que hemos conocido que la
Audiencia Nacional va a volver a juzgarle por pertenencia a organización
terrorista? ¿Hoy van a volver a apoyarse en Otegui, que acaba de escribir
en la red social Twitter: ni nos domaron, ni nos doblaron ni nos van a
domesticar? Señorías, sus socios no quieren estar en la dirección del
Estado, sino en la dirección contra el Estado. Y, en vez de frenarlos,
ustedes lo que han hecho es ser sus compañeros de viaje. (Aplausos).


Pero estas cuentas no son solo un golpe a los
españoles, señorías, son también una patada a su identidad como
socialistas, a su dignidad como socialistas; una patada al socialismo
para adentrarse en el sanchismo, una mezcla entre populismo, radicalismo
y el típico egoísmo del solo me importo yo. Ese lugar al que —de
verdad, y se lo digo de corazón conociéndoles como les conozco a algunos
de ustedes— parece muy fácil entrar, pero del que les advierto que
es muy difícil salir.


Por todo esto que les hemos advertido antes
hemos tratado de evitar que se equivoquen así, y no por ustedes, siento
decírselo, sino por España, a la que nos debemos como partido de Estado.
La diferencia con otras fuerzas políticas es que nosotros no nos quedamos
en la crítica vehemente. Nuestra responsabilidad es estar, a pesar de
todo, a la altura de las circunstancias. Por eso —y no me mire así,
señora ministra, porque es la realidad y usted lo sabe bien— hemos
apoyado tres prórrogas del estado de alarma hasta que ha habido una
alternativa legal, como se ha comprobado que había. Por eso hemos apoyado
hasta siete decretos económicos del Gobierno, todos por pura
responsabilidad, aunque hubiese aspectos claramente mejorables. Hemos
respaldado hasta las nuevas medidas del Pacto de Toledo, un pacto en el
que precisamente sus socios se levantaron dejándoles tirados.


El Partido Popular Europeo ha sido determinante
para que España pudiera tener acceso a los fondos europeos. Como todos
ustedes saben, sin el apoyo de la Comisión Europea, sin el apoyo
explícito de Alemania y sin el apoyo expreso del Banco Central Europeo,
no hubiesen llegado esas ayudas a nuestro país, y —¡oh,
casualidades de la vida!— tres mujeres: Ursula von der Leyen,
presidenta de la Comisión Europea; Angela Merkel, canciller alemana, y
Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo, tres mujeres del
Partido Popular son las que han resultado imprescindibles para que esos
fondos lleguen a España.






(Aplausos). Tres, no una, sino tres mujeres del
Partido Popular. Por tanto, apoyo del Partido Popular en Europa a España
y también del Partido Popular en España.


Pero nosotros no somos de gritar hasta
quedarnos sin voz para resaltar solo los errores del Gobierno, por muy
graves que sean, que lo son. Por el contrario, el presidente de mi
partido, Pablo Casado, ha reiterado una vez más al Gobierno nuestra
vocación de actuar de forma conjunta con los fondos europeos; no para que
no se equivoquen de nuevo, sino para que de nuevo no paguen el pato otra
vez todos los españoles. Trabajemos juntos en una agencia independiente
que gestione esos fondos con las comunidades autónomas, y que lo haga con
éxito, como ya han hecho Francia e Italia nombrando profesionales
independientes para liderar la gestión de esos fondos. Si se empeñan en
no coger la mano que les tendemos para hacer conjuntamente esa gestión,
puede haber un riesgo cierto de que los proyectos que deben financiarse
con esos fondos no sean los adecuados, no lleguen a tiempo o no pasen el
necesario filtro de la Comisión. Les digo esto porque no queremos ver a
España rezagada dentro de Europa; les digo esto porque queremos compartir
y asumir la responsabilidad en un asunto tan serio, y les digo esto
porque el Partido Popular es un partido de Estado. (Aplausos).


Hay otras muchas propuestas que nuestro
presidente nacional, Pablo Casado, les ha hecho llegar y en las que
tendrían nuestro apoyo inmediato para su aprobación en el Congreso y en
el Senado. No voy a repetirlas ahora porque todas ellas son públicas.
Muchas de ellas, señora ministra, no tienen más sesgo ideológico que el
del sentido común y la buena fe, y el haber sido formuladas después de
escuchar a muchos de los sectores afectados por esta pandemia. Tres
breves ejemplos: ¿Por qué no creamos una modalidad de contratación
bonificada para los afectados por COVID? ¿Por qué no aumentamos la
carencia de pago de los préstamos ICO? ¿Y por qué no creamos de una vez
por todas la cuota cero para autónomos que tienen ingresos cero, señora
ministra? (Aplausos). Sentido común. Tres breves ejemplos de acuerdos
útiles e inmediatos; debería haber muchos más.


Señorías socialistas, su Gobierno se empeña una
y otra vez en aferrarse a esa mayoría que su entonces respaldado Alfredo
Pérez Rubalcaba calificó como Frankenstein. A esos socios suyos no les
importa España ni un comino, como ellos mismos se encargan de repetir.
Cuando ustedes, con sus políticas, su gestión y este presupuesto hagan
que las cifras de la economía y el empleo se vuelvan a poner realmente
feas, no serán ellos los que les echarán una mano, sino que les darán,
como siempre, la espalda; y por eso ustedes nos dejaran en la estacada
otra vez a todos los españoles. Pero los españoles saben que en esos
momentos difíciles siempre pueden confiar en el Partido Popular y que ahí
les ha ido bien. (Protestas).


La señora PRESIDENTA: Silencio, por favor.


El señor MAROTO ARANZÁBAL: Porque nosotros
hemos estado ahí a las duras y a las maduras, en el Gobierno o en la
oposición, por un compromiso y un vínculo de amor y de respeto a nuestro
país y a todos y cada uno de los españoles.


Muchas gracias. (Fuertes y prolongados aplausos
de los señores senadores del Grupo Parlamentario Popular en el Senado
puestos en pie).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


A continuación, tiene la palabra la senadora
Goñi Sarries, que intervendrá en el debate de la propuesta de veto
número 172, del Grupo Parlamentario Ciudadanos.


La señora GOÑI SARRIES: Gracias,
presidenta.


Señorías, Ciudadanos presenta veto a los
Presupuestos Generales del Estado. PSOE y Podemos rechazaron en el
Congreso la práctica totalidad de las 320 enmiendas que presentaba
Ciudadanos a las cuentas públicas. PSOE y Podemos, adalides del
progresismo, eligieron y apostaron por los privilegios y las
contrapartidas que el nacionalismo y el separatismo exigen y que ahondan
en las desigualdades entre los españoles. Este rechazo frontal del PSOE a
las propuestas moderadas y buenas para los ciudadanos supone de facto una
enmienda a la totalidad a las negociaciones que habíamos mantenido con el
Gobierno. Ciudadanos se ha dejado la piel para mejorar estos presupuestos
con la lealtad y sentido de Estado. Nadie puede poner un solo pero a lo
que hemos conseguido. Gracias a nuestro trabajo estas cuentas son un poco
menos malas de lo que amenazaban. Nos habría gustado poder sacar adelante
unos presupuestos realmente buenos para todos los españoles, incluidos
esos vascos y catalanes que dicen repudiar el país en el que viven; que
hubieran servido para salvar puestos de trabajo, negocios, familias y
autónomos, también puestos de trabajo, familias y autónomos de esos que
desprecian el país donde nacieron. Pero lamentablemente el Gobierno ha
elegido otro camino, y este proyecto que presentan hoy en la Cámara Alta
merece nuestro veto.


Ciudadanos fue el primer partido en reclamar
unos presupuestos de emergencia nacional allá por el mes de marzo. Desde
el primer momento nos centramos en evitar disparates en materia
económica, y gracias a haber negociado nuestra enmienda a la totalidad en
el Congreso, estos presupuestos no incluyen, entre otras medidas, la
subida del impuesto de sociedades ni del IRPF a las rentas medias, ni el
IVA a la concertada o a las clases particulares, ni a la consulta del
dentista o del oftalmólogo. Unos logros que benefician a todos los
ciudadanos, también a esos que pretenden privilegiar el nacionalismo y el
separatismo. Lamentablemente para todos el Gobierno ha decidido elegir el
camino de siempre para seguir cediendo ante los separatistas. Nos parece
bochornoso que, con la tensión que está soportando la economía en esta
crisis, estas cuentas no contemplen un plan de salvación para la
hostelería, para los autónomos, para el turismo y para algún otro sector
especialmente afectado, o una baja de conciliación para esos padres que
tienen que quedarse en casa cuidando a sus hijos en cuarentena. Es
vergonzoso que estas cuentas ignoren todo esto, y aún lo es más que los
llamen presupuestos progresistas. ¿Pero qué tiene de progresista dejar
atrás a la hostelería, al turismo y a los autónomos?, ¿y qué tiene de
progresista sacar estas cuentas con los nacionalistas, con los
separatistas y con aquellos que aún no condenan a ETA? No son unos
presupuestos progresistas, son unos presupuestos ideológicos,
nacionalistas y excluyentes que dejan a mucha gente atrás en contra de
ese mantra con el que nos llevan machacando meses.


Nos encontramos, en definitiva, ante un
proyecto de presupuestos de brazos caídos y muy poca ambición, que se
niega a evaluar el gasto superfluo y que renuncia a la oportunidad
histórica de aprovechar esa inyección económica europea que necesitamos
para abordar las reformas de Estado que España lleva décadas necesitando
y Europa exigiendo; hasta que se les acabe la paciencia, claro.


Estos son unos presupuestos que no sirven al
interés general de los españoles. En medio de una pandemia global, con
España sumida en una crisis sanitaria, económica y social sin
precedentes, con unas consecuencias socioeconómicas devastadoras para
millones de familias, autónomos y pymes no cabe duda de que nuestro país
necesita unos presupuestos que estén a la altura de estas circunstancias
tan dramáticas; unos presupuestos de Estado articulados sobre una mayoría
moderada capaz de servir a los intereses de todos nuestros compatriotas,
no solo de unos pocos. Pudieron hacerlo así y no han querido. Poco más
que añadir.


Por todo lo anterior, en Ciudadanos hemos
tratado de evitar, y toda España ha sido testigo de ello, dos errores
fundamentales en estos presupuestos. En primer lugar, hemos peleado para
que estas cuentas no fueran una réplica del acuerdo de coalición de este
Gobierno. A saber: subidas indiscriminadas de impuestos a rentas medias;
subida del tipo de sociedades; gravar a la educación concertada, a
academias de inglés y las extraescolares, o a la sanidad: dentistas,
logopedas... Y en segundo lugar, queríamos evitar que en un momento de
emergencia sanitaria, social y económica unos presupuestos pudieran
aprovecharse y servir de parapeto a esa mayoría radical que hizo posible
la formación de este Gobierno y que se fortaleciera por impulsar medidas
contraproducentes para la economía y la igualdad de todos los españoles.
Si bien respecto al primer punto hemos conseguido frenar muchos
disparates económicos que habrían sido perjudiciales para millones de
familias, los españoles han comprobado cómo el Gobierno ha elegido, y ha
elegido a los partidos separatistas para que sean ellos quienes decidan
estos presupuestos, incluyendo medidas y contrapartidas contrarias a la
moderación a cambio de su apoyo en este proyecto de ley.


Por todo lo anterior, el presente veto a los
presupuestos en el Senado tiene que ver con la falta de idoneidad de las
cuentas que ha confeccionado el Gobierno con los socios parlamentarios
que ha escogido, así como con las demandas correspondientes incluidas.
Las demandas sensatas han quedado fuera del proyecto de presupuestos del
Gobierno, como la conciliación de las familias o la imitación de modelos
europeos como el alemán, de inyección directa a pymes y autónomos para
que recuperen parte importante de su facturación en este año fatídico.
Han preferido proteger los intereses particulares de las formaciones
políticas que no creen en España en lugar de proteger el interés general
de todos los españoles. No era la única alternativa posible. El Gobierno
tenía en su mano articular una mayoría moderada con Ciudadanos con
medidas como estas que benefician a todos sin propinar, además, un
varapalo a la igualdad entre españoles. Por eso es el Gobierno de España,
el de Pedro Sánchez, quien enmienda a la totalidad la posibilidad de ese
acuerdo, habida cuenta de que rechazó en la Cámara Baja todas nuestras
propuestas, impidiendo así ese acuerdo moderado y la garantía de unos
presupuestos alejados de la ideología y que cumplieran con lo que nos
exige Europa. Estos son unos presupuestos alejados de las exigencias
europeas, carentes de previsiones sólidas y sin ambición de acometer
reformas estructurales urgentes.


Podríamos calificar estas como las cuentas de
la oportunidad perdida. Durante los próximos tres años España va a
recibir 140 000 millones procedentes de fondos europeos. Esos fondos
deberían servir para sentar las bases de una economía nueva, competitiva,
dinámica, innovadora, digital y conectada con el resto del mundo. Sin
embargo, estas cuentas no muestran ninguno de esos ingredientes. El
proyecto de presupuestos es una petición de salto al vacío, de confianza
ciega en que los mecanismos que ha establecido el Gobierno, que son casi
inexistentes, van a funcionar; confianza ciega en que van a funcionar.
Mecanismos en los que prima el interés político, en los que el criterio
técnico y el rigor han quedado apartados y en los que el resto de
administraciones se encuentran perdidas sin ningún criterio ni
instrucción, ni siquiera una senda común en la que avanzar en su trabajo;
un proyecto, en definitiva, de brazos caídos y de nula ambición que
renuncia a esa oportunidad histórica por la inyección económica europea
para reformar esas estructuras que necesitamos reformar en este país
desde hace años. El Gobierno de España no se atrevió a afrontar esas
reformas en la crisis de 2008 y ahora vamos a caer en el mismo error.
¿Cuántas crisis más vamos a tener que aguantar para que alguien se atreva
a hacer lo que hay que hacer?


Cada noticia que conocemos, desde las
intenciones legislativas del Gobierno tras conseguir el sí a los
presupuestos en el Congreso, hasta su falta de ambición reformista
constata que la mayoría que ha validado estas cuentas no va a usar los
fondos europeos para la recuperación ni para la reconstrucción nacional,
y cada vez está más claro que la arbitrariedad y el interés partidista
guiarán la utilización de estos fondos. En este sentido, cualquier
protesta para la creación de una oficina técnica y de gestión de los
recursos europeos o de fijación de criterios y objetivos ha sido recibida
con desconfianza, cuando no con desprecio o falta de interés por parte
del Gobierno; un augurio, en efecto, nada halagüeño para el futuro de
estas inversiones. Además, la falta de memorias, de proyectos, de
objetivos comunes, de métodos de evaluación, de seguimiento y de
indicadores reales conforman una larga lista de deficiencias en los
planes de Gobierno que se unen a lo que parece ser la ausencia completa
para llevar a cabo reformas estructurales. El propio Gobierno ha
advertido de que la falta de estas reformas constituye un riesgo
adicional para la recuperación, y de hecho son muchos los asuntos que se
han dejado sin abordar: por ejemplo, una normativa empresarial que lastra
nuestra productividad; la falta de modernización de nuestro sistema
educativo obligatorio, universitario y de formación profesional para
preparar a nuestros jóvenes para ese mundo dinámico y globalizado; la
poca ambición para incrementar la inserción laboral en el tercer país con
mayor paro de la OCDE o para asentar los pilares para una sociedad
emprendedora e innovadora. En definitiva, creemos que los fondos europeos
deben venir acompañados de un calendario y un programa de reformas
legislativas y organizativas que hagan que nuestro país sea más
eficiente, más justo y ofrezca más oportunidades, no para terminar los
proyectos que no se han podido hacer con el presupuesto español o para
financiar gastos corrientes de partidas que nunca se han evaluado y que
no sabemos si son verdaderamente eficientes.


Necesitamos criterios en materia de mitigación
del daño medioambiental y adaptación al cambio climático; la
sostenibilidad fiscal en igualdad de género; la mejora de los indicadores
educativos de coordinación interterritorial; la mejora de los indicadores
de bienestar social, de conciliación, de eficiencia en las
administraciones, de fortalecimiento de nuestro tejido empresarial, entre
muchos otros temas. Todo ello coordinado y debatido en la sede de la
soberanía nacional, porque el Gobierno no está ni debe empeñarse en
acometer solo esta tarea, sino que debe hacerse con consenso, con diálogo
y con altura de miras. Aprovechar o no una oportunidad como esta
significará que sigamos perteneciendo a la locomotora de la Unión Europea
o que, por el contrario, nos quedemos rezagados en los vagones de cola.
Por ello, las Cortes deben ser consultadas a través de la Comisión Mixta
para la Unión Europea, situando en el centro del debate el diálogo y el
compromiso comunes. Pero hasta ahora todos estos esfuerzos han sido en
vano. No nos rendimos. Seguiremos trabajando hasta el final.


Estos presupuestos no solo son malos para el
presente, sino que lastran el futuro de nuestros hijos; una nueva
oportunidad perdida en su educación, en la investigación, en la
innovación y en sus posibilidades de encontrar empleo y en sus
oportunidades para desarrollar un proyecto de vida propio. Mientras
tanto, la ratio de deuda continuará por encima del cien por cien en 2030
en el mejor de los casos, y no estará bajo control hasta 2050, según la
Airef. El déficit estructural continuará subiendo hasta el 5 %, y ahí ya
el Gobierno no podrá escudarse en la crisis de la COVID-19.


El Gobierno ha elegido la vía errónea, y no
solo por sus socios de viaje. Estos presupuestos podrían haber supuesto
la protección de las familias más vulnerables, la salvación de miles de
negocios eficientes y rentables que crean empleo y riqueza, o haber
marcado un punto de inflexión en cuanto a inversión en innovación,
investigación y desarrollo.


Sin embargo, se convertirán en los presupuestos
de la poca ambición y muchos parches, que no miran a quienes los están
necesitando, además de perpetuar las barreras para la igualdad. Por
ejemplo, se conservan las barreras de entrada al mercado laboral para los
jóvenes, se mantiene la precariedad a millones de trabajadores y se
subordinan las ayudas a quienes más lo están necesitando a los titulares
de prensa. A pesar de los esfuerzos, el Gobierno está determinado a no
escuchar las propuestas de la moderación, de soluciones probadas y
contrastadas en países de nuestro entorno para salvar a nuestras empresas
y autónomos; o medidas de igualdad y conciliación para que aquellos que
ya tienen un pie fuera de nuestro sistema laboral no queden excluidos de
nuevo, o para que nuestros jóvenes, que tanto han sufrido durante esta
pandemia en términos educativos, no paguen esto en el futuro.


Este Gobierno se tapa los ojos ante el ejemplo
de los países más avanzados para entregar a ciegas las cuentas a quienes
están demostrando una gestión más que deficiente. No vemos en estas
cuentas ninguna intención de implementar ningún tipo de consolidación
fiscal en el medio plazo a través de la eficiencia y evaluación de las
políticas públicas. No se cuestiona ningún gasto superfluo, simplemente
se incrementa la asignación presupuestaria de las ya existentes sin haber
demostrado su eficacia.


El Gobierno debería ser consciente de que la
poca previsión en la inversión de esos fondos no puede continuar de forma
indefinida mientras que las previsiones de deuda ya están en un 110 % del
PIB y se espera que el año que viene se sitúen entre el 116 y el 120 %.
En tan solo dos años habremos incrementado entre 20 y 25 puntos nuestro
endeudamiento público, y esa deuda la tendremos que pagar entre todos, de
eso no tengan ninguna duda. Este Gobierno prefiere los recortes a futuro
que la eficiencia en el presente. Esta es la herencia que van a dejar
este Gobierno y sus socios y es el caldo de cultivo perfecto para
nacionalistas y separatistas.


Estos presupuestos no muestran ningún
compromiso ni preocupación por la sostenibilidad futura de las cuentas
públicas. Las disposiciones de la Ley Orgánica de estabilidad, que
parecen estar suspendidas para este Gobierno, continúan plenamente
vigentes y la supervisión fiscal nacional, al igual que la supervisión
fiscal europea, no están suspendidas tampoco. Para colmo, el Gobierno no
se ha dignado a elaborar el plan de reequilibrio, al que viene obligado
por ley, que se lo ha pedido tanto la Airef como el gobernador del Banco
de España, al haberse suspendido las reglas fiscales. Mientras, nuestra
economía está sufriendo más que ninguna del resto de países de la OCDE:
récord en paro juvenil, temporalidad y precariedad del empleo; pobreza
infantil, destrucción del tejido empresarial, destrucción de empleo y
pobres indicadores de productividad de nuestras empresas. Todos estos
problemas y muchos otros han caído en el cajón del olvido del Gobierno.
En definitiva, han ganado partidos políticos con intereses particulares,
populistas y separatistas y han perdido todos los españoles.


Por todo lo anterior, Ciudadanos presenta esta
propuesta de veto al proyecto de Presupuestos Generales del Estado
para 2021 aun a sabiendas de que no tiene muchas posibilidades de salir
adelante, pero es nuestra obligación y nuestra responsabilidad.


Permítanme decirles, señorías, que la
tramitación de estos presupuestos en el Senado es una auténtica
vergüenza, es una absoluta vergüenza, como lo será también la tramitación
de la ley Celaá. El PSOE ha pasado el rodillo, ha impuesto unos plazos
cortísimos y ha ninguneado la función de doble lectura de esta Cámara.
Señorías, si todas las leyes que vienen del Congreso tienen que salir del
Senado sin que toquemos nada en ninguna ley, ¿para qué estamos aquí? Ya
puestos, podríamos reformar el Senado; reformarlo y convertirlo en una
auténtica Cámara de representación territorial que fortalezca la
coordinación entre las regiones, ya que así se consolidará la unión entre
los españoles y España. ¿Por qué estas prisas para tramitar los
presupuestos y la Ley Celaá? Yo tengo una hipótesis, y es que si sacan
las dos leyes más importantes de esta legislatura en la última semana del
año rápido y de una tacada, van a disponer ustedes de tres años enteros,
que los necesitan, para que los españoles se olviden de las burradas que
han hecho en los últimos seis meses. Es un buen plan, pero nosotros
trabajaremos durísimo para desenmascararles una vez más, como ya hemos
desenmascarado a Pedro Sánchez.


Este Gobierno, este presidente del Gobierno no
es de fiar. Es una obviedad. El señor Sánchez y su Gobierno mienten tan a
menudo que ya hemos perdido la cuenta; de hecho, sus mentiras ni cotizan
ya. Nosotros nos negamos a normalizar esta mentira incrustada en la
política actual. El señor Sánchez —me van a permitir que les cite
literalmente— dijo exactamente en una entrevista en Navarra
Televisión, en mi tierra, lo siguiente: «Con Bildu no vamos a pactar; se
lo repito, con Bildu no vamos a pactar. Nosotros tenemos una línea roja,
que es la defensa de la Constitución española. Creo que estoy siendo
bastante claro. Pero le estoy diciendo que con Bildu no vamos a pactar.
Si quiere, se lo digo cinco o veinte veces durante la entrevista, que con
Bildu no vamos a pactar. Con Bildu, se lo repito, no vamos a pactar. Si
quiere, se lo repito otra vez». Por una vez, y sin que sirva de
precedente, el señor Sánchez dijo la verdad, porque dijo cinco veces que
no iba a pactar con Bildu; el problema es que no llegó a decirlo veinte
veces. El señor Sánchez y su Gobierno no tienen ninguna credibilidad.
Ahora todos los españoles saben quiénes son y cómo son, entre otros
motivos, porque en Ciudadanos les hemos desenmascarado. Han elegido
contratar como albañiles para reconstruir España a quienes quieren
destruirla, pudiendo haber hecho unos presupuestos constructivos con
Ciudadanos y, lo que es peor, este Gobierno seguirá mintiendo. Ahora
tratan de ocultar su pacto con Bildu. Es una coincidencia de voto, dijo
Ábalos no hace ni un mes, pero la realidad es tozuda. Aquí tienen dos
pactos del PSOE con Bildu: uno en Navarra y otro a nivel nacional. (La
señora Goñi Sarries muestra dos documentos a la Cámara). Con sus logos,
con sus firmas, todo perfecto. Si se avergüenzan de sus socios, es mejor
el silencio, ya que parece que enorgullecerse de ellos por ahora no
pueden.


Estos no son unos presupuestos progresistas,
son unos presupuestos ideológicos, nacionalistas y excluyentes, y los
socios que han elegido para este viaje son una vergüenza moral. En
definitiva, nos encontramos ante un proyecto de presupuestos de brazos
caídos y nula ambición, que se niega a evaluar el gasto superfluo y que
renuncia a la oportunidad histórica de aprovechar la inyección de fondos
europeos para abordar las reformas estructurales que tanto necesita
España.


Por todo lo anterior, el presente veto al
proyecto de presupuestos tiene que ver con la falta de idoneidad de las
cuentas, con los socios parlamentarios escogidos y con las demandas
correspondientes incluidas. Son unos presupuestos que no sirven al
interés general de los españoles.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


A continuación, procede el debate de la
propuesta de veto número 17, del Grupo Nacionalista en el Senado, de los
senadores Cleries i Gonzàlez y Matamala Alsina.


El señor CLERIES I GONZÀLEZ: Muchas gracias,
presidenta.


Junts per Catalunya ha presentado este veto.
Sin que sirva de precedente, coincidimos con el grupo Ciudadanos en que
empezamos esta semana de rally con los Presupuestos Generales del Estado
y con la Lomloe, dos leyes importantes que quieren que pasen muy deprisa
y que el cava y el turrón hagan olvidar los desastres que tienen las
mismas. En este sentido, lo lamentamos con los presupuestos, más
especialmente con la Ley de educación, porque ustedes hacen leyes de
educación mientras gobiernan, sabiendo que el que viene detrás la va a
cambiar seguro, lo que es un grave error.


Dicen que estos son los presupuestos de un
Gobierno autoproclamado progresista y de izquierdas. ¿Quién progresa con
estos presupuestos? La Casa Real —el rey debe estar muy
contento—, el Ministerio de Defensa, los militares. Recordemos que
durante estos nueve meses de pandemia el Ministerio de Defensa ha
licitado más de 200 contratos de armamento y productos de guerra por
valor de 2564 millones de euros. Ahora ya entendemos el lenguaje bélico
que han utilizado con la pandemia, que va muy acorde con los
presupuestos. Por tanto, son presupuestos militaristas, no sociales.
Porque, ¿los autónomos progresan? No. ¿Las personas en situación de
dependencia progresan? No. ¿La erradicación de la pobreza infantil
progresa? No. Pero no pasa nada y vamos a votar estos presupuestos. La
grave situación de crisis sanitaria provocada por la COVID-19
—crisis que también es económica y social— no debe esconder
ni puede disimular la grave crisis democrática que sufre el Estado
español en referencia al conflicto político que mantiene con Cataluña.
Pero no pasa nada y vamos a votar estos presupuestos. El PSOE, ahora que
están aprobados los presupuestos en el Congreso, cierra la puerta a la
amnistía de los presos políticos y exiliados independentistas catalanes.
Pero no pasa nada y vamos a votar estos presupuestos. España es uno de
los Estados del mundo con más artistas encarcelados, según una ONG
consultora de la ONU. Pero no pasa nada y vamos a votar estos
presupuestos. Todas las noticias que aparecen día sí y día también sobre
el rey emérito fugado; el trato de favor de su ministerio, señora
ministra, del Ministerio de Hacienda; la nula respuesta del Gobierno ante
noticias que dañan la imagen de las instituciones del Estado, que tanto
dicen ustedes que quieren respetar; el triste papel del jefe del Estado
actual, que el Gobierno se ha movilizado para protegerlo del escándalo
del emérito fugado, según decía ayer mismo un periódico estatal; las
incógnitas de la participación o conocimiento del Gobierno sobre la fuga,
y un largo etcétera. Pero no pasa nada y vamos a dar apoyo a estos
presupuestos.


Estos días hemos visto la aparición de
manifiestos de militares —la ministra ha hecho una cosa muy de
pasada— que dejan en evidencia cómo todavía hoy el franquismo
impregna algunos poderes del Estado. El franquismo está presente en
muchos poderes del Estado. ¡Qué pena! Demuestra que estamos en una
democracia bajo mínimos. ¿Dónde está la respuesta contundente del
Gobierno progresista ante estos manifiestos? No sabe, no contesta. ¿Dónde
está la respuesta del jefe del Estado? Solo contesta contra Cataluña;
para lo demás, comunica. Nadie responde con contundencia ante estos
hechos. Pero no pasa nada y vamos a apoyar estos presupuestos. En el
Estado español manifestar que quieres asesinar a 26 millones de personas
para el Gobierno es nostalgia. ¡Qué bonito! Nostalgia. Pero si haces una
protesta cortando una carretera, conlleva una acusación de terrorismo.
¡Qué contraste! ¡Qué pena! Pero no pasa nada y vamos a votar estos
presupuestos.


Junts per Catalunya no va a votar
favorablemente estos presupuestos. Tenemos estas y muchas otras razones
de peso para decir no, un no contundente. ¿Cómo se pueden votar estos
presupuestos por parte del independentismo catalán? ¿En nombre de la
política? ¿De qué política? Debe de ser de la política de la renuncia,
pero no de la política en mayúsculas. En Junts per Catalunya hemos dicho
basta ya de ser súbditos; hemos dicho basta ya de ser súbditos de este
Estado represor. Porque ¿dónde ha quedado la famosa mesa de diálogo que
tenía que cambiarlo todo como por arte de magia? Ha quedado en nada. Ayer
alguien decía que la Mesa, por sí sola, ya vale. Debe ser la mesa de
madera, porque de reunirse y de acordar algo, nada de nada. La mesa debe
ser muy bonita y muy valiosa, pero dígame un solo acuerdo que valga la
pena. Todo bla, bla, bla. Como dijo el PSOE, se tiene que ser un valiente
patriota para votar estos presupuestos, sin duda alguna; un patriota
español con los ojos vendados para no querer ver nada de lo que está
sucediendo en este Estado represor.


Después de aprobarse los presupuestos en el
Congreso, se ha anunciado un endurecimiento del delito de desobediencia
por parte del Gobierno, del ministro de Justicia, con el aplauso de los
magistrados del Tribunal Constitucional. También se retrasó la aprobación
unos días, con el fin de hacerlo después de la aprobación de los
Presupuestos Generales del Estado, de la retirada del tercer grado a las
presas y a los presos políticos. Esto sí que es una buena negociación; o
sea, no respetan ni siquiera la legislación ni la normativa
penitenciaria.


No me vengan con derechas e izquierdas, con que
decir no es de derechas y decir sí es de izquierdas. Junts per Catalunya
dice no a estos presupuestos por la represión política que sufre
Cataluña, que hace imposible apoyar y dar estabilidad a un Gobierno
represor de un Estado represor. ¿Esto es ser de derechas o es ser
coherente con tus ideales? Señora ministra, usted ha dicho: en España ser
distinto no es delito. Pues mire, ser independentista catalán convencido
en España, por ideología, es delito y por eso sufrimos esta persecución
política día sí y día también. Esto que le quede muy claro: ser distinto,
si eres independentista catalán, es delito y padeces persecución
política.


Desde octubre de 2017, con posterioridad al
referéndum del 1 de octubre y a todos los hechos que desencadenó y que
culminaron con la sentencia de casi cien años de prisión para la mitad
del Govern legítimo de Catalunya, la presidenta del Parlament y los dos
principales líderes sociales, la situación de represión y de vulneración
de derechos fundamentales, como han reiterado organizaciones
internacionales tales como Amnistía Internacional o el Grupo de Trabajo
de Detenciones Arbitrarias de las Naciones Unidas, es una dura realidad.
Las cuotas de represión, lejos de disminuir, se incrementan día a día
—quiero destacarlo—, haciendo que el contador de los
represaliados casi llegue a la cifra de 3000 ciudadanos y ciudadanas. Por
estas razones, no se pueden votar unos presupuestos a cambio de
determinadas partidas presupuestarias mientras existe esta
criminalización política contra miles de catalanas y catalanes por sus
ideas. Ser distinto, en España es delito, señora ministra. ¿Qué clase de
democracia es esta? ¿Cómo podemos dar apoyo a un Gobierno que defiende
este tipo de democracia? Por ello, nuestro posicionamiento es fruto de un
compromiso permanente en defensa de la democracia y las libertades de
nuestro país.


La connivencia de las fuerzas policiales, que
en sede parlamentaria fueron denominadas policía patriótica por parte del
ministro del Interior, y las instancias judiciales caducas, con una
determinada ideología para perseguir y combatir el independentismo, hacen
que se sucedan como réplicas en un seísmo que parece no tener fin.


Ustedes dicen que este Estado es democrático y
de derecho, pero sabemos que no se comporta como tal ante Catalunya. Esta
grave crisis de valores democráticos y de vulneración de derechos
fundamentales condiciona profundamente cualquier relación con el Estado.
No entendemos cómo un demócrata, y aún menos si es un demócrata
independentista catalán, puede dar apoyo a un Estado y a un Gobierno
represor a través de sus presupuestos, que es una forma de hacerlo.
Fíjense qué ha pasado estos últimos días. Es un buen ejemplo para ver que
no se pueden apoyar estos presupuestos. Viene el ministro Ábalos y
presenta un nuevo plan de rodalies 2020-2030, que promete una inversión
de 6346 millones de euros, que no ha tenido la participación de la
Generalitat como titular del servicio que es. Han sido los operadores que
dependen del Estado los que han diseñado cómo tienen que ser las rodalies
de Cataluña. Democracia en estado puro; es decir, imposición desde el
Estado español, desde el centralismo más bestia. Esto es lo que sigue
pasando, una tomadura de pelo.


Esta es la cogobernanza y el diálogo del
Gobierno progresista y de izquierdas. Hace once años presentaron el
plan 2010-2015, con 4000 millones de euros, ¡lluvia de millones!, de los
que solamente se ha ejecutado un 15 % a día de hoy. En el Plan de
actuaciones prioritarias 2014-2016 ya solo previeron 306 millones.
¿Cuánto se ha ejecutado? Un 12 %, 38,4 millones. ¡Qué gran engaño las
lluvias de millones anunciadas si son para Cataluña! En estos
presupuestos usted dirá: «Cataluña nadará en la abundancia». Nadará en la
abundancia del engaño y de la tomadura de pelo. El Estado español nunca
cumple sus compromisos con Cataluña, hemos visto muchas promesas de
lluvias de millones y nunca se han cumplido en todas estas últimas
décadas. Dicho esto, los Presupuestos Generales del Estado tendrían que
ser la herramienta principal para poder llevar a cabo aquellas políticas
que den respuesta a las necesidades de la ciudadanía. Estos presupuestos
no van en esta línea en general, y mucho menos desde la óptica de
Cataluña y sus ciudadanos. Son unos presupuestos que le dan la espalda a
los catalanes y no resuelven el expolio fiscal congénito que sufrimos
de 16 000 millones de euros cada año, pero tampoco tiene presente las
deudas acumuladas, que me imagino que no tendré tiempo de decírselas.
Estas deudas son porque la ley hay quien puede saltársela sin
consecuencias, y es lo que hace el Estado español con Cataluña, sus
obligaciones, incluso recogidas en leyes, se las saltan a la torera y no
las respetan.


Presentamos este veto por responsabilidad, para
defender las necesidades de la ciudadanía, por la responsabilidad de
exigir al que se autodenomina el Gobierno más progresista de la historia
que tome medidas realistas, efectivas y justas con respecto al déficit
secular en materia presupuestaria que sufre Cataluña. Dos cifras más: las
inversiones incluidas en los presupuestos generales entre los años 2015
y 2018 solo se ejecutaron en un 65,9 %, lo que significa que se dejaron
de invertir en Cataluña 2214 millones de euros. El balance de ejecución
de inversión del año 2019 se situó en Cataluña en el 10,8 % del total de
la inversión estatal, muy por debajo del peso del PIB, que es un 19 %.
Estos presupuestos del 2021 tampoco cumplen con Cataluña, ni cumplen con
la famosa disposición adicional tercera, que alguien dijo que estaba
caducada; sí, está caducada.






¿Sabe por qué es famosa? Porque nunca la ha
cumplido el Gobierno español, y está en el Estatut de Catalunya, una ley
orgánica, pero no se cumple y como es contra Cataluña no pasa nada, y se
ha de dar apoyo a estos presupuestos magníficos. Ya tenemos una edad y el
pelo ya hace años que nos lo toman. Eso sí, el gasto militar representa
el 40 % del total de inversiones reales del Estado, 3090 millones de
euros y, lejos de rebajarlo, lo aumentan un 4,6 %. Por no hablar, que
antes lo he hecho brevemente, del presupuesto de la Casa Real, que
también aumenta, en este caso un 6,9 %. ¿Por qué no aumentan el 6,9 % a
los pensionistas, que lo necesitan más que el rey y su familia? ¿No lo
cree usted? Suerte que es un partido republicano, el PSOE, esto está
bien. Por tanto, esta es la situación que vemos.


Ahora hago una breve referencia a los fondos
europeos, que creemos que en Cataluña se han de gestionar desde la
Generalitat de Catalunya, con un trato directo con la Comisión Europea.
España debe utilizar los 140 000 millones de euros íntegramente,
asegurándolos para financiar proyectos concretos y no gasto corriente. La
sostenibilidad financiera tiene que ser uno de los principios rectores en
la selección de proyectos. Esperemos que este fondo europeo de
reconstrucción sirva para reconstruir el tejido empresarial, incluso de
las empresas que el rey de España fomentó que se marcharan de Cataluña,
que por eso le deben aumentar el sueldo, por lo bien que hizo su trabajo,
aunque fracasó bastante.


Finalmente, Junts per Catalunya no apoyará
dicho proyecto, especialmente al no darse un marco de compromiso para la
resolución política y democrática del conflicto existente entre el Reino
de España y Cataluña. ¿Dónde ha quedado el diálogo? En la mesa de madera,
porque personas a su alrededor no hay. Por eso presentamos este veto de
devolución al Gobierno, porque son unos presupuestos para dar apoyo y
estabilidad a un Gobierno represor de un Estado más represor.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


A continuación se procede a debatir la
propuesta de veto número 47, del senador Clavijo Batlle, del Grupo
Parlamentario Nacionalista en el Senado.


El señor CLAVIJO BATLLE: Muchas gracias, señora
presidenta. Señora ministra, muy buenas tardes.


En estos momentos de incertidumbre que nos está
tocando vivir, incertidumbre sanitaria, incertidumbre económica,
Coalición Canaria-Partido Nacionalista Canario cree que es importante
saber dar respuesta desde las administraciones públicas, saber llegar a
acuerdos, saber dialogar y saber entender que, por encima de todo, lo que
nos tiene que mover en esta vida pública es la vocación de servicio.


Sabe, señora ministra, que nuestra relación no
siempre ha sido fácil; ha sido cordial, le tengo aprecio personal, pero
nunca ha sido fácil y hemos chocado en distintas ocasiones. Pero nosotros
no podemos admitir aquí que se nos tache de antipatriotas. Creemos que en
democracia es importante poder exponer con total libertad las diferencias
y las distintas opiniones, y no por ello se nos tiene que tachar de
antipatriotas, ni tratar de encasillar; o se hace lo que la ministra o el
Gobierno de España dicen o automáticamente quedamos fuera de la
democracia, quedamos fuera del sentido común, quedamos fuera de
representar los intereses de aquellos que nos votaron.


Sabe que yo vengo de Canarias, soy senador por
la comunidad autónoma y presento un veto siendo consciente de que es
importante que España tenga un presupuesto, que es importante para
resolver los problemas; pero no por ello tenemos que dejar de ejercitar
nuestra labor de oposición y la obligación y los compromisos adquiridos
con nuestros ciudadanos, y lo tenemos que hacer como en democracia nos
corresponde, en este caso, hoy, aquí, presentando este veto.


¿Por qué presentamos este veto a los
presupuestos de 2021? Lo presentamos porque entendemos que vulnera
nuestros fueros canarios. Creemos que este presupuesto no da respuesta a
las necesidades reales que tiene Canarias, reales y futuras. Creemos, y
además afirmamos, que este presupuesto, después de muchos años de lucha
por nuestro estatuto de autonomía y nuestro régimen económico fiscal, en
el primer presupuesto que se aprueba tras la aprobación del REF y del
estatuto en noviembre de 2018 en esta Cámara, los deja como papel mojado,
y eso lastra el futuro de Canarias.


Yo voy a hacer un poquito de pedagogía sobre
por qué Canarias tiene un régimen económico y fiscal. Viene de los reyes
católicos, de la conquista. Se trataba de fijar la población, como casi
siempre, y a todos los pueblos que se colonizaban se les tenía que dar
incentivos para que aquellos, los conquistadores, fijaran su residencia.
Se intentaba, además, compensar las desigualdades de un territorio que
está a 1500 kilómetros de la península ibérica, cuya población está
repartida en ocho islas y que, evidentemente, tiene unos condicionantes
geográficos distintos a los que viven en territorio continental. A partir
de ahí, desde los reyes católicos, han ido evolucionando a lo largo de la
historia una serie de normas que buscan compensar las dificultades que
tiene la ciudadanía para poder desarrollarse. Le puedo poner muchísimos
ejemplos, señora ministra. Le puedo poner el ejemplo de aquellos canarios
que quieren estudiar. Hay muchos canarios —algunos están aquí, son
senadores— que tuvieron que irse de Canarias para poder estudiar,
pero es que un estudiante en la isla de La Palma, de El Hierro, de La
Gomera o de Lanzarote o Fuerteventura, si quiere estudiar una carrera
universitaria se tiene que desplazar de su isla. En algunos casos, en
algunas disciplinas, se han tenido que venir hasta la Península.


Por lo tanto, lo que se busca con estas normas
es que tengamos casi —que nunca son iguales— las mismas
oportunidades que el resto de los españoles. Después de muchos años, eso
es lo que hemos ido cristalizando en dos normas: REF y estatuto de
autonomía. Más ejemplos. ¿Por qué nuestro estatuto de autonomía dice que
se tiene que invertir en Canarias como en la media del Estado? Porque en
Canarias no colindamos con ninguna otra comunidad autónoma, no tenemos
ríos, no tenemos trasvases, no tenemos trenes de alta velocidad. Las
principales partidas inversoras del Estado español se desarrollan en
territorio continental. En Canarias no es posible, porque estamos lejos,
no colindamos ni con Andalucía ni con Cataluña ni con Galicia. Por lo
tanto, para que el esfuerzo inversor del Estado, que genera riqueza y
empleo, no siga históricamente, como ha ocurrido, alejando a Canarias de
la media del Estado, y de ahí se derivan tasas de desempleo, de pobreza,
de marginalidad y de falta de oportunidades. Lo pone en nuestro estatuto
de autonomía, no más, pero tampoco menos, sino la media del Estado
español, cosa que no cumplen estos presupuestos


¿Por qué el convenio de carreteras que usted y
yo discutimos está justificado en Canarias? Porque no tenemos trenes de
alta velocidad, porque nuestras autopistas o nuestros trenes de alta
velocidad son las carreteras, los aviones o los barcos, porque nos
tenemos que mover. Una persona que en la Península es normal que haga 80
kilómetros para trabajar y vuelva en su coche o en un tren de cercanías o
en un tren de alta velocidad, en Canarias tiene que coger un avión. Un
tinerfeño no puede trabajar en Gran Canaria, que está a 80 kilómetros, ir
y volver todos los días, tiene que pagarse una residencia. Por ejemplo,
el Plan de empleo y de infraestructuras, que usted ha borrado de un
plumazo de estos presupuestos, es un plan de empleo. El mercado laboral
en Canarias es rígido, porque la movilidad es muy compleja. Un ciudadano
de La Palma o un ciudadano de El Hierro que encuentra trabajo, o tiene
que emigrar a otras islas o tienen que emigrar de Canarias. ¿Por qué?
Insisto, porque es un territorio compuesto por un archipiélago, pero así
podemos hablar de obras hidráulicas, de infraestructuras, de saneamiento,
de los planes específicos de turismo, de muchas cosas que están recogidas
en una norma que tiene el visto bueno de la Unión Europea, que se ha
trabajado y tiene el visto bueno mayoritario del Congreso de los
Diputados y de esta Cámara, que se aprobó en noviembre de 2018, que usted
y su Gobierno tienen la obligación de cumplir, y que no están
cumpliendo.


Por eso hemos presentado este veto. Nosotros
estuvimos reformando el estatuto de autonomía quince años, porque nos
pasaba como a otras comunidades autónomas: el régimen económico fiscal no
es una ley de rango orgánico. Por lo tanto, estaba siempre supeditada a
la Ley de Presupuestos Generales del Estado, no se cumplía, y dependiendo
de si necesitaban los votos de Coalición Canaria y del Partido
Nacionalista Canario o no, conseguíamos avanzar presupuestariamente.
Quisimos anclar ese régimen económico y fiscal en nuestro estatuto de
autonomía, de tal forma que perteneciese como norma al bloque
constitucional, fuese una ley de rango orgánico y ustedes tuviesen la
obligación de cumplirlo. Es más, no solo la obligación de cumplirlo, sino
que en el artículo 167 pusimos que en el caso de que el Parlamento de
Canarias entrase en colisión y considerase que no cumplían, se pararía la
tramitación de los Presupuestos Generales del Estado y tendría que haber
una comisión para determinarlo. La realidad, señora ministra, es que
ustedes no lo han cumplido, y el informe del Gobierno de Canarias y del
Parlamento de Canarias determina que no han cumplido el régimen económico
y fiscal. (Denegaciones de la señora ministra de Hacienda, Montero
Cuadrado). Sí, señora ministra, lo tengo aquí y después, si quiere, se lo
dejo. No solo eso, señora ministra, sino que para poder dictaminar ese
informe desfavorable se necesita una mayoría de dos tercios, y su
partido, que lo puso en su programa electoral, y Podemos y los miembros
del Pacto de las Flores, Agrupación Socialista Gomera y Nueva Canarias
han impedido que ese informe desfavorable salga del Parlamento de
Canarias. (Denegaciones de la señora ministra de Hacienda, Montero
Cuadrado). Sí, lo han impedido, porque las leyes se cumplen o no se
cumplen, otra cosa es que utilicen el rodillo y la traición al pueblo
canario para impedir que ese informe desfavorable salga.


Igual que todos, sabemos que no van a aprobar
ni una sola enmienda. La falta de respeto a esta Cámara es de tal
magnitud que no vienen ni con la voluntad de decir: igual en esto nos
hemos equivocado un poco y podremos corregirlo. Van a pasar el rodillo y
no van a aprobar ni un veto, ni una sola enmienda, simple y llanamente
porque no les interesa. Vienen aquí a dar lecciones de democracia, vienen
a dar lecciones de justicia social, de igualdad, se van a Europa y piden
un tratamiento singular para España, porque la crisis ha afectado mucho
más a España que a otros territorios de la Unión Europea, y cuando
Canarias u otras comunidades decimos: los índice de desempleo son 11
puntos más altos en Canarias que en la media de España, o que la caída
del producto interior bruto en Canarias va a superar el 22 % y se nos van
a ir casi 12 000 millones de euros de nuestro producto interior bruto, la
respuesta es incumplir el estatuto de autonomía, la respuesta es
incumplir el REF y la respuesta es condenar a nuestro pueblo a una crisis
mucho más severa, a quitarnos las herramientas de las que nos habíamos
dotado democráticamente para poder salir adelante y garantizar un futuro
a nuestros hijos y dejarnos abandonados, poniéndonos en el penúltimo
lugar de la cola, en este caso en inversión media.


Señora ministra, nosotros decimos lo mismo, y
usted sabe que somos un partido de gobierno, en la oposición y en el
Gobierno. Le voy a leer lo que el 22 de octubre firmó el Partido
Socialista-Podemos en Canarias, y se lo leo textualmente, porque es el
Plan de reactivación económica: Ahora este plan para la reactivación
traza las líneas estratégicas para remontar el vuelo, de la misma forma
que marca el camino para que las organizaciones que lo suscriben, el
Partido Socialista y Podemos, y sus representantes públicos en las Cortes
o en las instituciones europeas defiendan las singularidades de Canarias
con el fin de que se activen más medidas específicas, atendiendo, por
supuesto, a la especial afección del sector turístico —cero en sus
presupuestos, señora ministra—, a las características económicas
reconocidas del Régimen Económico y Fiscal y el estatuto de autonomía y a
la condición de región ultraperiférica de Canarias dentro de la Unión
Europea. Eso es lo que firma el secretario general del Partido Socialista
en Canarias —no sé cuántos partidos socialistas hay en España, pero
eso lo firma y se compromete—; lo firma el 22 de octubre, hace casi
dos meses, no llega.


La realidad es que su partido y los partidos
que apoyan a este Gobierno, en este caso Podemos, han tirado a la basura
el estatuto de autonomía, el Régimen Económico y Fiscal y el Pacto por la
recuperación y la reactivación económica de Canarias. Eso es lo que
ustedes están haciendo con estos presupuestos, señora ministra.


Luego tendrá algo de tiempo —aunque no sé
si querrá dedicarlo, porque, como ha decidido contestarnos a todos
juntos, no sé si le quedará algo de tiempo, pero si le queda, le
formularé unas preguntas, a ver si es capaz de contestarlas.


Como le decía, señora ministra, en ese estatuto
de autonomía establecimos una cláusula, que es el artículo 167. Haciendo
honor a la coherencia de nuestros programas electorales, a los documentos
que firmamos —porque este Plan de reactivación lo firmamos con el
gobierno de Canarias, estando en la oposición—, siendo el principal
partido de la oposición, firmamos el Plan de reactivación económica y nos
comprometimos —y es lo que estamos haciendo aquí y lo que no están
haciendo ni los senadores ni los diputados de Canarias del Partido
Socialista y de Podemos— a defender su fuero y a hacer honor a lo
que se ha firmado.


Nosotros, como partido de gobierno que somos,
ahora en la oposición, vamos a seguir defendiendo Canarias. A nosotros
nos gustaría muchísimo poder decir que el estatuto de autonomía y el REF
se respetan, porque —como usted bien sabe— si esos recursos
van a Canarias los va a gestionar su propio partido político, que es el
que está gobernando, que está haciendo dejación de funciones, señora
ministra. (Gestos de desaprobación de la señora ministra de Hacienda,
Montero Cuadrado). Yo sé que no le gusta, hace gestos y no le gusta,
porque, claro, cuando a uno se le ven las desvergüenzas, es difícil de
digerir, pero lo vamos a seguir reivindicando. Este ejercicio que estoy
haciendo yo en nombre de mi formación política hoy aquí es un ejercicio
de coherencia, respeto, lealtad y honorabilidad política. No es
deslealtad contra un gobierno que estemos en contra de los presupuestos
ni lo que esté en contra de lo que ustedes digan. Con cierta arrogancia,
falta de humildad y superioridad moral, parece que sientan cátedra cada
vez que hablan y que están en posesión de la verdad absoluta. No, ustedes
son falibles, igual que lo somos todos, pero lo que no puede negarme es
que el informe del Gobierno de Canarias y del Parlamento de Canarias
establece de manera desfavorable el cumplimiento del REF y que ustedes,
por la puerta de atrás, están modificando articulados del REF. Y eso,
insisto, va a ir en detrimento de las expectativas y de las oportunidades
del pueblo canario para este año 2021 y para el futuro, porque se está
sentando un precedente —lo están sentando ustedes—: que dan
igual los estatutos de autonomía, dan igual los compromisos que se
firmen, que nosotros vamos a hacer lo que nos dé la gana, haremos lo que
sea necesario y Canarias pagará las facturas de que el señor Pedro
Sánchez siga sentado en la Moncloa, aunque le quitemos dinero a los
canarios para dárselo a otras comunidades autónomas. Da igual, lo
importante es que Pedro Sánchez siga en la Moncloa, señora ministra.


Por eso, por ese ejercicio de coherencia, hoy
estamos presentando aquí este veto a estos presupuestos. Nos gustaría,
insisto, que cumpliesen con Canarias. Están —y le devuelvo la
moneda, señora ministra— a tiempo de corregir en esta Cámara los
errores que tienen sus presupuestos, porque, como usted bien dijo en esta
tribuna, se pueden cometer errores. Luego, las dos preguntas son muy
simples: ¿Van a corregir los presupuestos para que se dé cumplimiento al
estatuto de autonomía? ¿Va a contar Canarias con un plan específico de
rescate del sector turístico, como se va a hacer con otros sectores
económicos? No me diga que son los 20 millones de resiliencia de la Unión
Europea para un sector que mueve 14 000 millones de euros al año, porque
es de risa y es faltar a la inteligencia de los ciudadanos de Canarias.
¿Vamos a contar con esos instrumentos, o, por el contrario, esto es un
puro trámite, un paripé, y van a pasar el rodillo, no van a mover ni una
sola coma, y los senadores, hoy, aquí, que se presentaron por Canarias,
van a traicionar lo que su partido firmó en el Pacto de reactivación, los
acuerdos alcanzados en el pacto de Gobierno y lo que pone en sus
programas electorales y le darán la espalda al pueblo canario,
condenándolo a una crisis severa y a una falta de expectativas? Me da
que, tristemente, va a ser esto último lo que ustedes van a hacer, pasar
el rodillo, dejar al pueblo canario a su suerte, y tristemente, las
consecuencias las vamos a sufrir este año y los próximos años, porque ya
tenemos, señora ministra, un 62 % de paro juvenil en nuestra tierra y no
sabemos hasta dónde puede llegar.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


A continuación, se procede a debatir la
propuesta de veto número 8, de los senadores González-Robatto Perote y
Marín Gascón y la senadora Merelo Palomares, del Grupo Parlamentario
Mixto.


Tiene la palabra el senador González-Robatto
Perote.


El señor GONZÁLEZ-ROBATTO PEROTE: Gracias,
presidenta.


Señora ministra, señorías, lo ha dicho mi
presidente: Vox nunca apoyará, bajo ninguna presión o chantaje, las
cuentas de un Gobierno entregado a todos los enemigos de España que
quieren destruir nuestra unidad nacional, nuestra libertad, nuestra
legalidad constitucional y nuestro futuro; distancia infinita con la
banda de Otegi y con la banda de Sánchez, que en su camino han llevado a
España a ser el país con más muertes por número de habitantes, a ser el
país con la recesión más profunda de toda Europa y a ser el país con el
paro más alto que cualquier otro país occidental; unos presupuestos que
han sido descalificados técnicamente por todos los expertos por el
aumento de gastos superfluos, ingresos inflados, déficit descontrolado y
el mayor aumento de deuda pública de la historia. El Congreso de los
Diputados ha aprobado, con amplia mayoría, el Proyecto de ley de
presupuestos con el apoyo de once partidos: de ETA, del comunismo más
rancio, de la xenofobia independentista de extrema izquierda catalana, de
los acomplejados de Compromís, del supremacismo vasco, de la Nueva
Canarias, que ignora qué está pasando en su isla con las políticas
socialistas, de Menos País, tristemente del PRC y del desaparecido y
vendido Teruel Existe. ¿Van ustedes a apuntalar con su voto al Gobierno
con este bagaje? ¿Qué razones tienen, pues, si no son 100 % ideológicas o
egoístas, unos para seguir en el poder y otros para llevarse el dinero?
¿Qué les mueve a ustedes para aprobar estas irresponsables cuentas? Para
los separatistas catalanes y vascos, que son, recordemos, los que han
hecho posible su aprobación en el Congreso, su voto está claro y se
entiende perfectamente: cuanto peor vaya España, mejor les va a ellos;
cuantos más fondos y prebendas reciban de sus regiones en detrimento de
otras que más lo necesitan, mejor para ellos; cuantas más políticas de
alejamiento de España y del español, mucho mejor para ellos. ¿O es
creíble que su apoyo sea por la solvencia de unos presupuestos que han
descalificado todos los expertos? ¿O es, quizá, por su amor a España,
como decía usted? Contéstenlo ustedes. A manos de esta caterva hemos
dejado el futuro más inmediato de España, a manos de estos señores y
señoras está la salida a la mayor crisis de la democracia. Estos
presupuestos serán aprobados por gente que no ha visto uno en su vida,
por ignorantes del sistema que no saben qué conllevan pero sucumben a los
cantos de sirena del presidente de la mentira para mantener su poltrona
caliente.


Los presupuestos que ustedes han presentado,
lejos de cualquier realidad, son irresponsables y son absurdos, fáciles
de vender a aquellos que no saben lo que conllevan porque han estado
viviendo del contribuyente desde que tienen uso de razón y que, para
desgracia de los españoles, son demasiados. Todos los estudios solventes
han descalificado estos presupuestos, que no son los que necesita España
y que no tienen la más mínima base técnica para garantizar la
prosperidad. Representan un aumento absurdo de recaudación, con un
hachazo fiscal a las clases medias, pymes y autónomos. Seremos el único
país del mundo que sube los impuestos para justificar mayores gastos
ideológicos y transferencias a las regiones más ricas, que son Cataluña y
el País Vasco.


La carrera de errores en previsiones de este
Gobierno solo un imbécil podría ignorarla, o alguien malvado. Su
historial de gestión y previsión es un resumen de imprudencias que nos
llevó, ya en 2019, cuando no existía el coronavirus, a una desviación
de 7600 millones de euros, y eso cuando las cosas iban bien. Esos son,
para que se hagan la idea, 76 hospitales como el que ustedes tanto
critican, son 76 000 camas de hospital, 38 000 camas de UCI.


Pero vamos a desgranar un poquito los
presupuestos, señorías de la izquierda que no han trabajado en su vida.
Cojan papel y boli y aprendan con lo que convive el ciudadano corriente,
del cual ustedes viven. El presupuesto es una herramienta que le permite
estimar cuáles son los ingresos y los gastos en un tiempo determinado.
Vayamos primero con los ingresos. Su cuadro macroeconómico es una
auténtica irresponsabilidad al determinar unos ingresos muy por encima
del optimismo. Los brotes verdes de su expresidente, amigo del dictador
de Venezuela, no son nada comparados con el Amazonas económico que
ustedes han planteado. Sus estimaciones están muy por encima de las de
otros organismos, como el Banco de España o el Fondo Monetario
Internacional. Además, ustedes estiman un rebrote del PIB de 11 puntos,
algo que es absolutamente increíble para cualquier individuo con los pies
en la tierra, con una economía en una gravísima caída, con los negocios
cerrando a cal y canto, con los ingresos que se han desplomado, según la
Agencia Tributaria, en más de diez puntos, cuando las bases imponibles y
la demanda interna se han desplomado más de un 12 % en agosto y con los
efectos de la segunda ola, que han impactado directamente en los
ciudadanos porque ustedes y sus irresponsables gestiones no previeron un
plan para hacer frente a este supuesto. Con todo ello, ustedes tienen el
gran atrevimiento de establecer un récord de recaudación en 2021. Esto
es, sencillamente, vergonzoso.


A esta lista de deseos del Gobierno, añadimos
la estimación de casi 7000 millones en ingresos extraordinarios por
nuevos impuestos a los ahorradores, a los consumidores de servicios y a
los ciudadanos con menos recursos. Ustedes, por estos impuestos, antes de
la crisis esperaban unos ingresos de 1900 millones y después de la
crisis, de repente han estimado que van a recaudar 2309 millones de
euros, con una crisis económica catalizada por ustedes, que ha arruinado
todo el tejido productivo y la Bolsa española cayendo estrepitosamente,
ustedes estiman que van a recaudar más. Brillante. Ustedes, los que
decían que no iban a subir los impuestos a las clases medias y
trabajadoras, se los han subido precisamente a ellos, a la clase media y
a la clase trabajadora. España es la única potencia europea que sube los
impuestos; familias y compañías verán sus ingresos reducidos, no solo
como consecuencia de la recesión, sino del aumento de la carga fiscal en
el peor momento posible.


Y ahora vamos con los gastos. El Gobierno no ha
reducido absolutamente nada el gasto superfluo: administraciones
duplicadas y decenas de ministerios completamente inútiles. Ustedes creen
que la reducción del gasto vendrá de la reducción de partidas a ayudas
para el desempleo, mientras que sus propias estimaciones no bajan en
absolutamente nada. Pero esto no es lo peor, el Gobierno estima que se
reducirán los gastos por desempleo en 19 000 millones de euros, cuando el
paro será de casi un 17 %, sin contar todos los ERTE que se van a
convertir en ERE. Mentiras e irresponsabilidades. Pero esto va a
peor.


Vamos a centrarnos en las mentiras con los ERTE
y con los autónomos. El Gobierno elimina de las cuentas de gastos los
ERTE, que caen en 17 000 millones de euros, de repente, pasan de 17 840
a 718; o la exoneración de cuotas, que cae casi 6000 millones, de 639
a 435; y eliminan las prestaciones por cese de actividad, de 5339
millones pasan a 400 millones tan solo en 2021. Ustedes, señorías del
Gobierno, hacen unas estimaciones de ingresos completamente ficticias, a
sabiendas de que su gestión ha sumado a esta crisis la destrucción
de 100 000 empresas españolas, 750 000 personas que aún están en ERTE, el
desplome de la actividad empresarial, una caída como nunca antes había
pasado en democracia.


Al palmarés de este Gobierno se le suma que
España será el país con más déficit de la Unión Europea en 2021, 2022
y 2023. Estamos asistiendo a un espejismo que permite al Gobierno seguir
en su puesto mientras destroza la unidad e hipoteca a España. Y digo
bien, hipotecan a España porque la ingente deuda que ustedes están
acumulando hay que pagarla y la pagaremos todos los españoles. ¿Les
parece, señores senadores socialistas —a los anarquistas de Podemos
y separatistas no les pregunto—, que estos presupuestos son los
buenos cimientos para la reconstrucción de España? ¿Es coherente
presentar un presupuesto de esta naturaleza? ¿Cómo aplauden ustedes el
aumento indiscriminado de impuestos, que arruinarán todavía más a las
familias, a los pequeños empresarios y a los autónomos? Creen que el
señor Sánchez ha encontrado la piedra filosofal cuando el resto del mundo
occidental lo que ha hecho es bajar impuestos y reducir los gastos
superfluos. Aplauden ustedes los presupuestos más desequilibrados de la
historia, con más impuestos confiscatorios, que arruinarán a las clases
medias y condenarán definitivamente a miles y miles de pequeñas empresas
y de autónomos. Vaya número, señorías. De aquí a las olimpiadas, del
fracaso a por oros.


Añadimos que al plan que ustedes presentan en
Bruselas se le añaden, bajo la oscura figura de nuevas figuras
tributarias, nuevos atracos al pueblo español, por un importe de
casi 3500 millones. A ninguno de sus vecinos se les ha ocurrido semejante
desfachatez. Ustedes basan sus presupuestos en hacer creer
exponencialmente que va a crecer la parte de ingresos vía aportación
fiscal, concretamente una mayor aportación fiscal a los que generan
recuperación, consumo y empleo, poniéndoles más trabas y más problemas.
Ustedes ven al pueblo español como una máquina de esquilmar, a base de
quitar platos de comidas de las familias españolas para llenar sus arcas
personales sin ningún tipo de empatía ni sensibilidad al gobernado;
sobreestimaciones demostradamente erróneas en su historial gubernamental.
Exigen mucho más esfuerzo fiscal a empresas y familias que están al borde
de la bancarrota, sin ajustar un solo euro de los gastos de bonanza
de 2019. Díganles ustedes a los charcuteros, a los taxistas, a los
fontaneros, díganles que tienen que exigirles un mayor esfuerzo para
aumentar un 157 % los presupuestos para el Ministerio de Igualdad
—que aprovechamos para recordar sus continuos ridículos al ser
incluso condenado por discriminación de género—. Díganle al 40 % de
los jóvenes de España que no tiene empleo, a casi la mitad de los jóvenes
españoles, que 2300 millones de euros se van a destinar en inversiones y
transferencias de capital para los separatistas de Cataluña, la mayor
cifra que ha recibido la región en este siglo. Díganles a nuestros
soldados que se han vendido sus históricos cuarteles por ceder a aquellos
que apoyan a los que tanto tiempo llevan sangrando España. Díganles que
lo que ETA no consiguió, lo ha conseguido el señor Sánchez. Díganles a
las familias que se han quedado sin ingresos, sin ingresar absolutamente
nada en sus casas por sus fallidos sistemas de ingreso mínimo vital, las
chapuzas de los ERTE y la nefasta gestión, que van a destinar 8000 euros
en conciertos para perros. Díganles a todos aquellos que se ven sin
empleo, que disparan las colas del hambre, mientras están sin poder
llevar regalos siquiera a sus familias en Navidad, que el señor Ábalos ha
disfrutado de una maravillosa estancia, junto con su familia, en un hotel
de cinco estrellas en Canarias a costa de todos los españoles. Díganles a
los autónomos, a los que se les ha aumentado las cuotas, que sus
ayuntamientos más endeudados se dedican a pintar bancos en lugar de
trabajar para solucionar los problemas de la más salvaje crisis de
desempleo y caída económica que ha sufrido España en las últimas décadas.
Díganles también, a todos aquellos a quienes ustedes han traicionado y
les han obligado a cerrar, que han pretendido subirse el sueldo. Díganles
a todos los españoles que estos presupuestos son los más antisociales que
se han presentado jamás en estas cámaras. Y díganles a todos, a los que
han llevado al cierre de las 100 000 empresas en España, 100 000
proyectos y a miles de autónomos y pymes al cese de su actividad, que les
van a subir todavía más los impuestos y que no van a reducir un solo euro
de los chiringuitos que tienen ustedes montados. Y díganles a los
españoles que ustedes han destruido el trabajo de miles de familias, que
ahora solo ven cómo sus políticos se dedican al despilfarro de sus sueños
personales de insensatez y de irresponsabilidad.


Nosotros les decimos, a ustedes y a todos los
españoles, que Vox siempre defenderá al pueblo español y estará en contra
de las cesiones burguesas a sus socios etarras, a sus socios
separatistas, a sus socios insolidarios, a sus socios ignorantes y a sus
socios de la más vil casta que se haya visto en la historia de la
democracia moderna.


En Vox no podemos entender que un Gobierno que
ha traído a España la mayor tasa de muertos del mundo, la mayor recesión
económica de Europa y de la OCDE, el mayor paro de Europa, la mayor tasa
de paro juvenil del mundo, celebre un presupuesto que presenta el mayor
déficit de la historia, el mayor aumento de la deuda pública, la subida
generalizada de impuestos a las clases medias, la multiplicación del
gasto superfluo e innecesario del arrinconamiento del español y de la
Corona y el mayor número de prebendas y cesiones a los separatistas y a
los delincuentes. Nosotros les decimos que Vox estará enfrente, haciendo
oposición de los intereses que otros han rendido, por el bien de
absolutamente todos los españoles, por nuestra unidad nacional, por
nuestra libertad, por nuestra legalidad constitucional y por nuestro
futuro.


Gracias, presidenta.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En el turno en contra, intervendrán, por el
Grupo Parlamentario Socialista y el Grupo Parlamentario Izquierda
Confederal, el senador Palacín Guarné y la senadora Vilà Galán.


Intervendrá, en primer lugar, la senadora
Vilà.


La señora VILÀ GALÁN: Muchas gracias,
presidenta. Buenas tardes, ministra.


Yo creo que estos, sin lugar a dudas, son unos
presupuestos buenos, son positivos para el conjunto del país, para el
conjunto de la ciudadanía y de los territorios y yo creo que negarlo es
negar la mayor, es hacerse trampas. Acabamos, por fin, con la austeridad
del Partido Popular y miramos hacia el futuro. Al contrario que en 2008,
esta vez se está haciendo frente a la crisis sin recortes. Se invierte en
un nuevo modelo productivo, más ecológico y más sostenible y,
evidentemente, va a crear empleo y economía verdes.


Tanto el Partido Popular como Ciudadanos se
empeñan en decir que la austeridad y los recortes en el pasado realmente
funcionaron y yo creo que la ciudadanía y toda la opinión pública se han
dado cuenta a estas alturas de que las políticas de austeridad y de
recortes fueron un auténtico fracaso.


Pero no solo se han dado cuenta la ciudadanía y
los medios de comunicación, también se han dado cuenta en Europa. Ustedes
no dicen lo mismo aquí y en Europa. Ustedes tampoco votan lo mismo aquí
que en Europa. Ustedes están a favor de los fondos europeos, y esos
fondos europeos justamente son para reconstruir, para invertir en
políticas públicas, y es lo que estamos haciendo con estos presupuestos.
Por tanto, se están contradiciendo, no dicen exactamente lo mismo aquí
que en Europa.


Las políticas de recortes no solamente
provocaron mucho sufrimiento a la ciudadanía, sino que, además, hicieron
que creciera la extrema derecha en Europa, por eso necesitamos una salida
de la crisis totalmente contraria a la que nos brindó el Partido Popular
en 2008.


También vamos a invertir en políticas públicas
de sanidad, porque la pandemia ha demostrado que nuestra sanidad pública
estaba más debilitada a consecuencia de los gobiernos del Partido Popular
y de los recortes del Gobierno de Mariano Rajoy concretamente. Vamos a
invertir en sanidad más de un 150 %, eso significa llevar a las políticas
públicas los aplausos que dábamos en los balcones durante los
confinamientos a los sanitarios; eso significa que realmente estamos
devolviendo esa gratitud, de la que todos nos llenamos la boca en el
Congreso y en el Senado, a través de las políticas públicas a la
inversión pública.


La mayoría progresista y plurinacional es la
que marca el rumbo de la legislatura. A ustedes les escuece que esa
mayoría progresista sea la que haya llevado adelante estos presupuestos
en el Congreso y a nosotros, en cambio, nos congratula. Y tengo más malas
noticias para ustedes —y buenas para la ciudadanía— porque
también va ser esta misma mayoría la que lleve adelante las leyes
necesarias para seguir rescatando a la gente y no a los bancos, como
hicieron ustedes en su momento. (Aplausos).


Por primera vez, señor Cleries, casi se cumple
con la inversión que requiere el Estatuto de Cataluña, la inversión que
necesita Cataluña, y usted tiene que reconocerlo. A ustedes también les
escuece que estos presupuestos sean buenos para Cataluña, porque
significa que a ustedes les queda un papel realmente pobre en esta
situación política. Son unos presupuestos buenos para Cataluña, no solo
porque incrementan en un 52 % el gasto anterior, sino porque son buenos
en educación, en sanidad pública, en recuperar el sector industrial, el
sector del automóvil, que tanta falta le hace a Cataluña.


Además, ahora nos dicen que no pueden votar a
favor de estos presupuestos porque eso significaría reconocer o dar alas
a un Gobierno represor. Han llamado a este Gobierno de coalición Gobierno
represor, un Gobierno que ahora mismo está trabajando para reformar el
delito de sedición y para que los presos políticos dejen de estar en la
cárcel. Eso es ir totalmente en contra de la línea que llevaba el Partido
Popular y ustedes lo tienen que reconocer. De represor nada, sino a favor
de la libertad, a favor de la gente, de la ciudadanía, de la libertad de
expresión y de todo lo que ha defendido el independentismo, no de sus
ideas exactamente, porque este no es un Gobierno independentista, no hace
falta que se lo diga, pero sí respeta las ideas de los demás grupos
políticos, por supuesto.


Y además, empezamos a cerrar con estos
presupuestos ese chiringuito fiscal y desleal para los ricos que tiene la
Comunidad de Madrid, de eso también deberían de alegrarse los otros
territorios y las organizaciones políticas de los otros territorios que
piensan votar en contra de estos presupuestos. Realmente hay una
deslealtad de la Comunidad de Madrid y tenemos que acabar con ello,
señorías.


Estos presupuestos suponen un aumento del 70 %
de la inversión en educación, del 46 % en dependencia, de un 80 % en
investigación, del 22 % en becas universitarias, del 30 % en fomento de
la ocupación, del 60 % en la lucha contra la pobreza infantil, del 70 %
en servicios sociales y también un 157 % en políticas de igualdad de
género. Decía el señor Maroto que la mejor política de igualdad para las
mujeres es que tengan empleo. Sí, evidentemente la creación de empleo es
importante y también que las mujeres puedan acceder a un empleo. ¿Pero de
qué empleo nos están ustedes hablando —porque no nos sirve
cualquier empleo—: de un empleo que permite la brecha sala salarial
de un 25 %, por ejemplo? ¿De que sea posible que un hombre gane un 25 %
más por el mismo empleo? ¿Ese es el empleo que defienden ustedes para la
igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, o el empleo que
promociona que las mujeres tengan que hacerse cargo de esos trabajos que
los hombres no quieren hacer, de los trabajos más precarios? ¿Ese es el
empleo que ustedes defienden? Pues no, gracias. Nosotros defendemos,
además de un empleo y de poder acceder al empleo en igualdad de
oportunidades, un empleo igual entre mujeres y hombres. No nos sirve
cualquier empleo, señor Maroto.


Estos presupuestos suponen además una justicia
fiscal. Reducimos las desgravaciones a los planes de pensiones privados y
subimos el impuesto de sociedades a los grandes grupos empresariales, y
subimos un punto al impuesto de patrimonio para los que tienen más de 10
millones de euros. Subimos además 3 puntos el IRPF para rentas de capital
de más de 200 000 euros y 2 puntos el IRPF a las rentas del trabajo de
más de 300 000 euros. Y, si quieren también trabajar en igualdad de
oportunidades, por supuesto que hay que invertir en dependencia, en eso
que el Partido Popular no invirtió jamás. Revertimos los recortes del
Partido Popular en dependencia con un incremento de más de 600 millones
de euros, y más de 700 millones de los fondos europeos para llevar a cabo
inversiones que mejoren la atención a las personas mayores, transitando
de un modelo basado en residencias hacia un modelo que apueste por la
atención en domicilio, porque nos hemos dado cuenta de cómo de mal
gestionan ustedes las residencias allí donde gobiernan, por eso es
necesario un cambio de modelo, así como un cambio de modelo en el sistema
de cuidados, por eso vamos a invertir en la protección social.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


En el mismo turno en contra acumulado, tiene la
palabra el senador Palacín Guarné por el Grupo Parlamentario
Socialista.


El señor PALACÍN GUARNÉ: Gracias, presidenta.
Buenas tardes, señorías; buenas tardes, señora ministra.


En primer lugar, y en nombre del Grupo
Socialista, le queríamos dar la enhorabuena por la presentación de estas
cuentas que hoy entran en esta Cámara, unas cuentas elaboradas en un
contexto de especial dificultad, de incertidumbre, y unas cuentas que, a
nuestros ojos, recogen tres objetivos principales: mitigar las
consecuencias de la pandemia, reforzar el Estado de bienestar y sentar
las bases para un futuro más sostenible, más próspero y más igualitario.
(Aplausos).


También queríamos felicitarla porque estas
cuentas llegan hoy a esta Cámara habiendo obtenido un apoyo mayoritario
en el Congreso de los Diputados. Hacía más de diez años que no llegaban a
esta Cámara unos presupuestos con 188 votos y, lo que es más importante,
con once fuerzas políticas apoyándolos. Y eso dice mucho del espíritu
negociador, y no del rodillo que dicen otros, porque, al final, un
Gobierno de coalición en minoría que tiene que pactar con once grupos
políticos ¿qué rodillo va a aplicar? ¿Qué rodillo va a aplicar?
(Aplausos). Creo que ahí se equivocan de pleno. Y es una muestra de cómo
hemos sido capaces de acordar en un momento de extrema complejidad,
dejando nuestras diferencias a un lado y pensando en el bienestar de
todos los ciudadanos de este país. Creo que eso es política y lo que hay
que poner en valor.


Y queríamos dar las gracias también en nombre
del Grupo Socialista a todos los grupos que apoyaron en el Congreso de
los Diputados estas cuentas y a todos los grupos que previsiblemente lo
harán también en el Senado. Y frente a este ejercicio de responsabilidad,
a este poner por delante los intereses propios los intereses de la
ciudadanía, tenemos estos cinco vetos que hoy estamos debatiendo aquí en
el Pleno del Senado. En un momento complejo, como he dicho, en un momento
donde nos estamos jugando el futuro, hay otras opciones que piensan que
es mejor optar por los intereses particulares que por los intereses del
conjunto de los ciudadanos de este país. No entendemos, de verdad, cómo
pueden tomar esta posición en un momento tan complejo como el actual. En
un momento de emergencia, en un momento donde todos deberíamos arrimar el
hombro, ustedes se colocan de perfil, o, simplemente, quieren poner palos
en las ruedas.


Señorías del Partido Popular, aunque no
compartamos su comportamiento, lo cierto es que tampoco nos sorprende,
porque ya lo hicieron con el estado de alarma, que cuando más se les
necesitaba, votaron en contra. Lo hacen constantemente. Cada vez que hay
que tomar acuerdos sanitarios, los boicotean. Y también lo hicieron en un
momento en el que se jugaba el futuro en la Unión Europea, cuando Pedro
Sánchez, nuestro presidente, se colocó enfrente de los países que
solicitaban salir de la crisis de otra manera, y, gracias a ese impulso,
gracias a esa negociación, hoy España cuenta con 140 000 millones de
euros, 27 000 millones de euros en este presupuesto. (Aplausos).


Señorías del Partido Popular, creo que uno de
los problemas que tienen es que todavía no han asumido que están en la
oposición. Están en la oposición porque perdieron o no ganaron unas
elecciones, de hecho perdieron cinco procesos electorales en el año 2019.
Yo no les aconsejaría pero sí les pediría que abandonaran el «Cuanto peor
mejor», el que «España se caiga que nosotros la levantaremos», porque no
les va a llevar a ninguna parte. Además es que la posible aprobación de
estos presupuestos despejará la legislatura y tendrán tres años para
decidir si quieren hacer este tipo de oposición, que no aporta
absolutamente nada, o arrimar el hombro para mejorar la gobernabilidad de
este país, o como dice mi compañero, el senador Gilabert: si no quieren
ayudar, si no quieren aportar, por lo menos no estorben, y menos en un
momento tan complicado como el actual. (Aplausos).


Miren, señorías, numerosas instituciones
nacionales e internacionales se han pronunciado durante los últimos meses
sobre lo que deberían hacer los diferentes estados para afrontar esta
situación de pandemia, tales como medidas fiscales expansivas, reforzar
sistemas sanitarios, proteger a los ciudadanos y empresas o colectivos
más vulnerables, o acometer las reformas necesarias para adaptarnos al
futuro que nos espera. Todas estas recomendaciones, todas, están
incluidas en este proyecto de Presupuestos Generales del Estado. Ya lo he
dicho al inicio de mi intervención, estamos en un momento de excepcional
incertidumbre. No hemos vivido otro como el actual, pero dentro de este
escenario y con prudencia, lo que sí que podemos ver son ciertas
certezas.


La semana pasada en el Consejo de Europa se
desbloqueó la aprobación del marco financiero plurianual, así como el
fondo de reconstrucción, dotado con 750 000 millones de euros. También la
semana pasada, el Consejo del Banco Central Europeo aprobó extender la
compra de deuda en 500 000 millones de euros hasta marzo de 2022. También
conocemos que Reino Unido ha iniciado su proceso de vacunación y que,
previsiblemente, en los próximos días Europa y Estados Unidos van a
empezar sus procesos de vacunación, y en nuestro país, con toda la
prudencia, estamos consiguiendo aplanar la curva de la segunda ola.






Esto
va unido a que hay un aprendizaje evidente en convivir con la pandemia.
Al final, vamos acertando con las medidas, se van cuadrando las medidas,
tanto a nivel económico como a nivel social, y ese aprendizaje hace que
seamos más efectivos a la hora de controlarla.


Y, señorías del Partido Popular, ustedes, a
quienes tanto les preocupa la incertidumbre, tanto como a nosotros,
¿saben lo que también ayudaría a reducir la incertidumbre en estos
momentos? Que votaran a favor de los Presupuestos Generales del Estado.
(Aplausos). No lo decimos nosotros, lo dicen también otras instituciones
internacionales. Lo que quiere la mayoría parlamentaria y, sobre todo, la
mayoría social de nuestro país y también el sector económico es que
contemos con unos presupuestos que dejen atrás los de 2018 y que estén
preparados para afrontar los retos que tenemos por delante.


Voy a centrarme ahora en el veto del Partido
Popular. Señor Maroto, después de escucharle, todavía tengo más claro que
estos presupuestos son unos buenos presupuestos, porque les ha dedicado
gran parte de sus treinta minutos y no ha habido ninguna crítica
concreta, nada más que los típicos chascarrillos. Yo creo que si en
treinta minutos no ha podido decir nada en contra de los Presupuestos
Generales ni de ninguna medida concreta, tampoco tienen que estar tan mal
(Aplausos).


La propuesta que ha hecho de ampliar la
carencia de los préstamos ICO nos parece buena. Nos parece tan buena que
el Gobierno ya lo aprobó hace tres semanas. En los préstamos ICO se están
ampliando las carencias doce meses (Aplausos) y también los vencimientos,
que no lo ha comentado y también nos parecen bien.


Ustedes en el veto y también en la exposición
han calificado los presupuestos como ideológicos, confusos,
irresponsables, dogmáticos depresivos, desmoralizadores, confiscatorios,
ruinosos y, uno nuevo, que generarían un cráter fiscal. Viven en una
hipérbole constante y creo que lo utilizan para tapar su falta de
responsabilidad en este momento. Desde nuestro punto de vista, los
presupuestos podrían ser necesarios, progresistas, urgentes, pero también
entendemos que son cuestiones subjetivas. Objetivamente estos
presupuestos, contra los de 2018, sección a sección, partida a partida,
programa a programa o territorio a territorio mejoran a los del año 2018,
y con su veto lo que quieren hacer es volver a esas cuentas renunciando a
todo lo que se presenta en estos presupuestos generales. (Aplausos).


También mencionan el descrédito de nuestro país
y cómo este puede afectar a la confianza internacional que tienen sobre
todo los inversores en nuestro país, y lo hacen cuando España, gracias al
trabajo del Gobierno y del presidente Sánchez, se ha convertido en un
actor político de primer orden en la esfera internacional. (Risas). Yo
les preguntaría: si tan denostada está la confianza en nuestro país, ¿de
verdad piensan que los inversores internacionales estarían comprando
deuda a tipos negativos? ¿De verdad lo piensan? (Aplausos). Les voy a dar
un dato, solo un dato: emisión de bonos del Tesoro a diez años la semana
pasada. Es la primera vez en la historia que en una subasta el resultado
es negativo. (Rumores). Hay inversores que están pagando por comprar
deuda en nuestro país (Aplausos) y eso es por la confianza en nuestro
país y por la confianza en nuestro Gobierno.


Asimismo en su documento hablan de un plan de
reequilibrio fiscal o de avanzar en la consolidación fiscal. Estamos de
acuerdo en que se debe avanzar en la consolidación fiscal, de hecho, en
estos Presupuestos Generales del Estado se avanza en la consolidación
fiscal, 3,6 puntos, que es el máximo avance en la serie histórica. Y
tiempo tendremos de hablar de la reforma del sistema fiscal. Ustedes se
acuerdan mucho Europa, pero hay que recordar que en Europa nosotros
estamos 6 puntos por debajo de la media de recaudación o de presión
fiscal con el resto de países europeos. Tiempo tendremos de hablar de un
sistema más progresivo, más justo y acorde al siglo XXI. Ya les he dicho
que estamos de acuerdo con la consolidación fiscal, pero no tiene que ser
un hándicap que retrase la recuperación económica.


Lo que no entiendo —y esto es un mantra
que repiten ustedes siempre— es que en la misma frase hablen de
consolidación fiscal, de reducción de deuda y también de bajadas masivas
de impuestos. Parece que sea su única receta fiscal: que la economía va
bien, bajadas masivas de impuestos; que la economía va mal, bajadas
masivas impuestos. Más que un planteamiento de política fiscal, parece
una religión. (Risas). Eso sí, la fe les dura poco, porque sabemos que
esto lo dicen estando en la oposición. Cuando llegan ustedes al Gobierno,
lo de las bajadas masivas de impuestos se convierten en subidas
(Aplausos), y no hace tantos años. Seamos serios. En una situación como
la actual, si aplicamos una bajada masiva de impuesto, ¿qué sucedería con
el déficit y la deuda? Esta es una pata que siempre se les olvida en esta
geometría.


Gran parte de la justificación de su veto recae
en la interpretación que hacen de las previsiones macroeconómicas
para 2021. Nombran unas previsiones del Banco de España que ya están
obsoletas, de hecho la semana pasada las previsiones del Banco de España,
tanto para el cierre de 2020 como para el ejercicio 2021, mejoraron.


La semana pasada celebramos las comparecencias
en la Comisión de Presupuestos, como es habitual, y podemos extraer
varias conclusiones, sobre todo después de haber escuchado a la
presidenta de la Airef y al gobernador del Banco de España. La primera
conclusión es que estas cuentas y esta situación que estamos viviendo son
de una enorme complejidad por la elevada incertidumbre de este momento,
una incertidumbre que puede afectar también a las previsiones —de
hecho, lo vimos con las previsiones del tercer trimestre—. Las
previsiones del tercer trimestre no estipulaban que la economía creciera
un 16,7 %, por encima de las previsiones del propio Gobierno pero también
de la proyección más optimista del Banco de España. La segunda conclusión
es que la principal cuestión que marcará el devenir económico de la
economía española y de la economía de la zona euro es la gestión que
hagamos de la pandemia, de la crisis sanitaria. Eso ya lo venía
predicando el Gobierno desde el primer día —sin salud no hay
economía— y eso, ustedes, al principio, también lo cuestionaron. Y
la tercera conclusión que pudimos sacar de aquellas comparecencias,
aparte de que la Airef avaló el cuadro macroeconómico, así como el Plan
presupuestario enviado a Bruselas, es que también recomendó la presidenta
de la Airef que no entráramos en guerra de decimales, porque, al final,
en una situación de tanta incertidumbre, un 0,1 o un 0,2, arriba o abajo,
tiene poca, poca importancia. Tanto las previsiones del Banco de España
como de la Airef son compatibles con el escenario que marca el Gobierno
en el cuadro macroeconómico. (Aplausos).


Quería comentarles, en cuanto a la crítica que
hacen sobre la ejecución de fondos europeos, que el Gobierno ya está
trabajando: se está aprobando un real decreto para reducir trámites, está
en constante contacto con comunidades autónomas y sector económico, y
seguro que, en las comunidades que ustedes gobiernan, también ayudarán a
que esos fondos se ejecuten en tiempo y forma, porque supongo que en esas
comunidades que gobiernan también querrán hacer buen uso de ellos.


En los últimos días hemos conocido también la
evolución prevista para el cuarto trimestre. No es tan negativa como
podía ser hace unas semanas, de hecho mejoraron las previsiones del Banco
de España la semana pasada; la Airef, con su modelo MIpred, estima un
crecimiento del 1,1 % para el cuarto trimestre, y el Ministerio de
Inclusión eleva esa cifra al 2,4 %, según los datos de empleo. La
elasticidad de la economía española respecto a las medidas o las
restricciones sanitarias es muy elevada. Lo vimos en el segundo
trimestre, con una caída enorme del producto interior bruto, pero también
lo hemos visto en el tercer trimestre. Por lo tanto, es de esperar que,
con la reducción de la incidencia acumulada, también las restricciones de
las distintas comunidades autónomas se relajen y desde la prudencia, y
apelando a la responsabilidad de todos, si la evolución de la pandemia
sigue esta línea, estoy seguro de que las previsiones que ha hecho el
Gobierno para 2021 serán fácilmente cumplibles.


Y leyendo su veto, señor Maroto —es algo
que también sucede con el veto presentado por Ciudadanos—, muchas
veces, no solo en el veto sino en su discurso, critican el incremento del
gasto corriente, sobre todo de aquel que se devenga en estructural. ¿Y
qué es el gasto corriente que ustedes critican? El incremento del gasto
sanitario, la indexación de las pensiones para que no pierdan poder
adquisitivo o la creación del ingreso mínimo vital. Y aquí está la
principal diferencia entre ustedes y nosotros. El actual Gobierno ha
entendido que en un momento de especial incertidumbre, de tanta
complejidad, de tanta vulnerabilidad, las administraciones tienen que
apoyar a los ciudadanos de este país. Y, con estos Presupuestos Generales
del Estado, se fortalece el Estado de bienestar —ya lo ha
desgranado la ministra—: se presupuestan 3000 millones de euros
para el ingreso mínimo vital; se fortalece el sistema sanitario y hay más
partidas para educación y dependencia; también se sigue apoyando a los
sectores más vulnerables, extendiendo ERTE, prestación por cese o apoyo
financiero a las empresas.


Nosotros tenemos diferentes visiones de cómo
salir de una crisis respecto a la que ustedes tienen. Y yo entiendo que
no les gusten estos presupuestos, porque a quien aplaudió los recortes y
defendió la austeridad hasta la última consecuencia le debe costar asumir
que aquello fue un error, un error mayúsculo, cuando ya lo han reconocido
a nivel internacional. Nosotros les decimos que no vuelvan a tropezar con
la misma piedra, que miren al futuro, que reconozcan que aquello fue un
error y que piensen en el futuro de todos los españoles. Se lo pedimos de
verdad. (Aplausos).


En relación con el veto que presenta
Ciudadanos, yo creo sinceramente que les ha faltado valentía, les ha
faltado valentía. Su principal excusa sigue siendo el quién en lugar del
qué y el cómo. De hecho, estos presupuestos incorporan algunas de las
medidas propuestas por Ciudadanos en el Congreso, pero yo creo que les ha
dado miedo saber que pueden dialogar, que pueden llegar a acuerdos con
gente que piensa diferente a ustedes y diferente a nosotros. Pero,
lamentablemente, eso es la política, de eso va la política, señora Goñi.
Les dio miedo salir en la foto del acuerdo, en la foto del progreso, en
la foto de la responsabilidad, porque, lamentablemente, todavía están
anclados en la foto de Colón, y eso les va a perseguir durante mucho
tiempo. (Aplausos). Y aquí un dato: de las 1134 enmiendas presentadas por
los grupos independentistas catalanes en el Congreso, Ciudadanos votó a
favor 623, el Partido Popular, 593. ¿Saben cuántas votó a favor el Grupo
Socialista en el Congreso? 2. (Aplausos). Hay más: de las 30 enmiendas
presentadas por Bildu en el Congreso, Ciudadanos votó a favor 11. ¿Saben
cuántas el Grupo Socialista? 6. Y eso no nos hace ni mejores ni peores
que ustedes, nos puede hacer más o menos congruentes con lo que
decimos.


En cuanto a lo que apelan en su veto
—protección a las familias vulnerables, apoyo a autónomos y
empresas, que haya un punto de inflexión en innovación, investigación y
desarrollo, o el impulso de las reformas estructurales—, yo creo
que todo esto está recogido en el texto que hoy debatimos. Y compartimos
la reflexión que ha hecho, señora Goñi, respecto al mercado laboral, pero
también querría mencionar que esta es la primera situación de crisis en
nuestro país en la que el empleo ha caído considerablemente menos que el
producto interior bruto, y eso ha sido fruto de las medidas que ha
impulsado este Gobierno y que, en muchas ocasiones, también han apoyado
el resto de grupos de esta Cámara.


Asimismo es cierto que debemos avanzar en una
reforma que ataje los problemas crónicos que tiene nuestro sistema
laboral: la precariedad, la alta temporalidad, el elevado paro juvenil.
Eso lo tendremos que debatir en un futuro no muy lejano y espero que, en
ese momento, no se excusen en vetos que no llevan a ninguna parte salvo
al bloqueo y a la insignificancia política.


El veto de Junts per Catalunya. Señor Cleries,
yo creo que los actuales presupuestos son unos buenos presupuestos para
Cataluña, ¿pero sabe para quiénes son buenos de verdad? Pues para los
catalanes y para las catalanas. (Aplausos). Miren, en el presupuesto
aprobado de 2018 se destinaron a Cataluña 1351 millones de euros, el 13 %
de participación, y en este se destinan 2239 millones. Ustedes, con su
veto, están renunciando a 870 millones de euros de inversión en Cataluña
y para los catalanes. También se ha consignado, en el capítulo 7, a
petición de la Generalitat, una transferencia de 200 millones de euros
para dar cumplimiento a la sentencia del Tribunal Supremo. Si sumamos
todas las transferencias de capital, las inversiones presupuestadas en
Cataluña llegan al 18,1 %, por encima del 16,3 % de la participación de
la población de Cataluña y cerca de la contribución al producto interior
bruto.


Como le he dicho antes, estos son unos buenos
presupuestos para los catalanes y para las catalanas, ya verá: 1 790 000
catalanes se beneficiarán de la subida de las pensiones; 58 000 catalanes
se beneficiarán de la subida de las pensiones no contributivas, el 1,8 %.
Usted decía que no se hacía un esfuerzo en dependencia: 600 millones de
euros más que también irán en parte destinados a su comunidad. El permiso
de paternidad se incrementa de 12 a 16 semanas; 44 000 catalanes se
podrán beneficiar de este permiso. El incremento de la partida destinada
a becas beneficiará a 119 000 catalanes y catalanas. Hay 109 millones de
euros para la Autoridad del Transporte Metropolitano del área de
Barcelona, y una reivindicación histórica: 337 millones de euros para las
cercanías de Cataluña; 156 millones de euros para cercanía y movilidad
urbana; 100 millones de euros para el corredor mediterráneo, o 142
millones de euros para la línea Vandellós-Valencia. Ustedes, con su veto,
están diciendo que no a esto y a mucho más, y no entendemos que en un
momento tan complicado como el actual puedan llevar su posición hasta ese
extremo, renunciando a todas estas medidas que beneficiarían a tantos
millones de catalanes.


Entro en el veto de Vox. Señor
González-Robatto, su partido votó lo mismo que Junts per Catalunya, la
CUP y el BNG hace una semana en el Congreso. ¿Se ha vuelto
independentista? (Aplausos). En su texto hace una descripción poco más
que apocalíptica de la situación actual, olvidándose, como también le
pasa al veto del Partido Popular, de que estamos en medio de una pandemia
mundial, la mayor pandemia en cien años, que ha asolado a todo el mundo,
no solo a nuestro país, también a la Unión Europea y a otros países
desarrollados. Hacen una descripción gris, en blanco y negro, por lo que
ustedes añoran, por los tiempos pasados, (Aplausos), y, además no aportan
solución alguna. Miren, después de la lección de economía que nos ha
dado, cojo un párrafo de los que ustedes tienen en el veto: cuestionan el
incremento del gasto y cuestionan el incremento de la cifra de déficit,
para después solicitar un mayor gasto público y reducir los impuestos. Yo
sé que a veces es difícil de entender, pero estar en dos sitios al mismo
tiempo es imposible, es imposible. (Aplausos). Creen que las
instituciones y nuestro ordenamiento jurídico deben servir para
homogeneizar a todos los ciudadanos de este país, y eso es un error de
pleno. Nosotros pensamos que, precisamente, la riqueza de nuestro país
reside en su diversidad, en su convivencia y en su multiculturalidad, y
escuchando la colección de insultos y falsedades vertidos hoy, seguimos
viendo que ustedes no han venido a los parlamentos a hacer política, sino
a sembrar odio y discordia, y en eso no va a contar con nosotros ni va a
hacer que perdamos ni un momento más. (Aplausos).


Señor Clavijo, he de decir que su veto es el
más argumentado, pero también he de decir que tanta argumentación quizás
suena un poco a excusa. Pareciera que intentara justificar lo
injustificable, que se levantara de la Mesa de negociación antes de
tiempo. Y, señor Clavijo, el proyecto de Presupuestos Generales del
Estado es bueno para Canarias. Yo entiendo que es difícil vetar unos
buenos presupuestos para las islas, pero, si tenemos en cuenta las
inversiones, las partidas REF y los convenios, las cifras definitivas
son: proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2018, 1413 millones de
euros; proyecto de Presupuestos Generales del Estado 2021, 1495 millones
de euros. Si ustedes calificaron los presupuestos del 2018 como los
mejores de la historia y estos del 2021 son mejores que los del 2018,
¿cómo los podríamos calificar? (Aplausos). Además, señor Clavijo, hay una
serie de partidas no regionalizables a las que puede optar la comunidad
canaria y que usted sabe que incrementarán la cifra final de
inversión.


Hablaba de la dificultad de los estudiantes
para cursar estudios superiores. Por eso se han incrementado las becas
un 36 %, 500 millones de euros. La inversión real crece un 28 %. Además,
se mantiene el Plan integral de empleo en Canarias con 42 millones de
euros. Los fondos de compensación interterritorial suben 6 millones de
euros y, junto a ello, se da un impulso al REF, acompañándolo de los
compromisos recogidos. El Gobierno entiende y comparte la complejidad de
las islas, de ahí que se mejoren estas cuentas, que cuentan con el apoyo
mayoritario de los diputados canarios, previsiblemente de los senadores
de Canarias y del Gobierno autonómico.


Señorías, ya para ir concluyendo, no voy a
desgranar, como ha hecho vehementemente la ministra, todas las líneas
incorporadas en este presupuesto pero sí que voy a destacar las que, a
nuestro criterio, son las más importantes. Señorías, la economía verde y
la cohesión territorial son importantes para este Gobierno; por eso, se
van a destinar 11 900 millones de euros para ejecutar políticas verdes
que nos ayudarán a cumplir nuestros objetivos y, sobre todo, nos ayudarán
a modernizarnos y a no dejar a nadie atrás. Las partidas en investigación
y digitalización, que es la única sección que no ha tenido ningún veto,
por motivos evidentes, crecen un 75 % y ascienden a 12 000 millones de
euros. El presupuesto apuesta también por que la industria gane peso; por
eso, se invierten 5000 millones de euros más. Ayudas al comercio, al
turismo y a las pymes, a las que podrá optar también la comunidad
canaria, 1338 millones de euros más. Infraestructuras: una cifra
de 11 500 millones de euros, el doble que en el ejercicio anterior. Y
políticas de vivienda: sabemos que es un problema grave también, sobre
todo para la gente joven, y por eso se incrementan en un 25 %. También
este presupuesto recoge importantes medidas que van a contribuir a la
igualdad y a la cohesión territorial. El sistema educativo sube su
presupuesto un 70 %. Ya hemos hablado de las becas, pero hay también un
plan especial para la FP, que contará con 1500 millones de euros; y la
extensión de la educación de 0 a 3 años. El presupuesto de sanidad sube
un 75 %, más de 7000 millones de euros. Y así, como he dicho antes,
sección por sección, partida por partida, se mejoran los presupuestos del
año 2018. También se destina una partida de 13 400 millones de euros a
las comunidades autónomas para mejorar la cohesión y también la
cogobernanza, que, durante estos meses de pandemia, hemos visto que es un
buen sistema, y el Gobierno apuesta por ello ya.


Ya voy concluyendo, señorías. Hoy, con nuestro
voto, debemos decidir si protegemos a los más necesitados, si apostamos
por tener una economía moderna y si apostamos por reforzar el Estado de
bienestar. Hoy debemos decidir si miramos al futuro con garantías o si
volvemos la mirada a 2018, con unas cuentas que no estaban preparadas
para acometer los retos que tenemos por delante. Estos presupuestos serán
recordados porque son los presupuestos con mayores cifras de la historia,
los presupuestos más inversores, los presupuestos más sociales, y serán
la herramienta que ayude a canalizar los fondos que vienen de Europa y
que han de ayudar a mejorar nuestro sistema productivo. La historia nos
recordará a todos: a los que apostamos por sacar estas cuentas adelante,
negociando con quien pensaba diferente, pensando en el interés general, y
a los que se colocaron de perfil. Ya lo he dicho antes: hay que saber
dialogar y acordar pensando en los ciudadanos y más en un momento como el
actual. Pero también la historia, señores del Partido Popular, juzgará a
aquellos que han dado la espalda en un momento tan importante, a los que
priorizaron sus intereses particulares en lugar de los intereses
generales, y, de verdad, no encontrarán una bandera tan grande para
cubrir sus vergüenzas, la vergüenza de votar hoy que no a estos
presupuestos. (Aplausos).


Acabo ya, señorías, solicitando su voto en
contra de los vetos que hoy se debaten. La alternativa no puede ser
volver al ejercicio 2018, como he dicho, unas cuentas que no recogían los
retos que tenemos por delante. Debemos mirar al futuro con garantías,
debemos mirar al futuro con ilusión y estos presupuestos deben ser
nuestro punto de partida.


Muchas gracias. (Fuertes y prolongados aplausos
de los señores senadores del Grupo Parlamentario Socialista puestos en
pie).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En turno de portavoces, intervendrá, en primer
lugar, por el Grupo Parlamentario Mixto, el senador Sánchez-Garnica;
compartirán el tiempo tres senadores.


El señor SÁNCHEZ-GARNICA GÓMEZ: Señora
presidenta, señorías, señora ministra, el Partido Aragonés va a permitir
la tramitación de los Presupuestos Generales del Estado por tres razones:
la primera, porque consideramos que España necesita un presupuesto que
pueda y deba reactivar políticas e inversiones públicas que favorezcan el
crecimiento de los sectores afectados por la COVID-19, que favorezcan al
conjunto de los españoles y las españolas. No estamos en cuanto peor
mejor, sino que estamos en cuanto mejor, mejor. La segunda, porque,
además, no creemos en trincheras partidistas ni en perjuicios
ideológicos, necesitamos un instrumento que nos ayude a salir de la
excepcional situación en la que estamos, y aunque no sea suficiente ni es
el que nos gustaría para Aragón, nuestra responsabilidad y nuestro
compromiso con Aragón y con España nos lleva a su apoyo, teniendo en
cuenta que es un punto de partida suficiente. Hay que avanzar, tenemos
que avanzar y salir adelante. Votar en contra no ayuda nada, solo crea
incertidumbre y desasosiego, y lo que necesitamos es estabilidad y
certidumbre. La tercera, porque, en líneas generales, refleja las
prioridades más importantes para la cohesión territorial y social
reclamadas por el Partido Aragonés desde hace años. Gracias a las
negociaciones previas, los Presupuestos Generales del Estado para el 2021
han tenido en cuenta las prioridades de Aragón, reflejadas por el Partido
Aragonés en las enmiendas incluidas en el presupuesto de 2018, muchas de
las cuales se están ejecutando. Esto va a permitir trabajar por primera
vez en la cohesión territorial y también en la cohesión social a través
de la mejora de las infraestructuras y de la promoción de la vivienda,
tan necesarias para generar oportunidades en el medio rural.


En definitiva, el proyecto de ley contempla una
inversión real de 272 millones de euros en la provincia de Zaragoza, 142
millones de euros en la de Huesca, y 89 millones de euros en la de
Teruel, a los que se suman 30 millones de euros del Fondo de Inversiones
de Teruel, el FITE, firmado en los últimos días. Deben tenerse en cuenta
además los 138 millones de euros preasignados al mecanismo de
recuperación y resiliencia europeo para políticas de medio ambiente y
vivienda. Entre las actuaciones presupuestadas figuran algunas de las
carreteras más demandadas como la A-23, la A-24, la A-21, la A-68, la
A-15, la A-40, la N-232 y la N-260. También figura, en materia de
ferrocarril, la reapertura del túnel de Canfranc, así como la mejora y
adaptación de la línea Huesca-Canfranc; la apuesta de ADIF en la Red
Transeuropea de Transporte de Corredores (TNT-T) y de Renfe para nuevos
trenes, que no serán de cercanías, así como el impulso del desarrollo del
ferrocarril en Teruel, entre los que figura el corredor
cantábrico-mediterráneo; obras de restauración del castillo de
Montearagón a través del Ministerio de Cultura y en materia hidráulica,
el impulso al crecimiento del embalse de Santolea, en Teruel; el
abastecimiento de agua a Zaragoza; el corredor del Ebro; el embalse de
Biscarrués y de Almudévar, y el proyecto de Yesa dentro de las obras del
Pacto del Agua, entre otras muchas infraestructuras.


Esperamos, además, que se pueda llegar a
solucionar el problema de los empleados públicos temporales en abuso y
fraude de ley; estoy convencido de que el Gobierno está en eso.


Cualquier presupuesto, señora ministra, nos
parecerá insuficiente, pero dentro de la situación extraordinaria y
compleja en la que estamos se reflejan las prioridades y es de esperar la
incorporación de nuevas aportaciones a través del Plan de restitución con
fondos europeos. Por eso vamos a rechazar los vetos.


Queremos decirle, por último, señora ministra,
que, con esto, somos el duodécimo grupo político que permite la
tramitación de los presupuestos.


Gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Intervendrá a continuación, por el mismo grupo
parlamentario, el senador Catalán Higueras.


El señor CATALÁN HIGUERAS: Muchas gracias,
señora presidenta.


Señorías, yo no seré el decimotercero,
lamentablemente ese número no me aporta absolutamente nada. Y
lamentablemente también mañana, en los medios de comunicación de la
comunidad del viejo Reino de Navarra no será titular el debate de los
presupuestos de hoy aquí, en el Senado, fundamentalmente será que el
Supremo abre causa penal a un consejero del Gobierno de Chivite por
prevaricación y malversación de caudales públicos y también la repetición
del juicio a Otegi por organización terrorista. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Le llamo a la cuestión,
señoría.


El señor CATALÁN HIGUERAS: En esa línea,
señorías, nosotros hemos venido denunciando, y se ha comprobado
fehacientemente, que estos presupuestos son los presupuestos de la
insidia, los presupuestos de la vergüenza, los presupuestos en los que
lamentablemente un Gobierno ha claudicado ante el independentismo
radical. Además son unos presupuestos y una gestión presupuestaria y una
negociación en torno a los presupuestos en los que, una vez más, la
extrema izquierda del Gobierno ha impuesto sus condiciones y también a
sus socios, y para ello al Partido Socialista no le ha importado
incumplir todas sus promesas hechas a los ciudadanos españoles. Dijeron
que no iban a pactar con Bildu; el propio presidente Sánchez lo dijo por
activa y por pasiva en campaña electoral en un programa, en una
entrevista en Navarra Televisión; lo negó hasta en 20 ocasiones. La
actual vicepresidenta del Gobierno, señora ministra, manifestó que el
Partido Socialista era de fiar, que no cruzaría esa línea roja; la señora
Chivite lo dijo también en Navarra, y ahora, una vez que ustedes han
pactado con Bildu, según sus palabras, ¿quiénes no son de fiar: los
dirigentes del Partido Socialista de Madrid, los de Navarra o ambos? A
ninguno de ustedes no les ha importado nada con tal de llegar y de
mantenerse en el poder. No se conformaron única y exclusivamente con ser
socios de la extrema izquierda, con rendirse en los brazos del
independentismo catalán, que ha impuesto, y ustedes han asumido, que el
español deje de ser lengua vehicular en los centros educativos
españoles.


Para ustedes y para este Gobierno el fin
justifica los medios, y lo hemos podido comprobar en torno a la
negociación presupuestaria, pero ha habido otras muchas cosas. Así, por
ejemplo, ustedes han sido capaces de plantear la modificación del Código
Penal para cambiar el delito de sedición —en sentido contrario a lo
que ustedes habían prometido— para satisfacer al independentismo
catalán. Ustedes han llevado a cabo acercamientos de los presos
terroristas de ETA a cárceles de la Comunidad Autónoma Vasca para dar
satisfacción al nacionalismo vasco —y eso es una realidad, y eso es
una evidencia—, y ustedes, además, señorías, han pactado con los
filoetarras de Bildu, sí, aquellos que votaron a favor de los procesos de
investidura del señor Sánchez y de la señora Chivite; sí, con aquellos
que acordaron con ustedes en el Congreso la derogación de la reforma
laboral; sí, con aquellos que siguen sin condenar los atentados de ETA;
sí, con aquellos que postulan que Navarra desaparezca como comunidad y se
incorpore a esa quimera que denominan Euskal Herria; sí, con aquellos que
dicen que vienen a Madrid para tumbar el régimen constitucional; sí, con
aquellos que manifiestan que van a apoyar los presupuestos, entre otros
motivos, porque un socio del Gobierno acepta que Euskal Herria es una
nación y que tiene derecho a decidir. Sí, señora ministra, apoyan y
respaldan sus presupuestos todos aquellos que ponen en duda la soberanía
de España, que ponen en duda también Navarra, que ponen en duda la
Constitución española y que ponen en duda incluso nuestro Estado de
derecho. Y mientras tanto, el Partido Socialista blanqueando a Bildu,
señora ministra, intentando justificar lo injustificable. Para ustedes no
importa con quién se pacta sino qué se pacta. Una frase, señora ministra,
que lamentablemente va a pasar a los anales de la historia de la infamia,
no tenga ninguna duda, y no es que lo diga yo, sino que lo reconocen
hasta los propios presidentes autonómicos de su partido como Fernández
Vara, García-Page o Lambán. Pero a ustedes sinceramente les da
igual.


Nos preguntaban por qué, en estos momentos tan
complicados, tan difíciles, tan de emergencia económica y sanitaria, no
arrimábamos el hombro. Ya lo hemos intentado, señora ministra, lo hemos
intentado; tanto en Madrid como en Navarra había otras alternativas
diferentes, en el caso de Navarra, con la abstención de Navarra Suma para
apoyar los Presupuestos Generales de Navarra para el año 2021, pero
ustedes, y de manera especial el señor Sánchez y la señora Chivite, no lo
han querido, han despreciado, han rechazado esas otras alternativas que
se ponían encima de la mesa.


Por lo tanto, señorías, si aquellos que van en
contra de Navarra, si los que están en contra de España, de la soberanía
del pueblo español, están contentos y satisfechos, no solo con estos
presupuestos, que no es de lo que se tiene que hablar única y
exclusivamente, sino que están de acuerdo con toda la negociación que hay
en torno a estos presupuestos, el Gobierno, señora ministra, debería
reconocer que algo ha hecho mal, que en algo ha fallado. ¿Y por qué,
señorías? Pues fundamentalmente porque el independentismo, señora
ministra, es incompatible con España y con los españoles. Y además, estos
presupuestos son malos para Navarra y son malos para España porque están
relegando a la Comunidad Foral de Navarra, las inversiones se reducen
considerablemente. Pero es que, además, desde el punto de vista
financiero las entidades solventes, a diferencia de lo que se ha dicho
aquí por parte de algún portavoz esta mañana, no están justificando los
presupuestos, tienen serias dudas de las cifras recogidas en ellos
—la autoridad fiscal, el Banco de España,...—. Repasen la
última comparecencia de ADIF sobre el tema en el Congreso de los
Diputados y comprobarán cuál es la realidad a la que ustedes no quieren
hacer caso.


Por lo tanto, señora ministra, nosotros sí
tuvimos una mano tendida, y se la tendimos al Gobierno de Navarra de
manera muy especial. Y ante esta cruda situación por la emergencia
sanitaria y económica que estamos padeciendo, pero también insultante por
los socios que ustedes han elegido, ¿cuál ha sido la respuesta del
Gobierno ante estos ofrecimientos de algunos grupos a nivel nacional y a
nivel de Navarra? La prepotencia, la soberbia y la indiferencia hacia
quienes no piensan como ustedes.


Así no, señora ministra; así no.
(Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el mismo grupo parlamentario tiene la
palabra el senador González-Robatto Perote.


El señor GONZÁLEZ-ROBATTO PEROTE: Gracias,
presidenta.


Señora ministra, señor senador socialista, le
voy a revelar un secreto: se puede recaudar más bajando los impuestos.
Miren lo que ha hecho Madrid y miren lo que hace Cataluña; miren cómo
está Madrid y miren cómo está Cataluña.


Estos son los peores presupuestos de la
democracia, señoría, ya no solo por lo inalcanzable, lo irreal e
irresponsable de estos, sino porque, además, dejan atrás a todo el mundo,
menos a sus amiguetes, a los que se les asegura un puesto bien remunerado
que exija poco esfuerzo y poca cualificación, mientras los españoles
cualificados marchan porque el Gobierno socialcomunista tiene como última
preocupación el paro juvenil o el desempleo.


Gracias a su nefasta gestión tenemos los peores
datos de empleo de la última década, y esto no es solo culpa del
coronavirus, al que ustedes se lo achacan y que afecta a todos los
países, es cierto. Pero ustedes lo hacen peor y lo agravan muchísimo más.
Le voy a dejar unos datos por aquí a ver si se dan cuenta, cuando usan
esos eslóganes de «Salimos más fuertes» o «No dejamos a nadie atrás», que
tanto han repetido, y que me parece el peor, por cierto, que están
completamente abducidos y fuera de la realidad.


Vayamos a la comparativa. El paro en España,
con un 16,2 %, se sitúa por encima de países como Rumanía,
multiplicándolo por tres, o como Bulgaria al que le pasa lo mismo y que
también usa este coeficiente. Y lo peor y más preocupante es el paro
juvenil, nuestro futuro, y casi la mitad de la población está en el paro
muy por encima de cualquier país de nuestro entorno, incluyendo países
como Grecia, Portugal, Rumanía o Bulgaria, y eso que no se cuentan los
ERTE que se van a convertir en ERE. Pero a ustedes eso les importa y les
ha importado bastante poco, mientras se dedican a subir históricamente
los impuestos, confiando en una recuperación económica récord que ya de
por sí es difícil, mucho menos con el historial que llevan ustedes en
gestión pública. Aquí hay que matizar que es verdad que a muchos les va
mal, pero a otros les va de miedo, como a los socialistas de Andalucía,
que se podían permitir el lujo de haberse gastado 680 millones de euros
despilfarrados en lupanares y en cocaína. ¡Qué bien vendrían esos
millones ahora, señorías! Eso serían siete hospitales Isabel Zendal que
ustedes tanto critican. Se lo digo para que se hagan idea de la magnitud
de sus tropelías y a todos los que ustedes están dejando atrás. ¡Qué
desvergüenza de eslogan, la verdad; qué falta de ética y qué falta de
moral: «No vamos a dejar a nadie atrás». En fin,...


Y aquí les voy a nombrar a unos cuantos de los
que ustedes han dejado atrás: 75 000 muertos, de los cuales ustedes han
escondido a más de 32 000. Son 75 000 familias que han dejado atrás
mientras decían, sabiendo de la gravedad del problema, que en verano
habían vencido al virus. Pero lo pagarán en los tribunales el señor Illa,
el señor presidente del Gobierno, pasando también por el señor Simón.
Todos. Son también 100 000 las empresas que han dejado
atrás; 100 000 proyectos de trabajadores honrados a los que ustedes han
engañado y arruinado. Han dejado atrás también la dignidad de las
víctimas de ETA, pues han pactado ustedes con los asesinos de ETA y
encima sacan pecho.






Han dejado atrás a 867 familias que perdieron a un
miembro irreemplazable por la lucha por la libertad, que ustedes han
pisoteado con estos presupuestos de la vergüenza, y a las miles de
familias que aún sufren las consecuencias y las secuelas de ello, y que
ven cómo sus asesinos y sus cómplices todavía no se han dignado siquiera
a pedir perdón; es más, sacan pecho. Han dejado atrás también a policías,
a guardias civiles y a miembros del Ejército que lucharon contra estos
criminales, a quienes vemos cómo el Gobierno acerca y cómo cambian votos
a favor de esta ignominia por presos acercados, sin olvidar cómo durante
la cuarentena no se permitía a ningún español acercarse a despedirse de
los familiares que morían en soledad. En cambio, ustedes permitían
hasta 11 visitas de los miembros de Bildu, sus socios de Gobierno, a los
asesinos de la banda terrorista ETA, ustedes permitían a sus familiares
ir a despedir a estos. Dejan atrás a todos los que no comulgan con los
terroristas. Presupuestos manchados de sangre de inocentes y pólvora y
metralla de cobardes. Han dejado atrás la dignidad de España al plegarse
a estos asesinos. Han dejado atrás a los que se han esforzado día a día
para llevar comida su casa, cediendo al chantaje separatista de los
nefastos gestores independentistas, que, al ver cómo todo lo que tocan lo
arruinan —un don que, por cierto, comparten con ustedes—,
deciden echar la culpa a otras comunidades y exigen a los que lo han
hecho bien que paguen las tropelías y las barrabasadas del
independentismo.


El Gobierno decide premiar la mala gestión con
nada más y nada menos que 2300 millones de euros en inversiones y
transferencias de capital a Cataluña para sus planes separatistas, además
de la armonización fiscal. Han dejado atrás a todos los
castellanoparlantes de Cataluña, cediendo a la xenofobia independentista
con su pretensión de censurar y eliminar el español como lengua
vehicular. Están dejando atrás también a los jóvenes de la Comunidad
Autónoma catalana, su futuro, y condenándoles a la miseria, y a los que
no hablan catalán, a la marginalidad. Esa es la verdadera cara del
separatismo, cuya cabeza decía que el resto de los españoles teníamos una
tara en el ADN y que éramos bestias. Esta es la cruda realidad del
independentismo, que solo es complejo y odio, regado ahora con millones
del señor Sánchez.


Ha dejado atrás a los militares que, además de
su noble y centenaria labor desarrollada durante toda la historia, han
sido los primeros en ir, con la crisis del coronavirus, allá donde les ha
mandado el deber, poniendo en riesgo sus vidas como demanda su noble
labor, pero ustedes les premian apartándoles y cediendo por unos votos
los cuarteles que el Ejército de Tierra tiene en el barrio de Loyola.
¡Tremendo, señores socialistas!


En sus planes de igualdad, en los de no dejar a
nadie atrás, en esos de la armonización fiscal y demás excusas para
atracar al ciudadano, ceden las competencias fiscales al PNV. Ustedes han
dejado atrás a los ciudadanos y han salvado a los separatistas catalanes
y vascos, a los asesinos de ETA y a sus representantes en las cámaras, a
sus chiringuitos comunistas de su vicepresidente, a los bolsillos de las
élites progres y a las mafias que tratan con personas, y, en general, a
todo aquel que busca la destrucción de España.


Por último —y con esto acabo—, en
VOX lo tenemos claro y no cambiamos de criterio. No hacen falta pruebas
de algodón, señor Maroto. Lo que nosotros hacemos, lo prometemos y lo
cumplimos; no hay pie a interpretaciones. Somos claros, no hay pasillos
ni cloacas. Una vez más, solo queda Vox.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Nacionalista en el
Senado, tiene la palabra el senador Matamala Alsina.


El señor MATAMALA ALSINA: Gracias, presidenta.
Vamos a compartir el tiempo con Coalición Canaria.


Señora ministra, no voy a entrar en las
partidas económicas de estos presupuestos, sí lo haré en el aspecto
político.


Los dos partidos del Gobierno no han dado
ninguna muestra de solución política al conflicto democrático de
Cataluña: el president Puigdemont en el exilio; el president Torra
destituido; la presidenta del Parlament en prisión; seis consellers del
Govern de la Generalitat y dos líderes sociales también en prisión.


Casi 3000 ciudadanos catalanes sufren represión
por causas políticas. Dos millones de catalanes fueron a las urnas para
ejercer su derecho a decidir. La única respuesta del Gobierno español fue
represión, y con el cambio de Gobierno español, en teoría más
democrático, se mantiene esta represión. Les puedo asegurar que la imagen
internacional de la España democrática cada vez se parece más a la España
franquista, y está en sus manos cambiar esta tendencia.


Ustedes pretenden una negociación política para
tener nuestro apoyo a los presupuestos, y lo podrían tener, pero no lo
tendrán. Cada día hay más catalanes que quieren decidir su futuro con un
sí o con un no a la independencia de Cataluña, y España no tiene ningún
derecho a negarlo. Asuman que, en democracia, primero es la voluntad de
los ciudadanos que las leyes.


Gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Nacionalista,
igualmente, tendrá la palabra el senador Clavijo Batlle.


El señor CLAVIJO BATLLE: Muchas gracias, señora
presidenta. Brevemente.


En relación con el portavoz del Partido
Socialista, que es quien se ha referido a mí desde la tribuna, en primer
lugar, quiero agradecerle el tono. Creo que el tono siempre es importante
para poder mantener las líneas de diálogo. Y, en segundo lugar, quiero
lamentar que no nos entiendan. Las respuestas con las grandes cifras, las
macrocifras, evidencian que no se ha alcanzado a entender lo que tratamos
de explicar. Por supuesto que va más dinero para Canarias, no lo hemos
negado, pero porque hay más desempleo, porque hay más ERTE. Por supuesto;
solo faltaba que los canarios no tuviésemos derecho a cobrar los ERTE o
el desempleo. Por supuesto que es importante —lo he destacado desde
esta tribuna— que España cuenta con un presupuesto para dar
respuesta a los retos presentes y futuros. Pero el veto que nosotros
hemos presentado y justificado no es por eso —ni siquiera hemos
entrado en el fondo—, es porque no se está respetando el Estatuto
de Autonomía y el Régimen Económico y Fiscal, que es lo que nos pone en
un plano de igualdad con el resto de los ciudadanos, de los españoles.
Nos están aplicando la misma receta que al resto de los españoles, siendo
distintos, y esa es una discriminación, en este caso no positiva, sino
negativa. Por lo tanto, si no se contempla la media de inversión, si no
se contempla la singularidad del Régimen Económico Fiscal, si no se
contempla nuestro estatuto de autonomía, al final, aunque se avance y
haya más dinero para Canarias, vamos a estar más lejos de la media de
España, lo que nos está relegando a ser ciudadanos de segunda o tercera
categoría. No entiendo por qué, teniendo doce puntos más de desempleo que
el resto de España, se nos quitan los 42 millones del Plan de
infraestructuras educativas, porque eso es invertir en la educación y en
la necesidad para las futuras generaciones. Me parece muy bien que se
pongan las becas, pero las becas son iguales para todos los españoles.
Sin embargo, los españoles de Salamanca o de La Coruña no viven en La
Gomera, El Hierro o Lanzarote ni tienen que mudarse para estudiar. Ese es
el hecho singular canario. Por eso somos región ultraperiférica, por eso
la Unión Europea nos ha dado un estatus específico, junto con ocho
regiones más: las seis francesas y las dos portuguesas. Eso es lo que
tratamos de explicar. Nosotros, como digo, ni siquiera hemos entrado en
ese fondo. Esperábamos encontrar la comprensión de esta Cámara y la
comprensión de un Gobierno que, por un lado, se dice progresista, pero,
por otro, aquellos que firmaron el 22 de octubre proteger y defender,
aquí, en las Cortes Generales, en el Parlamento Europeo y también en el
Parlamento de Canarias esas singularidades canarias ahora esconden y
agachan la cabeza porque saben que lo que están haciendo es relegar a los
ciudadanos de Canarias a ser ciudadanos de segunda o de tercera
categoría. Por supuesto, somos un partido de Gobierno; por supuesto. No
presentamos un veto al presupuesto de la Comunidad Autónoma de Canarias.
Creemos que es necesario por el bien de todos los españoles y de los
canarios, pero no podemos mirar para otro lado y agachar la cabeza cuando
algo que es básico y principal para los canarios se está
incumpliendo.


Esta es nuestra tesis. Sostenemos que tenemos
la razón. Nuestro voto no va a impedir que estos presupuestos salgan
adelante o no. Ni siquiera vamos a decir que no vamos a colaborar con el
Gobierno de Canarias ni con el de España cuando así lo requieran y
quieran contar con nuestra colaboración; pero, por encima de todo,
tenemos que ser coherentes en política porque, si no, al final, no se
sabe. El ciudadano se harta de nosotros, porque decimos una cosa,
prometemos una cosa y luego hacemos otra porque las circunstancias
cambian. Pero para nosotros las circunstancias no cambian. El fuero
canario es intocable, por principio. Diferente a eso es este veto, que
pueden ver detallado. Luego veremos a lo largo de la tramitación las más
de 140 enmiendas que hemos presentado, que podemos valorar. Y podremos
preguntar, como he dicho, por qué se quitan a Canarias las
bonificaciones, a los residentes y a los no residentes, de las tasas
portuarias y no a Baleares. Y no decimos que se les quiten a Baleares,
todo lo contrario, son imprescindibles para la movilidad y un sector
económico. Pero ¿por qué a Canarias? ¿Solo a Canarias? ¿Expresamente la
ley? Esa enmienda va en los presupuestos. ¿La van a aceptar o van a
mantener ese agravio con Canarias?


Eso es lo que lo que queríamos transmitir: no
ser cómplices de este precedente que se sienta, que puede ser peligroso.
Porque los gobiernos cambian, y el Estatuto de Autonomía y el Régimen
Económico y Fiscal tienen una larga duración en el tiempo, se pueden dar
cambios, y nos podemos encontrar en un momento determinado con que
ustedes reivindiquen a otro Gobierno lo que hoy están haciendo aquí, que
es incumplir el Estatuto de Autonomía y el Régimen Económico y Fiscal.
Por eso, en ese ejercicio de coherencia, Coalición Canaria-Partido
Nacionalista Canario ha presentado este veto. Insisto: esperamos y
deseamos, aunque tenemos pocas esperanzas, que a lo largo de esta
tramitación se pueda corregir ese agravio con Canarias, porque las
consecuencias de lo que ocurra con este presupuesto —y no sabemos
si habrá más presupuestos o no a lo largo de la legislatura— las
van a sufrir los canarios y las canarias en el empleo, en la pobreza y en
la marginalidad, en la falta de oportunidades en los próximos años.


Muchísimas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Izquierda
Confederal, tiene la palabra el senador Fernández Rubiño. Y a
continuación intervendrá el senador Vidal Matas.


El señor FERNÁNDEZ RUBIÑO: Muchas gracias,
señora presidenta.


Señora ministra, señorías, estamos a punto de
terminar el año 2020, un año sin duda totalmente excepcional y que
debería habernos enseñado muchas cosas. Las cuentas que debatimos hoy
están lejos de ser perfectas; a pesar de ello, estamos orgullosos de las
aportaciones que Más País Equo, y ahora Más Madrid, están haciendo a
través de las enmiendas en el Congreso de los Diputados y que también
presentaremos aquí. Algunas de ellas han sido ya incorporadas, aunque,
sin duda, nos hubiera gustado llegar mucho más allá en lo que se refiere
a transición ecológica, justicia social, modernización de la economía o
en algo tan fundamental como paralizar los desahucios sin alternativa
habitacional. No obstante, aun con todo esto, era evidentemente ya antes
de la pandemia que eran necesarios unos nuevos presupuestos que pusieran
fin a la larga noche que supusieron los presupuestos de Montoro. Pero
después de la pandemia, lo que era urgente se ha convertido en
absolutamente imprescindible. Pasar página a los presupuestos de la
austeridad, de los recortes, de la injusticia y del dogmatismo ahora
mismo es una auténtica emergencia nacional. En primer lugar, porque los
presupuestos que nos legó el Partido Popular son unos presupuestos para
un país que ya no existe. Los presupuestos actualmente vigentes son
probablemente los peores presupuestos de la historia, y también,
tristemente, los más longevos que ha tenido nuestra democracia, unos
presupuestos que supusieron una salida injusta y equivocada a una crisis
que ya pasó. Hoy enfrentamos una nueva crisis, y tenemos la obligación de
responder a todas las enseñanzas que ha traído consigo la pandemia de
forma mucho más acertada y, sobre todo, de forma mucho más justa que las
recetas que se utilizaron para la crisis anterior. Por eso, hoy está más
claro que nunca que unos servicios públicos fuertes nos permitirán
atravesar situaciones como las que estamos viviendo; sin ellos, estamos
absolutamente perdidos.


Si algo nos ha enseñado la pandemia es que los
seres humanos somos frágiles. Si algo nos ha enseñado es que somos
vulnerables, que tenemos límites, que los tiene también el planeta, y que
no se puede hacer política al margen de esa realidad. La pandemia ha sido
una lección de humildad colectiva porque ha puesto negro sobre blanco que
los relatos ideológicos que nos dibujan como seres absolutamente
autónomos, independientes, que no necesitamos a los demás, han fracasado
y que, a la hora de la verdad, solo las instituciones comunes y las
respuestas colectivas nos salvan. El modelo que defienden los señores del
Partido Popular y por el que se oponen a estos presupuestos es el de la
ley de la jungla, el de sálvese quien pueda, pero cuando llega una
pandemia es más evidente que nunca que necesitamos una unidad de cuidados
intensivos, que necesitamos un centro de salud pública de atención
primaria con médicos que no estén agotados y saturados, o una red de
residencias públicas bien dotadas para cuidar de nuestros seres queridos
y de las personas mayores. También se necesitan unas instituciones que
garanticen el refuerzo del profesorado para que haga frente a la tarea
del curso escolar en condiciones dignas, justo lo contrario de lo que van
a hacer la semana que viene en Madrid, donde van a despedir a todos los
refuerzos COVID el martes, unos despidos absolutamente detestables que
acaban con los refuerzos que necesita la educación pública en un momento
clave como este. Por todo esto, por todo lo que estoy describiendo, es
totalmente imprescindible pasar página con respecto a la era del señor
Montoro, que batió todos los récords; los récords de la vergüenza, porque
durante la era de Montoro se recortó cerca del 25 % del presupuesto en
educación, pasando de 169 millones dedicados a becas socioeconómicas a
tan solo 5,2, abandonando con ello a los alumnos más vulnerables.
Hundieron el gasto educativo al 3,8 %, el mínimo histórico de gasto por
PIB que ha tenido España en educación.


Y no fue el único caso. Durante la era Montoro
se alcanzó el mínimo histórico dedicado a sanidad en el PIB: un 5,8 %,
menos del 6 %, por primera vez en nuestra historia. Recuerden esto cuando
demos aplausos y hagamos homenajes a nuestros sanitarios.


Y hay mucho más. Podríamos hablar de por qué
en 2018 se dedicaba menos dinero a la dependencia que siete años antes,
en 2011. La disminución de la financiación a las autonomías en
dependencia alcanzó más de 3000 millones de tijeretazos acumulados.
Piensen en esto cuando nos preguntemos qué ha ocurrido en este país con
las residencias en esta terrible pandemia, donde se han vivido auténticas
escenas de terror en el lugar que más protección y cuidado debía dar a
nuestros mayores.


Y es a todo esto es a lo que ustedes se niegan
a pasar página. Pretenden que nos quedemos aquí, que no avancemos, que no
sigamos adelante, y eso no solamente es una auténtica irresponsabilidad,
no solamente es un acto partidista en el momento en el que mayor altura
de Estado se requiere de todos nosotros, se trata de una auténtica
deslealtad hacia nuestro país, hacia los españoles y las españolas, que
están esperando una respuesta común a la tragedia que estamos
atravesando. En cualquier caso, tenemos que decir que no nos sorprende la
oposición a los presupuestos por parte del Partido Popular, porque basta
ver qué están haciendo allí donde gobiernan para saber que les gustaría
hacer otra clase de presupuestos, quizás unos presupuestos al dictado de
sus socios preferentes, los señores de Vox. Si por ustedes fuera, los
presupuestos llevarían la firma del señor Abascal y de la señora
Monasterio, y ya sabemos qué significaría eso. Un partido como Vox, que
hoy ha presentado un veto, pero que ha sido incapaz de hacer el ímprobo
esfuerzo de presentar una sola enmienda a los presupuestos, en lo que ha
sido sin duda el mayor ejercicio de vagancia parlamentaria que recuerdan
nuestras instituciones. (Aplausos).


Señores de Vox, sabemos que lo de cobrar por no
hacer absolutamente nada es marca de la casa. Ustedes, al fin y al cabo,
están liderados por un señor que se pasó años viviendo de un chiringuito
hecho a medida en la Comunidad de Madrid, metiéndose el dinero en el
bolsillo. Y, señor portavoz de Vox, le digo que está muy feo criticar
desde esta tribuna al líder de su propio partido, que creo que se habrá
sentido muy aludido desde su casa de un millón de euros, cuando ha
hablado usted de los políticos que no han dado un palo al agua y que han
vivido siempre saqueando las instituciones para endosarse y forrarse a
costa de los españoles y de las españolas. Que ustedes, señorías del PP,
quisieran hacer estos presupuestos de la mano de los señores de Vox tan
solo significa lo que ya conocemos: recortes en la lucha contra la
violencia machista, porque, según sus socios, no existe; recortes en la
sanidad pública universal, porque, en boca de estos señores, es una
lacra; privatización de la educación; barra libre fiscal para los ricos;
y quizás, quién sabe, un novedoso programa de terapias de conversión, de
curación de la homosexualidad pagadas con fondos públicos. No lo sabemos.
Si renuncian a ese programa de máximos que consiste en fusilar a más
de 26 millones de españoles, me habré dado por satisfecho, pero de los
señores de Vox he llegado a un punto que no espero nada.


Hoy vamos a votar en contra de este veto; vamos
a votar para que siga adelante el proyecto de presupuestos que nos trae
el Gobierno por compromiso, por responsabilidad y porque necesitamos unas
cuentas nuevas para hacer frente a esta situación. Pero, señorías del
Gobierno, señora ministra, les pedimos humildad y capacidad de acuerdo.
Más Madrid y Más País van a volver a presentar aquí 113 enmiendas a los
presupuestos, que son necesarias. Y hoy vamos a rechazar este veto, pero
no renunciamos a la capacidad que tiene esta Cámara de enmendar los
presupuestos. Creo que se equivocarían si hurtan al Senado el papel que
le debe corresponder. Nos están acostumbrando a que las leyes en esta
Cámara no sufran modificaciones porque no quieren ustedes que las leyes
vuelvan al Congreso. Esperamos que con los presupuestos y con la ley de
educación sea diferente; si no, estaremos asistiendo tristemente, señora
presidenta del Senado, señores del Gobierno, a una enmienda a la
totalidad a la función de esta Cámara, al papel que debe jugar esta
Cámara. Le estarán dando la razón a todos aquellos que se preguntan qué
sentido tiene esta institución en la que nosotros trabajamos y a la que
dedicamos nuestros esfuerzos. Si ustedes bloquean la capacidad de
legislar que tiene esta Cámara, ¿qué tienen que pensar los ciudadanos del
trabajo que hacemos aquí, del coste de todos nuestros sueldos y, en
definitiva, del servicio que presta el Senado como institución a la gente
de nuestro país?


Muchísimas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


A continuación, tiene la palabra el senador
Vidal Matas.


El señor VIDAL MATAS: Señora ministra, le tengo
que decir que soy de Més per Mallorca, que no tenemos representación en
el Congreso. Le tengo que comunicar, tristemente, que su partido no ha
hecho ni un intento de llegar a acuerdos con nosotros, ni con nosotros ni
con Geroa Bai ni con Adelante Andalucía. Es muy triste que tres grupos de
izquierdas presentes en esta Cámara no hayan sido lo suficientemente
importantes para sumar esfuerzos en estos presupuestos; unos presupuestos
que creo que son necesarios por el contexto de la COVID, por
responsabilidad, para superar el modelo de Montoro. Simplemente por eso,
vamos a permitir que se tramiten y no vamos a dar apoyo a los vetos
presentados hoy. Creemos en estos presupuestos expansivos, una manera
diferente de dar respuesta a la crisis, pero le tengo que decir que estos
presupuestos cometen el mismo error para las Illes Balears que los de
Montoro. Las maltratan igual. Da igual quién gobierne en Madrid, PP o
PSOE, y quién gobierne en las Illes Balears. Le recuerdo que yo, o mi
partido, gobierna con ustedes en las Illes Balears, y en estos
presupuestos no hay un régimen especial para las Illes Balears. Somos los
terceros en inversión por la cola, solo detrás de Canarias, que tiene un
REF específico y unos convenios específicos, y no hay unos convenios
específicos para compensarnos. Por tanto, somos los últimos de los
últimos de los últimos de la clase; y esto no cambia, gobierne quien
gobierne.


Le intenté explicar la insularidad con Coco, mi
gran maestro de cuando era chico, y hoy voy a intentar poner otro
ejemplo. Para ustedes les Illes Balears somos como la gallina de los
huevos de oro, pero se olvidaron de darle de comer. La gallina se murió,
y, no contentos con ello, dijeron: vamos a sacarle algo más a esta
gallina de los huevos de oro. Hicieron su caldo, oscuro y calentito, para
calentarse. Luego, la asaron. Luego, hicieron ropa vieja. Y luego han
hecho unas croquetas. Y ahora, ¿qué queda con las Illes Balears? Nada,
ministra, no queda nada. Queda un desierto económico, queda un momento de
transformación y de dureza social como nunca hemos vivido.


Estos presupuestos, señora ministra, tenían que
ser un revulsivo. Los fondos europeos tenían que ser nuestro gran
revulsivo. Si me lo permiten, como soy de la generació de Bola de Drac,
diré que tendrían que ser como las mongetes màgiques de Son Goku, que,
después de un gran combate, después de un gran esfuerzo, después de una
gran paliza, permitían a Son Goku recuperar las fuerzas y tirar para
adelante —para los que son más mayores, las espinacas de Popeye; lo
digo, porque a lo mejor hay un salto generacional, aquí, en el
Senado—. Pero eso no ha pasado, ha sido otro gran fracaso, otra
gran decepción. Estos presupuestos no nos sirven a las Illes Balears. Los
ERTE, una gran idea; la renta vital mínima, una gran idea, pero a la hora
de realizarse, a la hora de pasar del papel a la realidad, han fracasado.
Y esto es lo que va a pasar con estos presupuestos para las Illes Balears
otra vez. Señora ministra, me preguntaba un amigo mío: Vicenç, ¿Montero o
Montoro? Y yo decía: Montero, porque por lo menos tiene un componente
social. Algo del pasado le habrá quedado a esta señora de cuando militaba
en otros partidos políticos, esa conciencia social que permite
incrementar en dependencia, esa conciencia social que permite mirar hacia
atrás e intentar no dejar a nadie. Pero la insensibilidad hacia las Illes
Balears, no la entendemos. ¿Por qué esa fijación en dejarnos atrás? ¿Por
qué esa fijación en contra de un territorio que ustedes gobiernan? ¿Por
qué? Además, en el trámite en el Congreso vemos mejoras para Teruel
—con todo mi cariño hacia Teruel—, para Valencia, para
Cataluña, para Cantabria… Vemos mejoras para todos los territorios
y un castigo para las Illes Balears. Ninguna enmienda que hacía
referencia a las Illes Balears fue aprobada en el Congreso. Así sigue
otra vez el castigo hacia las Illes Balears. Y, claro, en esta
tramitación parece ser que vamos a repetir otra vez el mismo error: que
quieren pasar por el Senado de forma rápida, sin aprobar ninguna
enmienda. Y eso va a ser malísimo para los ciudadanos de las Illes
Balears.


Su portavoz, muy hábilmente, le ha espetado al
portavoz de Coalición Canaria, el señor Clavijo: Pero ¿cómo se queja? ¿Si
por el REF y convenios tienen 1500 millones de euros? Le reto a que me
haga ese mismo envite, que tenga el coraje de decirme: Vicenç, ¿cómo te
atreves a hacer ese discurso? Porque en tu régimen especial… ¡Ah,
no! Cero. Vicenç, el convenio de aguas que teníamos previsto… ¡Ah!
Cero. Vicenç… Sí, tenemos el de turismo. Hace diez años que
estábamos esperando el de Platja de Palma —ese, ministra, no me
importa que me lo diga, se lo controlo—. Pero díganlo. Y cumplimos
la ley. Aunque le parezca un poco raro, me gusta cumplir la ley; soy un
representante de la democracia, y a veces, me guste o no, cumplo las
leyes. ¿Por qué el Estatuto de las Illes Balears tiene que ser incumplido
repetitivamente? ¿Por qué las leyes que usted aprobó no se cumplen? ¿Por
qué hay leyes de primera que se tienen que cumplir, como las reglas
europeas de gasto, y leyes de segunda, que no se tienen que cumplir? ¿Por
qué las leyes que nos benefician a las Illes Balears no se tienen que
cumplir? La igualdad consiste en que los diferentes podamos hacer lo
mismo que el resto. Esa es nuestra igualdad. Hoy, aquí, los señores del
Partido Popular están defendiendo una enmienda a la totalidad de estos
presupuestos y después vamos a discutir secciones, y nosotros queremos
que se tramiten estos presupuestos para que se mejoren. Como decía
Baldoví, no son unos buenos presupuestos, son mejorables. Pues
mejorémoslos, y acepten enmiendas de las que les hemos presentado, más de
cuarenta.


Y, si me lo permiten, algunos han hablado hoy
de terrorismo. El terrorismo ha sido clave en estos presupuestos
—terrorismo arriba, terrorismo abajo—. Bien, Més per Mallorca
ha presentado una enmienda que habla de terrorismo, del terrorismo que
cada día está matando a mujeres, del terrorismo que cada día está
matando, sí, ahora, no del terrorismo del pasado, de hace más de diez
años; del terrorismo que hoy mata, que hoy deja a mujeres incapacitadas,
que hoy jode la vida a muchas personas. Si quieren, hay una enmienda
de 16 millones para igualar la indemnización por terrorismo a la
indemnización por terrorismo machista. Ahí les esperamos. Eso sí que
ahora es un terrorismo que está activo.


Muchas gracias, señorías. Ministra, le voy a
pedir a los Reyes Magos que traigan a Coco. No se lo regalé. Mi sobrino
me dijo: Vicenç, si has hablado de Coco a la ministra, regálaselo por
Reyes. Le voy a hacer caso. Le voy a escribir a los Reyes Magos que le
traigan a Coco, y así aprenderá la diferencia entre lejos y muy lejos. No
sé si se acuerda de esa intervención, que me molestó muchísimo, pero veo
que no sirvió de mucho, porque en los presupuestos estamos igual.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias, señoría.
(Rumores). Silencio, por favor.


Señorías, les anuncio que, por el Grupo
Parlamentario Ciudadanos, va a intervenir la senadora Goñi Sarries.


La señora GOÑI SARRIES: Gracias,
presidenta.


Voy a limitarme a contestar a aquellos grupos
que han tenido el detalle de nombrarnos en sus intervenciones previas.
Empezaré por la señoría del Grupo Nacionalista en el Senado. Me ha
sorprendido mucho que diga que Ciudadanos hace aquí cosas distintas a las
que hacemos en Europa. Sinceramente, creo que, o está mal informada, o no
sabe cómo funciona la política en Europa y ha mezclado grupos,
familias… No lo sé, pero no solo hacemos lo mismo, sino que
nuestros compañeros europarlamentarios tienen la suerte de poder hacer
bastante más de lo que podemos hacer nosotros aquí, como se acaba de
demostrar, por ejemplo, con medidas europeas que afectan directamente a
los penados por el golpe de sedición. También le diré, señoría, que no he
entendido nada de la parte de su discurso sobre los recortes. No he
entendido nada, de verdad. Ni Ciudadanos ha pedido aquí recortes ni los
ha pedido ningún grupo parlamentario. Nosotros pedimos inyecciones
directas para hostelería, turismo y ocio nocturno, entre otras, es decir,
lo contrario a los recortes. O se ha equivocado de año de presupuestos o
se amarra a una palabra maldita, como es recortes, que no ha estado nunca
en el debate de estos presupuestos generales.


Señor Palacín, me ha dicho que el PSOE no
entiende el veto de Ciudadanos. La explicación es muy sencilla: si de
verdad ustedes creen que estamos en una situación de emergencia, deberían
haber presentado unas cuentas para una situación de emergencia, y no lo
han hecho. Yo no sé por qué, pero no lo han hecho. Lo que sé es que es
que ya les vale de rebotar responsabilidades. Han presentado unas cuentas
que no responden a una situación de emergencia y que tampoco responden a
una situación de reconstrucción nacional; y, además, han podido elegir
libremente a sus socios. Los han elegido con absoluta libertad. No le
echen la culpa a nadie más, ni al Partido Popular ni a nosotros ni a
nadie. Han sido absolutamente libres, y me alegro profundamente por ello,
principalmente, porque hemos sido responsables de esa libertad. Han
tenido dos opciones para elegir. Me gustaría que argumentasen mejor,
porque, la verdad, es que no cuela.






Nosotros queríamos pactar con ustedes
y ustedes no han querido. Nada más.


También ha dicho, señor Palacín, que a
Ciudadanos le importa más el quién que el qué. Pues no se equivoque: nos
importa el quién, nos importa el qué y nos importa el cómo; precisamente
por eso hemos presentado este veto a este proyecto de presupuestos.
Además, en este proyecto de presupuestos el quién determina el qué, y eso
nos preocupa muchísimo. Y se ha olvidado usted del cómo, que a mí
personalmente me preocupa mucho. Hay una partida en los presupuestos, en
concreto, de 200 millones de euros, para el Plan de corresponsabilidad
del Ministerio de Igualdad, que nos parece un plan muy bonito, en el que
se puede trabajar mucho, pero, claro, si venimos del fiasco de la gestión
de la renta mínima vital, hablar de 200 millones en corresponsabilidad es
ciencia ficción. Como digo, nos preocupa el quién, el qué y el cómo, que
en un proyecto de presupuestos van intrínsecamente unidos.


Y ha dicho, asimismo, que a Ciudadanos le ha
faltado valentía y que nos ha dado miedo pactar con ustedes. Pues menos
mal que nos ha dado miedo, porque hemos estado hasta el último día; y le
aseguro que mucha gente no lo ha entendido. Estamos convencidos de que
hicimos lo que teníamos que hacer y lo volveríamos a hacer. Hemos tenido
toda la valentía del mundo; de hecho, llevamos cinco años pactando a
derecha y a izquierda. ¿Por qué? Porque Ciudadanos es el centro y porque
nos preocupa el interés de los españoles y no la silla. Son ustedes,
señorías del PSOE, los que no entienden lo de pactar con diferentes,
quizás porque, a día de hoy, se les ve muy similares a sus socios. Espero
que eso, con el tiempo, cambie. Nosotros queríamos pactar con ustedes,
incluso sabiendo que pactar con Sánchez es un deporte de riesgo de nivel
máximo porque miente, porque no cumple. Y si un partido sabe que Sánchez
no cumple, esos somos nosotros. Ustedes eligieron a sus socios con
libertad total, como le he dicho antes. Veremos qué hacen sus socios si
ustedes no cumplen, porque hoy aquí no acaba la legislatura.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Vasco en el Senado,
tiene la palabra la senadora Etxano Varela.


La señora ETXANO VARELA: Gracias, presidenta.
Ministra, arratsalde on. Arratsalde on guztioi.


Intervenimos aquí para fijar nuestra posición
en este debate de veto a la totalidad, y les avanzo que será contraria a
los vetos presentados para que continúe la tramitación completa de los
Presupuestos Generales del Estado en comisión y en Pleno. Es obvio que no
podemos hablar del presupuesto ni del cuadro macroeconómico en el que se
sustenta sin tener en cuenta que vivimos en una situación inédita, una
crisis sanitaria que ha derivado en una crisis económica y social de la
que desconocemos, a día de hoy, su duración, persistencia y efectos
reales; una crisis que ha alterado totalmente las agendas políticas y las
prioridades y que nos obliga a todos los poderes públicos a la toma de
decisiones en un entorno cambiante. La pandemia ha cambiado radicalmente
la mirada y las prioridades; nos obliga a actuar con responsabilidad, y
eso implica desplegar los fondos necesarios para atender en lo inmediato
las necesidades sanitarias y sociales, para atender a las personas, a los
distintos sectores, para mitigar los efectos de la pandemia. Pero también
hace falta mirar a medio y largo plazo para asentar las bases de un
crecimiento sólido y sostenible, un modelo que sea capaz de favorecer la
actividad y elevar los ingresos públicos, un modelo verde, igualitario e
inclusivo y que ponga a las personas en el centro de las políticas
públicas. Para ello se dispone de las herramientas que ha facilitado la
Unión Europea: por un lado, la suspensión temporal de las reglas de
estabilidad, decisión también adoptada por este Gobierno, en gran medida
gracias a la presión de los distintos grupos y administraciones, y, por
otro, los fondos europeos.


En realidad son estas medidas adoptadas las que
facilitan la presentación de estos Presupuestos Generales del Estado. En
el trámite que se está dando en esta Cámara hemos tenido la ocasión de
escuchar a la Airef y al Banco de España en relación con el cuadro macro
y al presupuesto. La presidenta de la Airef nos trasladaba discrepancias
con el Gobierno en cuanto a que las previsiones de ingresos se estiman en
un escenario optimista, mientras que el gasto se estima en un escenario
pesimista. Esto es algo que preocuparía en cuanto que en sí mismo
encierra una contradicción. Por su parte, el supervisor hacía un
recorrido comparativo sobre los distintos escenarios —central,
severo, suave— previstos por el Banco de España en comparación con
el escenario del Gobierno, que consideraba más optimista. Ambas
instituciones estiman que el agravamiento reciente de la pandemia reduce
la probabilidad del cumplimiento de ese escenario macro más positivo. En
todo caso, ambos organismos también entienden que, en un escenario tan
cambiante, estas comparaciones deben hacerse con mucha cautela, y no
niegan que se pueda llegar al nivel de recuperación que prevé el
Gobierno, aunque consideran que ese escenario es difícil o menos
plausible.


Nuestro grupo comprende la dificultad de hacer
previsiones en este contexto imprevisible, en un escenario cambiante y
con un abanico de posibilidades demasiado amplias, y plasmarlas en un
presupuesto. Y aunque, a nuestro juicio, los presupuestos parten de un
cuadro macro endeble, nos parecería más endeble continuar con un
presupuesto del 2018, prorrogado dos veces, realizado en otro entorno
macro, para otra situación, y que hace tiempo que no da más de sí ni es
adecuado para afrontar la nueva e incierta realidad. Por tanto, tener un
cuadro macro más realista es lo más adecuado. Y estoy segura de que el
Gobierno ha manejado distintos escenarios, seguro que los mismos que el
supervisor y la Airef, pero creo —permítanme la ironía— que
el Gobierno todavía no puede presentar tres proyectos de presupuestos,
uno para cada escenario, y activar uno u otro según se tengan las
certezas del escenario que se esté dando. Esto todavía es ciencia ficción
presupuestaria. En todo caso, le debemos pedir al Gobierno que el
presupuesto que se apruebe sea flexible y dinámico, ya que lo más
probable es que, en función de la evolución de la pandemia, haya que
revisarlo y quizá establecer nuevas medidas en 2021, porque todo apunta a
que 2021 será inicialmente igual de incierto que 2020.


En cuanto a la previsión de ingresos, es
evidente que supone hoy en día un verdadero reto para todas las
haciendas. Compartimos que la previsión de ingresos pueda estar
sobreestimada por varios motivos: porque el método tradicional para
elaborar las estimaciones no tiene en cuenta un shock como ha sido la
pandemia; porque la capacidad recaudatoria de las nuevas figuras: la tasa
Google, la de transacciones financieras, tiene todavía una recaudación
incierta y no se han puesto en marcha —unos impuestos, ministra,
que deben ser concertados con las instituciones vascas—; porque la
propia evolución de la economía, sujeta a incertidumbres y riesgo a la
baja, puede afectar también a los tributos; y, finalmente, porque algunos
de los reajustes en distintos impuestos obedecen más a un diseño político
que a su verdadero impacto real en la recaudación. En todo caso, las
medidas de reajuste están en línea con lo que existe en Euskadi, e
incluso Euskadi ha sido más ambiciosa en cuanto a las rentas altas y las
sicavs y las socimis, que están gravadas al tipo general del impuesto
sobre sociedades, algo que ustedes están abordando en el proyecto de
prevención y lucha contra el fraude que se está tramitando en el
Congreso. Resulta bastante incoherente, por cierto —lo miro desde
el punto de vista de Euskadi y de su capacidad normativa fiscal—,
que, por una parte, la oposición califique estas medidas como un hachazo
fiscal, y, por otra, tache de paraísos fiscales a los territorios
forales. Y sorprende también que estas medidas se tilden de progresistas
por parte de los grupos que forman el Gobierno, y, sin embargo, una parte
de ese Gobierno de coalición —me refiero a Elkarrekin
Podemos— califique el sistema fiscal vasco de poco progresista
cuando estas medidas las tenemos implantadas desde hace años en Euskadi.
Por lo tanto, está claro que varían según el color de las gafas que se
pongan: si son desde Madrid o si son desde Euskadi. En todo caso, nuestro
grupo entiende que tarde o temprano se debe abordar el debate del binomio
ingresos —fiscalidad con los objetivos claros de lo que se pretende
conseguir y encontrar el momento económico adecuado. Difícilmente se
podrá mantener un Estado de bienestar reduciendo los impuestos. Resulta
también contradictorio —no se entiende— que partidos que han
tenido y tienen responsabilidades de gobierno pidan una reducción del
gasto, que llaman superfluo, y también reducciones de impuestos cuando,
por otro lado, son los mismos que durante los últimos plenos han
solicitado extender los ERTE, aumentar las ayudas a las pymes y
autónomos, al turismo o el aumento de pensiones. Eso, ¿cómo se haría?
¿Con qué ingresos se propondría hacerlo? ¿A qué se llama gasto
superfluo?


Señorías, estamos claramente ante unos
presupuestos expansivos, y en eso hay un consenso generalizado. La
mayoría de los organismos oficiales —Banco de España, Airef,
incluido el Fondo Monetario Internacional— dice que es el momento
de gastar para paliar las consecuencias de la COVID, pero nos gustaría
hacer algunas matizaciones. Primera: se necesita gastar más para paliar
las consecuencias negativas de la COVID, pero se debería diferenciar
entre aquellos gastos que son coyunturales, de escudo social para atender
las necesidades derivadas de la pandemia, y aquellos gastos públicos
estructurales que deben estar bien diseñados y bien financiados, y que
nuestro grupo no cuestiona, sino que apoya, además. Algunos corresponden
al ámbito del Estado: el ingreso mínimo vital —por cierto, se sigue
sin traspasar a la CAV—, las pensiones, los ERTE, las prestaciones
por desempleo, los del Pacto de Estado contra la violencia machista o el
nivel convenido de la dependencia. Segunda: también se necesita gastar
más en inversiones productivas. Si algo nos ha enseñado la pandemia es la
necesidad de contar con una industria fuerte, no solo para salir de esta
situación, sino porque es un buen amortiguador de futuras crisis. Y
tercera: se necesita una gestión de los fondos europeos transparente y en
colaboración y cooperación con las comunidades autónomas y entidades
locales.


En el presupuesto, el grueso del crecimiento
presupuestario se encuentra en el Mecanismo de recuperación y
resiliencia, del que todavía no conocemos el reglamento que lo regulará,
qué proyectos concretos tractores serán aprobados y el efecto que tendrán
para cambiar el rumbo del modelo económico. La mayor parte del incremento
presupuestario de las políticas estratégicas está bajo el epígrafe del
Mecanismo de recuperación y resiliencia, y, por tanto, relegan esas
políticas a la incertidumbre de los proyectos tractores ligados a este
fondo. Nuestro grupo entiende que los fondos europeos, siendo
estratégicos, deberían ser una adición financiera para el Estado,
comunidades autónomas y entidades locales, y que deberían ser los
presupuestos ordinarios los que permitieran articular políticas públicas
sostenibles, y luego incorporar los fondos de resiliencia. Además, el
Gobierno se reserva, a nuestro entender, demasiado protagonismo, algo que
contradice el objetivo de Europa, que quiere que los fondos lleguen a
todas las regiones y ciudades. Permítanme decirles que por ahora estos
fondos están generando más expectativas que certezas.


En cuanto a Euskadi, usted sabe, ministra,
porque así se lo hicimos saber, que la preocupación de este grupo es
Euskadi y la agenda vasca y que, a nuestro entender, el presupuesto
inicial no atendía adecuadamente la agenda vasca en aquellos aspectos que
corresponden al Estado. Y, en segundo lugar, que las cifras de los
acuerdos que existían con el Gobierno no se estaban cumpliendo. Porque,
ministra, usted sabe que no se han cumplido acuerdos que teníamos
anteriormente y que la pandemia no puede seguir utilizándose como excusa
o justificación. Nos referimos al tren de alta velocidad, pero también
hay otros acuerdos, quizá proyectos de menor envergadura económica, cuyo
cumplimiento afecta a la mejora de la vida y seguridad de las personas.
Me refiero a la supresión de pasos a nivel y a la mejora de la
accesibilidad en estaciones y líneas de cercanías a lo largo de toda la
comunidad autónoma, que ya están incorporados al presupuesto. Y seremos
exigentes para que se lleve a cabo su cumplimiento.


Voy a ir cerrando. Señora ministra, estamos
ante una crisis económica y social profunda —lo sabe
perfectamente—, en plena segunda ola de la pandemia, y conocemos
que, a pesar de los esfuerzos, están aumentando las desigualdades.
Sabemos que la crisis está afectando con distinta intensidad por
sectores, y sabemos también que la recuperación será frágil, desigual.
Por eso es importante disponer de las herramientas, y a nuestro entender
el presupuesto es una de ellas. Hoy al menos lo hacemos fuera del marco
de las políticas de austeridad, aunque sabemos —usted, ministra, lo
sabe— que en algún momento, a medio o largo plazo, se debe volver,
no a las políticas de austeridad, que no defendemos ni vamos a defender
nunca y que fueron un error y un fracaso, pero sí a las políticas de
rigor presupuestario, a las políticas de consolidación fiscal, cuando se
supere la pandemia. Porque no es lo mismo rigor fiscal que
austeridad.


Y en este contexto, la aprobación de estas
cuentas en su primer debate en Cortes Generales ha recibido un gran
consenso entre distintos grupos, en un Congreso y un Senado diverso y
plural en el que hay que lamentar que el partidismo y los falsos
patrioterismos enturbien y dificulten el debate. Pero no es menos cierto
que, para salir de esta situación excepcional, contar con un nuevo
presupuesto es, desde luego, en nuestra opinión, un buen punto de
partida. Lo que es evidente es que no es un buen punto de partida
continuar con unas cuentas del 2018. Con este objetivo: el del diálogo,
el entendimiento y el acuerdo, este grupo votó a favor del presupuesto.
Entendemos lo que supone tener responsabilidades de gobierno —somos
un partido de gobierno— y que es importante que, en esta situación
de crisis global, no solo el Estado, sino todas las administraciones,
tengan sus propios presupuestos, adecuados a la nueva situación que ha
generado la pandemia. En esto consiste la política: en hablar,
contrastar, negociar nuestras diferencias y acordar, porque, si no es en
esta situación de shock sanitario, social y económico mundial, no sé cuál
podría ser mejor momento. Con una actitud proactiva y propositiva,
siempre en la defensa de los intereses de la ciudadanía y la agenda
vasca, en el ejercicio de nuestra política, con voluntad firme de
dialogar y acordar, no apoyaremos los vetos presentados.


Eskerrik asko.


El señor PRESIDENTE: Gracias señoría.


Por el Grupo Parlamentario Esquerra
Republicana-Euskal Herria Bildu, intervendrán dos senadores.


En primer lugar, tiene la palabra el senador
Picornell Grenzner.


El señor PICORNELL GRENZNER: Gracias, señora
presidenta. (La señora vicepresidenta, Narbona Ruiz, ocupa la
Presidencia).


Señora ministra, senadores, senadoras, Esquerra
Republicana, como su nombre indica, es un partido de izquierdas y
republicano, de hecho, con fuertes raíces republicanas más allá del año
de nuestra fundación, en 1931. Somos un partido independentista que lucha
por la creación de la república catalana, una república que entendemos y
queremos federal con nuestros vecinos del País Valencià y de las Illes
Balears. Esquerra Republicana es un partido feminista. Somos un partido
ecologista, somos un partido que anhela, que busca, que trabaja para la
justicia social. Esquerra Republicana también es un partido antifascista,
un partido perseguido largamente a lo largo de la historia y al que
fusilaron a centenares de miles de militantes, empezando por el president
Lluís Companys, único presidente de una democracia europea fusilado.
Esquerra Republicana sufre hoy todavía la represión de tribunales y
jueces y de la Guardia Civil. Lo hicieron el 20 de septiembre, el 1 de
octubre, el 3 de octubre, y un largo etcétera, todas las veces
inventando, planeando y concibiendo una gran causa general para derrotar
el movimiento independentista. De hecho, continúan en esta línea día sí y
día también, inventándose nuevos casos que no existen para generar el
caos y para intimidar al movimiento independentista. Tenemos a decenas de
militantes hoy encausados en distintas causas en distintos juzgados,
siendo perseguidos justamente por eso. De hecho, hoy sigue encarcelado
nuestro presidente, Oriol Junqueras, y también tenemos a nuestra
secretaria general en el exilio, Marta Rovira, ellos dos por organizar un
referéndum. Por cierto, señor Maroto, nuestro partido no es un partido
golpista, no lo es. Y deje que le diga dos cosas en este sentido. Los
únicos golpes de Estado que se han producido en los últimos cien años
fueron los perpetrados por Francisco Franco, en julio del 36, y por el
general Tejero, en febrero del 81. (Aplausos.— Rumores). Quizás,
señorías del Partido Popular, cuando ustedes nos llaman golpistas,
deberíamos acordarnos del origen fascista de su partido político. Por lo
tanto, señor Maroto, basta ya de decirnos lo que somos o lo que no somos.
(Aplausos.— Rumores).


Dicho esto, era nuestro deber, señora ministra,
empezar nuestra intervención recordando quiénes somos para poder explicar
exactamente dónde llegamos, a qué tipo de acuerdo llegamos en estos
Presupuestos Generales del Estado. Nosotros teníamos y seguimos teniendo
pocos incentivos para votar estos presupuestos. Si analizamos el momento
represivo por el que pasa Esquerra Republicana, evidentemente habríamos
votado que no a estos presupuestos, pero, aun así, somos absolutamente
conscientes de la gravedad económica y social que sufrimos, fruto del
momento de esta pandemia de la COVID-19. Fruto de esta pandemia estamos
ante una crisis gravísima, de distintas índoles, como decía, a la que
debemos hacer frente y dar una respuesta urgente a nuestra ciudadanía.
Además, lo debemos hacer con responsabilidad política, y creo, señora
ministra, que es justamente lo que estamos haciendo en Esquerra
Republicana: ejercer esa responsabilidad política. Hoy, centenares de
miles de personas de nuestro país lo están pasando muy mal, francamente
mal, y eso, senadores y senadoras, es imposible de ignorar. A Esquerra
Republicana le es imposible ignorar cómo lo están pasando esos centenares
de miles de personas a día de hoy.


Esquerra Republicana gestiona —usted lo
sabe, señora ministra— los principales departaments de la
Generalitat, que luchan, día sí y día también, contra la COVID-19; por lo
tanto, conocemos de sobra la magnitud de la tragedia a la que nos
enfrentamos. Por todo el marco ideológico que antes he explicado, hoy
tenemos claro que necesitamos dar una respuesta a la sociedad, que debe
ser una de nuestras principales prioridades. Cuando dentro de unos años
nos pregunten ¿qué hizo Esquerra Republicana para ayudar a la gente
necesitada en tiempos de la pandemia, de la crisis de la COVID-19?,
nosotros podremos explicar que estuvimos al pie del cañón en todo
momento.


Nuestro pacto ha priorizado la inversión
social. Estos presupuestos contemplan la partida más elevada de los
últimos años en dependencia. Conllevan también una moratoria para las
cuotas de los autónomos. Y un incremento de recursos para las becas
universitarias. Se habilita un corredor mediterráneo para dar respuesta a
la dramática situación de los refugiados y refugiadas que intentan llegar
a nuestro país. También se ha levantado, hace pocos días, el control
financiero del Ministerio de Hacienda hacia la Generalitat, y se ha
conseguido que las inversiones y transferencias suban por encima
del 19 %, llegando más allá de los 2000 millones de euros. Hemos
conseguido un compromiso de cogobernanza de los fondos europeos de
reconstrucción. Y la gestión por parte de la Generalitat del ingreso
mínimo vital, etcétera. Alguien podría preguntarse: ¿valía la pena votar
que sí a estos presupuestos? ¿Valía la pena? Pues si decenas de miles de
personas van a ver incrementados sus recursos para la dependencia,
bienvenido sea este pacto, este acuerdo de los presupuestos. Si
conseguimos que las matrículas universitarias no sean una barrera para
acceder a estudios secundarios, bienvenido sea este acuerdo. Si
conseguimos convertir Cataluña en un territorio de acogida de refugiados,
bienvenido sea este acuerdo.


Es evidente que estos no son los números, que
estas no son las cuentas de Esquerra Republicana. Si nosotros pudiéramos
escoger, evidentemente, seguramente no hubiéramos dado ni un solo euro a
las secciones de la Casa Real ni del Tribunal Constitucional ni de
Defensa ni un largo etcétera de cosas que no nos gustan para nada. Pero
aquí estamos, intentando frenar la crisis brutal, no que esperamos, sino
que ya tenemos encima de la mesa a día de hoy.


Señorías del Partido Socialista —y ya
termino—, Esquerra Republicana, como he dicho antes, tenía pocos
incentivos para votar estos presupuestos, pero aquí estamos de nuevo:
sentados de nuevo en la mesa del diálogo, en la mesa política, haciendo
política día sí y día también, y no renunciando para nada a nuestros
principios, que ya he explicado antes. Y tampoco a nuestros objetivos,
que hoy tenemos clarísimos: ayudar a la gente que lo está pasando muy mal
como consecuencia de la pandemia, de la crisis de la COVID-19, el cese de
la represión, la justicia social y la república catalana.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora VICEPRESIDENTA (Narbona Ruiz): Muchas
gracias, señoría.


Por el mismo grupo parlamentario, tiene la
palabra la senadora Bideguren.


La señora BIDEGUREN GABANTXO: Gracias, señora
presidenta. Señora ministra, señorías, arratsalde on guztioi.


Euskal Herria Bildu entiende que estamos
viviendo un momento trascendental, una dura crisis sanitaria, económica y
social que ha puesto de manifiesto debilidades del sistema y nos ha dado
grandes lecciones como sociedad. La pandemia nos ha enseñado la
importancia de un sistema público fuerte, nos ha enseñado la
vulnerabilidad del sistema productivo cuando el sistema de cuidados no
está resuelto, nos ha enseñado la importancia de tener empleos estables
para que no se destruya tanto empleo ante una crisis, y nos ha enseñado
también que hay una tendencia en el Estado español, esté quien esté
gobernando, a la recentralización y militarización ante situaciones de
inestabilidad. Y, señorías, hay dos alternativas: negar la evidencia y
buscar culpables o aprender y construir una sociedad mejor. En Euskal
Herria Bildu estamos convencidos de que este aprendizaje puede ayudar a
transformar esta sociedad.


Para un Gobierno siempre es importante contar
con unos presupuestos aprobados porque son una herramienta importante de
gestión y marcan el rumbo de las políticas públicas en un ejercicio de
priorización, pero en este caso es aún más importante, y así lo
entendemos, teniendo en cuenta que los últimos presupuestos aprobados
fueron los de 2018, con un Gobierno del PP, un Gobierno de derechas.
Además, las emergencias sanitaria y climática hacen necesarias nuevas
respuestas inmediatas. Asimismo, el Estado español necesita solucionar
problemas estructurales con reformas ambiciosas, y para eso es importante
contar con unos presupuestos adaptados a la realidad y a las necesidades
de la ciudadanía.


Euskal Herria Bildu entiende que estos
presupuestos son algo más que una herramienta de gestión para el
Gobierno; entendemos que son un acuerdo de transformación. Estos
presupuestos deberían marcar el inicio de un cambio de rumbo. Es verdad
que estos presupuestos no revierten la situación que nos han dejado las
políticas neoliberales, pero esperamos que abran la puerta para trabajar
en esa dirección. Espero que haya quedado claro que no queda otra que
atacar las graves fallas del sistema y, al mismo tiempo, empezar a
construir un nuevo modelo de desarrollo y bienestar social. Entiendo que
a los partidos de derechas, como PP, Ciudadanos o Vox, no les guste este
cambio de rumbo. Está claro que estarían mucho más cómodos con otro tipo
de políticas, ustedes, señorías, sus medios de comunicación, sus empresas
y sus militares, de ahí las manifestaciones aberrantes que hemos
escuchado últimamente, pero, afortunadamente, señorías, nada tienen que
ver con la realidad que vivimos en Euskal Herria. Y me llama la atención,
como han comentado algunos compañeros y compañeras, que lleven varios
meses proponiendo más ayudas para autónomos, más ayudas para todos, y
ahora aboguen por una reducción de impuestos y una reducción de gastos.
¿En qué quedamos, señorías? Esto no es serio.


Nuestro voto es un no a la derecha y un sí al
futuro porque queremos reforzar los servicios públicos y acabar con la
desigualdad, lo contrario de lo que ocurrió con la respuesta a la crisis
de 2008. No solo queremos que se destinen más recursos para políticas
sociales, sino que esas políticas sean eficaces y ayuden a disminuir las
desigualdades que han aumentado en la última década. Porque queremos
atender a la inmigración, como lo hicieron con nuestros antepasados en
otros lugares. Porque queremos unas pensiones dignas. Porque queremos
acabar con la perversa ecuación de privatizar beneficios y colectivizar
las pérdidas. Porque queremos evitar la mercantilización de la salud y
del agua para que todo el mundo tenga acceso a bienes y servicios
relacionados con los derechos humanos.


Nuestro voto es un no a la derecha porque
queremos acabar con la precariedad y las tasas más altas de Europa en
temporalidad. Queremos empleos decentes, salarios justos y contratos que
den estabilidad. Queremos acabar con la deshumanización de las relaciones
laborales y con la lacra que supone el desempleo juvenil. Y queremos un
nuevo modelo productivo que genere empleo en actividades que tienen un
valor social y ambiental. Es urgente apostar por medidas eficaces para
realizar una rápida transición energética, y para ello se necesitan unos
presupuestos comprometidamente verdes.


Nuestro voto es un no a la derecha porque
queremos que se acabe, de una vez por todas, la corrupción y se
dignifiquen la política y el servicio público. Porque queremos acabar con
la mala praxis de la Casa Real. Nosotros no somos monárquicos, ya lo
sabéis, pero, ya que pagamos esta institución, lo mínimo que exigimos es
transparencia y que, ante las irregularidades, se investigue y se depuren
responsabilidades, como lo haría cualquier país democrático. También
queremos acabar para siempre con el franquismo y con la deriva
autoritaria, centralizadora y represiva. Queremos que se aborde el debate
territorial mediante el diálogo, dando la palabra a las naciones sin
Estado y que se respeten nuestras lenguas.


Nuestro voto es un no a la derecha y un sí al
futuro porque queremos seguir avanzando en la construcción de la paz, la
normalización y la convivencia. Y por mucho que recibamos ataques,
seguiremos apostando por el futuro. El último ataque, hoy mismo, el del
Tribunal Supremo, inaceptable y escandaloso jurídica y políticamente.
Quiero expresar mi solidaridad con Arnaldo, Sonia, Arkaitz, Rafa y Miren.
Besarkada bat. Son personas que emprendieron el camino hacia la
construcción de la paz y la convivencia, y por ello pasaron seis años en
la cárcel, aunque el Tribunal Europeo de Derechos Humanos invalidó, años
más tarde, la sentencia por falta de imparcialidad del juez. Y ahora se
quiere repetir el juicio. ¿Qué tipo de país es este? Una vez más,
personas de la judicatura haciendo política. Y porque queremos
hablar… (Rumores). Sí, sí.


La señora VICEPRESIDENTA (Narbona Ruiz):
Señorías, dejen hablar a la interviniente.


La señora BIDEGUREN GABANTXO: Al final, para
dialogar hace falta escuchar. Y porque queremos hablar de todo esto,
estamos aquí, en Madrid, y sabemos que con la derecha española es
imposible trabajar en esta dirección. La derecha española se pasa el día
haciéndonos mirar hacia el pasado, y Euskal Herria Bildu es una apuesta
fuerte hacia el futuro. (Rumores).


La señora VICEPRESIDENTA (Narbona Ruiz):
Señorías, por favor.


La señora BIDEGUREN GABANTXO: Apuesta fuerte
hacia el futuro. Señorías del Partido Socialista y de Podemos, señora
ministra, pierdan el miedo a mirar hacia el futuro. No será un camino
fácil, pero puede ser histórico. Tendemos nuestra mano para poner en
marcha reformas y medidas que apuesten por un futuro más justo y mejoren
la vida de las personas. No desaprovechemos esta oportunidad. Nosotras
haremos todo lo que esté en nuestras manos. Lo mismo esperamos de
ustedes. Nuestro grupo es la tercera fuerza de esta Cámara, somos quince
senadores y senadoras, y estamos demostrando que, cuando el
independentismo de izquierdas vasco y catalán están fuertes y caminan
juntos, somos determinantes. Y estamos en Madrid para avanzar en
derechos, mejorar la vida de nuestra gente y conseguir soluciones
históricas. Que así sea.


Eskerrik asko. Arratsalde on. (Aplausos).


La señora VICEPRESIDENTA (Narbona Ruiz): Muchas
gracias, señoría.


Tiene la palabra, por el Grupo Parlamentario
Popular, el senador Marí Bosó. (Aplausos.— Rumores).


El señor MARÍ BOSÓ: Gracias, señora
presidenta.


Señora ministra, hemos escuchado con atención
esta mañana su intervención, y nada nuevo. Lo que nos interesa destacar
es una cuestión, porque usted, en su extensa intervención, ha aprovechado
para deslizar eso de que se utilizó la crisis financiera como excusa para
los recortes —lo ha dicho usted—; y, claro, eso no se lo
podemos tolerar, señora Montero, salvo que hablara de ustedes mismos.
(Rumores.— Aplausos). Diario El País, de 20 de septiembre de 2015.
España defendió en 2010, en el Fondo Monetario Internacional, la
revolución de abaratar el despido. El señor Rodríguez Zapatero negaba en
público que redujera el coste de las rescisiones contractuales, mientras
lo defendía en el Fondo Monetario Internacional. Recortes, señora
Montero; 2010. Consejo de Ministros, de 29 de enero de 2010. El Gobierno
aprueba el Plan de austeridad 2011-2013. Escuchen bien, abran las orejas:
el Plan de austeridad 2011-2013. (Aplausos).


El 20 de mayo de 2010 se acuerda un recorte
presupuestario de 15 000 millones, señora ministra, señores del Grupo
Socialista. El Gobierno, siguiendo el Plan de austeridad,
acuerda 6000 millones de recortes en inversiones públicas, 1500 millones
en gasto farmacéutico, 6800 en sueldos públicos —el 5 % de los
funcionarios—, 1250 millones de euros en el cheque bebé, y
otros 1500 millones de euros al congelar las pensiones a nuestros
mayores. Así que, señora Montero, cuando ustedes acordaron todo esto,
¿utilizaban de excusa la crisis financiera para perjudicar a nuestra
gente?, ¿utilizaban de excusa la crisis para recortar?






(Aplausos).


Y señor Picornell, escolti bé, ya que han
sacado este tema que les gusta tanto de Franco, los golpes, arriba,
abajo, sea honesto y diga a la Cámara que Franco, Ramón Franco, hermano
de Francisco Franco, fue diputado de Esquerra Republicana de Catalunya en
el Congreso de los Diputados en 1931. (Aplausos.— Rumores). Está
bien, podemos debatir de lo que sea —estos son debates del siglo
pasado—, pero, señoras y señores senadores, lo que nos interesa hoy
es discutir, con las razones que ha dado el portavoz de nuestro grupo
parlamentario, si estos presupuestos son útiles o no a los españoles en
estos momentos graves de recesión y crisis económica. Lo que se plantea
es si estos presupuestos responden al interés de mejorar la vida de los
españoles o solo al interés del señor Sánchez en mantenerse en la silla.
Se plantea si los presupuestos presentados se dirigen a preservar el
Estado del bienestar para todos los españoles sin distinción, o quiebran
el principio de igualdad y hacen distingos, privilegiando a unos y
olvidando a otros, en función de los intereses prioritarios de la
separación de unos pocos. En definitiva, lo que se discute esta tarde,
señorías, es si la política económica que ponen por obra estos
presupuestos es la correcta o no para proteger a aquellos que necesitan
de un Gobierno que les proteja, para alentar a aquellos que asumen el
riesgo de crear riqueza y empleo. Se discute si ofrecen certezas y
seguridades a los trabajadores para seguir sus proyectos vitales y el de
sus familias; si sirven, en fin, para volver con rapidez al crecimiento y
la generación de empleo. Y la respuesta, en opinión del Grupo Popular, es
que estos presupuestos no sirven para todo ello, porque son un engaño. Se
construyen sobre engaños, y consolidan el permanente engaño de la
política gubernamental durante estos dos años y medio.


¿Qué credibilidad tiene un Gobierno que
mantiene sin rubor que han sido 47 600 los españoles fallecidos en esta
pandemia, cuando las estadísticas oficiales señalan que hasta ahora han
sido más de 74 600? Repito, más de 74 600 el exceso de españoles
fallecidos a consecuencia de la COVID-19. Señorías, honrar la memoria de
todos ellos no merece mantener un minuto más la infamia de una mentira.
(Aplausos). ¿Qué credibilidad tiene usted, señora Montero, si su
historial, con todo el respeto, de engaños es como la historia
interminable? Nos engañó con las cifras de déficit público de 2019: 2400
millones de euros, nos apuntó, que Eurostat le dijo que era un engaño; y
también pasó el déficit del 2,6 al 2,9 %. Engañó a las comunidades
autónomas con el IVA diciendo que no se podía, pero 10 días antes de las
elecciones sí que se podía. Engañó con los remanentes de los
ayuntamientos, y dijo que hay que cambiar la Constitución, y los tratados
internacionales casi casi; sin embargo, con un acuerdo del Consejo de
Ministros, exceptuando las reglas fiscales, como le decía el Partido
Popular, se consiguió hacer. Lo suyo, señora Montero, en Twitter se
resume con el hashtag: #engañosMontero. (Aplausos). Y con esta historia
de engaños, señorías, ¿qué credibilidad tiene el Gobierno? O sea, ¿se
dirigen, como decía la señora Montero esta mañana, estas cuentas a las
certezas y a las seguridades? Estas cuentas no aguantan ni cinco minutos
el análisis de todos los organismos nacionales e internacionales, que no
se las creen, ni aguantan la prueba de la realidad.


La realidad del país no es la que día tras día
nos maquilla, engañándonos, el señor Sánchez y toda su pléyade de
ministros, ministrillos y magos merlines en la Moncloa. La realidad del
país, señorías, es la de la angustia que viven 4,5 millones de
desocupados; 3,7 millones en paro y 750 000 en expedientes de regulación
de empleo. La realidad del país es la de una pérdida de afiliaciones a la
Seguridad Social del 5,8 interanual, incluyendo los ERTE. La realidad es
la desaparición de 95 000 empresas y sectores de producción muy
deprimidos, como el turismo y el comercio; una tasa de paro juventud
juvenil incrementada en 16 puntos, hasta el 41 % en octubre; y un
descenso pronunciado del empleo en asalariados, temporales, rentas bajas
y personas con bajos estudios, con lo que se incrementa la desigualdad.
Escuchen bien, señorías, estos trabajadores con rentas bajas, asalariados
temporales, y personas con bajos estudios, son los que ustedes están
dejando atrás. Estos son los primeros perjudicados por sus políticas
equivocadas, y la realidad, señorías, es una pérdida de PIB del 12 %, un
incremento del déficit público del 11 % y una deuda pública incrementada
en 25 puntos hasta el 120 %. Esta es la realidad, señorías, y no la
derivada de los engaños, de los maquillajes, del señor Sánchez; esta es
la realidad a la que han contribuido, y no poco, las políticas
equivocadas de su Gobierno. Se dirá que la pandemia es mundial y que la
crisis es mundial, pero de lo que se trata aquí es de dilucidar si las
políticas del Gobierno contribuyen a paliar la crisis o a agravarla, y,
en este caso, el señor Sánchez con su desgobierno ha contribuido, en
nuestra opinión, decididamente, a situarnos como la peor de todas las
grandes economías avanzadas en 2020.


Los presupuestos que nos traen hoy a esta
Cámara inciden en el error y perseveran en el engaño. Presentan un cuadro
macroeconómico que prevé un crecimiento del 9,8 %, cuando todos los
organismos nacionales e internacionales lo sitúan entre el 4 y el 7 %. Un
infierno fiscal. Usted, señora Montero, ha dicho esta mañana que son
ajustes. Y no, ajustes no son. Esto es un infierno fiscal. No dejan ni
una figura tributaria sin tocar al alza para deprimir más nuestra
actividad económica; somos el único país del euro que sube impuestos por
su sectarismo ideológico. Estos presupuestos no ayudan a corregir ninguno
de nuestros desequilibrios, ni la rigidez ni la temporalidad de nuestro
mercado de trabajo, más bien los agravan, ni tampoco el escaso tamaño de
nuestras empresas, que las hace muy vulnerables —como se ha
demostrado estos meses—; las condenan, por tanto, con su voracidad
fiscal, que impide que ganen capitalización y puedan reinvertir. Tampoco
tratan de corregir con este presupuesto ni la economía sumergida ni el
desequilibrio que tenemos en economía sumergida. Al contrario, con sus
normativas sobre topes de alquileres, habrá más gente que sumerja rentas.
Esto sí que es de Franco, señor Picornell, ¿lo ve? Nos devuelven a la Ley
de Arrendamientos Urbanos del 1955 y al Texto Refundido de 1964. Y fue un
socialista, el señor Boyer, el que se la cargó con el decreto de 1985. No
van bien por este camino, vamos a deprimir aún más el mercado
inmobiliario y se van a encarecer los alquileres. Porque no son unas
cuentas públicas dirigidas al saneamiento para poder tener un mayor
margen fiscal con el que ayudar mejor a las familias.


Sus políticas de gasto e inversión lo fían todo
a los fondos europeos, y ya sabemos que ni tienen el efecto multiplicador
en crecimiento, que dicen que tienen, ni se van a poder ejecutar y tener
efecto en 2021; y, además, como les ha dicho nuestro portavoz, el señor
Maroto, esto constituye simplemente para ustedes un botín que repartirse
sin tener en cuenta si los proyectos son beneficiosos. Y con este
panorama nos piden que aprobemos las cuentas y que aprobemos estos
presupuestos. Y nosotros a eso decimos: si hay que arrimar el hombro para
mejorar la vida de los españoles, proteger sus empleos, el progreso que
hemos conseguido, y el Estado del bienestar que hemos construido, ahí
estará como siempre ha estado Pablo Casado y el Partido Popular.
(Aplausos.— La señora ministra de Hacienda, Montero Cuadrado: Ya lo
veo). Pero no, nadie puede pedirnos, señora ministra, que arrimemos el
hombro cuando sabemos que esto es una equivocación. Nadie puede pedirnos,
señora ministra, que, como usted con sus engaños, arrimemos el hombro
para engañar en perjuicio de los españoles. No nos pueden pedir eso,
señora ministra; no nos pueden pedir eso.


Es posible que con estos presupuestos obtengan
la mayoría. Es posible incluso que estos presupuestos incluyan en esa
mayoría, escúchenme bien, señores del PNV, paradójicamente, a
determinados grupos políticos que, a medio plazo, se darán cuenta de que
estos presupuestos van justamente contra ellos mismos. Pero el problema
de este Gobierno es que no inspira confianza ni tiene crédito, y ese
problema no se arregla con las componendas de un presupuesto. Se arregla
con un Gobierno fuerte, que no esté al dictado de aquellos que, por un
lado, no quieren ningún Gobierno, porque lo que persiguen son sus fines
separatistas, ni tampoco que esté el dictado de aquellos otros que solo
quieren estar en el Gobierno para cargarse el Gobierno constitucional. El
problema de este Gobierno, señorías, que habría que solventar antes que
cualquier presupuesto, solo se arregla arreglando el Gobierno, señorías.
Este es el problema que ustedes tienen. (Rumores).


Pueden aprobar todos los presupuestos que
quieran, porque para superar esta gravísima crisis hay que cambiar y dar
un giro copernicano a su política económica y presupuestaria,
persiguiendo un presente y un futuro mejor para los españoles. (La señora
presidenta ocupa la Presidencia). Y hay una alternativa mejor, una
alternativa para dejar atrás la recesión y abrir una nueva etapa de
crecimiento en nuestro país, una alternativa que pasa por dirigirse a los
españoles sin engaños, sin dejación de funciones, como han hecho todo el
verano, mirándoles a los ojos para decirles: vamos juntos a mejorar esto.
Esa es la alternativa que les proponemos hoy en este debate (Aplausos);
una alternativa que luche con decisión contra el intrusismo y la economía
sumergida e incentive la ganancia de tamaño de nuestras empresas para
proteger los empleos, que rescate la agricultura y el campo español hoy
abandonados a su suerte; una alternativa que apueste de verdad por la
innovación de todos nuestros sectores productivos, que sepa hacer las
políticas de protección de rentas que en este momento hacen falta, porque
nadie discute que en el corto plazo es necesaria una política fiscal
expansiva. Lo que se señala es que, al mismo tiempo, hemos de iniciar las
reformas económicas que permitan salir de todo ello. Hay una alternativa
mejor, claro que hay una alternativa mejor, la que les ofrecemos,
señorías, por encima de coyunturas; la que les ofrecemos, sabiendo que
nadie que apele al pacto o al acuerdo puede pretender la adhesión
inquebrantable a los propios postulados, como hace el señor
Sánchez...


La señora PRESIDENTA: Vaya terminando,
señoría.


El señor MARÍ BOSÓ: Hay una alternativa mejor y
en su mano, señorías, está aceptar el reto y coger la mano tendida de la
alternativa que proponemos, asumiendo juntos la responsabilidad de
ofrecer a los españoles un horizonte mejor de seguridades y
certezas.


Muchas gracias, señora presidenta. (Fuertes y
prolongados aplausos de los senadores del Grupo Parlamentario Popular en
el Senado).


La señora PRESIDENTA: Por el Grupo
Parlamentario Socialista, tiene la palabra el senador Gil García.


El señor GIL GARCÍA: Muchas gracias, señora
ministra.


Señora presidenta, señorías, muy buenas tardes.
Para hablar de cuentas voy a empezar tratando de compartir con todos
ustedes, en nombre del Grupo Parlamentario Socialista, una emoción
profunda. En este tremendo 2020, nuestro país, y el mundo entero, ha
vivido la enorme desgracia de la COVID-19, con miles de personas
fallecidas y miles de contagios. (Rumores). Nuestro país ha sufrido y
sigue sufriendo. Pero les confieso algo, que me siento orgulloso de
pertenecer a un partido que en esta hora crucial ha sabido estar a la
altura y mantener claro el único objetivo que nos anima... (Aplausos),
que no es otro que el de proteger la salud y la vida de nuestros
compatriotas. Exactamente lo mismo, señorías, que venimos haciendo desde
hace 140 años. Es verdad, señora ministra, que con aciertos y errores,
pero también con algo que tenemos muy claro: las ideas de progreso,
justicia, igualdad y libertad defendidas siempre con determinación aún en
las horas y en los momentos más difíciles de la historia de nuestro país.
Siempre. (Aplausos).


Señorías, no tenemos otro empeño que el de
resolver los problemas y hacer mejor y más justo este gran país al que
los socialistas amamos. Pero, señora ministra, el Gobierno y los partidos
que lo sustentan han recibido acusaciones de una gravedad extrema y no
pocas campañas de desestabilización; pese a todo ello, han sabido siempre
sortear esos inconvenientes apoyándose en el convencimiento profundo de
que solo y únicamente importaba el bienestar de la ciudadanía.


Señora ministra, han trabajado dentro y fuera
de nuestras fronteras con honestidad y con energía hasta llegar a este
final de año proponiendo a la sociedad unos presupuestos que, sí,
señorías, son extraordinarios. (Aplausos). Son los presupuestos que
inician la reconstrucción social y económica de nuestro país. Y, sí,
estoy orgulloso; lo estamos quienes conformamos este grupo parlamentario.
Compañeros y compañeras, gracias por el trabajo y gracias por no
desviarnos nunca del camino recto ni caer jamás en las provocaciones ni
en las descalificaciones que durante todo este tiempo hemos tenido que
soportar en nuestros escaños. Gracias de verdad. (Aplausos).


Señorías, lo que estamos debatiendo hoy no es
un trámite; estamos viviendo una jornada histórica y decisiva para
nuestro futuro; histórica porque comienza la reconstrucción del país que
merecemos; y decisiva porque desde los primeros pasos que estamos dando
vamos ya a configurar su trazado, y lo digo con la satisfacción de ser,
humildemente, uno más de los que han arrimado el hombro para llegar hasta
aquí.


Señorías, en parecidos términos, comenzaba la
II Legislatura allá por 1982. Por razones distintas, pero en aquel
momento tan decisivo, como este que estamos viviendo, comenzaba una
década de construcción del país democrático, moderno y regido por la
libertad y la igualdad que tenemos hoy. Pues bien, señorías, estos
presupuestos que hoy debatimos son la piedra angular del nuevo edificio
que estamos llamados a construir, un edificio donde todos y todas tengan
cabida; donde nadie, como se ha dicho y seguiremos diciendo, se quede
atrás. Toca hacerlo mientras luchamos paralelamente contra la COVID-19.
Nos enfrentamos, señorías, sí, a un futuro incierto en España, en Europa
y en el mundo; y ante esta situación inédita en casi un siglo, un
Gobierno debe dar una respuesta decidida, y esta vez no cabe hacer lo
mismo que hizo el Gobierno del Partido Popular hace una década, no
podemos dejar atrás a millones de españoles y españolas. Esta vez no,
señorías. (Aplausos). Esta vez no; no mientras haya un Gobierno
progresista que lo impida. Hoy la ciudadanía exige otro rumbo, que no
deje a nadie atrás, con una tripulación que maneje el timón para dar
estabilidad al país. Y eso es lo que proponen exactamente estos
presupuestos a la sociedad española y a nuestros socios europeos, porque
de la manera en que nos enfrentemos hoy a la realidad dependerá nuestro
futuro, y voy a detenerme en esta cuestión.


Decía un socialista histórico, Fernando de los
Ríos, con motivo de la aprobación de la Constitución española del
año 1931, que España se ha enfrentado a grandes retos a lo largo de la
historia y, en muchas ocasiones, lo ha hecho con ejemplaridad, con visión
a largo plazo y con modernidad, sirviendo de ejemplo a otras naciones. Se
refería De los Ríos al momento de creación del Estado moderno regido por
un régimen constitucional. Y, en ese momento al que se
refería, 1810-1812, España creó, nada más y nada menos, que uno de los
modelos constitucionales que asombraron al mundo. En él se inspiraron
Suiza, los países escandinavos y gran parte de los países de
Iberoamérica. Este histórico socialista, De los Ríos, manifestó en su
discurso: En 1812, no solo creamos un tipo constitucional, sino que,
además, como había acontecido durante el siglo XVI, creamos el vocablo
que va a servir para polarizar todas las reivindicaciones históricas;
creamos la palabra liberal. Y se preguntaba: ¿Vamos a permanecer ausentes
en este tercer momento creador de la historia del Estado? Y esta,
señorías, es la encrucijada en la que nos encontramos en este momento: o
adoptamos, como país, como sociedad, la decisión de avanzar, o nos
cerramos en nosotros mismos y que sean otros quienes decidan por nosotros
y nos guíen; o somos decididos y valientes, como en aquellos momentos
cruciales de 1812 y 1931, o asumimos aquello de que inventen ellos,
quedándonos estancados en los presupuestos del señor Montoro. Esa es la
disyuntiva, ese es el momento en el que nos encontramos ante una decisión
histórica. Este no es un debate de unos presupuestos más. Por eso,
siguiendo esta estela histórica, el Gobierno del presidente Sánchez se
compromete con el presente, con el futuro y con la estabilidad de nuestro
país. Cabe plantear, en este momento, a todas las fuerzas políticas, que
demuestren igualmente su compromiso con el presente y con el futuro de
todas y de todos.


Señorías, estas cuentas públicas, se ha dicho,
han concitado el apoyo, además, de una docena de fuerzas políticas, cada
una con visiones y con programas diferentes que, en ocasiones, pudieran
parecer incluso incompatibles entre sí, pero que hoy, como también
sucedió en otros momentos de nuestra historia reciente, han coincidido en
un proyecto común. Ha sido así porque sabemos lo que queremos y, sobre
todo, señorías, sabemos muy bien lo que no queremos. Las formaciones que
hemos apoyado ya estos presupuestos no queremos ni una España oscura ni
intolerante ni donde el odio se impone al respeto y a la tolerancia. No
queremos un país que persiga a la diversidad y que ataque a la
pluralidad. No queremos esa España en blanco y negro que algunos quieren
revivir. Queremos vivir en un país moderno, donde imperen las libertades
públicas; queremos vivir en un país que garantice la educación para todos
y para todas, que garantice el respeto a la diversidad y a la pluralidad;
un país que garantice la convivencia y el respeto mutuo. Eso es lo que
nos une, señorías. Ese es el país que queremos construir con estos
presupuestos, con unas cuentas de las que cabe destacar el gran escudo
social del que les citaré, porque ya se han dicho, solo tres datos:
casi 240 000 millones de euros, la inversión pública más importante, más
ambiciosa de la historia; un 75 % más para la sanidad pública de nuestro
país, que es la que nos está salvando de esta pandemia, y un 70 % para
nuestro sistema educativo público, para garantizar un futuro de
oportunidades.


El Gobierno de coalición progresista ha
conseguido algo inédito en nuestra historia reciente: luchar contra la
crisis sanitaria y económica y, a la vez, elaborar unas cuentas que
sientan las bases del futuro de este país, convertir la dificultad en
oportunidad. Y la apuesta para este futuro es clara: la transición
ecológica, la digitalización de la economía, la cohesión social y
territorial y la igualdad de género. Estos son los cuatro pilares del
edificio que juntos y juntas queremos construir, un país moderno,
competitivo, que promueva la ciencia, la cultura y la igualdad desde la
escuela; un país cohesionado, fraternal y donde quepan cuantas personas
quieran convivir con respeto a su género, a su biología o a su lugar de
procedencia; y, sí, señorías, un país feminista (Aplausos), un feminismo
que algunos combaten, pero que es irrenunciable para un país que sitúa la
igualdad en el centro de sus políticas. Lo decía nuestra querida y
recordada senadora Carmen Alborch: El feminismo ha mejorado la vida de
todos los ciudadanos; debería ser patrimonio inmaterial de la humanidad.
(Aplausos). Por cierto, señor Maroto, que ha citado usted a tres mujeres
del Partido Popular Europeo, pero me extraña mucho que no haya sido capaz
de citar a ni una sola mujer del Partido Popular español en su
intervención de esta mañana. No ha citado ninguna. (Aplausos).


Aquellos que pretenden vetar estos presupuestos
le están negando, en suma, todo esto y más a toda la ciudadanía, señorías
de la derecha y de la extrema derecha. Cuando la España que tanto dicen
defender se la juega, en el momento de arrimar el hombro a la hora de
decir sí a su gente diciendo sí a sus presupuestos, uno se pregunta, y
mucha gente se pregunta, dónde están ustedes Yo les pregunto, señorías:
¿debemos ayudar a los comercios, a la hostelería y al turismo? ¿Debemos
invertir en ciencia, en cultura y en educación? ¿Debemos robustecer la
sanidad pública? ¿Debemos apoyar y proteger a los hombres y mujeres del
mundo rural? ¿Debemos combatir la violencia machista? ¿Debemos, en fin,
trabajar por la recuperación económica de nuestro país? ¿Debemos proteger
a quienes más han sufrido durante todo este año? Señorías, ante estas
preguntas, no cabe ponerse de perfil en este momento que estamos
viviendo. Si no son capaces ustedes de arrimar el hombro en un momento
como este, todo el mundo se preguntará entonces: ¿cuándo, señorías?,
¿cuándo son ustedes capaces de arrimar el hombro por este país?
(Aplausos).


No lo duden, cuando se eche la vista atrás,
estos presupuestos serán recordados por quienes ayudaron a su aprobación,
por quienes trabajaron siempre a la contra y por el enorme esfuerzo que
se hizo para reconstruir el país y trazar su transformación. Señorías del
Partido Popular, algún día se recordará estos presupuestos porque ustedes
no supieron o no quisieron ayudar a su país cuando este más les
necesitaba.


Y, mire, señor Maroto, no pensaba referirme a
su intervención de esta mañana, y no entraré en algunas descalificaciones
y calificativos con los que usted se ha dirigido al presidente del
Gobierno, pero, visto que no le funcionaba la economía, ha recurrido
usted a la psicología; se ha permitido hacer un análisis psicológico del
presidente del Gobierno. Me llama poderosamente la atención que lo haga
quien hace pocos días protagonizaba aquí uno de los episodios
psicológicos yo creo que más destacados. Usted, en su última intervención
que dirigía el presidente del Gobierno en la última sesión de control de
esta Cámara, señor Maroto, se pasó usted tres cuartas partes de su
intervención intentando justificar sus pactos con Bildu cuando usted era
alcalde de Vitoria, sin que nadie le dijera ni media palabra, sin que
nadie le dijera nada. (Aplausos). Excusatio non petita, accusatio
manifesta. Ha hablado usted también de facciones en el Gobierno, pero son
ustedes incapaces de ver a los facciosos en los que se apoyan para
gobernar en diferentes comunidades autónomas de este país.
(Aplausos).


De corazón, señorías, quiero agradecer a todos
los grupos que han sido capaces de ponerse de acuerdo en un mismo
objetivo, gracias por aparcar las diferencias y unirnos. Yo creo que eso
es lo que espera la ciudadanía de nosotros. Eso es lo que se espera que
hagamos en un momento como este. Yo creo que enviamos a la sociedad un
mensaje positivo, que ponemos en el centro de la política las cosas que
verdaderamente importan a los ciudadanos. Los socialistas apostamos por
unir siempre con el diálogo y con el acuerdo; así lo hemos hecho siempre
y así lo vamos a seguir haciendo, porque se lo debemos a quienes han
perdido la vida en esta pandemia y a quienes la están sufriendo ahora; se
lo debemos a quienes han estado y están en la primera línea luchando por
los demás, y nos lo debemos a nosotros y a nosotras mismas.


Señorías, termino con la cita de otro
socialista histórico, de senador, Ramón Rubial. Decía el senador Rubial
que en democracia la revolución se hace con el BOE y, efectivamente,
señorías, estos presupuestos son verdaderamente revolucionarios por lo
que tienen de transformadores y de modernizadores. En nombre del Grupo
Socialista y en el mío propio, les aseguro que estoy orgulloso de haber
llegado hasta este momento trabajando con honestidad y con determinación,
un orgullo que quiero compartir con quienes desean trabajar por el bien
común, como en los grandes momentos. Y créanme, señorías, que este es un
gran momento.


Muchas gracias. (Fuertes y prolongados aplausos
de los señores senadores del Grupo Parlamentario Socialista puestos en
pie.)


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En nombre del Gobierno, tiene la palabra la
señora ministra de Hacienda.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Muchas gracias, presidenta.


Señorías, empiezo como ha finalizado el
portavoz del Grupo Socialista, dando las gracias a todos los grupos que
aquí en la tribuna han manifestado su apoyo a estas cuentas públicas, sin
duda un proyecto que merece la pena ir poniendo en valor a lo largo del
año 2021. Quiero agradecer que hayan antepuesto todos ustedes los
intereses de España a los intereses particulares de cualquier formación
política, porque, en este momento, poner a los ciudadanos en el centro de
la política es lo mínimo imprescindible que se le pide a los que nos
llamamos servidores públicos. (Aplausos).


Al resto de las formaciones políticas que han
intervenido defendiendo el veto, o, en el turno de portavoces, no
apoyando estas cuentas públicas, quiero decirles, señorías, que nada
nuevo hay bajo el sol. Tampoco esperaba, en este debate del Senado de
esta tarde, que hubiera formaciones políticas que hubieran entendido la
invitación que ha hecho este Gobierno para plasmar con estas cifras las
distintas sensibilidades que tenemos en las correspondientes Cámaras, y
que son la mejor expresión de la pluralidad política. Yo creo que a
muchos partidos políticos, a muchas formaciones aquí presentes, ni les
importa la estabilidad de España ni tampoco que superemos esta situación
de crisis; lo único que les preocupa es agitar la mentira y, por tanto,
vivir de ella y, a partir de ella, intentar conseguir mayores cotas de
poder. Afortunadamente, señorías, creo que hay que trasladarle a los
ciudadanos una tranquilidad cierta: existe una mayoría política y social
en este país diferente a la que representan, con esas expresiones que han
hecho en esta tribuna, fundamentalmente el Partido Popular y Vox, con el
apoyo de Ciudadanos. Yo creo que hay una mayoría en esta Cámara, en las
Cortes Generales, que cree en el diálogo entre distintos, entre
diferentes, y que sabe que el resultado final de las negociaciones
siempre es mucho más importante que la posición de partida, porque
dialogar, tener cultura democrática, consiste justamente en eso, en
aparcar aquello que nos diferencia para intentar encontrar puntos que son
comunes al interés general del conjunto de los ciudadanos. Por eso,
señorías, voy a intentar responder brevemente —dado el número de
grupos a los que ustedes representan— a algunas de las cuestiones
que me han parecido más destacadas o importantes.


Ustedes recuerdan que la primera vez que yo
subí a esta tribuna fue, recién designada ministra del Gobierno de
España, para defender unos presupuestos del Partido Popular, año 2018. En
aquel momento, mes de junio —lo recordarán ustedes, seguro que sí,
perdieron ustedes el Gobierno—, era importante que la política
fuera útil, que no jugara al sectarismo y, por tanto, que fuéramos
capaces de continuar unas hojas de ruta conforme al acuerdo de gestión
con el conjunto de fuerzas políticas que apoyaron la moción de censura
que presentó el presidente Sánchez. Y no era plato de gusto, señorías,
señor Maroto, defender en la tribuna el presupuesto del señor Montoro,
que no compartíamos, pero creíamos que era importante para este país que
no se obstaculizara un trámite que estaba muy avanzado —de hecho,
estaba aquí ya, en el Senado— y, por tanto, estuvimos a la altura
de las circunstancias, que es como yo llamo a esta cuestión. Sin embargo,
yo le he escuchado hoy a usted aquí, créame que lo he hecho atentamente,
y creo que su intervención ha sido un cúmulo de excusas que denota una
falta de responsabilidad con el país —se lo digo como lo
siento— en un momento de pandemia económica, sanitaria y social sin
precedentes en nuestra historia reciente en el último siglo, ni en la
historia europea. Y, fíjese, señor Maroto, que usted ha querido hacer
ruido con todo, porque tengo la impresión de que ustedes entienden que
esta es la Cámara de la bronca y el ruido, al menos, así es cómo ustedes
normalmente acompañan los debates que se producen en esta Cámara desde
sus escaños. Y con ese ruido que ustedes pretenden hacer, incluso ponen
ustedes en cuestión las cifras oficiales del Ministerio de Sanidad,
cifras que le proporcionan comunidades autónomas, entre ellas, las que
ustedes gobiernan, señor Maroto, y el Instituto Nacional de Estadística.
(Aplausos.— Denegaciones del señor Maroto Aranzábal). ¿Ahora
ustedes no proporcionan cifras? Pues si, como el señor Maroto dice, no
proporcionan cifras, mal hecho, porque hay obligación de proporcionar las
cifras que corresponden tanto al número de contagiados como al número de
fallecidos. (Aplausos).


Además, me parece un argumento miserable
utilizar el dolor, en cuestiones tan importantes para los ciudadanos,
como arma arrojadiza o para desgastar al Gobierno. Pido más respeto por
los ciudadanos, que lo están pasando mal y algunos de ellos han perdido a
sus seres queridos. (Aplausos). Sin embargo, señor Maroto, en esta
tribuna yo le he escuchado referirse a muchos temas, pero para nada a las
cuentas públicas. No tienen ustedes una partida que criticar. ¡Y mira que
han hablado ustedes ya del proyecto de presupuestos! Pero yo no le he
escuchado ni una sola crítica a ninguna partida de gasto, ninguna.
(Rumores). Claro, ustedes critican todo y la nada, ¿verdad, señor Maroto?
El todo y la nada, los argumentos etéreos, la política que no sirve.
(Aplausos). De lo más concreto que ha hablado usted ha sido del colchón
del doctor Sánchez, que, en un debate de estas características, me parece
que tenía poca cabida; aun así usted lo ha lo ha intentado meter.


Señorías, más allá de las intervenciones de sus
portavoces o de las intervenciones de los que toman la palabra, yo lo que
me pregunto es dónde está la responsabilidad del Partido Popular, un
partido que ha tenido responsabilidad de Gobierno durante la democracia.
¿Dónde está el sentido de país de una formación política que es la
primera fuerza política de la oposición? ¿Dónde está ese sentido? ¿Por
qué no se comportan ustedes como partido de Gobierno? ¿Por qué? Porque
han abandonado ustedes la posición responsable democrática de aceptar
—señor Martí, no le veo ahora— legítimamente (Varios señores
senadores: ¡Marí!) —ya le veo; perdón, Marí— que los
ciudadanos de este país han elegido democráticamente en las urnas este
Gobierno que a usted tan poco le gusta. (Aplausos.— Denegaciones
del señor Marí Bosó). Sí, señor Marí, usted ha vuelto a reiterar en esta
tribuna, y le aconsejo que se lo lea cuando termine la sesión, que el
único interés que tiene el Partido Popular es poco menos que desgastar y
derrocar a este Gobierno. (Denegaciones del señor Marí Bosó). Sí, usted,
que ahora se sorprende, lo ha dicho aquí en esta tribuna. (Aplausos). Y,
fíjese, señor Maroto, qué curioso, pone usted en valor —se lo decía
mi compañero— los fondos europeos a partir del papel que el partido
conservador juega en Europa. Pero ¿es que no se acuerda, señor Maroto
—ha perdido la memoria—






, de que el señor Casado fue a Europa
a desprestigiar a este país y a decir que no se dieran los fondos a
España? (Aplausos). Y lo lamento. Intentar, a última hora, utilizar el
discurso de los fondos europeos, con esa excusa, después de lo que
ustedes han protagonizado en Europa y con lo que han seguido haciendo
posteriormente, me parece absolutamente fuera de lugar. Y le tengo que
confesar, señor Maroto, que me sorprende el cambio que ha dado usted,
porque yo creo que al inicio de su carrera política usted era un hombre
fresco, y lo digo en el sentido de que aportaba frescura a la política,
de que representaba un discurso fresco dentro del Partido Popular. A eso
me refiero. Pero yo me pregunto, señor Maroto, qué les pasa a ustedes
tras pasar un cierto tiempo en la bancada del Partido Popular o en las
direcciones del Partido. ¿Cuáles son los valores y los méritos que
consideran válidos para la dirección de su partido?, ¿la bronca, la
descalificación, la utilización permanente de adjetivos, sobre todo hacia
el presidente del Gobierno para intentar denostarlo? ¿Es eso lo que da
puntos, señor Maroto?, ¿o da puntos una política seria, una política
responsable, una política que se pueda defender?


Y, por cierto, señorías, y en esta Cámara me
veo en la obligación de decirlo, aunque habitualmente no hago referencia
a ello por no darle más valor; pero, como digo, en esta Cámara tengo que
decirlo. Señor Maroto y resto de señorías del Grupo Popular, dejen
ustedes de utilizar las expresiones y el acento de Andalucía para
intentar desprestigiarla. (Aplausos). Dejen de utilizarnos. En Andalucía,
señor Maroto, expresiones como «chiqui», «mi arma», «cariño», «niño»,
«chiquillo» se utilizan todos los días por todos los ciudadanos. Por
tanto, cuando usted me critica por la utilización de esas expresiones
frecuentes en Andalucía, está criticando el habla de Andalucía.
(Aplausos.— Protestas). No se lo voy a recordar más, solamente digo
que ustedes tienen un profundo historial de desprecio hacia Andalucía y,
si no, que se lo pregunten a doña Magdalena Álvarez o a la señora
Villalobos, a la que ustedes también se lo hacían. Fíjense,
siempre...


La señora PRESIDENTA: Señora ministra, vaya a
la cuestión.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Siempre son mujeres. (El señor Hernando Fraile pronuncia
palabras que no se perciben). No estoy hablando con usted, señor
Hernando. El señor Hernando está interactuando desde la Mesa, y se está
refiriendo a mí. (Aplausos). Y no estoy hablando con usted, estoy
hablando con el señor Maroto. Usted fue el primero que sacó la cuestión
y, por eso, repito: pregúntele a su compañera, Celia Villalobos, que
también sufrió esa misma crítica. (Protestas).


Señor Maroto, respetar al Senado es utilizarlo
como Cámara con vocación territorial o como Cámara de segunda lectura.
Hace tiempo que, como se ve, ustedes solo la utilizan para el ruido y
para la bronca, y usted es el máximo responsable, es el portavoz del
grupo aquí, en el Senado. Porque las instituciones, señorías, se respetan
tenga uno mayoría o no la tenga, le convenga o no le convenga; las
instituciones se respetan y eso es importante para partidos que hemos
tenido responsabilidad de Gobierno y, por tanto, señorías, también para
ustedes.


Usted ha descalificado a muchos de los grupos
que han apoyado estas cuentas; lo ha hecho aquí, en la tribuna. Ha
llegado a decir, no sé si directamente o en boca de algún otro portavoz,
y desde luego lo ha repetido el representante de Vox aquí en la tribuna,
que estos presupuestos están manchados de sangre y que son
antidemocráticos. (Denegaciones del señor Maroto Aranzábal). Sí, lo han
dicho... (El señor Maroto Aranzábal: Yo, no). Usted no, pero sí miembros
del Partido Popular, y hoy Vox lo repite en la tribuna. (Protestas).


La señora PRESIDENTA: Silencio, señorías, por
favor.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): ¿Puedo continuar, presidenta?


La señora PRESIDENTA: Un momento, por
favor.


Señorías, guarden silencio y respeten el turno
de la oradora. Guarden el debido decoro en este lugar. (Continúan las
protestas).


¡Silencio, señorías! Y no señalen, no hagan
gestos indecorosos, por favor. (Aplausos).


Tiene la palabra, señora ministra.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Continúo, presidenta.


Decía, señor Maroto, que a pesar de las
afirmaciones que hacen ustedes, el PP ha votado junto a Bildu, en contra
del criterio del Gobierno, tres enmiendas de Esquerra Republicana de
Catalunya y dos de Junts per Cat. (Denegaciones de varios señores
senadores del Grupo Parlamentario Popular en el Senado.— El señor
Maroto Aranzábal: ¿Y?) ¡Ah!, ¿cómo que «y»? El señor Maroto dice desde el
escaño: ¿Y? Entonces, ¿por qué recrimina usted a este Gobierno que los
presupuestos los apoyen otros grupos? (Aplausos).


Continúo, señor Maroto. Usted dijo en el
año 2011 en una entrevista con Ana Pastor lo siguiente: Hay mucha gente
en Bildu que ha pretendido la paz desde el principio. Y continuaba usted:
Es necesario hablar entre todos. Yo lo hago en el Ayuntamiento de
Vitoria; hablo con el Partido Socialista, hablo con el PNV y hablo con
Bildu. Eso decía usted.


El 4 de noviembre de 2011, señor Maroto,
escribió usted este tuit que posteriormente borró —y abro
comillas—: «Primer debate de impuestos municipales sin excluir a
nadie». (La señora Agudo Alonso muestra una foto a la Cámara). He
aceptado propuestas de PNV, Partido Socialista de Euskadi y Bildu. Hay
que buscar consenso con todos. (Aplausos). En 1993, año en el que ETA
asesinó a 14 personas, el Gobierno de Navarra de UPN y Partido Popular
citó en el Palacio de Navarra a Herri Batasuna hasta en dos ocasiones
para negociar los presupuestos autonómicos. ¿Y ahora qué, señor Maroto?,
¿ahora, con todo lo que usted transmite respecto a por qué este Gobierno
tiene un proyecto de presupuestos al que apoyan determinadas fuerzas
políticas, sus palabras ya no valen?, ¿ahora se desdice usted de lo que
dijo previamente? (Aplausos).


Señorías, cada una de las formaciones
políticas, algunas de las cuales ya existimos desde hace tiempo y estamos
aquí desde el principio de la democracia, tenemos tanta historia, tantos
logros y yo diría que también tan pocos complejos a la hora de defender
la democracia, que no nos hace falta buscar excusas para sacar adelante
unos buenos presupuestos para este país y, por tanto, para establecer el
diálogo con todos aquellos que no anteponen el «no» como punto de partida
y que se quieren acercar para intentar mejorar estas cuentas
públicas.


Por cierto, señor Marí, ¿en qué somos
despilfarradores? Usted acaba de decir que somos los campeones de los
planes de austeridad. ¿Es eso o somos despilfarradores? ¿En qué quedamos?
¿Gastamos mucho dinero o nos dedicamos a hacer recortes? Porque las dos
cosas al mismo tiempo no es posible. (Denegaciones del señor Marí
Bosó.— Protestas).


La señora PRESIDENTA: Por favor, senador
Marí...


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Probablemente es que a usted le ha molestado, señor Marí, lo
que es una evidencia, y es que ustedes utilizaron los recortes como
coartada para desmantelar el Estado del bienestar. (Fuertes y prolongados
aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Eso es lo
que opino y es lo que digo. Ahí están las cifras y ahí está la
hemeroteca.


Utilicen ustedes los hashtag que quieran; el
Gobierno no va a renunciar a llegar a acuerdos en asuntos necesarios para
el país con el resto de fuerzas políticas, como son estos presupuestos o
la Ley de Educación, agotando las posibilidades del diálogo más allá de
la situación en la que cada uno pensemos. Creo que solo con esa visión
tan pequeña, tan reduccionista de la política y de la democracia se puede
criticar el ejercicio de diálogo obligado que todas las formaciones
políticas, aquí y en otras administraciones, tenemos que practicar una
vez que los ciudadanos han elegido, y lo han hecho libremente, una
pluralidad o una fragmentación del arco parlamentario en sus diferentes
situaciones.


Yo creo, señor Maroto, que este tipo de
discurso no les lleva a ninguna parte. Usted también ha hecho mención
aquí a la ley de educación, y créanme que escuché con atención
—creo que fue ayer— al señor Casado, y yo no salgo de mi
asombro, señor Maroto. ¿Es verdad que están ustedes proponiendo ahora una
suerte de insumisión frente a la ley de educación en el conjunto del
territorio y en las comunidades donde gobiernan? ¿Están ustedes llamando
al no cumplimiento de la ley, a una insumisión y a un fraude de ley?
(Aplausos). Porque hay que tener cuidado con estas cuestiones, porque
luego le falta a uno legitimidad para criticar comportamientos de otros
líderes políticos que se saltan la ley o que directamente no la respetan;
es algo que todos criticamos y no podemos luego reproducir esos
comportamientos, porque es algo del todo incoherente.


Señorías, yo creo que el ruido que ustedes
hacen ni crea confianza ni sirve para salir de la crisis ni alivia la
coyuntura en la que nos encontramos los ciudadanos. Frente al ruido,
presupuestos; frente a la bronca que ustedes preconizan, propuestas;
frente al veto, diálogo y partidas concretas que se puedan discutir, para
que, en definitiva, que cada uno nos veamos reflejados en este proyecto
de presupuestos.


Como habla usted del desempleo, yo solamente le
voy a dar un dato, señor Maroto, y se lo traslado para que ustedes tomen
nota. Dice usted que los Gobiernos socialistas son poco menos que los
campeones del desempleo. (Varios señores senadores en los escaños del
Grupo Parlamentario Popular en el Senado: ¡Sí!). ¿Sabe usted quién es el
campeón del desempleo en la historia de la democracia? Yo se lo voy a
decir: el Gobierno del Partido Popular, primer trimestre del año 2013,
cuando el paro llegó al 26,9 %. (Aplausos.— Fuertes protestas). La
cifra más alta de desempleo de nuestra historia se produjo a manos de un
Gobierno del Partido Popular. (Aplausos.— Varios señores senadores
del Grupo Parlamentario Popular en el Senado: ¡Bravo!).


La señora PRESIDENTA: No interrumpan al orador,
por favor.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Señor Floriano, usted se toma a risa lo que estamos diciendo
en esta tribuna.


Y diré más... (Protestas). No me van a
intimidar, ya lo saben, pero tendremos que emplear más tiempo, lo siento
por sus señorías, porque voy a decir lo que quiero decir.
(Aplausos.— Protestas).


La señora PRESIDENTA: Señorías, silencio, por
favor; no interrumpan a la oradora.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): Dicen ustedes: Claro, primer trimestre del año 2013, que si
Zapatero, que si Rajoy... ¿Saben ustedes cuánto tiempo hacía que
gobernaba el señor Rajoy?, ¿lo saben ustedes, señorías? (El señor Marí
Bosó pronuncia palabras que no se perciben). Señor Marí, no le escucho;
da igual que haga usted el esfuerzo, porque no le escucho.


Ustedes tienen esta cuestión en su haber.
(Protestas). Sí, sí, le sigo diciendo, señoría...


La señora PRESIDENTA: No interactúen, por
favor.


Continúe con su discurso, señora ministra.
(Rumores).


Señorías, por favor, no interrumpamos el
debate; permitamos que se desarrolle de manera normal.


La señora MINISTRA DE HACIENDA (Montero
Cuadrado): No solamente era la cifra más alta de desempleo, sino que
ustedes empujaron al 50 % de los trabajadores a un empleo parcial sin
quererlo; el 60 % de los parados se quedó sin prestación quedando
excluidos de las prestaciones sociales y duplicaron el número de jóvenes
que tenían que emigrar cada año. (Fuertes protestas). Nosotros no vamos a
admitir lecciones del Partido Popular en materia de empleo.


Señoría, también habla usted de deuda, otro de
los mantras que ustedes repiten. La deuda pública aumentó durante su
Gobierno en 29 puntos porcentuales; el incremento más alto que ha habido
en la serie histórica. Ustedes dejaron que la Seguridad Social acumulara
déficit sobre déficit, y multiplicaron por 18 el déficit de la Seguridad
Social; vaciaron la hucha de las pensiones (Denegaciones del señor Maroto
Aranzábal) ¿Quiere que continúe, señor Maroto, con la herencia que dejó
el Partido Popular?, ¿sabe cuántos años cumplió el Gobierno de Rajoy con
el objetivo de déficit? Ninguno, señor Maroto.


Y si quiere le voy dando más datos. ¿Sabe cuál
fue la desviación media anual de los presupuestos de Rajoy? Se lo voy a
decir: 5400 millones de menos de recaudación real de la previsión que
hacían: algunos años, hasta 8000 millones de euros. Por tanto, señorías,
creo que con estos datos está perfectamente puesto de manifiesto qué
hacen ustedes cuando están al frente del país. Porque si quieren les
hablo del rescate de las autopistas, de la amnistía fiscal, de facilitar
el despido, de recortar el gasto en dependencia, etcétera.
(Aplausos).


Hablan ustedes, respecto de este presupuesto,
de infierno fiscal. Lo ha vuelto a decir, creo, el señor Marí; no ha sido
usted, señor Maroto, pero creo que el señor Marí sí lo ha dicho. Para
ustedes, y en cuanto al IRPF, ¿a partir de 300 000 euros de renta es
clase media y trabajadora, señor Marí? (Denegaciones del señor Marí
Bosó). Porque son el 0,07 % de los contribuyentes. ¿Es eso clase media y
trabajadora? No. (Denegaciones del señor Marí Bosó). Elevar el patrimonio
a 2550 contribuyentes que tienen más de 10 millones de euros, ¿eso es
clase media y trabajadora, señor Marí? Tampoco. (Denegaciones del señor
Marí Bosó). La exención de plusvalía y dividendos en sociedades del 0,1 %
de las empresas, ¿también son pequeña y media empresa o son grandes
grupos? Tampoco. (Denegaciones del señor Marí Bosó). Es decir, de las
principales medidas que contempla el presupuesto... (Protestas). Esperen,
señorías, esperen. (Una señora senadora del Grupo Parlamentario Popular
en el Senado muestra un papel a la Cámara). Señoría, si usted pretende
que yo lea el papel que tiene usted ahí enfrente, ya le digo que, desde
luego, no lo veo.


En relación con los planes de pensiones,
señoría, ¿ha leído usted el informe de la Airef respecto a las
aportaciones al plan de pensiones? ¿Ha leído usted que la medida fiscal
es regresiva y que había que ajustarla para que fuera más progresiva? ¿O
se refiere a las primas de seguros, un impuesto que no se toca desde
hace 32 años, señoría?, ¿a eso se refiere usted, donde seguimos estando,
a pesar del ajuste, por debajo de la media europea? (El señor Maroto
Aranzábal pronuncia palabras que no se perciben) Ah, sí, claro, los de
Europa están todos en un infierno fiscal para las clases media y
trabajadora, según el señor Maroto. (Aplausos).


Señorías, termino trasladándoles que habrá
ocasión de poder debatir en profundidad algunas de las otras cuestiones a
lo largo de los próximos meses, y entre ellas, la parte de armonización
fiscal a la que creo que ha hecho referencia el señor Maroto. Por cierto,
que la mayoría de los presidentes autonómicos han defendido siempre la
armonización fiscal. El señor Moreno Bonilla, que ahora por la consigna
del partido se separa, la votó; votó físicamente en el Parlamento andaluz
la armonización fiscal para el conjunto del territorio. (Aplausos).


Salgan de ahí, recapaciten, piensen en el
interés común, sean verdaderamente patriotas, arrimen el hombro, creen
oportunidades para nuestro país y vuelvan a la senda de partido de
Gobierno. Señorías, vuelvan a esa senda e intenten aportar cada uno lo
mejor que tenga para que los ciudadanos se puedan beneficiar de la
utilidad de la política.


Señora Goñi, agradezco que haya trasladado su
preocupación por los daños que la pandemia está provocando en el conjunto
del tejido productivo. No veo a la señora Goñi, creo que no está, en
cualquier caso hay otros representantes de Ciudadanos a quienes me
dirijo. Le decía la señora Goñi que agradecía la preocupación por la
situación que estamos viviendo en nuestro país; lo que ocurre es que a
continuación su grupo vuelve a plantear un veto a estas cuentas públicas,
cosa que no se entiende; es incoherente lo que ustedes trasladan respecto
de lo que luego hacen. Es verdad, señoría, y se lo quería comentar a la
señora Goñi —el portavoz del Grupo Socialista, el señor Gil,
también se lo ha dicho y yo quiero resaltarlo—, que me parece
difícil de entender que veten ahora unos presupuestos que, según sus
palabras, contenían las líneas naranjas para permitir que Ciudadanos los
apoyaran. Así definieron ustedes, y yo lo confirmo, el presupuesto
contenía elementos que para ustedes eran importantes a la hora de apoyar
estas cuentas públicas. Así lo reconocieron. Y recordarán ustedes que yo
le trasladé a la señora Arrimadas que comprendía la situación en la que
se encontraba su grupo político, pero le pedía valentía.


Ustedes quedan diluidos en la foto de Colón,
señorías. Ustedes, al lado del Partido Popular y de Vox, no representan
nada. Tienen ustedes que cambiar el sentido de esa política, y han tenido
una oportunidad de oro para apoyar estos presupuestos porque contenían
muchas de las exigencias que ustedes previamente habían trasladado a este
Gobierno. Por tanto, no se explica que ustedes —salvo por razones
de pura táctica política de cara a las elecciones en Cataluña—,
finalmente, no hayan decidido apoyar este proyecto de presupuestos. No me
sirve su explicación de que era porque estos presupuestos los apoyaban
unos partidos políticos y no otros. ¿Sabe por qué no me sirve, señoría?
Porque ustedes han votado las enmiendas de Esquerra Republicana de
Catalunya, las enmiendas de Bildu y la enmiendas de Junts per Catalunya.
Entonces, aunque usted mismo me está diciendo —disculpe, senador,
porque no sé cómo se llama— que no importa, ¡cómo no importará si
se trata de unas cuentas que permiten la recuperación económica y social
del conjunto de un país! (Aplausos). Lo que pasa es que han tenido miedo
de dar ese salto por las elecciones en Cataluña, pero créame que le
seguimos tendiendo la mano. Consideramos que hay muchos proyectos de ley,
muchas iniciativas legislativas en las que perfectamente podemos ponernos
de acuerdo. Lo hemos intentado, y yo se lo agradezco, en este proyecto de
presupuestos. Tienen ustedes que reconocer, al menos, que el Gobierno ha
hecho un esfuerzo por intentar englobarlos dentro de los grupos que
apoyaban estas cuentas públicas. En esta ocasión no ha podido ser, pero
yo espero, y así lo deseo, que para el futuro sí lo podamos
desarrollar.


Hay unas partidas que contemplaban sectores que
para ustedes eran prioritarios, y para nosotros también, como las pymes o
el sector de los autónomos. En cuanto a política fiscal, muchas de las
cuestiones que ustedes planteaban se han incorporado en este proyecto de
presupuestos. Créame, señoría, que me parece una pena que, al final, no
haya podido hacerse realidad, pero ya tendremos ocasión de ponernos de
acuerdo en otro momento.


Lo que sí le digo es que, mientras tanto, es
importante que los presupuestos que ustedes apoyen o elaboren de la mano
del Partido Popular en las comunidades autónomas donde gobiernan sean
presupuestos que vayan en la línea de esa recuperación que perseguimos en
nuestro país. Señoría, curiosamente, muchas veces se les ve el plumero,
pues les resulta mucho más fácil a ustedes renunciar a apoyar unas
cuentas públicas para el conjunto del país que tener mal rollo con el
Partido Popular en aquellos lugares donde gobiernan. Y créame que lamento
que se haya planteado así esa prioridad.


Para cerrar mi intervención respecto a
Ciudadanos, quiero decirle que espero que también ustedes estén atentos a
los cumplimientos legales en las comunidades autónomas donde gobiernan.
Ya han escuchado lo que ha dicho el Partido Popular respecto a la puesta
en marcha de la ley de educación. Yo confío en que Ciudadanos, que
gobierna en esas comunidades autónomas —como siempre le ha pedido a
los partidos independentistas en Cataluña—, respete la ley, sean
capaces de aceptar el sentido de la mayoría y, por tanto, (Aplausos), la
ley de educación —si finalmente sale aprobada— no encuentre
una suerte de insumisión en las comunidades que ustedes sostienen.
Seguiremos esperándolo.


Señor Cleries, sinceramente, lamento mucho que
su partido no haya apoyado estas cuentas públicas ni haya tenido
intención de hacerlo siquiera desde el primer día. Usted ha hecho todo un
alegato diciendo que no pasa nada. No pasa nada, pero ustedes vuelven a
unas cuentas del señor Rajoy. No pasa nada, según usted, pero ustedes
vuelven a hacer de la precariedad, de la austeridad a ultranza y,
también, de la asfixia a las comunidades autónomas un presupuesto
preferido frente al presupuesto que hoy se discute en esta sesión. Porque
el presupuesto, sin duda, mejora la vida de los catalanes y de las
catalanas, eso no lo puede usted negar, ahí están las cifras que lo ponen
de manifiesto. Ustedes pretenden prolongar las cuentas del señor Montoro,
que eran malas para Cataluña —para casi todas partes del
territorio, pero también para Cataluña—, y, por tanto, que los
pensionistas no vean actualizadas sus pensiones, que no haya más becas
para el estudio, que no haya un incremento de las transferencias a la
Generalitat, que no tengamos una mayor política de vivienda, etcétera. A
eso es a lo que usted vota que no, señor Cleries, usted no está votando
ninguna otra cuestión en este proyecto de ley; está votando que no,
realmente, a mejorar la vida de los catalanes y de las catalanas. Y yo ya
lo dije en otro momento en que tuvimos ocasión de discutir: ¿por qué no
han aparcado ustedes todo lo que supone la posición estratégica de cada
uno de cara a las elecciones de Cataluña, y, por una vez, no han pensado
que, sea cual sea el resultado de esas elecciones, será bueno que quien
gobierne tenga mejores transferencias, tenga inversión para Cataluña
—y ahora le explicaré por qué—, respetando el Estatuto de
Autonomía para Cataluña, y tenga partidas sociales que les permitan vivir
mejor, o, por lo menos, sortear estos momentos de crisis? Fíjese, señor
Cleries: gobierne quien gobierne en Cataluña necesita estos presupuestos.
(Aplausos). No se trata de una ensoñación, nada tiene que ver esto con
las legítimas posiciones que cada uno defendemos. Tiene que ver con que
la gente tenga mejores oportunidades, y ustedes, una vez más, han
antepuesto el interés partidista y han dicho que no solo y exclusivamente
pensando que con esa posición les iría mejor en las elecciones catalanas.
¿Y sabe qué, señor Cleries? Creo que se equivoca, y creo que los
ciudadanos así se lo expresarán en las próximas elecciones en las urnas.
(Aplausos). Porque, ¿cómo no va a pasar nada por votar la continuidad de
los presupuestos de Rajoy? ¿Cómo no va a pasar nada porque las cuentas
contemplen 200 millones del acuerdo al que se llegó en comisión bilateral
para el cumplimiento de la sentencia de la Sala tercera del Tribunal
Supremo? ¿Da igual, no pasa nada porque Cataluña tenga 200 millones más
o 200 millones menos? ¿No pasa nada porque en Cataluña haya 870 millones
de euros para el impulso al cumplimiento del estatuto y que la inversión
territorializada, si contempla usted las partidas del capítulo 7
—que tendrían que haber ido en el capítulo 6, pero ustedes, la
Generalitat, no porque yo quisiera, así lo decidieron—, sean
justamente de esos 200 millones que acabo de comentar? Si usted lo suma,
señoría, verá que la inversión territorializada en Cataluña está por
encima del 18 %. Por tanto, es la primera vez, señor Cleries, que se
cumple con el Estatuto de Cataluña. (Aplausos).


Por eso, más allá del discurso que usted ha
hecho en la tribuna, no puedo pasar por alto alguna afirmación. En este
país no es un delito ser independentista, señor Cleries. En este país no
es un delito ser independentista. ¿Sabe lo que es un delito en este país?
Saltarse la ley. (Aplausos). Y quién se salta la ley, sea quien sea,
tiene que responder ante los tribunales de justicia. (Aplausos). Por
tanto, me hubiera gustado, insisto, que usted hubiera apreciado el
esfuerzo que hacen estas cuentas por Cataluña, pero lo fundamental es que
ustedes también tendrán que rendir cuentas de esta situación, pues
parece, señor Cleries, que ustedes vivían mejor con el señor Rajoy.






Parece, señor Cleries, que ustedes se han abonado a la polarización, se
han abonado a esa política de contraste y que, para los intereses
partidistas de Junts per Catalunya, ustedes hubieran preferido que fueran
el señor Rajoy y el señor Montoro los que siguieran estando en el
Gobierno de España para así mantener el agravio. Aunque eso suponga un
freno al avance, al progreso y a la mejora de la situación en Cataluña,
ustedes están prefiriendo esa posición partidista, miope y cortoplacista
que creo, señor Cleries, que no va a conducir a ninguna parte, pero,
sobre todo, a nada bueno para Cataluña. (Aplausos).


Respecto a la intervención del señor Clavijo
—para seguir el orden en que ustedes han intervenido—, si
ustedes no apoyan estos presupuestos es que ustedes no están en la
defensa de Canarias. Se lo digo como lo siento. (Aplausos). Yo pienso,
señor Clavijo, que se está equivocando en su posición política. Usted
hace un relato que se aleja totalmente de la realidad. Usted se imagina
un escenario que nada tiene que ver con la realidad, y por eso le voy a
decir lo único que le quiero decir, y es que es rotundamente falso que
este proyecto de presupuestos no respete el fuero canario. ¡Es falso!
Respeta, mejora el fuero canario y dota presupuestariamente partidas,
señor Clavijo —y me lo tiene que reconocer—, que nunca
estuvieron dotadas. Es la primera vez que se dotan esas partidas
presupuestarias. Y desde ese aprecio mutuo que usted comentaba —y
que nos tenemos—, le digo, señoría, que, realmente, flaco favor le
hace usted a su comunidad autónoma negando el pan y la sal que sí
contempla este proyecto de presupuestos tanto en el fuero como en las
partidas que se dirigen a mejorar su financiación.


Solamente le voy a dar algunos datos, para no
alargarme. Ha hablado usted de las subvenciones al transporte
marítimo-aéreo: 553 millones de euros, señoría. Ha hablado usted del
transporte urbano y metropolitano: 48 millones de euros. Ha hablado usted
del Plan integral de empleo para Canarias: 42 millones de euros, que creo
que usted no había visto. Son 200 millones del convenio de carreteras,
que usted, cuando estaba en el Gobierno, no quiso materializar —se
acordará, señor Clavijo—. Son 15 millones en ayudas para la
agricultura, 8 millones para el agua de uso agrícola, 20 millones para el
convenio de rehabilitación. ¡Claro que se cumple con el Estatuto de
Autonomía de Canarias y con el REF! De hecho, señoría, tanto se cumple
que han sido otras formaciones políticas, procedentes también de
Canarias, quienes en el proceso de enmiendas han mejorado algunas de esas
partidas, y tengo que decirle, señor Clavijo, que hemos echado de menos a
su formación política. Yo creí que ustedes habían aprendido que la
utilidad de la política consistía justamente en intentar ejercer esa
influencia para arrimar recursos a los intereses legítimos que ustedes
defienden. Pero, por la razón que sea, que se me escapa, señor Clavijo,
desde que se produjo la moción de censura ustedes se han abonado a votar
permanentemente al lado del Partido Popular, al lado de la derecha, y
difícilmente podemos llegar con ustedes a un grado de entendimiento o de
diálogo.


Todos los elementos que le acabo de comentar
los puede usted comprobar, pero déjeme que le diga una cosa respecto a
algo que ha dicho usted en sus intervenciones a lo largo de estos últimos
días en Canarias, y hoy ha repetido aquí, y que tiene que ver con las
tasas portuarias. Ustedes han hecho comentarios sobre la reducción de las
bonificaciones de las tasas portuarias, y probablemente se le ha olvidado
a usted que la propuesta que llegó al Gobierno de España, señor Clavijo,
es del Consejo de la Autoridad Portuaria de Tenerife. (Denegaciones del
señor Clavijo Batlle). Sí, señor Clavijo, yo no le voy a mentir. Lo puede
usted comprobar, ¡lo puede usted comprobar! (Protestas.— Rumores).
Simplemente, lo puede usted comprobar para ver que esto es así y que es
correcto.


¿Sabe usted quién se sienta en el Consejo de la
Autoridad Portuaria de Tenerife? El Partido Popular. ¿Y sabe también
quién se sienta? El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, ayuntamiento
gobernado por ustedes. (Aplausos). Señor Clavijo, ustedes, Coalición
Canaria, han votado a favor y han propuesto a este Gobierno la reducción
de las bonificaciones de la tasas aeroportuarias, y este Gobierno lo que
ha hecho es tomar nota de una posición unánime que tuvieron ustedes
respecto a esta cuestión. ¿A qué viene ahora que ustedes lo esgriman como
un elemento de desprestigio o de intentar reprochárselo a este Gobierno?
Yo le recomiendo, señoría, que se lea las razones de por qué el Consejo
de la Autoridad Portuaria lo recomendó, porque se trata de una serie de
razones técnicas para incrementar el negocio y el transporte en la zona.
Así que no utilicemos los argumentos de manera maniquea, porque creo que
no se sostienen.


Al señor González-Robatto, del Grupo Mixto,
quiero decirle —y lo hago con todo respeto— que su
intervención en este debate me ha parecido un insulto a la inteligencia
de los españoles a los que usted dice representar. (Aplausos). Usted ha
hecho una relación de personas de grupos políticos, algunos de los cuales
aparecen en una lista, y otros no aparecen, y quiero decirle que yo
quiero estar en la lista que ustedes critican. (Aplausos). Prefiero estar
en la lista de los grupos que ustedes critican, porque hay pocas
posibilidades de que ustedes y nosotros nos pongamos de acuerdo. Se lo he
dicho a usted —no a usted, sino a los diferentes líderes
políticos—, siempre con respeto, que a mí me parece que la
aportación que ustedes hacen a la vida política no es saludable, es
dañina; creo que no beneficia al interés general de los ciudadanos, creo
que intentan degradar el debate político y que practican una suerte de
antipolítica —probablemente un precedente del populismo—, y a
mí, señoría, no me gustan las derivas que se conducen por ese camino. Por
eso, hay pocos elementos en los que considero que pudiéramos coincidir,
ni en las cuentas ni en los ingresos.


Mucha parte de su intervención desde esta
tribuna han sido consignas y mentiras, y ha dicho cosas que no se parecen
para nada a la realidad, y tienen que tener cuidado, señores de Vox,
porque a veces, con su discurso ambiguo o no tan ambiguo, levantan una
suerte de soflamas en algunas personas donde ya se pierde el control de
la palabra y se dicen cosas tan graves como las que hemos visto y hemos
escuchado en algunos chats de los que hemos tenido conocimiento el
conjunto de la opinión política. Por cierto, ustedes llamaron a estas
personas que componían estos chats su gente; personas que, incluso,
hablaban de que hubiera en este país una situación que no quiero ni
referirla en esta tribuna y en esta Cámara. (Aplausos). Por tanto,
superen las etapas negras que ha vivido este país, porque no queremos
volver a ellas para nada, señoría. Sean capaces, por lo menos, de
intentar guardar la apariencia y de no trasladar cuestiones que realmente
son ofensivas para las personas que les estamos escuchando.


Usted ha dicho desde esta tribuna que todos los
que pertenecemos al espectro de la izquierda somos flojos, perezosos, o
algo así. Solo quiero recordarle que ustedes no han presentado ni una
sola enmienda al proyecto de presupuestos en el Congreso de los Diputados
(Aplausos). Que cada uno hable de lo que crea, pero flaco favor le hacen
ustedes a la monarquía parlamentaria. No la defiendan ustedes tanto, no
lo quieran tanto, porque, a veces, ese cariño hace daño, señoría. Por
tanto, no patrimonialicen ni quieran apropiarse de los símbolos y de las
instituciones que pertenecen al conjunto de los españoles.


Señor Sánchez-Garnica, agradezco la posición
que ha manifestado en la tribuna. Evidentemente, respeto que, desde la
oposición parcial de cada una de las formaciones políticas, probablemente
el proyecto de presupuestos que cada uno haríamos no se parecería o se
parecería relativamente al que se presenta. Dicho esto, quiero decir que
hemos intentado buscar el equilibrio territorial, en general, pero le
hemos prestado especial atención a Aragón, donde, en total, hay una
inversión de 534,4 millones de euros; una inversión del 4,2 % sobre el
total regionalizado. Por tanto, se trata de un porcentaje superior a la
contribución al PIB nacional o a la participación en la población
nacional.


También es importante destacar que Aragón va a
recibir una inversión por habitante un 48 % por encima de la media del
resto de los ciudadanos. Quiero decirle, señoría, que, por supuesto,
vamos a seguir trabajando juntos. Tenemos retos muy importantes por
delante en una comunidad autónoma que tiene que afrontar situaciones
complejas, y no solo las comunes del conjunto de las administraciones
territoriales, sino también el reto de la despoblación y todas aquellas
que tienen que ver con la España vaciada que, como usted sabe, también es
para nosotros una prioridad de cara a estos próximos años.


Especial interés tiene para nosotros la
inserción de jóvenes en el mercado laboral. Se trata de un elemento que
nos preocupa especialmente en estas zonas que tienen menor atractivo para
este grupo de personas. Ojalá que, de la mano del plan de recuperación,
donde se encuentran importantes partidas, encontremos esos estímulos que
permitan fijar población al territorio y, sobre todo, con motivo del
teletrabajo, con motivo de las oportunidades que nos dan la tecnologías,
ojalá muchas personas decidan ir a vivir a lugares que tradicionalmente
han estado despoblados, porque realmente consiguiéramos tener allí una
buena conectividad que permita que los ciudadanos puedan vivir con acceso
a los servicios públicos, acceso a internet y, por tanto, a una mejor
calidad de vida.


En ello, señoría, seguro que seguiremos
trabajando.


Señor Catalán, poco voy a comentar, por no
decir nada (Risas), de la intervención que usted ha hecho en la tribuna.
Pasó lo mismo en el Congreso de los Diputados con la intervención de su
compañero. Yo le quiero decir, con todo el respeto, que le escucho como
si usted fuera el brazo derecho de Vox. Así lo veo, porque usted lleva a
la hipérbole el mismo discurso que escuchamos aquí de los representantes
de Vox, pero multiplicado por diez. Solo le digo que ustedes llevan el
nombre de una comunidad autónoma dentro de sus propias siglas. Entiendo
que quieren perseguir lo mejor para Navarra, ya que son Unión del Pueblo
Navarro, por lo que me sorprende la crítica tan feroz que hace usted a
otros partidos que en esta tribuna defienden también lo que consideran lo
mejor para sus respectivas comunidades autónomas. Eso no casa, señor
Catalán. No casa que ustedes defiendan solo y exclusivamente como partido
los intereses de Navarra y se atrevan a criticar de una forma tan
despiadada al resto de formaciones políticas aquí presentes que también
defienden, dentro de sus siglas, a su respectiva comunidad autónoma.
(Aplausos).


Señor Fernández Rubiño, quiero agradecerle
tanto el tono como el espíritu constructivo que ha mostrado el grupo de
Más Madrid como la contribución en los debates previos que hemos tenido y
en las propias enmiendas, lo que sin duda ha permitido mejorar el
proyecto de presupuestos que traíamos a esta Cámara. Seguiremos en esa
misma línea. Yo creo que tenemos una hoja de ruta bastante común, aunque
algunos elementos nos separan, y ustedes lo saben porque lo discutimos
con cierta asiduidad. Pero, señoría, tenga por seguro el compromiso firme
de este Gobierno por mejorar las condiciones de vida de todos los
ciudadanos, por intentar una redistribución de la riqueza que permita que
las personas tengan la oportunidad de desarrollar su proyecto vital más
allá de su nacimiento o de su lugar de residencia. Y también le digo,
señoría, que seguiremos trabajando para que este Gobierno progresista sea
capaz de revertir algunas de las políticas que se practicaron por
ejecutivos anteriores, y ojalá seamos capaces de salir lo antes posible
de esta situación de pandemia sanitaria y, por tanto, también de la
económica, para que podamos recuperar la senda de crecimiento que
habíamos planteado en nuestro país.


Solo me resta decirle que dos de las cuestiones
que para ustedes eran primordiales se contemplan en el proyecto de
presupuestos, entre ellas, una apuesta firme por los jóvenes, por sus
oportunidades, con el Plan de empleo joven, dotado con 600 millones de
euros; y el mayor acceso a la vivienda, una política que sube un 25 %.
Otra segunda partida de gasto que también nos trasladaron como
prioritaria para ustedes es la ciencia, donde compartimos que sin ciencia
no hay futuro. A este respecto, quiero significar que el presupuesto sube
un 59 % en I+D+i, hasta alcanzar los 3232 millones. Seguro que esto nos
permitirá, dadas las ideas compartidas con su formación política, avanzar
en la estabilización de la carrera científica; apoyar proyectos
empresariales innovadores, reforzando la investigación sanitaria, e
incrementar los recursos para los organismos públicos de investigación.
Estas habían sido peticiones formuladas por su formación política.


Señor Vidal Matas, el contenido de su
intervención, como suele ser habitual, ha sido duro con estos
presupuestos, pero yo soy más, como usted decía, de Popeye que del otro
personaje. Probablemente por mi edad soy más de esa esa época, de esa
situación, y por tanto, señoría, leo las cifras que vienen en el proyecto
de presupuestos con esa mirada realmente honesta para poder ver qué hay
detrás de cada una de esas cantidades. Para las islas Baleares, el
proyecto de presupuestos supone un total de 3527 millones de euros; una
inversión para Baleares de 507,9 millones de euros, lo que significa
un 16,8 % más que el año anterior. Se trata de una cifra que incluye una
inversión real de 201,64 millones de euros, un 32 % más de la que se
reflejó en el proyecto fallido de presupuesto 2019. En definitiva, unas
cuantías que le voy a decir lo que representan. La inversión en las islas
Baleares representa un 2,5 % del total de la inversión regionalizable,
por encima del porcentaje que representa el criterio de población de
Baleares en el conjunto de España. La inversión por habitante en las
islas Baleares asciende a 175,4 euros. ¿Sabe a cuánto asciende la media
nacional? A 170,9 euros. Por tanto, señoría, están ustedes por encima de
la inversión media por habitante. Son cifras, señor Vidal. Puede usted
hacer la cuenta igual que la hago yo.


Junto a ello, la comunidad recibe 38,6 millones
de euros adicionales vía transferencia de capital y, además, 269 millones
para subvención al transporte, un 82 % más que en el año 2018. Las
cuentas presentan la mayor inversión en gasto social de la historia:
ingreso mínimo vital, pensiones, igualdad de género y lucha contra la
desigualdad. Además, Baleares se beneficia del incremento de 600 millones
de dependencia, lo que representará en torno a una subida de un 2 %,
unos 2354 millones de euros. Asimismo, se plantea un incremento de las
infraestructuras del factor de insularidad que supera los 269 millones,
etcétera. En definitiva, señoría, hay una serie de inversiones en el
proyecto de presupuestos, aunque no sé si usted las ha localizado. Si
usted quiere se lo trasladamos, porque estas cifras y estos números, como
usted entenderá, no me los voy a inventar. Están presentes en el proyecto
de presupuestos, un proyecto en el que realmente nosotros cumplimos las
leyes y las previsiones que ahí se plantean. (Denegaciones del señor
Vidal Matas). Usted dice que no, pero ahí están las cifras. En cuanto a
lo que usted decía sobre la inversión media en Baleares por encima de la
de España, señor Vidal, se cumple con este proyecto de presupuestos. Por
tanto, no hay ninguna justificación para que ustedes no vayan a apoyar o
para que no lo hagan de buena gana estas cuentas públicas que en este
momento estamos discutiendo.


Señora Etxano, como a todos los grupos que han
apoyado el proyecto de presupuestos, quiero darle las gracias, pero a
ustedes, quizás, con un carácter diferencial —lo he señalado en
multitud de ocasiones y también lo quiero repetir hoy—. Para este
Gobierno, el Partido Nacionalista Vasco es un socio prioritario y, por
tanto, siempre que vamos a tramitar un proyecto, alguna iniciativa que
sea importante y que tenga repercusión, son los primeros en ser llamados
para discutir el alcance y para modular también algunas de las
cuestiones, incluso cuando se producen desencuentros o partidas con las
que no estamos cien por cien de acuerdo. Algo ha ocurrido, una vez
pactado este proyecto de presupuestos, con alguna de las partidas, en
concreto con el impuesto al diésel, que tras la enmienda que ustedes
presentaron se mejoró.


Igualmente ocurrió con las pretensiones que
tenía el Gobierno con otras figuras fiscales, en las que el diálogo con
ustedes hizo que no aparecieran en el proyecto de presupuestos. Sus
portavoces lo han explicado a lo largo de este período.


Señoría, las cuentas públicas son una buena
noticia para el País Vasco. El espíritu de cogobernanza que atraviesa el
conjunto de las formaciones políticas en esta Cámara —espero—
y el proyecto de presupuestos es una garantía para que podamos trabajar
conjuntamente los fondos europeos y la concertación de la figuras
tributarias, que han sido ya aprobadas y que todavía están pendientes de
concertar con el País Vasco. Seguiremos trabajando en el conjunto de
materias. Se ha avanzado en algunas, pero todavía hay pendientes
otras.


Por tanto, señoría, tenga la absoluta seguridad
de lealtad por parte del Gobierno con su formación. Seguiremos abordando
todos los demás elementos que no fue posible incorporar al proyecto de
presupuestos —inversiones y más cuantías—, pero que nos
hicieron llegar para tenerlos en consideración en el futuro. Como
siempre, a pesar de las diferencias, muchas gracias por el entendimiento,
por la actitud y por el tono constructivo con el que siempre ustedes
encaran la negociación.


Señor Picornell, también quiero reiterar, una
vez más, el agradecimiento del Ejecutivo por la predisposición y la
responsabilidad que ha mostrado su grupo en la tramitación de los
Presupuestos Generales del Estado.


Es evidente que las cuentas son buenas para
Cataluña. Ustedes las han mejorado en el mismo trámite, y lo que es bueno
para Cataluña, evidentemente, tiene que ser apoyado por aquellos que
defienden los intereses de esta comunidad autónoma. Usted lo ha referido
en esta tribuna con absoluto respeto. Lo que está en juego en este
momento con estos presupuestos es la posibilidad de avance de nuestro
país, la posibilidad de seguir haciendo del diálogo la única herramienta
posible para llegar a soluciones consensuadas en el marco de problemas,
de conflictos que llevamos ya demasiado tiempo viviendo. Tenemos que ser
capaces de superar el hastío que algunos ciudadanos tienen respecto a la
parálisis que sufren algunos proyectos. Es verdad, señor Picornell, que
este año hemos tenido la eventualidad de una pandemia que ha concentrado
el cien por cien del tiempo tanto de la Generalitat como el del propio
Gobierno de España, y también el de la mayoría de las formaciones
políticas. Seguimos empeñados en esa batalla hasta que tengamos
definitivamente la vacuna, pero vaya por delante nuestro compromiso
indudable por el diálogo, por el debate, por la mesa que constituimos
conjuntamente, para que podamos seguir caminando y avanzando en elementos
y en materias, porque estoy convencida de que podemos encontrar puntos en
común que nos permitan hacer de ese estímulo un avance para el conjunto
de Cataluña. Ojalá que las formaciones nacionalistas contribuyan, en la
medida de sus posibilidades, en la puesta en marcha de este conjunto de
medidas.


Y haciendo hincapié en las cuestiones relativas
a Cataluña, solo quiero decirle que más de 40 000 padres y madres verán
incrementada su prestación de maternidad y
paternidad; 120 000 estudiantes catalanes se van a beneficiar de las
becas; más de 100 000 jóvenes en Cataluña se beneficiarán del Plan de
choque por el empleo joven; vamos a dar cumplimiento a los acuerdos
establecidos en comisión mixta tanto en el establecimiento de recursos
suficientes para la homologación salarial de los Mossos como en las
inversiones que en el año 2008 el Gobierno de España dejó de hacer en
Cataluña. Han incorporado ustedes —lo ha leído aquí, no lo voy a
repetir— mejoras durante la tramitación del presupuesto. Por tanto,
señoría, corroboro que todas las partidas que ha comentado usted son
correctas, las iniciativas que ha trasladado también son correctas,
incluido el levantamiento del control reforzado para Cataluña, que se
decidió ya el viernes pasado en la Comisión Delegada de Asuntos
Económicos.


Por tanto, señor Picornell, diálogo, diálogo y
diálogo, que es lo que nos espera —y ojalá que así sea— en el
futuro. Tenga la absoluta convicción de que este Gobierno está
desarrollando un antes y un después respecto a la financiación
territorial. Desde que llegó, hay una visión distinta sobre el papel que
tienen que jugar las comunidades autónomas. Creo que hemos hecho gala de
ello incorporando tanto los 16 000 millones del año 2020 como los 13 400
que se acordaron con su grupo, aunque no en las enmiendas, sino en las
conversaciones prepresupuestarias, algo importante para la Generalitat y
para los grupos que la apoyan.


Hay otras materias pendientes para el futuro,
pero sin duda hay una distinta visión de cómo tiene que ser el
comportamiento, algo que también han comprobado ustedes durante la
gestión de la pandemia del coronavirus, donde el decreto del estado de
alarma se está administrando por parte de las comunidades autónomas. Por
tanto, son figuras que nos aproximan, elementos que nos hacen, al menos,
tener alguna sintonía para poder abordar cuestiones mucho más importantes
que están en la mesa de diálogo. Ojalá la podamos convocar a la mayor
brevedad posible porque se reúnan las condiciones para ello tanto por
parte de la Generalitat como porque hayan transcurrido las elecciones en
Cataluña, y una vez que los ciudadanos tomen la palabra, espero que el
conjunto de las formaciones políticas lo respeten.


Señora Bideguren, quiero agradecerle también la
disposición mostrada por su grupo. Yo creo que los presupuestos son
imprescindibles para cada joven, para cada familia, y también creo que
hay muchas oportunidades para que podamos construir un país mucho mejor.
Ninguna fuerza política que se denomine de izquierdas puede tener la
tentación de no apoyar estas cuentas públicas. Estas cuentas miran por el
progreso, están pensadas para que seamos capaces de estimular el
crecimiento económico a partir de la intervención pública, a partir del
apoyo que el Plan de recuperación va a aportar al conjunto de los
territorios. El lema de este Ejecutivo ha sido que nadie se quede atrás
y, por tanto, muchas de las iniciativas que hemos presentado en relación
con los ERTE o con la protección de los sectores más desfavorecidos han
contado con el apoyo de su grupo también en el Congreso de los
Diputados.


En definitiva, señoría, sabiendo que nos
separan cuestiones importantísimas de la propia concepción que cada uno
podemos tener de la arquitectura del país, hemos sido capaces de
coincidir en algunas de las partidas del gasto social, como ustedes las
llaman, que eran prioritarias para su formación política, que tienen que
ver con la consolidación del ingreso mínimo vital, con el incremento de
las partidas a la dependencia, con las prestaciones no contributivas, de
protección a la familia, ayudas a la pobreza infantil, ayudas también
para los programas de los menores no acompañados, presupuestos para la
política de pensiones, etcétera. Yo diría que hemos repasado con su
formación política el conjunto de las partidas de gasto que alimentan la
llamada política social, y con independencia de que siempre parecen
insuficientes todos los números que acompañan cada una de las partidas,
entiendo, señorías, que ha sido un esfuerzo valorado por su grupo
parlamentario para que puedan aportar su voto favorable a la tramitación
de este proyecto de presupuestos.


Igualmente podríamos hablar —no me voy a
extender— de política de vivienda o de política educativa. Insisto,
todas ellas son muy importantes para seguir trabajando en un proyecto que
tiene como seña de identidad el progreso, el avance, que seamos una
sociedad inclusiva, que no excluya a aquellos que no piensan como
nosotros, como sí practican o, al menos así preconizan, algunos de los
portavoces que hemos escuchado en el día de hoy en la tribuna.


Termino mi intervención, señorías, dando las
gracias a todas las formaciones —ya hemos sumado alguna más—
a esos once grupos políticos que apoyaban el proyecto de presupuestos.
Quiero dar las gracias especialmente al portavoz del Grupo Socialista, y
también al portavoz de Izquierda Confederal, Unidas Podemos, el soporte
no solamente en términos de apoyo público que dan a estas cuentas, sino
por la motivación, el aliento que suponen las propuestas que
permanentemente hacen llegar a este Gobierno por parte de sus señorías a
través de diferentes formas. Nos conjuramos al principio de esta
legislatura sin saber entonces que íbamos a sufrir la pandemia más
importante que ha atravesado la humanidad en la era moderna. Lo hemos
hecho con esfuerzo, con sacrificio, con diálogo, anteponiendo el interés
general siempre al interés particular que cada uno de nosotros pudiera
tener, a pesar de que algunos han querido reavivar la inestabilidad en el
Gobierno. A este respecto quiero decirles, y es una mala noticia para
algunos, que este Gobierno goza de una excelente salud, que tenemos una
tarea y una hoja de ruta larga por delante (Aplausos), que no nos atenaza
el trabajo ni el esfuerzo que está suponiendo ser capaces de sacar
adelante un proyecto de presupuestos en medio de una pandemia sanitaria y
económica. Tenemos muchas ganas de abordar las transformaciones de este
país, tenemos los instrumentos necesarios y, por tanto, las mejores
condiciones para hacerlo. Espero que el resto de sus señorías, todos los
agentes económicos y sociales, así se sientan invitados, así como los
colectivos que protegen a sectores vulnerables.


En definitiva, se trata de un presupuesto de
país para un proyecto de país donde nadie sobra, donde todas las manos
hacen falta y donde el único interés que perseguimos y que nos une a
todos es buscar el interés general del conjunto de los ciudadanos para
que todos, vivamos donde vivamos, tengamos lo que tengamos, seamos
capaces de aprovechar la oportunidad que nos brinda el futuro y transitar
un presente donde ojalá las vacunas dejen definitivamente atrás esta
pandemia contra la que todos hemos luchado y ojalá, como digo, todas las
aportaciones de este proyecto de presupuestos permitan salir cuanto antes
de esta crisis sanitaria y abordar las profundas transformaciones que
tanta ilusión hacen en nuestro país. Entre todos seremos capaces, seguro
que sí, de conseguirlo.


Muchas gracias. (Fuertes y prolongados
aplausos).


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias,
señoría.


Señorías, finalizado el debate de los vetos al
Proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para el año 2021, se
procederá a continuación a abrir el plazo para emitir el voto telemático.
Cada propuesta de veto se votará separadamente y por su orden de debate.
Para su aprobación se exige la mayoría absoluta.


Se abre el plazo de dos horas para su votación
telemática desde este momento, en que son las dieciocho horas y cuarenta
y un minutos hasta las veinte horas y cuarenta y un minutos.


A continuación, procedemos al debate de las
impugnaciones de las secciones, que se tramitan como propuestas de
veto.


Sección 1, Casa de Su Majestad el Rey,
senadores Cleries i Gonzàlez y Matamala Alsina, del Grupo Parlamentario
Nacionalista. Impugnación número 18.


En el turno a favor, tiene la palabra, por el
Grupo Parlamentario Nacionalista, el senador Cervera Pinart, por un
tiempo de tres minutos. (Rumores).


La señora PRESIDENTA: Señorías, por favor,
silencio porque va a intervenir un orador.


El señor CERVERA PINART: Gracias, presidenta.
Bona tarda, señorías.


Déjenme empezar refiriéndome al agradecimiento
que la ministra Montero ha hecho a los grupos que han sido capaces de
poner, ante todo, los intereses de España, y hacer evidente que las
senadoras y los senadores de Junts per Catalunya no fuimos escogidos para
poner, ante todo, los intereses de España.


Conociendo a los gobiernos de España, lo que
harán buenos o malos estos presupuestos para Cataluña no es lo que
contemplan, sino lo que sean capaces de ejecutar mientras nos continúan
reprimiendo por haber hecho un referéndum que dejó de ser delito en el
Código Penal por una modificación a iniciativa del presidente
Zapatero.


Por esto hemos presentado veto general y veto a
esta sección, a la sección de la Casa del Rey, porque con este
presupuesto el Gobierno aún mantiene y refuerza una institución que para
la gran mayoría de los catalanes es anacrónica, caduca y antidemocrática,
como todas las monarquías del mundo. Pero la española, a nuestro
entender, arrastra connotaciones peores que la mayoría de ellas. En este
sentido, cabe recordar que el emérito fue heredero directo del dictador,
y a lo largo de su trayectoria se ha hecho evidente que sus valores, y
los de algunos miembros de su familia real, distaban de lo exigible en
democracias occidentales.


Tampoco podemos olvidar que la monarquía
española, a diferencia de otras monarquías europeas que se limitan a
ejercer su papel de representación y concordia, se ha dedicado a ser un
actor activo de la política de Estado. Lo hizo el 23F Juan Carlos I, aún
no sabemos con claridad si fue solución o problema, o ambas cosas, y, más
recientemente, en octubre de 2017, lo vivimos con Felipe VI, llamando a
la deslocalización de empresas y con el infame discurso del a por ellos,
un discurso imperdonable para los centenares de miles de catalanes que
vimos la desproporcionada y violenta respuesta de las fuerzas de
seguridad del Estado ante la manifestación pacífica de depositar un voto
en una urna.


En Junts per Catalunya continuamos trabajando
para que Cataluña disponga de un Estado propio en forma de república,
donde nadie, por vía hereditaria, represente a la ciudadanía ni viva de
ella, por lo que ya les anuncio que de forma reiterada presentaremos veto
a esta sección. Entendemos que lo deberíamos hacer todos los partidos
republicanos, con más insistencia en un contexto de crisis, en el que
habría sido un gran ejemplo reducir el presupuesto de la casa del rey a
favor de los ministerios que dan respuesta a las necesidades reales y no
a las reales necesidades.


Gracias.


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias,
señoría.


En el turno en contra, tiene la palabra la
senadora De Pablo Dávila, del Grupo Parlamentario Socialista.


La señora DE PABLO DÁVILA: Gracias,
presidenta.


Señorías, les anticipo que vamos a votar en
contra del veto a la sección primera por tres razones fundamentales,
además de otras muchas que podríamos alegar. En primer lugar, porque
pondrían en riesgo y podrían hacer caer los Presupuestos Generales del
Estado. En segundo lugar, porque me reconocerá, senador Cervera, que un
veto parcial en un tiempo de tres minutos no parece que sea el debate
adecuado para hablar sobre monarquía o república. Y en tercer lugar, y
por supuesto, por una razón de fondo, porque de si lo que habláramos
fuera de la monarquía o de la república, la posición del Grupo
Socialista, la posición del Partido Socialista es muy clara: mantenernos
en el pacto constitucional, sobre todo en estos momentos en que la
situación es especialmente delicada. (Aplausos).


Me van a permitir que les diga que ha sido un
veto parcial irresponsable. En primer lugar, porque si se aprobara este
veto supondría de facto la desaparición de la institución, e incluso si
se devolviera al Congreso podría suponer que decayeran los presupuestos,
y el Grupo Socialista esa irresponsabilidad no la va a cometer; es más,
esa irresponsabilidad se la dejamos a la derecha, se la dejamos a la
derecha tanto española como catalana —hoy se han radiografiado muy
bien quién está con quién—, a quienes hemos oído decir que
prefieren seguir sin presupuestos, o lo que es lo mismo, sin las urgentes
inversiones necesarias para salir de la crisis en la que nos
encontramos.


En segundo lugar, porque la ley no puede
plantear un veto parcial en estos momentos a un debate sobre monarquía o
república. Utilicen ustedes los cauces legales; de todas maneras, un veto
parcial no es la fórmula, pero en esta Cámara se puede discutir de todo,
y no hace falta tampoco, señores del Partido Popular, ni insultar ni
patalear ni hacer una demostración y un ejercicio a una ministra de que
son ustedes una cuadrilla de maleducados. (Aplausos). Por supuesto, se
puede debatir de todo, pero a la hora de votar hay que saber a qué se
está diciendo sí y a qué se está diciendo no, y ustedes, con su veto y
con su voto, están diciendo que no a tener unos presupuestos que son
urgentes, necesarios e imprescindibles para los españoles y, entre ellos,
para los catalanes.


Y en tercer y último lugar, por la razón de
fondo, porque si habláramos de monarquía o república, nuestra posición,
como les hemos señalado, es mantenimiento del pacto constitucional,
puesto que la monarquía parlamentaria se encuentra en el título
preliminar, artículo primero de la Constitución, de la que los
socialistas fuimos artífices y protagonistas esenciales e
imprescindibles. Así que, con independencia de la opinión que cada uno de
nosotros pueda tener en el debate entre monarquía y república, el PSOE,
el Grupo Socialista, como partido con vocación republicana pero leal a
los acuerdos y a los pactos a los que llega, se mantiene en esos pactos
tanto cuando está en el Gobierno, señor Clavijo, como cuando está en la
oposición, en situaciones históricas, como hemos demostrado en los años
muy recientes.


Termino. El PSOE cumple sus acuerdos y, como
decía nuestro añorado compañero, Alfredo Pérez Rubalcaba, esta y no otra
es la forma en la que entendemos los socialistas la responsabilidad y la
coherencia en la acción política en los temas de Estado. Y este tema,
señorías, mal que les pese, lo es. Gracias, presidenta. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 12, Ministerio de Asuntos Exteriores,
Unión Europea y Cooperación. Impugnación número 29, del Grupo
Parlamentario Popular en el Senado.


Tiene la palabra la senadora Rojo Noguera, por
tiempo de cinco minutos.


La señora ROJO NOGUERA: Gracias, presidenta.
Buenas tardes, señorías.


Lo primero que siento es que la ministra ya no
nos pueda acompañar en el resto de esta jornada, porque ahora íbamos a
empezar con esas críticas que dice que no ha escuchado hasta ahora en los
presupuestos, pero eso sí, sección a sección, porque lo que queremos es
que se entienda mucho mejor.


Y empezamos por el veto a la sección del
Ministerio de Asuntos Exteriores que presenta el Grupo Popular, porque en
un entorno de destrucción económica sin precedentes y donde España
necesita unos presupuestos adaptados a las circunstancias que vivimos con
la pandemia y que, a la vez, den crédito y confianza sobre nuestra
economía en Europa y en el mundo, creo que nadie puede creerse la
fantasía de estos nuevos brotes verdes que nos anuncian. Es más, estoy
convencida de que ustedes ni siquiera se los creen, pero el Gobierno
tiene un pesado lastre ideológico que le han exigido sus socios de
investidura y que afecta también a los intereses de nuestro país y a la
política exterior de España, que con la llegada de este Gobierno,
tristemente, ha dejado de ser una política de Estado. Y el Gobierno sí ha
elegido, por mucho que quieran justificarlo, priorizar las cesiones a
Bildu e independentistas a cambio de estos presupuestos. Ustedes no han
aceptado los votos a cambio de nada, sino que han priorizado incluso
olvidándose de las alertas económicas de los diferentes organismos
internacionales que les están avisando de la realidad, porque el Gobierno
tiene un problema con la realidad y, desde luego, después de haber
escuchado a la ministra, no tenemos ninguna duda, aunque ya lo
suponíamos.


Y si sus previsiones de ingresos públicos se
desmoronan, será difícil contar con los recursos necesarios para poder
ejecutar las partidas de gastos consignadas en esta sección, cuyos
presupuestos son un 20 % más caros respecto al ejercicio anterior y
donde, además de los 1800 millones presupuestados para política exterior
y de cooperación, una parte muy importante, en torno a 134 millones,
están asociados al mecanismo de recuperación y resiliencia, es decir, a
esos fondos europeos en relación con los cuales ustedes son incapaces de
reconocer que son gracias a que la Unión Europea ha hecho un esfuerzo tan
importante. Posiblemente la respuesta la dio nuestro portavoz cuando
habló de tres mujeres, del liderazgo de tres políticas europeas
importantes que quizá el único problema que tengan, portavoz, es que no
son socialistas. Ese es el único problema. (Aplausos).


En cualquier caso, no deja de ser sorprendente
que unos fondos europeos que todavía no se han recibido ya se hayan
consignado. De la autoridad independiente y competente que evaluase los
proyectos y los enviase a Bruselas para su aprobación ya nos hemos
olvidado, porque ustedes han decidido incorporarlos directamente y
dedicarlos a gasto y, al final, en vez de dedicarlos a lo que decía la
Unión Europea, que era creación de empleo y reparación de daños causados
por la pandemia, ustedes no están pensando en cambios estructurales para
intentar salir de la crisis, sino en el corto plazo y en repartir los
fondos a modo de un nuevo Plan E, cuyas consecuencias, tristemente, ya
las sabemos.


Tampoco vemos reflejada la revisión de la
política exterior, de la que han hecho tanta gala. Han anunciado una
nueva ley de acción exterior, un nuevo marco jurídico para la
cooperación, pero nada de eso vemos en estos presupuestos. Sin embargo,
resulta especialmente llamativo y poco sensible al enorme impacto de la
crisis en nuestra sociedad el incremento en los gastos de personal y
gasto corriente, incluidas las subidas de sueldo aprobadas por el
Gobierno, en paralelo a la reducción de la protección para la asistencia
social y las repatriaciones de españoles en el extranjero, capítulo en el
que el ministerio fue incapaz de cumplir con su obligación en la primera
ola de la pandemia y que ahora parece que ignoran por completo la
situación actual en medio de la segunda y con un estado de alarma que el
propio Gobierno considera que va a prolongar hasta 2021, demostrando que
poco o nada han aprendido de esta situación.


Igualmente nos preocupa que la partida de
acción diplomática ante la Unión Europea sea la única que baja, con un
posible brexit sin acuerdo en las puertas y con lo que eso significa de
gravísimas consecuencias para nuestro país.


Y la consecuencia de la deriva que afecta a la
política exterior española es una política cada día menos relevante en el
panorama internacional, como los últimos acontecimientos que estamos
viviendo están reflejando, y el deterioro claro de la imagen de España.
Millones de personas, señorías, consideran hoy a España como un país a
evitar, ya sea por el riesgo de contraer la COVID, la dificultad de pasar
unas vacaciones o simplemente el riesgo de perder sus inversiones, y al
caos en la gestión de la pandemia y de la economía se une el grave
deterioro de la imagen del Estado de derecho y de una democracia puesta
en riesgo a causa de las irresponsables y bochornosas actuaciones que
intenta llevar a cabo este Gobierno, con un afán desmedido de
intervencionismo.


Por todo ello, nuestro grupo parlamentario no
puede sino presentar esta enmienda de devolución.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Nacionalista, la
impugnación número 22, de los senadores Cleries i Gonzàlez y Matamala
Alsina.


Intervendrá el senador Cleries i Gonzàlez.


El señor CLERIES I GONZÀLEZ: Muchas gracias,
presidenta.


Hemos presentado este veto a la sección del
Ministerio de Exteriores porque, claro, el modelo y la gran amistad que
hemos visto del Gobierno actual de España es con Turquía. Debe de ser
porque es un país equiparable, porque también tiene presos políticos y
artistas detenidos, y le quiero recordar a la anterior portavoz
socialista que ha hablado que defender la libertad de los presos
políticos y exiliados y defender que no se persiga a más de 3000 personas
en Cataluña no es ni de derechas ni de izquierdas, es de demócratas,
porque esto es democracia. Por tanto, pueden ir diciendo lo de derechas,
derechas, derechas; al menos, no sé si ustedes saben dónde están, porque
ver sus presupuestos o la amistad con Turquía no ayuda mucho.


Además, también lo hacemos porque el Ministerio
de Exteriores, y esta semana pasada lo hemos visto, a través de la
embajada española en Estonia ha impedido que el conseller de Políticas
Digitales, Jordi Puigneró, pudiera ir a explicarse a Estonia; han
boicoteado y prohibido el acto de un conseller de la Generalitat, como
vienen haciendo sistemáticamente. No lo hacen con ninguna otra comunidad
autónoma, solo con Cataluña, por ir a explicar políticas digitales. Ni
esto nos dejan hacer. Pues sepan que esta forma de hacer del Ministerio
de Exteriores, esta falta de democracia y esta falta de respeto a
Cataluña, para nosotros es un veto al Ministerio de Exteriores y a su
presupuesto, porque lo primero que tendría que hacer, si es un ministerio
democrático, es respetar la pluralidad del Estado español, que es un
Estado plurinacional, y ustedes no lo respetan.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Socialista, tiene la
palabra el senador Gutiérrez Limones para su turno en contra.


El señor GUTIÉRREZ LIMONES: Gracias,
presidenta.


Señorías, cuando menos resulta paradójico que
tome la palabra en esta tribuna para responder a dos vetos cruzados, de
dos grupos parlamentarios supuestamente antagónicos. Y digo supuestamente
porque uno dice defender un Estado sin sentido y otro es que
sencillamente ha perdido el sentido de Estado. (Aplausos). Sin embargo,
la verdad es que les une un objetivo común: el acoso y derribo al
Gobierno de España. Resulta ciertamente difícil comprender que el Partido
Popular, un partido de Gobierno, un partido de Estado, se dirija con los
partidos independentistas a las instituciones europeas para poner en duda
el Estado social y democrático español, y para decir que este es un
Estado fallido, con el fin de que se pierda la credibilidad en sus
instituciones, en su democracia y en sus estamentos. Eso no es posible en
un partido que, hasta hace poco, ha sido partido de gobierno en este
país.


Señor Cleries, déjeme que le diga que creo que
antes de que su partido pueda plantear la posibilidad de vetar los
presupuestos de política exterior de España tendría que vetar los
presupuestos del Gobierno de la Generalitat en su política exterior, de
modo que bajase toda esa red de embajadas que no solamente no representan
los intereses de Cataluña sino que, sencillamente, representan un relato
ficticio de un Estado independiente catalán que ya ha sido rechazado por
todas y cada una de las instituciones europeas e instituciones
internacionales. Es verdad que es democrático plantear lo que uno quiera
y hacer las peticiones que uno quiera, pero también es democrático
respetar todas y cada una de las decisiones de los tribunales superiores
de Justicia de la Unión Europea sobre ustedes.


Por último, ¿no sería más fácil alinear los
esfuerzos conjuntamente con la política exterior española, para que
Cataluña volviera a ser esa tierra atractiva para inversiones, para
vivir, para visitar, señor Cleries, o para convivir? Háganlo, y si no lo
hacen en nombre del Estado catalán, háganlo, por lo menos, en nombre de
los catalanes y de las catalanas.


Señorías del Partido Popular, ningún ciudadano
puede entender la deriva del Partido Popular, la pérdida del sentido de
Estado y de la responsabilidad, máxime en un partido que, como decía,
hasta hace poco ha ejercido el gobierno de este país. No apoyaron al
Gobierno de España en los peores momentos de la crisis sanitaria; no
apoyaron al presidente del Gobierno de nuestro país cuando planteó que
había que mutualizar la deuda europea para dar cobertura a la situación
crítica que vivían algunos países como consecuencia de la pandemia; se
pusieron junto a los Estados frugales para impedir que España recibiera
subvenciones a fondo perdido de esos fondos de reconstrucción, cuando eso
no se consiguió plantearon condiciones leoninas para que fuera inviable
la ejecución y la gestión de esos fondos y, por último, plantearon una
agencia independiente. ¿De verdad sus señorías están poniendo en cuestión
la madurez y la capacidad de gestión de los fondos europeos de las
instituciones españolas, del Gobierno de España, de los gobiernos
autonómicos, de los ayuntamientos y de las diputaciones? ¿Eso es lo que
estamos poniendo en cuestión? (Aplausos). Durante décadas este país ha
estado gestionando fondos europeos, y lo han hecho con gobiernos del
Partido Popular y con gobiernos del Partido Socialista. Somos capaces de
levantar este país y de hacerlo trabajando y alineando esfuerzos
conjuntamente. Pero, además, presentan un veto parcial a las políticas de
exterior basado en que no hay un plan director de cooperación. ¿Ustedes
hablan de cooperación cuando bajaron un 70 % los fondos de cooperación
internacional y un 90 % las ayudas humanitarias en un momento fundamental
para muchísimos países? (Aplausos). Eso es lo que denota una visión del
mundo, una visión de entender la política exterior. Ustedes creen que la
política exterior solo está basada en beneficios e intereses y nosotros
en principios y en valores. Ustedes creen que hay un mundo para unos y un
mundo para otros, y nosotros creemos que hay un mundo mejor para todos y
para todas, y queremos devolver a España a la escena internacional, a la
escena de la multilateralidad, la escena de alianzas con la Unión
Europea, Naciones Unidas, la nueva Administración norteamericana, la
Organización de Estados Americanos y la Organización de Estados
Africanos, sencillamente por no ser indiferentes al sufrimiento ajeno,
para ser capaces de trabajar para acabar con los conflictos, con el
hambre, con las situaciones sanitarias, con el terrorismo, para hacer,
sencillamente juntos, un mundo más habitable, más justo, más amable y más
humano. Ese es el papel que quiere jugar España y lo quiere hacer con
esos países que se atreven a hablar de derechos, de Estado de derecho, de
democracia y de derechos humanos.


Señorías, el Partido Popular no quiere vetar
los presupuestos, el Partido Popular lo que quiere vetar es cualquier
iniciativa del Gobierno para salir de la crisis sanitaria, económica y
social porque piensan que esa posición les acerca más al Gobierno de
España. (Aplausos). Y utilizan esa posición de manera partidaria, sin
darse cuenta de que esa posición, que niega nuestros presupuestos y los
fondos de reconstrucción niega, sencillamente, su organización como una
organización necesaria y útil para la sociedad española. Por eso,
solicitamos de nuevo que sean fieles a su compromiso de lealtad con
España y con los españoles, que alineemos esfuerzos en la misma
dirección, entre todos, porque de lo que se trata en esta crisis sin
precedente, es de salir todos juntos y a la vez.


Por último, quiero hacer una petición de
respeto institucional. El Gobierno del presidente Pedro Sánchez es el
Gobierno de este país, no es el Gobierno Frankestein ni el Gobierno
bolivariano ni el socialcomunista (Algunos señores senador del Grupo
Popular en el Senado: Noooooooo).


La señora PRESIDENTA: Señorías.


El señor GUTIÉRREZ LIMONES: Es el Gobierno de
España porque lo han decidido los españoles. (Aplausos).






Representa a
todos y cada uno de los españoles y españolas. Al Gobierno de España, por
favor, respeto institucional, y acostúmbrense a él porque es un Gobierno
que nos va a durar muchísimos años.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 13. Ministerio de Justicia.


Impugnación número 30, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado. En el turno a favor, tiene la palabra, por tiempo
de cinco minutos, el senador De Rosa Torner.


El señor DE ROSA TORNER: Gracias, señora
presidenta.


Señorías, tras escuchar a la ministra y al
Grupo Socialista intentando explicar sus pactos con Bildu, me ha venido a
la cabeza la máxima jurídica latina excusatio non petita, accusatio
manifesta. La verdad es lo manifestado hoy por el ministro Ábalos de que
la pertenencia a banda armada de Otegui es una cuestión personal que no
afecta a Bildu. Sigue la accusatio manifesta.


Señora presidenta, la postura de mi grupo es
clara: estos presupuestos son engañosos y manifiestamente insuficientes
para atender a las necesidades del servicio público de la justicia. El
tiempo vuela y ustedes, con sus propuestas para la Administración de
Justicia, siguen llegando tarde; son como el conejo de la novela de Lewis
Carroll, Alicia en el país de las maravillas, que siempre mirando el
reloj llegaba tarde, lamentándose una y otra vez de esa situación. Esto
es lo que les pasa a ustedes, siempre corriendo en los trámites —y
lo hemos visto en la tramitación de los presentes presupuestos—,
siempre improvisando y fingiendo que quieren llegar y nunca llegan al
calendario de la Agenda 2030; siempre pretenden vender proyectos que
suenan muy bien, pero que son huecos. La justicia no necesita que sus
proyectos suenen bien, sino que funcionen bien.


Por tanto, por querer hacer titulares
propagandísticos se han olvidado de la justicia 2021, la de los próximos
doce meses, y por eso hemos presentado veto en la sección 13 de la
Administración de Justicia. El reloj sigue parado y ustedes han dejado
pasar la oportunidad en este proyecto de dotar a la justicia de los
recursos materiales necesarios para dar una máxima calidad a este
servicio público. En esta carrera para mantenerse en el poder e intentar
agotar la legislatura se han olvidado de las necesidades reales de la
justicia, como ya se lo dijimos en su momento al secretario de Estado.
¿En qué contribuyen estos presupuestos de Justicia a que salgamos de la
grave crisis económica en que nos encontramos? No se engañen y no nos
engañen, no son las adecuadas reformas procesales y de organización que
nos anuncian, es tiempo de una Administración de Justicia fuerte, y
ustedes la están despreciando y están haciendo perder el tiempo a miles
de profesionales que con un gran esfuerzo han sostenido durante momentos
muy difíciles el Estado de derecho, profesionales que ahora comprueban
cómo estos presupuestos van a ahondar el pozo del colapso judicial que
provocó el estado de alarma y la suspensión de miles de trámites
procesales.


El pasado 22 de noviembre el presidente del
Gobierno, en una de sus insufribles homilías laicas dominicales, cuando
se le preguntó por sus negociaciones de los presupuestos con Bildu huyó
de contestar directamente a esta pregunta y dijo que las únicas siglas
que le interesaban eran las de los PGE, Presupuestos Generales del
Estado. Es cierto que las únicas siglas que le importan al presidente son
las siglas PGE, es decir, cumplir los peajes con los grupos extremistas.
No es una casualidad, por tanto, que ustedes estén castigando a esta
Administración; es el peaje que el presidente Sánchez paga. Lo triste es
que el ministro de Justicia calla por causa de su debilidad. Prueba de lo
que estoy diciendo es la insultante falta de previsión de creación de
unidades judiciales, y esta no es solo una opinión del Partido Popular,
sino de todos los operadores jurídicos.


Ustedes proponen la creación de menos plazas de
jueces y fiscales que las necesarias, y aquí les expongo una muestra,
como pueden ver en estos documentos: este juzgado de lo social ha
señalado para el 10 de mayo de 2022; este juzgado para el 29 de marzo
de 2022 y este juzgado para el 15 de febrero de 2022. Esta es la realidad
de la justicia a la que ustedes están dejando sin medios económicos y sin
medios materiales.


Ustedes aminoran la inversión un 10 %, les
guste escucharlo o no. ¿Están al tanto del informe del estadístico sobre
la situación de los órganos judiciales elaborado por el Consejo General
del Poder Judicial? Es vergonzoso que de los 27 000 millones que España
va a recibir de la Unión Europea ustedes solamente van a invertir en
justicia la milésima parte del total. Ustedes se han olvidado de los
abogados, procuradores y graduados sociales, como autónomos que son
—siguen olvidando a los autónomos—, en este caso a los
profesionales de la justicia. ¿Se han preocupado realmente de los
abogados y procuradores de turno de oficio? ¿Han previsto medidas de
prevención de riesgos laborales y adecuación de los puestos de trabajo
para los que trabajan en esta Administración? ¿Cree que es suficiente la
creación de plazas de funcionarios para esta Administración? ¿Qué
incentivos han previsto en la agilización de la Administración de
Justicia?


En definitiva, estos presupuestos son un
trampantojo económico, son el peaje con el que quieren salir del paso y
son el reflejo claro de que el Ministerio de Justicia es un ministerio
sin ningún peso en la mesa del Consejo de Ministros. Estos presupuestos
reflejan un fracaso y a pesar de la política propagandística a la que nos
tienen acostumbrados, esa es la pura realidad.


Muchísimas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Del Grupo Parlamentario Nacionalista,
impugnación número 12, de los senadores Cervera Pinart y Cleries i
Gonzàlez. Intervendrá en turno a favor el senador Cervera Pinart, por
tiempo de tres minutos.


El señor CERVERA PINART: Gracias, de nuevo,
presidenta.


Pasan hoy cuatro días de la conmemoración de la
Declaración de los Derechos Humanos, una declaración que la Constitución
de 1978 hizo suya en el apartado 2 del artículo 10, pero resulta que la
Constitución solo obliga a lo que les interesa y esto se hace evidente
porque no todos somos iguales ante la ley, porque no todos tenemos
derecho a un tribunal independiente e imparcial, porque se detiene
arbitrariamente y porque la libertad de pensamiento, de opinión, de
expresión, de reunión y de asociación pacífica están cuestionadas
actualmente en el Estado español. Un Estado español que a menudo olvida
que los acuerdos y los tratados firmados y ratificados por el Reino de
España y sus resoluciones también forman parte de su ordenamiento
jurídico.


Déjenme citarles algunos ejemplos de
incumplimiento de derechos básicos y fundamentales. Podríamos empezar por
la inhabilitación del president Torra o la privación de derechos
electorales al eurodiputado Oriol Junqueras o las acusaciones sin
fundamento a la diputada Laura Borràs o a Tamara Carrasco o a los CDR,
entre otros. O la lamentable sentencia contra la Universitat de Barcelona
y, sobre todo, el juicio y la sentencia a nuestros líderes sociales y
políticos. Y ahora que hablo de nuestros líderes sociales y políticos,
celebro que este Gobierno trabaje para mejorar su situación, como nos
decía la señora Vilà, pero disimulan realmente bien porque, señora Vilà,
¿de quién depende la Fiscalía que impugnó el tercer grado y el 100.2 que
hará que nuestros presos políticos pasen sus cuartas Navidades en
prisión?


Es evidente que, en este marco de represión y
de incapacidad política, en Junts per Catalunya no podemos apoyar el
presupuesto de un Gobierno que, a pesar de autonombrarse el más
progresista de la historia, permite situaciones propias de otros
regímenes y de otros tiempos.


Gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


En el turno en contra intervendrá, por el Grupo
Parlamentario Socialista, el senador Oleaga Zalvidea.


El señor OLEAGA ZALVIDEA: Eskerrik asko,
presidenta andrea; arratsalde on guztioi.


Señor De Rosa, voy a comenzar como lo ha hecho
usted, hablando de terrorismo, que parece que es lo único que les
interesa. Miren, aquí los únicos que han calificado a una organización
terrorista como movimiento vasco de liberación nacional fueron ustedes.
(Aplausos).


Voy a entrar en la materia que nos ocupa, que
es la sección de Justicia. El portavoz del Grupo Popular preguntaba a qué
contribuye esta sección. Pues, mire, vamos a empezar por el primero de
los apartados. Si saliese adelante lo que plantea el Partido Popular, que
es impugnar y hacer desaparecer esta sección 13, no podríamos abordar la
subida para los funcionarios y para las funcionarias; una subida
importantísima que supone mejorar sus condiciones salariales. Que se
enteren los funcionarios y funcionarios de Justicia que, si por el
Partido Popular fuera, no se les subirían sus salarios. (Aplausos).


Es más, hemos dicho durante la pandemia que
todas las personas que se encontraban en primera línea —y los
trabajadores y trabajadoras de Justicia lo han estado— se han
jugado su salud y su vida, y es lógico que el Estado tenga un
reconocimiento y esto lo mire con determinación. A diferencia de lo que
ustedes plantean, señorías del Partido Popular, el Gobierno de Pedro
Sánchez sí piensa que es necesario reconocer el mérito, el trabajo, el
esfuerzo y la dedicación de estos trabajadores y trabajadoras, no
solamente de manera salarial, que ya en sí es importante, sino también
con el teletrabajo. Por ejemplo, el plan 110A destina 28 millones de
euros, parte de los cuales son para introducir racionalización en la
prestación de los servicios de Justicia y para el teletrabajo. ¿Me
quieren ustedes decir, señorías del Partido Popular, que están ustedes en
contra de racionalizar el trabajo en los juzgados y tribunales y que
están ustedes en contra del teletrabajo? Pero qué sentido tienen ustedes,
que han sido un partido de Gobierno, para plantear aquí estas
cuestiones.


El presupuesto de Justicia recoge
específicamente partidas en este sentido que son absolutamente
imprescindibles. Por ejemplo, se recogen 48 millones de euros para la
partida de la COVID-19. Quiero aquí reconocer que el Gobierno, en pleno
estado de alarma, se dedicó de una manera muy esforzada a conseguir que
la Justicia no se parase, para que hubiera servicios esenciales, que se
prestaran en condiciones de seguridad, que se garantizara la salud no
solamente de los trabajadores y trabajadoras, como ya hemos dicho, sino
del resto de operadores jurídicos y, por supuesto, de los ciudadanos y
ciudadanas que acudían a la justicia. Este es un plan absolutamente
imprescindible, que además se ha hecho sin dejar de lado las necesarias
transformaciones que necesita la Administración de Justicia para acabar
con los atascos seculares que plantea. Por tanto, decir que no a esta
partida es decir que no a la salud de los trabajadores y de las
trabajadoras y de quienes acuden a juzgados y tribunales. Esto es lo que
plantea el Partido Popular.


Por otro lado, hay reformas imprescindibles e
inaplazables de la Justicia que recoge ya este presupuesto y que va poco
a poco anticipando. En este sentido, quiero mencionar todo lo que son las
reformas de calado de la arquitectura de nuestro sistema de
Administración de Justicia, por no hablar, por ejemplo, de la Ley de
Enjuiciamiento Criminal, que es absolutamente imprescindible y que exige
una dotación presupuestaria en los debates, en los trabajos, etcétera. Es
evidente que una ley del siglo XIX necesitaba una mirada del siglo XXI, y
esto es lo que está haciendo el Gobierno, y el Grupo Parlamentario
Socialista apoya esa determinación por modernizar la Justicia, para
adaptarla al siglo XXI y para que, en definitiva, responda a las
necesidades de los ciudadanos y de las ciudadanas. Pero es que no
solamente son reformas legislativas, que ya en sí son importantes, es que
lo que se pretende es la digitalización de nuestros juzgados y
tribunales, hacer más modernos los procesos, más ágiles y, en definitiva,
mejores para las personas que demandan justicia. ¿El Partido Popular está
en contra de esto? ¿Vota en contra de que se digitalice algo tan esencial
como son los juzgados y tribunales, que es una demanda en la que
coinciden todos los operadores jurídicos? ¿Cómo es posible que ustedes
planteen estas cuestiones? Honestamente, no entiendo la postura del
Partido Popular, en absoluto, en esta materia.


También se plantea aquí reformar la oficina
judicial, y eso es algo tan importante como las oficinas municipales,
como que cada municipio de nuestro país pueda dar respuesta a un
ciudadano o una ciudadana que necesita de la Justicia. Me estoy
refiriendo a aquellas zonas de España que están particularmente afectadas
por la despoblación, y esto es algo imprescindible que se recoge en esta
sección. ¿Qué quieren ustedes decir, señores y señoras del Partido
Popular, cuando votan en contra de esto? ¿Que no quieren que haya
atención en los pueblos y ciudades de España a las personas que necesitan
justicia? ¿Esto es lo que ustedes plantean? En fin, todo un despropósito
que desde luego no acabo de comprender.


Hay algo que me llama mucho la atención y es
que hay partidas para ejecutar obras en determinados lugares donde es
necesario reformar los edificios, etcétera. En este sentido, cuándo
ustedes acuden a las comisiones solicitan una obra aquí o una obra allá
porque son necesarias, y luego van a los medios de comunicación y les
venden que han pedido que se haga una obra en tal sitio o en tal otro.
Pues bien, sí, han pedido eso, pero cuando hay que votar el dinero que se
necesita, votan que no. (Aplausos). Ya me gustaría que fuesen ahora
ustedes y les dijesen a esas personas: Oye, que de lo que te dije nada,
que ahora he votado en contra. ¿A que no hacen ustedes ahora eso?


Por lo que se refiere a la cogobernanza, tan
necesaria y que ha sido eficaz durante el estado de alarma, es eficaz en
este momento y lo va a ser el futuro. Esto es algo fundamental que viene
recogido en estos presupuestos y que, a mi juicio, debería exigir por
parte de ustedes una reconsideración muy seria de apoyo a estas
cuentas.


Estos presupuestos plantean ya una subida de
cerca de un 7 %, que es una subida muy importante con respecto a los
presupuestos Montoro — unos presupuestos que espero que queden
atrás ya—, y que suponen iniciar una senda democrática de
profundización en la modernización y en las reformas estructurales que
necesita la Administración de Justicia. En este sentido, hacer una
justicia más ágil, una justicia más moderna, una justicia mejor, más
cercana a los ciudadanos y a las ciudadanas que lo demandan es una
exigencia democrática, y esas reformas que decíamos son reformas
inaplazables que deben ponerse en marcha de una vez.


Como decía nuestro portavoz, Ander Gil, en su
intervención, les diré que me siento también orgulloso, como dice él
—y también el Grupo Parlamentario Socialista— porque en este
momento en que la gente lo necesita, que la gente está sufriendo, hemos
arrimado el hombro, a diferencia de lo que hacen otros. Debo decirles, y
con esto concluyo, que este momento también se entenderá y se valorará
cuando uno pueda decir que cuando hubo una necesidad, cuando la gente
sufría, intenté arrimar el hombro y cumplir en la medida de lo que yo
podía con mis obligaciones constitucionales. Este es el compromiso del
Grupo Socialista. Espero que lo sepan y espero que cambien radicalmente
esa postura de boicot y de cerrazón que mantienen.


Eskerrik asko. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 14, Ministerio de Defensa.


Impugnación número 31, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado. En turno a favor, tiene la palabra el senador
Rodríguez Comendador Pérez.


El señor RODRÍGUEZ COMENDADOR PÉREZ: Señora
presidenta, señorías, comparezco en nombre del Grupo Popular para
defender el veto a la sección 14 de los presupuestos del Ministerio de
Defensa.


Antes de nada, quiero hacer un reconocimiento
expreso a la labor de los miembros de las Fuerzas Armadas en la lucha
contra la COVID durante este tiempo. Estoy convencido, señorías del
Partido Socialista, de que estos no son los presupuestos que querría la
ministra de Defensa para las Fuerzas Armadas; y estoy convencido porque
no cumplen la directiva de Defensa Nacional aprobada el año 2020, porque
no mantienen el nivel tecnológico y de capacidad operativa de las Fuerzas
Armadas ni mejoran la calidad de vida de sus miembros.


Señorías, estos presupuestos tampoco nos
acercan al compromiso con nuestros aliados de la OTAN de alcanzar el 2 %
del PIB en materia de defensa. Se van a cerrar, señorías, un 30 % de las
agregadurías militares en el exterior; 11 oficinas van a ser
cerradas.


No hay realidad porque estos presupuestos están
construidos sobre la base de un cuadro macroeconómico cuyas previsiones
económicas y fiscales están totalmente desfasadas y superadas por la
realidad, tal y como se ha puesto de manifiesto últimamente, tanto por el
gobernador del Banco de España como por la Autoridad Independiente de
Responsabilidad Fiscal.


Señorías, si el Proyecto de Presupuestos
Generales del Estado estudiado de manera global ofrece francamente muchas
dudas sobre su sostenibilidad financiera, también ocurre con las
distintas secciones que lo componen, entre ellas la sección 14, a la que
nos referimos, cuyos créditos dependen para su satisfacción de las
previsiones hechas por el Gobierno. En concreto, el resumen general por
servicios y capítulos del presupuesto de gastos ofrece un total de la
sección 14 de más de 9000 millones de euros; concretamente 9072 millones
de euros. A pesar de la importancia de esta política de gasto, cuya
finalidad se define en la documentación que forma parte de los
Presupuestos Generales del Estado como una herramienta fundamental para
preservar nuestro marco de convivencia, únicamente se consigna una
cantidad excepcionalmente reducida en el mecanismo de recuperación y
resiliencia, que son 25 millones de euros, prácticamente, señorías,
el 0,25 % del total del presupuesto de la sección. Aunque en apariencia
los presupuestos consigan una cantidad muy superior a los de 2018 en
inversiones reales del capítulo 6, en los apartados 122A, en cuanto a
modernización y 122B, de programas especiales, lo hacen a costa de una
significativa reducción de los otros dos programas vinculados al
adiestramiento y al sostenimiento de los sistemas de armas, el 122M,
gastos operativos y el 122N, apoyo logístico. Desvestimos un santo para
vestir otro; en definitiva, cambiamos unas partidas de un sitio para
ubicarlas en otro.


Por otra parte, el aumento del 122A se produce
en el apartado de infraestructuras vinculadas a los programas NATO y a
los simuladores del Chinook y del sistema de entrenamiento integrado del
Ejército del Aire. La capacidad operativa de las Fuerzas Armadas se ve
perjudicada, en lo que concierne a inversiones reales, en gastos
operativos y en apoyo logístico.


Señorías, nuestras Fuerzas Armadas, además,
deben cumplir un número importante de misiones y funciones fuera de
nuestras fronteras, que han sido encomendadas a España en el marco de
nuestros compromisos internacionales. En este apartado se experimenta
igualmente una importantísima reducción presupuestaria del 57,6 % en
inversiones reales, que se vinculan a operaciones en el exterior, con lo
que se abandona la senda que ya se inició con el Partido Popular de
asumir progresivamente estos costes con el presupuesto de Defensa,
desvinculándonos de los fondos de contingencia del Ministerio de
Hacienda. Estos presupuestos, a juicio del Grupo Popular, no se adecúan a
estos compromisos, como son el de mantener el nivel de contribución
actual a operaciones en el exterior destinadas a la lucha contra el
terrorismo, la proyección de estabilidad y defensa del territorio aliado
y promover la diplomacia de defensa en relación con la de otros
países.


Señorías, no nos olvidemos de que sin seguridad
no hay sanidad, sin seguridad no hay educación y sin seguridad no hay
servicios sociales. En definitiva, señorías, sin seguridad no hay
democracia.


Por tanto, rechazaremos esta sección de los
presupuestos. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias,
señoría.


Impugnación número 13, de los senadores Cervera
Pinart y Cleries i Gonzàlez. Tiene la palabra, por tiempo de tres
minutos, el senador Cervera Pinart, en turno a favor.


El señor CERVERA PINART: Gracias, de nuevo,
presidenta.


Señorías, en el ámbito de la defensa es donde a
mi modesto entender mejor se puede apreciar la historia y el origen de
cada democracia. En el caso del Estado español, donde la recuperación de
esta llegó tutelada desde una dictadura en la que las Fuerzas Armadas
habían sido el pilar fundamental del régimen, no es difícil percibir,
implícita o explícitamente, que la transición fue pilotada por el
ejército, y eso evidentemente marcó el diseño institucional del Estado.
Después de cuarenta años, y a pesar de los intentos de establecer de
manera clara las funciones de control del Poder Legislativo en materia de
defensa, a nuestro entender el Estado español padece el déficit generado
por el contexto en que se redactó y se aprobó su Constitución.


Lo hemos podido comprobar también con el
Gobierno más progresista en la gestión de esta pandemia, que en un primer
momento fomentó una militarización mediática e innecesaria, inaudita en
el resto de democracias europeas, y que poco aportó a la mejora de la
situación.


Recientemente, hemos conocido otro manifiesto
de militares que han tenido responsabilidades en las Fuerzas Armadas
democráticas y un chat de infamia a los miembros del cual el presidente
Sánchez calificó a la ligera de nostálgicos, sin darles más importancia,
cuando sabemos bien que, por mucho menos, civiles de base se han visto
imputados.


Un ejército que ha vivido durante la mal
llamada transición de los herederos de un régimen autoritario y
dictatorial es evidente que nos genera muchas dudas y no nos merece
ninguna confianza. Pero, a pesar de esto, resulta evidente que las
amenazas del siglo XXI son distintas a las del siglo XIX y el XX
—ciberseguridad, cambio climático, pandemias— y esto requiere
redefinir las inversiones. A nuestro entender, lo que haría falta es
menos estructura militar y más investigación y tecnología, y podríamos
considerar habitual la modernización de los sistemas de defensa, pero
ante las necesidades que ha evidenciado la COVID-19, entendemos que sería
oportuno posponer las inversiones armamentísticas y destinar estos
importes a la situación de emergencia sanitaria, económica y social que
padecemos. Sería esta la mejor manera de proteger al conjunto de la
sociedad, que era uno de los objetivos del presupuesto de Defensa, según
dijo la ministra el día 1 de diciembre en el Congreso. El segundo
objetivo, claro, era proteger la Constitución.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En turno en contra, por el Grupo Parlamentario
Socialista, tiene la palabra el senador Ruiz de Diego, por tiempo de ocho
minutos.


El señor RUIZ DE DIEGO: Buenas tardes, señora
presidenta, señorías.


Antes de nada, y como ya ha hecho algún
compañero, en el Grupo Parlamentario Socialista queremos expresar nuestro
reconocimiento a los cerca de 12 000 hombres y mujeres de nuestras
Fuerzas Armadas desplegados diariamente en diferentes misiones y
operaciones, y a las más de 2000 personas que lo hacen más allá de
nuestras fronteras. Nuestro reconocimiento, como hacemos normalmente.
(Aplausos).


Pese a lo que se ha oído recientemente en esta
misma tribuna, ese agradecimiento especial se debe también a su apoyo en
la lucha contra la terrible pandemia de la COVID-19, que se ha
manifestado en la operación Balmis y en la actual misión Baluarte de la
que muchos presumimos, y a veces no entendemos por qué se hacen ciertas
críticas no siempre bienintencionadas.


Pero pasando al debate de la sección 14 de los
presupuestos del Estado, bajo la rúbrica de la defensa, se habla de
servicios públicos básicos y de garantizar derechos y libertades de la
ciudadanía, y el Gobierno de España, en su legítimo ejercicio de
competencia, ha presentado un proyecto de presupuesto para el año 2021 en
el ámbito de la defensa que consolida un gran esfuerzo inversor, empezado
ya desde nuestra llegada al Gobierno, y con objetivos en total sintonía
con las necesidades de transformación y modernización del país que
caracterizan estos presupuestos.


Señorías, son unos presupuestos claramente
expansivos en las políticas sociales, en medio de la actual crisis
sanitaria mundial, y que impulsan la digitalización, la economía verde,
la igualdad de género y la cohesión social y territorial; y, en este
sentido, en el ámbito de la defensa hay una total sintonía con todos
estos principios. Parece ser que hay fuerzas políticas que no reconocen
que la política de gasto destinada al servicio público de la defensa
supone nada más y nada menos que 9411 millones de euros, con un
incremento del 4,6 % sobre el presupuesto base de 2020, pero es que a
ello hay que añadir las rúbricas dedicadas a los organismos autónomos,
resultando un presupuesto consolidado en torno a los 10 400 millones de
euros, lo que representa un porcentaje de incremento del 4 %.


En el Grupo Parlamentario Socialista nos
gustaría destacar brevemente que dentro de estas mejoras y de estos
aumentos, el 52,4 % del presupuesto suponen los créditos de personal, que
van a ser y van a tener la mejor ratio personal/material de los últimos
veinte años. Además, se inicia asimismo un proceso de mejora de las
retribuciones del personal militar que, no lo olvidemos, desde el
año 2005 no habían sido revisadas. Las plazas ofertadas de carácter
permanente para los militares de tropa y marinería de las Fuerzas Armadas
pasaran de las 300 plazas, en el año 2018, a las 1000 previstas para el
año 2021, y se fija una tasa de reposición en este proyecto
del 110 %.


A esta sección se han presentado dos propuestas
de veto: la del Grupo Parlamentario Nacionalista alude a no adecuarse a
las necesidades sociales y económicas de Cataluña ni tampoco a las que
necesita el Estado español, aunque realmente ni en la redacción del veto
ni en la explicación que se nos ha dado podemos ver a qué se refiere el
grupo cuando dice que esas necesidades sociales y económicas de Cataluña
y de España no se cumplen. En cualquier caso, lo que realmente le
interesa señalar al Grupo Parlamentario Socialista es que sin la
seguridad, defensa y protección que proporcionan, en este caso, nuestras
Fuerzas Armadas, es difícil tener un Estado, una comunidad y que los
ciudadanos que la componen puedan disfrutar de una manera tranquila y
real de las necesidades económicas y sociales que el Estado de bienestar
les puede llegar a proporcionar.


Señorías, España cuenta con unas Fuerzas
Armadas democráticas y perfectamente adaptadas a los principios
establecidos en la Constitución, así como a las necesidades, tareas y
misiones establecidas por el propio Gobierno de España. Pensar que un
Estado social y democrático de derecho como el español no necesita unas
Fuerzas Armadas es algo absolutamente irreal.


Y por lo que respecta al veto del Grupo
Parlamentario Popular, consideramos que es un absoluto despropósito y,
sobre todo, después de que un partido que se dice de Estado, cuando
estuvo en el Gobierno redujera durante siete largos años a las Fuerzas
Armadas y al sector de la defensa a una auténtica travesía en el desierto
presupuestario. Aunque solo sea en esta sección de la defensa, en el
Grupo Socialista les pediríamos un poco de mesura en las críticas y un
poco de sentido de Estado del que tanto presumen y a veces callan.
(Aplausos). La respuesta al Partido Popular en esta materia es fácil, y
es que hace falta un poco de coherencia porque lo que dice sobre las
Fuerzas Armadas durante siete años no lo hizo. En cualquier país de
Europa parecería normal que, si se produjese un aumento del presupuesto
de Defensa como el que se produce en la actualidad, la gran mayoría de
los partidos —no todos por supuesto— se animasen y se
alegrasen, y en especial los que se autoproclaman como patrióticos, sea
lo que sea que signifique para ellos esa expresión, pero más importancia
tiene ese aumento presupuestario en una situación tan grave de pandemia
mundial como la que ahora se vive en cualquier parte del mundo. A todos
nos gustaría que esta sección sufriese aumentos que fueran tales que
satisficieran a todos, pero esto es imposible. No hay que olvidar que en
las épocas del PP al frente del Ministerio de Defensa nunca procedieron a
realizar subidas como la que ahora presenta el Gobierno del Partido
Socialista. La dificultad de gestionar es hacer lo posible con los
recursos que se tienen, y todos somos conscientes de lo que hay, y con
esta previsión presupuestaria hay que priorizar, gestionar y
gobernar.


Voy a resumir las características del
presupuesto que el Partido Popular quiere echar abajo. Este proyecto de
ley asigna recursos conforme al proceso de planeamiento de la defensa, en
razón de la priorización de las capacidades militares y de otros
objetivos del departamento, teniendo en cuenta y garantizando las
actividades operativas y de sostenimiento previstas para las misiones
asignadas y los compromisos internacionales. Estos Presupuestos Generales
del Estado para 2021 se caracterizan por iniciar un cambio de rumbo en la
buena dirección, reflejan con rigor el gasto público en defensa, avanzan
en una mayor operatividad de las Fuerzas Armadas, suponen un paso
adelante en la modernización tecnológica y hay un aspecto fundamental,
sobre todo para el Grupo Parlamentario Socialista, que es que tiene en la
política de personal uno de los ejes sobre los que va a pilotar la
actuación del departamento. En definitiva, son unos buenos presupuestos
para la defensa y para España.


Me gustaría finalizar diciendo que estos
presupuestos se basan, como se acaba de citar, en la directiva de
Defensa, directiva de Defensa que hemos de cumplir y que, si se cumpliese
el veto del Partido Popular, quedaría absolutamente sin efecto.


Y para finalizar, y dirigiéndome a la bancada
del Partido Popular, me gustaría decir una frase de un paisano mío,
Baltasar Gracián, que decía lo siguiente: No tome el lado equivocado de
una discusión solo porque su oponente ha tomado el lado correcto.


Estos presupuestos deben ser aprobados.


Gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 15, Ministerio de Hacienda.


Impugnación número 7, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado. En el turno a favor, tiene la palabra la senadora
Muñoz Fonteriz.


La señora MUÑOZ FONTERIZ: Muchas gracias.
Buenas tardes, señorías.


Me corresponde intervenir para defender la
impugnación que hemos presentado a los presupuestos de la sección 15,
Ministerio de Hacienda, y ya sé que no les gusta oír esto, señores del
Partido Socialista, pero es que sus previsiones de ingresos en estos
presupuestos son una ficción: ni el cuadro macroeconómico ni la previsión
de ingresos de estos presupuestos tienen la más mínima credibilidad;
credibilidad cero que es exactamente la misma que tiene su Gobierno. Y
son una verdadera ficción porque están basados en unas previsiones
económicas que son totalmente irreales. No es que lo diga el Partido
Popular, no, lo dicen los organismos nacionales e internacionales
independientes que han cuestionado sus números, han cuestionado sus
cifras, la última vez la pasada semana en la Comisión de Presupuestos,
tanto la presidenta de la Airef como el gobernador del Banco de España.
También son una ficción sus previsiones de fondos europeos; unos fondos
europeos que todavía se están negociando en el ámbito europeo y que
solamente se van a dar para proyectos que todavía no se han presentado.
Una ficción más.


Por otro lado, es también una ficción la
recaudación que pretenden obtener a través de esa avalancha de subidas
impositivas y de creación de nuevos impuestos, que en ningún caso van a
tener el rendimiento que pretenden, y no es que lo diga el Partido
Popular, al que no creen nunca, sino que dice la propia presidenta de
Airef, como bien nos explicó en su comparecencia en la Comisión de
Presupuestos.


En definitiva, los únicos que van a cumplir
estos presupuestos en ingresos son las clases medias y bajas de este
país, que van a sufrir el verdadero hachazo fiscal, el sablazo fiscal que
les van a dar en sus economías el año que viene; familias españolas a las
que ustedes castigan sin piedad, que ya solamente falta que les cobren
por el aire que respiran. Todo se andará con esa nueva reforma fiscal que
nos anuncian y que lo único que va a traer son nuevas subidas
impositivas. (Aplausos). Pero además de a las familias, también lo
aplican a las empresas ahogadas de impuestos, que en este momento están
pasando por una situación crítica, y a ustedes solo se les ocurre
subirles todavía más los impuestos y crearles nuevas figuras impositivas.
En definitiva, asfixia, asfixiar a las familias y asfixiar a las
empresas, todo lo contrario de lo que hay que hacer en este momento, que
es bajar los impuestos, como están haciendo todos los países de nuestro
entorno, todos los países europeos, esos a los que ustedes aspiran para
armonizar. Claro, cuando ustedes hablan de armonizar, hay que echarse a
temblar porque solo entienden la armonización como subida de impuestos.
Lo hacen con Europa y también lo hacen con las comunidades autónomas, a
las que quieren armonizar para subir los impuestos a los que han
conseguido con mucho esfuerzo tenerlos más bajos.


Estamos solos, solos en Europa, solos subiendo
impuestos, pero a ustedes les da igual; les da igual, porque esa es su
política, es lo único que saben hacer, subirnos los impuestos porque
tienen que financiar el incremento de gasto público del 53 %. Ustedes
hacen el presupuesto exactamente al revés, como les decía en la Comisión
de Presupuestos: primero los gastos, y después inflan los ingresos hasta
que les cuadran las cuentas, aunque sea en el papel. Ese es su modus
operandi. Eso es a lo que nos tienen acostumbrados porque esto ya lo
hemos vivido y encima ahora pretenden que nos creamos que van a tener una
recaudación histórica. Su credibilidad es cero, señores del Partido
Socialista, cero, porque cada vez que tienen que hacer ustedes las
cuentas lo único que nos cuentan son cuentos, cuentos que nos llevan a
más déficit, a más paro y a más deuda. Esas son las consecuencias de los
cuentos que nos cuenta el Partido Socialista. (Aplausos).


En cualquier caso, lo que ya es la cuadratura
del círculo es cuando se creen sus propios cuentos y entonces escuchamos
a un portavoz del Partido Socialista decir que no va a aplicar las
políticas que hace diez años hacía el Partido Popular, cuando hace diez
años gobernaba el Partido Socialista, o la ministra, que viene aquí y da
un espectáculo realmente lamentable, lo contrario a lo que tiene que ser
una ministra de Hacienda, (Aplausos), que tiene que caracterizarse por la
seriedad y por el rigor, y achaca al Partido Popular los parados que
generó el Gobierno de Zapatero o achaca al Partido Popular crear y
generar deuda para pagar las facturas que nos dejó el Partido Socialista
en el cajón, cuando estuvo en el Gobierno de España. (Aplausos). Esa es
la realidad, a pesar de que ustedes se crean sus propios cuentos, y es
que tienen una amnesia selectiva.


¿Saben lo que les pasa? Lo que les pasa es que
están avergonzados de su Gobierno del señor Rodríguez Zapatero, del
Partido Socialista, sienten vergüenza de ese Gobierno y quieren renegar
de su pasado. En el Partido Popular —y ya termino,
presidenta—, no renegamos de nuestro pasado, estamos orgullosos de
él porque siempre dejamos a España mucho mejor que como nos la
encontramos cuando asumimos el Gobierno y, por eso, con la voz alta y
clara les decimos: así no, señores del Partido Socialista, para votar
estos presupuestos que traen ruina para los españoles no cuenten con el
Partido Popular, para volver a la senda del crecimiento, para volver a
pactar…


La señora PRESIDENTA: Debe ir terminando,
señoría.


La señora MUÑOZ FONTERIZ: ... con los socios
naturales, con los socios que quieren lo mejor para España y no
destruirla, ahí podrán volver a mirar y a hablar con el Partido Popular.
Para llevar a España al precipicio, no. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias.


Impugnación número 23, de los senadores Cleries
i Gonzàlez y Matamala Alsina. Para el turno a favor tiene la palabra el
senador Cleries i Gonzàlez.


El señor CLERIES I GONZÀLEZ: Gracias,
presidenta.


Podrían ser motivo de impugnación del
Ministerio de Hacienda las 2 horas y 45 con que nos ha castigado la
ministra, que nos ha hecho aquí un juicio sumarísimo a todos (Aplausos),
diciendo quiénes son buenos y quiénes son malos; me imagino que una
ministra debe venir a hablar del presupuesto y de sus criterios, pero no
de los que a ella le parecen buenos o los que le parecen malos y, además,
con esta amplitud de explicación, que iba sobradísima. Un poco de
humildad no le vendría mal.


Otra cuestión es que estamos ante un debate de
presupuestos que se hace muy rápido. En nuestro grupo hemos presentado
muchas enmiendas a la totalidad y también hemos presentado 581 enmiendas
al articulado y a las secciones. ¿Cuántas de estas enmiendas tendrá el
Grupo Socialista la amabilidad de estudiar y de llegar a algún acuerdo?
Respóndanme.


Nosotros sabemos que aquí van a piñón fijo y ni
segundas lecturas ni nada de nada, a tirar pel dret. Me parece que este
no es el sentido y que es responsabilidad del Ministerio de Hacienda. En
cualquier caso, si quieren y me da tiempo, les canto números. ¿Cómo
podemos dar apoyo a esta sección cuando tenemos 16 000 millones de
déficit fiscal cada año, cuando la deuda acumulada de la disposición
adicional tercera sube 3710 millones, cuando la deuda acumulada del
cuerpo de Mossos d’ Esquadra sube a 1249 millones de euros, cuando
el incremento de gasto de órganos judiciales sube unos 40 millones,
cuando la deuda pendiente de los fondos de cohesión sanitaria son 37
millones, la falta de financiación de la Ley de la dependencia llega a
los 3418 millones o la parte pendiente de la diferencia de 0,7 % del IRPF
con finalidades sociales se la queda cada año el Estado, 35 millones,
cuando la tendría que repartir la Generalitat de Catalunya? Solo por dar
unas cifras.


Cómo entenderá, con entusiasmo, mucho
entusiasmo, decimos no a esta sección.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


En turno en contra, por el Grupo Parlamentario
Socialista y el Grupo Parlamentario Izquierda Confederal, intervendrán
dos senadores. En primer lugar, el senador Heredia Díaz.


La señora HEREDIA DÍAZ: Gracias, señora
presidenta.


Señorías, España necesita unos presupuestos
para salir de la crisis, proteger a las personas y ganar el futuro, pero
eso a Casado no le importa porque su único objetivo es derrocar al
Gobierno. (Rumores).


Estos son unos buenos presupuestos. El 53 % de
ellos se destina a políticas sociales. Nunca en la historia de nuestro
país se han destinado más recursos para educación, para becas, para
sanidad, para la Ley de dependencia, para pensiones, para ingreso mínimo
vital o para protección por desempleo. (Aplausos). Son unos presupuestos
para reactivar la economía.


Como dice el FMI, nunca se han destinado más
recursos para proteger las empresas y este Gobierno ha evitado que se
cierren, que entren en quiebra un tercio de las empresas de nuestro país.
Este Gobierno ha protegido a los trabajadores con los ERTE y con las
ayudas a los autónomos y ha reforzado también el Estado del bienestar,
protegiendo a las familias para que nadie se quede atrás. ¿Saben qué
protección dio el Partido Popular a familias trabajadoras y empresas
en 2012? Ninguna. No les dio ninguna protección. Esa es la diferencia.
(Aplausos).


Estos son unos presupuestos viables y
consistentes, con tres vías de financiación: la recuperación de la
actividad tras la bajada de 2020, un sistema tributario más justo y
progresivo en el que cada uno aporte según su capacidad y reciba según su
necesidad, y los fondos europeos. Y aquí quiero destacar el gran trabajo
realizado por el presidente Pedro Sánchez, junto con otros líderes
europeos, para conseguir los fondos, a pesar de que algunos solo han
puesto palos en las ruedas para que esos fondos no vengan a nuestro
país.


Las previsiones de ingresos son rigurosas y
realistas. En el tercer trimestre todas las previsiones internacionales
decían que el PIB en nuestro país crecería como mucho un 12 %, pero
creció mucho más, hasta el 16,7 %. El FMI acaba de decir que las
previsiones para 2021 van a ser mucho mejores que las que estima el
Gobierno, y el gobernador del Banco de España, el pasado viernes, dijo
que las previsiones estaban mejorando para el próximo año. Por tanto, el
panorama económico está mejorando en nuestro país. Lo siento por el señor
Casado. (Un señor senador del Grupo Parlamentario Popular en el Senado:
¡Y dale con Casado!).


Además, quiero señalar que lo que dice el
Partido Popular de que van a subir los impuestos para clases medias y
trabajadoras es rotundamente falso. En este sentido, yo les pregunto,
¿quién de clase media cobra más de 300 000 euros en renta de trabajo o
más de 200 000 euros en renta de capital al año? Nadie. ¿Qué trabajador
tiene un patrimonio superior a 10 millones de euros? Nadie. Por tanto,
dejen de faltar a la verdad. El Partido Popular sí subió los impuestos a
clases medias y trabajadoras; cuando gobernó subió hasta 80 veces los
impuestos y, además, perdonaron a los defraudadores con una amnistía
fiscal. Y lo voy a repetir tantas veces como sea necesario: dejen de
engañar a la población. Ustedes lo que quieren es bajar los impuestos a
los millonarios, como hace Moreno Bonilla, en Andalucía, (Rumores),
porque, en el caso de las herencias, aquellas que sean de más de un
millón de euros por heredero no van a tener que pagar ni un solo céntimo.
Eso es lo que ustedes quieren. A lo mejor es que esa gente no llega a fin
de mes.


Por cierto, señores de Junts per Cat, con el
Partido Popular Cataluña recibió un 13,3 % de la inversión total, con
este Gobierno va a recibir algo más de un 18 %, por encima de la
población de Cataluña y, además, va a ser de las comunidades más
beneficiadas con los fondos europeos. Por tanto, ¿qué es lo que no le
gusta a Junts per Cat? ¿Le gustaban más los del Partido Popular?


Señorías, estos son unos presupuestos que han
apoyado casi 190 diputados en el Congreso, más que los de Rajoy cuando
tenía mayoría absoluta, y son fruto del diálogo y del consenso. Estos son
unos presupuestos donde Casado no ha criticado ni una sola coma, solo ha
dicho que no le gusta el apoyo de algunos grupos, aunque yo creo que lo
que no le gusta es que tantos grupos hayan apoyado los presupuestos,
hasta el día de hoy eran 11, hoy es uno más, 12 grupos apoyando los
presupuestos, más que nunca en la historia de nuestro país. Y lo que
también le duele al señor Casado es que le hubiese gustado ser él el que
presentase estos presupuestos estando en el Gobierno. Pues va a ser que
no. Los ha aprobado, con diálogo y consenso, un Gobierno progresista, con
un presidente a la cabeza, Pedro Sánchez, que hoy en día cuenta con más
mayoría que cuando comenzó la legislatura.


Y termino. Estos son los presupuestos más
progresistas y sociales, los que darán respuesta a la peor crisis en un
siglo, los que nos permitirán avanzar hacia un futuro de esperanza y lo
más importante es que la prioridad son las personas. Por tanto, sean
patriotas de verdad, no de boquilla, porque esta es una oportunidad única
para nuestro país, aprovechémosla entre todos y todas.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias,
señorías.


A continuación, por el Grupo Parlamentario
Izquierda Confederal, en el mismo turno en contra, tiene la palabra el
senador Vidal Matas.


El señor VIDAL MATAS: Gracias, presidenta.


Es extraño en el Senado que uno cambie de
postura en medio del debate. Hoy iba a hacer una defensa de los
presupuestos por parciales de transición ecológica, de transportes, de
vivienda y de otras áreas que me correspondía defender. Sin embargo, era
una defensa crítica porque queríamos que se tramitaran estos presupuestos
y queríamos que se mejoraran con las enmiendas.


Sin embargo, la intervención de la ministra ha
hecho que cambie el sentido de mi voto por la ofensa que hemos sentido en
las Illes Balears, en mi caso en primera persona, pero que también ha
sentido la gente que ha seguido la intervención en las Illes Balears
porque se habían generado expectativas. Vamos a poner los puntos sobre
las íes. No se cumple la Ley de régimen especial.


La señora PRESIDENTA: Señoría, tiene el turno
de portavoces para esta intervención.


El señor VIDAL MATAS:






Sí, sí. Si me permite,
explico porque abandono el turno de portavoces, que era lo que me había
comprometido a hacer, pero es que creo que es importante la
transparencia. El régimen especial de las Illes Balears no está incluido
en los presupuestos; el Estatuto de Autonomía de las Illes Balears se
incumple; por el factor de insularidad, que estaba regulado por el Govern
de las Illes Balears, y no por este senador, en 154,8 millones; y porque
la media per cápita de inversión territorializada es de 175 euros en las
Illes Balears, cuando la media estatal es de 258 euros y, además, la
mayoría de la inversión se gasta en puertos y aeropuertos. Con la
transparencia de estos datos nosotros queríamos dar apoyo a estos
presupuestos, siendo durísimos para las Illes Balears, porque, con
honestidad, creíamos que había un avance social.


Para las islas Canarias han hecho un listado de
convenios de carreteras, infraestructuras hidráulicas, el REF y la
ministra tenía una lista de argumentos, pero para decir lo que se
invertía en las Illes Balears ha tenido que sacar la partida general de
dependencia, ha cuestionado el 75 % de descuento y ha sacado las cifras
de los ERTE, como si eso fuera exclusivo para las Illes Balears. Visto
esto, abandonamos el turno de defensa, pasamos a la abstención en todas
las gestiones y estamos más cerca del voto en contra que del voto a
favor, que era donde estábamos antes de entrar en esta sala.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 16, Ministerio del Interior.


Impugnación número 32, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado. En turno a favor, por tiempo de 5 minutos, tiene la
palabra el senador Martínez-Maíllo.


El señor MARTÍNEZ-MAILLO TORIBIO: Gracias,
señora presidenta.


¡Qué crack, la ministra!, después de dos horas
y media es capaz, incluso, de transformar y cambiar el sentido de uno de
los votos que tenía asegurado, y no me extraña, porque ha hecho una
defensa profundamente decepcionante de estos Presupuestos Generales del
Estado. Y, en concreto, de esta sección, la que tiene que ver con el
Ministerio del Interior, no es que sean decepcionantes, es que son
profundamente y verdaderamente malos para el conjunto de los españoles y
no solucionan ninguno de los problemas de las fuerzas y cuerpos de
seguridad del Estado. No hay ni una sola iniciativa, no hay nada nuevo en
estos presupuestos referidos al Ministerio del Interior, absolutamente
nada, ni una propuesta. Bueno, sí, del conjunto de los fondos europeos,
de los miles y miles de millones, solo aparecen 6 millones,
concretamente, para digitalización; solamente eso, 6 millones del
conjunto de los miles de millones de euros de los fondos europeos. No hay
ni un euro para equiparación salarial de los funcionarios de prisiones.
En esto, señores del Partido Sanchista, sí se podrían haber anotado un
tanto, si hubieran sido capaces de reunirse con los funcionarios de
prisiones y haber hecho una equiparación salarial, como hicimos nosotros
con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en el
año 2018 (Aplausos), y que ustedes están cumpliendo a regañadientes
—tuvieron que pedir un informe del Consejo de Estado—, y ni
siquiera son capaces de cumplirlo en su integridad, porque todavía
faltan 100 millones de euros de equiparación salarial referidos a la
incorporación al servicio activo de aquellos policías y guardiaciviles en
segunda actividad. De los más de 600 millones de euros establecidos en el
Plan de infraestructuras —como saben ustedes, pero que no lo han
dado a conocer, habituales cumplidores como son de la
transparencia—, solo hay 34 millones, 18 millones menos de los que
tenía el presupuesto del año 2018 del Partido Popular. Para Policía
Nacional, cinco reformas de comisarías, pero para la España rural, que
tiene más de 2000 cuarteles de la Guardia Civil, destinan
exclusivamente 20 millones de euros, que no da más que para diez
cuarteles de la Guardia Civil. Desaparecen 1,5 millones para obras del
Plan de mejora de áreas destinadas a violencia de género.


El caso de la inmigración merece un capítulo
aparte, porque no existe un plan de lucha contra la inmigración ilegal.
Lo sucedido en Canarias es el ejemplo de la ineficacia, del descontrol,
del desgobierno, de la descoordinación de este Gobierno, y, en
particular, del ministro mentiroso del Interior, el señor Marlaska, que
ha generado una crisis migratoria de campeonato. Del campamento de la
vergüenza, en Arguineguín, hemos pasado a los vuelos clandestinos de
inmigrantes destinados a Granada, Alicante y Valencia. Eso sí, el señor
ministro del Interior no se enteraba o no quiere enterarse, pero la
secretaria de Estado ha dejado bien claro que esos vuelos forman parte de
la política del Gobierno. Por lo tanto, sería conveniente que nos
explicaran oportunamente quién los paga y con qué destino se están
realizando. No hay ni un solo euro para el plan de mejora de los CIE. ¡No
hay ni un solo euro! No hay fondos para proteger a las fuerzas y cuerpos
de seguridad del Estado. Todavía no se les ha reconocido como personal de
alto riesgo. No hay presupuesto dentro de la Dirección General de Tráfico
para solucionar el colapso y el retraso en los exámenes del carné de
conducir que están denunciando las autoescuelas de España. No hay ni un
solo euro para solventar el atasco en la resolución de los derechos de
asilo, lo cual es una vergüenza. Más del 40 % de las peticiones de asilo
corresponden a nuestros amigos venezolanos. No sé si tiene que ver el
hecho de que haya miembros del Gobierno muy cercanos al régimen de Maduro
o de que haya un expresidente del Gobierno —expresidente del
Gobierno— que apoye de manera tan infame un régimen tan dictatorial
como el del señor Maduro en Venezuela. Por cierto, cuando un expresidente
del Gobierno habla de política exterior y cobra del conjunto de los
españoles, claro que ofende al conjunto de los españoles y compromete la
política de Estado de un Gobierno. Por eso, el Gobierno de España debería
cuanto antes desautorizar las declaraciones del señor Zapatero,
expresidente del Gobierno, que compromete y avergüenza a muchos españoles
apoyando un régimen dictatorial como el de Maduro. ¡Cuanto antes debería
hacerlo! (Aplausos).


Estos presupuestos, en general, son malos y,
como he dicho, los del señor Marlaska especialmente, porque se
corresponden con un ministro desgastado; un ministro que está dimitiendo
desde hace tiempo y todavía ni se ha enterado; un ministro acorralado por
sus mentiras; un ministro ineficaz e insolvente; un ministro que, además,
en muy pocos meses, ha pasado de tener un gran prestigio como juez, a
suponer el descrédito dentro de un Gobierno completamente en descrédito.
Estos presupuestos son tan mentirosos como el ministro del Interior que
los ha elaborado, el señor Marlaska. Por eso, defendemos el veto a esta
sección 16 de los Presupuestos Generales del Estado.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Impugnación número 24, de
los senadores Cleries i González y Matamala Alsina, del Grupo
Parlamentario Nacionalista.


Tiene la palabra el senador Cleries i
Gonzàlez.


El señor CLERIES I GONZÀLEZ: Gracias,
presidenta.


Nosotros hemos impugnado esta sección, porque
si alguna cosa ha quedado clara cuando hablamos de represión es lo que
han representado determinados miembros de los cuerpos de seguridad del
Estado y su actuación en Cataluña el 1 de octubre, que ha tenido
continuidad, por ejemplo, en la operación Volhov de la Guardia Civil, o,
hace poco, en el juicio a la cúpula del Departament de Interior de la
Generalitat, que estaba el 1 de octubre de 2017, donde la Audiencia
Nacional desacreditó lo que dijeron el coronel Pérez de los Cobos y el
teniente coronel Baena. No puedo entrar en detalles con los minutos que
tengo, pero sí quiero decir que cambió y dio la razón al mayor de los
Mossos d’Esquadra, el señor Trapero, y a toda la cúpula de
Interior, contrariamente a lo que decían los testimonios en el juicio
contra el Gobierno de Cataluña ante el Tribunal Supremo, quien, qué
casualidad, sí les hizo caso. Estas personas continúan persiguiendo a los
independentistas catalanes. Igualmente, el ministro Grande-Marlaska dijo
en el Congreso que existía una policía patriótica, lo reconoció. La
pregunta es: ¿sabiendo todo lo que está pasando en los cuerpos
policiales, con determinadas personas y determinados grupos, por qué no
actúa el ministro Marlaska?


Nosotros, viendo la inoperancia de alguien que
reconoce estas situaciones y no hace nada, nos parece que lo mejor que se
puede hacer es impugnar esta sección y, también, impugnar la tarea de
este ministerio y de su ministro.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


Para el turno en contra, tiene la palabra la
senadora Hernández Espinal, del Grupo Parlamentario Socialista.


La señora HERNÁNDEZ ESPINAL: Muchas gracias,
señora presidenta.


Señorías, en primer lugar, querría aprovechar
que estoy en la tribuna para hacer una mención especial a los miembros de
las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y a los funcionarios y
funcionarias de prisiones, que se han batido y se siguen batiendo el
cobre en esta pandemia para darnos seguridad a los españoles y a las
españolas. (Aplausos).


Señores del Partido Popular, ¡cómo oponerse a
un presupuesto en seguridad en el que se consolida la equiparación
salarial de policías y guardiaciviles! Lo que supone una subida en las
nóminas de nuestros agentes de un 20 % más de salario; en torno a 560
euros más de media al mes cada uno de ellos. La subida más importante y
la mejora salarial más importante en la historia de las fuerzas y cuerpos
de seguridad del Estado. ¡Cómo es posible que ustedes, que se arrogan la
autoría, voten en contra de esta sección! ¡Cómo oponerse a unas cuentas
que contemplan una tasa de reposición de efectivos de un 115 %, más
de 1000 nuevas plazas de funcionarios y funcionarias de prisiones, o 400
y 710 nuevas plazas para policías y guardiaciviles, lo que supone
recuperar, de facto, las plazas perdidas en la época de los gobiernos del
Partido Popular, que ascendieron a más de 12 000! En total, una
consignación presupuestaria para una dotación de plazas de 196 000
efectivos. ¡Cómo oponerse a la modernización de nuestro perímetro
fronterizo, a más dinero en la lucha contra la droga y el crimen
organizado en la costa sur de España, en Andalucía! ¡Cómo oponerse al
nuevo DNI electrónico, con el proyecto Identidad Digital! ¡Cómo oponerse
a reforzar la protección civil y nuestras emergencias, a Alert Cops, a
VioGén, al memorial de las víctimas del terrorismo en Vitoria-Gasteiz, a
mejores medios para nuestras fuerzas y cuerpos en telecomunicaciones,
chalecos antibalas, drones o vehículos sostenibles! ¡Cómo ponerse
a 90 millones de euros en infraestructuras! ¡Cómo oponerse a más dinero
para la Oficina de Asilo! ¡Cómo es posible, ustedes, que tanto avalan a
las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado! ¡Cómo oponerse, en fin, a
casi 9000 millones de euros —8906 millones de euros—, lo que
supone una subida de un 15,90 % con respecto a los últimos presupuestos
de Montoro presentados en esta Cámara!


Hablan ustedes en términos relativos,
haciéndose trampas en el solitario, como si fuéramos estúpidos o los
españoles fueran estúpidos. En términos relativos, hablan de que solo
subimos un 3 %, pero se olvidan de mencionar que el Ministerio del
Interior es el cuarto por volumen de inversión y gasto en los
presupuestos más sociales de la historia. ¿Qué es más, señores del
Partido Popular, el 100 % de 2 o el 3 % de 100? El 100 % de 2 es 2 y
el 3 % de 100 es 3. ¡Si hasta una niño de 3 años sabe que el 2 es menor
que el 3! (Aplausos).


Malabares argumentales, intervenciones
extravagantes para vetar unas cuentas que son objetivamente mejores, en
todos los aspectos, a las que ustedes presentaban hace tres años, en
abril de 2018, y si son obsoletas por el mero paso del tiempo, más aún lo
son teniendo en cuenta la coyuntura de la pandemia que estamos
atravesando en todo el mundo; presupuestos que ustedes aprobaron del
ronzal, cuyas novedades, entonces, fueron la subida de las pensiones tras
las movilizaciones de nuestros pensionistas, y que se incorporaron tras
un pacto con el Partido Nacionalista Vasco; o la equiparación salarial,
que tanto mencionan ustedes, de las fuerzas y cuerpos de seguridad del
Estado, pero que fue una realidad tras movilizaciones masivas de
plataformas que reivindicaban justicia salarial para la Policía y la
Guardia Civil; o, por ejemplo, la dotación comprometida en el Pacto
contra la violencia de género, que fue arrancado por las mujeres en las
calles, o por los socialistas y las socialistas, junto a otras fuerzas,
en el Congreso de los Diputados. Y es que lo tienen ustedes muy difícil,
señores del Partido Popular, yo lo entiendo. Tienen ustedes que mentir,
retorcer los datos o hacer una intervención faltona y extravagante, como
la del señor Maroto.


El Partido Popular no es muy partidario de la
negociación —y bien que lo lamentamos, y hasta el último momento
les hemos estado tendiendo la mano—, y no me extraña, porque a
veces no son ustedes muy fiables, ya que ustedes son capaces de enmendar
su propio presupuesto. ¿O no recuerdan lo que ocurrió en la aprobación de
los Presupuestos Generales de 2018 aquí en el Senado, que, tras la moción
de censura, se los enmendaron a ustedes mismos para no cumplir un pacto
con el Partido Nacionalista Vasco?


Hablan ustedes de vergüenza y de infamia, pero
el hedor de la corrupción era insoportable y aún sigue oliendo un poco a
podrido y, precisamente, no en Dinamarca, sino en el escaño del anterior
portavoz, el señor Cosidó, antiguo director de la Policía, que hoy mismo
ha sido señalado por el ex DAO, Eugenio Pino, y por el comisario García
Castaño en los interrogatorios de la trama Kitchen. Con todo el respeto
se lo digo, con todo el respeto. (Aplausos). Ese señor del que usted me
habla va a acabar siendo el señor Cosidó, va a acabar siendo, como tantos
diputados y senadores del Partido Popular, «ese señor del que usted me
habla». ¡Al tiempo!


¿No se dan ustedes cuenta de que la corrupción
y la respuesta austericida han supuesto la irrupción de Vox a costa del
Partido Popular? Y me ponen de ejemplo a la canciller Merkel. Bien harían
ustedes con escucharla más. Ella tiene bastante claro que con la
ultraderecha no se puede contar absolutamente para nada. Escúchenla
ustedes más y no la pongan de ejemplo exclusivamente cuando les viene
bien. Porque la ciudadanía ha decidido un Parlamento conformado por muy
diferentes opciones políticas; los presupuestos que debatimos en el día
de hoy vienen de un Congreso en el que han obtenido el apoyo de más
partidos que nunca —de 11 partidos políticos—, pero bien
habrían merecido tener el apoyo de todos, porque dan certidumbre a la
ciudadanía, con una dotación adecuada a nuestros servicios públicos,
apuestan por la seguridad pública, en una situación de natural
preocupación y zozobra, y generan estabilidad, y eso es una fortaleza
para nuestro país. Más me preocuparía el futuro de España si las
decisiones las tomaran aquellos que no condenan nítidamente o justifican
a aquellos que quieren fusilar a 26 millones de compatriotas, y me
ilusiona que vuelvan a hablar de un proyecto común de país aquellos que
en algún momento se han llegado a cuestionar su pertenencia, pero que
ahora deciden construir un proyecto para todos desde la responsabilidad.
Solo por eso, desde luego, señorías, merecerían salir adelante.


Por todo ello, pido el rechazo a los vetos
planteados.


Muchas gracias, señora presidenta.
(Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 17. Ministerio de Transportes,
Movilidad y Agenda Urbana.


Impugnación número 3, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado.


Tiene la palabra el senador Rollán Ojeda.


El señor ROLLÁN OJEDA: Gracias, señora
presidenta.


Estos presupuestos están sustentados sobre la
base de un cuadro macroeconómico cuyas previsiones económicas y fiscales
están totalmente desfasadas, y todos lo sabemos. Esta afirmación no es
únicamente del Partido Popular, sino que es compartida y refrendada por
la Presidencia de la Airef o el gobernador del Banco de España, entre
otros —nada sospechosos, por cierto—. El crecimiento estimado
por ustedes se aleja de la realidad y sus ingresos están claramente
sobredimensionados, pese al sablazo fiscal que pretenden perpetrar,
especialmente en Madrid. Son el único Gobierno europeo que sube los
impuestos en lugar de bajarlos. Tomen buena nota de las comunidades
autónomas donde gobernamos, bajen los impuestos a todos, porque se
reactivará la economía y se incrementarán los ingresos, y, también, los
cotizantes. Con su presupuesto, la previsión de los ingresos públicos se
desmoronará y será difícil, por no decir imposible, contar con los
recursos suficientes para poder ejecutar las partidas de gasto
contempladas en esta sección, salvo que el déficit sea mayor aún del
previsto en el 2021, que asciende al 7,7 %, lo que conllevaría disparar
de forma desmedida la deuda y provocar la falta de la sostenibilidad
financiera de nuestras cuentas públicas. Otra voz autorizada que les ha
delatado es AENA, la única empresa pública cotizada que, por su
naturaleza, no es objeto de politización por parte del Gobierno
Frankestein, y que el pasado día 28 de octubre comunicó un hecho
relevante ante la CNMC acerca del proyecto de presupuestos, advirtiendo
al órgano de control que las estimaciones económicas financieras
proporcionadas por el Ejecutivo no se corresponden con la actual
previsión de cierre del ejercicio 2020. El operador aeroportuario no se
quedaba ahí y afirmaba también en su escrito que las cifras publicadas
por el Gobierno para el 2021 no son creíbles, ya que incluso la propia
compañía, dada la gran incertidumbre, carece de una estimación de tráfico
que le permita conocer cómo evolucionará en los próximos meses. Tiene,
por lo tanto, usted un serio problema con la credibilidad. Señorías, en
el caso de esta empresa y su red de influencia, están en juego 400 000
empleos, lo que no es una cosa menor. Filibusterismo presupuestario,
señorías, esto es lo que recoge su proyecto de presupuestos;
filibusterismo presupuestario acompasado por los peores socios dentro del
arco parlamentario: Esquerra y Bildu, y lo han escogido ustedes y lo han
hecho voluntariamente, porque había otras alternativas, pero, simple y
llanamente, las han despreciado. Se encuentran cómodos entre los que,
desde su momento fundacional, constataban su rechazo y oposición a
nuestra querida nación: España. Históricamente, cada paso que algunos de
sus socios han dado era para poner palos en la rueda al Estado español, y
a veces bombas. Y aun así, y siendo conocedores de ello, ustedes se
vanaglorian y felicitan; esto solo puede terminar mal o muy mal, y si no,
al tiempo, señorías.


Señores del Gobierno, su hoja de ruta es el
cortoplacismo y la propaganda. El Ministerio de Transportes, Movilidad y
Agenda Urbana no es una excepción, si acaso, su máximo exponente.
Anuncian 13 863 millones, presumiendo de un incremento de 4953 con
respecto al presupuesto de 2018, pero omiten, y lo hacen de manera
deliberada, que el 100 % del supuesto incremento está asociado al
mecanismo de recuperación y resiliencia, con unos proyectos que ni
siquiera han sido presentados formalmente, que no sabemos si cumplirán
las condiciones definidas en unos reglamentos que todavía no han sido
elaborados, que una vez que se presenten, si es que ustedes los
presentan, y en caso de que se pusieran de acuerdo, no sabemos si serán
aprobados por Bruselas, y que, en caso de ser aprobados, dudamos
seriamente de su capacidad para llevarlos a cabo.


En materia de vivienda, este ministerio habla
de reorientar la política de vivienda para que esté al alcance de las
personas que más lo necesitan, algo que choca frontalmente con su
intención de limitar e intervenir en el precio del alquiler. Pues allí
donde se han aplicado estas medidas, el incremento de los precios ha
ascendido al 36 % —Berlín—, o ha desaparecido el 20 % de la
oferta, caso concreto de París. Esta mañana la ministra incidía en
garantizar el acceso a la vivienda. Díganselo ustedes a quienes se
emancipan. Díganselo ustedes a ese 43 % que quiere buscar un empleo y que
no es capaz de encontrarlo; sin empleo, es imposible emanciparse,
señorías.


Por estas razones y por muchas otras que por
falta de tiempo no puedo desarrollar, se hace más necesario que nunca
presentar esta impugnación a la sección 17. Por lo tanto, les pido su
apoyo porque no debemos ser cómplices de las nefastas consecuencias de
unos presupuestos fallidos.


La señora PRESIDENTA: Debe ir terminando ya,
señoría.


El señor ROLLÁN OJEDA: La sección 17 podría ser
una palanca de recuperación, pero este presupuesto, más que una palanca,
será una pala, una pala que enterrará la recuperación, las oportunidades
y el progreso que necesita nuestro pueblo. Sus presupuestos están
apoyados por históricos enemigos de España... (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría. Su
tiempo ha terminado.


Impugnación número 25, del Grupo Parlamentario
Nacionalista, presentada por los senadores Cleries i Gonzàlez y Matamala
Alsina. (Rumores). Por favor, señorías, silencio, que va a intervenir un
orador.


Tiene la palabra el senador Cleries i
Gonzàlez.


El señor CLERIES I GONZÀLEZ: Gracias,
presidenta.


En la sección que antes se llamaba Fomento, hoy
Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, nos encontramos con un ministerio
que, tradicionalmente, en inversiones en Cataluña, de cada cuatro años,
uno la inversión le sale gratis al Estado porque nunca ejecuta los años
anteriores, lo que quiere decir que, gracias a esto, financia un año, que
es una gran vergüenza y un gran engaño, pero que está detectado por los
catalanes y catalanas.


En estos presupuestos, que dicen que los
números son tan buenos, la inversión real es de 1999,30 millones de euros
para Cataluña, un 16,5 % del total territorializado y un 10,4 % del
total. Aquí suman 200 millones pendientes de una sentencia sobre la
disposición adicional tercera, pero es una trampa porque estos 200
millones los deben. El 26 de septiembre de 2018 la Comisión Mixta de
Asuntos Económicos acordó que se pagaría la deuda correspondiente a 2008,
que ascendía a 750 millones, y que se tenía que ir pagando con dotaciones
de 200 millones. En 2021, se deberían incorporar 600 millones, no 200,
pero la sentencia solo recogió 200, y aún hemos de estar contentos y
votar a favor sus presupuestos. Pues no lo estamos y no los vamos a
votar.


Y también hoy he explicado el nuevo Plan de
Rodalíes, que presentó el ministerio hace pocos días, dotado con 6346
millones de euros en diez años. Resulta que se han diseñado y previsto
sin la participación del Govern de la Generalitat de Catalunya; es decir,
el Departamento de Territorio, que es quien tendría que participar porque
es el titular del servicio, no puede participar y le explican las
inversiones que se han de hacer. Pero, claro, tenemos la experiencia del
Plan 2010/2015, con 4000 millones —la lluvia de millones que decía
antes—, en el que solamente se ejecutó un 15 %, y respecto al
Plan 2014/2016 —que era más modesto—, de 306 millones, solo
se ejecutó el 12 %. Pues, evidentemente, para números mágicos que después
no se ejecutan, preferimos ir con prevención y decir no a esta
sección.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En el turno en contra, por el Grupo
Parlamentario Socialista, intervendrá el senador Aragón Ariza.


El señor ARAGÓN ARIZA: Gracias, señora
presidenta. Buenas tardes, señorías.


Mis primeras palabras en esta Cámara son para
los senadores constituyentes granadinos que tuvieron la oportunidad de
iniciar su andadura política en este Senado, y también para una persona
muy querida para mí que lo está pasando muy mal en estos momentos, que es
mi padre. (Aplausos).


Señorías, no sabemos muy bien a qué se refiere
el Partido Popular en esa memoria justificativa que nos ha traído para
conformar esta sección 17 de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana,
porque hay que recordar a las señorías del Partido Popular que esta
aportación europea consiste en ayudas y préstamos. El señor Bernabé, el
otro día en la Comisión de Presupuestos, decía que cómo éramos tan
atrevidos y osados de incorporar los fondos europeos a dichos
presupuestos; curiosamente, la Unión Europea por la tarde, ese mismo día,
aprobó estos fondos europeos con esa sustanciación. Hemos escuchado aquí
a los señores del Partido Popular en el mes de junio y en el mes de julio
decir que España iba a ser rescatada por los fondos europeos. Pues bien,
señorías, España no va a ser rescatada porque lo que se va a desembolsar
son ayudas y préstamos: en esta sección, nada más y nada menos que 4982
millones de euros. Para poner en duda estos fondos, el Partido Popular
dice que no sabemos si se cumplirán las condiciones, no sabemos si se van
a aprobar los reglamentos por Bruselas, no sabemos cómo se van a elaborar
los proyectos, no sabemos si vamos a ser capaces de ejecutarlos, como si
ustedes no hubieran ejecutado nunca fondos europeos. Son tan obvios
ustedes que, incluso para criticar las políticas de vivienda, hacen
referencia a los fallidos presupuestos del año 2019, aquellos que
aprobaron ustedes también. El colmo de todos los problemas es cuando
dicen que estos presupuestos están perdiendo la oportunidad de la
financiación europea y que, para apoyarlos, ustedes solicitan al Gobierno
una autoridad independiente, una agencia independiente, como decía el
señor Maroto con anterioridad. Y yo les pregunto, señorías del Partido
Popular, cuando recibieron el rescate financiero, más de 60 000 millones
de euros de los fondos europeos, ¿qué autoridad independiente
establecieron ustedes para negociar esos fondos europeos? (Aplausos).
¿Qué autoridad independiente establecieron ustedes para ese rescate
financiero o para esa reforma fiscal, esa amnistía fiscal que hizo el
Partido Popular de 40 000 millones de euros? Vayan sumando: 60 000
más 40 000 hacen un total de 100 000 millones de euros. A ustedes, que
critican a los socialistas porque somos malos gestores, les recuerdo que
el señor Montoro decía que esa amnistía fiscal de 40 000 millones de
euros iba a suponer para las arcas públicas españolas algo así como 2500
millones de euros. Al final, se ingresó el 47,64 %, es decir, 1191
millones de euros. ¡Excelentes gestores! Señorías, yo prefiero un
Gobierno socialcomunista que proteja a los trabajadores, que proteja la
violencia de género, que proteja los transportes, la vivienda, la
movilidad, los ERTE, antes que un Gobierno gürtelista y kitcheniano que
proteja a los defraudadores. Como dice mi buen amigo Tontxu, en estas
circunstancias, es más fácil resucitar a una empresa que,
desgraciadamente, resucitar a una persona.


Señorías, decían ustedes también en la
Subcomisión de Presupuestos que habíamos aplicado el rodillo en las
enmiendas que el Partido Popular había presentado. Les recuerdo que el
Partido Socialista también presentó enmiendas a estos presupuestos cuando
estuvo en la oposición: 1805 en el año 2017; 1811 en el año 2018, y ya le
digo yo la suerte que tuvimos. Los socialistas creemos que a estos
presupuestos en ningún caso le sobran 26 millones de personas, sino que
le faltan 5 047 040 votantes que tuvieron ustedes en las elecciones
generales del 10 de noviembre. Creo que esos son los presupuestos dignos
que los españoles quieren en un momento tan delicado para la ciudadanía
española.


Señorías, nos ponemos mascarilla en estos
momentos, pero a algunos se les caen las caretas. Me gustaría que el
Partido Popular hubiera invertido, en estos momentos difíciles allí donde
gobiernan y tanto pecho sacan, en mascarillas en vez de en banderas y
bombillas, y así les hubiera ido bien a la españoles. (Aplausos).
Señorías, a veces hay que bajar un poco el volumen de lo que escuchamos
en esta Cámara para intentar subir el tono de lo que nos dicen los
ciudadanos en la calle. Porque yo les pregunto, señorías del Partido
Popular, ¿admitirían ustedes una autoridad independiente para investigar
las muertes en las residencias de ancianos de mayores en Castilla y León?
Hace pocos días Partido Popular y Ciudadanos han votado que no.
¿Admitirían una autoridad independiente para esas investigaciones? ¿O
admitirían una autoridad independiente, señores del Partido Popular, que
analizara el dumping fiscal que están haciendo algunas comunidades
autónomas contra otras? ¿O qué le parece si hiciéramos una autoridad
independiente para investigar las contrataciones exprés que el TSJ de
Andalucía ha dicho que son manifiestamente ilegales? ¿O para estudiar el
decreto de simplificación de trámites burocráticos y administrativos que
hicieron el Partido Popular y el Gobierno de Andalucía en plena pandemia?
¿O qué les parece si hacemos una autoridad, una agencia independiente,
para investigar las 15 000 dosis de vacunas que se han extraviado en mi
ciudad, Granada? ¿Se imaginan lo que hubiéramos escuchado en esta Cámara
si esas 15 000 dosis en vez de gestionarlas el Gobierno de Moreno Bonilla
las hubiera gestionado Pedro Sánchez, y en vez de la vacuna de la gripe,
hubiera sido la vacuna de la COVID? Pues 15 000 dosis de la vacuna contra
la gripe se perdieron en Andalucía y en Granada. Y yo les pregunto,
señorías: ¿podemos buscar modelos de autoridad independiente? Yo les
propongo tres modelos: uno, el del éxito económico que tuvo el Partido
Popular en la época de Aznar y que le duró un rato; el amigo Rodrigo
podría ser un buen personaje para la autoridad independiente. O quizá
otro personaje importante para esa autoridad independiente podría ser el
amigo Bárcenas, Luis, sé fuerte, un buen gestor de fondos en b. O quizá
Pepe pig, Villarejo, podría ser otro gran buscador de la autoridad
independiente para poder estudiar esos fondos a los que ustedes tanto
ahínco tienen. (Rumores).


Señorías, el Gobierno socialista propone en
estos presupuestos a la sección de Transportes, Movilidad y Agenda
Urbana 123 800 empleos, una inversión de 1000 millones para
digitalización, 600 millones para la empresa privada y 400 millones para
las comunidades autónomas y ayuntamientos, esos que ahora tanto defienden
ustedes. Son unos presupuestos que suponen para los capítulos 4, 6, y 7
algo más de 6000 millones de euros de inversión en carreteras, movilidad,
vivienda; más de un 54 % respecto de los últimos presupuestos aprobados.
Son unos presupuestos que cambian la «o» de Montoro por la «e» de Montero
para poder hacer más educación, más ERTE, más empleos, más ecología, más
energía verde, y muchas más cosas, compañeros y compañeras.
(Aplausos).


Acabo con un proverbio chino que dice
—por aquello de Gobierno socialcomunista que a ustedes tanto les
gusta repetir— que cuando soplan vientos de cambio algunos
construyen muros —supongo que lo de los muros les debe de sonar a
algo— y otros preferimos construir molinos.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 18, Ministerio de Educación y Formación
Profesional. Impugnación número 33, del Grupo Popular en el Senado. Tiene
la palabra el senador Ruz Villanueva.


El señor RUZ VILLANUEVA: Gracias,
presidenta.


Señorías, venimos hoy a hablar del veto general
a la sección 18 de los Presupuestos Generales del Estado y, por desgracia
para todos nosotros, hablar de la sección 18 es hablar de la Ley Celaá,
es hablar de educación. Y hablar de la Ley Celaá hoy en este Pleno,
hablar de presupuestos educativos hoy en este Pleno y conjuntar ambos
conceptos es hablar, como afirmó nuestro portavoz en su intervención hace
unas horas, del paquete de la vergüenza. ¿Por qué el paquete de la
vergüenza? Señores y señoras socialistas, ustedes han entendido los
Presupuestos Generales del Estado, también en materia educativa, como un
botín, un botín a repartir. Y para garantizar el voto de aquellos que con
sus políticas, con sus ideas y con sus acciones están en contra de todo
lo bueno que hemos construido como sociedad, ustedes pretenden, a modo de
chantaje, forzar la votación de los presupuestos en conjunto con la
propia ley Celaá la semana que viene.


Señorías, esto es inmoral. ¿En qué cabeza cabe
que un senador de esta Cámara pueda defender que una ley educativa que
fundamenta los pilares, que vertebra los pilares de una nación se tramite
por la puerta de atrás, con prisas, sin sosiego, sin voluntad de acuerdo
y sin escuchar a nadie? ¿En qué cabeza cabe, señorías? (Aplausos). Me
niego rotundamente a creer que todos ustedes comparten las formas en la
tramitación de esta ley en esta Cámara. Es más, la semana pasada,
precisamente en la comisión en la que organizábamos la ponencia de este
próximo jueves y viernes, algún senador lo afirmó, y yo les invito
profundamente a pensar en esto. Si ustedes niegan la posibilidad de que
esta Cámara, como Cámara de segunda lectura, enmiende la ley para
corregir los errores, si ustedes pretenden evitar que esta Cámara, como
Cámara de segunda lectura, pueda mejorar una ley que, evidentemente, es
una ley muy mejorable y que atenta directamente contra muchos de los
derechos, si ustedes pretenden hurtar el debate, les invito a que
presenten una proposición para cerrar el Senado.


Esta es la visión que ustedes tienen de esta
Cámara. Ustedes no creen en esta Cámara, y estos presupuestos, esta ley
Celaá y la manera de tramitar la propia ley educativa son la prueba más
evidente de que no creen en el carácter constitucional de esta Cámara
Alta como forma de corregir lo que nos viene del Congreso.
(Aplausos).


En ustedes, todo es una gran mentira. A ustedes
les da igual la ley educativa, a ustedes les da igual —como afirmó
en esta tribuna la señora ministra— que se vaya a promocionar sin
límite de suspensos. La señora ministra llegó a afirmar: Eliminemos el
suspenso y así eliminaremos el fracaso escolar. Eso lo dijo la señora
ministra de Educación de este país, lo dijo la señora Celaá aquí, lo
escuchamos todos. A ustedes les da igual la calidad educativa, a ustedes
les importa absolutamente cero cuál sea el nivel de preparación de los
jóvenes españoles. Lo único que les importa a ustedes es garantizar su
permanencia en el sillón del Gobierno, y eso es muy grave, eso es
gravísimo, y también es inmoral. A ustedes les da igual que su ley
ofrezca la posibilidad de que los padres elijan el modelo educativo que
quieren para sus hijos; les da igual a ustedes que con la disposición
adicional cuarta se carguen de hecho la educación especial; les da igual
a ustedes, como les he dicho, que se pueda promocionar sin límite de
suspensos; les da igual a ustedes que la ley afrente y se cargue el
concepto de patria potestad; les da igual a ustedes que la ley elimine la
zona única y, por tanto, la libertad educativa; y les da igual a ustedes
que los alumnos se pongan en huelga a partir de los 14 años. ¡Les da
exactamente igual! Solamente les interesa el poder, la demagogia, la
propaganda por encima de lo que sea y con el objetivo que sea pertinente
en cualquier momento.


Nosotros defendemos el veto a estos
presupuestos porque son el veto a la Ley Celaá que pretenden colarnos por
la puerta de atrás de una manera absoluta e impúdicamente inmoral en esta
Cámara, que ustedes desprestigian con sus acciones.


Termino. Ahora me dirán que, efectivamente, las
becas han aumentado, cosa muy matizable, nos hablarán de las bondades de
los presupuestos...


La señora PRESIDENTA: Debe ir terminando,
señoría.


El señor RUZ VILLANUEVA: Concluyo, señora
presidenta. Y nos hablarán de todo lo que ustedes consideren, pero lo
cierto y verdad es que quienes enfrentan, quienes destruyen y quienes, de
hecho, están cuestionando la educación pública fundamentada en la
complementariedad de los dos modelos no somos nosotros, son ustedes con
su ley y con estos presupuestos.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Muchas gracias.


Impugnación número 26, de los senadores del
Grupo Parlamentario Nacionalista Castellví Auví y Cleries i
Gonzàlez.


Tiene la palabra, en el turno a favor, la
senadora Castellví Auví.


La señora CASTELLVÍ AUVÍ: Gracias, presidenta.
Señorías, bon vespre. Evidentemente, como no podría ser de otra manera,
este presupuesto ayuda a gestionar la crisis sanitaria, social y
económica generada por la COVID-19, pero, como tampoco podría ser de otra
manera, nosotros no podemos desvincularlo de la crisis política y de la
débil democracia en que vivimos. Los líderes sociales y políticos
catalanes están en la cárcel, en el exilio o inhabilitados. Nuestras
instituciones, al igual que centenares de ciudadanos y ciudadanas, sufren
una constante persecución política, policial, judicial y mediática, que
vulnera, día sí y día también, los derechos básicos y fundamentales.


En este marco de represión e incapacidad
política y algunos cambios estructurales derivados de la LOMLOE, mejor
dicho, Ley Celáa, en Junts per Catalunya no podemos apoyar este
presupuesto en Educación. El incremento de 3317 millones de euros
respecto a los presupuestos de Rajoy es una gran noticia para el mundo
educativo, pero para Junts per Catalunya hay dos líneas rojas de la Ley
Celáa que no nos permiten poder aprobar estos presupuestos educativos.
Primero, el texto da vía libre al Ministerio de Educación, el actual o
cualquiera que venga después, para intervenir en la regulación
lingüística del catalán en la escuela, dicho de otra manera, desprotege
la inmersión lingüística, ya que la Generalitat dejará de ser la única
autoridad educativa en esta materia, y esto vale para todas las
comunidades autónomas con lenguas cooficiales. Tengan cuidado.


Segunda línea roja. El texto pone en riesgo el
pilar fundamental de nuestro sistema educativo: la cooperación entre
iniciativa pública y privada concertada. Nosotros apostamos por que todas
las escuelas sostenidas con fondos públicos sean gratuitas, y este
presupuesto no destina ninguna partida exclusiva para que esto sea una
realidad.


Por todo lo expuesto, y porque antes que nada
nosotros ponemos por delante los intereses de Cataluña que los de España,
Junts per Catalunya propone el veto a la sección de Educación de los
Presupuestos Generales del Estado.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En turno en contra, por el Grupo Parlamentario
Socialista, tiene la palabra el senador De la Vega Carrera.


El señor DE LA VEGA CARRERA: Gracias,
presidenta.


En referencia al veto del Grupo Parlamentario
Nacionalista, quiero recordarles que sus socios de Gobierno en Cataluña
votaron a favor. ¿Piensan ustedes que Esquerra Republicana votaría a
favor de unos presupuestos que no fueran buenos en educación, cuando la
conselleria que ostentan en el Govern de la Generalitat es de esta
formación política? Son, sin duda, los mejores presupuestos de educación
para el conjunto de España y, cómo no, también para Cataluña. Y, por
cierto, estamos en una Cámara territorial, el Senado, y hay que poner en
valor que casi tres cuartas partes del presupuesto de educación estarán
gestionadas por las comunidades autónomas, que son las que tienen la
mayoría de competencias. (Aplausos).


En un momento de dificultad, el Partido Popular
da la espalda a los españoles y a las españolas, y esto se produce cuando
vemos que tenemos la oportunidad de realizar las transformaciones
económicas y sociales que necesitamos, que tenemos la oportunidad de
sentar las bases para el cambio del modelo productivo, energético y
social, aspectos recogidos también en la LOMLOE y que son absolutamente
necesarios. Y hablando de cambio climático, todos recordamos al alcalde
de Madrid, en una visita a una escuela, decir a los alumnos que para él
era más importante reconstruir una catedral europea que salvar la selva
amazónica. (El senador Ruz Villanueva:






Muy bien).


La señora PRESIDENTA: Senador Ruz, a pesar de
la mascarilla, se le oye.


El señor DE LA VEGA CARRERA: Y ahora, encima,
salen diciendo que adelantarán el periodo de matriculación en las
comunidades gobernadas por el Partido Popular para que no les afecte la
aprobación de la LOMLOE; por cierto, en la Comunidad de Madrid lo avanzan
una semana y eso es ridículo. Y que me disculpen, pero la libertad de
enseñanza está recogida en el articulado de la ley.


Como siempre, el Partido Popular nos tiene
acostumbrados a un circo mediático del postureo. No encuentro honesto
jugar con las emociones y los sentimientos de los padres y las madres de
los alumnos de las escuelas de educación especial a base de repetir
falsedades. (Aplausos). Dicen que cerramos las escuelas de educación
especial, pero ¿han leído la disposición adicional cuarta de la LOMLOE?
No dice nada de cerrar ningún centro de educación especial, sino todo lo
contrario, pasarán a ser centros de referencia, y traigo la LOMLOE porque
se lo voy a leer: Las administraciones educativas continuarán prestando
el apoyo necesario a los centros de educación especial para que estos,
además de escolarizar a los alumnos y alumnas que requieren una atención
muy especializada, puedan desempeñar la función de centros de referencia
y apoyo para los centros ordinarios. ¡Mentira tras mentira! (Aplausos). Y
estos días tendremos la oportunidad de desmontar todas las mentiras del
Partido Popular.


¿Y por qué decimos los socialistas que se tiene
que invertir más en la escuela ordinaria? Porque resulta que el 82 % de
alumnos con discapacidad está escolarizado en la escuela ordinaria, y por
ello hay que invertir más recursos en estos centros. Y ahora, al final,
la prueba del algodón con los presupuestos. ¿Qué peso tiene el
presupuesto de educación en comparación a los Presupuestos Generales del
Estado? Cuando gobernaba el Partido Popular era del 0,7, y en estos
presupuestos es más de 1 punto. Esta es la prueba del algodón de un
Gobierno progresista que invierte en educación, y ya pueden decir lo que
les dé la gana. (Aplausos). Un incremento que supone más del 70 % en
comparación con el último presupuesto del año anterior, una inversión
destinada a un triple objetivo. El primero, la promoción de la equidad a
través de las becas y ayudas al estudio, con un total de 2090 millones de
euros, lo que supone un incremento del 35 % respecto al año anterior; la
ampliación de la educación de 0 a 3 años, con 200 millones de euros; y la
prevención del abandono escolar, con el programa PROA, 80 millones de
euros, y otros programas y actuaciones por un valor de más de 30 millones
de euros.


El segundo objetivo que queremos cumplir es el
impulso de la formación profesional, con una partida de 1628 millones. A
la formación profesional del sistema educativo se
destinarán 654 millones, lo que supone un incremento del 349 %,
repito, 349 % de incremento, y eso significa que son unas cifras
indiscutibles que demuestran la voluntad del Gobierno para dotar a la
formación profesional con recursos suficientes para abordar los grandes
retos que tenemos como sociedad; en los próximos cuatro años se
crearán 200 000 nuevas plazas de formación profesional y este próximo
curso escolar serán 47 400. El ministerio pretende reconocer y acreditar
la experiencia de más de medio millón de españoles y españolas este
próximo curso escolar. Estas acreditaciones son necesarias para
trabajadores y trabajadoras que no las tienen a fin de que les puedan
ayudar a restablecer otra vez un itinerario formativo, porque la
formación continuada es una formación que se tiene que hacer a lo largo
de toda la vida.


Y el tercer objetivo, la digitalización de la
educación, donde se invertirán más de 1013 millones de euros en recursos
tecnológicos, en los centros para estudiantes, en capacitación para los
docentes con competencias digitales y en reducir la brecha digital.


Y así, los presupuestos del Ministerio de
Educación y Formación Profesional buscan actuar e incidir de una manera
real, concreta y efectiva para que todo aquel que tenga talento pueda
estudiar y no tenga requerimientos añadidos sobre su situación de renta,
para luchar contra la brecha digital, y que los profesores tengan los
medios y las competencias correspondientes para ir adaptando el sistema
educativo a la digitalización, y para reducir, lógicamente, el fracaso y
el abandono escolar, que lo haremos también con una nueva ley de
educación que derogará la LOMCE, una ley que solamente tuvo el soporte
del Partido Popular, mientras que la LOMLOE tiene el soporte de siete
partidos en esta última aprobación que se ha hecho en el Congreso. Y, por
cierto, por favor, no diga más que los socialistas estamos haciendo
trampas; llevamos un año y medio hablando sobre esta ley educativa, hemos
hablado con todos los colectivos y hagan el favor de respetarnos un poco
más.


Gracias. (Aplausos.— Rumores).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 19. Ministerio de Trabajo y Economía
Social. Impugnación número 34, del Grupo Parlamentario Popular en el
Senado.


Tiene la palabra la senadora Ruiz Sillero.


El señor RUIZ-SILLERO BERNAL: Gracias, señora
presidenta. Buenas tardes.


Después de escuchar a la ministra de Hacienda
resulta imposible votar a favor de los presupuestos que hoy debatimos. Se
falta al decoro parlamentario cuando se miente. Jamás había escuchado más
mentiras juntas sobre las políticas de empleo. (Aplausos). La ministra de
Hacienda se atreve a soltar que el campeón del desempleo es el PP. El
desparpajo político para ocultar la más grave crisis económica sufrida
por España con Zapatero no tiene límite, y tampoco tiene límite ocultar
que su partido, el PSOE, tuvo la deshonra de liderar el paro en Andalucía
durante los cuarenta años de Gobierno donde ella fue, además, consejera
de Hacienda y consejera de Sanidad, y por medio los fraudes de los ERE y
de la formación para el empleo, el mayor latrocinio de la democracia y
con dos presidentes del Partido Socialista condenados a penas de prisión
por el caso de corrupción más grave de España. (Aplausos).


Si hay algo que está demostrado es que el PSOE
es sinónimo de paro, de lo que conocen es de destruir empleo y de
defraudar fondos de los parados, solo encuentran trabajo los 700 asesores
colocados por el Gobierno. Con Zapatero, la curva de aumento de la tasa
de paro no era una curva, era una recta disparada hacia el cielo. Con
Zapatero, aumentó la tasa de paro en algo más de 10 puntos y quien logró
luego reducirla en esos mismos 10 puntos fue el PP con el presidente
Rajoy, dejando una economía saneada y una tasa de paro del 14,4 %
en 2018, y ustedes ya van por el 16,2 %. La foto que retrata a este
Gobierno tras doce meses es más paro y menos empresas. Les amplío esta
foto con unos datos: 650 000 parados más y 910 000 empresas
menos; 740 000 parados en ERTE que no sabrán si podrán incorporarse a su
trabajo y pasarán definitivamente al desempleo; 300 000 mujeres que han
perdido su puesto de trabajo; lideramos el paro juvenil en Europa; las
personas con discapacidad tienen menos oportunidades para trabajar;
millón y medio de autónomos ve peligrar su negocio. Estos presupuestos y
este Gobierno socialcomunista de España están dejando atrás a muchas
personas.


Señorías, está más que justificada la
presentación de este veto a la sección 19 del Ministerio de Trabajo,
sobre todo porque la ministra de Hacienda es experta en tres cosas: Una,
subir impuestos; dos, falsear los ingresos; y, tres, no ejecutar los
presupuestos. Este es el resumen de los presupuestos que nos traen a
debate hoy. El Gobierno de la mentira solo puede traer a esta Cámara un
presupuesto lleno de mentira, y así no se puede crear empleo.


El Gobierno se rinde y admite que solo
creará 800 000 empleos hasta 2023, es decir, poco más de todo el empleo
destruido desde principios de año. Con estos presupuestos no hay
esperanza. Creemos que es necesario reforzar las dotaciones para los
planes de empleo, especialmente para las comunidades autónomas más
desfavorecidas.


Por otro lado, he de señalar que el presupuesto
previsto para abonar las prestaciones de desempleo, a pesar de ser una de
las políticas a la que más recursos se destinan, 25 000 millones de
euros, es absolutamente insuficiente, teniendo en cuenta que tenemos un
Gobierno que es una máquina de destruir empleo y que en 2020, hasta el
mes de agosto, se ha gastado más por prestaciones por desempleo que lo
presupuestado para este 2021. Y, señorías, entonces, ¿van a dejar de
pagar las prestaciones a los parados porque no hay dinero? Con el PP no
cuenten para ello, para dejarlos abandonados, y por ello presentamos este
veto.


Los presupuestos evidencian, una vez más, que
los autónomos son los grandes olvidados del Gobierno. La dotación de la
gestión del SEPE de las prestaciones económicas por cese de actividad se
ha reducido drásticamente, pasando de los 15 millones de euros del
ejercicio anterior a los 2 millones. ¿Así apoyan a los autónomos? ¿Y cómo
explican que dejen tirado al sector de la hostelería? El PP ha presentado
una enmienda para darles ayudas directas. Con el PSOE y Podemos subirá el
IRPF, la prima de todos los seguros, se niegan a bajar el IVA de la
hostelería, de peluquería, de gimnasios, suben la cotización a la
Seguridad Social a los autónomos, a pesar de que les están diciendo que
se lo congelen y el Gobierno, de manera insensible, les dice que no.


Estos presupuestos son el resultado de unos
pactos ideológicos para destruir España, no para crear empleo, no para
ayudar a los autónomos del País Vasco, de Cataluña, de Aragón, Canarias o
Andalucía. No se preocupan de los jóvenes desempleados de Valencia,
Extremadura, Castilla-La Mancha o de Ceuta y Melilla, sino que se
preocupan únicamente de conseguir votos ideológicos para su ley de
educación o su ley de eutanasia, que quieren aprobar de manera exprés en
contra de la sociedad española.


Termino recordando un símil del portavoz del
Partido Socialista en materia de empleo, que dice lo que quiere hacer con
este Gobierno. Dice que hay que seguir andando en bicicleta y, al mismo
tiempo, reparando pinchazos. Pues yo le digo que el modelo del Partido
Popular es el modelo europeo, que queremos ir a motor ecológico y con
última tecnología y que sea española.


Por todos estos motivos, el Partido Popular
presenta este veto a la sección 19 del Ministerio de Trabajo y Economía
Social.


Muchísimas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Impugnación número 14 de los senadores Cervera
Pinart y Cleries i Gonzàlez, del Grupo Parlamentario Nacionalista.


Tiene la palabra el senador Cervera
Pinart.


El señor CERVERA PINART: Gracias, presidenta.
Intervengo desde el escaño.


Déjenme empezar repitiéndoles por qué Junts per
Cataluña no aprobará estos presupuestos, pues hace un momento el señor
Heredia parecía que no lo tenía nada claro y, evidentemente, no es lo que
usted decía. Junts per Cat no va a aprobar estos presupuestos porque
prefiera los del Grupo Popular, tampoco es porque Junts per Cat no se
sienta interpelado por la crisis sanitaria, social y económica generada
por la COVID-19, ni tan solo es porque creamos que no son necesarios unos
presupuestos, es, como hemos repetido toda esta tarde por activa y por
pasiva, porque nuestros líderes sociales y políticos están en la cárcel,
en el exilio o inhabilitados.


Es porque nuestras instituciones están
perseguidas, al igual que muchos ciudadanos de Cataluña que han visto y
ven reiteradamente vulnerados sus derechos más básicos y fundamentales. Y
lo hemos dicho: en este marco de represión e incapacidad política, Junts
per Catalunya no podemos desvincular el debate de estos presupuestos de
la crisis política y la regresión democrática en que vivimos y a la que,
como saben, plantamos cara buscando justicia en otros países europeos;
ciertamente y hasta el momento con bastante éxito y en la misma Comisión
Europea.


O sea, en Junts per Cat intentamos ser
coherentes con nuestro programa electoral y con el mandato que nos dieron
nuestros electores. Espero que haya quedado claro y, para no alargarme,
voy a remitirme a lo expuesto por nuestro portavoz en el veto general y
dar por defendido el veto en esta sección.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En turno en contra, intervendrán la senadora
Vilà Galán por Izquierda Confederal y el senador Gilabert Sánchez por el
Grupo Parlamentario Socialista.


Tiene la palabra, señoría.


La señora VILÀ GALÁN: Gracias, presidenta.


¡Qué malos somos, qué malos somos en el
Gobierno de coalición! Ustedes son tan buenos y tienen tan buen modelo
económico que han perdido las elecciones generales dos veces
consecutivas. (Aplausos en los escaños de los Grupos Parlamentarios
Socialista e Izquierda Confederal (Adelante Andalucía, Més per Mallorca,
Más Madrid, Compromís, Geroa Bai y Catalunya en Comú Podem).—
Rumores en los escaños del Grupo Parlamentario Popular en el Senado). Es
por eso que ustedes pueden ir dando lecciones sobre modelos económicos,
porque parece que la ciudadanía no está mucho con ustedes.


Miren, los presupuestos en Trabajo son un salto
cuantitativo y cualitativo en el conjunto de las políticas públicas de
empleo y estamos especialmente orgullosos de dos cuestiones. La primera
es, sin duda, las políticas activas de empleo, con un incremento
del 35,75 %, que van a ir destinadas a quien más lo necesita. La segunda,
es que también hay innovaciones importantes, una innovación es el plan de
digitalización del SEPE, porque para llevar a cabo todas las ayudas que
el ministerio ha puesto en marcha durante la pandemia —que han sido
muchas y ustedes lo saben— la agilización del SEPE es primordial,
puesto que somos conscientes de la saturación, evidentemente, que sufre a
consecuencia del incremento exponencial de ayudas que ustedes jamás
hubiesen podido soñar cuando estaban gobernando. Por fin, vamos a tener
un presupuesto propio para la Inspección de Trabajo y Seguridad Social;
eso también es algo novedoso, que a nosotros nos gusta especialmente para
que los trabajadores y las trabajadoras se sientan protegidos ante la
vulneración de sus derechos. El incremento de un 20 % en los recursos
destinados al desempleo y la protección social y, finalmente, la
promoción en igualdad de oportunidades y el empleo de calidad para las
mujeres, porque no solo necesitamos cantidad —se lo decía antes al
señor Maroto—, necesitamos calidad también en el empleo para las
mujeres y para la igualdad de oportunidades, así como para los jóvenes de
este país.


Los fondos europeos también nos permiten
incrementar los fondos a las comunidades autónomas, con lo cual nosotros
creemos que estos son unos presupuestos que, como decía al principio,
aumentan cuantitativa, pero también cualitativamente, lo que antes
teníamos.


Gracias. (Aplausos en los escaños del Grupo
Parlamentario Socialista).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En el mismo turno en contra, por el Grupo
Parlamentario Socialista, tiene la palabra el senador Gilabert
Sánchez.


El señor GILABERT SÁNCHEZ: Gracias, presidenta.
Buenas tardes o noches.


Yo creo que deberíamos hacer el ejercicio
siguiente: de dónde venimos y hacia dónde queremos ir. Así lo intenté
explicar en otro día. Efectivamente, no estuve muy acertado en el
ejemplo, pero, señora Ruiz, yo no dije eso exactamente, pero me da
exactamente igual la interpretación que le dé. Lo que sí dije es una cosa
que ha quedado clara: que, por favor, si no van a ayudar no molesten,
váyanse al lado, por favor (Aplausos en los escaños del Grupo
Parlamentario Socialista), váyanse al lado. Eso sí lo digo.


¿Dónde estamos en este momento o cuáles son las
características de la economía y del mercado de trabajo de España?
Nuestra presión fiscal son seis puntos por debajo de los países de
nuestro entorno. Nuestro trabajo temporal y precario rara vez ha bajado
en muchísimos años, con gobiernos socialistas también, del 25 % y nuestra
tasa de paro desde 1980 siempre está, como mínimo, en torno al 17 %.
Nosotros tenemos una economía sumergida muy alta, con un fraude fiscal
elevado. El peso de nuestra industria es mucho más bajo en España que en
otros países de nuestro entorno. Más del 90 % de nuestras empresas son
pequeñas o muy pequeñas. ¿Habrá más evidencia científica que después de
haberse firmado más de 179 millones de contratos en los últimos diez
años, repito, 179 millones de contratos en los últimos diez años,
seguimos teniendo tan elevadas tasas de paro y de precariedad, y que esta
precariedad quienes más la sufren son los jóvenes y las mujeres? Y ahora
también una pandemia. Con todo esto, parece razonable que hagamos algo,
que trabajemos, que funcionemos, que tiremos para adelante.


Por tanto, el Gobierno de coalición tiene dos
objetivos en esta materia. Por una parte, ir hacia un nuevo modelo
productivo y revertir los aspectos más dañinos de la reforma laboral
del 2012, la cual votaron a favor el PP, CIU, Unión del Pueblo Navarro y
el Foro Asturias. El Gobierno de España está llegando a acuerdos con
sindicatos, con empresarios, con las organizaciones de autónomos, con las
organizaciones de la economía social en un camino de diálogo, que es por
donde tiene que ir. Esto profundiza la democracia y profundiza las
relaciones laborales, y eso es positivo para el país, es positivo para
las empresas y nos ayudará a salir de esta profunda crisis.


En una entrevista que ayer leí en ABC de
Nicolás Sartorius —por cierto, un político, creo, honorable para
todos de la transición española— decía que la Constitución no
necesita partidarios, sino cumplidores. Yo añadiría que sean cumplidores
a tiempo completo, por favor, a tiempo completo. (Aplausos en los escaños
del Grupo Parlamentario Socialista). Y decía también que la desigualdad
socava las democracias, socavas las democracias y refuerza los sistemas
totalitarios y que, además, la desigualdad es poco eficiente
económicamente, señoras y señores senadores. A algunos partidos que están
todo el día sacando pecho con la bandera de los autónomos, me gustaría
decirles que en la anterior crisis se hicieron mucho por ellos, por los
autónomos: sencillamente, les subieron los impuestos y ya está, eso fue
todo. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). En mi
tierra, los hoteleros, muchos de ellos autónomos, están tan contentos con
el Gobierno de la Junta que le han pedido la dimisión del presidente, del
presidente Moreno Bonilla, presidente.


Por último, Miguel Hernández Gilabert, que se
llama como yo de apellido, al que ustedes quitan sus versos de las tapias
del cementerio de Madrid, decía: «Dejadme la esperanza». Nuestros
ciudadanos y nuestras ciudadanas tienen derecho a una vida digna, con
certeza y esperanza. Por eso, hay que apoyar estos presupuestos.


Muchas gracias. (Aplausos en los escaños del
Grupo Parlamentario Socialista).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


La señora PRESIDENTA: Señorías, antes de
continuar con la sección número 20, procedo a proclamar los resultados de
las votaciones telemáticas del debate de totalidad del Proyecto de Ley de
Presupuestos Generales del Estado para el año 2021, que se tramita por el
procedimiento del artículo 148.1 del Reglamento del Senado, de la
Comisión de Presupuestos.


Concluido el plazo para la votación telemática,
procedemos a la proclamación de los resultados de las votaciones de las
propuestas de veto.


Propuesta de veto número 1 del Grupo
Parlamentario Popular en el Senado.


Efectuada la votación, dio el siguiente
resultado: votos emitidos, 262; a favor, 101; en contra, 160;
abstenciones, 1.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, queda
rechazada. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Propuesta de veto número 172, del Grupo
Parlamentario Ciudadanos.


Efectuada la votación, dio el siguiente
resultado: votos emitidos, 262; a favor, 109; en contra, 152;
abstenciones, 1.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, queda
rechazada. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Propuesta de veto número 17, de los senadores
Cleries i Gonzàlez y Matamala Alsina, del Grupo Parlamentario
Nacionalista.


Efectuada la votación, dio el siguiente
resultado: votos emitidos, 262; a favor, 102; en contra, 155;
abstenciones, 5.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, queda
rechazada. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Propuesta de veto número 47, del senador
Clavijo Batlle, del Grupo Parlamentario Nacionalista.


Efectuada la votación, dio el siguiente
resultado: votos emitidos, 262; a favor, 101; en contra, 156;
abstenciones, 5.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, queda
rechazada. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Propuesta de veto número 8, de los senadores
González-Robatto Perote, Marín Gascón y de la senadora Merelo Palomares,
del Grupo Parlamentario Mixto.


Efectuada la votación, dio el siguiente
resultado: votos emitidos, 262; a favor, 100; en contra, 161;
abstenciones, 1.


La señora PRESIDENTA: En consecuencia, queda
rechazada. (Fuertes aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Señorías, no habiendo resultado aprobada
ninguna propuesta de veto, continuamos el debate de las impugnaciones a
las secciones.


Sección 20. Ministerio de Industria, Comercio y
Turismo. Impugnación número 35, del Grupo Popular en el Senado.


Tiene la palabra el senador Lacalle Lacalle,
del Grupo Parlamentario Popular, en turno a favor, por tiempo de cinco
minutos.


El señor LACALLE LACALLE: Muchas gracias,
señora presidenta.


Se sentirán ustedes orgullosos con esos
resultados (El señor Rodríguez Esquerdo: ¡Qué va, qué va!— Rumores
en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Pero, desde luego,
les aseguramos que a nosotros no nos convencen en absoluto y no nos
convencen dentro de las distintas secciones que se han ido viendo, y
llegamos a una de las más importantes: hablamos de industria, de comercio
y de turismo. Les recordamos que la industria, el comercio y el turismo
son el 40 % del producto interior bruto de nuestro país. Estamos hablando
de una afección directa a 7,6 millones de personas, 7,6 millones de
trabajadores; en definitiva, unos sectores que piden ayuda para el nuevo
año y que, desde luego, estos presupuestos les dan la espalda.


Miren, no podemos esperar nada cuando tenemos
una ministra que ha dicho, como todos recordamos, que bajar los impuestos
o bajar el IVA solamente es ayudar a las empresas. Con esos
planteamientos difícilmente se puede hacer un análisis de lo que
necesitan tres sectores fundamentales, como decimos, para nuestro país.
Este presupuesto es un presupuesto que en modo alguno contribuye a la
reindustrialización tan necesaria de nuestro país. Les recordamos que
estamos en el 30 % del peso de la industria en el producto interior
bruto, allá por los años ochenta; que comenzamos este siglo estando en
el 19 % y que en estos momentos estamos tristemente en el 14 % de peso
específico. Y qué lejos estamos de ese 20 % como objetivo de la Unión
Europea para este año 2020 que está ya terminando, qué lejos estamos de
conseguir una industria que represente el 20 % del producto interior
bruto.


Desde luego, con este presupuesto que nos
presenta el Gobierno difícilmente vamos a poder conseguirlo. Porque,
miren, desde que ustedes, señores del Partido Socialista, llegaron al
Gobierno de España, después de aquella estrambótica moción de censura que
todos recordamos hace dos años y medio (Rumores en los escaños del Grupo
Parlamentario Socialista) —sí, estrambótica moción de censura la
que ustedes hicieron—, los resultados son evidentes: estamos
hablando de casi 9000 industrias que han cerrado en España; estamos
hablando de más de 100 000 empresas que han quebrado; estamos hablando de
un millón de autónomos que han cesado su actividad, y les tenemos que
recordar que hasta 4 millones han ido los ERTE. Con estos resultados,
señores del Partido Socialista, hay que concluir que este Gobierno, el
Gobierno que tenemos en la actualidad, es un peligro para la economía y
el empleo de España. (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado). Porque este Gobierno, desde luego, no tiene ni
estrategia ni plan integral de apoyo a la industria, al comercio y al
turismo.


Ustedes nos presentan una memoria con catorce
páginas con distintas acciones, completamente descoordinadas entre ellas,
sin que haya realmente una estrategia de trabajo, una estrategia de
futuro de lo que necesita nuestro país. Falta esa estrategia industrial
que es fundamental, porque, miren ustedes, han hecho alguna actuación de
la que hemos hablado en esta misma tribuna, como ese plan de apoyo a la
automoción, que tiene como resultado que este año vaya a bajar la
producción en torno a un 35 %; que no sabemos nada de la nueva Ley de
Industria que prometió la ministra Maroto en este Pleno; que no sabemos
nada de la aprobación definitiva del estatuto del electrointensivo, que
se nos dijo que se aprobaría antes del 31 de diciembre en esta Cámara y
del que tampoco sabemos absolutamente nada, y qué les vamos a decir de
ese plan de apoyo al comercio, que no termina de salir adelante porque se
están pegando entre los distintos ministros del Gobierno —y no
solamente entre los del Partido Socialista y los de Podemos—, y,
por supuesto, del turismo mejor no hablar dentro de la situación que
estamos viviendo, para el que nada ha hecho este Gobierno.


Esta es la situación que tenemos en estos
momentos en España, por eso les preguntamos por qué se empeñan con estos
presupuestos en abandonar a la industria básica de este país; por qué
dejan atrás a las pequeñas, medianas y grandes industrias de España; por
qué dejan atrás, con estas cuentas, a los millones de españoles del
sector comercial y por qué han abandonado al potentísimo sector turístico
de España. Miren, estas cuentas habría que devolverlas al Gobierno, no lo
van a hacer, posiblemente sigan el camino de sus compañeros del Congreso,
por eso, algo sí puede atemperar el resultado de este documento, y les
invitamos a ello; aprueben, apoyen las enmiendas que se van a debatir
durante esta semana en nuestra Cámara, porque si este presupuesto se
aprueba tal y como está, tendremos dos consecuencias para el próximo año:
una, seguiremos dejando atrás a millones de trabajadores —esa es la
fundamental— y, a partir de ahí, entraríamos en un nuevo año 2021
donde estaríamos más lejos que nunca de la necesaria y ansiada
reindustrialización de España.


Nada más, señora presidenta, muchas gracias.
(Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Popular en el Senado y
de varios señores senadores del Grupo Parlamentario Mixto).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Impugnación número 19, de los senadores Cleries
i Gonzàlez y Matamala Alsina.


Tiene la palabra, por el Grupo Nacionalista, el
senador Matamala Alsina (Pausa).


Ruego a los servicios de la Cámara que
comprueben el micrófono. Disculpe, señoría, los servicios técnicos van a
comprobar qué pasa con el micrófono; cuando se ponga en rojo estará
activo.


El señor MATAMALA ALSINA: Gracias.


Mi intervención va a ser también un poco
especial. Señora presidenta, ruego tome nota de que no voy a hacer uso de
la palabra en este turno, tampoco lo haré en las secciones 26 y 27. El
motivo es la intervención de la ministra de Hacienda, a la que solo le ha
faltado que se diera besos ella misma y que su corte le hiciera la ola,
porque ha dejado muy claro que no piensa cambiar absolutamente nada. Por
tanto, el trabajo que estamos haciendo aquí de alguna manera lo están
inutilizando. Esto es también un poco como protesta por esta actitud que
tiene el Partido Socialista y por ello renuncio a este turno de palabra,
pero reivindico lo que ya he dicho en su momento en el turno de
portavoces.


Gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Socialista, en turno
en contra, tiene la palabra la senadora Hernández Cerezo.


La señora HERNÁNDEZ CEREZO: Buenas noches.
Gracias, presidenta.


No por ser esperados estos vetos, no dejan de
ser sorprendentes: palabras vacías, señor Lacalle, sin entrar en datos
objetivos. Porque seguimos sin entender que no reconozcan el importante
aumento presupuestario que experimenta el Ministerio de Industria,
Comercio y Turismo para los próximos presupuestos del año 2021,
presupuestos que irán a todas las comunidades autónomas, también para
Cataluña, señor Cleries, señor Matamala, pero parece que prefieren los
presupuestos del Partido Popular, de la derecha, cuando la inversión en
Cataluña con ellos fue un 66 % menor.


Estos sectores productivos, que el Partido
Popular nunca se preocupó por planificar ni modernizar, son prioridad
para este Gobierno. No les dio el Partido Popular los presupuestos que se
merecían, sino, al revés, los recortaban progresivamente. Nunca tuvieron
una política industrial, ni una política turística ni se preocuparon por
el impulso al comercio ni a las pequeñas empresas. Usted dice, señor
Lacalle, que el Gobierno le da la espalda a estos sectores, al turismo, a
la industria y al comercio. Parece que no se ha estudiado bien los
presupuestos, porque, señorías, estos presupuestos presentan el mayor
gasto público de la historia (Aplausos en los escaños del Grupo
Parlamentario Socialista) para apoyar de forma directa la reactivación de
la industria, del comercio y del turismo; 4860 millones de euros, los
presupuestos más altos que ha tenido nunca el ministerio; aumentan
un 74 % las partidas con respecto al presupuesto del Partido
Popular.


Son unos presupuestos necesarios, hace falta
modernizar el modelo productivo, hacerlo resiliente, sostenible y
digital. Es verdad que la pandemia ha puesto en valor estos tres
sectores, su importancia para nuestra economía, para el empleo, para la
vertebración social y territorial del país, así como su necesidad de
inversión, porque no pueden seguir sobreviviendo o, mejor dicho,
malviviendo, con unos presupuestos prorrogados, firmados por el Partido
Popular, y eso precisamente es lo que quiere corregir este Gobierno
socialista.


En materia de industria, ustedes dicen que el
presupuesto se recorta o se congela. Cojan los números, cojan el
presupuesto, desglosen: el presupuesto crece en industria 927 millones.
Hablan del programa Reindus, que le cambiamos el nombre y ahora pasa a
llamarse Fondo de apoyo a la inversión industrial, pero lo importante no
es el nombre, lo importante es que van más de 600 millones directamente a
proyectos de inversión empresarial; 110 millones para proyectos tractores
en la industria; 80 millones para proyectos estratégicos de desarrollo en
sectores industriales prioritarios; 136 millones para el emprendimiento
industrial; 320 millones para la gran industria electrointensiva; 670
millones para proyectos tecnológicos, industriales y militares, y así
podemos seguir desglosando el presupuesto. En comercio pasa exactamente
lo mismo: sube la inversión 524 millones de euros, con un 23 % más con
respecto al presupuesto del Partido Popular. Una apuesta importante va a
ser la del comercio interior, con más de 60 millones para modernizar los
mercados municipales y por primera vez también se impulsa la
revitalización del comercio rural, con 5 millones de euros. Luego, en el
comercio exterior, que tanto critican ustedes en su veto, suben las
transferencias al ICEX, suben con una apuesta clara para atender a la
internalización de las empresas, para conseguir esa digitalización de
nuestras empresas y que puedan posicionarse en el mercado exterior. Y con
respecto al área de turismo, señor Lacalle, se ve que no estuvo presente
la semana pasada ante el secretario de Estado de Turismo, porque es el
presupuesto más alto que ha tenido nunca la Secretaría de Estado de
Turismo, un 330 % más de presupuesto (Aplausos en los escaños del Grupo
Parlamentario Socialista), con 1350 millones de euros. Siguen sin querer
reconocer el aumento exponencial que tiene este ministerio, son los más
altos, los más altos que ha tenido nunca, repito, hay que destacar las
ayudas al comercio, a las pymes y al turismo, con más de 1300 millones de
euros. La apuesta decidida por contar con las comunidades autónomas, con
los planes de sostenibilidad turística, más de 660 millones; es
fundamental el papel de las comunidades autónomas para ejecutar las
políticas turísticas en los territorios y poder diversificar los
productos, los clubes de producto.


Los territorios extrapeninsulares, por supuesto
que atendemos a ellos con planes específicos: 20 millones irán para
Canarias, 20 millones para Baleares, 3 millones para Ceuta y 3 para
Melilla; fundamental tener en cuenta y prioritario tener en cuenta sus
especificidades.


Más de 50 millones de fomento a la economía
circular o la apuesta decidida para rehabilitar el patrimonio turístico,
y así podemos seguir desglosando las partidas una a una, cosa que, señor
Lacalle, me ha sorprendido que no ha hecho, se ve que no se ha mirado
mucho los datos.


Los números son claros, señorías del Grupo
Popular, no entendemos sus vetos, siguen remando en contra, en lugar de
apoyar estos presupuestos, como han hecho la mayoría de grupos
parlamentarios en el Congreso, con el mayor apoyo desde el año 2007. Pero
han preferido anteponer el interés partidista al interés general, y estos
vetos solo demuestran una cosa: que ustedes están en contra del 74 % de
aumento del presupuesto de este ministerio, no puede entenderse de otra
manera. Y en el Grupo Socialista nos hacemos una serie de preguntas: ¿De
verdad quieren mantener estos presupuestos prorrogados del 2018 para la
España del 2021? ¿De verdad creen que no son necesarios estos
presupuestos generales para la industria, para el comercio y para el
turismo? ¿De verdad que no van a apoyar las reformas estructurales que
necesitan nuestros sectores productivos? Pues tendrán que responder a la
ciudadanía, tendrán que explicar por qué no quieren apoyar toda esta
inversión fundamental para el ministerio. Pues nosotros, los socialistas,
estamos orgullosos de estos presupuestos porque son los mejores que ha
tenido nunca el Ministerio de Industria, de Comercio y de Turismo
(Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Son unos
presupuestos históricos para unos tiempos muy difíciles, unos tiempos muy
difíciles que requieren inversión para transformar, para reconstruir y
para fomentar la cohesión y la inclusión social en todo el territorio
español, y eso es lo que quiere claramente este Gobierno socialista para
la España del 2021.


Muchas gracias. (Aplausos en los escaños del
Grupo Parlamentario Socialista).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 21, Ministerio de Agricultura, Pesca y
Alimentación.


Impugnación número 36, del Grupo Popular en el
Senado, y tiene la palabra el senador Martínez Antolín, en turno a
favor.


El señor MARTÍNEZ ANTOLÍN: Muchas gracias,
presidenta.


Después de oír en el día de hoy a la ministra
de Hacienda, está claro que estos presupuestos son los presupuestos de la
mentira y son los presupuestos de los impuestos para nuestros
agricultores, para nuestros ganaderos y para nuestros pescadores
(Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Popular en el Senado). Y
esta es la forma que tiene este Gobierno de agradecer todo el trabajo que
ha estado realizando el sector primario durante todo el confinamiento,
administrándonos todos los alimentos que hemos necesitado hasta el último
momento, de esta manera lo pagan, subiendo impuestos que van a repercutir
de manera negativa no solamente en el sector, sino también en todo el
mundo rural. Parece ser que ustedes lo que quieren hacer con esta subida
de impuestos es caja, una caja para pagar luego lo que tienen ustedes
pactado con sus amigos y con sus socios, los independentistas y con los
amigos de los terroristas. Esa es la actuación que están llevando a cabo
ustedes con estos presupuestos. Una subida de impuestos a los seguros en
el mundo rural, una subida de impuestos a los servicios digitales, una
subida de impuestos a los fondos de pensiones y ya, el colmo de todos los
colmos, esa subida del IVA a las bebidas azucaradas. No entendemos cómo
se puede llevar a cabo una medida de este tipo que va a suponer una caída
importante de los ingresos tanto del sector agroindustrial como de los
propios agricultores que se dedican a la remolacha, las fábricas
productoras y transformadoras de frutas para elaborar los zumos,
industrias lácteas... En definitiva, un impuesto con el que ustedes
pretenden recaudar 400 millones de euros, pero a costa de hacer caer la
facturación en este tipo de industrias en 380 millones de euros.


Unos presupuestos totalmente injustos con un
sector, el primario, que representa el 12 % del producto interior bruto y
que va a recibir la pésima y ridícula cantidad del 0,75 % de los fondos
europeos de reestructuración y de resiliencia. La verdad, ¿están ustedes
contentos con estos presupuestos? Señorías, ¿les parecen de verdad justos
estos presupuestos con el sector primario? Unos fondos de recuperación y
de resiliencia que, entre otras cosas, tienen ustedes que presentar unos
proyectos para poderlos recibir, y la verdad es que nosotros tenemos
miedo teniendo en cuenta su forma de actuar, su incompetencia, su
ineficacia y sus chanchullos, de que esos fondos no puedan venir y se
puedan quedar sin ellos nuestros agricultores y nuestros ganaderos. No
están concretando en estos presupuestos nada sobre las actuaciones
referentes a algo tan importante como son las modernizaciones en el
regadío;






tampoco están concretando medidas para compensar la pérdida de
financiación en el sector ganadero, y mucho menos también para el toro de
lidia. tan afectados en la crisis de la COVID-19 y tan afectados por el
cierre del canal Horeca, una partida muy baja en cuanto a los aportes
para la renovación de maquinaria —tomen ejemplo de Francia, que va
a dedicar 215 millones de euros para que sus agricultores puedan renovar
el parque de maquinaria—, y algo que nos preocupa muchísimo
también, esa inacción de este Gobierno en asuntos tan importantes como
los aranceles y relaciones con los mercados exteriores por la entrada de
productos que están llegando y que compiten de manera desleal con
nuestros productos. Una situación que encima también se ha visto agravada
como consecuencia de la aprobación de esa ley de medidas urgentes que han
aprobado en connivencia con la ultraizquierda y que lo que está haciendo,
lejos de mejorar la situación, es agravarla, porque, como todos ustedes
saben, están entrando cada vez más productos de fuera, a más bajos
precios y que están compitiendo de manera desleal con nuestros
productores.


Respecto al sector pesquero, se quejaban
ustedes muchísimo del presupuesto que dedicaba el Grupo y el Gobierno del
Partido Popular en el anterior Gobierno, y resulta que hoy traen aquí
unas cuentas que prácticamente tienen las mismas cifras que tenían
aquellos presupuestos. No tienen ustedes un plan claro para la política
de pesca a largo plazo, únicamente se limitan a un plan para un año, un
plan anual, que es el que conforman estos presupuestos, y también echamos
de menos en estos presupuestos que haya recursos para una situación ante
el brexit que pueda ser perjudicial para nuestra flota.


En definitiva, señorías, y acabo con ello,
había alguien que decía hace unos meses que no podía dormir tranquilo con
un Gobierno de coalición con Podemos, y la verdad es que ahora quienes no
puede dormir tranquilo con este Gobierno y con estos presupuestos son los
hombres y las mujeres que día a día se dejan la piel en el mar y en el
campo.


Nada más y muchas gracias. (Aplausos en los
escaños del Grupo Popular en el Senado).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Por el Grupo Parlamentario Nacionalista, en el
turno a favor de la impugnación número 9, tiene la palabra la senadora
Rivero Segalàs.


La señora RIVERO SEGALÀS: Gracias,
presidenta.


Estamos debatiendo el presupuesto para el
año 2021, un presupuesto que debe ayudar a gestionar la crisis sanitaria,
social y económica generada por la COVID-19, y es evidente que esta
situación nos interpela a todos, pero nosotros, en Junts per Catalunya,
no podemos desvincularla de la crisis política y del empobrecimiento
democrático que vivimos. Los líderes sociales y políticos catalanes están
en la cárcel, en el exilio o inhabilitados; nuestras instituciones, al
igual que centenares, miles de ciudadanos de base, sufren una constante
persecución política, policial y judicial, y mediática también, que
vulnera de forma reiterada derechos básicos y fundamentales. En este
marco de represión e incapacidad política, en Junts no podemos, ya lo
hemos reiterado, dar apoyo a estas cuentas.


A pesar de estos presupuestos, que ustedes
dicen que son los mejores, es obvio que en el Senado son los mejores a la
fuerza, porque no nos van a permitir mejorarlos. El Ministerio de
Agricultura, después de tanta oda a la necesidad del sector primario y de
su función como servicio esencial siempre, pero especialmente durante la
pandemia, continúa sin tener el peso que debería tener en estas cuentas,
y no se beneficia ni en la mitad de ese aumento que ustedes anuncian.
Continúan siendo pocos los recursos que destina el Estado al sector
primario y llegamos además a estas cuentas sin haber afrontado la ley de
la cadena alimentaria ni haber traspuesto la Directiva europea de
prácticas comerciales desleales. Sabemos que va a venir, a ver si la
tenemos a tiempo para que se ponga en marcha el 1 de mayo de 2021 y
podamos enmendar y opinar. Algunos compromisos derivados de leyes, como
la ley de la sequía y la doble tarificación eléctrica, los introdujimos
en el Congreso y haremos seguimiento de ello, porque mientras en el
Congreso aprobábamos esto, en el Senado, viendo la ley de medidas
urgentes, ustedes nos dijeron que no a la doble tarificación eléctrica.
Hemos visto cómo pasaba por esta Cámara una ley que pretendía ser urgente
para dar respuesta al sector en aquellos temas recurrentes y que se
habían legislado, pero no se habían reglamentado para aplicarse. Es
decir, dar soluciones reales a los problemas del sector, una ley que, a
pesar de ser urgente para un sector esencial, llegó después de
entretenerse nueve meses en el Congreso y ya superada por la realidad y
la necesidad de ponernos en sintonía con aquello que marca Europa. El
sector estaba en la calle en febrero, han hecho frente a la covid,
esperaban medidas urgentes que no les han sabido ofrecer.


Por ello, y por todo lo expresado en el veto a
la totalidad, presentamos este veto a esta sección. Hoy hay asociaciones
profesionales agrarias que están ya anunciando manifestaciones para el 21
de diciembre para reclamar a su Gobierno medidas urgentes para el sector.
La urgencia del sector y los tempos del Gobierno parecen no casar. No se
manifiestan por nuestro veto, la responsabilidad es su inacción.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En el turno en contra, por el Grupo
Parlamentario Socialista, tiene la palabra el senador Huelva
Betanzos.


El señor HUELVA BETANZOS: Muchas gracias,
presidenta. Buenas noches ya, señorías.


Ha dicho el señor Martínez Antolín que le da
mucho miedo no recibir los recursos europeos que están comprometidos y
que han negociado el presidente del Gobierno y el ministro Agricultura,
pero realmente a mí lo que me daría miedo, sinceramente, es que los
proyectos los tuviera que hacer el Partido Popular, con lo cual aquí, a
España, vendrían absolutamente cero euros, ni un solo céntimo
recibiríamos (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario
Socialista).


Señorías, estos presupuestos son unos buenos
presupuestos para España; son unos buenos presupuestos para la
agricultura, la ganadería y la pesca española; son unos presupuestos que
no están hechos al azar, están diseñados con las necesidades de toda
España, para poner los mimbres en la salvación de puestos de trabajo y
socorrer a los sectores productivos que están sufriendo en nuestro país,
y lo contrario sería retroceder a unas cuentas arcaicas, que de ninguna
manera mirarían por los españoles y por las españolas, como era las
cuentas del año 2018 de Montoro, o como son las cuentas que se están
aprobando en la mayoría de las comunidades autónomas en la que gobierna
la derecha, por ejemplo, en la mía, en Andalucía.


Señorías de la derecha, del Partido Popular
sobre todo, pero también de todos aquellos que quieren seguir manejando
las prebendas que les ofrecían los presupuesto de 2018, tienen ustedes en
estos presupuestos más de 8000 millones de euros en razones en materia de
agricultura, y en materia de pesca más de 65 000 millones de euros en
razones para votar a favor; en agricultura, un 10 % más que el
presupuesto de 2018; en pesca, en el programa 215A, más de un 42 % y en
el programa 415B, más de un 25 %. Tienen sobradas razones para votarlos a
favor y no tienen ustedes ni una sola para votarlos en contra y ni
siquiera para abstenerse.


Si ustedes tienen intención de ayudar a la
agricultura en materia de regadío, en materia de seguro agrario
—que, por cierto, señor Martínez Antolín, no ha nombrado usted que
suben 40 millones de euros los seguros agrarios—, si tienen
intención de que se fortalezca en materia de modernización y
digitalización del sector primario, en materia de reconversión
energética, en materia de igualdad, con la promoción de la mujer en el
mundo rural, dotándola de la importancia que tiene, si tienen intención
de apoyar todo esto, es incomprensible que el Partido Popular haya dejado
de ser un partido de Estado y se haya echado en brazo de los intereses
espurios de aquellos a lo que no les interesa para nada nuestro país.
Este es un presupuesto que mira al futuro y que hace de las muchas
necesidades que tiene este país un abanico de oportunidades para cada
uno, para cada una de nosotras, para que las pueda aprovechar y las pueda
aprovechar individualmente y dar estabilidad a sus vidas y también dar
estabilidad a España. Este es el presupuesto de la estabilidad, y puede
que eso sea lo que a la derecha le incomoda, de la estabilidad política,
pero también de la estabilidad económica de los ciudadanos y ciudadanas
de nuestro país y de la recuperación social de su gente. Es un
presupuesto en el que predomina la igualdad en todos los ámbitos, en el
presupuestario también, y hace que cada persona sea más libre, y eso
también puede ser que les incomode.


Señorías del Partido Popular, están ustedes
instalados, desgraciadamente, en un mal ambiente que solo puede llevar a
situaciones escabrosas y de las cuales, desde nuestro punto de vista,
deberían ustedes escapar. Ustedes han pasado de ser la derecha centrada a
ser la derecha ladeada por el solo hecho de ver peligrar un espacio en el
que antes se aglutinaban y que ahora están viendo cómo se les escapa
delante de sus ojos. Se han instalado ustedes en el discurso catastrófico
con el único fin de superar a los discursos malévolos que se están
llevando a sus electores y están adentrándose ustedes en un peligroso
mundo que, en vez de hacer su trabajo, que es el de hacer oposición, se
están dedicando ustedes a blanquear a la extrema derecha y a sus wasaps
amenazantes con la única esperanza de sumar en unas hipotética
elecciones, que se les esfuman con estos presupuestos. (Aplausos en los
escaños del Grupo Parlamentario Socialista). Señorías, en el Grupo
Parlamentario Socialista les animamos a cambiar de método, a cambiar de
fondo y de forma, y en el caso que a mí me ocupa, en los sectores
agrícola, ganadero y pesquero, en el sector primario, que ellos sí que
están necesitados de nuestros acuerdos, de nuestras propuestas, nuestras
posturas centradas y, sobre todo, de un presupuesto por y para sacar al
sector adelante.


Y para finalizar, al trabajo del ministro
Planas, al trabajo del presidente del Gobierno, se podría sumar el
trabajo de la derecha española. A nosotros nos encantaría que la derecha
española sumara sus esfuerzos al trabajo diario del Ministerio de
Agricultura, que sumara sus esfuerzos para combatir el virus, pero sobre
todo que sumara sus esfuerzos para sumarse a España y que no sumaran
esfuerzos con la extrema derecha para tratar de derrocar por otros medios
a un Gobierno que no los representa a ellos, afortunadamente.


Muchas gracias. (Aplausos en los escaños del
Grupo Parlamentario Socialista).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 22, Ministerio de Política Territorial
y Función Pública. Impugnación número 37, del Grupo Parlamentario
Popular. Tiene la palabra el senador Martín Martín, por tiempo de 5
minutos, en el turno a favor.


El señor MARTÍN MARTÍN: Muchas gracias, señora
presidenta.


Señorías, en el Grupo Popular en el Senado
presentamos el veto impugnación a la sección 22 de los Presupuestos
Generales del Estado, y lo hacemos plenamente convencidos de que el
Gobierno está fracasando en la gestión encomendada al Ministerio de
Política Territorial y Función Pública, con especial incidencia en una
serie de aspectos que paso a detallar. Consideramos que el Gobierno está
fracasando en su labor de coordinación y apoyo al conjunto de las
administraciones públicas de este país, lo que ha quedado evidenciado con
toda su intensidad en su naufragio en la coordinación e impulso a la
gestión de la crisis derivada de la COVID-19. Introducir en el discurso
político y mediático el concepto de cogobernanza, organizar decenas de
conferencias telemáticas con presidentes autonómicos para informarles de
decisiones ya tomadas y al margen de esta Cámara de representación
territorial, derivarles la parte de la gestión de la crisis que incomoda
al Gobierno o dinamitar el histórico consenso en la FEMP, con una
imposición de vuelo corto, no es equivalente a liderar un Estado
descentralizado, ni mucho menos garantizar su eficacia. Ustedes, con sus
hechos, han abonado el terreno para quienes creen que el Estado
autonómico es incapaz de garantizar la vida, la salud y la seguridad de
los españoles, aquellos que piensan que el Estado autonómico no es
compatible con la eficacia y han provocado un enorme daño a su
legitimidad de hecho, un disparate en el que nosotros no vamos a
colaborar.


En estos momentos, el Gobierno demuestra no
tener modelo territorial y lo fía todo a ese concepto no jurídico de
cogobernanza, que nadie sabe dónde empieza, dónde termina, que no
determina quién se responsabiliza de determinadas qué cosas y que más
bien sirve de coartada a la hora de imponer decisiones sin querer asumir
la responsabilidad por ello. Rechazamos unos presupuestos que fracasan a
la hora de garantizar la adecuada y suficiente presencia del Estado y sus
instituciones en todo el territorio nacional, con la que ha mercadeado en
la tramitación de los presupuestos hasta límites que rozan la propia
dignidad del Estado. Rechazamos unos presupuestos que renuncian a
promover un nuevo sistema de financiación autonómica que recoja la
realidad de la España actual, el reparto competencial y las políticas del
Estado ejecutadas por otras administraciones distintas del Estado.
Consideramos que esa renuncia no es casual, sino que obedece a que tanto
al Gobierno como a sus socios les interesa más su particular
interpretación de un modelo con el que se cambia financiación por votos,
convirtiendo el sistema en una suerte de comodín que el Gobierno utiliza
en momentos de dificultad parlamentaria.


Nosotros lo que pedimos es transparencia,
transparencia en los criterios de reparto de los fondos COVID y de los
fondos europeos, consenso para su distribución y no que ese singular
concepto, insisto, de cogobernanza, donde el presidente decide cómo,
cuánto, cuándo, a quién y para qué se dan fondos, sustituya a un sistema
legal de financiación y, sobre todo, un presupuesto que consagra una
cruzada contra el principio de corresponsabilidad fiscal de las
comunidades autónomas.


Rechazamos un presupuesto que desprecia a las
administraciones locales, para las que tampoco se contempla la
consideración institucional que merecen ni ningún avance en su mejora de
financiación. Para el Gobierno de Pedro Sánchez, la autonomía local y el
contraste evidente de la eficacia y eficiencia demostrada por ellas
frente al naufragio del Gobierno durante estos nueve meses son una china
en el zapato porque le pone frente a un espejo que le delata. Y el
programa 942, de cooperación económica local del Estado, no pasa la
prueba del algodón. El Gobierno abandonó a las administraciones locales
durante la pandemia, ni un solo euro de financiación adicional, para
luego intentar quedarse con sus ahorros en una maniobra confiscatoria sin
precedentes.


Rechazamos unos presupuestos que fracasan o,
más bien, omiten una verdadera apuesta por la transparencia. No deja de
ser significativo que coincidan en el tiempo ese poco interés por la
transparencia con la suspensión del portal de transparencia durante el
estado de alarma o —no me voy a extender mucho más— solo hay
que leer algunas de las portadas de los periódicos del día de hoy.


Rechazamos unos presupuestos que fracasen en la
erradicación de la temporalidad en la Función Pública, que no acierten en
la gestión de la realidad actualmente existente de trabajadores
temporales e interinos en la administración pública. Seguimos sin ver que
sus palabras se compadezcan con sus hechos y las expectativas de cientos
de miles de personas no están recogidas en estos presupuestos.


Rechazamos unos presupuestos que renuncian a
responder a la carencia de funcionarios de habilitación nacional de la
Administración local, que no atienden la ausencia de criterios vinculados
a la España vaciada a la hora de definir la carrera profesional de los
funcionarios. Unos presupuestos que también en la sección 22 consagran el
formato de un Gobierno plagado de altos cargos de personal
eventual...


La señora PRESIDENTA: Debe ir terminando,
señoría.


El señor MARTÍN MARTÍN: ... que no recogen o
que no atienden, que ponen en duda el futuro de muchos funcionarios de
clases pasivas, y ahí tenemos el ejemplo de funcionarios de la
Administración de Justicia que ya han visto recortadas sus
pensiones.


En definitiva, nos sobran los motivos para
rechazar y para vetar esta sección 22 del presupuesto que, además,
adolece de la falta de credibilidad general del presupuesto.


Muchas gracias, señora presidenta. (Aplausos en
los escaños del Grupo Parlamentario Popular en el Senado y de varios
señores senadores del Grupo Parlamentario Mixto).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señorías.


Impugnación número 15, de los senadores Cervera
Pinart y Cleries i Gonzàlez, del Grupo Parlamentario Nacionalista. Tiene
la palabra, por tiempo de tres minutos el senador Cervera Pinart, en
turno a favor.


El señor CERVERA PINART: Gracias, presidenta,
de nuevo.


La intervención hace un rato de la senadora
socialista Hernández, insistiendo una vez más que Junts per Catalunya
prefiere los presupuestos del Grupo Popular, confirma que ustedes no
escuchan o no quieren escuchar, a pesar de lo mucho que hemos intentado
explicarnos toda la tarde. Y en parte podemos entenderlo, porque nuestro
discurso les incomoda, porque nuestro discurso radica en la defensa de
los derechos básicos y fundamentales de los que, a menudo, los partidos
progresistas y de izquierda creen tener el monopolio.


Miren, su actitud confirma que hoy han venido
aquí a pasar el trámite, a autocomplacerse y a anunciarnos que no van a
aceptar ninguna de las más de 500 enmiendas que Junts per Catalunya ha
presentado a estos presupuestos. Así que a estas horas y con la finalidad
de hacerles ganar tiempo a todos, me remito a mi anterior intervención y
doy por defendido el veto a esta sección en los términos expresados por
nuestro portavoz.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias a usted,
señoría.


Por el Grupo Parlamentario Socialista, en turno
en contra, tiene la palabra el senador Castellà Surribas.


El señor CASTELLÀ SURRIBAS: Con su permiso,
presidenta.


Señorías, estos presupuestos generales son
especialmente simbólicos por tres motivos: por el momento de pandemia que
vivimos, por los amplios apoyos que se han alcanzado, pero, sobre todo,
por su vocación proactiva, modernizadora y europeísta.


Hablando de administraciones públicas, de
Función Pública, estos presupuestos son la traducción contable de una
visión moderna, europea y centrada en el servicio a la ciudadanía de
nuestro servicio público y, además, en época de crisis, en momentos en
que más hemos tenido que implicarnos todos, y en especial los y las
empleadas públicas, en dar respuestas proactivas, innovadoras para dar
cumplimiento a su función y mandato y como palanca para salir de la
crisis. Por eso, las primeras palabras tienen que ser necesariamente una
vez más, y todas son pocas, de agradecimiento a los 2,5 millones de
empleados (Aplausos en los escaños del Grupo Parlamentario Socialista) y
empleadas públicos que han demostrado durante esta pandemia su capacidad
de trabajo, su profesionalidad, compromiso con este país y con todos sus
ciudadanos, la aportación de lo mejor de ellos mismos a la construcción
de un espacio común y colectivo. Sanitarios, cuerpos y fuerzas de
seguridad, servicio de empleo público, servicios sociales, profesoras y
profesores, ejército, etcétera, han pasado momentos difíciles, han
sufrido en largas jornadas de trabajo los déficits históricos que
arrastran nuestras administraciones públicas. Ellos son también los
protagonistas de este esfuerzo colectivo para, en esta hora difícil e
incierta, aprovechar nuestros mejores activos para, de la mano de Europa,
modernizar España y mejorar la calidad de vida y las oportunidades de los
españoles.


Permítame felicitar entusiastamente este
presupuesto por lo que respecta al Ministerio de Política Territorial y
Función Pública. La modernización de la administración no tan solo es una
tarea inaplazable ya, sino también una clara conclusión de la crisis que
vivimos. La modernización de la administración pública, su
digitalización, su transparencia, la participación, la captación de
talento deben ser uno de los motores, una de las fuerzas tractoras para
la recuperación económica y la construcción de las bases de las políticas
públicas futuras. Un presupuesto que hace de la necesidad oportunidad y
palanca de cambio. Hablar de gobierno abierto, cuyo cuarto plan ha sido
puesto en marcha; hablar del renovado protagonismo del Instituto Nacional
de Administraciones Públicas en el diseño de los nuevos retos y de la
evaluación de las políticas públicas, clave para la transición a la
evaluación del teletrabajo y el trabajo por objetivos; hablar de igualdad
de género en nuestra Administración con el tercer plan en marcha; centrar
los objetivos en el servicio a los ciudadanos y en la calidad del
servicio; alinearse con la Agenda 2030, responden sin duda a lo que nos
demanda la sociedad española.


Unos presupuestos que cuidan además a los
empleados y empleadas públicos, que elevan y prestigian el valor del
servicio público y que asumen proactivamente las posibilidades plurales y
federalizantes de la cogobernanza. Sí, de la cogobernanza, esa palabra
que parece molestarles tanto, de esa gobernanza multinivel entre Europa,
la Administración General del Estado, las comunidades autónomas y las
administraciones locales, que cambia el paradigma del servicio público
situando a la ciudadanía en el centro del proceso, en el único objetivo y
el actor principal por encima de las disputas territoriales de campanario
y por encima de pulsos políticos que ignoran el daño que causan a los
ciudadanos, convirtiéndolos en rehenes de sus más bajas aspiraciones.
Algunos, y no son solo del PP, parece que con Rajoy vivían mejor; han
llevado con la unilateralidad frontista a Cataluña al borde del abismo y
ahora le invitan a dar un paso adelante queriendo mantener los
presupuestos de Montoro. Pregúntense a quiénes son útiles, más allá de
los delirios de Waterloo.


Unos presupuestos, señoras y señores del PP,
que cuidan de los empleados y empleadas públicos a los que ustedes
asustaron anunciando apocalíptico el recortes de retribuciones, que es lo
que hicieron ustedes cuando gobernaban —no todo vale—. Han
intentado también engañar a los interinos ofreciendo soluciones
incompatibles con la ley, soluciones que luego no aplican en los
ayuntamientos ni en las diputaciones ni en las comunidades autónomas
donde gobiernan. De hecho, con sus famosas tasas de reposición generaron
un problema grave de interinaje en fraude de ley, situación que en
términos generales no se da en la Administración General del Estado, que
se mantiene más de un punto por debajo de las tasas pactadas. El problema
se da en comunidades autónomas y en administraciones locales, en algunas
de las que gobiernan ustedes, y, sin embargo, populista y farisaicamente
intentan excitar con mentiras y falta de expectativas a los interinos
contra el Gobierno en su lógica de que todo vale y cuanto peor mejor,
lógicas en las que, como hoy, coinciden con Vox y con Junts per
Catalunya, buenos compañeros seguramente para su viaje al centro, al
centro de la caverna.


El plan de recuperación, transformación y
resiliencia supone para el ministerio una aportación de 600 millones en
tres años, en los tres años próximos, 240 millones para el 2021. Tan solo
con una administración pública fuerte es posible dar seguridades de las
que demandan los ciudadanos y las ciudadanas en tiempos de globalización
e incertidumbres y cambios tan profundos. Una administración pública que
es la cara que atiende, responde y asiste a los ciudadanos; que ordena la
convivencia, sometiéndolos al Estado de derecho; que protege a los más
débiles y vulnerables; la cara que garantiza la igualdad de todos ante la
ley, la cara que, frente a las incertidumbres y arbitrariedades de los
mercados, garantiza que nadie se quede atrás, asegura que se responde
desde la justicia y el ordenamiento jurídico a todos por igual y
transmite los valores comunes compartidos por encima de fracturas y
diferencias.


Nuestras administraciones son las respuestas de
Seguridad Social, de igualdad, de futuro laboral, de equidad jurídica
para el pleno ejercicio de nuestra libertad y para la fraternal
construcción del espacio común.


Unos presupuestos para más y mejor
Administración, como nos demanda el momento, y en consonancia con Europa.
En este presupuesto hay más inversión y más partidas para las comunidades
autónomas —13 486 millones de euros, al margen del sistema de
financiación— y para los entes locales, cuyas dotaciones previstas
son un 9,7 % superiores al presupuesto base 2020, respetando su autonomía
y capacidad de acción y confiando en todos los niveles
territoriales.


Señores del PP, señores de Junts per Catalunya
—hoy, tanto monta, monta tanto—, a su demolición de todo
intento de modernización, también de las administraciones públicas, les
decimos, una vez más, que no a sus vetos.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Sección 23: Ministerio para la Transición
Ecológica y Reto Demográfico.


Impugnación número 4, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado.


Para el turno a favor, tiene la palabra, por
tiempo de cinco minutos, el senador Martínez Mus, del Grupo Parlamentario
Popular.


El señor MARTÍNEZ MUS: Gracias, presidenta.
Buenas noches, señorías.


Según dijo la vicepresidenta Ribera en el
Congreso, la sección 23 del presupuesto, el presupuesto de su ministerio,
asciende a 12 307 millones de euros. Según ella misma explicaba, de
esos 12 307, 6805 son del Fondo de recuperación y resiliencia; o sea, que
el presupuesto ordinario —haciendo una resta simple— son 5502
millones, lo cual supone un incremento real del presupuesto ordinario
del 3,81 % respecto al año anterior. ¡No está mal! Un Gobierno que se
propone y se señala como reto fundamental la transición ecológica y
energética destina un 3,81 % más de recursos que el Gobierno anterior, el
de los malos, el de los reaccionarios. En principio, parece que se
apuesta un poco más que el Gobierno anterior por estos temas, pero eso se
cae cuando se comprueba que el presupuesto global, sin tener en cuenta
los fondos europeos, crece un 13,6 %. O sea, que, realmente, este
Gobierno, el de la apuesta seria por la transición ecológica y
energética, destina porcentualmente menos recursos a este tema que el
Gobierno anterior del Partido Popular. Así, con todas las letras: menos
recursos proporcionales.


Decía la ministra, en el Congreso, que la Unión
Europea considera lo sensato y lo inteligente —utilizó estas
palabras exactamente— destinar el 37 % de los fondos a transición
ecológica y energética. Y, a continuación, unas frases después, dijo
también que el Gobierno va a destinar el 25 % de esos fondos en 2021, y
el 10 % del total de los que lleguen. Si yo dijera aquí que este Gobierno
es insensato o poco inteligente quedaría poco elegante, pero deduzcan
ustedes: sí lo sensato y lo inteligente era el 37 %, y lo que se aplica
es el 25 %, la conclusión es obvia.


El dato cierto que he encontrado en esta
sección es este párrafo que leo en la página 134, y que luego se repite
más veces. Leo textualmente: La tasa de paro en España duplica la media
europea y es la segunda más alta de la región, y el impacto COVID
agravará esta situación. Para salvar esto, en el texto encontramos
objetivos de creación de empleo verde, azul, y a lo mejor me he dejado
algún color. Yo creo que, de verdad, este presupuesto debería haberse
orientado, si no exclusivamente, sí, al menos, primordialmente, al
empleo. En cambio, se nos presenta un presupuesto que dice pretender
transformar el modelo productivo español —hoy también lo hemos
podido escuchar—, pero cuando lo destripamos, como he explicado, en
números, no es verdad y, en hechos, tampoco. Y pongo un ejemplo. Este
año, la Administración del Estado lleva comprados 3158 coches —más
que nunca— en lo que llevamos de 2020. El 97 % de esos coches son
diésel. ¡El récord! ¡Nunca se han comprado tantos vehículos diésel! O
sea, promovemos, presionamos a empresas y ciudadanos, montamos leyes para
ello y no nos aplicamos el cuento tampoco en esto. Es postureo.


Por lo que se refiere a la despoblación, que
también está en esta sección, puede que dedique yo más tiempo a hablar de
esto de lo que se ha dedicado en el presupuesto. Son 19 millones de
euros, que, siendo benévolos, son simbólicos. ¿De verdad un tema que pone
nombre a un ministerio, que tiene una comisión en esta casa, tiene ese
tratamiento presupuestario? Para la gente que trabaja en despoblación es
un desprecio. Y la transversalidad que se predica —de la que
también ha hablado aquí la ministra— es una excusa. También en este
tema, el comodín es el Fondo de recuperación, y también en este tema,
tampoco sabemos en qué y cómo van a dedicarse esos fondos que en el
presupuesto se agrupan en grandes bolsas. Esa es otra de las cosas que
repudiamos de este presupuesto, que en esta sección es especialmente
grave, y es que más de la mitad —he dado las cifras al
principio— del presupuesto del ministerio es totalmente opaco, son
bolsas grandes —como los 5300 millones de euros destinados al
IDAE— sin ningún tipo de desglose; no hay actuaciones concretas, ni
mucho menos territorializadas de esos fondos. Eso, aparte de indicar que
ha faltado trabajo antes, que falta una gestión previa, provoca que se
nos esté pidiendo aquí que entreguemos un cheque en blanco al Gobierno
para que gaste la mitad del presupuesto de este ministerio sin saber en
qué, a ciegas. Nosotros no queremos acceder a ello. El resto de grupos,
por supuesto, hará lo que quiera y como quiera, pero nosotros entendemos
que es una irresponsabilidad apoyar unos presupuestos, los de esta
sección, cuando no sabemos adónde va más de la mitad de los recursos ni
en qué se van a gastar. Los ciudadanos, en nuestras circunscripciones,
nos piden que seamos exigentes, y es lo que estamos haciendo.


Este presupuesto, como están denunciando mis
compañeros, es irreal, porque falsea los ingresos...


La señora PRESIDENTA: Señoría, debe terminar
ya.


El señor MARTÍNEZ MUS: ... y, al menos en esta
sección, muy opaco, porque no detalla dónde se van a invertir realmente
esos fondos europeos. Son falsos y muy alejados de lo que necesita en
estos momentos nuestro país.


Muchas Gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias a usted,
señoría.


Impugnación número 10, de los senadores Cleries
i González y Rivero Segalàs.


La señora RIVERO SEGALÀS: Gracias,
presidenta.


Señorías, hemos intentado explicar nuestra
postura política, como ha dicho el senador Cervera, pero no quieren
escuchar, quizá ese es el problema. Se nos acusa de preferir los
presupuestos del Partido Popular, y se preguntaba el portavoz del PSOE a
quién le habían ido bien. Pues si le han ido bien a alguien es a ustedes,
que primero los criticaban, luego tuvieron que defenderlos y después han
gobernado con ellos.


También hemos intentado explicar por qué, con
la situación política de Cataluña, no vamos a dar apoyo a estas cuentas.
En su intervención en el turno en contra de los vetos a la totalidad, el
portavoz del PSOE acusaba de intentos de desestabilización del Gobierno
el hecho de votar no a estas cuentas. Pues, fíjense, nosotros en Cataluña
sí que sabemos de intentos de desestabilización. De hecho, en Cataluña
fueron más allá. Y ustedes, el Partido Socialista, también estaban allí
votando y vulnerando el propio contenido de la Constitución, utilizando
el artículo 155 para derrocar gobiernos y para disolver parlamentos
elegidos democráticamente, no por abogar por los fusilamientos sino por
apostar por dar voz a los ciudadanos en un referéndum que no era delito,
y lo saben bien, porque fueron ustedes quienes propusieron la
modificación del Código Penal en la época Zapatero. Decía la ministra que
hay que poner a los ciudadanos en el centro de la política. No se me
ocurre mejor manera que dar la voz a los ciudadanos para que opinen, y
ustedes nos respondieron con represión.


Hablaba también de cultura democrática.
Fíjense, viene de tan lejos el incumplimiento presupuestario y el bajo
nivel de ejecución, que no cumplen ni hoy con lo acordado en el Estatut.
Hay temas recurrentes. Hoy hemos sabido que se ha hilvanado un acuerdo
para dar respuesta a aquello que estaba pactado y no había llegado sobre
lo ocurrido con las borrascas Dana y Gloria. Hoy nosotros lo hemos
incorporado mediante una enmienda a estos presupuestos, pero no podremos
aprobarla porque la ministra también decía que hay que tener respeto a
esta Cámara de segunda lectura. Ustedes la han convertido en una Cámara
de solo lectura. Últimamente, no podemos hacer nuestra función
parlamentaria.


También supimos, y la ministra así lo anunció,
que se comprometieron a destinar Fondos Next Generation para el Plan
estratégico del delta de l?Ebre, pero de nuevo prospeccionan de forma
unilateral el territorio, van anunciando su presentación sin que la
Generalitat sepa nada...


La señora PRESIDENTA: Vaya terminando,
señoría.


La señora RIVERO SEGALÀS: Acabo,
presidenta.


Esta es su idea de la cogobernanza. Nosotros
entendemos que sin diálogo, sin información y sin informar a la
Generalitat de aquello que van a acometer en el territorio catalán, no
hay diálogo, no hay cogobernanza y no cumplen con aquello que
predican.


Por esto y por otras partidas que no he tenido
tiempo de enumerar en tres minutos, vamos a presentar este veto.


Gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


En turno en contra, por el Grupo Parlamentario
Socialista, tiene la palabra el senador Lastra Valdés.


El señor LASTRA VALDÉS: Gracias, señora
presidenta. Señorías, buenas noches.


Hace ya un rato que esto ya no es un debate
presupuestario. Hemos oído algunas cosas curiosas. Por ejemplo, que los
problemas de la industria y los problemas del empleo en este momento en
nuestro país y en Europa se deben a una moción de censura; no a la
pandemia. (Aplausos). Probablemente, Europa ha decidido un plan de
recuperación por culpa de una moción de censura. (Risas.—
Rumores).


Esto, efectivamente, no es un debate
presupuestario, es una descarga de mala conciencia y un ejercicio de
melancólica nostalgia. No tanto por lo que desaparece, que desaparece el
presupuesto de 2018. A ver si precisamos. No es que alguien prefiera el
presupuesto de 2018; es que es una consecuencia. Si no se aprueba, lo que
tenemos es la prórroga de la prórroga de la prórroga del presupuesto
de 2018. La verdad, en sentido hegeliano, son los resultados, señoría. Y
el resultado de no aprobar el presupuesto es la prórroga del de 2018.
(Aplausos). Pero ya digo que el ejercicio de melancolía no es por el
presupuesto. Es porque cuando estaba el presupuesto de 2018 ustedes
gobernaban. Y lo que añoran es el Gobierno, sin darse cuenta de que una
parte importante de que no tengan el Gobierno eran aquellas políticas.
Esto siempre funciona de esta manera. Responde a una política equivocada
la pérdida del Gobierno, entre otras cosas, que hubo bastantes más.


Hay un ejercicio de mala conciencia, porque ha
habido una distribución del presupuesto peculiar. No ha sido usted, señor
portavoz del Partido Popular, el primero que lo ha dicho, pero ha dicho:
Es que hay un presupuesto ordinario y después están los fondos. Esta
sección presupuestaria tiene 12 300 millones de euros; de ellos, 6800
provienen del Fondo de recuperación. Y dice: Eso no es presupuesto. ¿No
es presupuesto? ¿Entonces, qué es? ¿Dónde debería estar? ¿Debería estar
fuera del presupuesto? Es la mala conciencia, señorías, la que les lleva
a pensar que está bien, que es bueno que haya fondos, que es bueno que
haya 6800 millones de fondos, pero la mala conciencia es lo mal que lo
hicimos durante la negociación del fondo. Ahí sí que lo hicimos mal, y
hay muy mala conciencia, por las dificultades y las trabas que ustedes
pusieron en aquella negociación. (Aplausos). Estos son los ejercicios de
mala conciencia que tienen ahora los presupuestos.


Y aquí ya no nos encontramos con una secuencia
de consignaciones presupuestarias. En este presupuesto, que tiene que ver
con la transición ecológica, estamos ante una política ambiental; estamos
ante una política integral, una política que se enfrenta a los retos que
tenemos comprometidos con la comunidad internacional y con la Comunidad
Europea, de transición a una economía distinta, a una economía
energéticamente distinta. Este es el gran reto. Estamos ante un fenómeno
nuevo, y este es el presupuesto que inicia esa transición, que además
tiene que ser justa, porque es una transición energética para cambiar el
modelo de producción, el modelo de desarrollo de nuestra economía.
Señorías, deben ustedes entender que estamos hablando ahora mismo de
futuro y de cambio. Esto es lo que significa este presupuesto en esta
materia concreta. Y creo que no lo han entendido, y deberían hacer un
ejercicio de responsabilidad para tratar de entenderlo.


Hay un par de cosas más. En relación con las
políticas de despoblamiento y todo lo que tiene que ver con esas
consignaciones presupuestarias —que ustedes no ven, porque son
transversales y están reconocidas y negociadas con otros grupos
parlamentarios que tienen una preocupación objetiva y real por este
problema—, le voy a destacar una, y es aquella que tiene que ver
con el saneamiento y depuración de municipios de menos de 5000
habitantes, que no pueden repercutir los costes en tarifa, tal y como
obliga la normativa comunitaria y la legislación. Ese es un avance
político de primer orden, porque afecta a toda una realidad social de
nuestro país.


Voy a mencionarle también otra cosa en relación
con la fiscalidad verde, porque siguen sin entenderlo, a pesar de que los
institutos de fiscalidad o Fedea nos digan que no tenemos una fiscalidad
verde real, que no estamos hablando de una fiscalidad verde en sentido
estricto, y tenemos que hacer una revisión objetiva y seria de nuestra
fiscalidad. Tenga en cuenta que estamos en una repercusión del 5,5 %, más
o menos, del total de la recaudación en impuestos denominados verdes,
sobre un objetivo fijado por la Unión Europea a nuestro país del 10 % de
la repercusión de la fiscalidad verde sobre el conjunto de la
recaudación. ¿Quién cree usted que decidió o se comprometió con ese
objetivo del 10 % cuando era Gobierno? Ustedes. Lo que ocurre es que no
saben cuál es el verdadero fondo de compromiso contraído, de la
responsabilidad contraída, ni en esta materia ni en casi ninguna. Era una
decisión comprometida por el Reino de España, a través del Gobierno de
España, cuando gobernaban ustedes, y ahora se asustan ante cualquier
mención de fiscalidad verde. Vamos a tener que hacer un verdadero cambio
en nuestra fiscalidad. Nos lo está pidiendo Europa, nos lo están pidiendo
todos los institutos de fiscalidad y lo está pidiendo el sentido
común.


Y le mencionaré otra cosa que se ha dicho de
pasada, en relación con si Europa va a demorar aquello que tiene que ver
con el CO2 en frontera, con el recargo, con el impuesto. No hay ninguna
duda ni ninguna incertidumbre. Hay certeza, porque hay un compromiso de
calendario con la Unión Europea. Lo único que se discute es el
procedimiento, si se hace a través de un impuesto, que requerirá una
intervención que exige unanimidad para acordarlo o si se hace a través de
la reforma del sistema de CO2 del mercado de emisiones. En un caso,
colegislación, dificultades para legislar, y en otro, más facilidad. Pero
estamos ante el futuro, señorías, aquello que tiene que ver con los
compromisos recientes, que en 2030 reduzcamos el 55 % de las emisiones.
En 2030, Europa se ha comprometido a esa reducción.


La señora PRESIDENTA: Debe ir terminando,
señoría.


El señor LASTRA VALDÉS: Son diez años,
señorías, pero, como ha dicho Macron, es mañana.


La señora PRESIDENTA: Señorías, les anuncio que
procedemos a debatir la última sección del día de hoy. Sección 24,
Ministerio de Cultura y Deporte.


Impugnación número 38, del Grupo Parlamentario
Popular en el Senado. Tiene la palabra la senadora Cantalapiedra Álvarez,
en el turno a favor.


La señora CANTALAPIEDRA ÁLVAREZ: Gracias,
presidenta. Buenas noches, señorías.


Dice la Real Academia Española sobre la
acepción que nos interesa en cuanto a los presupuestos, que son el
cómputo anticipado de los gastos y las rentas de una corporación. Se
dividen en ingresos y gastos. Y como explicaba un concejal de Podemos al
hablar de los presupuestos de su ayuntamiento, los ingresos son lo que se
ingresa y los gastos son lo que se gasta. Así de sencillo se explicaba. Y
así nos va en España con este Gobierno. (Aplausos).


Estos son unos presupuestos que antes de ser
aprobados ya sabemos que se van a quedar obsoletos, pues lo que
necesitamos en este momento es bajar impuestos. Esto es pura lógica. Al
haber más dinero disponible, aumenta el consumo y, por ello, se produce
una mayor recaudación, aplicando el llamado círculo virtuoso de la
economía, como han demostrado gobiernos populares, como el de Madrid o el
de Andalucía; y al mismo tiempo hacer una contención del gasto, lo cual
es impensable con un Gobierno con veintitrés ministros sin apenas
competencias, que aumenta la progresión de secretarios de Estado,
subsecretarios, directores generales, secretarias, coches oficiales
asesores, etcétera, etcétera, etcétera. (Aplausos).


Si hablamos de la sección 24, Cultura y
Deporte, podemos decir que se olvidan de las personas, de los creadores,
de los artistas, de los deportistas. Si hablamos de cultura en concreto,
no hay ninguna partida presupuestaria que sirva para desarrollar las
medidas recogidas en el Estatuto del artista. No contiene previsiones
para las 75 medidas que deberían estar ya desarrolladas y que llevamos
dos años esperando desde su aprobación.


Otra de las grandes mentiras e incumplimientos
de este Gobierno es la trasposición de la directiva europea a la Ley de
Propiedad Intelectual, quizás porque sus socios de Podemos piensan que
leer un libro o ver una película debe ser gratis.


Son unos presupuestos discriminatorios. Les voy
a poner dos ejemplos. Ni un euro para el gran acontecimiento transversal
en este país, que es el Año Santo Xacobeo, que afecta a todas las
comunidades autónomas por las que se cruzan las distintas rutas de los
caminos de Santiago. Otro ejemplo, señorías, en la Comisión de Cultura
del Congreso y del Senado se aprobó por amplia mayoría, con el respaldo
del Partido Socialista, la aplicación de la declaración de interés
público del centenario del nacimiento de Miguel Delibes, con la dotación
económica correspondiente, para llevar a cabo las actividades que no se
pudieron hacer a lo largo de la pandemia.






Nada respecto a este escritor
en estos presupuestos. Un desprecio absoluto hacia uno de los autores más
leídos del siglo XX, referente de la literatura española contemporánea.
Eso sí, sin embargo, dan 20 millones de euros para la capital de la
cultura de Barcelona.


Hace unos días firmábamos una declaración
institucional en esta Cámara donde pedíamos al Gobierno que declarase la
cultura como un bien de primera necesidad y esencial; reconocíamos que
hay más de 700 familias que viven del sector cultural y que suponen más
del 3 % del producto interior bruto.


Señorías, han presumido mucho de la partida
destinada a los Juegos Olímpicos de Tokio 20-21, pero les recuerdo que
hay muchos deportistas pendientes de clasificatorias, de becas, a los que
olvidaron durante la pandemia; muchos de ellos han tenido que dejar el
deporte por su pésima gestión y por su empeño en no elaborar ni diseñar
una hoja de ruta para el deporte no profesional en este ámbito.


Tampoco se han preocupado de confeccionar el
Fondo europeo para el deporte, y esto ha producido una reducción de la
actividad deportiva, estimada en un 38,5 %, con una destrucción de más
de 40 000 puestos de trabajo, con unas pérdidas económicas de más de 4600
millones de euros. Las asociaciones deportivas perderán el 89 % de sus
ingresos, los clubs deportivos, el 53 %. Las empresas vinculadas al
deporte, un 77 %.


Es vergonzoso que el ministro de Cultura y
Deporte ni siquiera se acercase a ver a Rafa Nadal en la final de Roland
Garros, un deportista que ha hecho más por el deporte de lo que ha hecho
este Gobierno, y eso que algunos de sus socios, como por ejemplo un
concejal de Podemos, ha dicho que dejase de practicar un tenis
soporífero, defensivo, hipermusculado y pasabolas.


En definitiva, solo se acuerdan del deporte y
de la cultura para hacerse la foto. La realidad, a través de estos
presupuestos, dice todo lo contrario.


Muchas gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Impugnación número 27, de los senadores Cleries
i González y la senadora Castellví Auví, del Grupo Parlamentario
Nacionalista en el Senado.


Tiene la palabra en turno a favor, por tiempo
de tres minutos, la senadora Castellví Auví.


La señora CASTELLVÍ AUVÍ: Gracias, presidenta.
Señorías, bon vespre. Bona nit.


Estamos debatiendo el presupuesto para el
año 2021, un presupuesto que ayuda a gestionar la crisis sanitaria,
social y económica generada por la COVID-19; un hecho que nos interpela a
todos. Pero, para que lo entiendan —porque parece que no lo quieren
entender o están sordos—, la COVID no lo puede tapar todo, y no
podemos apoyar todo gratuitamente. Pero nosotros no podemos ni queremos
desvincular estos presupuestos de la crisis política, de la represión y
el empobrecimiento democrático que estamos viviendo.


Y repito, para que no lo olviden —y en
Junts per Catalunya lo repetiremos las veces que haga falta—:
nuestros líderes sociales y políticos catalanes están en la cárcel, en el
exilio o inhabilitados; nuestras instituciones y centenares de ciudadanos
y ciudadanas sufrimos una constante persecución política, judicial,
policial y mediática que vulnera de forma reiterada nuestros derechos
fundamentales. (Rumores).


La señora PRESIDENTA: Señorías, guarden
silencio, por favor.


La señora CASTELLVÍ AUVÍ: Y esta situación
impide a Junts per Catalunya apoyar este presupuesto de cultura y
deporte. A buen entendedor, pocas palabras bastan, pero a ustedes parece
que se lo tenemos que repetir constantemente.


El incremento de 234 millones de euros respecto
de los presupuestos de Rajoy es una noticia que satisface al mundo de la
cultura y el deporte; esperamos que no vuelvan a llegar tarde y mal, tal
como se ha hecho en toda la pandemia. El sector cultural y deportivo
necesita ayuda, porque se les ha ahogado. La cultura representa el 3,2 %
del PIB y el deporte el 3,3 %, y no están viendo ninguna salida a esta
crisis. Señorías, actúen rápido, porque este 3,2 y 3,3 % se van a quedar
a cero.


Señorías, por todo lo expuesto, y porque
nosotros ponemos por delante los intereses de Cataluña que los de España,
Junts per Cataluña presenta este veto a la sección de Cultura y Deporte
de los Presupuestos Generales del Estado.


Muchas gracias.


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.
(Rumores). Señorías, por favor, guarden silencio.


Por el Grupo Parlamentario Socialista, en turno
en contra, tiene la palabra la senadora Liberal Liberal.


La señora LIBERAL LIBERAL: Eskerrik asko,
mahaiburu andrea. Gau on denoi.


A Junts per Catalunya le diré lo que le ha
dicho la señora ministra, que los presupuestos para Cataluña son buenos,
con un 18 % de subida, siendo, además, la primera vez que se cumple el
Estatuto de Cataluña.


Al Partido Popular ahora le entran las risas,
pero igual luego le entran llantos. (Rumores). En el veto hacen
referencia a unos presupuestos fallidos del año 2019 en los que
supuestamente ustedes dicen que nosotros habíamos presupuestado 953
millones y que para el 2021 presupuestamos 947, unos presupuestos
fallidos. Pero no hacen referencia a que estos presupuestos suponen
un 25 % a los de la prórroga de la prórroga del 2018, un 25 %, y si
contamos los fondos europeos, un 37 %. Pero es que además lo que hay que
poner en valor es que cuando Pedro Sánchez llega al Gobierno en el mes de
junio de 2018, lo primero que tiene que hacer es crear un ministerio que
el Partido Popular se había cargado, porque el Ministerio de Cultura y
Deporte ha tenido entidad propia desde el año 1977 a 1996, desde el
año 2004 al 2011 y desde el 2018 a la actualidad. (Aplausos). Sin
embargo, en la época del Partido Popular siempre ha dependido de otros
ministerios, como es el de Educación, por ejemplo. Por cierto, ministerio
de la época Aznar que el juez, señor Pedraz, ya ha puesto en el ojo de
mira, con esos 600 millones de euros que está buscando y esos veintitrés
contratos que afectan a distintos ministerios y a distintas empresas
públicas, entre ellos al Ministerio de Educación, Cultura y Deporte.
(Aplausos). No sabemos si es que el dinero se fue en la reestructuración
y el arreglo del Prado, del Reina Sofía o del Museo del Traje. Lo que sí
sabemos es que los ministros de Aznar fueron Esperanza Aguirre, Mariano
Rajoy y Pilar del Castillo. Eso lo tenemos clarísimo. Primero que
investiguen y luego que vayan donde tengan que ir.


Menos mal que la pandemia ha tocado con un
Partido Socialista y con un Gobierno de izquierdas, porque, desde luego,
si llega a tocar con ustedes no sé lo que hubiera sido. Dicen que hemos
dejado a la gente desamparada. Perdone, dos decretos: el 17/2020 y
el 32/2020, lo que hacen es proteger todos los estamentos de la cultura,
hasta la tauromaquia, hasta los escalones más bajos de la tauromaquia en
el último decreto y, por supuesto, a todos los técnicos que habían
quedado desamparados, y ustedes dicen que abandonamos. España es el
tercer país con más ciudades con patrimonio cultural después de China e
Italia, y las vamos a conservar. Nosotros no somos como ustedes, que van
a los cementerios a borrar los versos de poetas, como han hecho con
Miguel Hernández. (Aplausos). Nosotros no hacemos eso, nosotros
conservamos nuestro patrimonio, nuestro cine, nuestra cultura, nuestra
literatura, todo, el pasado, el presente y el futuro. No hay por qué
borrar el pasado, pero ustedes borran todo aquello que no les gusta, y
eso han hecho con la cultura que tanto hemos consumido todos durante la
pandemia, porque ha sido una de las cosas que nos ha librado de volvernos
en muchas ocasiones incluso locos por estar encerrados y hemos consumido
de manera exagerada todo lo que había en nuestras manos, y ustedes lo
saben bien.


La señora Cantalapiedra ha dicho que a ver si
queremos que los libros y la película sean gratis. ¡Claro que sí! ¡Claro!
Eso es lo que nos diferencia de ustedes. (Aplausos). La educación, la
formación, la cultura y el ocio gratis. (Un señor senador pronuncia
palabras que no se perciben). Yo le he escuchado a usted cuando ha
intervenido; esto es un patio de colegio, y ustedes son un partido de
Gobierno. (Rumores). Parece mentira que hagan esto cuando están en la
oposición.


Miren, yo les entiendo perfectamente: tantos
años teniendo mayoría absoluta en el Senado y ahora estar en la situación
que están tiene que dolerles mucho y entonces se ponen rabiosos y
patalean. (Aplausos). Pero escuchen, sean educados, que han ido a
colegios de pago; que yo he ido a la pública y en la pública me han
enseñado a escuchar (Continúan los aplausos). A mí en la pública y en mi
casa, hijos de obreros, me han enseñado a escuchar. (Rumores). Ustedes no
escuchan. (Aplausos).


Vamos con el deporte. Ustedes me hablan de que
no hemos pensado en las olimpiadas y en los deportistas ADO. Si quiere
hablamos del recorte de Londres: Pasamos de Pekín, con 57 millones, a
Londres, con 31 millones, y no gobernaba el Partido Socialista, no
gobernábamos nosotros. O hablamos también del 100 % de las subidas en las
partidas de ayudas a mujeres o del 375 % en el paralímpico, o del 110 %
en el deporte inclusivo. ¿Nosotros no hacemos por el deporte? Además,
hacemos política transversal con él, porque también ha sido una de las
salidas en la pandemia. Y tenemos un proyecto con cuatro líneas muy
claras: la digitalización de las federaciones, la internacionalización
del deporte, la transición ecológica y sobre todo apoyar el deporte de
base, el deporte universitario y el deporte inclusivo, porque el deporte
no es un lujo, señora Cantalapiedra, el deporte es un derecho que tienen
todos los ciudadanos, y la cultura y el ocio, y es obligación de la
Administración pública hacer todo lo posible para que todos los
ciudadanos de este país puedan tener derecho también al ocio; también los
pobres, también; también tienen derecho, sí. (Rumores.—
Aplausos).


Pensamos de diferente manera, de muy diferente
manera. Yo entiendo, y se lo dije el otro día en la comisión, que no les
gusten nuestros presupuestos. Tendríamos un problema si les gustase,
porque o estaríamos nosotros en el lado equivocado o ustedes en el no
correcto. Pero bueno, eso no quiere decir que siendo un partido, como han
sido, de Gobierno, sean ahora consecuentes con la situación que tenemos y
tengan ustedes sentimiento de Estado y aprueben por el bien del país
estos primeros presupuestos de Pedro Sánchez, que nos van a hacer olvidar
los presupuestos carcas que venimos heredando desde el año 2018. Con lo
cual, les anticipo que vamos a votar en contra de sus vetos.


Gracias. (Aplausos).


La señora PRESIDENTA: Gracias, señoría.


Concluido el debate de la impugnación de la
sección 24, se suspende la sesión y se reanudará mañana a las nueve de la
mañana.


Gracias.


Eran las veintidós horas y treinta
minutos.